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Las tres tortugas de Treinta y Tres Acerca de RAP-AL Uruguay La Red de Acción en Plaguicidas y sus Alternativas para América Latina (RAP-AL) fundada en 1983, es una red regional de organizaciones e individuos que trabaja para la reducción y eliminación del uso de plaguicidas, se opone a la apropiación de la diversidad genética y fomenta alternativas basadas en la agroecología. Forma parte de PAN Internacional (Pesticide Action Network). RAPAL-Uruguay fue establecida en 1995. Promueve la agricultura agroecológica y se opone al uso de agrotóxicos y transgénicos y al modelo de producción basado en monocultivos agrícolas y forestales. RAP-AL Uruguay Las tres tortugas de Treinta y Tres Editado por RAP-AL Uruguay Autor: María Isabel Cárcamo Ilustraciones: Alejandro Figueroa Diagramación: Flavio Pazos ISBN: 978 - 9974 - 8029 - 5 - 7 RAP-AL Uruguay Tel/Fax: 401 28 34 rapaluy@chasque.net www.chasque.net/rapaluy Ana Monterroso de Lavalleja 2112 ap. 802 C.P. 11.200 - Montevideo - Marzo 2009 Las tres tortugas de Treinta y Tres Texto: María Isabel Cárcamo Ilustraciones: Alejandro Figueroa Presentación La escuela La Calera del departamento de Treinta y Tres es como muchas de las antiguas escuelas rurales de nuestro país, con un terreno muy grande donde se acostumbraba tener una huerta y animales de granja. En La Calera, aún se pueden observar algunos vestigios de la antigua construcción, en la que alguna vez vivió la maestra directora con su familia, así como parte de un carro que era utilizado como medio de transporte. En la actualidad, la escuela La Calera no sólo funciona como escuela, sino que también reúne desde hace un par de años, a diversos grupos de la zona en torno a su granja agroecológica . En la granja se trabaja en la producción de alimentos para el autoconsumo, se produce una gran variedad de verduras, y se reproducen e intercambian semillas. Existe un vivero con árboles indígenas y frutales y un galpón donde se guardan las semillas, criollas y nativas, recolectadas por los productores de la zona. También hay gallinas que ponen unos huevos muy sabrosos. La siguiente historia está inspirada en los niños y niñas, maestras, técnicos y trabajadores que asisten y trabajan en la escuela La Calera. La historia está protagonizada por tres tortugas y una alumna. Las tortugas llegaron a la escuela rescatadas por un grupo de niños, que aún recuerdan muy bien el rescate de manos de dos cazadores que tenían la intención de venderlas en alguna feria vecinal. 4 Una mañana, Patricia, José, Clara, Pedro y Leandro caminaban hacia la escuela disfrutando del día tibio, luminoso y con un cielo azul diáfano. 5 6 A pocas cuadras de la escuela, cuando se aprontaban a cruzar la calle, vieron de repente a dos hombres agachados junto a unos matorrales con una bolsa y en actitud sospechosa. Los niños pudieron escuchar que uno le decía al otro: -¡Apúrate! ¡Que nos ven los gurises! Pero ya era demasiado tarde. Los niños habían corrido y ya estaban al lado de los cazadores. Vieron que lo que ellos tenían en sus manos y pronto a meter en una bolsa, eran tres tortugas. 7 Los niños preguntaron muy enojados: -¿Qué están haciendo? ¿Por qué las meten en la bolsa? Sin esperar respuesta, los niños en coro gritaron: -¡No pueden llevarse esas tortugas; esas tortugas viven aquí! 8 Al verse los cazadores al descubierto dejaron la bolsa en el suelo y salieron corriendo. Los niños sacaron de la bolsa a las tortugas y corrieron a la escuela con ellas, a contarle a las maestras y a sus compañeros cómo las habían rescatado de manos de los cazadores. 9 Fue así que, a partir de ese día, las tortugas viven en la laguna de la escuela. Desde entonces ellas han sido las espectadoras de todo lo que pasa en la escuela La Calera. Han aprendido cómo toda la comunidad trabaja para crear y mantener un ambiente sano. Han observado cómo los niños, las maestras, los técnicos y los trabajadores, trabajan en la huerta y las distintas visitas que vienen a conocer lo que se hace aquí. Pero más que nada han escuchado a Patricia, una de las alumnas de la escuela, que después de las clases se sienta al borde de la laguna en una roca grande donde las tortugas toman sol y les relata lo sucedido durante el día. 10 Uno de los días en que Patricia les visita, les cuenta que ha estado trabajando con sus compañeros de clase en el mejoramiento del suelo de la granja. - ¿Y cómo lo hacen? Pregunta Aquiles, la tortuga bebé. Patricia contesta: - Lo primero es no agotar al suelo. Para eso, hacemos “rotación de cultivos”, o sea que alternamos diferentes plantas. Como todas necesitan diferentes nutrientes, si sembramos cosas diferentes no cansamos el suelo. 11 Lito reacciona rápidamente y dice: - Ajá, ahora entendemos, porqué siempre están cambiando los cultivos, pero encontramos una manera de no perdernos: nos guiamos por las flores amarillas y anaranjadas. - Se llaman Copetes, comenta Patricia. Sus raíces producen naturalmente un líquido que los protege de los insectos. Ese líquido también protege a los cultivos que están cerca de los copetes. 12 - ¿Y sólo con rotar los cultivos alcanza para cuidar el suelo? Pregunta Aquiles. Patricia responde: - No, a veces el suelo se agota igual. Entonces hay maneras de mejorarlo. Por ejemplo, sembramos plantas que no se comen, se dejan en la tierra y se usan como abono. A eso le llamamos “abono verde”. 13 Aquiles, que siempre quiere saber todo, le pregunta a Patricia: - ¿Y hacen algo más? Patricia contesta: - Yo pensé que ya se los había contado el otro día. Lo que hacemos es producir compost; que es otro tipo de abono orgánico. Las lombrices se alimentan de residuos orgánicos, como hojas, restos de comida y estiércol de animales. Luego transforman todo eso en compost, que se utiliza para abonar o enriquecer el suelo. 14 Lito exclama asombrado: - ¡O sea que es como darle de comer al suelo! Patricia responde: - Sí, es exactamente eso. Luego exclama: - ¡Uy que tarde que es! Sale corriendo despidiéndose de sus amigas tortugas. 15 Pasan varios días en que Patricia no visitó a sus amigas, pero una tarde corrió a contarles lo que había sucedido ese día. Empezó de esta manera: Hoy tuvimos una visita en el galpón de la escuela donde guardamos muchas semillas criollas. Este visitante era la primera vez que escuchaba hablar de la importancia de cuidar y conservar las semillas. Cuando le explicamos, él pensó que debía guardar muy bien las semillas en cajitas, en un lugar seguro, y que así las conservaría. 16 Entonces Aquiles dice: - ¿Pero cómo, no es así? -¡No! ¡No!, responde Patricia. La mejor manera de conservar la semilla es sembrarla y cuidarla para que la planta esté fuerte. Luego florece y vuelve a dar semillas, que se vuelven a sembrar. ¡Así es como mejor se conserva la semilla! Lito y Manuela comentan: ¡Que interesante! ¡Entonces, la mejor manera de cuidar la semilla es sembrarla! Como es la hora de la merienda, Aquiles dice a sus padres que tiene hambre. Patricia se despide de ellas y también se va a su casa, a merendar. 17 Pasaron varios días en que Patricia no visitó a sus amigas. Estamos casi a fines de octubre cuando vuelve nuevamente, y encuentra a las tres tortugas tomando sol. 18 - Hola amigas: ¿Como están? ¿Nos vieron hoy en la huerta cosechando acelgas y lechugas? Manuela responde: - Yo los vi en la huerta, vi que todos ayudaban y después sentí el aroma que venía desde la cocina. - Sí, sí, dice Patricia, preparamos una tortilla de acelga y la comimos con ensalada de lechuga. ¡Estaba riquísima! - ¡Qué rico! ¡A nosotros también nos gusta la lechuga y la acelga de esta huerta! -agrega Lito. Pero lo que más me gusta de este lugar, es que mi familia y yo sabemos que podemos vivir sin peligro de contaminarnos. 19 Patricia les comenta: - Lo que pasa es que ésta es una huerta en la que no usamos agrotóxicos, o sea, no usamos venenos. Lito comenta: - A mí me gustaría que muchas tortugas y todos los animales pudieran caminar sin sentirse en peligro por los venenos en el campo. Así todos podríamos vivir en un ambiente más sano, y más niños podrían aprender lo valioso que es la semilla y el producir alimentos sin venenos, como lo hacen tú y tus amigos de esta escuela. 20 Las tortugas no sabían si todas las demás tortugas vivían en un ambiente tan sano como éste. Lo que si sabían era que en ese lugar podían caminar libremente por el predio de la escuela y la huerta, comer de la huerta, nadar en la laguna y no sentirse amenazadas por la contaminación que producen los agrotóxicos. 21 Glosario Abonos verdes: es una de las formas de mejorar el suelo. Consiste en la siembra de cultivos que, una vez crecidos, son incorporados al suelo, en lugar de cosecharlos para su consumo. Compost: es una tierra negra producto de la descomposición de residuos orgánicos, como son las hojas, restos de comida, estiércol de animales etc. Esta descomposición puede ser ayudada por lombrices. Mejoramiento del suelo: Se realiza para aumentar su fertilidad y mejorar su estructura. Puede hacerse incorporando materia orgánica, por ejemplo, a través del agregado de compost ó abonos verdes. Rotación de cultivos: es alternar plantas de diferentes familias y con necesidades nutritivas diferentes en un mismo lugar durante distintos ciclos, (cultivo de invierno con cultivo de verano) evitando que el suelo se agote y que las enfermedades que afectan a un tipo de plantas se perpetúen en el tiempo. De esta manera ayudan al suelo a que se enriquezca. Un buen ejemplo de rotación de cultivos es un cultivo de papa con otro de cebolla, ya que las necesidades nutritivas que tienen ambas plantas son diferentes. 22 APOYAN Intendencia Departamental de Treinta y Tres Departamento de Agroecología y Soberanía Alimentaria Inspección Departamental de Primaria Departamento de Educación Rural Publicación realizada en el marco del Proyecto URY/SGP/DINAMA/08/02 “Educar para crecer en un ambiente sano”, con el apoyo del Programa de Pequeñas Donaciones del Fondo para el Medio Ambiente Mundial (implementado por el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo) y la Dirección Nacional de Medio Ambiente. RAP-AL Uruguay