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ESTADO LIBRE ASOCIADO DE PUERTO RICO 15 ta Asamblea Legislativa 5 Sesión Ordinaria ta SENADO DE PUERTO RICO 24 de junio de 2007 Informe Positivo sobre el P del S. 1902 AL SENADO DE PUERTO RICO Vuestras Comisiones de Salud, Bienestar Social y Asuntos de la Mujer y de Comercio, Turismo, Urbanismo e Infraestructura del Senado de Puerto Rico, previo estudio y consideración, recomiendan a este Alto Cuerpo Legislativo, la aprobación del P. del S. 1902, con las enmiendas contenidas en el entirillado electrónico que se acompaña con este informe. I. ALCANCE DE LA MEDIDA El P. del S. 1902 tiene como finalidad establecer el uso del desfibrilador automático externo en algunos establecimientos privados que atienden al público, y para otros fines. En la Exposición de Motivos de esta medida se señala que la muerte súbita es la primera causa de muerte en todo el mundo. Se denomina muerte súbita a un episodio en el cual la persona afectada pierde el pulso, la respiración y la conciencia de una forma repentina. Es originado por causa natural, o sea, sin que ocurran sucesos violentos como el homicidio, el suicidio, la intoxicación o trauma y solo podría recuperarse si se ofrecen los primeros auxilios adecuados. Tenemos que las causas más importantes para generar la muerte súbita son las enfermedades cardiovasculares. Toda alteración de la función cardiaca, sea por un infarto anterior o la dilatación del corazón por diversos orígenes, tales como una válvula dañada, la miocarditis o anormalidades genéticas congénitas que afecten el músculo del corazón, pueden ocasionar la muerte súbita. Además, el estrés diario de nuestra vida cotidiana provoca muchas situaciones de emergencias. Según la Asociación Americana del Corazón cada día más de 1,000 americanos sufren de un paro cardiaco repentino, usualmente fuera del hospital. En más del 95% de los casos la persona muere porque el Desfibrilador llega a la escena de la emergencia demasiado tarde. Esto 2 significa que cada año más de 250,000 ciudadanos americanos mueren fuera del hospital debido a un paro cardiaco repentino. Los ritmos anormales del corazón conocidos como arritmias son la causa mayor de paros cardiacos repentinos. Fibrilación ventricular es la más común de las arritmias que causa paros cardiacos. Es una condición donde los impulsos eléctricos del corazón repentinamente se convierten en caóticos, usualmente sin aviso alguno. Esto causa que el corazón se detenga abruptamente. La persona colapsa y pierde la conciencia. Usualmente la muerte es segura a menos que se responda inmediatamente para restaurar el ritmo normal del corazón. Las personas que logran sobrevivir un paro cardiaco repentino tienen buenas probabilidades de vivir un año en el 80% de los casos y cinco años en el 57% de los casos. Cuando una persona sufre un paro cardiaco repentino, por cada minuto que pasa sin un Desfibrilador, las posibilidades de sobrevivir disminuyen de un 7% a un 10%. La Asociación Americana del Corazón estima que más de 20,000 muertes pueden ser prevenidas anualmente si desfibriladores estuviesen disponibles para su uso. Un Desfibrilador es un dispositivo usado para administrar un choque eléctrico a través del pecho al corazón. Las computadoras que lo componen determinan si es necesario su uso y administrar el choque eléctrico. En Puerto Rico, las enfermedades del corazón representan la primera causa de muerte para ambos sexos según estadísticas del Departamento de Salud Pública. Es la intención de la Legislatura el promover la adquisición y uso del Desfibrilador Externo Automático en Puerto Rico con el propósito de salvar la vida de una persona que atraviesa por un paro cardiaco repentino. Los trastornos del ritmo cardíaco pueden afectar a cualquier persona, con independencia de la edad, el sexo, el estado físico, etc. El conocimiento y el control proactivo de la salud de su corazón pueden significar la diferencia entre una supervivencia prolongada, una enfermedad cardiaca progresiva no controlada y la muerte. La administración de un choque eléctrico a un corazón que experimenta una PCS/MSC suspende brevemente toda la actividad eléctrica cardiaca. Esta breve "rotura" del caos eléctrico previo puede ser suficiente para que el corazón reinicie sus latidos con un ritmo normal. No todo el mundo puede salvarse de una PCS/MSC con la desfibrilación. No obstante, la desfibrilación 3 precoz, sobre todo cuando se administra en los tres minutos siguientes al colapso de la persona por la PCS/MSC, aumenta las probabilidades de supervivencia. A los fines de atender esta situación se propone mediante este proyecto de ley que en determinados establecimientos privados se deberá contar con por lo menos un desfibrilador. Los lugares donde se deberá contar con éstos serán: Estadios y centros deportivos privados con capacitad para más de quinientas (500) personas, contarán con un mínimo de un (1) desfibrilador automático externo. Locales de espectáculos y entretenimiento privados con capacidad para más de quinientas (500) personas, contarán con un mínimo de un (1) desfibrilador automático externo. Universidades privadas, salones de conferencias, seminarios o exposiciones de naturaleza privada con capacidad para más de quinientas (500) personas, contarán con un mínimo de un (1) desfibrilador automático externo. Industrias, fábricas, centros comerciales, hoteles o paradores, o cualquier otra empresa privada con capacidad para albergar, recibir, o atender a más de 250 personas, contarán con un mínimo de un (1) desfibrilador automático externo. Como parte de su misión de disminuir las enfermedades cardiovasculares y salvar vidas, la Asociación Americana del Corazón (AHA) promueve desde 1995, el uso de defribiladores automáticos externos, conocidos por sus siglas en inglés, como AED’s, pues estos han demostrado ser una herramienta que salva vidas. Este es un equipo médico computadorizado de naturaleza portátil que monitorea el ritmo cardiaco en una víctima y puede reconocer cuando ésta requiere una descarga eléctrica para normalizarlo. Tras rastrear el ritmo cardiaco, el AED notifica a su operador si la víctima necesita la descarga. Este artefacto utiliza voz, luces, mensajes de texto para orientar a la persona los pasos a seguir. Los defribiladores automáticos son sumamente precisos y fáciles de utilizar, por lo que con adiestramiento de sólo algunas horas, cualquier persona puede operarlo de forma segura. Existen diferente tiempos de AED’s, cuyos precios varían desde $1,800 a $3,000 aproximadamente. Sin embargo, la Asociación no recomienda un modelo en específico. 4 La aprobación de este proyecto de ley contribuirá a salvar muchas vidas ya que de acuerdo a la Asociación Americana del Corazón, una persona que sufre fallo cardiaco, está en mejor posición de sobrevivir si dentro de los próximos siete minutos recibe atención médica y en particular si se trata de estabilizar el ritmo cardiaco mediante el uso de un desfibrilador automático tal y como propone esta medida. IMPACTO FISCAL Las Comisiones suscribientes han determinado que esta medida no tiene un impacto fiscal significativo sobre las finanzas de los gobiernos municipales ni sobre las del gobierno central. CONCLUSION Por los fundamentos expuestos vuestras Comisiones de Salud, Bienestar Social y Asuntos de la Mujer y de Comercio, Turismo, Urbanismo e Infraestructura del Senado de Puerto Rico, recomiendan la aprobación del P. del S. 1902, con las enmiendas contenidas en el entirillado electrónico que se acompaña con este informe. Respetuosamente sometido, Luz Z. Arce Ferrer Presidenta Comisión de Salud, Bienestar Social y Asuntos de la Mujer Carlos A Díaz Sánchez Presidente Comisión de Comercio, Trismo, Urbanismo e Infraestructura