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COMUNICADO DE PRENSA
Costa Rica y California son los ganadores de los SHARK
AWARDS 2016
Düsseldorf, 30 de enero de 2016:
La organización internacional de protección de los tiburones SHARKPROJECT proclamó en el
escenario de BOOT, en Düsseldorf, a los galardonados con los SHARK ENEMY y SHARK GUARDIAN de
este año. Se trata de los únicos premios del mundo relacionados con la protección de los tiburones.
El jurado se compone de 31 organizaciones dedicadas a la protección del mar. Su dictamen fue
unánime.
El SHARK GUARDIAN –defensor de los tiburones del año– es el estado de California. Recibe esta
distinción por su consecuente puesta en práctica y control de la ley aprobada en 2012 que prohíbe el
comercio con aletas de tiburones. SHARKPROJECT supervisó muy de cerca la aplicación de esta ley en
los años que siguieron a su proclamación, antes de otorgar el premio. Su conclusión fue que
California es todo un ejemplo a la hora de procesar los delitos cometidos contra dicha ley. El estado,
que antes de 2012 era el segundo mayor importador de aletas de tiburón del mundo, emite así una
clara señal internacional. Entrega este reconocimiento una organización estadounidense asociada a
SHARKPROJECT.
Sin embargo, también hay una cara más que negativa en la situación: Costa Rica. Costa Rica es uno
de los centros neurálgicos del comercio con aletas de tiburón, en virtud de su situación geográfica y
de la corrupción generalizada. Así, el país recibió ya en 2006 el galardón SHARK ENEMY AWARD como
consecuencia de la política de su entonces presidente, Abel Pacheco. Hubo que esperar hasta 2013,
con la presidenta Laura Chinchilla Miranda, para constatar un cambio de actitud. La presidenta
prohibió el comercio con aletas de tiburón y convirtió por primera vez a Costa Rica en uno de los
países pioneros en la protección de este animal. Esto le granjeó el premio SHARK GUARDIAN del año
en 2013. Todo bien, ¿verdad? Sí, hasta que llegó él: Luis Guillermo Solís, el actual presidente del país
centroamericano. En opinión del jurado (31 organizaciones internacionales dedicadas a la protección
del mar), él es el SHARK ENEMY –o enemigo de los tiburones– del año. Tras 2006, este es el segundo
galardón negativo otorgado al país por su política de protección marina. Se trata de una verdadera
tarjeta roja entregada por 31 organizaciones dedicadas a la protección del mar.
El motivo es el giro radical que ha sufrido la política de protección de los tiburones. El Presidente
Solís ha eliminado de forma sistemática todas las medidas establecidas legalmente para la protección
de los tiburones. Es más, su gobierno ha aprobado numerosas nuevas leyes y normativas que
favorecen la caza de tiburones y el comercio con aletas.
Hará entrega del galardón SHARK ENEMY la organización asociada a SHARKPROJECT en San José,
PRETOMA.
¿Desea obtener más información?
rarauz@pretoma.org
Imagen: © Paul Munzinger