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Recomendaciones de Consumers International para
reducir el uso de antibióticos en animales de granja
Marzo de 2014
“Una era postantibióticos significa, en efecto, el fin de la medicina moderna como la
conocemos”. Margaret Chan, directora general de la OMS, Copenhague, 2012.
Introducción
La resistencia a los antibióticos se está desarrollando y expandiendo a una tasa que no
puede ser contenida por el desarrollo de nuevos medicamentos. Si no se toman medidas de
manera urgente para reducir el consumo global de antibióticos, podríamos enfrentar un
retroceso a la era en la que infecciones simples podrían ser mortales.
La práctica expandida de suministrar antibióticos de manera rutinaria a los animales de
granja (incluida la acuicultura) está contribuyendo a esta amenaza. Cerca de la mitad de los
antibióticos que se producen a nivel mundial son utilizados en la agricultura, la mayoría se
utilizan para estimular el crecimiento más rápido y para prevenir, en vez de tratar, las
enfermedades.i Los estudios que comparan las bacterias de los animales de granja a los
que se les suministran antibióticos con las bacterias de las granjas orgánicas o que no
utilizan antibióticos sistemáticamente encuentran bacterias menos resistentes y bacterias
menos multiresistentes en los animales que no recibieron antibióticos.ii,iii,iv,v
Los microorganismos portados por los animales de granja pueden transmitirse a los seres
humanos a través del consumo de comida contaminada, del contacto directo con los
animales o mediante una transmisión ambiental, por ejemplo, en aguas o suelos
contaminados.
La codificación genética para la resistencia antimicrobiana (RAM) se puede transmitir desde
microbios portados por animales a microbios que causan enfermedades a los seres
humanos.
Pruebas recientes a la carne y a las aves de corral realizadas por las organizaciones de
consumidores y las autoridades nacionales han encontrado niveles alarmantemente altos de
bacterias resistentes a los antibióticos. Esto incluye los patógenos de transmisión por los
alimentos conocidos: Campylobacter y Salmonella, que causan infecciones intestinales,
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pero además del Staphylococcus Aureus, Escherichia coli, y Enterococcus que son
resistentes a la meticilina, y otros más que causan infecciones graves en otras partes del
cuerpo. La resistencia a los medicamentos de última línea que incluyen carbapenémicos,
linezolid y vancomicina se puede encontrar en las bacterias de los animales de granja.
Las siguientes recomendaciones establecen las medidas que Consumers International
desea que se tomen para reducir el uso de antibióticos en la producción agrícola y
ganadera. Este documento se centra en el uso de antibióticos en la producción agrícola y
ganadera, incluida la acuicultura, sin embargo, CI reconoce que el problema debe ser
abordado junto con los esfuerzos para reducir el uso de antibióticos en la salud humana, la
medicina de animales domésticos y la producción agrícola, y como parte de los esfuerzos
para abordar la resistencia a los antibióticos en general.
Uso de antibióticos en animales de granja
De manera rutinaria se han utilizado los antibióticos en la producción de animales de granja
desde los años cincuenta. Con frecuencia se utilizan las mismas clases de antibióticos en
los seres humanos y en los animales. En algunos países, el consumo de antibióticos de los
animales excede al de los seres humanos. En EE.UU., el ganado consume el 80 % del
consumo total de antibióticos. Los antibióticos se utilizan principalmente en animales de
ganadería intensiva para tratar enfermedades, para prevenir enfermedades, para controlar
enfermedades y para estimular el crecimiento.
Tratamiento de animales enfermos
Esto se refiere al tratamiento de animales que ya tienen infecciones. Los antibióticos se
usan principalmente para tratar enfermedades respiratorias e infecciones entéricas en
grupos de animales alimentados intensamente. También se utilizan los antibióticos para
tratar infecciones en animales individuales que son causados por una variedad de
patógenos bacterianos. Particularmente, se utilizan con frecuencia antibióticos para tratar la
mastitis en vacas lecheras, que es una infección común en las vacas con alta producción de
leche.
El aumento global en el cultivo intensivo de peces también ha estado acompañado de
infecciones bacterianas que normalmente son tratadas con antibióticos que se agregan al
alimento de los peces. De manera similar a otras producciones industrializadas de animales
para alimento, el uso de antibióticos en la acuicultura puede ser importante.
Control de enfermedades
Esto se refiere a la administración de antibióticos a animales criados que pueden estar en
riesgo de infección, ya que se ha encontrado un animal infectado en un grupo. Por lo tanto,
todo el rebaño de animales o aves de corral toma antibióticos apenas se observa una
infección en un solo animal.
Prevención de enfermedades
Esto se refiere a la administración de antibióticos a animales criados intensamente que se
cree pueden estar en riesgo de infección, antes de que exista un diagnóstico clínico de la
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enfermedad. Los antibióticos preventivos, a menudo a niveles bajos, también se suministran
de manera rutinaria a todos los animales en cierta etapa de la producción en una granja, por
ejemplo, en las primeras etapas de pollos de engorde y en los cerditos de destete. Los
antibióticos preventivos también se administran por largos periodos de tiempo. Este tipo
administración de antibióticos en dosis bajas y por largo tiempo a grandes grupos de
animales, en la práctica, no se puede distinguir de los antibióticos que estimulan el
crecimiento.
Estimulación del crecimiento
Esta práctica, prohibida en 51 países, aún es común en muchas partes del mundo, lo que
incluye EE.UU., aunque en EE.UU. se encuentra en proceso de eliminar progresivamente
los usos de estimulación del crecimiento. Los bajos niveles de antibióticos son
administrados a animales de granja mientras son alimentados. Esto hace que los animales
crezcan más rápido con menos alimento, lo que es visto como favorable para obtener
mejores niveles de producción.
Las bacterias resistentes a los antibióticos en aumento
La resistencia bacteriana a los antibióticos está en aumento en todos los países. Esto
incluye la creciente resistencia a los patógenos comunes transmitidos por los alimentos,
como e-coli, Salmonella y la Campylobacter. Las pruebas de seguridad alimentaria
realizadas por grupos de consumidores en los últimos dos años han indicado niveles
preocupantes de bacterias resistentes a los antibióticos en las muestras de carne y aves de
corral. Los estudios en las granjas han encontrado los tipos más inquietantes desde
enterobacterias resistentes a carbapenémicos hasta estafilococos resistentes a la meticilina.
La resistencia a los antibióticos se asocia con el aumento de enfermedades graves, lo que
incluye más infecciones sanguíneas, más hospitalizaciones y aumento en la mortalidad. La
resistencia antimicrobiana está asociada con US$20.000 millones adicionales en costos
médicos directos en EE.UU. anualmente.
Algunas acciones globales a la fecha
2000 Principios globales de la OMS para la contención de la resistencia antimicrobiana en
animales destinados a la alimentación humana.
2001 Estrategia mundial de la OMS de contención de la resistencia a los antimicrobianos,
que incluye recomendaciones específicas para el uso de antimicrobianos en la cría de
animales conforme a los principios de 2000 señalados anteriormente.
2005 Código de prácticas del Codex para contener la resistencia antimicrobiana.vi El código
señala:
"El uso responsable de medicamentos veterinarios antimicrobianos en los animales
productores de alimento…No incluye el uso de estimulantes del crecimiento de los
medicamentos veterinarios antimicrobianos que pertenecen a las clases de agentes
antimicrobianos utilizados (o presentados para su aprobación) o que pueden causar
resistencia cruzada en los seres humanos, en ausencia de un análisis de riesgos".
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2007 OIE adopta una lista de "medicamentos antimicrobianos de importancia veterinaria".vii
2011 La OMS elige la resistencia a los medicamentos antimicrobianos como tema del Día
Mundial de la Salud. Como parte de su trabajo para este día, la OMS elabora un paquete de
políticas para combatir la resistencia antimicrobiana, lo que incluye una medida específica
para reducir el uso de antimicrobianos en los animales productores de alimento.viii
2011 El Codex acepta las directrices para el análisis de riesgo de la resistencia
antimicrobiana transmitida por los alimentos.ix El alcance es brindar "una orientación con
base científica acerca de los procesos y la metodología para el análisis de riesgos y su
aplicación a la RAM transmitida por los alimentos en relación con los usos no humanos de
agentes antimicrobianos".
2011 3ª revisión de los antibióticos que son vitales para el uso humano de la OMS.x
2012 La OMS publica, „La amenaza creciente de la resistencia antimicrobiana: opciones
para la acción",xi que incluye un capítulo sobre la reducción del uso de antibióticos en la cría
de animales.
Enero de 2014 El Consejo Ejecutivo de la OMS acepta la recomendación del grupo asesor
estratégico y técnico sobre resistencia antimicrobiana, de que la OMS debería liderar la
elaboración y la coordinación de un plan de acción global sobre la resistencia
antimicrobiana.
Mayo de 2014 La Asamblea Mundial de la Salud considerará una resolución para combatir
la RAM. La resolución instará a la OMS a elaborar un plan de acción global para la RAM.
Falta de medidas nacionales
En diciembre de 2013, solo 29 de los 92 (32 %) Estados miembros de la OMS habían
informado tener un plan de acción nacional integral sobre la resistencia antibiótica. La
proporción varía de aproximadamente el 60% entre los países de altos ingresos, a menos
del 20% entre los países con ingresos medios a bajos.xii
Vacíos en los controles legales y regulatorios
La legislación y la regulación insuficientes para restringir el uso aprobado de los
antimicrobianos patentados, y para controlar el suministro de antimicrobianos facilitan el uso
excesivo de los antibióticos. En muchos países se les pueden dar antibióticos a los
animales sin una receta y se pueden usar los antibióticos con fines distintos a los
contemplados en la etiqueta.
Incentivos perversos
El uso innecesario de antimicrobianos a menudo es estimulado con incentivos financieros,
como alcanzar ganancias por ventas por parte de los veterinarios, o recibir beneficios, como
estimular el crecimiento de los animales productores de alimento. Con frecuencia se utilizan
los antibióticos, pues son más económicos que otras alternativas como mayor higiene o
cambiar las dietas. Por ejemplo, los productores de aves de corral pueden limpiar el
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estiércol de los criaderos con menos frecuencia si se utilizan antibióticos para manejar las
enfermedades subclínicas asociadas. De manera similar, los corrales de alimentación de
ganado pueden suministrar dietas con alto contenido de almidón si utilizan antibióticos para
manejar los problemas hepáticos que estas dietas le causan al ganado.
Falta de información
La información sobre la existencia de la resistencia y el uso antimicrobiano en los animales
es esencial para el análisis de riesgos y para evaluar la efectividad de las medidas de
control. No obstante, pocos países cuentan con sistemas para controlar la resistencia
antimicrobiana e incluso menos países cuentan con sistemas para controlar el uso de
antimicrobianos en los animales.
Falta de control y de levantamiento estandarizado de datos
Muy pocos países levantan datos sobre el uso de antibióticos en animales de granja. A
menudo es difícil interpretar y comparar los datos reunidos, puesto que los métodos
utilizados para obtenerlos no están estandarizados. Los países que sí levantan datos, a
menudo no lo hacen con suficiente detalle para poder determinar qué animales están
recibiendo los antibióticos y por qué motivo.
Falta de colaboración intersectorial
Sin una vigilancia de RAM coordinada de las bacterias para humanos, alimentos y animales,
es difícil evaluar el impacto en la salud pública del uso antimicrobiano en los animales
productores de alimento y poder tomar las medidas correctivas.
Capacitación inadecuada
La falta de capacitación en el uso adecuado de los agentes antimicrobianos en los animales
productores de alimentos y la poca comprensión de la contribución potencial a la RAM en
los humanos son comunes entre los granjeros, veterinarios tratantes y distribuidores.
La producción ganadera industrial depende de la administración rutinaria de
antimicrobianos
En las instalaciones de producción de gran escala para pollos y cerdos, y los corrales de
alimentación para el ganado, se utilizan dosis regulares de antibióticos en lugar de dietas
adecuadas, buenas prácticas de higiene, buenos ambientes de cría y adecuados para vivir.
Recomendaciones
Supragubernamental
Elaborar un plan de acción global sobre la resistencia antimicrobiana

Se necesita una acción global urgentemente. Consumers International respalda la
recomendación del grupo asesor estratégico y técnico sobre resistencia antimicrobiana,
y avalada por el Consejo Ejecutivo de la OMS,xiii de que la OMS debe liderar la
elaboración y la coordinación de un plan de acción global sobre la resistencia
antimicrobiana. Este plan debe incluir:
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 la reducción del uso de antimicrobianos en todos los sectores
 la integración de la prevención de la resistencia antimicrobiana en todos los
sistemas de salud humanos y animales
 énfasis en la higiene y la prevención de las infecciones, y el control en la cría de
animales, así como en los sistemas de salud humanos
 finalización del uso de antimicrobianos para la estimulación del crecimiento y
eliminación progresiva del uso rutinario para la prevención de enfermedades en
la producción de ganado.

La OMS debe considerar buscar un tratado legalmente vinculante con el fin de
garantizar la total cooperación de todos los Estados miembros.
Gobiernos
Brindar liderazgo nacional y promover la colaboración intersectorial

Establecer y fiscalizar los objetivos para poner fin al uso de antimicrobianos para la
estimulación del crecimiento y eliminar progresivamente el uso de la prevención de
enfermedades rutinaria en la producción de ganado.

Establecer un mecanismo formal de interacción entre el Ministerio de Salud y otros
ministerios y autoridades pertinentes para tratar el tema de la resistencia
antimicrobiana en el sector agrícola.

Incluir a las autoridades agrícolas y veterinarias en el comité directivo intersectorial
sobre la resistencia antimicrobiana, junto con los profesionales de la salud y los
defensores de los consumidores. Garantizar que toda comida servida en hospitales,
escuelas y otras instituciones públicas no sea producida a partir de animales a los
que se les hayan administrado antibióticos para la estimulación del crecimiento o la
prevención rutinaria de enfermedades.
Crear e imponer un marco regulatorio facilitador

Establecer un marco regulatorio para la autorización y el control de la calidad de las
medicinas veterinarias, que garantice una separación entre vender y recetar medicinas
veterinarias.

Introducir una evaluación de seguridad antes de otorgar la patente a los antimicrobianos
para uso veterinario, considerando la potencial resistencia de los medicamentos que se
utilicen en la medicina humana. Los medicamentos que hayan sido aprobados sin
dichas evaluaciones deben ser reevaluados y retirados del mercado o se les deben
modificar las condiciones de uso, si es necesario, según sus evaluaciones.

Limitar el uso en animales productores de alimento de antimicrobianos identificados
como de vital importancia en la medicina humana prohibiendo su uso o instaurar
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restricciones a su uso, como prohibir otros usos no contemplados en la etiqueta o
prohibir el uso en grupos de animales.

Metas de reducción que lleven al término de todo uso de antibióticos en animales para
la estimulación del crecimiento o la prevención rutinaria de enfermedades para el 2020.

Exigir recetas para todos los antimicrobianos que se usan en los animales de granja.

Regular el etiquetado para garantizar que todo producto etiquetado como "sin
antibióticos" no contenga carne de animales que hayan recibido antibióticos.
Fortalecer la vigilancia, el control y la rendición de cuentas públicas

Crear sistemas nacionales para controlar y publicar el uso de antimicrobianos en
animales productores de alimento, así como la prevalencia de la resistencia.

Desarrollar programas de vigilancia nacionales integrados para controlar los patrones de
RAM actuales y emergentes (lo que incluye los datos cuantitativos de susceptibilidad
para los patógenos zoonóticos y las bacterias indicadoras), que se cruzan en el uso
animal y humano. La vigilancia debe implicar una estrecha colaboración entre la salud
pública, los laboratorios veterinarios y de alimentos.

Establecer un equipo de tareas multidisciplinario que incluya a las autoridades en la
salud pública, la medicina veterinaria y la seguridad alimentaria para que trabajen con
los datos de vigilancia para identificar las tendencias, evalúen los riesgos e implementen
oportunamente las intervenciones específicas.

Comprometerse con la elaboración y la adopción de protocolos estandarizados para
facilitar la armonización global en cuanto a la vigilancia del uso antimicrobiano en
humanos y animales, y la resistencia antimicrobiana.
Promover la educación y la capacitación en el uso antimicrobiano en los animales
productores de alimento

Eliminar los incentivos para los veterinarios que recetan antibióticos, y elaborar e
implementar directrices nacionales sobre el uso prudente de antimicrobianos en los
animales productores de alimento, con la participación multidisciplinaria.

Ofrecer capacitación para veterinarios y agricultores sobre el uso de estas directrices;
implementar auditorías y entregar retroalimentación a los veterinarios y los productores
agrícolas para que mejoren el cumplimiento. Elaborar e implementar estrategias
educativas que enfaticen la importancia y los beneficios de los principios de uso
prudente, y brindar la información pertinente sobre la RAM a los productores, las partes
interesadas y al público general.
Reducir la necesidad de antimicrobianos mediante una mejor cría de animales

Introducir medidas para mejorar la salud animal y reducir la necesidad de tratamientos
antimicrobianos, lo que incluye la aplicación de vacunas eficaces.
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
Mejorar la gestión sanitaria para la producción de animales para alimento, al garantizar
buenas prácticas de higiene y el cumplimiento de las prácticas recomendadas para la
producción agrícola y ganadera.
Productores multinacionales de alimentos, comerciantes minoristas y cadenas
de restaurantes

Utilizar el masivo poder de compra global para producir un cambio más rápido que solo
con la medida gubernamental.

Evitar, a nivel mundial, que se utilice toda carne que se haya producido con animales
que recibieron antibióticos para estimular el crecimiento.

Evitar, a nivel mundial, que se utilice toda carne que se haya producido con animales
que recibieron antibióticos rutinariamente para prevenir enfermedades.

Crear políticas que estimulen a los proveedores a tomar medidas para reducir la
necesidad de antimicrobianos mediante una mejor cría de animales.
i
http://www.who.int/mediacentre/news/releases/2011/whd_20110406/en/
Young I, Rajic A, Wilhelm BJ, Waddell L, Parker S, McEwen SA; Epidemiol Infect. 2009
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Comparison of the prevalence of bacterial enteropathogens, potentially zoonotic bacteria and
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a systematic review and meta-analysis. [Comparación de la prevalencia de enteropatógenos
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producción porcina, bovina y de aves de corral orgánica y convencional: una revisión sistemática y
metaánalisis].
iii
Luangtongkum T1, Morishita TY, Ison AJ, Huang S, McDermott PF, Zhang Q; Appl Environ
Microbiol. Mayo de 2006;72(5):3600-7: Effect of conventional and organic production practices on the
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Campylobacter spp. en las aves de corral]
iv
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Miranda JM1, Guarddon M, Mondragon A, Vázquez BI, Fente CA, Cepeda A, Franco CM.
v
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vi
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vii
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viii
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ix
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ii
8
x
Grupo asesor sobre vigilancia integrada de la resistencia a los antimicrobianos (AGISAR por sus
siglas en inglés) para los antimicrobianos de vital importancia para la medicina humana , 3º revisión.
http://apps.who.int/iris/bitstream/10665/77376/1/9789241504485_eng.pdf
xi
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EB134.R13: http://apps.who.int/gb/ebwha/pdf_files/EB134/B134_R13-en.pdf
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