Download Descargar Artículo
Document related concepts
no text concepts found
Transcript
Expansión Mente- Cuerpo En cualquier momento de la vida es factible mejorar las condiciones físicas y mentales del ser humano y aprovechar el enorme potencial de la relación mente-cuerpo. Sin embargo estas mejoras serán más notables y duraderas cuando más temprano se aplican las medidas adecuadas. A continuación se presentan las recomendaciones prácticas más eficaces para alcanzar una vida sana más larga, mejorar la memoria, capacidad de aprendizaje y facultades cognitivas, así como para tener éxito en sus propósitos. Estas recomendaciones están basadas en investigaciones realizadas por los más prestigiosos centros de investigación sobre longevidad, superaprendizaje y relación mente-cuerpo. El CUERPO La mayoría de los especialistas, afirman que estamos capacitados genéticamente para vivir unos 120 años; sin embargo, contadas personas alcanzan esta edad. La mayoría no llega ni siquiera a la mitad. El promedio de vida en países desarrollados, es mucho mas alto que el de los países más pobres y en todo el mundo existen personas que viven mucho más que el resto. Estas grandes diferencias de vitalidad, indican una fuerte influencia de factores ambientales y de estilos de vida en el proceso de envejecimiento. RADICALES LIBRES. El metabolismo celular y agentes externos como: rayos x, luz ultravioleta, ozono, toxinas industriales, alcohol, humo de cigarrillos, antibióticos, etc., hacen que el cuerpo produzca toxinas que dañan las proteínas y grasas, con efecto acumulativo. Estas toxinas o radicales libres, están constituidas por moléculas de oxígeno muy reactivas, que oxidan a los tejidos con los cuales se encuentran, por esto se les llama también oxidantes. La acción oxidante de los radicales libres, conduce al deterioro de las células abriendo las puertas al cáncer y a otras enfermedades, y al daño de su capacidad de reparación, reduciendo su habilidad para producir células nuevas de la misma calidad. El organismo produce y procesa varias sustancias antioxidantes para neutralizar a los radicales libres y ejerce acciones limpiadoras y eliminadoras de proteínas y grasas añejas así como de reparación de tejidos, pero estas capacidades se debilitan con la edad. COLESTEROL. Se ha comprobado que existe una relación entre altos niveles de colesterol en la sangre y la incidencia de infartos y accidentes cerbrovasculares y que la reducción de dichos niveles disminuye significativamente estos riesgos. Existen dos tipos de colesterol: de baja densidad, asociado con los problemas del corazón y de alta densidad, o colesterol bueno, el cual contribuye a remover el colesterol malo. Se estima que un 20% a 30% del colesterol de la sangre proviene del consumo de alimentos de origen animal, el resto lo fabrica el organismo. INACTIVIDAD. La vida moderna, con su profusión de máquinas, procesos automáticos y facilidades de comunicación, ha reducido la movilidad del ser humano y lo ha hecho cada vez más sedentario, causando pérdida de masa muscular y ósea, acumulación de tejido graso y en general, una pérdida de eficiencia corporal, asociada con envejecimiento prematuro. STRESS. Las situaciones de peligro, miedo, rabia, angustia, etc., tan abundantes en la vida cotidiana, producen la secreción de hormonas que preparan al individuo para luchar o huir. La presencia reiterada de estas hormonas debilita la eficiencia del sistema inmunológico y contribuye a elevar la presión arterial, el colesterol malo de la sangre y los radicales libres. ¿QUÉ HACER? No fumar. Cada cigarrillo acorta la vida y aumenta grandemente el riesgo de contraer cáncer de pulmón. El humo de cigarrillos fumados por otras personas es dañino también para los no fumadores. Minimizar la exposición al Sol. La exposición al Sol es la causa principal del envejecimiento aparente ya que acelera el arrugamiento y deterioro de la piel, causado por los rayos ultravioleta A y B, los cuales están presentes todos los días desde que amanece hasta que oscurece, aun en días nublados. La exposición al sol también aumenta la producción de radicales libres. Minimizar el alcohol. A pesar de que pequeñas cantidades de alcohol pueden contribuir a mejorar la digestión y las afecciones del corazón, el alcohol daña las células del cerebro y del hígado y aumenta la producción de radicales libres. Comer sano. Para reducir los daños de los radicales libres y el colesterol, debemos minimizar los alimentos de origen animal, especialmente los ricos en grasas, que son los que más radicales libres producen y contienen colesterol, prefiriendo alimentos de origen vegetal, ricos en fibras, especialmente frutas y legumbres de colores intensos, granos y cereales, los cuales no contienen colesterol y en cambio contienen antioxidantes y anticancerígenos. Los alimentos que contienen más colesterol son: hígado, huevos (yemas) y calamares. Los vegetales no contienen colesterol. Las fibras ofrecen muchos efectos positivos: evitan el estreñimiento al contribuir a formar materia fecal más blanda, reducen el riesgo de cáncer de colon, acelerando el tránsito intestinal de los residuos, reducen el colesterol de la sangre y contribuyen a regular el peso, ya que al ingerir fibras, se dejan de ingerir alimentos con más calorías. Además las fibras ayudan a regular el azúcar de la sangre, demorando la velocidad de absorción del azúcar. Las mejores fuentes de fibras se encuentran en el salvado de trigo, avena, nueces, casabe, yuca, pan integral, brócoli, coliflor, caraotas, cambur, cítricos, manzana, pera, berenjena, lentejas y legumbres en general. Tomar suplementos. Los alimentos no proveen suficiente protección antioxidante para frenar de manera importante el proceso de envejecimiento y contrarrestar los crecientes efectos dañinos del entorno, por lo que se recomienda tomar suplementos alimenticios antioxidantes y sustancias naturales para mejorar la energía corporal y el alerta cerebral. Los suplementos más poderosos son: Vitamina C (1000mg/día), Vitamina E (400 UI/Día) y Betacaroteno (25.000 UI/día). Además, es conveniente ingerir ácidos grasos Omega-3 de aceite de pescado, para bajar el nivel de los triglicéridos, inhibir la formación de coágulos sanguíneos y contribuir a prevenir accidentes cerebro vasculares. También se recomienda tomar Ginkgo Biloba (60mg con cada comida), para mejorar el suministro de oxigeno al cerebro, especialmente en las personas mayores. Mantenerse activo. La actividad física vigorosa, contribuye a mejorar la circulación y en general la eficiencia cardiovascular y pulmonar, además de retardar la pérdida de masa muscular y la descalcificación. Además contribuye a reducir el metabolismo en reposo, a retardar el envejecimiento del cerebro, a reducir los niveles de stress, a aumentar los niveles de colesterol bueno en la sangre y, por si esto fuera poco, estimula la secreción de la hormona de crecimiento humano, cuya producción disminuye rápidamente con la edad y es clave para prolongar la juventud. Por sus efectos en el organismo, la actividad física y los ejercicios se pueden clasificar en tres grandes grupos: Aeróbicos, de Fuerza y de Flexibilidad. Ejercicios aeróbicos. Los ejercicios aeróbicos son aquellos que estimulan la actividad del corazón y de los pulmones por un tiempo suficiente para producir cambios beneficiosos en el cuerpo: trote, natación, ciclismo, caminata vigorosa, remo, salto de cuerda y muchos otros. Requieren un enfoque progresivo gradual para evitar sobrecarga al corazón y daños a las articulaciones. Antes de comenzar un programa de ejercicios aeróbicos se recomienda consultar con un médico en caso de sospechas de afecciones del corazón, o tener más de 40 años, y en todo caso, consultar con un manual especializado, para controlar mejor su progreso individual. El ejercicio aeróbico más saludable y fácil de practicar, es caminar vigorosamente a unos 6 kilómetros por hora, durante unos 30 minutos o más. Ejercicios de fuerza. Además de ejercicios aeróbicos, es necesario hacer ejercicios de fuerza para desarrollar masa muscular y ósea que permitan mantener huesos y articulaciones más fuertes por más tiempo, mayor fortaleza y resistencia a traumatismos y menos vulnerabilidad a dolores corporales. Estos ejercicios pueden hacerse utilizando una variedad de implementos, desde máquinas muy especializadas, pesas, etc., hasta utilizar solamente el cuerpo, haciendo flexiones pectorales, abdominales, etc., que provoquen esfuerzo muscular repetido. Se recomienda que se hagan con movimientos lentos, alternando grupos musculares, aumentando con el tiempo su duración o intensidad, a medida que se va logrando mayor fuerza. Se recomienda que se hagan 2 0 3 veces por semana, de 15 a 30 minutos diarios o más, alternando los días con ejercicios aeróbicos. Ejercicios de calentamiento y flexibilidad. Antes de comenzar cualquier ejercicio, con el fin de evitar desgarres musculares, se recomienda hacer por algunos minutos, movimientos de calentamiento del cuerpo, que contribuyan a estirar tendones y a flexibilizar las articulaciones. LA MENTE El cerebro humano esta compuesto de unas 100.000 millones de células nerviosas o neuronas, altamente interconectadas, lo cual en opinión de muchos científicos es una exageración de la naturaleza, ya que solamente utilizamos un 10% o menos de su potencial mental. A medida que envejecemos, las estructuras neurales relacionadas con el aprendizaje, razonamiento y la memoria, sufren cambios físicos. En su mayoría estos cambios están asociados con el encogimiento de las neuronas en diversas zonas del cerebro, principalmente por falta de uso. Otros cambios son atribuibles a reducción en el flujo de sangre y suministro de oxígeno a diversas áreas del cerebro, por arterioesclerosis, obstrucciones, y en menor grado, a enfermedades como el mal de Alzheimer, enfermedad de Parkinson, etc. El cerebro se divide en dos hemisferios muy especializados, unidos por un complejo increíble de unos 300 millones de fibras nerviosas, llamado Cuerpo Calloso. Se ha determinado que en la mayoría de las personas diestras, el hemisferio izquierdo realiza mayormente los procesos lingüísticos, matemáticos y lógicos, manejo de fórmulas, etc., en fin, procesos que requieren un enfoque secuencial. En cambio, el hemisferio derecho de estas personas, se ocupa mayormente del manejo de imágenes, gráficos, formas y patrones, música, colores, relación espacial, etc., lo cual requiere un enfoque holístico o integral. La especialización de los cerebros es fuente de conflictos, aciertos y frustraciones. Cuando confrontamos problemas, muchas veces sentimos que el análisis lógico arroja un resultado y la intuición otro. Generalmente los aciertos de un enfoque lógico son invalorables, pero en algunos momentos, especialmente en ausencia de suficiente información, la solución correcta solamente puede venir del cerebro derecho, en forma de corazonada o intuición. NIVELES DE ACTIVIDAD CEREBRAL. El cerebro opera en cuatro niveles básicos o estados de actividad, que se han designado con las letras griegas: Beta, Alfa, Theta y Delta, y se caracterizan por distintos ritmos de pulsos eléctricos del cerebro. Los diversos estados ocurren de manera natural, a medida que pasamos del estado de actividad, al sueño profundo y viceversa: Beta. Estado de alerta despierto, caracterizado por actividad consciente, pensamiento lógico, análisis, conversación y acción. Las ondas cerebrales muestran frecuencias entre 14 y 25 ciclos por segundo. Alfa – Estado de alerta relajado, que facilita la inspiración, rápida asimilación y memoria expandida. Permite comunicación con el subconsciente. Muestra frecuencias entre 7 y 14 ciclos / segundo. Theta – Estado profundo de meditación y de ensueño. Es un estado de alta creatividad, sugestibilidad y golpes de inspiración. Muestra frecuencias entre 4 y 7 ciclos / segundo. Delta – Estado de sueño profundo, sin sueños. Muestra frecuencias entre 0.5 y 3 ciclos / segundo. Los análisis con electroencefalogramas generalmente muestran más de un tipo de ondas simultáneas, por lo que más bien se habla de estados predominantes en un momento dado. DESARROLLO DEL CEREBRO. En el momento de nacer, el ser humano ya tiene casi todas las neuronas que va a tener en su vida, sin embargo, su masa cerebral es de aproximadamente una cuarta parte de la masa de su cerebro adulto. Durante el crecimiento del individuo, su cerebro aumenta de tamaño porque sus neuronas crecen y se hacen más complejas, desarrollando progresivamente más ramificaciones de interconexión con otras neuronas. Este crecimiento ocurre más intensamente durante los primeros años de vida de un individuo, a medida que se van desarrollando todas sus aptitudes y conocimientos, y es proporcional a la complejidad del ambiente que lo rodea. Un ambiente más rico en nuevos estímulos, conduce al crecimiento de más interconexiones cerebrales, lo cual se traducirá en más habilidades, talentos e inteligencia. Por eso es tan importante exponer tempranamente a los niños a un ambiente estimulante, rico en nuevas sensaciones. ¿QUÉ HACER? Ejercitar la mente. Se ha demostrado que el cerebro, al igual que un músculo, puede ser desarrollado en cualquier momento de la vida, gracias a su capacidad para establecer nuevas conexiones nerviosas, y que por el contrario, si dejamos de plantearle retos se irá encogiendo, disminuyendo sus capacidades mentales. La mejor forma de ejercitar el cerebro, es plantearle experiencias inesperadas o no rutinarias, involucrando la mayor cantidad posible de los sentidos, esto forzará al cerebro a la producción de nutrientes que incrementan dramáticamente el tamaño, cantidad y complejidad de las dendritas de las neuronas involucradas, así como de las neuronas circundantes. El desarrollo de una nueva habilidad, como aprender un idioma, tocar un instrumento musical, etc., puede beneficiar a todo el cerebro. Las rutinas en nuestra vida, nos dan confort y tranquilidad, pero se realizan con un mínimo de esfuerzo mental y proporcionan muy poca ejercitación cerebral. En cambio las actividades novedosas, excitan y estimulan al cerebro, aumentando sus capacidades. Salirse de la rutina, y hacer cosas nuevas, además de darle “chispa” a su vida, le dará vida a su cerebro. Usar el cerebro derecho. El cerebro derecho tiene una gran capacidad para resolver problemas donde falla la lógica, o para aportar enfoques novedosos, a través de su enorme creatividad. Lamentablemente, nuestros sistemas educativos y las actividades mercantiles enfatizan las capacidades lógicas y de razonamiento verbal de un individuo, relegando a un segundo plano sus capacidades artísticas o creativas. Este enfoque, fortalece progresivamente el predominio del cerebro izquierdo, y la gran imaginación y capacidad de fantasía de nuestra niñez, disminuye rápidamente, a medida que crecemos. Los procesos de generación de ideas nuevas, requieren de la participación del cerebro derecho. Cuando se combina la capacidad analítica del cerebro izquierdo con la capacidad imaginativa del cerebro derecho, el resultado es sinergístico. Para lograr una mayor participación del cerebro derecho se recomienda: Adoptar una actitud de búsqueda de soluciones no convencionales, especialmente en situaciones complejas. Hay que procurar no encajonarse en esquemas convencionales, más bien se debe tratar de contemplar a propósito, soluciones inusuales. Fomentar la imaginación, visualizando aspectos gráficos de los problemas. Einstein solía hacer viajes imaginarios, sentado en un chorro de luz, o en vehículos transparentes, a la velocidad de la luz, lo cual le ayudó a desarrollar su teoría de la relatividad. Utilizar música suave en su trabajo, especialmente música barroca, la cual tranquilizará al cerebro izquierdo y fomentará un estado alfa, de alerta relajado. Aprovechar los estados Alfa y Theta. Estos estados de actividad de la mente, se dan de manera natural en todas las personas en su tránsito de ida y regreso al sueño. Lo ideal es aprender a entrar a voluntad en estos estados meditativos, sin embargo, si este no es el caso, es factible aprovechar su potencial de las siguientes maneras: Aprender idiomas y otros conocimientos durante el sueño. Existen cursos que usted podrá escuchar en su tránsito al sueño, mientras pasa por Alfa y Theta. Naturalmente al pasar a Delta, usted estará profundamente dormido y no aprenderá nada. Escuchar música suave, mientras trabaja o estudia. La música clásica barroca, que se caracteriza por la precisión de su ritmo y la simetría de sus patrones, promueve la tranquilización del cerebro izquierdo y una mayor participación del cerebro derecho. Asignar tareas a su subconsciente de noche en su cama, antes de dormirse. De mañana medio despierto aún, procure escuchar sus recomendaciones. Con el tiempo y la práctica se sorprenderá. Tomar nutrientes cerebrales. El cerebro tiene un apetito voraz por un nutriente llamado colina, usado para la elaboración de la acetilcolina, su neurotransmisor fundamental y para la fabricación y mantenimiento de las membranas de las neuronas. La acetilcolina es fundamental para los procesos mentales, la memoria, el sueño y el control de los movimientos. Su producción disminuye con la edad, resultando en declinación de la memoria, capacidad de aprendizaje y habilidades cognitivas. Los enfermos de Alzheimer muestran niveles de acetilcolina anormalmente bajos. La colina también ayuda a prevenir el depósito de colesterol en las paredes arteriales. Los alimentos más ricos en colina son los pescados, llamados con propiedad “alimento cerebral”, ricos en lecitina y ácidos nucleicos. Los peces de agua fría como el salmón, trucha, atún, etc., son también los más ricos en ácidos grasos omega-3, con propiedades antiinflamatorias, antidepresivas y de protección cardíaca. Los japoneses, los mayores consumidores de pescado del mundo, muestran la menor incidencia de la enfermedad de Alzheimer, a pesar de vivir más tiempo. El cerebro también depende críticamente del suministro continuo de oxigeno y glucosa, provistos a través del torrente sanguíneo; consume el 20% del oxigeno que respiramos y sus células son las más susceptibles a la falta de oxigeno y al daño de los radicales libres, por su mayor contenido de ácidos grasos no saturados. Los mejores suplementos alimenticios naturales para son: Ginkgo Biloba, Ginseng y el chocolate. el cerebro LA CONEXIÓN MENTE-CUERPO Imagine que sostiene un limón en sus manos. Esfuerce su imaginación hasta sentir su textura y percibir su olor. Imagine ahora que le corta un pedazo y le da una mordida, chupando el jugo ácido. Deje que la imagen se desvanezca, y notará que algo habrá cambiado. Probablemente sentirá en su boca una mayor cantidad de saliva, la cual dependerá del realismo y detalles con que usted haya imaginado estas escenas. Este ejercicio demuestra claramente la estrecha relación que existe entre la mente y el cuerpo, la cual es fuente de grandes oportunidades de expansión de las capacidades del ser humano, así como también de problemas potenciales, especialmente para las personas pesimistas y de actitudes negativas. Desde hace mucho tiempo se ha notado esta relación, observando que las grandes pérdidas emocionales, como la desaparición de un ser querido, grandes desengaños y frustraciones, conducen a un rápido deterioro de la salud y en algunos casos a la muerte. También se sabe que el cansancio y el agotamiento físico hacen ver todo más negativamente, y que en general, las actitudes positivas producen resultados positivos. Constantemente nos encontramos con evidencias concretas del enorme dominio Mente/Cuerpo demostrado por algunas personas, como algunos Sadhus de la India, que pueden permanecer enterrados por semanas enteras; lamas y monjes tibetanos, que pueden resistir por mucho tiempo temperaturas de congelación; Yoghis y Monjes Zen, que pueden modificar a voluntad su ritmo cardíaco, expertos en artes marciales que pueden romper con sus extremidades, grandes bloques de madera o cemento, etc. EFECTO “PLACEBO”. Quizás el fenómeno más conocido en la medicina, de los efectos de la mente sobre el cuerpo, es el del efecto “placebo”, o eficacia de sustancias inocuas, cuando los pacientes las toman convencidos de su efectividad. Los historiales médicos muestran gran cantidad de casos de pacientes que se han recuperado de dolencias y malestares, tomando pastillas de azúcar o almidón, o inyecciones de agua destilada, creyendo firmemente que se trataba de un medicamento efectivo. Este efecto de eficacia, inclusive se ha observado cuando pacientes, por error toman medicinas equivocadas y en algunas ocasiones, contraindicadas, y en el caso de pacientes que se recuperan rápidamente después de la consulta médica, sin haber tomado los medicamentos prescritos. El reconocimiento de la interacción entre la mente y el sistema inmunológico, ha conducido al desarrollo de una nueva disciplina: la siconeuroinmunología. ¿QUÉ HACER? Mantener una actitud positiva. Es necesario mantener una actitud positiva en todo momento, ya que el subconsciente tratará de que se cumplan nuestras expectativas, sin considerar si los resultados son buenos o malos. En otras palabras, si una persona tiene en su mente imágenes de éxito o de fracaso, el subconsciente las tomará como un modelo a seguir, y tratará indiscriminadamente que se materialicen. Por eso, es muy peligroso permitirse pensamientos negativos y malos deseos. La mala suerte por sí sola no existe, pero se fabrica con temores, pesimismo, pensamientos negativos, odio y malos deseos. En cambio la buena suerte se fabrica con expectativas positivas, buenos deseos, magnanimidad, desprendimiento y tolerancia. Practicar meditación. Ya que las hormonas del stress contribuyen a aumentar la presión arterial, los niveles de colesterol y a deprimir la eficiencia del sistema inmunológico, es conveniente utilizar mecanismos que neutralicen o minimicen estos efectos. Para esto, además de deportes y actividades físicas estimulantes, se recomienda la práctica regular de la relajación mental o meditación. Las principales técnicas de relajación mental fueron desarrolladas hace mucho tiempo, fundamentalmente con fines espirituales. Se trata de las diversas formas de meditación Yoga y Budista. Se ha comprobado que estas técnicas inducen estados de alerta relajado con predominancia de ondas alfa, disminución del ritmo cardíaco, de la presión arterial y del consumo de oxígeno. Para producir el reflejo de la relajación, se requiere tranquilizar la mente y evitar que se disperse en pensamientos erráticos, por períodos de por lo menos diez minutos. Para lograr esto, se requiere estar en un sitio tranquilo para evitar ruidos y otras distracciones, y adoptar una postura confortable, para que la mente no se distraiga con incomodidades o dolores. Para tranquilizar y centrar la mente en la respiración, se repite oral o mentalmente con cada exhalación, una palabra o frase sencilla como, el famoso Ohm de los meditadores Yoga. Esta palabra o frase repetitiva que los Yoguis llaman Mantra, puede ser cualquiera, pero se recomienda que represente algo que esté profundamente arraigado en las creencias de la persona, o una palabra neutra como uno o paz. Mientras se medita, se debe tratar de alejar los pensamientos intrusivos, lo cual es difícil para los que se inician en la meditación, porque la mente tiende a divagar. Cuando esto sucede, adopte una actitud pasiva, diciéndose algo como: “bueno, ya está bien”, y volver apaciblemente a la repetición. Si la persona se preocupa por como lo está haciendo, está dejando de tranquilizar su mente. Se recomienda efectuar este ejercicio de meditación, por lo menos una o dos veces por día, durante diez a veinte minutos cada vez. Con la práctica de la meditación, además de alcanzar los beneficios anti-stress mencionados, usted desarrollará una capacidad de entrar en el estado alfa a voluntad, para aprovechar más a fondo su capacidad mental. Practicar visualización. La visualización mental, o capacidad para crear gráficamente eventos imaginarios, es la herramienta más poderosa de la cual dispone el ser humano para su programación. Básicamente consiste en crear mentalmente la imagen o película animada del objetivo que se quiere alcanzar, con la mayor cantidad posible de detalles, para que el subconsciente la tome como un hecho cumplido, o de un modelo a seguir. Los procesos de visualización pueden ser efectivos para cualquier propósito positivo, como: eliminación de malos hábitos, superación de problemas o limitaciones, mejoramiento profesional, aprendizaje acelerado, mejoramiento de la salud, etc. Todo lo que usted tiene que hacer es crear en su mente una visión lo más realista posible, donde usted aparezca alcanzado sus propósitos. Si se trata por ejemplo de lograr un grado profesional, véase recibiendo su diploma, oiga los aplausos de sus amigos y familiares, etc. Si se trata de bajar de peso, véase a sí mismo con las dimensiones que quiere alcanzar, vistiendo su ropa favorita, departiendo con los amigos, etc. Si va a dar una conferencia, véase tranquilo, seguro de sí mismo, transmitiendo exitosamente sus ideas; vea el interés y entusiasmo del público, óigase respondiendo todas las preguntas, escuche los aplausos, etc. Entre más detalles pueda crear (visualizar), mejor funcionará la técnica. Para estimular procesos de sanación de órganos, o partes enfermas del cuerpo, se recomienda visualizar como estos órganos cambian progresivamente de un aspecto deteriorado a un aspecto saludable. En el caso de enfermedades infecciosas y tumores, se recomienda visualizar como las células del sistema inmunológico, los macrófagos (células blancas especializadas) atacan y destruyen progresivamente a virus, bacterias o células cancerosas, hasta limpiar completamente el organismo. Las visualizaciones pueden ser sencillas, pero deben transmitir poder. Algunos pacientes de cáncer han visualizado a sus células inmunológicas como un ejército blanco muy poderoso, destruyendo fácilmente al enemigo o ejército negro, otros han visualizado a osos blancos comiendo fresas, etc. Desde hace más de diez años, renombrados hospitales y centros médicos de los Estados Unidos y Europa, enseñan a sus pacientes de enfermedades terminales especialmente niños, a visualizar la lucha interna de su sistema inmunológico contra sus enfermedades, en forma de diversas imágenes. Algunas instituciones han desarrollado juegos electrónicos y salas acondicionadas para añadir realismo a las visualizaciones, en un ambiente relajado, con música suave de fondo, ¿Le suena familiar? Los procesos de visualización funcionan mejor en estado Alfa y Theta, ya que en esos estados hay comunicación con el subconsciente. Se recomienda realizar las visualizaciones en su cama, inmediatamente antes de dormir o después de despertar, o a continuación de sus ejercicios de meditación, una vez que haya adquirido cierta práctica con ellos. La programación mental requiere repetición, por lo que se debe practicarse rutinariamente, una a dos veces por día. La programación mental puede utilizarse para cualquier objetivo positivo, que hasta donde usted sepa, no haga daño a nada ni a nadie, ya que su bienestar y felicidad, no debe depender de la infelicidad de otros. No debe sentir en ningún momento que pide demasiado, más bien debe sentir que espera, lo que en justicia le corresponde. Gunter Spasic Noviembre 2008