Download acto mariano - Hermanas Hospitalarias

S E M A N A VO C AC I O N A L : 6 º D Í A
“ VO C AC I O N A D O S
PA R A L A H O S P I TA L I DA D ”
AC T O M A R I A N O
MONICIÓN:
El corazón del mundo tiene nombre de mujer: MARIA. Un Corazón abierto, un
Corazón de virgen. En él, Dios sintió la acogida total, de una mujer dispuesta a todo, y la luz del Creador la inundó por completo. En sus entrañas de virgen, la Palabra se hizo carne y apareció entre nosotros.
María es el Corazón donde Dios, se unió con nosotros. Ella es la escuela donde
los cristianos aprendemos a vivir el Evangelio, para hacerlo presente en nuestro
mundo.
Por medio de ella, en la persona de Jesús, el Padre nos dijo, cuánto nos ama. En
ella somos engendrados a la Vida, por la fuerza del Espíritu Santo. Es nuestra
“verdadera Madre”.
Ella bajo la invocación de nuestra Señora del Sagrado Corazón es desde los
inicios de la Congregación “Nuestra Madre” Señora del Corazón de Jesús y Señora de nuestro Corazón, ella cuida y alienta nuestra vocación… porque nadie como
ella puede obtenernos “ la entrada y permanencia en el corazón de su Hijo”
(Const 8)
CANTO: “Madre y Reina”
Madre y Reina del Corazón de Jesús,
alcánzanos la gracia de que nuestro corazón,
sólo esté animado de los sentimientos
del Corazón de Jesús.
“Ella nos obtiene entrada y permanencia en el corazón del
Hijo para vivir en Él y reproducir en nosotras sus sentimientos”. (Const 8)
PETICIÓN: Dueña y Señora del Corazón de Jesús, abrazadas a la Hospitalidad
queremos responder a tu Hijo en fidelidad. Confiamos en tu amor de madre, para
que guíes y acompañes nuestros pasos y nos introduzcas en lo profundo de sus Corazón, para aprender de él y ser como Él..
REZAMOS: 5 AVE MARÍAS
MÚSICA
“… modelo de entrega incondicional al señor y del amor maternal que necesitamos
para cooperar en la obra de salvación. Con ella y como ella compartimos y aliviamos
el dolor de nuestros hermanos…”. (Const 8)
PETICIÓN: María tú que libremente respondisteis a sus dones, desde tú: “Hágase en mi
según tu voluntad”, acoge nuestra suplica, intercediendo por cada uno de las que estamos
aquí, queremos contigo aprender a ser respuesta afirmativa ante las llamadas, que Dios nos
hace, junto a los pequeños, los que sufren, siendo y ofreciendo consuelo y esperanza.
REZAMOS: 5 AVE MARÍAS
MÚSICA
“María, Nuestra Madre, elegida del Señor, que se consagró
totalmente a la persona de su Hijo… es modelo para todos los
que se comprometen a seguir a Cristo en la vida religiosa” (Cont 14)
PETICIÓN: María, tú la vocacionada, la consagrada por excelencia; ayúdanos a mantenernos en fidelidad a los compromisos adquiridos a través de nuestra consagración.
REZAMOS: 5 AVE MARÍAS
CANTO:
Nuestra Madre y Señora
del Sagrado Corazón
haz que persevere siempre
en mi santa,
en mi santa vocación.
MÚSICA
“María, que acogió la Palabra de dios meditándola en su corazón, y que fue bienaventurada por haber creído, es modelo en nuestra vida de fe e intimidad con Dios…”.
(Cons 46)
PETICIÓN: Tú que fuiste tabernáculo vivo, porque en tus entrañas llevaste al que es la
Vida, enséñanos a orar, a vivir la intimidad con Él, en comunión con aquellos con los que
compartimos el carisma y el deseo de unión con Él
REZAMOS: 5 AVE MARÍAS
MÚSICA
“ María, que protege y mira con agrado a nuestra Congregación es la primera hospitalaria… ella nos conduce a la fuente de agua viva que brota del Corazón de Cristo, y
nos reviste de entrañas de misericordia… nos lleva a descubrir las necesidades de los
otros… de su firmeza y perseverancia al pie de la cruz aprendemos a permanecer hasta el final junto al enfermo” (Const 68)
PETICIÓN: María, Nuestra Madre, ejemplo de nuestra entrega y servicio hospitalario,
junto al hermano que sufre, ayúdanos a ser para ellos autenticas “madres” y mantenernos
hasta el final junto a ellos. Ayúdanos a todos los miembros de la comunidad hospitalaria, a
valora y promover en todo momento la centralidad del enfermos en nuestra misión, para así
ofrecerles una asistencia integral e integradora.
REZAMOS: 5 AVE MARÍAS
MÚSICA
ORACIÓN (todos juntos)
Virgen María, tú que movida por el Espíritu, acogiste al Verbo de la vida, en la profundidad
de tu humilde fe, ayúdanos a decir nuestro “sí”.
Tú, llena de la presencia de Cristo, llevaste la alegría a Juan Bautista, haciéndolo exultar en
el seno de su madre. Tú estremecida de gozo, cantaste las maravillas del Señor.
Tú que estuviste plantada ante la cruz con una fe inquebrantable y recibiste el alegre consuelo de la Resurrección… consíguenos ahora un nuevo ardor de resucitadas para llevar a
todos el Evangelio de la vida, en clave Hospitalaria.
Tú Madre del Amor, hecho gestos de ternura, cercanía, y misericordia, danos beber de tu
mismo manantial, para ser contigo, trasmisoras de la alegría del Evangelio en clave hospitalaria. Amén
Con el canto de la Salve, y de la mano de María, terminamos este encuentro de oración.
Ella icono de la vida consagrada, le pedimos a ella que nos enseña a vivir la alegría verdadera del seguimiento de Jesucristo; que nos sostenga y acompañe, protegiendo con su maternidad nuestra consagración y la de todos los consagrados.
Ella icono de todos aquellos que desean vivir la vida como vocación, desde una llamada a
un laicado, comprometido con el Reino
Que ella anime y fortalezca todos aquellos que se sientan llamados al seguimiento de su Hijo, de manera especial abrazando la Hospitalidad, como camino de consagración., y desde
un vocación laical.
CANTO: La Salve