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Confederación nacional de Instaladores y Mantenedores C/ Príncipe De Vergara, 74 Madrid 28006 t. +34 914 112 410 f. +34 915 648 660 cni@cni-instaladores.com www.cniinstaladores.com Torre de Cristal de Mutua Madrileña Información General (Javier Rubio, ingeniero Dtor. facultativo de las instalaciones) Visita guiada para miembros Junta Directiva de CNI 2.10.2010 La Torre Cristal, con sus 249 metros y 53 plantas, es el segundo mayor en altura de los cuatro nuevos rascacielos madrileños, y el edificio de oficinas más grande de España. Su novedoso equipamiento tecnológico, así como su original estructura al servicio de la luz interior, la hacen una sorprendente obra de la arquitectura contemporánea. Javier Rubio, ingeniero, ofrece sus valoraciones acerca del mayor proyecto en el que ha trabajado nunca: “Estas obras son más impresionantes que rentables”. La Torre Cristal, de 52 plantas y 249 metros, es la segunda más alta de España después de la Torre Caja Madrid. Su estructura, que describe una original forma de monolito, contribuye a la variedad de edificios del nuevo parque empresarial conocido como “Cuatro Torres Business Area”. La parcela de terreno es parte de la antigua Ciudad Deportiva del Real Madrid. Su proyecto de construcción, así como el de sus torres vecinas, supone una innovación y un reto para la arquitectura española contemporánea. Aunque su arquitecto, César Pelli, es argentino, ha sido necesaria una enorme investigación por parte de los arquitectos e ingenieros españoles. El diseño de las Torres Petronas en Malasia es la más prestigiosa obra de Pelli, quien está trabajando ahora en un rascacielos de 180 metros en Sevilla. La Torre Cristal será la única dedicada íntegramente al alquiler de oficinas, y por tanto la que tiene más difícil en la actualidad su amortización económica. Con sus 120.800 m2 es la torre más grande de España. 76.724 m2 del total están por encima del nivel del suelo, y en ellos podrán trabajar algo más de 5.000 personas. Javier Rubio, ingeniero legal y director facultativo de las instalaciones, nos cuenta las curiosidades del pasado, la actualidad, y el futuro de esta obra maestra de la arquitectura. “Empecé a trabajar antes de la construcción, en 2002”. Escasa rentabilidad La construcción de esta torre cuesta aproximadamente 350 millones de euros, un precio similar al de sus torres vecinas. “Estas obras no se hacen por su rentabilidad sino por el impacto que tienen en la ciudad”. Javier Rubio asegura poder cobrar mucho más en otros proyectos, pero, “ no sólo de pan vive el hombre” La crisis económica está poniendo el peligro la amortización de las torres en el plazo previsto. Plazo que aún desde las optimistas previsiones iniciales se planteaba muy largo. algo lógico en semejante inversión. Torre de Cristal de MUTUA Madrileña Información General Oficinas a la carta La gran mayoría de la superfície del edificio, dedicada a oficinas, podrá ser personalizada a su antojo por las empresas que alquilen. Para los trabajos que requieran de obra será necesaria la autorización de los propietarios del edificio. Hay variedad de plantas, pues se reducen en superficie conforme ascendemos en altura. Iluminación inteligente Una de las características más peculiares de Torre Cristal es su tratamiento de la luz. Y es que la forma de monolito no se debe únicamente a la belleza formal, sino también al aprovechamiento de la luz natural que supone. El sistema eléctrico de iluminación se va autorregulando según la luz que recibe del exterior a las diferentes horas del día. La orientación de sus cristales permite una canalización óptima de los rayos del sol y en consecuencia un ahorro energético considerable. Los efectos de reflejo de la luz entre los cristales de la fachada que ha logrado Pelli producen un efecto luminoso muy agradable que lo confunde con un elemento más del entorno natural. El edificio es clara imagen de la elegancia y sobriedad lineal de Pelli, y una verdadera apuesta por la modernidad arquitectónica que siempre ha buscado en sus obras. Podemos decir ha llenado de luz el oscuro monolito de 2001: Una Odisea del Espacio. Un jardín en el cielo En la cúspide del monolito se encuentra uno de los pocos jardines verticales que hay en el mundo. Es obra de Patrick Blanc, botánico francés a quien se debe la invención de estos jardines, y único en el mundo construyéndolos. El jardín mide 34 metros de altura, desde la última planta habitable hasta el final de la torre, y se encuentra dispuesto al clima exterior. No tiene un solo grano de tierra, ya que los sustratos que necesita de ésta se le introducen con el agua en el riego. Las plantas soportan las condiciones meteorológicas propias de la altura a la que se encuentran. Esta parte del edificio permanecerá reservada a directivos de la Mutua Madrileña, cuyo Consejo Directivo ocupará las plantas superiores. Así ocurrirá también en las otras tres torres del complejo empresarial. La estructura metálica que alberga el jardín es compleja y costosa, “tiene que resistir a un fuertísimo efecto vela”. Raíces profundas Por si fueran poco 249 metros sobre el suelo, seis sótanos se suceden bajo la torre. Cada uno de ellos alberga aproximadamente 300 plazas de aparcamiento, sumando el total unas 1.200 plazas. Un pequeño cinturón soterrado une las cuatro torres a la altura del segundo sótano. El cimiento clave de la torre es una losa de homigón de 6 metros de altura que ocupa toda la parcela del edificio. Desde los sótanos se impulsa el agua a toda la torre mediante unas bombas de auténtica industria. Seguridad Como en muchos otros campos, la seguridad es prioridad en este complejo empresarial. La obra multiplica su complejidad con el entramado antiincendios y salidas de emergencia. Dos ascensores, utilizados ahora como montacargas, servirán únicamente como salida de emergencia, contando con un sistema de aislamiento total del resto del edificio. Pág. 2 de 3 Torre de Cristal de MUTUA Madrileña Información General En caso de incendio, las escaleras de emergencia y el vestíbulo quedan completamente aislados por unos burretes especiales y ventilación independiente. Como es normal en edificios de este tamaño, pulverizadores de agua, acompañados de detectores de humo, cubren todos los techos. Un núcleo de hormigón central sostiene la estructura, ayudado de pilares laterales metálicos forrados de hormigón para evitar la fundición en caso de incendio. La ley española exige que los diferentes sótanos tengan salidas y ventilación independientes, y evitar así la propagación del posible fuego. Otra particularidad de nuestra legislación obliga a que haya 1,5 metros de separación entre pisos, lo que reduce el aprovechamiento del espacio. “Los arquitectos de fuera no se pueden explicar esta media de seguridad, aunque es verdad que en sus países existen otras reglas incómodas que no encuentran en España” comenta Javier Rubio al tratar este punto. En caso de apagón eléctrico, un centro de producción eléctrica propio garantiza el suministro de un tercio de la iluminación de la torre y todos los sistemas de emergencia. En estos momentos el acceso a las obras permanece muy restringido. Después de que en enero de este año un aficionado burlase la seguridad y se lanzase en parapente desde la parte superior de la torre, la empresa ha querido evitar riesgos poniendo un férreo control de acceso, incluyendo detector de metales. Un centro de control avanzado completamente informatizado regula todos los sistemas. La técnica escondida Todo rascacielos requiere una cantidad ineludible de plantas técnicas. Éstas contienen únicamente maquinaria de mantenimiento de la torre. El gran reto de los arquitectos diseñadores es disimular su presencia de forma que no se aprecien desde el exterior. En la Torre Cristal apenas se perciben las cinco plantas técnicas que precisa. Sin embargo, en Torre Espacio llaman la atención varias plantas técnicas situadas a baja altura detrás de una vistosa rejilla El sistema de calefacción de las torres es de última generación. Todos los cristales exteriores del edificio cuentan con una pequeña cámara de aire acondicionada a una temperatura media, así se evitan los cambios de temperatura al acercarse a los cristales. El techo inclinado de la torre alberga placas solares empleadas para el calentamiento del agua caliente de los aseos. “Esta medida tiene todo su sentido en la ley, ya que no es en absoluto rentable” dice Javier Rubio. Los circuitos de agua caliente se refrigeran en la M5, planta técnica que junto con M4 y M3 ocupan los últimos pisos del edificio. En estas plantas también trabajan las poleas de los 32 ascensores que recorren la torre a diferentes alturas. El sistema de calefacción del hall es por calentamiento del suelo mediante tubos situados bajo el mármol. Aunque no todos los madrileños parecen igual de entusiasmados con estas torres del futuro, Javier Rubio asegura: “La tendencia en los próximos años es a seguir construyendo edificios de estas características”. En pocos meses la construcción de la Torre Cristal concluirá, y se pondrán a prueba los sistemas de última tecnología que durante día y noche terminan de instalarse. Mucho de lo oculto tras los cristales sólo lo habrán visto quienes con pasión y muchísimo trabajo han aceptado el reto de situar el techo de Madrid Pág. 3 de 3