Download DEMUESTRAN LOS EFECTOS ANTIINFLAMATORIOS DE LOS
Document related concepts
Transcript
www.ir.vhebron.net NOTA DE PRENSA Investigadores del Institut de Recerca de l’Hospital Universitari Vall d’Hebron DEMUESTRAN LOS EFECTOS ANTIINFLAMATORIOS DE LOS PROBIÓTICOS EN LA ENFERMEDAD DE CROHN El Institut de Recerca de l’Hospital Universitari Vall d´Hebron demuestra que hay un descenso significativo de la secreción de señales inflamatorias de la mucosa intestinal en la enfermedad de Crohn gracias a la presencia de Lactobacillus casei. Barcelona, 17 de noviembre de 2008.- Un grupo de investigadores del Institut de Recerca de l’Hospital Universitari Vall d’Hebron ha constatado - in vitro- como un probiótico, el Lactobacillus casei, regula las señales de la inflamación en la enfermedad de Crohn. Este descubrimiento, a pesar de tratarse de un estudio realizado sobre mucosa intestinal en el laboratorio y no directamente sobre pacientes, pone de manifiesto la utilidad clínica de los probióticos, a menudo muy discutida. Los resultados del estudio, publicados en la revista Inflammatory Bowel Disease y dirigido por los Drs Maria Antolín, Marta Llopis y Francisco Guarner, suponen un paso adelante en la búsqueda de evidencias para el uso de los probióticos como parte del tratamiento en las enfermedades inflamatorias intestinales, pues demuestran que el uso del probiótico estudiado prevé y contrarresta los efectos adversos proinflamatorios de bacterias presentes en la flora intestinal sobre la mucosa afectada en pacientes con enfermedad de Crohn. La enfermedad de Crohn se caracteriza porque el sistema de defensa del individuo ataca su propio intestino produciendo inflamación. La enfermedad de Crohn es, pues, una enfermedad autoinmunitaria. Aun así, el origen de la enfermedad es desconocido, aunque se sabe que hay factores genéticos involucrados. La enfermedad de Crohn se caracteriza por presentar periodos de actividad (brotes) seguidos por periodos de inactividad en los que no hay presencia de sintomatología. Los síntomas pueden variar mucho según los pacientes, pero se pueden resumir así: dolores abdominales, diarrea, vómitos, pérdida de peso, pérdida de la sensación de hambre, debilidad; a veces, obstrucción intestinal y fiebre. La mucosa intestinal se erosiona hasta presentar auténticas úlceras en los casos más graves. A veces, la úlcera es tan severa que requiere cirugía. Se presenta por igual en hombres y mujeres. Es más frecuente en gente joven; a menudo aparece entre los 20 y los 40 años. Actualmente no hay un tratamiento curativo y todos los recursos terapéuticos van orientados a paliar los síntomas. El estudio y los resultados La interacción de las bacterias comensales o saprófitas del intestino con el sistema inmunitario intestinal es un factor esencial en el desarrollo de la enfermedad de Crohn. Con el objetivo de entender los mecanismos fisiopatológicos de esta interacción es fundamental estudiar los efectos de las bacterias comensales de manera aislada. Ésta es la base de trabajo de este estudio ya que se ha centrado en la respuesta inmunitaria de la mucosa de pacientes con enfermedad de Crohn ante dos bacterias: la Escherichia coli ATCC 35345 (una bacteria habitual del Més informació: Margarida Mas (Galènia Comunicació Mèdica) Tel: 626.523.034 // mas-sarda@galenia.net www.ir.vhebron.net intestino) y Lactobacillus casei (un probiótico de uso corriente en muchos alimentos). Se han incubado muestras de la mucosa intestinal inflamada con Escherichia coli de manera aislada, con Lactobacillus casei también de manera aislada, muestras con DNA del Lactobacillus casei y, por último, muestras con las dos cepas de bacterias conjuntamente. En estas diferentes muestras se ha estudiado la producción de diferentes moléculas proinflamatorias de la familia de las citoquinas TNF-α, INF-γ, IL-2 e IL-6 y de las quemoquinas IL-8, CXCL1 y CXCL2. Los resultados son claros: en las muestras con L. casei vivo, “hay un descenso significativo de la secreción de señales inflamatorias de la mucosa con enfermedad de Crohn. Este efecto está producido por la bacteria completa y no es responsable sólo su DNA”, nos explica la Dra Marta Llopis, primera firmante del artículo. Este probiótico disminuye la expresión de citoquinas y quemoquinas implicadas en la inflamación y, por lo tanto, en los mecanismos que lesionan la mucosa intestinal afectada por enfermedad de Crohn. “En las muestras de mucosa que han sido incubadas con E. coli, está aumentada claramente la expresión de las citoquinas implicadas en la inflamación de la mucosa, confirmando que, ante una inflamación y lesión ulcerada de la mucosa intestinal como es el caso de la enfermedad de Crohn, las bacterias que habitualmente se encuentran en el intestino pueden favorecer los mecanismos que lesionan y empeoran la situación de la inflamación intestinal en pacientes afectados por esta enfermedad”, sigue la Dra Llopis. Las aplicaciones clínicas y las limitaciones actuales Lo más interesante es que, en las muestras que combinan L. casei y E. coli, “la presencia del probiótico previene y contrarresta los efectos proinflamatorios de la E. coli sobre la mucosa intestinal en los pacientes con enfermedad de Crohn. De forma que se podría emplear como tratamiento preventivo en la enfermedad, buscando una manera de evitar o mitigar las reagudizaciones”, nos explica la Dra Maria Antolín, una de las responsables del estudio. Cuando las lesiones inflamatorias están instauradas, en un brote de enfermedad de Crohn, por ejemplo, los probióticos podrían ser útiles para contrarrestar los efectos de la propia flora intestinal sobre las lesiones de la mucosa. “Estos resultados nos dan una idea de los efectos de una bacteria y de un probiótico en condiciones de laboratorio, pero, en condiciones reales, tenemos billones de bacterias en la flora intestinal y hace falta ver cómo interactúan entre ellas”, sigue la Dra Antolín. “También hace falta ver qué cantidad de probióticos haría falta para mitigar los efectos de todas las bacterias que podrían interactuar con la mucosa en caso de lesiones inflamatorias como en la enfermedad que nos ocupa”. Lo que sí queda claro, gracias a este estudio y a otros del mismo grupo de investigación, es que el uso de los probióticos previene las alteraciones de la permeabilidad de la barrera intestinal y, por lo tanto, previene o reduce la invasión de bacterias de la flora intestinal hacia el interior de las células del intestino. Además, el uso de los probióticos reduce el reclutamiento de neutrófilos (células de defensa que acuden para limitar el ataque de la flora, pero que contribuyen a la inflamación de la mucosa) y contrarresta el efecto directo de las bacterias, presentes en la flora, cuando hay lesión intestinal instaurada cómo es el caso de la enfermedad de Crohn. Para más información www.ir.vhebron.net sobre las líneas de investigación de este Més informació: Margarida Mas (Galènia Comunicació Mèdica) Tel: 626.523.034 // mas-sarda@galenia.net grupo: