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AMERICAN HEALTH ASSISTANCE FOUNDATION Proteja su Vista del Sol Todas las personas y especialmente aquellas que ya tienen problemas de la vista- deben proteger sus ojos de la luz ultravioleta que emite el sol. La luz ultravioleta es lo que causa las quemaduras por el sol; también se sabe que contribuye a la formación de cataratas y degeneración macular. Dado que los efectos son acumulativos, entre más expuestos están los ojos a los rayos UV, mayor se hace el peligro de daños en la córnea, la retina y el cristalino. El adelgazamiento de la capa de ozono de la tierra ha reducido su función como filtro de los rayos UV, por lo que ahora es más peligroso que nunca para los ojos (y la piel) pasar horas sin protección al sol. El uso regular de los anteojos adecuados, pueden ofrecer una protección significativa a su visión. Anteojos de sol Use anteojos de sol de alta calidad que tienen “99 - o 100 por ciento de protección UVA y UVB”. Compruébelo en la etiqueta cuando compre anteojos sin receta médica. Si usted no está seguro acerca de la calidad de sus anteojos de sol, consulte con su optometrista u oftalmólogo para comprobar el nivel de protección. Si usted compra anteojos recetados, asegúrese de pedir que esté incluida la protección (la cual puede ser incolora) contra la radiación UV. Los lentes de contacto proporcionan alguna protección, pero sólo en la parte del ojo que cubre, por tanto los anteojos de sol aún se deben usar. Los anteojos con tonalidades de color gris proporcionan los colores más naturales, mientras que los anteojos polarizados de color ámbar, puede estimular su visión un poquitín al crear un mayor contraste. Sin embargo, los anteojos de color ámbar también pueden hacer más difícil distinguir los colores de la luz del semáforo, por esto los anteojos de color gris pueden ser más deseables para algunas personas. Los anteojos grandes son mejores que los más pequeños, y los anteojos con protección lateral, de tipo envolvente son aún mejores, ya que los rayos UV pueden entrar en el globo ocular por los lados, y desde arriba y abajo. Si bien los anteojos polarizados reducen la luminosidad, asegúrese de que están bien recubiertos para que realmente tengan protección UV. Los anteojos de espejo no necesariamente bloquean la luz UV, así que asegúrese de que están garantizados de tener protección UV. Las nubes no bloquean la luz ultravioleta, así que use sus anteojos de sol incluso en días nublados o encapotados. La protección de los ojos es especialmente importante en la playa o en la nieve: El agua y la arena son reflectores de la luz y así aumentan la intensidad de los rayos UV 10 a 20 por ciento, mientras que la nieve puede reflejar hasta un 80 por ciento. El cuarenta por ciento de los rayos UV se pueden detectar hasta dos pies por debajo de la superficie del agua. Los niños y los adolescentes también deben usar anteojos de sol, debido a que pueden pasar más tiempo en el sol, y el daño solar en los ojos (y la piel) es acumulativo con el tiempo. Se estima que más de las tres cuartas partes de nuestra exposición a los rayos UV se produce antes de la edad de 18 años. Otras protecciones_ Póngase un sombrero de ala ancha con tanta frecuencia como sea posible cuando esté al aire libre. Además de reducir el riesgo de enfermedades de los ojos, los sombreros puede ayudar a proteger su rostro y cuello, donde se puede formar cáncer de la piel. (¡No olvide su protector solar!) Proteja sus ojos mientras practique deportes. Muchas tiendas de artículos deportivos venden viseras de plástico o máscaras. Para más información sobre la prevención de enfermedades de los ojos, visite www.ahaf.org o envíenos un email a info@ahaf.org Declinación de responsabilidad: La información proporcionada es un servicio público de la American Health Assistance Foundation (Fundación Americana de Asistencia para la Salud) y no constituye el consejo médico. Por favor, consulte a su doctor para consejos médicos personalizados, todos los medicamentos y los suplementos se deben tomar solamente bajo supervisión médica. La Fundación Americana de Asistencia para la Salud no respalda ningún producto médico o terapia. © American Health Assistance Foundation, 2012 COMPASSION FOR TODAY - A CURE FOR TOMORROW ®