Download El mariachi. Una Pyme musical muy mexicana - casia
Document related concepts
Transcript
EMPRESAS Y NEGOCIOS José-Ramón Torres Solís El mariachi Una Pyme musical muy mexicana B otas, espuelas, chaqueta corta, sombrero de charro, corbata de moño, correa ancha y canciones rancheras no sólo representan al típico mariachi, también es un icono de nuestro país alrededor del mundo y, sin duda, es la mejor forma de expresión a través de la música y el folclor. Ahora que se celebre el 14 de febrero, el día de los enamorados, de los novios o del amor y la amistad, como prefieras llamarle, tal vez quieras hacer un presente de impacto que no se le olvide fácilmente a quien lo reciba. Que tal si de manera pública y notoria le declaras tu amor a la mujer de tus sueños mediante una serenata. Hasta ahora la tradición mexicana no señala ningún camino mejor para la conquista o la reconciliación amorosa que una serenata con un buen mariachi. Claro que hay otras formas de hacerlo, hay quien lleva flores (rosas rojas es lo más indicado si de pasión se trata) o una caja de chocolates con una tarjeta muy amorosamente redactada, o tal vez ahora lo modernito sea una invitación a la disco o al antro; sin embargo, ninguna de éstas tiene la contundencia de la manifestación pública de los sentimientos amorosos. Es absolutamente imposible qué las vecinas no se den cuenta de la serenata con mariachi (“mira nada más, qué guardadito se lo tenía”), así como que las futuras suegras puedan disimular bien al día siguiente ante sus amistades la contrariedad-orgullo que les causa que le lleven serenata a la hermosura de hija que procrearon hace apenas unas cuantas primaveras, aunque nunca debe aclararse cuántas (“¿de dónde habrá heredado mi niña tanta belleza?”) También puedes ser un poco más sutil y romántico y llevar la serenata con un trío que acompañado de sus guitarras entone melodías con el adecuado mensaje amoroso que requiera el caso. Sabías qué... Cuenta la historia que el origen del mariachi fue en Cocula, Jalisco, en la época de la conquista española, y hasta 1905 llegó a la ciudad de México, estableciéndose en el barrio que antiguamente se conocía como Santa Cecilia (patrona de los músicos). Con respecto a su atuendo, se dice que a partir de la Revolución Mexicana la indumentaria del mariachi sufre una notable transformación al adoptar lo que ahora conocemos como el traje de charro o vaquero mexicano. Por su parte, la palabra mariachi se deriva del vocablo francés mariage o boda, asignado a un grupo de músicos que amenizaba ceremonias nupciales. Imbuidos de todo este espíritu artístico musical, resulta difícil pensar en un mariachi como una pequeña empresa; hay que pensar en costos, precios, promoción, registros, controles, relaciones públicas, comercialización, financiamiento, capacitación o liderazgo, entre otras importantes actividades inherentes a la administración de cualquier empresa. Se podría pensar que con la música moderna los jóvenes mexicanos ya no tienen gusto por la de mariachi. Preguntamos al maestro Miguel Bolaños Díaz, director del Mariachi Internacional Alma de México, y nos responde que la tradición de la música mexicana de mariachi se ha sostenido, pues al lado de las polkas y sones, también se ha evolucionado y se toca, además de la música que hiciera famosa, por ejemplo, Javier Solís o Vicente Fernández, la que interpreta Luis Miguel con gran éxito. Es imposible, continúa diciendo el maestro Bolaños, que un símbolo mexicano como el mariachi se pudiera perder. El mariachi es versátil, su repertorio más solicitado incluye el “Son de la negra” o “Las mañanitas”, según sea el caso, “Cielo rojo” o “Mujeres divinas” por mencionar algunos títulos. Una novedad es que, siguiendo la evolución de género de nuestros días, no sólo los hombres contratan al mariachi para llevar serenatas, ahora las mujeres también llevan serenatas a los hombres y además existen grupos de mariachi femeninos muy competentes. “Una de las formas de agrupación para el trabajo musical más conocidas en México es la del mariachi. Los grupos de mariachi tienen un gran arraigo en nuestro país, tanto, que se piensa que es uno de los símbolos culturales de México. Blas Galindo toma temas de este tipo de conjuntos para hacer su trabajo sinfónico de gran popularidad: ‘Sones de mariachi’. La música de estos grupos acompaña al mexicano desde que nace o antes, pues está presente en las bodas, en las serenatas a la amada, ya sea que ésta corresponda o desdeñe al galán pretendiente, los cumpleaños y días de su santo y, en general, para todo tipo de celebraciones, lo que determina la temática de las selecciones musicales a interpretar; acompaña en toda ocasión festiva y también en la última morada. La vestimenta del mariachi es el traje nacional por excelencia: el traje de charro, lo que acentúa más su hegemonía en la representatividad nacional. Está compuesto principalmente por individuos del REVISTA AH 49 Un mariachi conformado por ocho músicos profesionales cotiza sus servicios entre $ 2,500 y $ 4,000, que incluye de ocho a 10 selecciones musicales género masculino, aunque recientemente se han incorporado a este trabajo las mujeres, que también visten a la usanza charra, con falda en lugar de pantalón; su indumentaria es muy vistosa y muchos grupos lucen verdaderamente elegantes, aunque es justo mencionar que no es así en todos los casos. La dotación instrumental tradicional para estos conjuntos es al menos de dos violines y una trompeta en la melodía y de un guitarrón, una vihuela y una guitarra en la armonía; uno o más de sus integrantes cantan, enriqueciendo su desempeño. Esta dotación puede variar en número, he visto grupos de mariachi de hasta 16 elementos (seis violines, dos trompetas, dos guitarras, guitarrón y vihuela) en el trabajo cotidiano y más en presentaciones especiales como en festivales y conciertos. Su repertorio incluye, principalmente, sones, canciones rancheras, boleros, valses mexicanos, danzones y pasos dobles. Entre ellos es harto conocido el son de ‘La negra’, ‘Camino real de Colima’, ‘El siete’ o ‘Juan colorado’, en las serenatas no puede faltar ‘Despierta’ y al festejar un cumpleaños ‘Las mañanitas’. Grupos emblemáticos como el Mariachi Vargas de Tecalitlán han dado prestigio mundial a este tipo de música y han sido inspiración para formar grupos similares en muchas partes del mundo, en Japón, Estados Unidos y Cuba, por citar sólo algunos” (Torres, 2006). Si te preocuparan los precios, déjame comentarte que un grupo formado por ocho músicos profesionales cotiza sus servicios entre $ 2,500 y $ 4,000 por una serenata con entre ocho y diez selecciones musicales que puedes escoger asesorándote con el jefe del grupo de mariachi que contrates. “A veces el cliente no sabe exactamente qué música pedir y nosotros –dice nuestro entrevistado–, le aconsejamos, dependiendo del motivo de la serenata, que puede tratarse de un cumpleaños, una de amor, de reconciliación, de despedida, de perdón o hasta de resentimiento.” 50 REVISTA AH El Mariachi Alma de México, del maestro Miguel Bolaños Díaz, a las afueras del Gran Hotel Taipei durante una de sus giras por China. La manera de administrar un mariachi depende de la visión del jefe del grupo, pero me deja gratamente sorprendido la incorporación de la tecnología de la información en este gremio, que usa con fluidez la página web, el correo electrónico y se habla ya hasta de serenata virtual. Visita la página web del Mariachi Alma de México para que la juzgues por ti mismo o escríbe al e-mail de su director: miguel@almademexico.com.mx Existen numerosas asociaciones de mariachis en el mundo, especialmente en México y Estados Unidos. Algunos cálculos hablan de miles de músicos en activo trabajando en grupos de mariachi en todo el mundo; es decir, estamos frente a un esfuerzo de organización laboral de amplias dimensiones y económicamente importante. También hay instituciones que promueven la música vernácula y mexicana a través de la enseñanza. Tal es el caso de la Academia del Mariachi en Nueva York, que se fundó hace cinco años para fomentar en pequeños y adolescentes el gusto por las tradiciones musicales de nuestro país. En ese entonces la escuela empezó sus operaciones con 26 alumnos. Actualmente, 90 estudiantes aprenden a tocar el saxofón, el guitarrón, la trompeta y el violín con la esperanza de ingresar en un futuro a un reconocido mariachi. Sin embargo, hace falta trabajar más y superar retos como el de la capacitación profesional para el trabajo musical, especialmente en la técnica y la lectura, pues aunque hay muchísimos músicos de gran talento y conocimientos depurados, también hay áreas de oportunidad en las que hace falta la capacitación y el desarrollo. La celebración del Día del Amor, el 14 de febrero, nos dio ocasión para abordar una forma de empresa cultural exitosa y ampliamente difundida, sustento de muchas familias en México y en otras partes del mundo que, como ya hemos señalado, ha internacionalizado este esfuerzo laboral de origen orgullosamente mexicano. Nuestro autor: José-Ramón Torres Solís es doctor en administración por la UNAM, JoseRamon@Torres-S.com http://www.Torres-S.com