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El nuevo contexto económico y tecnológico digital en la cadena logística. 1. La nueva economía del siglo XXI: Economía en red y tecnologías digitales La Nueva economía tiene tres características que la distinguen1: Es global Favorece los activos intangibles (ideas, información y relaciones) Está fuertemente interconectada Estos tres atributos producen un nuevo tipo de mercado y de sociedad, enraizado en la ubicuidad de las redes electrónicas, sobre todo a partir del uso generalizado de la Web (navegadores, exploradores) en Internet a partir de 1.994. Las redes han existido siempre en cualquier tipo de economía. La diferencia es que hoy en día, ampliadas y multiplicadas por la tecnología digital, están penetrando en nuestras vidas de forma tan profunda que se están convirtiendo en la metáfora central a través de la cual nuestros pensamientos y economía se están organizando. Podemos expresar que, de manera analógica o metafórica, la nueva economía es la “economía del Cerebro” ya que funciona con características análogas a las del Cerebro, a saber: Funciona como un todo de forma global y holística Está fuertemente interconectada (neuronas y axones) La redundancia favorece lo intangible (ideas, información, conocimiento, decisiones) La Tecnología Digital, a partir de los avances realizados con la generalización de la Web en Internet, está generando una cascada de cambios que afectan a la sociedad actual, construyendo las bases de la denominada sociedad del conocimiento o sociedad digital con la aparición de la economía en red o digital, siendo la Gestión del Conocimiento (KM) el instrumento más significativo (ver figura adjunta). 1 La Sociedad Digital Cambios basados en la revolución Internet Tecnología Tecnología Digital Digital Gestión Gestión Conocimiento Conocimiento Kevin Kelly en “New rules for the New Economy” Penguim Putnam Inc. London, 1.998 Economía Economía en en Red Red 26 Capítulo I En la economía en red hay que destacar dos leyes características: 1. El valor de una red se incrementa exponencialmente, mientras el número de usuarios se incrementa aritméticamente. Está ley se conoce como ley de Metcalfe y está basada en la idea de las redes telefónicas. Si conectamos cinco personas se pueden establecer 20 relaciones diferentes; si se une una persona adicional, el número de relaciones es de 30. Cuando el número de gente conectada es (n) siendo (n) un número suficientemente grande, el total de conexiones tiende a aproximarse de manera simplificada a nxn ó n2. 2. Ley de los retornos o rendimientos crecientes de Brian Arthur. El valor de la red se dispara cuando se incrementan sus miembros, y su crecimiento atrae a más miembros, mejorando el resultado. Esta ley explica cómo algunos productos, pese a no ser intrínsecamente superiores, logran triunfar gracias a una situación de partida ventajosa. Es el caso del triunfo del VHS sobre el tecnológicamente superior sistema Beta de vídeo, o el éxito de Windows de Microsoft. Lo importante es la interacción, conseguir atraer la atención de los usuarios para utilizar un determinado producto, de forma que al incrementar su uso se convierta en un estándar de mercado, lo que facilita su uso generalizado y el aumento de los retornos que produce. Aquellos que consiguen estar a la cabeza, su éxito les lleva a seguir teniendo éxito con el aumento creciente en su rendimiento. En Internet la oferta se convierte en prácticamente ilimitada. Producido un documento de forma digital y publicado en la red, los costes de reproducción y distribución son despreciables. Por el contrario la demanda está limitada, ya que disponemos de días de 24 horas, pudiendo conseguir la atención de los usuarios a determinados contenidos de la red. Para captar la atención (demanda) de los potenciales clientes hay que romper con todo tipo de barreras, además de ofrecer productos atractivos. Este planteamiento lleva a que muchos productos ofrecidos a través de Internet, sobre todo software, sean gratuitos; de esta manera los clientes potenciales con su uso lo conviertan en un estándar. Es el ejemplo de los navegadores de Internet como el comunicador de Netscape o el explorador de Microsoft. La nueva economía se invierte. Los costes de transformación tienden a ser función de las ideas: diseño, producción de plantillas, y software2. Los costes laborales, de transporte, e incluso los de capital han disminuido hasta llegar a ser pequeños porcentajes del valor total del producto. Hace una generación, el 80% de lo que podíamos pagar por un coche correspondía a los materiales con los que había realizado. Hoy, el 80% de lo que pagamos por un coche corresponde a investigación, diseño y marketing. 2. Nueva teoría del crecimiento económico basada en las tecnologías digitales y en el conocimiento. Los economistas tradicionales consideran el crecimiento como el resultado de los valores añadidos generados por las personas y las mercancías. Así, un incremento de la población estimula el crecimiento suministrando más mano de obra, y expandiendo la base de maquinaria existente, con lo que se consigue que se trabaje de manera más eficiente. 2 véase pág. 31 Dian Cohen, “No small Change”, Macmillian Canada, 1993 El nuevo contexto económico y tecnológico digital en la cadena logística 27 La nueva teoría del crecimiento, apoyada en el trabajo hecho en la década de los años 50 por el premio Nobel Robert Slow y actualmente propugnada por Paul Romer de la Nueva teoría del crecimiento Encyclopedia of the New Economy. Wired , april 98 El Conocimiento crea crecimiento económico, lo que a su vez estimula el conocimiento, lo que origina crecimiento Universidad de Stanford, señala que el conocimiento, particularmente de la tecnología, es crucial para el proceso del crecimiento económico. El pensamiento económico tradicional sólo considera dos factores principales de producción: el capital y el trabajo. Romer eleva a esa categoría a un tercero: la tecnología. Así como los economistas tradicionales conciben los avances tecnológicos, por ejemplo, el automóvil y el ordenador como descubrimientos causales, una especie de “maná llovido del cielo”, la nueva teoría del crecimiento mantiene que tales avances guardan proporción con la cantidad de inversión que se les dedica. En lugar de ser exógena o ajena a la economía, dice Romer, la tecnología es endógena, está situada en el centro de ella. Así, a medida que se dedique más y más recursos a la tecnología, iremos alcanzando un crecimiento económico cada vez más elevado3. En lugar de estar limitada por los recursos escasos, la economía basada en el conocimiento puede crecer rápidamente conducida por el crecimiento abundante de las ideas. La Red (Internet) es un mundo de ilimitadas oportunidades. En la Red, todo gira en torno al descubrimiento de ideas, generando crecimiento e incluso puede que no sea crecimiento a costa del competidor, sino crecimiento basado en algo completamente nuevo que amplíe, no redistribuya, la tarta económica. 3. Desarrollo económico y conocimiento Carl Dahlman es uno de los altos mandatarios del Banco Mundial encargado del World Development Report que en su edición 1998/1999 se concentra en el conocimiento como eje del desarrollo. “Knowledge for Development” es el título de este informe que abre las puertas de la esperanza al desarrollo de terceros países a través del conocimiento, a la vez que centra las claves del desarrollo futuro de las regiones adoptando nuevos indicadores de progreso. El “Informe sobre el desarrollo mundial”4 considera dos tipos de conocimientos: los conocimientos técnicos y los conocimientos sobre atributos o circunstancias concretas (la 3 véase pág. 206 E. Schawartz, “La empresa en marcha en la World Wide Web”, Ediciones Deusto, Bilbao, 1.997 4 “El conocimiento al servicio del desarrollo”. Informe del Banco Mundial 1998/99. 28 Capítulo I calidad de un producto, la credibilidad de un prestatario o la diligencia de un trabajador). En el Informe se distingue entre diferencias de conocimientos es decir, las asimetrías en la distribución de los conocimientos técnicos y problemas de información o la falta de conocimientos sobre atributos. Se mantiene que ambos tipos de problemas son más graves en los países en desarrollo que en los países más tecnológicamente avanzados y que quienes más lo sufren son los países pobres. El planteamiento del desarrollo desde la perspectiva del conocimiento –es decir, la adopción de políticas para aumentar tanto los conocimientos prácticos como los relacionados con características concretas- puede mejorar las condiciones de vida de formas muy diversas, además de elevar los ingresos. El conocimiento es imprescindible para el desarrollo, como para todo: sin él nada podemos hacer. Para los países que se encuentran en la vanguardia de la economía mundial, el balance entre conocimientos y recursos se ha desplazado hacia los primeros hasta el extremo de que aquellos han pasado a ser el factor más determinante del nivel de vida. Las economías más avanzadas desde el punto de vista tecnológico están firmemente basadas en el conocimiento. A medida que generan nueva riqueza con sus innovaciones, están creando nuevos empleos relacionados con el conocimiento en una gran variedad de disciplinas como la ingeniería, gestión y coordinación de la información. Indicadores distintos de los habituales indicadores macroeconómicos y en la misma línea que siguen las empresas empiezan a medir sus activos intangibles. El papel de los responsables de políticas de promoción tienen un importante papel que jugar. Primeramente interviniendo para influir en el mercado de la información haciendo eficaz la transferencia y uso de conocimientos. La naturaleza y eficacia de las políticas de adquisición, absorción, y comunicación de conocimientos van a potenciar o limitar, según sea el caso, los desarrollos económicos de países y regiones. Por ello el propio Banco Mundial está proponiendo sumar a los habituales indicadores macroeconómicos, nuevos indicadores de desarrollo, relacionados con la capacidad para absorber, utilizar y diseminar conocimientos vía tecnologías de la información y de las telecomunicaciones 4. Nueva Cultura del “business” digital. La superación de las organizaciones industriales 4.1. Cambios en los Mercados: de los de Oferta a los de Demanda. Los mercados tienden a ser más abiertos, sin límites, sin fronteras. Los negocios se llevan a cabo a escala global. La tendencia es a abrirse a los cinco continentes como mercado único, si bien a medio plazo han de integrarse los mercados en el ámbito geográfico regional como la Unión Europea, Mercosur en Sudamerica, etc. La globalización de la economía conlleva un sinfín de ámbitos. La competición entre empresas ya no se lleva a cabo a escala nacional sino internacional. Los ciclos industriales y de mercado son más cortos. Las empresas deben responder más rápidamente a la demanda, con mejores productos y precios más bajos. La innovación se convierte en la única estrategia posible en un mercado en el que el cambio es la única constante. Los mercados se desplazan de la Oferta a la Demanda, siendo los consumidores los que tiran de los mismos (Pull Demand). Lo importante es el cliente, él es el que define que quiere, cuando lo quiere, como lo quiere, y donde lo quiere. Su percepción es positiva si satisfacemos sus necesidades en el espacio, tiempo y forma adecuados.