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MIS ENCUENTROS LUIS CENCILLO CON José Eduardo San Martín López Orientador IES "San Miguel de Meruelo" Psicoterapeuta psicología.jesanmartín@gmail.com En Noviembre de 2008 asistí con un grupo de alumnos de 1º de Bachillerato del Instituto de Educación Secundaria de Meruelo a las VIII Jornadas de Investigación en Psicología para jóvenes no universitarios que organiza la Asociación de Profesores de Psicología de Cantabria. Allí jóvenes bachilleres tienen la posibilidad de presentar sus trabajos de investigación, de contenido diverso, en psicología. Mi sorpresa y emoción cuando en una de las ponencias que versaba sobre psicoanálisis, “Interpretación de Sueños”, se proyectó sobre una pantalla la portada del libro “Transferencia y sistema de psicoterapia” de Luis Cencillo, libro que hacía veinticinco años había sido mi introducción en la obra del autor y en la práctica de la psicoterapia. Sorpresa porque el autor no ha sido, a mi entender, lo suficientemente divulgado y reconocido, y por encontrarlo en un foro repleto de jóvenes bachilleres. El profesor del grupo que presentaba dicha ponencia había sido alumno de Luis y hube de felicitarle, así como a la Asociación organizadora.. Conocí a Luis Cencillo en el curso 1982-1983 en la Facultad de Psicología de la Universidad Civil de Salamanca, donde impartía la asignatura de “Psicología Profunda” en 4º año. Anteriormente había sido profesor en las Universidades de Friburgo, Munich, Colonia e Innsbruck. Las clases del profesor Cencillo se llenaban de alumnos, algunos lo eran de la asignatura que impartía, pero otros no. Era un auténtico placer escuchar su discurso, lleno de conocimiento y creatividad. En sus exposiciones paseaba por las diferentes ramas de la filosofía, la antropología y la psicología, con un pensamiento certero, original, coherente y sistemático. En el verano de 1982, en mis ratos libres, yo leía el libro “Transferencia y sistema de psicoterapia” en el hotel de Ibiza que dirigía. Era lectura obligada en la asignatura. En ella su autor organiza en sistema claro los principios y elementos básicos que intervienen en psicoanálisis y psicoterapia en general. No fue una lectura fácil por la cantidad de conceptos, autores y referencias a pié de página que contiene, pero fue una invitación a interesarme por el mundo de la psicoterapia. Años más tarde, ya licenciado en psicología, solicité una beca para los cursos de formación en psicoterapia en la Fundación Cencillo de Pineda en Madrid. Esta me sería concedida. Durante los años 1988-1989 acudía los fines de semana, desde Santander a Madrid, los viernes por la tarde a los cursos de formación y el sábado por la mañana a mis sesiones de análisis personal. Allí me volví a encontrar con Luis Cencillo. El impartía la parte central de los cursos, le acompañaba algún miembro de la fundación. Sólo por escucharlo merecía la pena el viaje. Entre los asistentes había quien quería formarse en psicoterapia, pero también los había que estaban allí por el gozo de escuchar al profesor. Eran unas exposiciones, donde a partir del temario del curso, “articulación de la relación terápica”, Cencillo nos conducía a través de diversos saberes y autores, los cuales dominaba como nadie, a la base del sistema e intervención en psicoterapia. Su discurso era ameno, con chispa, crítico, lúcido y con ejemplos sacados de la historia y de la vida diaria. Tengo en mi despacho guardadas como un tesoro todas las cintas donde quedaron grabadas sus clases. Allí, en la Fundación Cencillo de Pineda, en su biblioteca de la Calle Pisuerga, fui conociendo la obra del profesor Cencillo. Unas 60 publicaciones de Filosofía, Psicología, Antropología y Teología. En las sesiones de análisis personal encontré al Cencillo analista, desprendido de todo su saber, atento y comprensivo con el otro, que era yo, al Cencillo más humano. Relación analítica que duró hasta que ambos convenimos, después nuestra amistad se prolongaría hasta su muerte. Luis Cencillo, gran contribuidor a las ciencias humanas, erudito, sugerente, original, también crítico y polémico, fue mi profesor y analista, nos acompañó en las Jornadas de Investigación en Psicología de Cantabria.