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Monografía Curso de Capacitación Docente en Neurociencias Alumna: Miriam Raquel Mojsiuk www.asociacioneducar.com Mail: informacion@asociacioneducar.com MSN: asociacioneducar@hotmail.com NEUROSICOEDUCACIÓN APLICADA A LA EDUCACIÓN Tema: BASES NEUROBIOLÓGICAS DE LA ATENCIÓN Y EL APRENDIZAJE Los diccionarios ofrecen generalmente dos definiciones muy diferentes para el término atención. La atención como acción de concentrarse, de aplicarse, sinónimo de vigilancia, o bien como una señal de afecto o de interés. Esta doble definición se refleja en dos expresiones diferentes que evocan dos tipos de comportamiento de una persona. Así, diremos de una persona que “está atenta” cuando se concentra, y que “es atenta” cuando da muestras de interés. Me voy a centrar en la primeras de las expresiones ya que es la necesaria para que el aprendizaje se consolide. Captar y mantener la atención de alguien es uno de los más grandes desafíos de cualquier docente, líder, etc. La atención es la base del aprendizaje, sin atención no hay memoria y si no hay memoria, no hay aprendizaje. Aprender es el proceso por el cual adquirimos una determinada información y la almacenamos, para poder utilizarla cuando nos parece necesaria. Esta utilización puede ser mental, por ejemplo el recuerdo de un acontecimiento, concepto, dato, o instrumental, como la realización manual de una tarea. En cualquier caso, el aprendizaje exige que la información nos penetre a través de nuestro sentidos, sea procesada y almacenada en nuestro cerebro, y pueda después ser evocada o recordada para, finalmente, ser utilizada si se la requiere. Atención Mediante los sistemas que nuestro cerebro posee para regular la atención, los objetos y acontecimientos externos (visuales, auditivos, etc.) primero evocan o llaman nuestra atención, haciendo que nos orientamos hacia algo concreto y nos desentendamos (nos desenganchemos) de los demás estímulos; así estamos preparados para captar el mensaje que nos llega. En la atención intervienen varias áreas y núcleos del cerebro. Unos están relacionados con las áreas responsables de recibir y, sobre todo, de integrar la información que nos llega por los sentidos. Para el aprendizaje necesitamos que se establezca la atención ejecutiva, está ubicada en los lóbulos prefrontales, el área más evolucionada del cerebro. También es conocida como la atención voluntaria. Esta es selectiva y sostenida en el tiempo para poder captar la información. Exige un esfuerzo consciente por lo cual se agota fácilmente. La unidades de atención disminuyen cuanto más nuevas y complejas sean éstas, si no se puede realizar asociaciones o si contiene palabras nuevas, largas y difíciles. Michael Posner dice que la atención ejecutiva se debe entrenar. La atención ejecutiva comienza a desarrollarse entre los 4 y 7 años, es un recurso limitado, hay que conocerla, cuidarla y aprovecharla. El cerebro fluctúa entre atención y memoria, esto es que por momentos pone atención a algo y luego se traslada a la zona donde se almacenan los conocimientos para tratar de relacionar lo que está atendiendo con algo que ya tiene almacenado y así sucesivamente, lo cual significa que nos vamos a perder de algunas cosas en estos pasajes. También interviene el descanso, el estado emocional, la alimentación, los temas pendientes y la falta de movimiento. Memoria La memoria es un proceso que nos permite registrar, codificar, consolidar y almacenar la información de modo que, cuando la necesitemos, podamos acceder a ella y evocarla. Es, pues, esencial para el aprendizaje. Y ya veremos en qué grado depende de la atención que prestemos. La memoria no es única sino que adopta distintas formas que dependen de estructuras cerebrales muy distintas. Memoria inmediata: limitada a lo que puede recordarse mientras se mantiene la atención sobre lo percibido. Memoria a corto plazo: más duradera que la inmediata. Memoria de trabajo: permite mantener activa la información actual que hace a la resolución de la situación. Memoria intermedia: es aquella que se encuentra entre la memoria a corto plazo y largo plazo, por ejemplo lo que se estudia para un examen, si no se repite y fortalece se pierde. Memoria a largo plazo: asegura la permanencia del contenido de la información a lo largo del tiempo. Memoria procedimental: guarda esquemas implicados en procedimientos que se realizan automáticamente. Memoria sensorial: almacenamiento inicial y momentáneo de la información que nos llega a través de los sentidos. Memoria declarativa: contiene información evocada conscientemente y puede ponerse en palabras. Estrategias para convertir la información en conocimiento Todo lo que aprendemos llega al cerebro a través de los sentidos, el registro de los estímulos está influenciado por los estados emocionales en el momento de recibir la información. Hay 3 sistemas cerebrales importantes El sistema activador reticular, es el sistema de activación de la inteligencia y está ubicada en la parte más baja, posterior del cerebro. Recibe la información de las terminales nerviosas de todo el cuerpo, estos mensajes pasan a través del SAR para entrar al cerebro racional y para ser enviados a los centros de respuesta automática La amígdala: es el centro de la emoción del cerebro. También consolida la información potencial a largo plazo que acompaña a la emoción positiva. Con altos niveles de estrés hay menos oxígeno y glucosa en los centros cognitivos cerebrales. La información que pasa por la amígdala y se asocia a una emoción positiva se realza para facilitar el almacenamiento en la memoria a largo plazo. Al lado de la amígdala esta el hipocampo donde la nueva información se liga al conocimiento y experiencias previas. La dopamina: es uno de los neurotransmisores mas importantes del cerebro. Cuando el cerebro lanza dopamina durante una experiencia agradable, se construyen memorias fuertes de la misma que posteriormente lanza dopamina en la expectativa de una próxima experiencia agradable. Esta anticipación aumenta la dopamina en el sistema límbico, especialmente en el hipocampo que facilita la consolidación de la nueva información. La dopamina llega a los lóbulos prefrontales aumentanto la circulación de acetilcolina que incrementa la atención. ¿CÓMO MEJORAR LA MEMORIA? No nacemos con buena o mala memoria, por lo tanto podemos aprender a mejorarla utilizando diversas estrategias. Por otra parte tenemos que saber que si tenemos mucho estrés o estamos muy preocupados por diversos problemas, nuestra memoria se ve afectada y tendemos a recordar peor. No debemos atender a varias cosas a la vez pues no haremos ninguna bien. Algunos ejercicios que podemos hacer es: - Leer periódicos y retener los nombres propios y evocarlos luego. - Tachar todas las letras mayúsculas de un texto. - Resolver sopas de letras. - Asociar algo nuevo con algo que ya conocemos.