Download programa pdf - FeMÀS - Festival de Música Antigua de Sevilla
Transcript
D14 MARZO | 20:30 | ESPACIO STA. CLARA Paul O’Dette Carta blanca Música italiana del siglo XVI Semana de la vihuela y de la cuerda pulsada Más información: www.femas.es Paul O’Dette Carta blanca. Música italiana del siglo XVI Laúd renacentista CURRÍCULO Paul O’Dette Paul O’Dette ha sido descrito como “el caso más claro de un genio tocando su instrumento” (Toronto Globe and Mail). Una de las figuras más influyentes en su campo, O’Dette ha ayudado a definir los fundamentos técnicos y estilísticos para los intérpretes de música antigua del siglo XXI. En ese recorrido, ha contribuido a inculcar en los intérpretes la importancia de formarse como buenos instrumentistas combinando la interpretación histórica, la precisión con el idioma y la ambición en la expresión personal. Ha tocado en los Festivales Internacionales más prestigiosos tales como Boston, Viena, Londres, París, Ámsterdam, Berlín, Múnich, Praga, Milán, Florencia, Ginebra, Madrid, Barcelona, Tokio, Moscú, San Petersburgo, Buenos Aires, Montevideo, Melbourne, Adelaida, Los Ángeles, Vancouver, Berkeley, Bath, Montpellier, Utrecht, Brujas, Amberes, Bremen, Dresde, Innsbruck, Tenerife, Copenhague, Oslo, Córdoba, etc… habiendo sido a menudo destacados sus conciertos como los mejores de estos eventos. Aunque es más conocido por sus interpretaciones solistas de laúd tanto en directo como en grabaciones, Paul O’Dette mantiene una interesante actividad internacional participando en ensembles liderados por solistas de otros instrumentos de su nivel. Es miembro del aclamado conjunto de continuo Tragicomedia. Paul O’Dette ha hecho más de 130 grabaciones, recibiendo cinco nominaciones para los Grammy y numerosos premios Obras de Francesco Canova Da Milano (1497-1543) Marco dall’Aquila (c.1480-1544) Alberto Da Mantova [también llamado Albert de Rippe] (c.1500-1551) internacionales por sus grabaciones. The Complete Lute Music of John Dowland (un set de 5 discos editados por Harmonia Mundi USA) fue galardonado con el prestigioso Diapason D’Or de l’année, mientras The Royal Lewters recibió el Diapason D’Or, el Choc du Monde de la Musique, 5 estrellas en Goldberg y entró en el Top10 de ClassicsToday.com. The Bachelar’s Delight: Lute Music of Daniel Bacheler fue nominado para un Grammy en 2006 como “la mejor grabación instrumental solista”. Sus conciertos han sido emitidos por ABC (Australia), Radio Argentina, BBC (Reino Unido), CBC (Canadá), Radio France, RAI (Italia), Westdeutscher Rundfunk (Colonia), Bayerischer Rundfunk (Múnich), SFB (Berlín), NOS (Holanda), Radio Austriaca, RTVE, TV Ankara, Televisión Húngara, Radio Noruega, Radiotelevisión Danesa, Televisión Sueca, Radiotelevisión Suiza, Radio Pública Nacional (USA) y CBS Television (USA). Es también un activo director de óperas barrocas. En 1997 lideró las interpretaciones de L’Orfeo de Luigi Rossi en Tanglewood, en el Boston Early Music Festival (BEMF) y en el Drottningholm Court Theatre en Suecia con Stephen Stubbs. Desde 1999 ha codirigido interpretaciones de Ercole Amante de Cavalli en el Boston Early Music Festival, Tanglewood, y en el Utrecht Early Music Festival, La Stellidaura Vendicata de Provenzale en la Vadstena Academy en Suecia, L’Orfeo y L’Incoronazione di Poppea de Monteverdi para el Festival Vancouver, Thésée de Lully, Ariadne de Conradi (Hamburgo 1691), Boris Goudenow de Mattheson, Psyché de Lully y Poppea de Monteverdi para el Boston Early Music Festival. La grabación de Ariadne fue nominada para un Grammy como “la mejor grabación de ópera de 2005”, Thésée fue nominada en la misma categoría en 2007 y Psyché en 2008. Ambas grabaciones de Lully fueron nominadas también para los Premios Gramophone. Ha sido invitado a dirigir numerosas orquestas barrocas en ambos lados del Atlántico incluyendo Portland Baroque Orchestra, Tafelmusik, Apollo’s Fire, Ensemble Arion, Chatham Baroque y Corona Artis. Además de su actividad como intérprete Paul O’Dette es un ávido investigador, habiendo trabajado extensamente en las fuentes de interpretación de la música italiana e inglesa del siglo XVII, tanto en la música para laúd como el continuo. Ha publicado numerosos artículos sobre temas de la práctica interpretativa histórica y es co-autor de la entrada Dowland en el Diccionario Grove de la música y los músicos. Ha sido galardonado con el Guerriero di Capestrano por su trabajo en la música de Marco dall’Aquila incluyendo una edición crítica de sus obras completas. Paul O’Dette es profesor de laúd y director de Early Music at the Eastman School of Music y Director Artístico del Boston Early Music Festival. NOTAS Conocido en su época como el Divino por su forma especialmente expresiva y comunicativa de tañer su instrumento, Francesco Canova Da Milano (1497-1543) puede ser considerado el primer gran laudista del Renacimiento italiano. Nacido cerca de Milán, lo que acabó por dejar impronta en su nombre, fue músico cortesano por toda Italia (de Venecia a Nápoles), pero fue en Roma donde encontró mejor acomodo, llegando a ser el laudista personal de tres papas, a uno de los cuales (Pablo III) acompañó a Niza en 1538 para el encuentro programado entre dos enemigos acérrimos, Francisco I de Francia y el emperador Carlos V. Su obra vio por primera vez la luz en tablaturas publicadas en 1536, y de ella se han conservado en torno a 130 piezas (más una docena de atribuciones dudosas), entre ricercares (o fantasías, que de igual forma aparecen en sus ediciones y manuscritos, aunque con el segundo figuran piezas que parecen algo más arcaicas) y tablaturas de piezas vocales: en ambos casos, el compositor combina con eficacia contrapunto con inventiva y virtuosismo. Marco dall’Aquila nació en esa bella ciudad de los Abruzos que en 2009 sufrió un terremoto que provocó centenares de muertos, miles de damnificados y un daño irreparable en su rico patrimonio artístico. La mayor parte de su carrera transcurrió de cualquier modo en Venecia, centro de la imprenta musical a principios del siglo XVI. Marco consiguió un privilegio de publicación, que fue paralizado cuando Petrucci presentó el suyo, que era siete años anterior. Como consecuencia, Dall’Aquila no pudo publicar nunca sus obras, que se han conservado en un manuscrito conservado en Múnich y lleno de inexactitudes. Su legado representa a la perfección el paso del estilo medieval al renacentista, pues sus obras más antiguas presentan texturas a dos y tres voces, abundantes quintas y pasajes en fabordón, mientras que las más modernas se caracterizan por texturas más densas, amplias líneas de contrapunto, imitaciones y pasajes en terceras y sextas. Como el resto de laudistas de su tiempo, Marco Dall’Aquila dejó ricercares y fantasías, danzas e intabulaciones de música vocal. Alberto Da Mantova (o Da Ripa; o Albert de Rippe, pues de las tres formas es conocido) nació en Mantua, donde seguramente se formó e inició su carrera musical, que en 1528 (o tal vez antes) lo llevó a la corte de Francisco I de Francia, donde alcanzó un altísimo status, convirtiéndose en uno de los músicos mejor pagados de su tiempo, pese a lo cual solo vio tres obras suyas publicadas en vida. Sin embargo, a su muerte, su alumno Guillaume de Morlaye publicó tres libros con sus obras, que incluyen 26 fantasías, 59 intabulaciones de piezas vocales (46 canciones, 10 motetes y 3 madrigales) y 10 danzas, todas ellas para laúd de seis órdenes, a las que hay que añadir otras dos fantasías para guitarra de cuatro órdenes. Sus fantasías parten, como las intabulaciones, de modelos de la música vocal, aunque son de una más densa polifonía y resultan en general de una expresividad más personal. Técnicamente, se trata de la música laudística más avanzada y virtuosística de su tiempo. Da Milano, Dall’Aquila y Da Mantova forman la trilogía esencial del laúd del Renacimiento italiano. Francesco Marcolini publicó en 1536 una recopilación de música laudística en cuyo prefacio lo dejaba así de claro: “Bajo el toque divino de Francesco Da Milano, Alberto Da Mantova y Marco Dall’Aquila, la suavidad del sonido del laúd penetra hasta el fondo del alma y hace desmayarse a todos los que lo escuchan”. Pablo J. Vayón