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Día 31 40 días con Jesús Transformador
EL MEJOR TESORO
1ª parte
Pues donde tengan ustedes su tesoro, allí
estará también su corazón.
Lucas 12:34
Sabía usted cuánto habla Dios en la Biblia
sobre…
Bautismo? 40 versos; Oración? 275 versos;
Fe? 350 versos; Amor? 650 versos; Finanzas
/ Posesiones Materiales / Riquezas? 2,350 versos.
Es innegable la importancia que le da Dios al manejo de los bienes
materiales, las riquezas. Como también es innegable el deseo y la atracción
que tenemos hacia ello.
Surge una frase que nos cuestiona frente a este tema: dime cómo manejas
tus finanzas y te diré qué clase de cristiano eres.
El manejo, la administración que le demos a los recursos que Dios pone en
nuestras manos refleja la calidad de relación que tengamos con el Señor,
demuestra realmente en dónde está puesto nuestro corazón, en el reino, o
en las riquezas terrenales. Jesús compara al reino de Dios con un gran tesoro;
-El reino de los cielos es como un tesoro escondido en un campo. Cuando un
hombre lo descubrió, lo volvió a esconder, y lleno de alegría fue y vendió todo
lo que tenía y compró ese campo. Mateo 13:44.
Todas las riquezas terrenales del hombre que habla Jesús en la parábola
fueron puestas para atesorar lo mejor. Así mismo Dios espera que todos los
recursos que están en nuestras manos por su misericordia sean puestos para
tener lo mejor, el reino entre nosotros; invertir en el reino será nuestra mejor
inversión.
Existen erradas posiciones frente a las riquezas, y han tratado de
espiritualizar y relacionar el tener más posesiones con una mejor relación con
Dios, así una persona que logre hacer una gran fortuna es más espiritual; en
el polo opuesto ven a la escasez de recursos como algo satanizado; pero
también vemos a los que justifican que la pobreza es muestra de una mejor
relación con Dios y se basan en el hecho de que Jesús no tenía donde
recostar su cabeza (Mateo 8:20) por lo tanto, tener o desear tener
posesiones materiales es en consecuencia algo negativo.
No podemos ir a extremos, ni lo uno, ni lo otro. La palabra es clara en cuanto
a las posesiones materiales, y en cuanto al manejo que le debemos dar a
estas.
Por eso tenemos que fijarnos qué tipo de administración le estamos dando a
las riquezas, que sigan los principios que Jesús transformador desea que
tengamos.
Lo primero que debemos evaluar es en dónde tenemos nuestro corazón.
Debemos estar seguros y confiados en el corazón de Cristo, no en las
riquezas, eso eliminará cualquier clase de temor (muchos de los temores
humanos son debidos a las posesiones terrenales). Lo segundo es considerar
que todo lo que tenemos en nuestras manos no nos pertenece, todo es de
Dios, -La plata es mía y el oro es mío —dice el SEÑOR de los Ejércitos
Celestiales— Hageo 2:8. Sólo somos mayordomos, con el derecho a disfrutar
de ello, pero no somos los únicos que tenemos ese derecho, por eso una
mirada egoísta frente a los recursos de Dios creyendo que son solo para mí,
es una posición errada.
Para mañana te dejaré algunos principios desde el punto de vista humano y
desde el punto de vista de Dios en cuanto al manejo de las finanzas, tú
considerarás en qué parte estás. Te animo a que decidas estar de parte de
Dios, siguiendo sus propósitos para ser transformado y tener la libertad
financiera que Jesús transformador desea que tengas en esta área.
Desafío de transformación para hoy:
Haz cuenta de todos los bienes materiales que Dios ha puesto en tus manos.
Responde a esta pregunta, con todo esto estoy invirtiendo en lo mejor? En
qué tesoro tengo puesto mi corazón?
Oración:
Pide a Jesús transformador que ayude a poner completamente tu corazón y
todo lo que tienes en el mejor tesoro; en el reino.