Download El asiento trasero central del coche, el más seguro para los niños

El asiento trasero central del coche, el
más seguro para los niños
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Para evitar problemas más graves si se produce un choque frontal
entre vehículos, los fisioterapeutas recuerdan que nunca se debe llevar al
niño en brazos, que éste debe viajar en dirección opuesta a la marcha y con
sistemas de sujeción específicos para su edad y peso
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Además, indican que los adultos también pueden evitar determinadas
patologías derivadas de colisiones, como el latigazo cervical, o las lesiones
torácicas, si se adopta una postura adecuada durante el viaje
El Colegio Profesional de Fisioterapeutas de la Comunidad de Madrid
(CPFCM) recuerda que el asiento trasero central del coche, es el más
seguro del vehículo, por lo que si se viaja con un menor, se recomienda
instalar en él un sistema de sujeción específico para el niño, que debe de
estar adaptado a su peso y edad.
El secretario general del CPFCM, José Santos, explica que este asiento es
más seguro que el resto, y sobre todo que el del copiloto, al estar más
protegido en caso de impacto lateral, y del “volantazo involuntario del
conductor, que en caso de posible choque frontal, gira siempre hacia la
izquierda instintivamente”.
Santos añade, que si pese a estas recomendaciones, se viaja sólo con el
menor, y se decide instalar la silla o las sujeciones en el asiento delantero
del copiloto, “es muy importante desactivar el airbag delantero para evitar
el riesgo de asfixia del menor en caso de que éste se active”. Además,
resalta la importancia de eliminar holguras en el arnés y la sillita, para
evitar que el niño se golpee con ella en caso de impacto.
Por otra parte, recuerda que los niños menores de 4 años deben viajar
sentados en sentido contrario a la marcha, para evitar movimientos bruscos
del cuello y el tórax en caso de choque frontal. Para los mayores de 4 años,
aconseja utilizar un cojín elevador con cinturón de tres puntos, situando su
banda inferior sobre los huesos superiores de la pelvis, y nunca sobre las
zonas blandas del abdomen.
Además, alertan de la peligrosidad de llevar al niño en brazos “aunque sea
para un trayecto corto”. “Tener un impacto circulando a 30 km/h equivale a
caer desde una altura de un primer piso de un edificio, no hace falta decir lo
que esto puede suponer para un bebé”, alerta.
Recomendaciones para adultos
Ante el elevado número de desplazamientos por carretera que se tienen
previstos en las carreteras españolas los próximos días, debido a la
“operación salida” de Agosto, el CPFC ha dedicado el vídeo-consejo del
mes de su campaña “12 meses, 12 consejos de salud”, a la conducción
saludable.
Se trata de una iniciativa del Colegio para concienciar a los ciudadanos
sobre los riesgos para la salud que suponen determinadas prácticas de
nuestra vida cotidiana. Así, a través de las redes sociales, el Colegio
difundirá un corto de animación que recordará a los conductores cómo
pueden evitar las lesiones más comunes derivadas de pequeñas colisiones,
si se adoptan las posturas adecuadas durante la conducción.
Así, recomiendan verificar la altura y distancia del asiento, de manera que
los pies puedan pisar a fondo los pedales del embrague, freno y acelerador,
sin necesidad de inclinar o desplazar el cuerpo hacia delante; y adaptar el
respaldo de manera que
la inclinación del conductor sea lo más
perpendicular posible y mantenga una distancia de por lo menos 25
centímetros respecto del volante.
Además, explican que para comprobar que el asiento y el volante están
correctamente regulados, el conductor puede encajar las caderas en el
ángulo que forma la banqueta y el respaldo, apoyar la espalda, y extender el
brazo izquierdo comprobando que la muñeca apoya sobre la parte superior
del volante.
Igualmente, recuerdan que “el reposacabezas es un elemento de seguridad
pasiva”, cuya parte central debe coincidir con la altura de los ojos, para que
su uso sea efectivo; y que el cinturón debe quedar siempre a mitad del
hombro.
Santos asegura que si se conduce adoptando estas posturas se reduce el
riesgo de que en caso de colisión, se sufran latigazos cervicales; lesiones
torácicas, causadas por un uso inadecuado del cinturón; o lumbalgias y
lesiones musculares de la parte posterior del muslo y la pantorrilla, entre
otras.