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Viviendonuestro Catolicismo… Participar en la Celebración en Espíritu y Verdad Parte Tres en una Serie de Tres Carta Pastoral Al Pueblo de Dios en La Diócesis Católica de Memphis en Tennessee Reverendísimo J. Terry Steib, S.V.D. Obispo de Memphis en Tennessee Septiembre 2011 Prólogo Hermanas y Hermanos, Saludos en Cristo Jesús Hace tres años, yo empecé a compartir con ustedes mi esperanza que todos los católicos de la Diócesis de Memphis en Tennessee pudieran experimentar un entusiasmo renovado y aprecido por el don de nuestra fe católica. Con el deseo de impartir esa esperanza a muchos católicos en nuestra Diócesis yo he tratado de comunicarme con ustedes en una serie de tres cartas pastorales, cuyo tópico es Vivir Nuestro Catolicismo. Estas series de cartas pastorales exploran diferentes aspectos de lo que significa vivir verdaderamente la fe católica. Soy capaz de compartir mi visión de renovar con ustedes – miles de individuos católicos en la Diócesis – y ustedes pueden leer y discutir con otros católicos las esperanzas y deseos del obispo, y las diferentes maneras con las cuales pueden vivir su fe total diariamente. Durante estos tres años, he rezado para que su fe sea enriquecida al mismo tiempo que ustedes presten más atención a la vida de Dios dentro de ustedes, la vida recibida en su propio bautismo y renovada durante su vida por la oración y los sacramentos de la Iglesia, y servicio a los demás. El título de esta trilogía, Vivir Nuestro Catolicismo, para mí expresa la importancia de la diaria, hora por hora, minuto por minuto manera de vivir 1 la fe dada a nosotros por Dios como un regalo, y alimentada como respondemos a su gracia. Yo sigo rogando que cada católico en nuestra Diócesis continúa en esta jornada de redescubrimiento de lo que significa vivir la verdadera vida católica, y que su gozo, su paz y su relación con Dios sean profundizados y renovados. 2 I. Introducción 1. Quiero expresar mi gratitud a ustedes por su respuesta a las dos previas cartas pastorales en esta serie. Sabiendo que ustedes toman tiempo para ellas, que las usan en sus oraciones y discuten su contenido con otros feligreses, amigos y familia, me inspiran a poner término a esta serie. Como obispo, es difícil encontrar vías de comunicación con todo el pueblo de Dios en lo quien me han confiado. Una carta pastoral me da la rara oportunidad de expresar mis esperanzas y anhelos a todos como diócesis. De la misma manera, una carta pastoral les da la ocasión de leer y recibir mi mensaje de tal manera que ustedes puedan prestar a este mensaje toda su atención en el tiempo y lugar que ustedes escojan. 2. La primera carta pastoral en esta serie, Vivir Nuestro Catolicismo…Que Nuestro Gozo Sea Completo, fue publicada en 2009. En esa carta, yo los desafié a redescubrir esa llamada de gratitud dentro de nosotros que fomenta un gozo profundo en el don de ser católico. “Aun, cuando el gozo que experimentamos en la otra vida sobrepasa todo lo que conocemos o imaginamos ahora, estamos invitados, sin embargo, a encontrar gran alegría AHORA viviendo como Cristo vivió. La alegría de Cristo tiene su raíz en vivir con Dios –en el amor de Dios, en la paz de Dios, en la voluntad de Dios. Lo mismo es verdad para nosotros.”1 1 Vivir Nuestro Catolicismo…Que Nuestro Gozo Sea Completo: 2009 3 3. En 2010 la segunda carta pastoral en esta serie, Vivir Nuestro Catolicismo… ¿Que Dicen Quién Soy Yo? Quiero que nosotros tornemos nuestra atención a la persona de Jesús de Nazaret. Yo puntualizo que, como católicos, nuestra fe descansa en Jesús, que literalmente personifica Dios por nosotros. En la segunda carta pastoral, reflexionamos en la importancia de conocer más profundamente y vivir de lleno su vida, muerte, resurrección y ascensión a los cielos. 4. Esto nos trae a la carta pastoral final en esta trilogía: Vivir Nuestro Catolicismo…Participar en la Celebración en Espíritu y Verdad. Cuando nuestro culto a Dios está basado en Espíritu y verdad, la vida diaria comienza a cambiar. Nosotros estamos cambiados desde adentro. Recordando que Dios como Creador y Redentor, siempre inicia la amante relación con nosotros, reflexionemos juntos en este aspecto de Vivir Nuestro Catolicismo. Este aspecto de nuestra vida católica es Participar en la Celebración en Espíritu y Verdad. 5. “Haced esto en memoria Mía.” Las palabras son familiares oídas en la institución de la oración Eucarística durante la celebración de la Liturgia. Haced Esto en Memoria Mía es también el título, recientemente publicado: Exploración de la Sagrada Liturgia- un estudio guía escrito con el doble propósito:1) profundizar en los lectores el entender la apreciación de la historia y desarrollo de la Celebración de la Eucaristía a través de los siglos hasta el presente; y 2) preparar a los católicos para la reciente revisión de los textos del Misal Romano, libro que contiene las 4 oraciones de la Misa. Escrito por algunos miembros del personal de la Oficina del Culto en la Diócesis de Memphis y la Arquidiócesis de Louisville, Kentucky, Haced Esto en Memoria Mía es un instrumento de comprensión, valioso para todos los católicos ya que nos acercamos al calendario del Adviento de 2012 cuando la revisión del Misal Romano va a tomar efecto en los Estados Unidos. Espero que muchos grupos de estudio estén formados a través de la Diócesis de Memphis para usar este recurso útil. 6. En esta carta pastoral no intento revisar los elementos específicos y la estructura de la Misa o reflexionar de los próximos cambios en los textos de las oraciones o exclamaciones. Como lo he dicho, todo eso está hecho en el documento, Haced Esto en Memoria Mía, mejor dicho, quiero aprovechar de esta oportunidad para que todos nosotros tengamos un mejor entendimiento de lo que yo quiere decir la celebración en Espíritu y verdad. Con esta carta pastoral, quiero dar a todas las oportunidades de reflexionar en las actitudes y prácticas que nos permiten profundizar nuestra experiencia de Dios, no solamente cuando venimos como comunidad a celebrar, pero también en nuestras oraciones privadas en nuestra vida diaria. 7. Lo que les pido cuando lean esta carta pastoral es lo mismo de lo que les pedí en las otras cartas pastorales: 5 a. Por favor tomen su tiempo para leer, orando esta carta pastoral, pidiendo alEspíritu Santo que les hable acerca de su vida con Dios al leerla reflexionando. b. Por favor dediquen algún tiempo en grupos diocesanos y parroquiales en los cuales ustedes han participado incluyéndome en sus reuniones para compartir sus reflexiones acerca de mis pensamientos como los he escrito aquí. Hay, en este momento, muchos grupos diocesanos y parroquiales: grupos de oraciones, grupos de estudio de la biblia, grupos de hombres, grupos de mujeres, comités de justicia social, grupos de ministerio litúrgico, pequeñas comunidades cristianas, consejos pastorales de la parroquia, equipos de consejos de finanzas y ministerio. En estos grupos muchos de ustedes ya han participado activamente en discusiones de cómo vivir nuestra fe en la iglesia local. En vez de formar nuevos grupos para discutir esta carta pastoral, me gustaría saber que cada vez que se reúnan, ustedes dediquen un tiempo a compartir su fe y el reto de vivir de una manera única la vida comunitaria como iglesia. c. Finalmente, es mi sincero deseo que las discusiones sobre la fe se hagan en el marco diario con familias y amigos .En el almuerzo con compañeros de trabajo, en la cena con la familia, en el campo de golf, en el círculo de costureras, en Facebook, en el mercado. Ruego que se sientan cómodos de hablar de los asuntos de la fe y de lo que significa para cada uno de ustedes el ser católico. 6 . 7 II. Celebrar en Espíritu y Verdad 8. Las palabras, “celebrar en Espíritu y verdad” vienen del capítulo cuarto del Evangelio de San Juan. La narración es de la mujer Samaritana y su encuentro con Jesús en un lugar de Samaria conocido como el pozo de San Jacobo. Jesús está interesado enseguida en la conversión en la fe del amor en un Dios viviente. Como su conversión se está desarrollando, la mujer se siente incómoda y trata de distraer a Jesús haciendo referencia a la existente rivalidad entre los que celebran el culto en la montaña, Gerezim, en Samaria y aquellos que rinden culto en el templo de Jerusalén. Jesús está más interesado en la conversión de la mujer que en los detalles del culto en ambos sitios sagrados. Así la corta a través de la distracción con lo siguiente: “Creedme mujer, va a llegar un momento cuando ustedes no van a celebrar culto ni en esta montaña, ni en Jerusalén. Ustedes celebran culto a lo que no entienden, porque la salvación viene de los judíos. Pero la hora va a venir, y está ahora aquí, cuando los verdaderos fieles celebraran culto al Padre en Espíritu y verdad; y en verdad el Padre busca tales personas para que le den culto. Dios es Espíritu, y aquellos que le dan culto lo deben de hacer en Espíritu y verdad.”2 2 Evangelio de San Juan 4:21-26 8 9. No contento de ser distraído por una discusión teológica entre Judíos y Samaritanos en el tema “donde” Dios debe ser adorado, Jesús intenta cambiar la atención de la mujer por “como” Dios desea ser adorado. En lugar de entrar en el debate acerca de donde Dios debe ser venerado, Jesús trata de llevar la atención de la Samaritana a un Dios que prefiere que se le de culto, no importa donde, pero que fluya de una relación amorosa entre Dios y el pueblo de Dios. El “Espíritu” en la referencia de Jesús es el Espíritu dado por Dios; el Espíritu revela la verdad y nos permite dar culto a Dios con corazón entero. Aquello que rinden culto en Espíritu y verdad son aquellos que sienten un deseo genuino de Dios. Una de las cosas que podemos aprender del encuentro de Jesús con la Samaritana es que fácil es ser atrapado en la logística del culto y perder de vista la experiencia de la comunión con EL que queremos rendir culto. 9 III. Celebración Tradicional 10. Cuando participamos en la Sagrada Liturgia – la Liturgia de las Horas, cada uno de los Sacramentos, y especialmente en la celebración de la Misa – estamos invitados a celebrar en Espíritu y verdad. En el acto litúrgico, estamos guiados por el Espíritu a estar atentos, a la completa y consciente presencia de Cristo, el Sumo Sacerdote, que está presente entre nosotros en la asamblea, en la persona del sacerdote que preside en la proclamación de la Palabra única y substancialmente en los elementos Eucarísticos del Pan y Vino. “[La]…liturgia… es correctamente vista como un ejercicio del oficio sacerdotal de Jesucristo, llevado a cabo por el cuerpo místico de Jesucristo, Cabeza, y sus miembros. De aquí se sigue que cada celebración litúrgica, porque es una acción de Cristo, el sacerdote y su cuerpo, que es la iglesia, es eminentemente una acción sagrada. No otra acción en la iglesia se compara en efectividad por el mismo título ni por el mismo grado… La liturgia es el punto culminante hacia el cual la actividad de la iglesia es dirigida; es también la fuente de la cual todo su poder fluye.”3 Y por eso como cristianos bautizados es nuestro derecho y deber tomar parte en la Sagrada Liturgia de la Iglesia - completa, consciente y activamente. Como católicos nos reunimos en específicos tiempos para la 3 Documentos del Concilio Vaticano II, Constitución Sobre La Sagrada Liturgia, #7, #9, #10 10 celebración oficial y comunitaria de la Iglesia. Cuando nos reunimos para la celebración del Cuerpo de Cristo, nuestra celebración es una expresión ritual de nuestra fe hacia un Dios amante, así como una expresión de gratitud por la continua revelación del cuidado de Dios. En la Sagrada Liturgia – ya sea el rito litúrgico que estamos celebrando - el Misterio Pascual está renovado y hecho presente en nuestro medio. Nuestra celebración de la Eucaristía y otros sacramentos, nuestra oración Litúrgica de las Horas, así como otros ritos de la Iglesia, nos ayudan a conocer a Dios y a conocernos a nosotros mismos como pertenecientes a Dios y a cada uno de nosotros a través de Cristo y por el poder del Espíritu Santo. 11. En una conferencia dirigida a los miembros del Culto Sagrado y de la Disciplina de los Sacramentos el Papa Juan Pablo II dijo: “La Liturgia y la vida son realidades inseparables.” Es verdad que nuestra fidelidad a Dios en la celebración privada y la vida diaria actualmente realza y mejora la calidad de la oración publica de la Iglesia cuando nos reunimos. Cuando intencionalmente pasamos tiempo con Dios solo, y cuando hacemos un esfuerzo consciente de responder a Dios en nuestra vida diaria, somos capaces de enriquecer a nuestros hermanos y hermanas cuando nos reunimos para la Eucaristía dominical y otras formas de oración litúrgica, Encuentro gran inspiración en los Documentos del Segundo Concilio Vaticano, La Constitución de la Sagrada Liturgia: La iglesia por lo tanto, desea verdaderamente que los fieles en Cristo, cuando presentes en este misterio de la fe, no sean como extraños silentes espectadores; al contrario através del buen 11 entendimiento de los ritos y oraciones deben tomar parte en la sagrada acción, conscientes de lo que están haciendo, con devoción y completa colaboración. Deben ser instruidos por la palabra de Dios y alimentados con el Cuerpo de Cristo; deben dar gracias a Dios; ofreciendo la Victima Inmaculada, no solamente através de las manos del sacerdote, pero también con él, deben aprender a ofrecerse a si mismos; a través de Cristo el Mediador, deben ser atraídos día por día a una unión más perfecta con Dios y con cada uno, ya que Dios finalmente pueda ser todo en todo.4 4 Documentos del Concilio Vaticano II, Constitución Sobre La Sagrada Liturgia, #48 12 IV. Celebración - Ambas Pública y Privada 12. Por el momento, la mayoría de los católicos están familiarizados con la frase, “completamente consciente y participación activa.” Esta citación frecuente de LaConstitución Sobre La Sagrada Liturgia es una descripción de la manera en la cual debemos “estar” en la Misa. Esta completa, consciente y activa participación está mencionada como “el derecho y deber del pueblo cristiano por la razón de su bautismo.”5 Poco antes de la precedente declaración, el mismo documento afirma: “con el propósito que la liturgia posea su completa efectividad, es necesario que los fieles vengan con la disposición propia…”6 y “La vida espiritual, sin embargo, no es solamente limitada a la participación en la liturgia. Los cristianos están llamados a rezar en unión unos con otros, pero también deben entrar en su cuarto, para rezar al Padre en secreto…”7 13. En este documento de la Iglesia, vemos que hay una correlación entre “rezar al Padre en secreto” y venir juntos a la Misa completa, consciente y activa participación en la celebración de la Eucaristía. Celebración privada (como oración contemplativa, meditación, etc.) y oraciones devocionales (como el Rosario, el Rosario de la Divina 5 Documentos del Concilio Vaticano II, Constitución Sobre La Sagrada Liturgia, #14 Documentos del Concilio Vaticano II, Constitución Sobre La Sagrada Liturgia, #11 7 Documentos del Concilio Vaticano II, Constitución Sobre La Sagrada Liturgia, #12 6 13 Misericordia, Novenas y otras devociones) no reemplazan la Sagrada Liturgia y la Sagrada Liturgia no reemplaza la celebración privada y devociones. Necesitamos las dos. Necesitamos tranquilidad y tiempo de calidad con Dios para crecer en nuestra relación personal con Dios y la oportunidad por la oración devocional como el Rosario o las Estaciones de la Cruzo o Vía Crucis. Necesitamos también reunirnos con el pueblo de Dios en la Eucaristía y otras formas de la liturgia para dar, recibir, ser alimentados y celebrar quién es Dios. Porque “la liturgia es el punto culminante hacia el cual la actividad de la Iglesia es dirigida, y al mismo tiempo es la fuente de la cual su poder fluye… la efectividad llena de esta oración publica depende del fervor de los participantes.”8 14. Cuando llegamos a la celebración pública de la Iglesia levamos la suma de lo que somos. Y cada vez que nos reunimos para celebrar la sagrada Liturgia, somos diferentes porque somos seres humanos y estamos cambiando y creciendo continuamente. Cuando estamos juntos para la celebración, llevamos todo lo que teníamos la última vez que nos reunimos, además de lo que hemos acumulado desde entonces. Eso incluye nuestros éxitos, nuestras caídas, esperanzas y planes, nuestro nivel de paz, nuestra fe, las consecuencias de las decisiones de la semana y mucho más. En resumen traemos nuestro “fervor” o la falta de él. 8 Documentos del Concilio Vaticano II, Constitución Sobre La Sagrada Liturgia, #10, #11 14 V. Celebración - Una Mirada Más Amplia 15. La Celebración, en su mayor nivel fundamentales es nuestra respuesta guiada por el Espíritu a Dios por lo que Dios ha hecho por lo que Dios está haciendo, y por lo que nuestra fe nos dice que Dios va a hacer en el futuro. Es nuestra respuesta de conocer a Dios con más profundo nivel. En el salmo 116, el salmista reza, “¿Cómo podré pagar al Señor por todo el bien que me ha hecho?”9 Como el salmista, celebramos cuando la gratitud es muy intensa dentro de nosotros que nos sentimos obligados a reconocerla y expresarla. Celebración es también lo que hacemos cuando nos sentimos sumidos en una situación desesperada e instintivamente sabemos que solo Dios nos puede ayudar. En tales momentos parece que nuestro organismo entero se dirige a Dios en una oración no hablada. Celebración es el himno de alabanza cantado por la congregación entera; celebración es también la oración silenciosa del corazón cuando estamos solos. Algunas veces celebración es un ejercicio de fe y confianza en medio de las dificultades. Siempre que respondemos a Dios, en unión con el Espíritu Santo que nos guía hacia la Verdad, estamos haciendo un acto de celebración. 16. Encuentro interesante que el Nuevo Diccionario Ingles de Oxford define Celebración como lo siguiente: 9 Salmo 116:12 15 “Celebración: el sentimiento o expresión de reverencia y adoración por una deidad; los actos o ritos que hacen una expresión formal de reverencia a una deidad; una ceremonia o ceremonias religiosas.” Pienso que con frecuencia nos olvidamos que este “sentimiento de reverencia o adoración” es un gran regalo de Dios para nosotros. Y es en efecto el Espíritu de Dios llamándonos interiormente a estar más conscientes de la presencia y acción de Dios en nuestras vidas. ¿Cuántas veces ignoramos ese susurro de Dios y seguimos con nuestras varias ocupaciones? Toma solo segundos estar atentos al conocimiento del cariñoso interés de Dios por nosotros y una vez más recordar que nunca estamos solos porque en Cristo Jesús, tenemos un compañero constante que desea estar involucrado en todos los aspectos de nuestras vidas. 17. En un viaje reciente, yo pasé un tiempo en un aeropuerto esperando mi próximo vuelo. Sentadas enfrente a mí había dos señoras. Una de ellas estaba acompañada de un niño. Con frecuencia durante la conversación de las señoras el niño tocaba el brazo de la mamá, hasta que le prestó atención. Al mirarlo pensé en cuantas veces durante mis días cuando mi atención estaba enfocada en una materia particular y Dios me estaba tocando para atraer mi atención. Mientras que creo que Dios está en el centro de mis actividades diarias y estoy al tanto que en general Dios está conmigo, pienso que en muchas oportunidades durante mi día durante nuestros días – cuando pudiéramos parar por un momento para responder a Dios para que en todo momento él busque una unión más 16 profunda con nosotros. Un silencio simple “si, Dios, yo sé que estás conmigo y estoy muy agradecido” es un acto pequeño de Celebración que tiene el poder de influenciar nuestras actitudes, y ensanchar nuestras perspectivas, y dar una tierna respuesta a los demás, para hacer más seguras nuestras decisiones, para transformar las frustraciones en paciencia. Hasta los actos más pequeños de Celebración nos pueden llevar a una nueva vía de transformación que nos llevara a una amistad más profunda con Dios. 17 VI. Celebración y la Mística Diaria 18. En este punto de la carta pastoral, espero que es obvio que no son los muchos actos específicos de celebración a los que me refiero en esta carta, sino a las muchas oportunidades que tenemos de vivir una vida de celebración. Lo que me emociona acerca de la gracia de Dios que es suficiente para ayudarnos a vivir esa vida. Una de mis favoritas definiciones de un místico es “uno que sabe que él o ella es amado por Dios.” Aquellos santos canonizados por la Iglesia y que se refieren como místicos tuvieron este aspecto de su espiritualidad en común. Santa Teresa de Ávila, describe su oración como un “intercambio entre amigos.” Ella tiene a Dios como un amigo y vive su creencia como si Jesús fuera su foco central y en efecto la misma razón de su existencia. Su íntima vida con Dios la condujo a abrir a otros al amor de Dios para ellos. San Juan de la Cruz describe su propia relación con Dios como una constante y profunda intimidad de un Amante y la persona amada. San Francisco de Asís descubrió el amor de Dios en la creación de Dios, en comunión con Dios en medio de su creación. 19. San Juan de Dios, Santa Teresa de Ávila, Santa Teresita de Jesús, San Francisco de Asís, Santa Juana de Chantal y toda la comunión de los Santos no tuvieron ideas falsas acerca de quiénes eran. Vivieron en humildad, aceptando ambas sus limitaciones y sus buenas cualidades. Algo constante en la vida de los místicos fue que no importa que, su fe les convenció que eran única y maravillosamente amados por Dios, y 18 subsecuentemente, eran llamados-a veces obligados - a compartir el amor de Dios con los demás. 20. Hermanas y Hermanos, la invitación de Dios hacia nosotros no es menos. ¡Estamos llamados a ser místicos, quiere decir estamos llamados a la realización y la aceptación que Dios que nos formó en el vientre materno, el Dios que nos ha guiado y protegido, el Dios que tenemos que hallar, en actualidad, nos ha encontrado! Es la mera naturaleza de Dios el ser el Iniciador; Dios el Creador: Dios el Redentor; Dios que comienza otra vez y otra vez, a buscar una relación mutua, profunda, diaria, y vivida en comunión con nosotros. 21 . ¡Pueden imaginar una vida nueva, profunda dentro de nosotros, que somos amados por Dios - como individuos únicos - y como una persona! ¡Cómo puedes apreciarte en verdad y honestidad, si tu llevas dentro una convicción profunda, no importa cómo te sientes en un día cualquiera, no importa las circunstancias a mano, no importa si fracasaste o tuviste éxito en una tarea particular, Dios te ama y desea una profunda amistad contigo! 22. Recuerda que celebrar en Espíritu y verdad es permitir al Espíritu de Dios guiarnos a la verdad. Si somos honestos con Dios acerca de quiénes somos y cómo estamos, comenzaremos a ver las tendencias injustificadas y actitudes gradualmente desaparecer. Si somos honestos cuando pedimos ayuda a Dios para ser personas llenas de amor, Dios seguramente hará eso porque tal deseo es el mismo deseo de Dios para 19 nosotros. Pero, hay un paso que con frecuencia no esperamos. Parte del proceso de convertirnos en personas amorosas es que Dios nos indiciará donde no tenemos amor. Si nuestra oración es sincera, y si somos genuinos y honestos con Dios, no ignoraremos a Dios cuando somos invitados a cambiar. La buena noticia es que Dios no solamente nos invita a cambiar, Dios nos ofrece también la gracia para cambiar. Cuando celebramos en Espíritu y verdad, hay espacio para el amor de Dios en nuestros corazones y en nuestras vidas. VII. Celebración como Servicio: Un Modo de Vivir 23. En este punto de nuestra reflexión, podemos preguntar, “¿Y qué acerca del resto del mundo?” “¿Es mi vida un acto de celebración en espíritu y verdad justo entre Dios y yo?” Estas son importantes preguntas, que merecen seria, regular y orante reflexión. Podemos comenzar a responder revisando el siguiente pasaje del Deuteronomio: “Seguramente, este mandamiento que les estoy dando hoy, no es muy difícil para ustedes, ni es muy lejano. No es en el cielo que ustedes dirían, “¿Quién irá al cielo por nosotros y recibirlo por nosotros para que podamos oírlo’ y observarlo?” ¿Tampoco, es del otro lado del mar que ustedes dirían, ‘Quien cruzara del otro lado del mar por nosotros para que nosotros podamos oírlo y 20 observarlo?’ No, la palabra está muy cerca de Ustedes; está en sus bocas y en sus corazones para que Ustedes lo observen.”10 24. Cuando intencionalmente ofrecemos nuestras vidas como un acto de celebración en Espíritu y verdad, comenzamos a vivir en unión profunda con Dios y comenzamos a ver algunas de las necesidades y penas del mundo que Dios ve. La celebración en Espíritu y verdad nos abre a la invitación de Dios de hacernos conscientes de las necesidades que encontramos. Podemos confiar que Dios nos va a llevar a esas situaciones donde la necesidad de otro - o muchos otros - es el perfecto reto a nuestra vocación única de servir a Dios. A veces nos encontramos, inesperadamente, en situaciones donde nos sentimos completamente desbordados. En tales momentos confiamos que la gracia de Dios trabajando en nosotros haga la diferencia que se necesita. La clave, por otra parte, es nuestro compromiso de la relación mutua con el Dios a quien hemos aprendido a confiar. Dios no solamente nos transforma a aceptar la amistad con Dios, Dios es capaz de transformar las partes del mundo al mismo tiempo que respondemos en amor. Confiamos que la palabra está muy cerca de nosotros; y está en nuestras bocas y corazones. 25. Uno de los grandes dones de Santa Teresa de Ávila a la Iglesia son sus escritos sobre la oración. Ella enseñó a evaluar nuestra oración, no como nos sentimos cuando rezamos, sino como actuamos cuando no estamos rezando. A veces, especialmente cuando empezamos a rezar, sentimos gozo y bienestar. Otras veces no sentimos nada. Sentir nada, no 10 Deuteronomio 30:11-14 21 quiere decir que nuestra oración no es buena, o que Dios no está con nosotros. Santa Teresa nos enseñó que juzgamos la calidad de nuestra oración por la calidad de nuestro amor. A veces hay momentos que nos parece que no vamos a ningún lado en nuestra celebración. Al mismo tiempo notamos que hemos sido más pacientes en nuestra relación con los otros, o que hemos incrementado nuestra paz y alegría. Puede que experimentemos nuevas esperanzas o una actitud menos egoísta en nuestra vida diaria. Llegar a ser más atentos a Dios en oración nos ayuda a ser más atentos a las necesidades de los demás. VIII.Conclusión: Dios que es Todo en Todo – Un Nuevo Amanecer 26. La Declaración de la Misión de la Diócesis Católica de Memphis dice: “La misión de los católicos de West Tennessee es vivir y proclamar las buenas nuevas de Jesucristo en acuerdo de las enseñanzas de la Iglesia Católica Romana por la publica Celebración y oración, enseñando y predicando la palabra de Dios, testimonio comunitario del evangelio, y caridad y servicio a todos.” 27. DagHammarskjold, Ex secretario General de las Naciones Unidas, expresaba su propio espiritual deseo en el clásico Markings. Él dice, “Si yo pudiera crecer: más firme, más simple, más tranquilo, más acogedor.” 22 Mientras su vida fue dedicada al fomento de la paz mundial, él sabía que necesitaba una vida espiritual. Al mismo tiempo que iniciamos una nueva vida de celebración en Espíritu y verdad, encontramos que Dios nos llama a dar más tiempo a la oración y más atención a la diaria experiencia de la presencia de Dios, y más consideración a los lugares del pueblo de Dios en nuestras vidas y en el mundo en el cual vivimos. Mi oración por ustedes al llegar al término de esta trilogía en Vivir Nuestro Catolicismo es que a través de Cristo nuestro Mediador, ustedes sean atraídos día a día a incluso una más perfecta unión con Dios y con los demás para que finalmente Dios sea todo en todo.”11 En la Divina Palabra Muy Reverendo J. Terry Steib, S.V.D. Obispo de Memphis en Tennessee Septiembre 2011 11 Documentos del Concilio Vaticano II, Constitución Sobre La Sagrada Liturgia, #48 23 Para Discusión Prólogo Vivir nuestro Catolicismo expresa la importancia de vivir nuestra fe que Dios nos dio, como un regalo de Dios, diariamente, hora a hora, minuto a minuto, día a día… 1. ¿De qué maneras experimento yo mi fe como un regalo de Dios? 2. ¿Experimento yo mi vida como una jornada de redescubrimiento de lo que significa vivir como verdaderos católicos? ¿De qué maneras? 24 Introducción A pesar del gozo que experimentamos en la otra vida sobrepasa lo que sabemos o imaginamos ahora, estamos invitados, no obstante y esperamos encontrar gran gozo AHORA viviendo como Jesús vivió. 1. ¿Puedo identificar específicos tiempos en mi vida cuando a pesar de dificultades, estuve consciente de la gracia de Dios dándome gozo? 2. ¿Será que mi atención se torna en gratitud a Dios cuando encuentro gozo en una persona o situación particular? ¿Como expreso esa gratitud? II. Celebrar en Espíritu y Verdad “La hora está llegando y está ahora aquí, cuando como verdaderos celebrantes, celebraremos al Padre en Espíritu y verdad; y en efecto el Padre busca tales personas que lo celebren así.” 25 1. ¿Tengo la sensación que Dios busca tener una relación conmigo? ¿Qué signos puedo identificar que Dios inicia una relación conmigo? 2. Después de su encuentro con Jesús, la Samaritana fue a la aldea y les dijo a todo el mundo que ella creyó que había encontrado al Mesías. ¿Quiero que los demás conozcan a Jesús como yo? ¿Como trato de impartir mi amor de Dios con los demás? III. Celebración Tradicional La liturgia es el punto culminante hacia el cual la actividad de la iglesia es dirigida; es también la fuente del cual todo su poder fluye. 1. ¿Cómo puedo describir mi propia experiencia en la Liturgia del Domingo? 2. ¿Qué puedo hacer para participar completamente en la vida sacramental de la Iglesia? 26 IV. Celebración -Ambas Pública y Privada Hay una correlación entre nuestra oración al Padre en secreto y cuando vamos con los otros a Misa, conscientemente y activamente participamos en la celebración de la Eucaristía. 1. ¿Hay alguna diferencia en mi experiencia de la Misa del domingo y cuando soy fiel a mi oración privada durante la semana? ¿Y si es así que tres diferencias puedo nombrar? 2. ¿Puedo decir honestamente que mi atención a Dios durante la Liturgia del domingo mejora mi oración durante la semana? ¿Mi activa participación en la Liturgia dominical cambia mi vida diaria en maneras diferentes a mi oración, por ejemplo mis relaciones con los demás, o mi actitud hacia los eventos de mi vida? V. La Celebración- Una Amplia Mirada La Celebración es nuestra repuesta guiada por el Espíritu para incrementar nuestro conocimiento a Dios a niveles más profundos. 1. ¿Cuándo recientemente experimentamos una celebración más intensa y el sentimiento de reverencia y adoración? ¿Como respondemos? 27 2. ¿Reconozco el pequeño susurro de Dios en medio de mis actividades diarias? ¿Identifico esa inspiración pequeña como una atención amorosa de que Dios quiere tomar parte en las cosas simples de mi vida? VI. La Celebración y la Mística Diaria Un místico es uno que sabe que él o ella es amado por Dios. Todos estamos a ser llamados a ser místicos, esto es, estamos llamados a la realización y a la aceptación que Dios que nos formó en el vientre materno, el Dios que nos ha guiado y protegido actualmente busca la unión con nosotros. 1. ¿Las precedentes palabras cambian mi impresión de quien es o no es un místico? ¿Es difícil para mí creer que Dios me amo mucho antes que yo pensara en amar y necesitar a Dios? 2. Los santos vivieron en humildad aceptando sus limitaciones y sus talentos. ¿Puedo decir que soy honesto conmigo mismo acerca de mis limitaciones y talentos? ¿Puedo nombrar algunos de ellos y más específicamente al hablar con Dios acerca de quién soy yo y acerca de la vida de Dios en mí? 28 VII. La Celebración como Servicio: Un Modo de Vida Cuando intencionalmente ofrecemos nuestra vida como un acto de celebración en Espíritu y verdad, comenzamos a vivir en una profunda unión con Dios y comenzamos a ver algunas de las necesidades y penas del mundo que Dios ve. 1. ¿Veo mi relación con Dios como una relación que afecta no solo a mí, mi opinión de quién soy yo, a los ojos de Dios, afecta a los demás también? ¿Cómo? 2. ¿Cuándo encuentro las personas que la sociedad rechaza, estoy consciente de ello, y entonces estoy encontrando a Jesús? ¿Y ellos encuentran a Jesús cuando ellos me ven? Este hecho cambia de la manera como respondo a los demás. VIII. Conclusión: Dios que es Todo en TodoUn Nuevo Amanecer Mi oración por ustedes es que a través de Cristo ustedes sean atraídos al Mediador día por día a una unión más perfecta con Dios y con cada uno para que Dios sea todo en todo. 29 1. ¿Qué es lo que significa para mí que yo pueda juzgar la calidad de mi oración por la cualidad de mi amor? ¿Usualmente estoy consciente de cómo, mi oración y mi amor están relacionados? 2. ¿Cómo mi vida va a cambiar si me descuido en el amor a Dios por mí? ¿Cómo las personas en mi vida van a ser afectadas? 30