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EL PACIENTE CON TRAUMATISMO OCULAR Cada año se producen más de 2 millones de lesiones oculares (USA). Muchas lesiones oculares son menores, pero sin una intervención inmediata y adecuada, incluso una lesión menor puede afectar a la vista. Por este motivo todas las lesiones oculares deben considerarse situaciones de urgencia médica, que requieren una evaluación e intervención inmediatas. Etiología Un traumatismo puede afectar a cualquier parte del ojo, especialmente a las zonas expuestas. Los tipos más frecuentes de lesión ocular son los causados por cuerpos extraños, abrasiones. También puede deberse a quemadura, objetos penetrantes o una fuerza contusa. Abrasión corneal Concepto: La abrasión corneal es la alteración del epitelio superficial de la córnea. Suele acompañarse de dolor y sensación de cuerpo extraño, y si afecta el área pupilar la visión se encuentra comprometida. a)Etiología: -Los objetos que causan normalmente abrasión corneal incluyen lentillas, pestañas, pequeños cuerpos extraños (como polvo o suciedad), y las uñas. -La sequedad de la superficie ocular y las sustancias químicas irritantes pueden causar también abrasión. b)Manifestaciones: Las abrasiones superficiales de la córnea son extremadamente dolorosas, pero, en general, curan con rapidez sin complicaciones ni formación de cicatriz. La fotofobia y el lagrimeo son signos frecuentes. Cuando el estroma está lesionado por una abrasión o desgarro profundos, aumenta el riesgo de infección, se retrasa la curación y se forma una cicatriz. Quemaduras a)Etiología: La superficie externa del ojo puede quemarse por calor, radiación o una explosión, pero las quemaduras químicas son las más frecuentes. Quemaduras químicas: Tanto las sustancias ácidas como básicas pueden quemar el ojo. El amoníaco, los productos que contienen lejía (como los limpiadores de hornos y de desagües) y ácidos de las baterías de los coches, entre otras causas, están implicados en las lesiones oculares. Las quemaduras causadas por sustancias básicas son especialmente peligrosas porque pequeñas partículas del producto químico pueden permanecer en el saco conjuntival, causando una lesión progresiva. El ácido produce una lesión rápida ocular, pero, generalmente, provoca quemaduras menos graves que las sustancias básicas. Manifestaciones: El paciente, además de informar sobre el contacto de la cara o los ojos con una sustancia cáustica u otro producto ardiente, refiere dolor ocular y disminución de la visión. A menudo, los párpados están hinchados. Las quemaduras pueden afectar también a la cara o los párpados. El aspecto del ojo puede variar, dependiendo del tipo de quemadura. La conjuntiva está enrojecida y edematosa; se puede observar descamación, particularmente en el caso de las quemaduras químicas. La córnea se muestra, a menudo, opaca u oscurecida y se pueden observar ulceraciones. Quemaduras térmicas: Las lesiones por explosiones y quemaduras por exposición a la luz ultravioleta (UV) provocan el mayor riesgo de quemaduras térmicas oculares. Los rayos UV acusan también lesión corneal, cuya gravedad oscila de leve a extensa. Según la fuente de luz UV, estas quemaduras se pueden conocer por diversos nombres, como ceguera producida por el reflejo de la nieve, quemaduras por el arco de soldadura o quemadura por exposición a la radiación ultravioleta. Por su relevancia se describe la: Queratopatía por luz ultravioleta/térmica Etiología: Es una queratopatía fotoeléctrica aguda, que se presenta en los soldadores (por el arco voltaico), por exposición a las radiaciones ultravioletas o a las lámparas solares, sin la protección ocular adecuada. Manifestaciones: Después de una latencia de unas 6-12 horas de la exposición, el paciente refiere los síntomas siguientes: Dolor ocular de moderado a intenso, Ojo rojo, Lagrimeo, Fotofobia, Sensación de cuerpo extraño y Visión borrosa. Se acompaña de otra sintomatología como edema y blefarospasmo. A la tinción con fluoresceína se observa: Queratitis punteada superficial en el área interpalpebral. Traumatismo penetrante a)Etiología: La perforación del ojo se produce por diversas causas. Esquirlas de metal u otro tipo de partículas producidas por el taladro a alta velocidad o el esmerilado o la trituración, trozos de cristales rotos u otras sustancias pueden penetrar en el ojo. Las balas (incluso las de tipo BB), las flechas y los cuchillos pueden penetrar en el ojo. b)Manifestaciones: Las perforaciones oculares causan dolor, la pérdida parcial o completa de la vista y, posiblemente, hemorragia o la salida del contenido ocular. Traumatismo contuso a)Etiología: -Las lesiones deportivas son una causa frecuente de traumatismo contuso ocular. Los ojos pueden recibir un golpe por acción de una pelota (con frecuencia, de béisbol, tenis, frontón y balonmano) o lesiones producidas en deportes de contacto, como baloncesto, fútbol, boxeo o lucha libre. -Algunos ejemplos de otras causas de traumatismo contuso ocular son los accidentes de vehículo a motor, caídas y agresiones físicas. b)Manifestaciones: El traumatismo contuso puede causar una lesión ocular, como -equimosis palpebral (ojo negro) o -hemorragia subconjuntival, causada por la rotura de un vaso sanguíneo de la conjuntiva. Se observa una zona brillante bien definida de eritema debajo de la conjuntiva. La hemorragia no causa ni dolor ni molestias y no es necesario un tratamiento. La sangre se reabsorbe, normalmente, entre 2 y 3 semanas. -El hipema, o hemorragia en la cámara anterior del ojo, es el posible resultado de un traumatismo contuso ocular. Cuando el tracto uveal del ojo, altamente vascularizado, es alterado por una fuerza contusa, se produce una hemorragia, y la sangre ocupa la cámara anterior. El paciente refiere dolor ocular, disminución de la agudeza visual y ve los objetos con un tono rojizo. La sangre es visible en la cámara anterior. -Una fractura por rotura orbitaria es otra posible consecuencia de un traumatismo contuso ocular. Aunque cualquier parte de la órbita del ojo puede fracturarse, el hueso etmoides del suelo orbitario es el lugar más probable. El contenido orbitario, como la grasa, los músculos y el propio ojo, pueden herniarse a través de esta fractura hacia el seno maxilar subyacente. El paciente refiere diplopía (doble visión), dolor al mover el ojo afectado hacia arriba y disminución de la sensibilidad en el carrillo afectado. El ojo se muestra hundido (enoftalmos) y durante la exploración se observa limitación del movimiento. ASISTENCIA INTERDISCIPLINARIA Evaluación Cuando se sospecha o comprueba un traumatismo ocular, se realiza una exploración minuciosa para determinar el tipo y la extensión de la lesión. Salvo que esté indicado un tratamiento inmediato, como en el caso de una quemadura química, se evalúa la vista inicialmente. Si el paciente lleva normalmente lentes correctoras, se evalúa la vista con las lentes puestas. El movimiento ocular se examina, salvo que se observe un objeto penetrante, y se exploran el párpado y el ojo por si presentasen desgarros. La inspección se realiza con luz intensa y una lupa de magnificación o lámpara hendida. Puede ser necesaria anestesia tópica antes de explorar el ojo, si el paciente presenta dolor y la fotofobia dificulta la apertura del ojo. La tinción con fluoresceina puede ayudar a identificar los cuerpos extraños y las abrasiones. Lámpara de hendidura y oftalmoscopia. Las radiografías y TC faciales permiten identificar fracturas orbitarias o cuerpos extraños dentro del globo. Se puede emplear la ecografía para detectar desprendimiento de retina o una hemorragia vítrea. Pautas de actuación básicaactuación básica Cuerpos extraños Los cuerpos extraños se extraen con irrigación, un bastoncillo de algodón o una aguja u otro instrumento estéril. Se aplica una pomada antibiótica (eritromicina), después de su extracción. En pacientes con abrasiones corneales, en la actualidad no se colocan parches oculares, ya que existe evidencia que recomienda que la córnea se cura más rápido y con menos dolor que cuando no se realiza oclusión. Por este motivo, en la actualidad, raras veces se suele utilizar. Quemaduras La prioridad inmediata de atención de pacientes con quemaduras químicas es el lavado del ojo afectado con gran cantidad de líquido. Es preferible utilizar solución salina normal; sin embargo, se puede utilizar agua si no se dispone de esta solución. Puede ser útil utilizar una unidad de irrigación de lentes de contacto o una sonda intravenosa, para lavar las superficies oculares. Se levanta el párpado para identificar y extraer el material del saco conjuntival. Un anestésico tópico, alivia el dolor, facilitando la inspección y la irrigación. Durante la irrigación, se dirige el líquido desde el canto interno del ojo al externo. La inclinación ligera de la cabeza del paciente hacia el lado afectado evita la contaminación del ojo sano. La irrigación se continúa hasta que el pH del ojo sea normal (en el intervalo de 7,2 a 7,4). Después de la irrigación, se aplica una pomada antibiótica tópica, como gentamicina oftálmica. En la Queratopatía por luz ultravioleta/térmica, la pauta de tratamiento recomendada es: Midriático ciclopléjico (ej. tropicamida) Antibiótico tópico (gotas o ungüento) Analgésicos orales según se requiera Traumatismos penetrantes Las heridas penetrantes del ojo requieren, normalmente, la intervención quirúrgica. La asistencia inmediata se centra en aliviar el dolor y proteger el ojo de otras lesiones. Para evitar la pérdida del contenido intraocular, no presione el ojo, sino más bien tápelo con una gasa estéril o una almohadilla ocular. Si se observa un objeto extraño dentro del ojo o sobresaliendo, no intente retirarlo. Deberá inmovilizarlo y proteger el ojo con una pantalla ocular de metal hasta que pueda examinarlo un oftalmólogo. Se puede utilizar un vaso de papel u otro medio protector, si el objeto es demasiado largo para utilizar un protector ocular. La colocación de un parche en el ojo sano disminuye también el movimiento ocular. El dolor se controla con analgésicos narcóticos, como morfina. El paciente puede precisar sedación y antieméticos, para evitar los vómitos. Se prescriben antibióticos, como cefazolina o gentamicina por vía intravenosa, para evitar una infección. Traumatismo contuso Las intervenciones en caso de un paciente con un traumatismo contuso ocular incluyen colocar la cama en posición de semi-Fowler y proteger el ojo lesionado frente a otras lesiones, con un protector ocular. El ojo sano se tapa también para minimizar el movimiento ocular.