Download Claudina Thévenet, aunque entregada a su nueva familia religiosa

Carta 7:
A su sobrina Emma Mayet
CARTA N° 7: Anotaciones
La felicita por el feliz nacimiento de su hija. Interés por
un necesitado. Paralizada la fortificación de Fourviére.
Fourviére, 11 de septiembre de 1834
Mi muy querida Emma: He tenido una gran
alegría al enterarme de que habías dado a luz
felizmente, que te encuentras bien, lo mejor posible
en tu situación, y que tu hijita María posee una
buena constitución. Lo he sabido gracias a tu padre
que me ha hecho traer noticias tuyas y de nuestra
querida pequeña. Espero que gozará de buena salud.
Tengamos confianza en que el Señor te la
conservará. He visto a Claudio y me ha dicho que la
niña lleva en el cuellecito, dentro de un pequeño
corazón de oro, una reliquia de San Francisco de
Regis. Su madrina la habrá encomendado mucho a
este gran santo. Cuando el traslado de sus reliquias,
ha habido varios milagros.
El que te entregará mi carta es el cuñado de
nuestra buena Hermana Escolástica, que ha reemplazado a la Hermana San Francisco para los
recados. Se llama Revillac. Quiere establecerse en
Villefranche y ejercer ahí su oficio de estufista; es
muy buen hombre. Como nuestra Hermana le ha
dicho que yo tengo una sobrina casada en
Villefranche, me ha pedido que le hiciera una carta
de recomendación. Te agradeceré, querida Emma,
que le pidas a tu marido que lo recomiende a
algunos habitantes de Villefranche para que pueda
tener trabajo. Me darás mucho gusto si puedes
ayudarle. Tengo en la Providencia a su pequeña, que
es muy buena niña; se nota en seguida que tiene
buenos padres.
Te ruego que des muchos recuerdos de mi parte a
tu querido marido y a tu cariñosa madre.
No me olvido de mi sobrinita; hazle muchas
caricias de mi parte. Espero con ilusión poder
conocerla.
Adiós, mi querida Emma. No me olvido de ti en
mis oraciones; hemos rogado al Señor, con todo
nuestro corazón, por ti y por tu pequeña María.
Adiós de nuevo; toda tuya, tu afectísima tía que te
quiere,
María Ignacio
Señora Mayet de Perroud
Casa Perroud Villefranche
El nombre completo de la hija de Emma era: Juana,
Francisca, María. Se la llamó siempre por el tercer
nombre, María, como la hermana del Sr. Perroud. Fue
ésta una delicadeza de Emma para con su marido.
A esta niña, María Perroud, debemos casi todo lo
que nos ha llegado de la Madre Fundadora respecto a
su familia. Ella guardó con gran cariño, como su
padre, lo que poseía de «la tante Ignace». Sus
descendientes conservan un retrato suyo muy bello de
cuando tenía 10 años, pintado por Elisabeth Mayet.
La Sra. Mayet había ido a Villefranche para asistir a su
hija y acompañarla en estas circunstancias. El Sr.
Mayet comunicaba a su cuñada las noticias que iba
recibiendo.
Claudio, todavía seminarista, era profesor en los
Mínimos, muy cerca de Fourviére.
Como dato curioso anotamos que la H. Escolástica,
María Carlota Beranger, había nacido en Seyssel (Ain),
población de donde eran oriundos les Thévenet. Tanto ella
como la H. San Francisco, eran maestras de las niñas de
la Providencia; la primera, en el trabajo de la fabricación
de telas, y la segunda en el de devanado.