Download Guía de Alimentación y Menopausia Guía de Alimentación
Document related concepts
Transcript
Guía de Alimentación y Menopausia Autor: Gregorio Varela Moreiras Catedrático de Nutrición y Bromatología. Director del Departamento de Nutrición, Bromatología y Tecnología de los Alimentos, Universidad San Pablo CEU de Madrid. Presidente de la Fundación Española de la Nutrición (FEN) y de la Sociedad Española de Nutrición (SEN) Coautores: Víctor Rafael García Vicente Antonio Morales Martínez Escuela Superior de Hostelería y Turismo de Madrid 1 ; 2008 ITALFARMACO, S.A. Reservados todos los derechos. Queda prohibido reproducir parte alguna de esta publicación, cualquiera que sea el medio empleado, sin el permiso previo de ITALFARMACO, S.A. Diseño, composición e impresión: Marketteam y Publicidad, S.L. Fotografías: Sacha 3 SALUD ÓSEA Y OSTEOPOROSIS Módulo 4 Alimentación y Menopausia. Mod. 4 SALUD ÓSEA Y OSTEOPOROSIS CONTENIDOS MÓDULO 3: SALUD ÓSEA Y OSTEOPOROSIS 1. ¿Qué es la osteoporosis?. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 6 2. ¿Qué personas están más expuestas a padecer osteoporosis?. Factores de riesgo. . . . . . . . . . . . . . . . 8 3. ¿Cuáles son las consecuencias de la osteoporosis?. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 12 4. Recomendaciones para una dieta osteo-saludable. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 13 5. Interés potencial de algunos productos en la etapa de la menopausia.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 14 6. Recetas saludables: Croquetas de bacalao. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 17 Berenjenas rellenas . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 19 Solomillo Ibérico a la naranja con pisto de mango con frutos rojos. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 21 Tiramisú. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 23 7. Bibliografía recomendada.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 25 8. Páginas Web de interés. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 25 5 Alimentación y Menopausia. Mod. 4 SALUD ÓSEA Y OSTEOPOROSIS 1. ¿Qué es la osteoporosis? La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha definido la osteoporosis como el segundo problema más importante de salud después de las enfermedades cardiovasculares. Afecta más a las mujeres que a los hombres. La menopausia se asocia con la pérdida de densidad ósea que puede conducir a osteoporosis, generalmente asintomática y, por tanto, no diagnosticada. Es actualmente uno de los principales problemas de salud pública en las mujeres y seguramente aumentará en los próximos años, paralelamente al envejecimiento de la población. Es una enfermedad multifactorial en la que la dieta a lo largo de la vida, la situación hormonal, la herencia genética y el estilo de vida intervienen de forma conjunta. La osteoporosis es una enfermedad en la que los huesos se vuelven menos compactos, más frágiles, y se pueden romper de manera espontánea tras pequeños golpes. Se trata de una alteración del metabolismo óseo, en la que la cantidad de hueso por unidad de volumen disminuye y el hueso se hace poroso, se produce una desorganización de la estructura ósea y un incremento del riesgo de fracturas. Una persona tiene osteopenia, cuando su densidad ósea se encuentra entre 2.5 y 1 desviación estándar por debajo del valor máximo de masa ósea de la población; osteoporosis si se encuentra por debajo de 2.5 veces dicha desviación estándar; y osteoporosis establecida o severa, si además ya ha sufrido una fractura. En la población española dicho máximo de densidad ósea se ha obtenido para una amplia muestra de población y se produce en torno a los 30 años (Figura 1). A partir de ese momento la resorción predomina sobre la formación de hueso y se comienza a perder masa ósea. Cuanto mayor sea el pico de masa ósea en la juventud mayor protección se tendrá frente a la osteoporosis en la postmenopausia. Aunque la mayoría de los autores consideran que la mejor prevención de la osteoporosis hay que realizarla en la infancia y la adolescencia, los programas de intervención en mujeres adultas y de edad también son útiles para reducir la pérdida de hueso. Figura 1. Concepto de osteoporosis Densidad Mineral ósea (g cm-2) Pico de masa ósea Pérdida postmenopáusia -1 SD -2.5 SD OSTEOPENIA Pérdida por la edad OSTEOPOROSIS 20 30 40 50 60 70 80 Edad (años) La osteoporosis se considera “la epidemia silenciosa del siglo XXI” porque la pérdida de hueso es gradual y no se detecta hasta que está muy avanzada o se ha producido la primera fractura. Predispone a fracturas vertebrales, de cadera y de muñeca. Son precisamente las fracturas las que originan los síntomas de esta enfermedad y las que condicionan su importancia y repercusión socio-sanitaria, pues una vez que se ha producido una fractura es improbable que el paciente recupere totalmente la salud, y disminuye drásti- 6 Alimentación y Menopausia. Mod. 4 SALUD ÓSEA Y OSTEOPOROSIS camente su calidad de vida. El tratamiento de las fracturas y la rehabilitación, o incluso la discapacidad permanente, implican unos costes sanitarios muy elevados. Aproximadamente el 30% de las mujeres españolas mayores de 50 años tiene baja densidad ósea y en el último año más de 1.5 millones de personas presentaban osteoporosis con indicación terapéutica. En la Unión Europea se ha estimado que en los próximos 50 años se duplicará la incidencia anual de fracturas de cadera y que una de cada tres mujeres y uno de cada nueve hombres mayores de 80 años sufrirá una fractura de cadera. El hueso es un tejido activo que constantemente está remodelándose. Consta de una matriz orgánica formada por colágeno y células activas, osteoclastos y osteoblastos, y de minerales, principalmente calcio, fósforo y magnesio, que le confieren dureza. En la osteoporosis existe un desajuste en el remodelado óseo y predomina la pérdida de hueso (resorción) respecto a la formación. Hay dos tipos distintos de hueso: cortical (constituye el 80% del esqueleto) y travecular (20%). El hueso cortical es más denso que el travecular y tiene fundamentalmente una función estructural, mientras que el hueso travecular es más poroso y tiene una función más metabólica. Se distinguen dos tipos de osteoporosis primaria: • Tipo I o postmenopáusica, como resultado de la deficiencia de estrógenos. Afecta principalmente al hueso travecular de mujeres de más de 50 años, provocando fracturas en vértebras y muñecas. • Tipo II o senil. Se produce en hombres y mujeres de más de 70 años. Afecta al tejido travecular y cortical y provoca mayoritariamente fracturas de cadera, que son las de mayor coste y las más incapacitantes. 7 Alimentación y Menopausia. Mod. 4 SALUD ÓSEA Y OSTEOPOROSIS 2. ¿Qué personas están más expuestas a padecer osteoporosis? Cualquier persona, aunque hay factores de riesgo muy bien definidos, son las “banderas rojas” de la osteoporosis: • Las personas que tienen antecedentes familiares de esta enfermedad. • Las mujeres, sobre todo, después de la menopausia. • Las personas mayores. • Las que toman poco calcio y vitamina D. • Las personas poco activas, por ser muy sedentarias o por problema de enfermedad. • Las que toman algunas medicinas en exceso y durante mucho tiempo: cortisona o sus derivados, antiepilépticos, hormonas tiroideas. • Las que fuman o toman alcohol o café en exceso. A continuación, se comentan de manera más detallada los principales factores de riesgo (modificables y no modificables) que influyen en el desarrollo de la osteoporosis: • Genéticos, que determinan el 50-75% del pico máximo de masa ósea. Hasta el momento no se ha encontrado el gen de la densidad ósea. Se asume que un conjunto de genes condiciona la aparición de la osteoporosis. Por ejemplo, la edad de la menarquia (primera menstruación) y de la menopausia están determinadas genéticamente, así como la respuesta individual a estímulos positivos y negativos sobre el metabolismo del hueso. La raza caucasiana/asiática tiene mayor predisposición a sufrir osteoporosis respecto a la raza negra. • Ejercicio físico. El hueso responde a estímulos mecánicos y es importante realizar actividad física desde la infancia. El ejercicio es un importante componente del estilo de vida que contribuye al mantenimiento de la masa ósea, mientras que la inactividad incrementa la resorción. Además, la actividad física promueve la agilidad y la fuerza muscular. Actualmente la OMS recomienda realizar al menos 30 minutos diarios de actividad física. Hay dos tipos de ejercicio cuyos efectos mejorando la salud ósea están ampliamente demostrados. Los ejercicios de resistencia (actividades que requieren fuerza muscular como, por ejemplo, el levantamiento de pesas) y aquellos en los que músculos y huesos trabajan contra la gravedad, es decir, ejercicios en los cuales piernas y brazos soportan el peso corporal, por ejemplo: andar, subir escaleras, correr, bailar, hacer senderismo, gimnasia y jugar al fútbol. Sin embargo, actividades como la natación o el ciclismo no quedarían incluidas. • Peso corporal. Hay mayor riesgo de osteoporosis en mujeres con pesos muy bajos y disminuye el riesgo de osteoporosis en las que presentan sobrepeso, ya que sus huesos deben soportar más carga. • Menopausia. En la época perimenopáusica y en los 5 primeros años después de la menopausia la velocidad de pérdida de masa ósea es muy elevada debido a la disminución de estrógenos, posteriormente dicha pérdida se ralentiza. Los estrógenos intervienen directamente en el transporte de minerales como calcio, fósforo y magnesio en las membranas de las células de hueso, riñón e intestino. La absorción intestinal de estos minerales disminuye en ausencia de estrógenos y aumenta su excreción urinaria, situación acentuada además por la deficiencia de vitamina D. La pérdida de hormonas sexuales femeninas condiciona, por tanto, una menor incorporación de minerales en el hueso. Además, disminuye la actividad de los osteoblastos, lo que debilita la matriz ósea a lo largo del tiempo. • Edad. La pérdida de masa ósea aumenta progresivamente con la edad al predominar la resorción sobre la formación ósea. 8 Alimentación y Menopausia. Mod. 4 SALUD ÓSEA Y OSTEOPOROSIS • Alcohol. Una ingesta moderada de alcohol se ha relacionado positivamente con la densidad ósea en mujeres postmenopáusicas y en mujeres de edad avanzada. El alcohol estimula la producción adrenal de androstenediona y su conversión en estrona y también estimula la secreción de calcitonina lo que en ambos casos favorece un aumento en la masa ósea. Sin embargo, no debe estimularse a la población menopáusica a consumir alcohol por otros efectos dañinos que puede tener su uso excesivo, particularmente el riesgo de alcoholismo. • Medicamentos. Los corticosteroides son los fármacos cuyos efectos incrementando la resoción ósea más se conocen. También perjudican al hueso los tratamientos excesivos de tiroxina, metotrexato, heparina, anticonvulsionantes, heparina y ciclosporina C. • El tabaquismo tiene efectos perjudiciales sobre el hueso lo que podría deberse a un efecto antiestrogénico. Las mujeres fumadoras tienen una menopausia más temprana, mayor riesgo de enfermedades cardiovasculares y mayor riesgo de osteoporosis. Factores dietéticos • Calcio. El 99% del calcio corporal se encuentra en los huesos y el aporte constante de calcio a lo largo de la vida es necesario para que la estructura ósea sea correcta. La ingesta de calcio recomendada en la edad normal de la menopausia (alrededor de los 50 años) es de 1000 - 1200mg/día. Nuestro grupo de investigación ha constatado que una ingesta media de 1000mg/día en mujeres con más de un año en menopausia, que siguen una dieta y actividad física adecuadas, es suficiente para proteger el hueso (valorado a través de la densidad ósea y marcadores bioquímicos de resorción y formación). Sin embargo, asegurar una determinada cantidad de calcio ingerida no es garantía de salud ósea. Existen numerosas paradojas en las comparativas de prevalencia de osteoporosis entre países ricos y pobres, los primeros consumen aproximadamente 3 veces más calcio que los segundos y padecen más osteoporosis. Además de la menor esperanza de vida en los países en desarrollo y de factores genéticos, habría que considerar los factores relacionados con el sedentarismo y los dependientes de la dieta, ya que numerosos componentes de los alimentos interfieren con la absorción y retención corporal de calcio. • Vitamina D. Las ingestas recomendadas actuales son de 5μg/día en las mujeres adultas hasta los 50 años y de 10μg/día después de los 50 años. Aunque no es fácil modificar la dieta drásticamente desde el día del quincuagésimo cumpleaños, sí parece que en mujeres postmenopáusicas las ingestas inferiores a 5,5μg/día son insuficientes para proteger sus huesos y que la menopausia junto con la edad son factores que actúan conjuntamente. En este grupo de edad, la síntesis cutánea de vitamina D y su utilización pueden estar comprometidas por múltiples causas (menores depósitos cutáneos del precursor, menor capacidad renal de hidroxilación del metabolito activo, menor exposición al sol, etc.), por lo que es necesario prestar una especial atención para evitar deficiencias de esta vitamina y en determinadas ocasiones será necesario recurrir al uso de suplementos. • Otros nutrientes. Diferentes nutrientes actúan sobre el metabolismo óseo, bien porque inciden en la biodisponibilidad del calcio o porque directamente afectan al hueso. Entre ellos destacan los siguientes, que a grandes rasgos podríamos clasificar en favorecedores e inhibidores, desde el punto de vista de proteger al hueso en la situación menopáusica: Lactosa y oligosacáridos (favorecedores) En los niños la lactosa de la leche es un factor importante para favorecer la absorción cálcica. En adultos que presentan intolerancia a la lactosa o ancianos que rechazan la leche por diversos motivos, puede estimularse el consumo de productos lácteos bajos en lactosa o alimentos suplementados en calcio. Los oligosacáridos, por ejemplo los fructooligosacáridos, son hidratos de carbono complejos de cadena corta presentes en la leche humana y que desempeñan diferentes funciones en el desarrollo del recién nacido. En etapas posteriores, podrían tener también un papel importante, ya que alcanzan el colon donde fermentan y pueden actuar como prebióticos (estimulan el crecimiento de la flora bacteria). Algunos estudios señalan que favorecen la absorción del calcio que ha escapado a la absorción en el intestino delgado. En 9 Alimentación y Menopausia. Mod. 4 SALUD ÓSEA Y OSTEOPOROSIS este sentido, se han diseñado alimentos funcionales que incorporan dichos compuestos y existe un gran interés en conocer los beneficios de su consumo en distintos grupos de población. Ácido oxálico (inhibitorio) El ácido oxálico es el inhibidor más potente que se conoce de la absorción de calcio. El anión oxalato se une al calcio en el tracto gastrointestinal apareciendo oxalato cálcico en heces. Es abundante en vegetales y algunas frutas, como espinacas, legumbres, coles, remolacha, berenjena, apio, fresas, etc.; y en otros alimentos, té, cerveza, cacahuetes, chocolate, etc. Es posible diseñar dietas que no aporten cantidades altas de oxalatos, aunque es difícil, y problablemente no aconsejable, eliminarlos completamente de nuestra alimentación. Otras estrategias son desechar el agua de cocción de estos vegetales y evitar ingerirlos en la misma comida que los productos lácteos. Por otro lado, en individuos que padecen litiasis renal con predominio de cálculos de oxalato cálcico, es importante reducir la ingesta de oxalatos pero no es preciso reducir la ingesta de calcio de forma incontrolada, lo que provocaría un hiperparatiroidismo secundario y resorción ósea. Incluso el calcio de la dieta puede desempeñar un papel importante en la reducción de la absorción de oxalato exógeno en estos pacientes. Ácido fítico (inhibitorio) La influencia negativa de la fibra dietética sobre el calcio se ha sobre valorado, y cuando se separa su acción de la del fitato (inositol hexafosfato) que suele llevar asociado, se obtiene que la fibra afecta poco a la absorción del calcio, siendo el fitato el principal responsable del efecto inhibitorio que se ha observado en algunos estudios. Aún así, la influencia de los fitatos sobre el calcio es inferior a la del ácido oxálico. Además, el inositol hexafosfato pierde parcialmente sus grupos fosfato por los tratamientos culinarios y tecnológicos de preparación de los alimentos, lo que disminuye apreciablemente su poder secuestrante de calcio. Fósforo (inhibitorio) El fósforo es necesario para el crecimiento óseo. Pero en adultos el exceso de fósforo, particularmente la alta relación fósforo/calcio en la dieta, puede estimular la liberación de la hormona paratiroidea que incrementa la resorción ósea. La importancia de esta relación entre los dos minerales ha sido muy discutida y algunos autores indican que el efecto se debería sólo a la deficiencia de calcio. Otros investigadores están preocupados por la ingesta excesiva de ácido fosfórico a través de las bebidas de cola y procedente de aditivos alimentarios. Proteína animal (inhibitorio) Al igual que se ha indicado para el fósforo, la proteína es imprescindible para el mantenimiento de la estructura ósea. Sin embargo, la dieta española se caracteriza por un elevado aporte de proteína animal y se ha observado que existe una asociación negativa entre dicha ingesta y las fracturas osteoporóticas. El mecanismo de la interacción proteína animal-calcio se produce en el riñón y se relaciona con el incremento en la acidez provocada por los aminoácidos azufrados. Se ha calculado que por cada 50g de proteína extra ingerida se pierden por orina 60mg de calcio diarios. Para evitar la perdida de cantidades significativas de calcio, se recomienda una relación calcio/proteína (mg/g) ingeridos superior a 20. Por el contrario, las dietas ricas en proteína vegetal contribuyen a la conservación del esqueleto y deben recomendarse para prevenir la osteoporosis. Cloruro sódico (inhibitorio) El abuso en la utilización de sal de mesa (NaCl) o de alimentos procesados salados es también un factor hipercalciúrico. Se ha estimado que para excretar 100mmol de sodio (2,3g) se eliminan simultáneamente de 0,6 a 1,0mmol de calcio (24 - 40mg). Sin embargo, nuestro grupo de investigación ha constatado que dicha interacción desaparece cuando el principal anión acompañante del sodio es el bicarbonato. Potasio y magnesio (favorecedores) Se sabe que el potasio es uno de los elementos que antagonizan muchos de los efectos negativos en la salud atribuidos al sodio. Suplementos de potasio en forma de bicarbonato potásico son capaces de mejo- 10 Alimentación y Menopausia. Mod. 4 SALUD ÓSEA Y OSTEOPOROSIS rar el balance de calcio y los parámetros de formación ósea en mujeres postmenopáusicas. Se recomienda que la dieta aporte una relación molar potasio/sodio igual o superior a 1, para prevenir la osteoporosis y enfermedades cardiovasculares. Respecto al magnesio, en un estudio de dos años con mujeres osteoporóticas, se ha demostrado que la suplementación con magnesio es efectiva para retrasar la pérdida de masa ósea y reducir el número de fracturas. Cafeína (inhibitorio) La cafeína tiene un efecto diurético que estimula la eliminación de calcio por la orina. El consumo de 2 ó 3 tazas diarias de café se asocia con una reducción de la masa ósea vertebral. El té contiene menor cantidad de cafeína que el café, y las variedades de té verde contienen menos en comparación con el té negro. El abuso de bebidas refrescantes que contienen cafeína, que además acidifican el riñón, puede también representar una amenaza para la salud ósea. Vitaminas K y C (favorecedores) Diferentes proteínas del hueso dependen de las vitaminas K y C. La vitamina K interviene en la carboxilación de varias proteínas y la vitamina C es necesaria para las uniones de colágeno que mantienen la estructura del hueso. La suplementación con vitamina K incrementa la densidad ósea y reduce el riesgo de fracturas en mujeres postmenopáusicas. Sin embargo, el estudio de los efectos de la vitamina C se ha centrado más en los aspectos relacionados con el estado antioxidante que predisponen al padecimiento de enfermedades cardiovasculares. Componentes de los alimentos que influyen en la salud ósea Componente Efecto Calcio Mineral constituyente del hueso Vitamina D Favorece la absorción y retención cálcica Proteína animal En exceso incrementa la carga ácida renal y la excreción de calcio Sal (cloruro sódico) Calciuria Cafeína Calciuria Oxalato, fitato Inhiben la absorción cálcica Potasio, magnesio Efecto alcalinizante en el riñón. Reducen las pérdida de calcio por orina Vitamina K Favorece la formación ósea Recuerde: Cuantos más factores de riesgo tenga una persona, mayor es la probabilidad de sufrir osteoporosis. 11 Alimentación y Menopausia. Mod. 4 SALUD ÓSEA Y OSTEOPOROSIS 3. ¿Cuáles son las consecuencias de la osteoporosis? La fractura del hueso. Se calcula que esta enfermedad ocasiona más de 1,3 millones de fracturas de vértebras, cadera y muñeca en el mundo cada año. ¿Qué tipo de fracturas? • De cadera, las más graves e incapacitantes. • De vértebras • De muñeca ¿Puedo saber si tengo osteoporosis? Es una enfermedad que no ocasiona ningún síntoma hasta que se produce una fractura. Si se tiene uno o varios de los factores de riesgo, debe acudirse al médico para que se valore la situación. Una radiografía NO detecta la osteoporosis en la fase inicial. En la actualidad se dispone de la técnica llamada densitometría, que mide con precisión la masa ósea, y permite hacer un diagnóstico precoz de la enfermedad. ¿Se puede prevenir la osteoporosis? Hay que diagnosticarla precozmente mediante la densitometría y actuar sobre los factores de riesgo. 12 Alimentación y Menopausia. Mod. 4 SALUD ÓSEA Y OSTEOPOROSIS 4. Recomendaciones para una dieta osteosaludable La leche y en general los productos lácteos deben estar presentes en la dieta de la mujer en edad de menopausia. Indudablemente, proporcionan calcio de alta biodisponibilidad y vitamina D. Además, en el mercado existe una variedad de preparados enriquecidos en calcio y vitaminas. No obstante, el consumo excesivo de dichos productos no parece aportar protección extra a los huesos y podrían olvidarse otros alimentos necesarios para equilibrar la dieta y que también influyen positivamente en la salud ósea. La ingesta de frutas y vegetales se ha relacionado con una mayor densidad ósea en mujeres postmenopáusicas e incluso en hombres y mujeres de edad avanzada, lo que se relaciona con su aporte de proteína vegetal, magnesio, vitamina K y potasio. Algunas plantas son ricas en calcio de alta biodisponibilidad, por ejemplo las del género Brassica (brócoli, repollo). El consumo de fruta fresca y vegetales disminuye la excreción urinaria de ácidos y de calcio. Estos efectos beneficiosos concuerdan con la teoría de que una dieta alcalina protege el hueso equilibrando los metabolitos ácidos producidos principalmente por la proteína ingerida, ya que reduce la necesidad del hueso de ejercer su función amortiguadora y liberar fosfato cálcico. Nuestro equipo de investigación ha observado recientemente en mujeres postmenopáusicas que el consumo de un agua carbónica alcalina rica en sodio reduce las pérdidas urinarias de calcio sin modificar el remodelado óseo. El resultado parece deberse al carácter alcalino de dicha agua que compensaría el posible efecto calciúrico del sodio. Las leguminosas son una fuente vegetal de calcio, y aunque contienen fibra, oxalatos y fitatos que lo hacen poco biodisponible, deben estar presentes en una dieta orientada a prevenir la osteoporosis, por su aporte de proteína, su riqueza en potasio y magnesio y el hecho de que añaden poco sodio a la dieta. Carnes y pescados. Deben consumirse con moderación, para no incrementar la carga ácida renal debido al efecto de la proteína animal que proporcionan. El calcio de las espinas pequeñas de los pescaditos fritos, pescados en conserva, etc., se absorbe y utiliza bien en el organismo. Resumen de las características de la dieta y hábitos osteosaludables Dieta variada con lácteos, verduras, frutas y leguminosas Evitar el exceso de carnes, pescados y huevos Uso de sal y café con moderación Consumo de los lácteos preferentemente separados de los alimentos inhibidores de la absorción del calcio Uso de bebidas alcohólicas con moderación No fumar Realizar actividad física adecuada (pasear, gimnasia, etc.), mejor al aire libre Control en los regímenes de adelgazamiento 13 Alimentación y Menopausia. Mod. 4 SALUD ÓSEA Y OSTEOPOROSIS 5. Interés potencial de algunos productos en la etapa menopáusica Fitoesteroles Los fitoesteroles son sustancias vegetales que presentan una estructura química muy parecida a la del colesterol que evitan, parcialmente, la absorción de éste, al antagonizar la absorción del colesterol procedente de la dieta. Los fitoesteroles se encuentran de manera natural en legumbres como la soja, cereales, semillas o frutos secos. Además, en la actualidad existen diversos alimentos funcionales fortificados en fitoesteroles, originariamente margarina y más recientemente derivados lácteos. Los fitoesteroles parecen capaces de reducir tanto el colesterol total como el asociado a las lipoproteínas LDL. Se ha demostrado que, como media, el consumo de alimentos bajos en grasas que contenían fitoesteroles permite reducir en un 8% la concentración de colesterol total en pacientes con hipercolesterolemia, y en un 13% la cantidad de colesterol LDL. También conviene recordar los estudios que advierten que el consumo excesivo de fitoesteroles puede dar lugar a desequilibrios nutricionales, por su capacidad de interferir en la absorción de β-carotenos, vitamina E, vitamina A, o vitamina K, recomendándose una dieta muy variada unida al consumo de fitoesteroles, y así evitar posibles desequilibrios. Fitoestrógenos Los fitoestrógenos son sustancias vegetales que simulan el efecto fisiológico de las hormonas femeninas. Por lo tanto, potencialmente podrían prevenir las enfermedades y alteraciones dependientes de hormonas. Son ejemplo de estas sustancias las isoflavonas, como genistína, daidzeína y gliciteína, y los lignanos. A las isoflavonas se les atribuye una acción reductora de los niveles de LDL-colesterol y, por tanto, un efecto preventivo sobre las enfermedades cardiovasculares. También se les atribuye la reducción del riesgo de osteoporosis, a través de un incremento de la densidad ósea, aunque el mecanismo de actuación no se conoce. Igualmente se ha sugerido que estas sustancias pueden aliviar los síntomas menopáusicos, especialmente los sofocos. Por su acción hormonal, también podrían prevenir el cáncer mama y próstata. La evidencia actual es prometedora. Sin embargo, se necesitan más conocimientos para obtener conclusiones más firmes. Se considera una ingesta óptima de isoflavonas de 60 a 90mg por día. Queda por determinar si cantidades inferiores a estas, pero consumidas a lo largo de la toda la vida, son igual de eficientes. Los lignanos vegetales en sí mismos no son fitoestrógenos, pero al ser metabolizados por la flora bacteriana intestinal adquieren la actividad. Han sido mucho menos estudiados que las isoflavonas, en gran medida por la dificultad en su aislamiento y análisis, pero podrían presentar los mismos efectos. Las isoflavonas se encuentran fundamentalmente en la soja y algunas otras legumbres. Los lignanos se encuentran más ampliamente distribuidos en el reino vegetal. Se encuentran en cantidad importante en la linaza y, en general, los alimentos ricos en fibra. Soja Es una legumbre básica de los países orientales, y que muy recientemente se ha incorporado también a la dieta de los países occidentales, en este caso atribuyéndole propiedades funcionales. Efectivamente, aporta distintas sustancias de gran interés. Por ejemplo, es una buena fuente alimentaria de isoflavonas, por lo que podría prevenir las llamadas enfermedades dependientes de hormonas, como el cáncer de mama o de próstata, moderar la pérdida de masa ósea tras la Menopausia y reducir los síntomas asociados a la Menopausia. También se dice que la proteína de soja es capaz de reducir sustancialmente el colesterol LDL y, por tanto, podría prevenir la enfermedad cardiovascular. Por último, se debe tener en cuenta que no sustituye a los productos lácteos como fuente de calcio y tampoco debe sustituir, en su cado, la llamada terapia hormonal. 14 Alimentación y Menopausia. Mod. 4 SALUD ÓSEA Y OSTEOPOROSIS Ácidos grasos omega-3 Los principales son: ácido α-llinolénico, que podemos encontrarlo en nueces y aceites de soja, oliva y colza, y también los ácidos eicosapentanoico (EPA), y docosahexanoico (DHA), cuyas principales fuentes son pescados como la caballa, sardina, salmón, arenque, trucha, atún, bacalao, etc. Desde que se comprobara en diferentes estudios epidemiológicos una baja incidencia de enfermedades cardiovasculares en población esquimal que consumían en sus dietas cantidades elevadas de estos ácidos grasos presentes en el pescado, se ha incrementado el interés en estos compuestos en la prevención y tratamiento de los trastornos cardiovasculares. Así, un aporte suficiente de ácidos grasos omega-3 en la alimentación está demostrado que provoca un ensanchamiento de los vasos sanguíneos, mejora la fluidez sanguínea, y evita la formación de coágulos. Además, los omega-3 pueden inhibir los procesos inflamatorios, y de este modo proporcionar potenciales beneficios a personas con artritis reumatoide, psoriasis, colitis ulcerosa, etc. La ingesta recomendada de estos ácidos grasos omega-3 es de 1,1 - 1,5g/día, de los cuales 0,8 - 1,1 mg/día lo deben constituir el ácido α-linolénico, y 0,3 a 0,4mg/día de EPA y DHA. En la alimentación de los países occidentales parece haber un desequilibrio entre las dos series, y se recomienda reducir los omega6, e incrementar los omega 3. El posible déficit de EPA y DHA puede cubrirse mejorando su aporte a través de la dieta, de los alimentos fortificados, o de los suplementos nutricionales. Suplementos en calcio y vitamina D Por su papel en la construcción del esqueleto, el calcio se asocia siempre al crecimiento. El calcio es un mineral imprescindible para el desarrollo y mantenimiento del esqueleto. Es el mineral que se necesita en mayor proporción, entre 800 y 1500mg/día, dependiendo de la edad o el sexo. La importancia del calcio y la vitamina D en la mujer postmenopáusica para proteger el esqueleto está muy bien evidenciada científicamente. Lo cierto es que la valoración nutricional de los alimentos que pueden ser fuentes dietéticas de calcio, tanto o más que importante que el contenido de este mineral en valor absoluto, es el grado en que nuestro organismo lo puede aprovechar, la denominada biodisponibilidad que, incluso en las mejores condiciones, es siempre limitada. Así, la absorción del calcio presente en ciertos vegetales es del orden de sólo el 5%, mientras que en la leche y derivados lácteos, la presencia de lactosa, vitamina D y ciertos aminoácidos favorecen la absorción, que llega a ser del 30%. Además, la presencia de vitamina D favorece la absorción del calcio, lo que ha supuesto que muchos productos lácteos en la actualidad se hayan diseñado mediante la adición tanto de calcio como de esta vitamina. Habitualmente, para suplementar alimentos con este mineral se suele usar en forma de gluconato de calcio o de lactato de calcio. Sin embargo, lo paradójico es que las ingestas de calcio por debajo de las recomendadas se explican, en general, por un bajo consumo de lácteos y sus derivados, ya sea porque no les gustan o no los toleran, por lo que surge la duda del interés de la repercusión nutricional de la leche enriquecida con el mineral. También conviene recordar que actualmente se ha ampliado la gama con otros productos enriquecidos: zumos y bebidas de fruta, margarinas, cereales de desayuno, etc. Es importante recordar la posibilidad, bajo prescripción médica, de recurrir a los suplementos farmacológicos que contienen formas altamente biodisponibles de los nutrientes críticos para la salud ósea. El déficit de vitamina D presenta una elevada prevalencia en población española. Este déficit no es simplemente una anomalía bioquímica. Existen evidencias fisiológicas, patológicas, clínicas y epidemiológicas de que la deficiencia en vitamina D condiciona la consecución de un menor pico de masa ósea, aumenta la secreción de la hormona paratiroidea, incrementa el recambio óseo y la pérdida de masa ósea y conduce a osteoporosis, con riesgo aumentado de fractura de cadera y de otras localizaciones óseas. Este impacto sobre el hueso es mayor si existe una ingesta escasa de calcio. La administración de vitamina D disminuye el recambio óseo y aumenta la densidad ósea. Ensayos clínicos demuestran que el tratamiento con vitamina D y calcio reduce las tasas de fractura de cadera y otras localizaciones. 15 Alimentación y Menopausia. Mod. 4 SALUD ÓSEA Y OSTEOPOROSIS Por todo ello, la normalización del estado corporal en vitamina D debería configurarse como un objetivo de la salud pública. Un estado corporal adecuado de vitamina D no sólo aumenta la absorción de calcio, sino que disminuye la resorción y aumenta la formación ósea. Para adecuar los niveles séricos de vitamina D, aumentar el tiempo de exposición al sol puede ser suficiente, pero un exceso de radiación solar aumenta el riesgo de cáncer cutáneo. Deben tomarse medidas para aumentar la ingesta de vitamina D. Sobre la evidencia establecida acerca de las necesidades de vitamina D en adultos y personas de edad avanzada, parece claro que se necesitan unos 20 μg/día (800 UI diarias), bastante más de los recientemente establecidos niveles de ingesta adecuada (10 - 15 μg/día). El margen de seguridad con esas dosis al día es sustancial. Un exceso de vitamina D puede causar hipercalciuria y aun hipercalcemia, pero esas complicaciones no aparecen salvo que la dosis pase de 60μg/día (2.400UI diarias). El tratamiento con vitamina D no tiene sentido si no se aporta la cantidad de calcio necesaria, por lo cual debe ir siempre complementado con calcio. Al igual que con la vitamina D, lo ideal es el aporte dietético, bien a través de alimentos "tradicionales" o bien a través de alimentos enriquecidos. No obstante, cuando por hábitos culturales o por intolerancia digestiva no se tomen los productos que contienen calcio y vitamina D, deberá optarse por alimentos fortificados y/o suplementos farmacológicos. De acuerdo a las nuevas recomendaciones, va a ser necesario recurrir a los alimentos fortificados y a los suplementos farmacológicos para poder cubrir las mismas. 16 Alimentación y Menopausia. Mod. 4 SALUD ÓSEA Y OSTEOPOROSIS 6. Recetas saludables CROQUETAS DE BACALAO APLICACIONES De pequeño tamaño para cócteles y aperitivos, también como componente de entremeses. De mayor tamaño para primer o segundo plato en menús de almuerzo o comida. INGREDIENTES (Para 4 personas.) 1/2 litro de leche 1/4 litro de agua de pochar el bacalao 100 gr. de mantequilla 100 gr. de harina 100 - 150 gr. de bacalao salado Ajo y perejil Sal, pimienta y nuez moscada molida Para empanar: harina, huevo batido y pan rallado Aceite para freír PREPARACION • Poner en agua abundante el bacalao durante 24 horas, cambiando el agua varias veces • En un recipiente poner el bacalao cubierto de agua a fuego lento, hasta que empiece a emitir vapor, retirar del fuego y dejar enfriar un poco • Desmigar el bacalao retirándole la piel y las espinas y reservando el agua ELABORACION 1. En una cacerola calentar la mantequilla, añadir la harina y rehogar, retirar del fuego y añadir la leche hirviendo y el agua de pochar el bacalao mientras se va moviendo poco a poco para que no se formen grumos 2. Poner al fuego, añadir el bacalao desmigado, dejar hervir 5 minutos, sazonar con sal, pimienta blanca molida y nuez moscada rallada, añadir el ajo y el perejil picado y crudo 3. Echar en una placa o cazuela untada de aceite y dejar enfriar, (si no se van hacer las croquetas en el día untar la superficie con aceite o mantequilla para que no forme costra) 4. Formar las croquetas, pasar por harina, huevo batido y pan rallado, cuando se van a servir se fríen en abundante aceite caliente dejándolas doradas PRESENTACIÓN En fuente con blonda o servilleta, con las patatas paja y salsa de tomate aparte. 17 Alimentación y Menopausia. Mod. 4 SALUD ÓSEA Y OSTEOPOROSIS Notas: • Cuando son para entremés o aperitivo se hacen más pequeñas que cuando se hacen para plato • Para plato casi siempre se acompañan con patatas paja y salsa de tomate Fotografía: SACHA 18 Alimentación y Menopausia. Mod. 4 SALUD ÓSEA Y OSTEOPOROSIS BERENJENAS RELLENAS APLICACIONES Como segundo plato en menús de almuerzo o comida. INGREDIENTES (para 4 personas) 2 piezas de berenjenas 200 gr. de carne de cerdo picada 100 gr. de cebolla 1 diente de ajo 1/2 cucharadita de pimentón dulce 1/4 kilo de tomates maduros 2 cucharadas de pistachos o piñones 3 cucharadas de aceite sal y pimienta blanca molida Salsa mornay: 3 dl. leche 20 gr. mantequilla 20 gr. harina 1 yema 50 gr. queso rallado sal, pimienta y nuez moscada 100 gr. de salsa de tomate PREPARACIÓN • Cortar las berenjenas a lo largo en dos mitades, hacer una incisión alrededor y unas incisiones en forma de rombos en la pulpa ponerlas en una placa de horno, con la piel hacia abajo • Pintarlas con un poco de aceite y ponerlas a asar a temperatura media • Una vez asadas despegar la pulpa, introduciendo una cuchara por la incisión procurando no romper la piel • Picar en dados la pulpa • Pelar y cortar la cebolla en daditos muy finos • Pelar y picar fino los ajos • Rallar o pelar y picar en dados el tomate 19 Alimentación y Menopausia. Mod. 4 SALUD ÓSEA Y OSTEOPOROSIS Salsa Mornay: • Rehogar en la mantequilla la harina, retirar del fuego y añadir la leche hirviendo, remover con una varilla, sazonar • Dejar cocer unos 5 minutos, retirar del fuego y agregar la yema disuelta en una cucharada de leche y 25 gr. queso rallado ELABORACIÓN 1. Rehogar en el aceite el ajo, añadir la cebolla y rehogar a fuego lento unos minutos, hasta que esté blanda y algo dorada. Agregar la carne de cerdo y sofreír unos minutos más 2. Añadir el tomate, cocer veinte minutos, incorporar la pulpa, los pistachos o los piñones y el perejil. Sazonar con sal y pimienta y dar un hervor. Retirar del fuego y dejar enfriar un poco 3. Sobre las berenjenas vaciadas repartir el relleno y colocarlas en una fuente o placa de horno 4. Napar* con unas cucharadas de salsa mornay, espolvorear con 25 gr. de queso rallado y gratinar a horno fuerte Fotografía: SACHA 20 Alimentación y Menopausia. Mod. 4 SALUD ÓSEA Y OSTEOPOROSIS PRESENTACIÓN En el plato extender una capa fina de salsa de tomate, colocar la berenjena gratinada y servir. Notas: • Puede añadirse algo de canela molida • La carne puede ser de cordero, incluso de cordero ya asado, creando un nuevo plato a partir de un asado anterior *Napar: Extender una capa fina de salsa dejando, en este caso, las berenjenas cubiertas por una capa fina de salsa mornay. SOLOMILLO IBERICO A LA NARANJA CON PISTO DE MANGO CON FRUTOS ROJOS APLICACIONES Como segundo plato en menús de almuerzo INGREDIENTES (para 4 personas) 2 solomillos de cerdo ibérico (300 gr. cada uno) 2 cucharadas de aceite Sal y pimienta 1 dl. de nata Zumo de media naranja Gotas de zumo de limón Pisto de mango con frutos rojos: 2 cucharadas de aceite 50 gr. de cebolla 50 gr. de pimiento verde 50 gr. de calabacín 100 gr. de mango 50 gr. frambuesa 50 gr. de fresón un pellizco de sal y azúcar 21 Alimentación y Menopausia. Mod. 4 SALUD ÓSEA Y OSTEOPOROSIS PREPARACIÓN • Limpiar del exceso de grasa y tendones los solomillos • Pisto de mango y frutos rojos: • Picar la cebolla en dados pequeños • Picar el pimiento, el calabacín, el mango pelado y el fresón en dados algo mayores que la cebolla ELABORACIÓN 1. En dos cucharadas de aceite rehogar la cebolla unos minutos, agregar el pimiento y el calabacín, dejar unos minutos más, agregar el mango pelado y cortado en dados, erogar y, finalmente, añadir las grosellas y el fresón en dados, dejar cocer unos minutos, sazonar con sal y un pellizco de azúcar 2. En una sartén o placa de horno muy caliente dorar los solomillos, meterlos en el horno caliente 220 ºC y dejarlos hasta que estén hechos a gusto de los comensales 3. Retirar los solomillos de la placa de horno y agregar el zumo de limón, de naranja y la nata, dejar cocer para que reduzca y espese ligeramente 4. Cortar el solomillo en unas seis u ocho rodajas cada uno, colocarlas en los platos o fuente de servicio, al lado el pisto de mango y frutos rojos, napar* el solomillo con la salsa caliente y servir Fotografía: SACHA 22 Alimentación y Menopausia. Mod. 4 SALUD ÓSEA Y OSTEOPOROSIS PRESENTACIÓN En plato trinchero o en fuente colocar los medallones encabalgados con el pisto de mango y frutos rojos. Napar el solomillo con salsa de naranja. Notas: • Los frutos rojos no deben cocinarse en exceso, pues se ablandan y pierden presencia • Antes de añadir la nata a la placa para hacer la salsa puede añadirse una copa de vino generoso u oporto, una vez reducido se agregan los zumos y nata • También pueden cortarse los solomillos en medallones y cocinarlos en sartén a fuego fuerte, terminando la salsa de igual forma *Napar: Extender una capa fina de salsa sobre el solomillo en el momento de servir, dando brillo y buena presentación, también puede dejarse la mitad de la carne sin salsear. TIRAMISÚ APLICACIONES Como postre en menús de almuerzo y comida, también en meriendas. INGREDIENTES (8 personas) 500 gr. queso mascarpone (si no se dispone de queso mascarpone se puede sustituir por queso Philadelphia) 1/2 litro de nata 75 gr. de azúcar Plancha fina de bizcocho 4 huevos 100 gr. de azúcar 100 gr. de harina floja 2 dl. de café 1 copita de coñac cacao en polvo PREPARACIÓN Bizcocho: • Batir los huevos y el azúcar con una varilla hasta que aumente tres veces su volumen • Agregar la harina y mezclar suavemente, para evitar que se baje el bizcocho y que tome liga 23 Alimentación y Menopausia. Mod. 4 SALUD ÓSEA Y OSTEOPOROSIS • Extender sobre el papel de horno una capa regular de 25 por 30 centímetros • Cocer a horno fuerte 225 ºC unos 6 a 9 minutos • Retirar del horno, dejar enfriar y volcar sobre la mesa para despegar el papel de la plancha de bizcocho ELABORACIÓN 1. Batir la nata con el azúcar, cuando empiece a espesar añadir el mascarpone y seguir batiendo para que quede una mezcla homogénea 2. Cortar la plancha de bizcocho en dos, colocar una de ellas de base y emborrachar con la mitad del café y coñac juntos 3. Extender encima la mitad de la mezcla de queso y nata, espolvorear con cacao en polvo y colocar encima la otra media plancha de bizcocho 4. Emborrachar con el resto de café y coñac extender encima el resto de la mezcla de queso y espolvorear con cacao en polvo 5. Dejar enfriar en frigorífico al menos unas dos horas para cortar y servir PRESENTACIÓN En una sola pieza en una fuente rectangular, o bien en rectángulos de ración dando dos cortes a la pieza a lo largo y otros dos a lo ancho, estos serán equidistantes con cuchillo fino y algo atemperado, resultando 9 piezas. Notas: • Puede congelarse y unas horas antes de servir, sacarlo para que se atempere • Caso de congelarse, no espolvorear la ultima capa de cacao hasta que se descongele para servir • Puede extenderse en el fondo de los platos una capa fina de mermelada de albaricoque fluida o para mejor contraste roja de grosella o frambuesa Fotografía: SACHA 24 Alimentación y Menopausia. Mod. 4 SALUD ÓSEA Y OSTEOPOROSIS 7. Bibliografía recomendada Manual de Nutrición y Salud Ósea (2004). Instituto Omega 3, Fundación Puleva Guía sobre la Osteoporosis (2007). Consellería de Sanitat, Generalitat Valenciana. 8. Páginas web de interés www.fhoemo.com (Fundación Hispana de Osteoporosis) www.nof.org (Nutrition Osteoporosis Foundation) www.womenshealth.gov (Womens Health Institute. National Institue of Health) www.pulevasalud.com (Puleva salud) 25