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Discurso de clausura de Miguel Blanco, coordinador del Foro de Convergencia Empresarial.
Este evento que nos reúne en el día de hoy es la culminación de un primer ciclo del Foro de
Convergencia Empresarial, integrado hasta el momento por 60 entidades, cuya finalidad principal
es aportar la visión y el compromiso de los empresarios sobre el desarrollo sostenible de nuestro
país.
Nuestra presentación tiene como objetivo principal contribuir con los siguientes conceptos, los
que deben ser entendidos como un aporte para el referido desarrollo.
El primer concepto a enfatizar es la necesidad de la unidad. En nuestro primer documento, La Hora
de la Convergencia, decíamos que “Un país en el que sus fuerzas productivas, sociales y políticas
operen en un marco de creciente fragmentación no puede progresar como Nación y está llamado
a desgastarse en la confrontación perpetua entre sus partes”
Los empresarios estamos convencidos, acerca de la necesidad de buscar consensos y de participar
activamente con el conjunto de los ciudadanos en los asuntos públicos poniendo nuestras
propuestas a discusión para enriquecerlas en el debate y poder llegar a acuerdos y compromisos
que pongan a nuestro país en la senda del desarrollo sostenible.
Sabemos, por experiencia profesional, que es más fácil procesar y llegar a acuerdos sobre las
diferencias cuando existe un consenso respecto al marco en que las mismas se discuten. Estamos
convencidos también que los partidos políticos, las organizaciones sindicales y las entidades de la
sociedad civil tenemos que converger a un proceso similar, en el marco de la Constitución
Nacional de modo de concentrarnos en la sustancia de los problemas que enfrentamos.
Las bases para la formulación de políticas de Estado que proponemos reflejan nuestra opinión
sobre el marco institucional, económico y social que debe existir para atraer a las inversiones
necesarias para poder aprovechar las potencialidades de Argentina que hemos mostrado en esta
presentación.
Tal como se planteó en esta reunión los empresarios sabemos que Argentina es un país con un
gran potencial de desarrollo gracias a sus recursos naturales y humanos, como también a la
ausencia de conflictos sociales serios como los que afectan a otros países. Nuestro país tiene una
democracia consolidada, sin conflictos raciales ni religiosos, y tiene una buena relación con sus
países limítrofes sin hipótesis de conflicto.
Sin embargo, estamos convencidos que un acuerdo amplio entre las fuerzas políticas, las fuerzas
del trabajo, las organizaciones sociales y los empresarios sobre políticas de Estado que serán
implementadas, gobierne quién gobierne, sería un paso adelante muy importante para generar las
condiciones para la inversión. Dicho compromiso debe ser asumido con la sociedad, no con un
sector en particular.
Estamos seguros que la generación de empleo privado genuino es la herramienta principal para
eliminar la pobreza y la exclusión social.
La educación, en primer lugar, y el empleo privado genuino son fuente importante en la
construcción de la dignidad de las personas, permiten planificar el futuro de las familias y son la
base del ascenso social.
La inversión y la generación de empleos están íntimamente relacionadas. Es necesario crear las
condiciones para que ambas crezcan.
Dichas condiciones están incluidas en nuestra propuesta de políticas de Estado y estamos
convencidos que, de implementarlas, será posible generar los 3 millones de puestos de trabajo
que estamos proyectando en esta reunión.
Es necesario señalar también que, en las actuales circunstancias, para solucionar los problemas
de pobreza y exclusión social no se puede esperar a que se produzca el derrame natural a
mediano largo plazo que produce la maduración de las inversiones. Tampoco los subsidios y la
asistencia social permanente son solución a dichos problemas. Tenemos un potencial a desarrollar
en los jóvenes que no trabajan ni estudian y en la fuerza de trabajo desocupada que es necesario
integrar al proceso productivo cuanto antes.
En conclusión, es con gran satisfacción que, en nombre de las 60 entidades que conforman
actualmente el Foro de Convergencia Empresarial, puedo subrayar que hemos llegado a ciertos
acuerdos básicos con un conjunto muy relevante de dirigentes políticos que competirán en las
elecciones nacionales del año próximo, muchos de los cuales nos acompañan.
Nuestros objetivos para el futuro son:
o Continuar ampliando la base de análisis y discusión de nuestras propuestas en
universidades, organizaciones sindicales y entidades de la sociedad civil.
o Profundizar las bases de formulación de políticas de Estado propuestas en nuestro
documento convocando a un amplio debate con todos los sectores de la sociedad
sobre las medidas a adoptar para la implementación de dichas políticas.
o Poner a disposición los equipos técnicos de las entidades que conforman el Foro
de Convergencia Empresarial para quienes lo requieran.
o Continuar dando nuestra opinión sobre los temas relevantes de la agenda pública
Para concretar la Argentina posible con la que soñamos para nosotros, nuestros hijos y nietos es
necesario que nos comprometamos, entre todos, a consensuar e implementar las políticas de
Estado que permitan transformar esa posibilidad en certeza. La generación de empleo genuino es
la que permitirá transformar el crecimiento en desarrollo sostenible e integrarnos como sociedad.
Dejemos de lado nuestras diferencias circunstanciales y asumamos este compromiso para
beneficio la presente generación y también de las futuras.