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Annales Nestlé Reimpreso con autorización de: Ann Nutr Metab 2011;58(suppl 1):8–18 DOI: 10.1159/000334145 Alergia a los alimentos: avances recientes en la fisiopatología y el diagnóstico Christophe Dupont Gastroenterología pediátrica ambulatoria, alergia alimentaria y exploraciones funcionales digestivas, Hôpital Necker-Enfants Malades, París, Francia Mensajes clave • La alergia a los alimentos predomina en lactantes y niños, y generalmente tiende a desaparecer después. • Sólo un pequeño número de alimentos son responsables de la gran mayoría de alergias hacia éstos, particularmente leche, trigo, huevo y cacahuate. • Una clasificación de los síntomas de acuerdo con su patrón clínico y la presencia/ausencia de sensibilización a la IgE permiten una mejor evaluación del riesgo y del pronóstico de la enfermedad. Palabras clave Alergia a los alimentos • Diagnóstico endoscópico • Alergia mediada por IgE • Alergia no mediada por IgE • Fisiopatología Resumen Aproximadamente 5% de niños pequeños y 3 a 4% de adultos presentan respuestas inmunes adversas a los alimentos en los países occidentalizados, con una tendencia a aumentar. La fisiopatología de la alergia a los alimentos (AA) se basa en las reacciones inmunes precipitadas por epítopes, es decir, secuencias pequeñas de aminoácidos capaces de unirse a anticuerpos o a células. Algunos alérgenos de los alimentos comparten características fisicoquímicas específicas que les permiten resistir la digestión y con ello aumentar la alergenicidad. Estos alérgenos en- © 2011 Nestec Ltd., Vevey/S. Karger AG, Basel 0250–6807/11/0585–0005$38.00/0 Fax +41 61 306 12 34 E-Mail karger@karger.ch www.karger.com cuentran poblaciones especializadas de células dendríticas en el intestino, que sensibilizan a las células T. En el caso de la alergia mediada por IgE, este proceso precipita la producción de IgE específica del alérgeno por las células B. Las células reactivas que residen en los tejidos, incluidos los mastocitos, se unen a la IgE, y precipitan las reacciones alérgicas cuando estas células, con moléculas de IgE adyacentes unidas a su superficie son reexpuestas al alérgeno. Las reacciones alérgicas que se presentan en ausencia de IgE detectable son etiquetadas como no mediadas por IgE. La abrogación de la tolerancia oral que lleva a la AA es probablemente favorecida por la predisposición genética y factores ambientales (p. ej., aumento de la higiene o de la alergenicidad de algunos alimentos). Para un diagnóstico exacto, se requiere una historia clínica completa, pruebas de laboratorio, y en la mayoría de los casos un reto oral con el alimento. De manera notoria, la detección de IgE específica del alimento (sensibilización) no necesariamente indica alergia clínica. Nuevos métodos diagnósticos actualmente en estudio se enfocan en las respuestas inmunes a proteínas específicas de los alimentos o epítopes con propiedades específicas. Las reacciones alérgicas inducidas por alimentos representan un conjunto grande de síntomas que involucran la piel, y el tracto gastrointestinal y respiratorio. Pueden ser atribuidas a mecanismos mediados por IgE o no mediados por IgE (celulares) y por lo tanto difieren en su naturaleza, gravedad y resultado. El resultado difiere también de acuerdo con los alérgenos. Copyright © 2011 Nestec Ltd., Vevey/S. Karger AG, Basel Introducción La alergia a los alimentos (AA) es un importante problema de salud pública que afecta a adultos y niños, y puede aumentar su prevalencia (Cuadro 1). A pesar del riesgo de reaccio- Christophe Dupont Gastroenterologie pédiatrique ambulatoire Allergie alimentaire et Exlorations fonctionnelles digestives Hópital Necker-enfants Malades, 149 rue de Sèvres, FR75015 París (Francia) Tel. +33 17 119 6083, E-Mail cristophedupon@nck.aphp.fr nes alérgicas graves e incluso de muerte, no hay tratamiento actual: la enfermedad sólo puede manejarse al evitar los alérgenos o tratando los síntomas. Además, un diagnóstico de AA puede ser problemático dado que las reacciones no alérgicas a los alimentos, como la intolerancia a los alimentos, con frecuencia se confunden con la AA. Inquietudes adicionales se relacionan con las diferencias en el diagnóstico y manejo de la AA en diferentes situaciones clínicas. La investigación básica así como la investigación clínica en este campo son muy activas, con el objeto de mejorar el diagnóstico y proporcionar un patrón clínico más detallado de esta enfermedad. Este artículo es una síntesis de los conceptos actuales de la fisiopatología y el diagnóstico de la AA. Fisiopatología Recientemente, se han publicado revisiones en diferentes países que resumen los conceptos actuales de la AA.1-3 El concepto que surge es el mecanismo de la tolerancia oral, que no funcionaría de manera adecuada en la AA. Cuadro 1. Tasas estimadas de prevalencia de alergia a los alimentos en América del Norte2 Prevalencia Lactantes/niños Adultos Leche 2.5% 0.3% Huevo 1.5% 0.2% Cacahuate 1% 0.6% Nueces 0.5% 0.6% Pescado 0.1% 0.4% Mariscos 0.1% 2% Trigo, soya 0.4% 0.3% Sésamo 0.1% 0.1% Global 5% 3–4% Esta barrera mucosa tiene la difícil tarea de desarrollar una ‘tolerancia oral’ a la enorme cantidad de antígenos ingeridos regularmente y a los organismos comensales que desarrollan una activa supresión inmune de los patógenos digestivos. antígenos, incluidas células epiteliales, células dendríticas y células T reguladoras), que desempeñan un papel central en el desarrollo de la tolerancia oral.4-6 Las células T reguladoras representan un vasto complejo, con células TH3 (células CD4+ que secretan TGF-β), células TH1 (células CD4 que secretan IL-10), células T reguladoras CD4+ y CD25+, células T supresoras CD8+, y células T gammadelta.4 Aunque poco comprendida, la tolerancia oral podría basarse en estas células epiteliales intestinales, que presentan antígenos luminales a las células T en un complejo MHC de clase II, pero que carecen de una ‘segunda señal’, llevando así a anergia. Esto sugiere que el papel de las células epiteliales intestinales en la inducción de tolerancia a los antígenos de los alimentos es como una célula presentadora de antígenos ‘no profesional’. Sin embargo, alrededor de 2% de los antígenos ingeridos con los alimentos atraviesan esta eficiente barrera gastrointestinal (GI) en formas ‘inmunológicamente intactas’, inclusive a través del intestino maduro normal.7 Esta barrera mucosa podría ser menos eficiente o ‘inmadura’ en los lactantes y niños pequeños. Esto explicaría la prevalencia aumentada de infecciones del tracto GI y de la AA en los primeros años de vida: la actividad del sistema IgA secretor no está completamente madura hasta los cuatro años de edad.4 El desarrollo de la tolerancia oral podría también verse influido por varios factores que no son del huésped, como las propiedades físicas del antígeno, y la cantidad y frecuencia de exposición. En modelos murinos, la tolerancia de dosis altas implica deleción de células T efectoras, y la tolerancia de dosis bajas es el resultado de la activación de células T reguladoras con funciones supresoras.4 Finalmente, la flora comensal intestinal quizá desempeña un papel en la tolerancia oral, como lo sugirieron estudios en ratones criados en un ambiente libre de gérmenes y tratados con antibióticos, o que carecen del receptor 4 semejante a toll, que reconoce los lipopolisacáridos bacterianos,8, 9 y por Alergia a los alimentos: fisiopatología y diagnóstico Reimpreso con autorización de: Ann Nutr Metab 2011;59(suppl 1):8–18 La maquinaria epitelial e inmune del intestino Las células epiteliales columnares intestinales constituyen la mayor parte de la superficie del cuerpo humano, separando el ‘milieu interior’ estéril del ambiente externo, y está dedicado a la absorción de nutrientes.5 Esta barrera mucosa tiene la difícil tarea de desarrollar una ‘tolerancia oral’ a la enorme cantidad de antígenos ingeridos regularmente y a los organismos comensales que desarrollan una supresión inmune activa de los patógenos digestivos. Las ajustadas uniones entre las células columnares refuerzan la línea física de defensa, y una capa gruesa de moco contiene factores que atrapan partículas, bacterias y virus. Esta barrera mucosa tiene también fuertes componentes de inmunidad, que son innatos (p. ej., neutrófilos polimorfonucleares, macrófagos, células asesinas naturales, células epiteliales y receptores semejantes a toll) o adaptativos (p. ej., linfocitos intraepiteliales y en la lámina propria, placas de Peyer, IgA secretora y citocinas). Estos componentes participan en la ‘tolerancia’ de antígenos extraños que no son perjudiciales para el cuerpo y que cooperan con células inmunes (p. ej., células presentadoras de 9 estudios que relacionan la presencia de dermatitis atópica con los cultivos bacterianos de muestras de heces humanas.10 Hipersensibilidad mediada por IgE Se considera que la alergia se debe a un desequilibrio de la respuesta inmune a los alérgenos. Los niveles de IgE, originalmente un mecanismo de defensa contra los parásitos, están aumentados en la sangre de los pacientes alérgicos durante la llamada hipersensibilidad mediada por IgE, en la que la respuesta de la IgE es atribuida a la generación de células TH2 que producen IL-4, IL-5 e IL-13.11 susceptibilidad a la EEo es causada por lo menos en parte por algunos polimorfismos, como en la proteína del gen de la linfopoyetina estromal del timo y su receptor.16 Además, podría haber lugar para un fenotipo potencial de una nueva enfermedad, es decir, eosinofilia esofágica que responde a inhibidores de la bomba de protones. Actualmente, están en investigación otros avances y controversias respecto a los métodos diagnósticos, marcadores predictivos sustitutos de la alergia, así como los enfoques de tratamiento. Otros trastornos eosinofílicos que involucran el estómago y el intestino raras veces se asocian con EEo, al parecer (en su mayoría) menos frecuentes y menos investigados. Hipersensibilidad no mediada por IgE Diferentes vías de sensibilización en el desarrollo Sin embargo, muchos pacientes con reacciones ‘alérgicas’ carecen del sello característico de la AA, esto es, niveles aumentade la alergia dos de IgE en la sangre contra el alimento responsable. La in- Las personas susceptibles podrían no desarrollar tolerancia munofisiopatología de estos trastornos alérgicos no mediados oral después de la ingestión del antígeno, o la tolerancia popor IgE en el tracto GI no se conoce todavía por razones más dría ser evitada por la presentación de proteínas por la vía o menos obvias, p. ej., su frecuencia particular en lactantes pe- del tracto respiratorio o la piel, representando vías alternas queños, en los que las investigaciones fisiopatológicas son difí- que llevan a la sensibilización. En pacientes con el síndrociles y éticamente cuestionables, y la falta de modelos animales me de alergia oral (SAO)/síndrome relacionado con polenen particular. En lactantes con alimentos, la sensibilización el síndrome de enterocolitis ocurre por la vía respiratoSin embargo, muchos pacientes con inducida por proteínas de los ria.17 Después de esta sensireacciones ‘alérgicas’ carecen del sello alimentos (FPIES), el TNF-α bilización, el prurito oral de secretado por las células mocaracterístico de la AA, esto es, niveles los pacientes alérgicos que nonucleares de la sangre periconsumen manzanas crudas férica cultivadas con proteínas aumentados de IgE en la sangre contra se origina en la reactividad de los alimentos ha mostrado cruzada de la proteína Mal el alimento responsable. que son responsables de la d 1 de la manzana con una reacción.12 Las muestras de proteína homóloga Bet v 1 biopsias del duodeno de lactantes afectados tienen tinción au- del polen de abedul. mentada del TNF-α y tinción disminuida del receptor regulaLa piel podría ser también una vía de sensibilización, dor de citocinas del TGF-β.13 ejemplificada en varios modelos de ratón.18 Estudios epidemiológicos de Israel y del Reino Unido sugieren que la exposición ambiental al cacahuate podría favorecer la sensibiliEsofagitis eosinofílica y otros trastornos Como se resumió en últimas fechas en una declaración de zación y la alergia.19,20 Así, el papel de la barrera de la piel ha consenso,14 la esofagitis eosinofílica (EEo) es una enfermedad atraído una creciente atención. Las alteraciones constitutivas crónica mediada inmunológicamente, que se caracteriza clíni- de la piel, por ejemplo, un defecto en el gen de filagrina, pocamente por síntomas relacionados con disfunción esofágica, dría llevar a la sensibilización.21 e histológicamente por inflamación predominante por eosinófilos. Parece ser que un proceso inmunológico dirigido por Diferencias y semejanzas de las proteínas de los antígenos que involucran múltiples vías patogénicas, lleva a alimentos una nueva definición conceptual. Cualquier alimento puede precipitar una respuesta alérgica, Las guías diagnósticas definen la EEo como un trastorno pero pocas familias de proteínas son responsables de la gran clínico aislado del esófago, que se diagnostica por las carac- mayoría de reacciones alérgicas: huevo, leche, cacahuate, nueterísticas clínicas y patológicas. En los pacientes con EEo es ces, pescado, mariscos, trigo y soya.2 más frecuente la diátesis alérgica concurrente, en particular, la Puede existir reactividad cruzada entre los alimentos sensibilización a alimentos que en la población general. (Cuadro 2). Los alérgenos mayores de los alimentos comLos estudios genéticos han mostrado una respuesta parten cierto número de características comunes, hidrotranscripcional única in vivo que defina la EEo y que pare- solubilidad de las glicoproteínas, tamaño (10 a 70 kDa), y ce ser parcialmente atribuible a la citocina TH2 IL-13.15 La estabilidad relativa al calor, ácidos y proteasas. Los alérge- 10 Reimpreso con autorización de: Ann Nutr Metab 2011;59(suppl 1):8–18 Dupont Cuadro 2. Tasas de reactividad clínica cruzada entre los alimentos2 Alergia a Alimentos relacionados Tasas aproximadas de reacción clínica Cacahuate La mayoría de frijoles 5% Nuez de árbol Otras nueces de árbol 35% (mayor para nueces, avellanas, pistaches) Un pescado Otros pescados 50% Marisco Otros mariscos 50% Granos Otros granos 20% Leche de vaca Leche de cabra/oveja, Leche de yegua Bovinos > 90% 5% 10% nos de alimentos animales comparten identidades de secuencias con sus homólogos humanos basadas en familias de proteínas, análisis de secuencias y relaciones evolutivas. Estas semejanzas, cuando son > 62%, excluyen la proteína como alergénica en los seres humanos.2,22 Diferencias de acuerdo con la preparación de los alimentos da.27,28 Por lo menos parcialmente, esto podría ser cierto para la leche. Estas diferencias en la tolerancia podrían deberse al papel de los epítopes de configuración, que son mucho más desnaturalizados por el calor que los epítopes lineales. Diagnosticar una AA potencial: obtener la historia clínica Como siempre en medicina, obtener un historia clínica cuidadosa y realizar una exploración física integral permiten, la mayor parte del tiempo, una buena evaluación del aspecto médico, al valorar los posibles precipitantes de la AA y aproximarse a la probable base fisiopatológica general, es decir, si el trastorno alérgico inducido por alimentos es mediado por IgE o no. La AA puede ser responsable de diferentes síntomas clínicos que pueden afectar la piel y el tracto digestivo y respiratorio. Los síntomas cutáneos son sobre todo dermatitis atópica y urticaria. Los síntomas digestivos son muy proteiformes e incluyen molestias permanentes (cólicos), regurgitación crónica o reflujo gastroesofágico, vómito, diarrea, estreñimiento, falla del desarrollo o sangre en las heces. Los síntomas respiratorios pueden manifestarse como asma o inclusive con algunos trastornos de oídos, nariz y garganta.29 Las circunstancias clínicas pueden variar de manera considerable. En lactantes pequeños, en especial en los alimentados con fórmula, la leche es el alérgeno más probable. En niños mayores, sobre todo en el caso del eccema, el papel potencial del huevo es el mayor. En el niño en crecimiento, el primer consumo de alimentos que contienen cacahuate puede precipitar una reacción aguda debida a una alergia que no se había notado antes. Los síntomas se sobreponen frecuentemente: por ejemplo, los niños con eccema sensible a la leche de vaca tienen a menudo síntomas GI, y estos pueden ser una pista importante del papel de la alergia a la leche de vaca en el eccema subyacente.3 La preparación de los alimentos puede afectar la alergenicidad. En los países occidentalizados, la alergia al cacahuate tiene una tasa mayor, y los cacahuates se consumen asados, mientras que en China, en donde el cacahuate es principalmente hervido o frito, la prevalencia de alergia es baja.23 A temperaturas elevadas, asar los cacahuates > 180 °C lleva a la reacción de Maillard que parece aumentar la estabilidad y la alergenicidad.24,25 Dos estudios sugieren que la porción de carbohidratos de ciertas glicoproteínas podría desempeDiagnosticar los alérgenos de los alimentos: ñar un papel significativo en la alergenicidad de las proteílas diferentes pruebas nas de los alimentos, con la demostración reciente de antiDiferentes pruebas pueden ayudar en el diagnóstico de la AA, cuerpos IgE dirigidos al epítope del carbohidrato llevando a p. ej., muestras de sangre, la reactividad cutánea, los procedisíntomas clínicos. La Ara h 1 glucosilada (un alérgeno mamientos GI en los trastornos eosinofílicos, así como un reto yor del cacahuate), a diferencia de la forma desglucosilada, oral con alimentos (ROA) para detectar el ingrediente responfunciona como un adyuvante TH2 y activa las células densable en el alimento. dríticas hacia la maduración 26 Los alérgenos de alimentos animales de las células TH2. La emulsificación (mantecomparten identidades de secuencias Anticuerpos IgE específicos quilla de cacahuate) podría audel alimento y diagnóstico con sus homólogos humanos basadas de ‘componente resuelto’ mentar la alergenicidad a través de un efecto adyuvante.23 La prueba de RAST® (RadioAen familias de proteínas, análisis de Estudios recientes sugiellergoSorbent, Phadia, Estosecuencias y relaciones evolutivas. ren que 70 a 80% de los niños colmo Suecia) se aplica para pequeños alérgicos al huevo determinar los niveles de IgE pueden tolerar formas cocinadas (desnaturalizadas por el ca- específica (IgEe) del alimento en muestras de sangre. Los nilor) de la proteína mientras que reaccionan a la forma cru- veles detectables de IgEe en la sangre pueden indicar alergia Alergia a los alimentos: fisiopatología y diagnóstico Reimpreso con autorización de: Ann Nutr Metab 2011;59(suppl 1):8–18 11 Cuadro 3. Valores de corte diagnósticos de los niveles de IgEe y PC para el diagnóstico de APLV con un valor predictivo ≥ 95% (Du Toit y colaboradores3) Valor predictivo IgE sérica específica de la leche de vaca Todos los niños Lactantes ≤ 2 años Tamaño de la roncha en las PC Niños > 2 años Lactantes ≤ 2 años ≥ 15 kU/L ≥ 5 kU/L ≥ 8 mm ≥ 6 mm Los niveles de IgE se determinaron con la utilización de Phadia ImmunoCAP. Las PC se practicaron con extractos comerciales. cuando se asocian con reactividad clínica, o sólo sensibilización si el paciente tolera el alimento. Por ejemplo, en un determinado paciente, un nivel de IgEe al cachuate de 2.5 kU/L puede asociarse con riesgo de choque anafiláctico o puede indicar sólo sensibilización. Sin embargo, la probabilidad de una reacción clínica aumenta con las concentraciones mayores de IgE,30 y los valores de corte de la IgEe predictivos de reactividad clínica están ya disponibles para diferentes ingredientes de los alimentos (Cuadro 3). Utilizar estos valores de umbral, así como la dieta, la edad, la enfermedad y los protocolos de retos deben también tomarse en cuenta. Los valores asociados con una alta probabilidad de alergia clínica (p. ej., > 95%) son a menudo referidos como valores diagnósticos. Los valores generalmente no correlacionan muy bien con la gravedad de la reacción [2 y referencias]. Disminuir la IgEe en la sangre puede relacionarse con aumento de la probabilidad de resolución de la alergia.31 Esto permite también determinar si la alergia es transitoria (tipo 1) o permanente (tipo 2). Además, los cambios en la IgEe a la proteínas particulares de cada alimento, como la caseína y/o el suero de la leche, podrían ayudar a definir mejor la gravedad y el pronóstico.32 Por lo tanto, la investigación se enfoca ahora en la sensibilización a los alérgenos específicos que constituyen los ‘componentes’ del extracto del alimento, que pueden tener diferentes valores pronósticos. Por ejemplo, la caseína es relativamente estable al calor y resistente a la digestión de la pepsina; estas características son probablemente responsables de la variabilidad de la reactividad y de la tolerancia clínica a la leche y a los productos lácteos entre los pacientes y en el mismo paciente a través del tiempo.3 Los perfiles de epítopes específicos pueden desempeñar un papel: la IgEe puede unirse a epítopes de configuración, es decir, áreas de un alérgeno que dependen de la proteína son más lábiles y tal vez responsables de alergia leve/transitoria, mientras que en otros casos, la IgEe puede unirse a epítopes lineales que son más estables, y que podrían sugerir una alergia grave persistente.33 El SAO está relacionado con sensibilización cruzada entre los alérgenos de los alimentos y los aeroalérgenos, p. ej, entre el 12 Reimpreso con autorización de: Ann Nutr Metab 2011;59(suppl 1):8–18 alérgeno Bet v 1 del polen del abedul y la proteína de la manzana Mal d 1. En este caso, no hay sensibilización específica al alimento en particular, aun cuando el paciente que reacciona oralmente a este alimento puede tener una reacción cutánea (prueba cutánea) positiva y un nivel de IgEe al parecer aumentado. Por lo tanto, diagnosticar el SAO requiere la prueba concomitante de la reacción cruzada potencial entre los alérgenos de los alimentos y los aeroalérgenos. La reciente disponibilidad de un microconjunto de IgEe (Phadia Isac®), que permite la detección de IgEe de un lote de alimentos y aereoalérgenos, podría mejorar considerablemente este diagnóstico de ‘componente-resuelto’, aunque se requiere todavía mayor investigación.34 Un enfoque indirecto de la sensibilización puede ser proporcionado por una prueba de activación de basófilos al utilizar citometría de flujo, que valora el porcentaje de basófilos que tienen activación de IgEe y expresan el marcador CD63 después de la estimulación in vitro con alérgenos. La técnica podría resultar en modalidades futuras de diagnóstico.35,36 Estudios recientes sugieren la contribución de una cadena ligera libre de inmunoglobulina además de la IgE en la reacción alérgica a las proteínas de la leche de vaca (PLV).37 Pruebas cutáneas Las PC, cuando son positivas proporcionan un medio rápido para detectar sensibilización en trastornos mediados por IgE. Una PC positiva con especificidad < 100% no necesariamente prueba que el alimento es causal. En contraste, una PC negativa, con una precisión predictiva negativa > 90%, sugiere la ausencia de reactividad alérgica mediada por IgE. Sin embargo, Por lo tanto, diagnosticar el SAO requiere pruebas concomitantes de la posible reacción cruzada entre los alérgenos de los alimentos y los aeroalérgenos esto puede no ser cierto para la alergia a la leche en lactantes pequeños, cuya reactividad cutánea está frecuentemente por detrás del aumento de la IgEe en la sangre. El mayor tamaño de la roncha en la PC correlaciona con una mayor probabilidad de alergia clínica (Cuadro 3), y algunos estudios definen el tamaño ‘mínimo’ de la roncha, por arriba del cual se puede diagnosticar alergia basándose en el resultado de la prueba38-40 Para las frutas y vegetales, los extractos comercialmente preparados pueden a menudo ser inadecuados por la labilidad de los alérgenos; los alimentos frescos pueden ser mejores para las pruebas. Dupont Figura 1. Aspectos endoscópicos de la EEo. a Material granular blanco. b Surcos. c Anillos esofágicos circulares: traquealización del esófago. Prueba del parche para la atopia Pueden presentarse reacciones clínicas a pesar de IgEe indetectable de los alimentos en el suero; 10 a 25% de los casos se presentaron con reacciones clínicas de acuerdo con un estudio,41 y los porcentajes son probablemente marcadamente mayores en lactantes, subrayando la necesidad de más instrumentos clínicos diagnósticos. Varios estudios valoraron la utilidad de la prueba del parche para la atopia en trastornos en los que los síntomas son retardados después de la ingestión del alimento, como la dermatitis atópica, la EEo, y FPIES.42-44 La prueba del parche para la atopia se realiza al colocar alimentos debajo de las cámaras de Finn durante 48 horas y remover luego la cámara y leer las modificaciones de la piel 24 horas después. La prueba del parche para la atopia parece prometedora, especialmente porque en ausencia de reacciones mediadas por IgE, es la única prueba diagnóstica que permite la detección de reactividad al alimento. Sin embargo, hasta la fecha no hay reactivos, métodos de aplicación o interpretaciones estandarizados. En Francia, se ha comercializado un parche para la atopia listo para usarse, se prepara el terreno para la estandarización de la técnica.45 Procedimientos GI Varios estudios y procedimientos podrían requerirse para valorar una posible alergia GI, en particular la endoscopía (Figura 1) con biopsia obligada para el diagnóstico de EEo.46 Histológicamente, uno o más especímenes de biopsia deben mostrar inflamación predominante por eosinófilos. Con algunas excepciones, 15 eosinófilos/campo de alto poder (valor máximo) es considerado un umbral mínimo para el diagnóstico de EEo. La enfermedad está confinada al esófago, y se deben excluir otras causas de eosinofilia esofágica, específicamente la eosinofilia esofágica que responde a inhibidores de la bomba de protones.14 Alergia a los alimentos: fisiopatología y diagnóstico Reto oral con alimentos La AA varía con el tiempo y generalmente declina para la mayoría de los alérgenos, al precipitar reacciones menos graves: se requieren pruebas clínicas regularmente de la reactividad a los alimentos. Durante el ROA, el alimento responsable es introducido bajo supervisión médica estricta para determinar la tolerancia o la reactividad clínica. Existe el riesgo de reacción grave; por lo tanto, el personal médico debe estar adecuadamente entrenado con medicamentos y equipo para tratar la anafilaxia, de acuerdo con procedimientos validados bien conocidos. Se recomienda precaución en especial después de una dieta prolongada de eliminación.47 El reto se suspende sólo en presencia de síntomas objetivos o subjetivos persistentes.48 El escrutinio se basa casi siempre en un ROA abierto o ciego sencillo probado que sea seguro si se lleva a cabo en un consultorio del alergólogo,49 mientras que el ROA doble ciego, controlado con placebo está restringido generalmente a estudios clínicos de trastornos en los que el resultado del reto abierto es dudoso. Numerosas revisiones han descrito los procedimientos implicados en el ROA.50, 51 Un reporte reciente de un Grupo de Trabajo describe el ROA en una guía integral orientada clínicamente.48 Cuando el reto ciego es negativo, debe confirmarse mediante la administración de alimento supervisado de una ración típica en su forma natural para descartar resultados falsos negativos del reto (aproximadamente 1 a 3%). En caso de trastornos crónicos, el alimento responsable es parte de la dieta. Por lo tanto, la prueba incluye primero un periodo de eliminación del posible alimento precipitante para determinar si los síntomas desaparecen, antes de pasar a un ROA para diagnóstico. Diagnosticar el patrón clínico Basados en las diferentes pruebas y situaciones clínicas (Cuadro 4), es ahora posible, y quizá mejor, clasificar a los pacientes Reimpreso con autorización de: Ann Nutr Metab 2011;59(suppl 1):8–18 13 no sólo en referencia al alérgeno responsable, sino también a un patrón clínico.2 Esto permite una mejor comprensión de los trastornos clínicos, y una mejor información para los padres del paciente de la gravedad de los posibles episodios agudos y del pronóstico del trastorno. Trastornos mediados por IgE Síndrome de alergia oral. El síndrome de alergia oral (o relacionada con polen-alimentos) se caracteriza por prurito, edema leve confinado a la cavidad oral, que raras veces progresa más allá de la boca (7%) o anafilaxia (< 2%). Puede aumentar después de la estación del polen, tal vez debido a la estimulación de la producción de IgE, y corresponde con la sensibilización a las proteínas del polen por la vía respiratoria, al derivar en una IgE que se une a ciertos homólogos, de forma común proteínas lábiles de los alimentos de ciertas frutas/vegetales (p. ej., Mal d 1 de la manzana y Bet v 1 del abedul). El SAO se presenta sólo en pacientes con alergia establecida al polen, y por lo tanto es más frecuente en adultos que en niños pequeños, con frutas/vegetales crudos a diferencia de las formas cocinadas, que son toleradas. Algunos ejemplos de las relaciones con el abedul (manzana, durazno, pera y zanahoria) y ambrosía (melón); puede durar incluso con las variaciones estacionales. Urticaria/angioedema. La urticaria/angioedema es en general precipitada por la ingestión del alimento responsable o por contacto directo con la piel (urticaria por contacto), al causar urticaria aguda. El alimento está mucho menos involucrado en la urticaria crónica (2%). El SAO se presenta sólo en pacientes con alergia establecida al polen, y por lo tanto es más frecuente en adultos que en niños pequeños, con frutas/vegetales crudos a diferencia de las formas cocinadas, que son toleradas. Anafilaxia. A menudo progresa rápido, y la reacción de múltiples órganos y sistemas puede incluir colapso cardiovascular, acompaña a otros síntomas de la reacción alérgica inducida por alimentos, como rinitis, asma, o prurito grave. Se relaciona con la liberación masiva de histamina pero no siempre con alto nivel de células cebadas triptasa. Cualquier alimento puede desencadenar esta reacción. Por lo general los responsables son el maní, frutos secos, mariscos, pescado, leche y huevo. Rinitis y asma. Pueden estar acompañadas por múltiples situaciones. Los síntomas pueden acompañar a una reacción alér- 14 Reimpreso con autorización de: Ann Nutr Metab 2011;59(suppl 1):8–18 gica, o bien, presentarse durante el choque anafiláctico (ver información anterior). Los síntomas pueden ser detonados por inhalación de proteínas aerolizadas del alimento, como el pescado o los mariscos, en lactantes/niños más que en adultos, excepto por algunas enfermedades ocupacionales, como el asma del panadero. En los lactantes, la rinitis crónica temprana y los episodios repetidos de otitis media o bronquiolitis/asma pueden estar relacionados con el consumo de algunos alérgenos de los alimentos, como la leche o el trigo. Trastornos mixtos mediados por IgE y no mediados por IgE Esofagitis eosinofílica. Una entidad distinta que ocurre sobre todo en niños de 5 a 15 años de edad, la EEo, parece estar relacionada con AA, y en menor grado con aeroalérgenos en la mayoría de casos. Parece que la prevalencia de casos nuevos de EEo en niños aumenta, y la incidencia anual podría ser aproximadamente de 1/10 000 habitantes.1 Los síntomas están dominados por los síntomas convencionales de reflujo, pero incluyen también dolor abdominal y disfagia, altamente específicos de la EEo. Se ha demostrado también un espesor significativamente aumentado de la pared esofágica en los pacientes con EEo. El tratamiento incluye evitar el alérgeno y si no es efectivo, el tratamiento con esteroides locales. Otros trastornos eosinofílicos. Las gastroenteropatías eosinofílicas diferentes de la EEo están menos claramente definidas, pueden variar en los sitios y el grado de inflamación eosinofílica, y pueden simular el síndrome del intestino irritable. Son tal vez persistentes. En general responden a una dieta de eliminación, e inclusive más a una fórmula basada en aminoácidos, pero la persistencia de la enfermedad ha sido demostrada 2.5 a 5.5 años después del inicio.52 La proctocolitis eosinofílica se caracteriza por sangrado rectal, con 20% aproximadamente de los casos causados por alergia CMP (CMPA), diarrea y cólico, y ocurre en bebés de 0 a 24 meses de edad, inclusive cuando reciben lactancia materna exclusiva.53, 54 Eccema. La dermatitis atópica se asocia con alimentos en 35% de los niños con enfermedad cutánea moderada a severa. Esta alta prevalencia podría relacionarse con la dirección de las células T que responden a los alimentos en la piel, que podría ser mayor en lactantes que en niños y adultos. Los alérgenos mayores involucrados son huevos y leche, en especial esta última. La enfermedad puede típicamente resolverse con la desaparición de la AA pero reaparece en niños predispuestos que desarrollan alergia a los ácaros del polvo de la casa o a otros aeroalérgenos. Trastornos no mediados por IgE FPIES alimenticio. Afecta sobre todo a lactantes y muy a menudo se resuelve después de los dos años de edad. Durante Dupont Cuadro 4. Patrones clínicos de las alergias comunes a los alimentos Síntomas Comentarios Trastornos mediados por IgE SAO prurito, edema leve confinado a la cavidad oral, más frecuente en adultos que en niños raras veces progresa más allá de la boca (7%) o pequeños anafilaxia (< 2%) Urticaria/ angioedema detonadas por ingestión o por contacto directo típicamente aguda en naturaleza; el alimencon la piel to está menos involucrado en los casos crónicos relacionados con la liberación masiva de mediadores, p. ej., histamina Anafilaxia rápidamente progresiva, reacción alérgica: rinitis asma, prurito grave la reacción de múltiples órganos-sistemas puede incluir colapso cardiovascular Rinitis y asma detonados por inhalación de proteínas del puede estar relacionado con el consumo de un alimento aerolizadas, p. ej., pescado o mariscos alérgeno mayor del alimento, p. ej., leche o trigo Trastornos mixtos mediados por IgE y no mediados por IgE EEo reflujo GI, dolor abdominal y disfagia entidad distinta, principalmente en niños de 5-15 años de edad Otros trastornos eosinofílicos menos claramente definidos, pueden variar en cuanto al sitio y grado de inflamación eosinofílica, puede simular el síndrome del intestino irritable; probable enfermedad cutánea persistente moderada a grave proctocolitis causada por APLV (20%) diarrea y cólico en lactantes, inclusive cuando reciben lactancia materna exclusiva, asociada con alimentos en 35% de los niños, particularmente a la leche y al huevo, afecta a los lactantes y generalmente desaparece después de los 2 años de edad; los alimentos responsables son leche de vaca, soya, arroz y avena Eccema/dermatitis atópica FPIES Síndrome de enteropatía inducida por proteínas Dismotilidad GI emesis, diarrea, falla del crecimiento y letargo después de la eliminación y reexposición, los síntomas pueden ser graves, con emesis, diarrea e hipotensión (15%) que se presenta 1-5 h después de la ingestión, diarrea prolongada, afecta a los lactantes y generalmente desapaalgunas veces asociada con vómito, que puede rece después de los 2 años de edad, puede resultar en malabsorción y falla del crecimiento ser difícil de distinguir de la enfermedad celiaca mecanismo incierto; el paciente presenta anomalias de la motilidad GI trastornos de la motilidad GI son comunes en los lactantes y en la infancia temprana y son compartidos por muchos trastornos IgE y no IgE inducidos por PLV la exposición crónica al alimento, el niño sufre de emesis, diarrea, falla del crecimiento y letargo. Después de la eliminación y reexposición, los síntomas pueden ser graves, con emesis, diarrea e hipotensión (15%) 1 a 5 horas después de la ingestión. Los alimentos responsables son leche de vaca, soya, arroz y avena. Recientemente, se han reportado cuatro casos de FPIES en bebés con lactancia materna.55 Los mecanismos podrían involucrar una respuesta aumentada del TNF-α y una respuesta disminuida al TGF-β. Para evitar reacciones adversas, p.ej., deshidratación que lleva a shock después del reto con alimento, este síndrome debe ser excluido, ya que se presentan reacciones graves incluso en ausencia de IgEe detectable al alimento correspondiente. Síndrome de enteropatía inducido por proteínas de los alimentos. Los síntomas comprenden diarrea crónica, algunas veces asociada con vómito, que puede resultar en malabsorción y falla del crecimiento. La historia natural es similar a otras formas de AA no mediada por IgE que se presenta en la infancia y se resuelve hacia 1 a 2 años. Los hallazgos histológicos incluyen inflamación de la mucosa y distorsión de la arquitectura vellosa con una distribución en “placas”, característica que puede ser difícil de distinguir de la enfermedad celiaca no tratada.3 Alergia a los alimentos: fisiopatología y diagnóstico Reimpreso con autorización de: Ann Nutr Metab 2011;59(suppl 1):8–18 15 Síntomas clínicos que sugieren APLV Valoración clínica ± pruebas para la APLV Sospecha de APLV Dieta de eliminación: FEH o FAA si el niño rechaza la FEH Figura 2. Árbol de decisión que resume las recomendaciones del French Society of Pediatrics for diatary treatment of CMPA in chilhood. FAA = fórmula basada en aminoácidos; FEH = fórmula extensamente hidrolizada (Dupont et al., reproducido con autorización58). Mejoría Sin mejoría Reto con PLV FAA Sin síntomas de APLV Reanudar PLV en la dieta y seguimiento Mecanismo incierto: dismotilidad GI La APLV puede presentarse con una variedad de anormalidades de la motilidad GI, incluidos vómito, reflujo gastroesofágico y diarrea.3 Los trastornos alérgicos de la motilidad GI son comunes en la lactancia y en la infancia temprana, y son compartidos por muchos trastornos inducidos por APLV IgE y no IgE, sin etiqueta fácil de acuerdo con el síndrome mencionado arriba. Diagnóstico del árbol de decisiones: el ejemplo de la APLV La APLV tiene una característica particular, en lactantes alimentados con fórmula, la leche es la principal, si no es que la única fuente de proteínas, y por lo tanto el esquema terapéutico de una APLV sospechada en el niño debe adaptarse tanto por los pediatras como por los médicos generales que pueden encontrar a menudo esta enfermedad. Varios autores o grupos de trabajo3, 29, 56, 57 han sugerido diagramas de decisión que permiten el diagnóstico de este trastorno al basarse en los síntomas y en el uso de las fórmulas de reemplazo que pueden ser hidrolizados de PLV o una fórmula basada en aminoácidos para los niños que no toleran estos hidrolizados. El diagrama presentado en la Figura 2 muestra la proposición recientemente publicada por el Nutrition Committee of the French Society of Pediatrics.58 Explicación de la enfermedad a los padres: algunas ideas La AA es difícil de comprender para los padres así como para los médicos generales, en especial porque se carece en gran parte de la educación sobre este tema en las escuelas de me- 16 Reimpreso con autorización de: Ann Nutr Metab 2011;59(suppl 1):8–18 Síntomas de APLV Mantener dieta de eliminación de PLV ≥ 6 meses hasta los 9-12 meses de edad Considerar exposición alimenticia baja a PLV y posibilidades inmunoterapéuticas si persiste la APLV >2-3 años dicina. Aquí están algunos conceptos que pueden tocarse por los médicos directamente para explicar a los padres cuando se enfrentan a este tipo de trastorno. ¿Qué tipo de alergia es? Explicar que una clase de inmunoglobulinas (p. ej., IgE) es responsable de una alergia, pero que algunas alergias son mediadas por IgE y algunos no lo son. Para detectar una alergia mediada por IgE es necesaria una muestra de sangre para la prueba (que mide el nivel sérico de IgEe). Sin embargo, una prueba ‘negativa’ no puede descartar una alergia que no es mediada por IgE. Las reacciones de la APLV mediadas por IgE se presentan a menudo en los siguientes 20 minutos de la exposición y siempre en las dos horas siguientes. Las reacciones inmunes no mediadas por IgE son típicamente más retardadas. ¿Cuál alérgeno es responsable de los síntomas? En niños pequeños, las alergias a la leche de vaca tienden a dominar, mientras que esto no es así posteriormente: las alergias al trigo, huevo y cacahuate tienden a superarse después de la alergia a la leche después de un año de edad. ¿Puede la leche materna ser responsable de la alergia? (Pregunta muy frecuente) La pregunta no es apropiada. La leche materna en sí no es responsable de la alergia. Sin embargo, la leche materna es capaz de transmitir pequeñas cantidades de alérgenos, como la leche de vaca al tracto digestivo del lactante, y los lactantes reaccionarán sensibles a estos alérgenos. El tratamiento no es suspender la lactancia materna sino empezar una dieta de eliminación en la madre. Dupont ¿Cuándo se sensibiliza el niño al alérgeno? La respuesta es difícil todavía: la sensibilización pudo haber ocurrido in útero (probablemente a través de la deglución de líquido amniótico), después del nacimiento, a través del tracto digestivo (el llamado “biberón peligroso” administrado en el pabellón de maternidad en los primeros días de la vida, o alérgenos transmitidos a través de la leche materna o bien administrada al inicio de los alimentos complementarios), a través de la inhalación de partículas o inclusive a través del contacto con la piel ¿Cuál es la razón por la que algunos niños reaccionan a la leche o al huevo tratados con calor y otros no? El calor transforma el alérgeno y modifica su estructura en algunos sitios. Si estos sitios son los involucrados en la reactividad del niño a los alérgenos, el niño tolerará el alimento calentado inclusive aunque no tolere el alimento crudo. ¿Cuál es la relación con la enfermedad alérgica? Esto depende de la reacción de la AA que sufre el niño. Cuando los niños tienen APLV mediada por IgE, quizá tienen eccema, por lo menos 25% de los niños con APLV desarrollan AA adicionales y los lactantes con AA tienen riesgo de desarrollar asma. Además, el asma en si es un factor de riesgo de reacciones alérgicas más graves inducidas por alimentos. Si la APLV no es mediada por IgE, entonces la mayor parte del tiempo es una enfermedad aislada autolimitada. Conclusión La AA ha sido transformada por la disponibilidad y la mejoría constante de los alimentos dietéticos de reemplazo, y más recientemente a través de la investigación de las técnicas de desensibilización, que parecen afectar el resultado de las AA prolongadas. Entre tanto, nuevos aspectos de la enfermedad, tales como la EEo, parecen ampliarse, sobre todo en relación con el origen de la enfermedad. El desarrollo de tratamientos futuros requiere una perfecta descripción del patrón clínico de la enfermedad y que la investigación se enfoque en los mecanismos fisiopatológicos en los prometedores estudios que se realizan. Declaración de conflictos de interés El autor declara que no existen conflictos de interés económicos o de otro tipo en relación con el contenido de este artículo. La redacción de este artículo fue apoyada por el Nestlé Nutrition Institute. Referencias 1 2 3 4 5 6 7 8 9 Husby S: Food allergy as seen by a paediatric gastroenterologist. J Pediatr Gastroenterol Nutr 2008; 47:S49–S52 Sicherer C, Sampson HA: Food allergy. J Allergy Clin Immunol 2010; 125(suppl 2):S116– S125. Du Toit G, Meyr R, Shah N, Heine RG, Thomson MA, Lack G, Fox AT: Identifying and managing cow’s milk protein allergy. Arch Dis Child Educ Pract Ed 2010; 95: 134–144. Chehade M, Mayer L: Oral tolerance and its relation to food hypersensitivities. J Allergy Clin Immunol 2005; 115: 3–12. 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