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¿A qué se debió tan enorme progreso? Año: 2, Febrero 1960 No. 6 N. del D. El señor Don Faustino Ballvé distinguido jurista y economista, miembro del Consejo Directivo del Instituto de Investigaciones Sociales y Económicas de México, falleció en el mes de Octubre de 1958. La presente es extracto de una conferencia que dictó el Dr. Ballvé en el año de 1954 pero cuyos postulados todavía permanecen de gran actualidad. Ojalá las ideas de tan ilustre desaparecido den alguna luz a quienes se preocupan por los problemas económicos. LIBERTAD Y ECONOMIA EL PROBLEMA.La burguesía, desde su advenimiento apenas hace un siglo, ha creado fuerzas productivas más variadas y más colosales que todas las generaciones pasadas tomadas en conjunto... ¿Qué siglo anterior había sospechado que semejantes fuerzas productivas durmieran en el seno del trabajo social...? La burguesía ha demostrado cómo la brutal sujeción de la Edad Media... encuentra su complemento natural en la más lamentable pereza. Es ella la que primero ha probado lo que puede realizar la actividad humana; ha creado maravillas muy superiores a las pirámides egipcias, a los acueductos romanos, a las catedrales góticas y ha dirigido expediciones superiores a las invasiones y a las cruzadas. Por el rápido desenvolvimiento de los instrumentos de producción y de los medios de comunicación, la burguesía arrastra a la corriente de la civilización hasta las más bárbaras naciones. Este elogio, el mayor que jamás se haya hecho de la economía liberal, está copiado del Manifiesto Comunista de 1848. Sencillamente al clima de libertad que entonces prevalecía. A la libertad de pensamiento y de investigación que condujo hacia los más maravillosos descubrimientos. A la libertad de producción y de comercio que en juego de libre competencia hizo que siempre se produjera lo que apetecía el consumidor y al mejor precio. A la libertad de tránsito y de tráfico que aunó los intereses de los consumidores más apartados con los de los productores en iguales circunstancias. A la libertad de trabajo que permitió al trabajador colocar su trabajo allí donde lograba el mayor beneficio. Todo esto sin la ayuda ni intervención del Estado. Sin embargo, la economía libre ha encontrado dura oposición por parte de sectores de intelectuales que pretenden sustituirla o mejorarla, y que defienden la corriente intervencionista o de economía dirigida. El economista inglés W. A. Lewis. resume esta posición en su libro La planeación económica 1 en los siguientes términos: 1 [i] En español en en los Brevarios del Fondo de Cultura Económica, México, D. F. La producción y distribución deben controlarse en atención a los fines sociales. Hay dos clases de control: el invisible o ejercido por el mercado y el visible organizado por el Estado. El control invisible es muy vigoroso y consiste en que la producción está controlada por la demanda, esto es, el productor produce aquello que le piden; la distribución está controlada porque los productores; no pueden cobrar lo que quieran debido a que las fuerzas de la competencia tienden a la reducción de precios. Pero este control invisible, debe ser reforzado por el Estado a efecto de eliminar sus debilidades, a saber: 1.Injusta distribución de los recursos y de las escaseces. 2.Falta de movilidad de los recursos. 3.Incapacidad para hacer frente al comercio internacional. Estas debilidades de la economía libre, se corrigen por: 1.Los impuestos y los subsidios. 2.La intervención en los salarios y precios. 3.El control de la moneda. y 4.El control del comercio internacional. IMPUESTOS Y SUBSIDIOS.- Se trata de corregir la producción de bienes de consumo o la distribución de la riqueza. La imposición correctiva de la producción es inútil porque en la economía libre, cuando hay sobreproducción de una cosa y escasez de otra, nadie produce lo que abunda, sino al contrario, sé produce lo que tiene demanda insatisfecha. La imposición redistributiva, que para Lewis corrige la injusticia en el reparto de los frutos de la producción, consiste en gravar a los que perciben mayores ingresos y desgravar a aquellos que los tienen en poca escala. El beneficio que se obtendría sería mínimo,, pues por ejemplo en Inglaterra. Según el mismo autor, la masa de la población sólo vería aumentados sus ingresos en un diez por ciento. Por otro lado, a cambio de esta pequeña mejora, se disminuirían las posibilidades de creación de nuevas fuentes de producción y trabajo, porque quienes hacen inversiones son los que obtienen beneficia por encima de sus necesidades, y no la masa de la población que sólo consume incrementando así la demanda, y si a aquellos se les priva de beneficios, no tienen los medios para reinvertir y hacer frente a sea creciente demanda. En tal virtud, esa intervención no distribuye prosperidad, sino miseria y lo único que logra es frenar la producción y atentar contra la libertad individual. SALARIOS Y PRECIOSPara Lewis, cuando haya escasez de algunas mercancías es necesario ir al control de precios. La fijación de precios máximos disminuye o anula la ganancia del productor, el cual huye de la producción aumentando la escasez. Para que esto no suceda, hay que subsidiarlo, lo cual quiere decir que lo que el consumidor ahorra en el precio, lo paga en. el impuesto. Hay otro inconveniente: si ciertos artículos esenciales se venden bajo el precio de costo, todos los compran e inevitablemente sobrevienen el racionamiento que requiere una maquinaria administrativa que es cara, produce el mercado negro y la escasez. La economía libre tiene para la escasez remedios baratos y efectivos. Cuando una cosa escasea, su precio sube, el consumidor limita su uso y lo completa, con sustitutos. El precio alto invita a producir, el aumento de la producción hace bajar de nuevo los precios y así la escasez se ha resuelto automáticamente y sin gastos para el Estado. En cuanto al control de salarios, también tiene graves inconvenientes. Los salarios bajos existen donde la oferta de mano de obra es más abundante y si se fijan salarlos mínimos obligatorios, el empresario lógicamente perfecciona los métodos de producción y reduce la mano de obra. Como salarios más altos producen precios más altos, el consumo se restringe, se va al desempleo y entonces el obrero que percibía antes un salario bajo, ya no percibe ninguno. Por lo que toca a la reglamentación general de salarios el mismo Lewis dice que es ineficiente porque es un hecho que el aumento de salarlos produce un aumento de precio: así, lo que el obrero recibe de más como productor, lo paga como consumidor. En Francia el caso del pan ha sido típico durante la última guerra. Con los precios .controlados y el racionamiento, el consumidor tomó siempre la totalidad de su ración aunque no la necesitara y la parte que no consumía la vendía en el mercado negro o lo destinaba a alimentación de animales de corral. Resultado: cuando se suprimió el racionamiento y se reanudó su comercio libre el consumo del pan en Francia, en vez de aumentar disminuyó considerablemente. El racionamiento había producido el efecto contrario del que con él se persiguió. LA MONEDA .- La moneda metálica tiene valor en si, representa un valor en cosas y servicios, no puede aumentar sino en tanto aumenta la existencia de metal y las riquezas con las que se le puede comprar, está siempre en poder de sus dueños, constituye un medio de cambio mundial y regula automáticamente la relación entre bienes actuales y futuros, presentes y distantes, duraderos y perecederos. Pero cuando el Estado se quedó con el metal precioso y fija la moneda en circulación que no es convertible en metal no responde a la existencia de éste, entonces emite moneda falsa. Con ello priva a la economía mundial de un medio de cambio desposee al particular y se hace de toda la riqueza nacional. Como las maniobras monetarias se traducen o en inflación o en deflación, algunos economistas quieren el control de la moneda fiduciaria para mantener: en circulación en todo momento la adecuada a las necesidades de la economía para que no se envilezcan ni se enrarezcan los tipos monetarios, y exista por tanto una moneda estable que evite la inflación o la deflación. Pero no tienen en cuenta que prever las contingencias de la economía de un país es tan difícil como remediarlas y corregirlas oportunamente. Por otra parte. ¿para qué una moneda falsa controlada cuando existe la moneda verdadera que se controla a sí misma? COMERCIO EXTERIOR.- Con la libertad económica, el comercio internacional se regula a sí mismo. Los comerciantes en el mercado mundial compran en las condiciones más favorables para ellos, en donde esté lo mejor y lo más barato. Si las importaciones exceden a las exportaciones, se produce una disminución en la existencia de dinero en el país, los precios caen porque la oferta de mercado aumenta en relación con la escasez de dinero, aumenta el consumo del artículo de producción nacional y el equilibrio se busca con el aumento de las exportaciones. Si por el contrario, hay exceso de exportaciones, se produce un exceso de dinero, un aumento de los precios interiores y de las importaciones hasta lograr también el equilibrio. Ambos hechos son automáticos, siempre y cuando la moneda sea verdadera, pues en caso de no serlo, no se sabrían nunca los verdaderos precios. A pesar de esto, Lewis aconseja la intervención estatal en la regulación del comercio exterior, porque según dice, hay que reforzarlo y tener en cuenta la necesidad de mantener la producción de guerra y de fomentar las industrias nuevas. Propone no restringir ni ampliar el comercio exterior, sino desviarlo facilitando o dificultando ciertas importaciones o exportaciones, y el medio lo proporciona el control de cambios. Este consiste en que el Estado cobra al exportador o importador en oro dólares, es decir en moneda estable y paga una cantidad arbitraria de moneda nacional. En conclusión, igual que en la economía libre, las importaciones son pagadas con las exportaciones y aquéllas sólo alcanzan hasta donde éstas lo permiten, pero eso sí ni el importador ni el exportador perciben el precio del mercado internacional sino uno injusto y arbitrario y además gravado con los gastos que representa la intervención del Estado. Por tanto, no se incrementael comercio internacional,. ni hay justa distribución, ni mayor movilidad de mercancías. ECONOMIA Y GUERRA.El nacionalismo económico no es la consecuencia de la guerra, sino su causa. Cuando los gobiernos se amparan del control de la economía, surgen los conflictos entre naciones. Ejemplos de esto son las dos guerras mundiales nacionalismo económico alemán en contra de los nacionalismos francés, inglés y norteamericano. Tampoco para la guerra es necesario el control de la economía. La guerra necesita de elementos nacionales y de elementos importados, ambos pagados por medio de impuestos y empréstitos, esto significa que cada país se paga su propia guerra. De la producción se encargan los productores y del pago los contribuyentes, pero al final el pueblo exige cuenta de los errores que hayan llevado al país a la guerra, y para evitarlo, el gobierno recurre a las maniobras monetarias, diciendo que lo hace para proteger Ia producción nacional. Esto origina un encarecimiento de la vida por los gravámenes impuestos a los productos extranjeros que todo país necesita dada la imposibilidad natural que hay para producir de todo. Con esto no se hace economía, sino política a costa de la economía. Pero aún así, esta clase de política aislacionista y autárquica es improcedente porque en caso de producirse otra guerra, sería entre dos amplísimos bloques, cada uno de los cuales sí constituirá una economía completa, y lo conveniente sería que cada país del bloque aportara lo que puede producir más económicamente. FALACIAS DEL DIRIGISMO.EI dirigismo sostiene tres grandes mentiras que atribuye a la economía libre y ellas son: las crisis cíclicas, los monopolios y el desempleo. Sismondi, un aficionado, fue el primero en afirmar que las crisis económica periódicas acompañan a la economía libre. Mises ha demostrado que no hay ni ha habido tales crisis cíclicas, que cuando las crisis se han producido, se han debido a hechos ajenos a la vida económica como son los inventos revolucionarios, cobros de indemnizaciones de guerra, la política del dinero fácil, etc. La economía libre es una economía automática; en cuanto apunta en ella una desviación, inmediatamente operan para frenarla fuerzas compensadoras. Tampoco puede producirme en ella el monopolio, porque a la más poderosa asociación de empresas que la implante, la libre competencia le opondrá otra organización rival que lo neutralice. El monopolio ha sido siempre Implantado por el intervencionismo por motivos electorales o de política internacional y militarista. Por último, la economía libre no produce el desempleo por cuanto tiende el aumento constante de la producción que origina abundancia de trabajo. Los casos de países que carecen de mercancías o de brazos, mientras en otros sobran, se debe a que las barreras económicas y políticas impiden su movilidad, es decir, el desempleo es consecuencia del llamado nacionalismo económico y de la policía migratoria que impide la distribución de la mano de obra y de las mercancías en un plomo universal. En cuanto a la política de pleno empleo, propuesta por el intervensionista Keynes, impone a la producción un cupo de obreros superior al que necesita, grava su costo, produce el alza de precios, la miseria y el mismo desempleo que trata de evitar. JUSTICIA SOCIAL.- con esta frase que usa la economía dirigida, se quiere designar el mejoramiento del nivel de vida de las clases humildes. Veamos la experiencia de medio siglo de economía dirigista. En el curso de la segunda mitad del siglo XIX, en que regía la economía libre, en Francia los precios permanecieron estables y los salarios doblaron. Desde entonces en que se inició el intervensionismo, hasta la guerra de 1939, el nivel de vida se estacionó y posteriormente, con el estatismo radical, ha bajado casi al nivel de 1848. En los Estados Unidos, donde ha habido economía libre, el nivel de vida del trabajador desde 1858 hasta 1953. casi se ha quintuplicado. Esos son los resultados. En resumen, la economía dirigida, de moda en nuestros días, no resiste un análisis minucioso, ni la prueba de los hechos ni la comparación con la economía de mercado libre. Su fracaso es evidente como lo fue en Egipto y en Roma. Lippmann, Hazzlitt, Hayek, Mises y tantos otros, enmiendan los errores de la economía clásica y del dirigismo, y preparan la restauración de la libertad económica en un plano universal. El Centro de Estudios Económico-Sociales, CEES, fue fundado en 1959. Es una entidad privada, cultural y académica , cuyos fines son sin afan de lucro, apoliticos y no religiosos. Con sus publicaciones contribuye al estudio de los problemas económicosociales y de sus soluciones, y a difundir la filosofia de la libertad. Apto. Postal 652, Guatemala, Guatemala correo electrónico: cees@cees.org.gt http://www.cees.org.gt Permitida su Reproducción educativos y citando la fuente. con fines