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sieron tomar ninguna decisión ya fuera política o económica, hasta que se clarificara quién se haría cargo posteriormente de la zona. ° f ¿ ™ ^ f í f Chrisuanla. Mientras tanto la c/udad //Ve de Christiania se fue consolidando poco a poco, al tiempo que se aprendía a afrontar los problemas conjuntamente. Al principióle trataba de cuestiones elementales relacionadas con la electricidad, calefacción, aqua y relación con el mundo exterior. Las conversaciones y los contactos fueron realizados a través del Ministerio de Cultura, cuya actuación se caracterizo por un compás de espera para ver sí al final conseguía hacerse dueño de la zona, en su disputa con la municipalidad de Copenhague. Por parte de Christiania, se trató de obtener una estabilización de la situación, como base para posteriores actividades. Al mismo tiempo crecía el proceso de estructuración de esta pequeña sociedad libre. Se estableció el habito de tomar decisiones comunes en asamblea general, se creó una oficina de información para dar a conocer las casas o barracones que aún quedaban libres y podían ser ocupadas por gente nueva y se decidió que en la ciudad libre no habría coches ni drogas. En Navidad todo esto funcionaba ya junto con la organización de un edificio común para reuniones y conciertos, un edificio cocina y el edificio lavandería. Además se formaron diversos grupos de trabajos y actividades: grupo de teatro, conjunto musical, etc., y hubo quien particularmente instaló una barbería, un pub y una discoteca. A principios de 1972 las cosas se fueron perfeccionando, la asamblea general estaba más organizada, los grupos de trabajo se reunían semanalmente y se empezó a publicar un periódico para informar a todos los habitantes de Christiania y del resto de Copenhague de las actividades que allí se realizaban. Por entonces en el Parlamento se planteó el problema de Christiania y ésta fue página doble del fuertemente atacada por los partidos conservadores, al tiempo que se lanzaba una ciado boletín. campaña de prensa en contra de Christiania promovida por el alcalde de Copenhague; por su parte, la policía actuaba provocando a los ciudadanos de la ciudad libre de Christiania. Todo ello hizo necesario elevar una protesta al Ministerio de Justicia, en la que se sugerían diez puntos como base de partida para una negociación. Durante esta fase el Ministerio de Cultura se desinteresó de Christiania debido a los problemas que ésta representaba. El Gobierno mostró indecisión en todo momento, pasando el problema de un departamento a otro. Por fin, el Ministerio de Defensa (que era todavía responsable nominal de la zona) llevó adelante las negociaciones (cartas del 11 y 25 de abril de 1972 con propuestas de normalización). De todas formas Christiania tuvo que sufrir los embates de la policía y del Ministerio de Justicia, quienes pedían ai Gobierno su desalojo inmediato. A partir de entonces las negociaciones versaron sobre una pequeña paga simbólica por agua y electricidad, haciéndose de esta manera la situación de los habitantes de Christiania más legal (31 mayo 1972). Esta pequeña legalización unida a la ausencia de nuevas intervenciones por parte de la policía dio lugar a una falsa seguridad durante el verano de 1972. El resultado fue la relajación, la asistencia a las asambleas comunes disminuyó, se empezó a vender hash, etc., y la unión se fue deshaciendo. Para cambiar esta situación últimamente se han hecho esfuerzos orientados a incrementar la concienciación, una especie de revolución cultural de Christlania, cuyo objetivo sería crear una mejor comprensión de las realidades y posibilidades de ésta tanto en su interior como fuera de ella. Esta conciencia, que era totalmente necesaria, fue desarrollándose a diferentes niveles. En parte mediante la información: en las reuniones y con el periódico de Christiania; y en parte organizando actividades comunes para compensar el individualismo creciente. Estas acciones fueron dirigidas contra los que hablan Instalado negocios para provecho propio y no para la colectividad. Se crearon también comités para llevar a cabo acciones de demolición o reconstrucción de edificios viejos. Se reorganizaron las asambleas, poniendo el acento en la importancia de una total descentralización a la hora de tomar decisiones. El resultado de este nuevo espíritu comunitario fue la sugerencia de comprar Christiania. Otra sugerencia fue la de declarar Christiania independíente, si Dinamarca entraba en el Mercado Común. Exteriormente también se notó una actitud más positiva por parte de la prensa y asi empezó a comentarse que Christiania podría ser una nueva sociedad experimental. Hasta ahora no se ha podido comprar Christiania, pero hay ciertos indicios de que la municipalidad de Copenhague no está interesada ya en la zona tal vez porque le parezca que no compensa el beneficio que pueda sacar con los problemas que le acarrearía desalojar a toda la gente que allí vive, tal vez por la actual crisis en la construcción de viviendas, o tal vez porque la municipalidad ha empezado a entender la importancia de Christíania como experimento social, como válvula de escape en una sociedad como la nuestra. Tipos humanos Lo que caracteriza a los habitantes de Christiania es el deseo de tomar decisiones por si mismos, de no ser oprimidos, de vivir -M propia vida, cosa que no se les ha 98