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Inquietud sobre la salvación
San Lucas 13:22-27
Pastor Wilson Carrero
22 de sept. 2013
Introducción
• Una pregunta entre la multitud
• Luc 3:22 Pasaba Jesús por ciudades y aldeas,
enseñando, mientras se encaminaba a Jerusalén.
• Luc 13:23 Alguien preguntó: –Señor, ¿son pocos
los que se salvan? Él les dijo:
La respuesta de Jesús.
• Nos dirá lo que hace falta para tan difícil tarea.
Debemos estar dispuestos
• Luc 13:24 –Esforzaos a entrar por la puerta angosta,
porque os digo que muchos intentarán entrar y no
podrán.
– Esforzaos-agonizesthe- agonizar, luchar, combatir,
esforzarse al máximo, trabajar fervientemente.
– Quieres entrar al reino de los cielos?
– Quieres ser parte de los salvos?
Tu mayor energía en buscar a Dios
• La salvación es un don- Pero el don hay que
buscarlo como la perla de gran precio.
• Dios debe ser buscado, amado, deseado.
• Deu 4:29 Pero si desde allí buscas a Jehová, tu Dios,
lo hallarás, si lo buscas de todo tu corazón y de toda
tu alma.
• Jer 3:10 Con todo esto, su hermana, la rebelde
Judá, no se volvió a mí de todo corazón, sino
fingidamente, dice Jehová».
• Joel 2:12 »Ahora, pues, dice Jehová, convertíos
ahora a mí con todo vuestro corazón, con ayuno,
llanto y lamento.
• El camino de la salvación
– Es estrecho- No es sencillo, no es fácil,
• Mat 7:13 »Entrad por la puerta angosta, porque
ancha es la puerta y espacioso el camino que lleva a
la perdición, y muchos son los que entran por ella;
• Mat 7:14 pero angosta es la puerta y angosto el
camino que lleva a la vida, y pocos son los que la
hallan.
– Intentarán y no podrán
• Lucas 14:25 Grandes multitudes iban con él; y
volviéndose, les decía:
• Lucas 14:26 «Si alguno viene a mí y no aborrece a su
padre, madre, mujer, hijos, hermanos, hermanas y
hasta su propia vida, no puede ser mi discípulo.
• El estorbo de los sentimientos
– Lucas 14:26 «Si alguno viene a mí y no sacrifica el
amor a su padre y a su madre, a su esposa y a sus
hijos, a sus hermanos y a sus hermanas, y aun a su
propia vida, no puede ser mi discípulo.
• Aborrecer - Miseo = odio, no me gusta, que odio.
• Habrá situaciones en que habrá que escoger entre:
o
Lo que amo y Jesús
o
Lo que quiero y Jesús
o
Lo que me gusta hacer y Jesús
• Y ese sentimiento me ata- me engaña- me matamejor es aborrecer lo que me estorba y sacrificarlo,
para lograr seguir a Jesús.
• Dios tiene que ser lo más importante en tu vida
• Nada puede interponerse con esa decisión
• Ni tu humanidad, ni los sentimientos, ni tu vida
misma, debe ser mas importante que Dios
• Sino tienes esa decisión, no puedes ser un discípulo
de Jesús- no podrás ser salvo
• Luc 14:27 El que no lleva su cruz y viene en pos de
mí, no puede ser mi discípulo.
– La decisión es una responsabilidad que implica
siempre sacrificio.
• Jesús tomó su copa, la que el padre le dió
–Cada persona tiene su copa, tiene su cruz,
hay un diseño de lo alto para cada uno
• Lam 3:27 Bueno le es al hombre llevar el yugo
desde su juventud.
• Luc 13:25 Después que el padre de familia se haya
levantado y cerrado la puerta, y estando fuera
empecéis a llamar a la puerta, diciendo: “Señor,
Señor, ábrenos”, él, respondiendo, os dirá: “No sé de
dónde sois.
• No siempre la puerta estará abierta
Se acaba con la muerte
Se acaba con la venida de Jesús
• Todo tiene un límite- el tiempo de salvación tiene
un límite.
• La falsedad de mi seguridad religiosa
Estar presente delante de Dios no significa que le
estás sirviendo con todo tu corazón.
• Luc 13:26 Entonces comenzaréis a decir: “Delante
de ti hemos comido y bebido, y en nuestras plazas
enseñaste”.
• Luc 13:27 Pero os dirá: “Os digo que no sé de dónde
sois; apartaos de mí todos vosotros, hacedores de
maldad”.
• 2Co 6:1 Así, pues, nosotros, como colaboradores
suyos, os exhortamos también a que no recibáis en
vano la gracia de Dios,
• 2Co 6:2 porque dice:
«En tiempo aceptable te he oído,
y en día de salvación te he socorrido».
Conclusión
• 2Pe 1:10 Por lo cual, hermanos, tanto más
procurad hzcer firme vuestra vocación y elección,
porque haciendo estas cosas, jamás caeréis.
• 2Pe 1:11 De esta manera os será otorgada amplia y
generosa entrada en el reino eterno de nuestro
Señor y Salvador Jesucristo.