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10 Viernes 09.03.12 LA VERDAD REGIÓN Dos detenidos por la sustracción de material de riego en fincas agrícolas de Corvera :: EP MURCIA. La Guardia Civil ha detenido a dos hombres por robar material de riego en fincas agrícolas de la pedanía murciana de Corvera. Los agentes de la Guardia Civil fueron alertados el miércoles por unos vecinos que vieron a varios hombres entrar en la finca y robar el material. Los agentes se desplazaron hacia el lugar y sorprendieron a los dos ladrones huyendo en una furgoneta que se encontraba cargada con material metálico de los dispositivos de riego de la finca. Los guardias detuvieron a los dos sospechosos e incautaron el vehículo y las herramientas empleadas para cometer el robo. Además, recuperaron los efectos sustraídos, que tras ser puestos a disposición judicial serán devueltos a su propietario. Para cometer el robo, los detenidos causaron daños en el sistema de regadío de la finca que superan los 6.000 euros. La investigación practicada ha permitido esclarecer además otro hecho delictivo similar ocurrido en la misma finca el pasado 24 de febrero. Los detenidos, que están acusados de delitos contra el patrimonio y robos con fuerza, han sido identificados como L.M., de 37 años y residente en Lobosillo; y A.Z., de 26 años y residente en La Aljorra, ambos de nacionalidad marroquí. Los detenidos, los efectos recuperados y las diligencias instruidas han sido puestos a disposición del Juzgado de Instrucción de Murcia. La operación se enmarca en el plan contra las sustracciones en explotaciones agrícolas y ganaderas que la Guardia Civil ha puesto en marcha ante la proliferación de robos en las explotaciones de la Región. El jurado declara culpable con alevosía al asesino de Roldán Considera que apuñaló a Juan Francisco Prieto consciente de sus actos pese al consumo de drogas :: J. A. G. / E. R. K. CARTAGENA. Un jurado popular declaró anoche culpable de asesinato, con alevosía y reincidencia, a Antonio M. V., de 46 años, que ha sido juzgado por el crimen de Roldán. Acabó con la vida de Juan Francisco Prieto, de 50 años, a las puertas de un bar, asestándole dieciséis puñaladas. El veredicto se conoció anoche y ahora el juez dictará la sentencia. Los psiquiatras que han intervenido esta semana en el caso han asegurado que Antonio M. V. fue consciente de estar asestando dieciséis puñaladas a Juan Francisco Prieto, a pesar de haber consumido alcohol, cocaína y ‘cristal’. En su informe al tribunal, los médicos exponen que el criminal no sufre trastorno mental alguno por adicción a las drogas y en todo caso la ingesta de sustancias estupefacientes no anula su capacidad de conocimiento y distinción entre el bien y el mal. Eso sí, tiene un trastorno paranoide. Los especialistas han definido a Antonio como una persona fría, narcisista y antisocial con tendencia a interpretar que todo el mundo habla mal de él y contrario a las normas. Los responsables del psiquiátrico donde fue ingresado en 1987 y tras el crimen por el que ahora se ha sentado ante un jurado popular en la sección quinta de la Audiencia Pro- vincial (con sede en Cartagena) sí han señalado que el consumo de drogas y alcohol «hacen de él una bomba explosiva». Antonio, quien aseguró que no tuvo intención de matar a nadie y que por lo que recuerda pensaba estar «repeliendo golpes», ya cumplió prisión por matar a otro hombre en Granada en 1998. Personalidad paranoica En cuanto a los forenses, han revelado que Juan Francisco recibió dieciséis puñaladas y no trece como señaló la Fiscalía en su escrito de acusación. Además, han señalado que tuvo una dura agonía de unos siete minutos, y que la mayoría de las heridas le afectaron a órganos vitales. Le asestaron golpes con un llaveronavaja (que no ha aparecido pero que según Antonio M. V. era más pequeña que el dedo meñique de una mano) en un pulmón y el corazón. «Las heridas fueron realizadas con mucha fuerza», apuntaron los especialistas del Instituto de Medicina Legal que efectuaron la autopsia. Una fue tan contundente que el arma atravesó el cinturón de cuero de la víctima, otra le cortó la yugular y otra le provocó una marca en un hueso. En la última vista oral, celebrada el miércoles, el tribunal popular vio la grabación de una videocámara del bar donde ocurrieron los hechos, y escuchó las llamadas telefónicas efectuadas por el reo a lo largo de sus doce días de huida hasta que lo arrestó la Guardia Civil. El jurado inició y culminó anoche sus deliberaciones, tras las que emitieron un veredicto de culpabilidad por asesinato con alevosía y reincidencia. Antonio M.V., siendo trasladado a la Audiencia. :: ANTONIO GIL/AGM Con la agravante de reincidencia El jurado decretó anoche que el acusado del crimen es culpable de un delito de asesinato con las circunstancias agravantes de alevosía y reincidencia. Considera que Antonio M. V. fue consciente de sus actos, y no actuó condicionado por el consumo de drogas. El fiscal modificó su calificación de homicidio y la petición de una pena de 15 años por la de asesinato y 18 años; y a la indemnización de 132.000 euros a la esposa y los dos hijos del fallecido, añadió dos de 8.800 euros a los padres. La defensa, que ya había pasado de la libre absolución a una horquilla de 10 a 2 años, tuvo que elevar su petición a 18 años. La acusación particular pasó de 25 a 20 años por una cuestión técnica.
