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Nota sobre la integración de las revistas Investigaciones Económicas y
Spanish Economic Review en la nueva SERIEs
La investigación económica en España ha experimentado una tasa de crecimiento más que
notable en las últimas décadas. Los economistas que trabajan en España son autores del 9%
de la investigación producida por los mejores 75 centros de investigación europeos, lo que
coloca a nuestro país en la cuarta posición, después del Reino Unido, Holanda y Francia.
A este progreso han contribuido muchas instituciones, desde las fundaciones privadas e
instituciones públicas (en especial el Banco de España) que han financiado becas para la
realización de estudios de doctorado en centros de alto prestigio internacional, hasta las
administraciones públicas que han financiado una gran expansión del sistema universitario y de
investigación español.
Un papel muy importante en este progreso lo ha desempeñado un grupo de revistas
académicas que,
gracias al esfuerzo de sus directores y consejos de redacción y a la
financiación de diversas instituciones, entre las que destaca la Fundación SEPI, han creado
una excelente plataforma para la difusión de la investigación de calidad, a menudo (pero no
exclusivamente) la que versa sobre problemas de especial interés para la economía española.
En efecto, un gran número de notables economistas académicos ha publicado su primer
artículo en Investigaciones Económicas o la Spanish Economic Review (antes Revista
Española de Economía). La investigación de máxima calidad sobre economía española se
sustenta en esas dos revistas, la primera editada por la Fundación SEPI, y la segunda
publicada por la Asociación Española de Economía.
Este papel destacado ha sido reconocido recientemente al ser incluidas ambas revistas por el
ISI (Institute of Scientific Information) en su prestigioso Social Science Citation Index (índice de
citas en ciencias sociales), algo que muy pocas revistas científicas españolas, de cualquier
disciplina, han conseguido.
La Asociación Española de Economía es una institución fundada en diciembre de 1996 y
agrupa a la mayoría de los científicos de la economía con mayor prestigio internacional que
trabajan en nuestro país,
contando entre sus antiguos presidentes a galardonados con los
premios de Economía Rey Juan Carlos I, Rey Jaime I y Pascual Madoz (Premio Nacional de
Investigación) y a miembros de las más prestigiosas asociaciones profesionales de Economía.
Entre las actividades regulares de la AEE se encuentra la edición trimestral de la revista
Spanish Economic Review (la SER), edición que lleva a cabo con la editorial alemana Springer.
La citada revista sucedió históricamente a la anteriormente denominada Revista Española de
Economía, nacida en 1971 y que, a lo largo del tiempo, fue publicada por diversos organismos
públicos, como el Instituto de Estudios Fiscales, que en 1998 cedió la cabecera de la
revista gratuitamente a la AEE. En 1999 la revista adquiere su nombre actual y pasa a
publicarse exclusivamente en inglés. También está incluida en el índice de citas de Ciencias
Sociales.
La revista Investigaciones Económicas: nacimiento y titularidad.
Con la intención de cubrir, parcialmente, la carencia de publicaciones especializadas en
España, nace en 1976 la revista Investigaciones Económicas, de periodicidad cuatrimestral,
siendo la Fundación SEPI –entonces Fundación Empresa Pública- la titular de la propiedad
industrial de su cabecera, así como su editora.
La calidad de la citada revista ha sido
reconocida por el Institute for Scientific Information (ISI), que ha incluido la revista en su
prestigioso índice de citas de Ciencias Sociales (Social Science Citation Index), cuyo censo
actual asciende a 250 revistas, de las que 235 se publican en inglés y sólo 15 en otras lenguas
nacionales, entre ellas IE .
En definitiva, se trata de dos revistas que han progresado en paralelo hasta devenir gemelas,
pues no resultan diferenciables en cuanto a
calidad de los artículos,
ámbitos temáticos,
procedimientos de selección de originales, formato físico o prestigio y amplitud de su difusión.
Tales similitudes obedecen, a su vez, a su común impulso intelectual, pues los miembros de
los respectivos consejos editoriales que van renovándose, así como los directores y
evaluadores, figuran en una amplia red de varios centenares de profesores e investigadores de
instituciones diversas.
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