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RESERVA Tantum ergo sacraméntum venerémur cérnui, et antícuun documéntum novo cedat rítui praestet fides suppleméntum sénsuum deféctui. Genitori genitóque laus et iubilátio, salus, honor, virtus quoque sit et benediction; procedénti ab utróque compare sit laudation. Amén ORACIÓN CON LOS JÓVENES (Viernes 3-febrero-2012) EXPOSICIÓN Ven, amor de Dios, inunda mi alma. Ven a mí, con fuerza y poder, Ven, amor de Dios. EVANGELIO: Aleluya Marcos 1, 29-39 29 Al salir de la sinagoga, Jesús se fue inmediatamente a casa de Simón y Andrés, con Santiago y Juan. 30La suegra de Simón estaba en cama con fiebre. Le hablaron enseguida de ella, 31y él se acercó, la cogió de la mano y la levantó. La fiebre le desapareció y se puso a servirlos. 32 CANTO FINAL ¡Ay de mí si no evangelizara! Sería triste, no podría crecer. Quiero cantar que Tú estás vivo, que Tú reinas, que vives hoy. 1.- Yo soy testigo de tu obra, cambiaste mi corazón, diste sentido a mi camino y hoy vivo para Ti, Señor. 2.- Como Él seré esclavo de todos. Un instrumento en manos de Él. En la promesa de sus dones tendré su fuerza y su poder. Al atardecer, cuando ya se había puesto el sol, le llevaron todos los enfermos y endemoniados. 33La población entera se agolpaba a la puerta. 34El curó entonces a muchos enfermos de diversos males y expulsó a muchos demonios, pero a éstos no les dejaba hablar, pues sabían quién era. 35 Muy de madrugada, antes de amanecer, se levantó, salió, se fue a un lugar solitario y allí se puso a orar. 36Simón y sus compañeros fueron en su busca. 37Cuando lo encontraron, le dijeron: “Todos te buscan”. 38Jesús les contestó: “Vamos a otra parte, a los pueblos vecinos, para predicar también allí, pues para esto he venido”. 39 Y se fue a predicar en sus sinagogas por toda Galilea, expulsando demonios. Palabra del Señor LECTIO (LECTURA): ¿Qué dice el texto? Vuelve a releer en silencio el texto. Que tu lectura sea escucha. Advierte la palabra, la imagen, el mensaje que queda repicando en ti. Lee y párate en aquello que resuena en tu corazón. El evangelio presenta tres escenas en las que Jesús se relaciona con la gente y con sus discípulos. En las dos primeras, la actividad de Jesús consiste en curar. La primera escena describe una de estas curaciones con cierto detalle: Jesús sana a la suegra de Pedro mediante el contacto personal y físico (tomando su mano). Y para que quede constancia de la acción de Jesús, el evangelista cuenta a continuación el efecto de la curación: “la fiebre le desapareció y se puso a servirles”. El servicio es uno de los rasgos que caracterizan a los discípulos de Jesús, de modo que después de haber sido curada, la suegra de Pedro se comporta como un discípulo. La curación de la suegra de Pedro sirve como modelo de las diversas curaciones que se describen en la segunda escena. Es una forma de decir que lo que le pasó a ella les ocurrió a muchos más. La tercera escena tiene lugar a la mañana siguiente: “muy de madrugada, antes de amanecer, Jesús se levantó, salió, se fue a un lugar solitario y allí se puso a orar”. Jesús hace silencio y reza para comprender la voluntad de Dios. Pedro expresa la voluntad de los habitantes de Cafarnaún y seguramente también la suya: todo el mundo está admirado por las obras que realiza su Maestro. Sin embargo, la respuesta de Jesús es otra: “Vamos a otra parte, a los pueblos vecinos, para predicar también allí, pues para esto he venido”. La evangelización debe llegar a todos los lugares, la Buena Noticia es para todos, especialmente para los que sufren; el anuncio de la Buena Noticia nace de la experiencia del encuentro con Dios. También nosotros debemos hacer silencio y orar para comprender la voluntad de Dios. Escuchar su voz, intimar con él. Que nuestras manos sean las suyas que cuidan del enfermo; que nuestro corazón sea el suyo que ama al enemigo; que nuestra voz sea su Palabra encarnada que anuncia vida, salvación, esperanza, paz… a todos sus hijos. MEDITATIO (MEDITACIÓN): ¿Qué dice de mí el texto? ¿Cómo me lee este pasaje? “Rumia” la palabra que ha quedado repicando en ti, descubre el mensaje que encierra para tu vida. Deja que la palabra escrute tu corazón. ¡No tengas miedo! Dios es más grande que tu pobre corazón ORATIO (ORACIÓN): ¿Qué me hace decirle a Dios este texto? Dirígete directamente a Aquel cuya Palabra has escuchado y acogido en tu corazón. Deja que se despierte tu espíritu orante a través de la súplica, la alabanza, la intercesión. Habla con Dios como un amigo habla con su amigo, con total confianza CONTEMPLATIO (CONTEMPLACIÓN) Déjate mirar por el Dios que te ama. En estos momentos no hay pregunta. Es permanecer en calma ante Dios, consentir en ser mirados, Poco a poco percibirás que esta experiencia te lleva al compromiso y a la acción para hacer presente en el mundo el proyecto de Dios. CANTO Lo que agrada a Dios en mi pequeña alma es que ame mi pequeñez y mi pobreza (bis) Es la esperanza ciega, que tengo en su misericordia (BIS) REZO DE UN MISTERIO DEL ROSARIO Magnificat, magnificat, Magnificat ¡anima mea! Dominum (BIS) PETICIONES Escucha, Señor, mi voz, óyeme Escucha, Señor, mi voz. Señor, ampárame ACTIO (ACCIÓN) - No te olvides de la Eucaristía y la Confesión - Busca momentos de silencio y oración y déjate acompañar para poder comprender la voluntad de Dios