Download Antropoceno El sistema-mundo basado en una economía
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Nota aclaratoria. Este texto no es un resumen de la conferencia. Lo he escrito con la intención de facilitar el seguimiento de algunos conceptos áridos y difíciles de explicar en una conferencia. La palabra irá acompañada de una proyección visual. ¿Qué está pasando en el Mundo? ¿Qué nos deparan las próximas décadas? Nuestro destino depende del resto de la Humanidad, no importa en qué lugar estemos. Vivimos en un 'sistema-mundo' basado en una 'economía-mundo' globalizada que está llegando a sus límites. Antropoceno El uso intensivo de materiales y energía, realizado por la especie humana durante la civilización industrial, constituye actualmente el principal agente geomorfológico en el planeta Tierra. Muchos científicos afirman que nos encontramos pues en una nueva era geológica, consecuencia de la actividad humana, el Antropoceno. A mediados del s.XVIII, la revolución industrial constituyó el inicio de un crecimiento exponencial de la población y la economía mundial. La población mundial era de 700 millones en 1750, en 1950 alcanzaba los 2.500 y en la actualidad somos más de 7.000 millones. Actualmente, este crecimiento se está desacelerando. Al igual que la población, el capital industrial (fábricas, máquinas, robots) y el monetario tienen la capacidad de autorreproducirse y crecer exponencialmente. La economía ha crecido a un ritmo aun más acelerado. El sistema-mundo basado en una economía-mundo capitalista. La capacidad del capitalismo para impulsar el crecimiento económico ha llevado a este a la hegemonía de la economía mundial. Los países desarrollados han construido sistemas sociales que en su conjunto (producción, finanzas, leyes, educación, discurso dominante...) se organizan y trabajan para el desarrollo capitalista. El sistema-mundo moderno realiza una división internacional del trabajo y de poder entre países centrales, semiperiféricos y periféricos. Su historia comenzó ya en el siglo XVI con el descubrimiento y colonización del “Nuevo mundo” por España. En la actualidad el sistema-mundo basado en una economía- mundo capitalista engloba a todo el planeta. La hegemonía, en claro declive, del sistema es ejercida por los EEUU. Por razones históricas después de la segunda guerra mundial el capital realizó un pacto social con el trabajo y la sociedad que dio lugar al llamado “Estado de bienestar”. En el comienzo de los años 80 ante la dificultad para remontar la baja tasa de beneficios el capital rompió ese pacto. Una ley inexorable del capitalismo... Para entender la fase actual del desarrollo capitalista es preciso conocer sus estructuras, leyes, tendencias de larga duración, ritmos, tiempos y contradicciones. El capitalismo es un organismo vivo y como tal nace, crece, se estabiliza en su larga madurez, envejece y muere. Así ha sucedido en la historia de la humanidad con anteriores civilizaciones y sistemas de producción. La acumulación de capital ha alcanzado magnitudes colosales, pero en su misma estructura contiene una ley inexorable que solamente es perceptible en el largo plazo o en las grandes crisis. Ley de la tendencia decreciente de la tasa de ganancia del capital. La tasa de ganancia es la proporción entre la masa de plusvalía extraída de la fuerza de trabajo y el capital total invertido. La tasa de ganancia sufre subidas y bajadas cíclicas pero su tendencia es decreciente a largo plazo. Los ciclos generados, cortos y largos, acaban en crisis. Los ciclos largos toman forma de ondas con fases de expansión y de recesión. Los fabricantes no pueden fijar y subir los precios de las mercancías a su antojo, pues dependen de la competencia y de la capacidad de compra de los consumidores, tratarán entonces de reducir costes. ...y la manera histórica más eficaz de contrarrestarla La forma histórica fundamental en que se ha contrarrestado la disminución de los beneficios del capital ha sido el desplazamiento de la fabricación. De esta manera se reducen tres costes que tienden a subir: la remuneración del trabajo, determinados insumos, los impuestos y exigencias medioambientales. Así pues la fabricación se desplaza a lugares que reúnan las siguientes características: - Magnitudes considerables de fuerza de trabajo de muy baja remuneración, lo que implica el desplazamiento del campo a los centros industriales, en la última globalización 300 millones de chinos. A su vez esos bajos salarios permiten al capital bajar los salarios reales en todo el mundo y paralizar la lucha de los trabajadores y su organización sindical, amenazados por la deslocalización. - Zonas limpias donde tirar los desechos, incluidos los tóxicos, gratuitamente. Infraestructuras gratuitas. Peso político y social para obtener beneficios de diverso tipo. - No pagar impuestos y eludir las medidas anticontaminantes y medioambientales cada vez más exigentes en los países centrales. A su vez este proceso de globalización ha implicado primero financiación, posteriormente una gran inversión con grandes beneficios para el capital mundial, empuje a la hegemonía financiera de los países centrales y finalmente sobre los supuestos beneficios futuros la financiarización. ¿Cual es el saldo de la última globalización que finaliza con la crisis actual? China deja de ser el taller del mundo para centrarse en su propio desarrollo, los salarios han subido mucho, se ha convertido en una gran potencia, sus empresas gigantes resultan un duro competidor mundial y han desarrollado alguna tecnología de futuro. Para colmo rehúsa el vasallaje. La pobreza en los países perifericos y el empobrecimiento de la mayoría de la población en los países centrales y semiperifericos como consecuencia de los bajos salarios, precarización del trabajo, desempleo y bajos beneficios de los pequeños negocios que sobreviven en una feroz competencia, no permite adquirir los bienes y servicios que la capacidad productiva instalada en el mundo puede producir. Si esta ha sido la causa desencadenante de la crisis, la misma crisis refuerza un circulo vicioso... El crédito ha suplido los bajos ingresos para sostener el consumo durante las últimas décadas. Las deudas de los hogares, sumadas a las de las empresas y a la deuda pública para financiar el déficit presupuestario de los Gobiernos alcanza la cifra de 200 billones de dolares, unas tres veces el PIB mundial. Deudas impagables y por consiguiente incobrables y en medio... De los activos financieros ya sobrevalorados ha nacido un monstruo llamado financiarización. Sobre el delirio de apropiarse o beneficiarse de todos lo bienes comunes del planeta y a base de apalancamiento con el dinero creado por los bancos centrales mediante sus ”expansiones cuantitativas” el monstruo ha crecido hasta los 1.200 billones de dolares en derivados financieros. En palabras del financiero Warren Bufett esa masa de derivados financieros constituye una bomba de destrucción masiva a punto de estallar. El capital no se ocupa en ningún lugar del mundo de la reposición de los recursos naturales que se usan como materias primas. El proceso de agotamiento de algunos recursos imprescindibles para la producción ha experimentado un buen empujón. Unos cuantos de ellos se encuentran a punto de llegar a su cenit. El petroleo convencional, el más fácil y barato de extraer, ha alcanzado su cenit en el año 2006 y se encuentra en declive. Las guerras por el control de las mayores reservas asolan el Medio Oriente. El cambio climático continua su avance y cada día produce más estragos. El calentamiento global sin frenos progresa hacia los 2 grados centígrados, pasados los cuales lo único que se puede predecir es que el Colapso, si no se ha desencadenado antes, estará asegurado. La crisis en curso ocasionará aun mucho sufrimiento a las personas. Aun tendría mucho que destruir para sanear el sistema y estar en condiciones de relanzar el crecimiento. Mientras tanto el pillaje, el saqueo, se incrementarán pues cada vez el capitalismo toma más y más la forma de la desposesión de los bienes ajenos sean privados, públicos o comunes. Cada día los métodos y formas del capitalismo senil se parecen más a los de la acumulación originaria de su nacimiento. No habrá un nuevo ciclo largo de crecimiento Un nuevo ciclo largo de acumulación requiere en primer lugar fuentes de energía primaria eficaz, abundante y barata. La civilización industrial se ha basado en el consumo masivo de combustibles fósiles: carbón, gas y petroleo. La tierra ha tardado millones de años en producirlos y nosotros tardaremos menos de 300 años en agotarlos, actuamos sobre la vida en el planeta como una infección bacteriana. No existen fuentes de energía que sustituyan a las energías fósiles. Sin duda las energías renovables son el futuro energético para la humanidad, pero sus propias limitaciones y la dependencia de las fósiles para implementarlas y mantenerlas convierten en inviable la sustitución. Otros recursos en avanzado proceso de agotamiento se encarecerán y escasearán. Frenar el calentamiento global es realmente muy costoso. ¿Quien va a pagar la factura? Sabemos quien no va a sacar la cartera. No está en los planes del capital, ni siquiera a su alcance. También se agotan las zonas en el mundo favorables al desplazamiento masivo de la fabricación. No aparecen nuevos productos caros de consumo masivo. Las tecnologías del último ciclo largo están envejecidas y no permiten aumentos de productividad significativos. Las curvas de las funciones de las tendencias de larga duración del capitalismo están llegando a sus asíntotas. Caput. Rumbo al Colapso sistémico... o peor. La inercia capitalista empuja a la humanidad al Colapso sistémico (descenso brusco y progresivo de los niveles de organización social, crisis medioambiental, energética, alimentaria, de población...) pero la actividad de las poderosas elites belicosas pueden evitarlo mediante algo peor... Estamos ya en un tiempo de caos donde se bifurcarán las alternativas para abordar los problemas irresolubles en el actual marco de un sistema-mundo basado en la economía-mundo capitalista. Solamente en los tiempos de caos la acción de cada uno cobra especial relevancia y otra alternativa se hace posible. Millones de ciudadanos en el mundo trabajamos discreta o ruidosamente para construir otra alternativa. Las próximas agresiones del capitalismo más virulento producirán una respuesta cada día más firme, sabia y pacifica. Otro mundo, no solo será posible, sino necesario para la humanidad.