Download Folleto en español de la Campaña 2015

Estamos llamados, a seguir el ejemplo
de Jesús. Juntando nuestros esfuerzos
permitiremos que la suave voz de Cristo
sea escuchada por los más necesitados.
Ruego para que usted escuche esa
misma voz, aceptando la invitación del
Señor y respondiendo con su apoyo a
la Casa de la Caridad 2015 – Campaña
Anual del Obispo.
Obispo Dennis J. Sullivan
Su regalo para la Casa de la Caridad 2015 - Campaña
Anual del Obispo proporciona ayuda para los servicios de
salud, sociales, espirituales y de bienestar en el sur de
New Jersey para las personas necesitadas sin distinción
de raza, creencias u origen a través de lo siguiente:
SERVICIOS SOCIALES Y COMUNITARIOS:
Caridades Católicas
San Juan de Dios/Escuela Arzobispo Damiano
VOCACIONES & FORMACIÓN DE SEMINARISTAS
& CUIDADO DE SACERDOTES
INCENTIVOS PARA LAS INICIATIVAS
DE LA PARROQUIA
PARROQUIAS Y ESCUELAS POBRES
Y NECESITADAS
FORMACIÓN PERMANENTE EN LA FE
JÓVENES Y ADULTOS JÓVENES Y MINISTERIOS
UNIVERSITARIOS
PROGRAMAS DE EXTENSIÓN COMPASIVA –
POR EJEMPLO:
asas de Ayuda y Asesoramiento
Centro Medico de Nuestra Señora de Lourdes
Centro Romero
Diocese of Camden
631 Market Street | Camden, NJ 08102
856.583.6128
bishopsappeal@camdendiocese.org
www.camdendiocese.org
HOC Home page on camdendiocese.org
Escogidos
SOMOS
Phyllis & Carmel
¡En el 2014, la Casa de Caridad celebró 50 años!
Phyllis y Carmel han contribuido a la Casa de
Caridad cada uno de esos años, así que el Obispo
Sullivan decidió visitar a las damas y escuchar más
de su historia.
Phyllis y Carmel confiadamente compartieron
cómo proceden de una “familia generosa”. Phyllis,
tiene 106 años de edad, es una de nueve hijos
de inmigrantes italianos. Ella explica, “Siempre
sentíamos que se lo debíamos a Dios. Lo que
debía hacerse, lo hicimos por Él.”
Phyllis vivió durante la Primera y Segunda Guerra
Mundial, y la Gran Depresión. Había tanta pobreza
y necesidad en esos tiempos. Ellos cosecharon sus
propios vegetales y siempre tenían comida sobre
la mesa y un cubo de carbón. Fueron testigos de
muchas situaciones donde la familia ayudaba a los
vecinos y compartían todo lo que tenían. Cada año
el día de San José, la familia organizaba una noche
de oración y después, compartían una comida con
los vecinos. Era su forma de agradecerle a Dios por
lo que tenían y compartirlo con los demás.
Cuando se les preguntó por qué habían elegido la
Casa de Caridad /El Llamado Anual del Obispo
como su manera de dar, respondieron; “El llamado
es una cosa maravillosa; estamos agradecidas de
todo el trabajo que el llamado es capaz de lograr,
para todos aquellos que necesitan ayuda”.
Durante toda su vida, ellas han dado a las
necesidades de muchos. Hoy en día, Phyllis y
Carmel están llamadas a dar.
Matt & Kelley
Matt y Kelley y su familia se vieron en serios
obstáculos financieros cuando Matt sufrió la
pérdida de su empleo. En aquel tiempo, la familia
tenía cuatro hijos y dependieron de su fe Católica
y la comunidad de la iglesia que los vio atravesar
por las dificultades económicas que tuvieron. A
menudo, era gente que ellos ni siquiera conocían
los que colaboraron para asegurarse de que la
familia tenía comida sobre la mesa y mantener su
hogar y todas las necesidades de la vida.
Fe, esperanza y caridad permitieron a esta familia
centrarse en alegría en medio de sus dificultades.
Despensas de alimentos, trabajos ocasionales y su
comunidad de fe ayudó a la familia a levantarse de
sus dificultades y seguir adelante.
Hoy en día, Matt y Kelley tienen ocho hijos. La
familia está profundamente arraigada en la fe. Ellos
han infundido en sus hijos la conciencia de que “lo
que tienen hoy puede desaparecer mañana”. Han
enseñado a los niños que la familia y la comunidad
son de extrema importancia. La familia está
llamada a la necesidad de orar, la necesidad de
discernir y la necesidad de dar.
Escogidos
SOMOS
El Padre René
El Padre René, un sacerdote de nuestra diócesis,
creció en medio de la guerra en El Salvador. Vivió
en medio de disparos de armas, pobreza, violencia
y destrucción. Sin embargo, enraizado en la fe, él
siempre estuvo conectado a su iglesia. Equipado
con una fe fuerte, el Padre René superó muchos
obstáculos en su viaje a los Estados Unidos de
América.
El Padre René llegó a nuestra diócesis y
naturalmente fue atraído por la Iglesia Católica. En
su vida, la iglesia era la fuente de paz, esperanza y
amor. El Padre Rene pasó un tiempo trabajando con
Caridades Católicas alimentando a los hambrientos
y ayudando a los pobres. Él fue inspirado por el
trabajo y la gente que encontró.
El Padre René fue llamado. Sintió un fuerte llamado
al sacerdocio y encontró su vocación.
Hoy en día, él está muy agradecido a la Casa de
Caridad/El Llamado Anual del Obispo por el apoyo
a su vocación y por cómo la iglesia ayuda a los
necesitados en su comunidad. A través de su
necesidad, el Padre René fue llamado para servir a
otros necesitados.
Actualmente, como un sacerdote diocesano, el
Padre René predica la Palabra de Dios, sirve a los
pobres y anima a otros a servir. Él está llamado y
llama a los demás para ayudar con la misión de la
iglesia.