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ISSN 2007-932X R E V I S T A vol. 19, suplemento 1, 2014 CONTENIDO CONTENTS Editorial Editorial La enseñanza de la odontología y su relación con la seguridad del paciente. . . . . . . . . . . . . . . . . S3-S4 Teaching of Odontology and its relationship to patient safety. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . S3-S4 Jorge Triana Estrada Jorge Triana Estrada Artículo Especial Special Articles Calidad y Seguridad en la atención Odontológica, una propuesta educativa . . . . . . . . . . S5-S9 Quality and safety in dentistry care, an educational proposal. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . S5-S9 Jorge Triana Estrada Jorge Triana Estrada Guía práctica para afrontar las emergencias en el consultorio dental. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .S10-S13 Practical guide to confront emergencies at the dental office. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .S10-S13 Roberto Gómez García, Rocío Luna Navarro Roberto Gómez García, Rocío Luna Navarro Seguridad del paciente en los consultorios dentales . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .S14-S17 Patient safety in the dental office. . . . . . .S14-S17 Enrique Acosta Gío Enrique Acosta Gío Review Articles Artículos de Revisión Seguridad del paciente en cirugía bucal: predicción de riesgo para dificultad quirúrgica y eventos adversos . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . S18-S23 Patient safety in oral surgery: predicting risk for surgical difficulty and adverse events. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . S18-S23 Vallery Fuentes Arciniega Vallery Fuentes Arciniega Artículos de Opinión Opinion Articles La seguridad del paciente en odontología, un punto de vista bioético. . . . . . . . . . . . . . . . . S24-S28 Patient safety in dentistry, a bioethic point of view. . . . . .. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .S24-S28 Jorge Alberto Calderón Martínez Jorge Alberto Calderón Martínez Reflexiones acerca de los principios éticos y legales de mayor trascendencia en la práctica médica y su relación en la calidad y seguridad de los pacientes. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . S29-S32 Reflections on the ethical and legal principles of major importance in medical practice and its relationship to quality and patient safety. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . S29-S32 Armando Martínez Ramírez, Salvador Chávez Ramírez, Francisco Javier Barrera Sánchez, Miguel Roberto Kumazawa Ichikawa, Enriqueta Guadalupe Cambero González, Erika Karina Ortega Larios Armando Martínez Ramírez, Salvador Chávez Ramírez, Francisco Javier Barrera Sánchez, Miguel Roberto Kumazawa Ichikawa, Enriqueta Guadalupe Cambero González, Erika Karina Ortega Larios Farmacoseguridad en odontología. . . . . . .S33-S37 Dentistry Pharmaco-Safety. . . . . . . . . . . . S33-S37 Vallery Fuentes Arciniega, Jorge Alberto Calderón Mártinez Vallery Fuentes Arciniega, Jorge Alberto Calderón Mártinez Recomendaciones Recommendations Recomendaciones para mejorar la práctica odontológica. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . S38-S48 Recommendations to the improvement of odontology care. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .S38-S48 Registrada en: PERIÓDICA IMBIOMED CUIDEN LATINDEX DIALNET ARTEMISA BVS-MÉXICO EBSCO LILACS MÉXICO Los artículos de la Revista CONAMED versan sobre seguridad del paciente, calidad de la atención médica, ética profesional, error médico y su prevención, así como temas relacionados con los medios alternos de solución de conflictos, derechos humanos y otros afines al acto médico. R E V I S T A Editor Dr. José Meljem Moctezuma Editor Adjunto Dr. Miguel Ángel Lezana Fernández Consejo Editorial Dr. Luis Alberto Villanueva Egan Lic. Esther Vicente González Dr. Jorge Alfonso Pérez Castro y Vázquez Lic. Bertha Laura Hernández Valdés Dr. Juan Francisco Javier Millán Soberanes Lic. Raymunda Guadalupe Maldonado Vera Lic. Joseba Andoni Gutiérrez Zurita Dra. Mahuina Campos Castolo Subcomité de Metodología y Bioestadística Dr. Armando Ruíz Badillo Universidad Pedagógica Nacional, México Dr. José Antonio Supo Condori Sociedad Peruana de Bioestadística, Perú Dr. Giordano Pérez Gaxiola Red Cochrane México Leopoldo Vega Franco Asociación Mexicana de Editores de Revistas Biomédicas, México Procedimiento Editorial Dra. Mahuina Campos Castolo Dr. Luis Alberto Villanueva Egan Lic. Araceli Zaldivar Abad Diseño y Producción Lic. Jorge Armando Collado Peña PSSDG. Laura Solís Munguía Comité Editorial Dr. Enrique Ruelas Barajas Academia Nacional de Medicina, México Dr. Alejandro Reyes Fuentes Academia Mexicana de Cirugía M. en C. Julio César Ballesteros del Olmo Academia Nacional de Pediatría, México Dr. Enrique Luis Graue Wiechers Facultad de Medicina, UNAM, México Mtra. Dolores Zarza Arizmendi Escuela Nacional de Enfermería y Obstetricia, UNAM, México Mtro. Severino Rubio Domínguez Colegio Mexicano de Licenciados en Enfermería, A. C Dr. Rafael M. Navarro Meneses Centro Médico Nacional “20 de Noviembre”, ISSSTE, México Dr. Heberto Arboleya Casanova Hospital Regional de Alta Especialidad de Ixtapaluca Secretaría de Salud, México Dra. Aurora Del Río Zolezzi Centro Nacional de Equidad de Género y Salud Reproductiva, México Dr. Bremen De Mucio Centro Latinoamericano de Perinatología, Uruguay Martie Hatlie Asociación para la Seguridad del Paciente, Estados Unidos de América Traducciones al idioma inglés Adriana Valadez Bocanegra La Revista CONAMED está registrada en los siguientes índices: dialnet.uniroja.es/ bvs.insp.mx biblat.unam.mx/es/ imbiomed.com.mx Subcomité de Ética Editorial Dra. Magda Luz Atrian Salazar Dra. Abilene Escamilla Ortíz Dr. Norberto Sotelo Cruz Asociación Mexicana de Editores de Revistas Biomédicas, México Dra. Paola de Castro Institute Superiore di Sanitá European Association of Scientific Editors, Italia Dra. María del Carmen Ruíz Alcocer World Association Medical Editor, Estados Unidos de América artemisaenlinea.org.mx lilacs.bvsalud.org.es dgb.unam.mx/index.php/catalogos index-f.com/busquedas.php latindex.org ebsco.com Certificado ISO 9001-2008 AMERBAC Miembro de la Asociación Mexicana de Editores de Revistas Biomédicas amerbac.org.mx Revista CONAMED, Volumen 19, Suplemento 1, 2014, es una publicación trimestral editada por la Comisión Nacional de Arbitraje Médico. A través de la Dirección General de Difusión e Investigación. Mitla 250 esq. Eje 5 Sur (Eugenia), Col. Vértiz Narvarte, Delegación Benito Juárez, C.P. 03020, México, D.F. México. Tels: +52 (55) 5420-7143 y 5420-7106. www.conamed.gob.mx, revista@conamed.gob.mx. Editor responsable: Dr. José Meljem Moctezuma. Domicilio previamente citado. Reservas de Derechos al Uso Exclusivo No. 04-2014-040110340300-203, ISSN: 2007-932X, ambos otorgados por el Instituto Nacional del Derecho de Autor, Licitud de Título No. 9969 y Licitud de Contenido No. 6970, otorgado por la Comisión Calificadora de Publicaciones y Revistas Ilustradas de la Secretaría de Gobernación. Permiso SEPOMEX No. PP-DF-025 1098. Impresa por Impresora y Encuadernadora Progreso S.A. de C.V. (IEPSA), Calzada de San Lorenzo No. 244, Col. Paraje San Juan, C.P. 09830. Delegación Iztapalapa, México D.F. Este número se terminó de imprimir en Diciembre de 2014, con un tiraje de 2,000 ejemplares. Los artículos firmados son responsabilidad del autor. Las opiniones expresadas por los autores no necesariamente reflejan la postura del editor de la publicación. Revista CONAMED se publica bajo la política de Acceso Abierto (Open Access) y está disponible bajo Licencia Creative Commons Reconocimiento 4.0 Internacional, por lo que se permite compartir, copiar, distribuir, ejecutar y comunicar publicamente la obra y hacer derivadas, citando la fuente. R E V I S T A Editorial Rev CONAMED 2014;(supl):S3-S4 La enseñanza de la Odontología y su relación con la seguridad del paciente Teaching of Odontology and its relationship to patient safety El proceso de la atención odontológica moderna involucra un gran número de variables y el desconocimiento por parte del profesional de la Odontología durante su formación, así como sus efectos sobre la salud y las medidas para su control y/o prevención, provoca que su futuro ejercicio profesional sea incierto y adquiera una connotación de riesgo no sólo para ellos, también para sus pacientes y para el personal asistencial y auxiliar que integran su equipo de trabajo. La etapa de formación de los profesionales de la salud, es la piedra angular que permite contribuir a brindar una atención de calidad y seguridad, fundamentada en la creación de una cultura del servicio, enfocada a las necesidades de los usuarios de los sistemas de salud, teniendo como base el factor humano y sustentado en valores y principios éticos, que faciliten establecer los criterios explícitos basada en la mejor evidencia disponible y que dicho proceso implique menos riesgos para los usuarios. Sin embargo, en relación a la Seguridad del Paciente, las escuelas han descuidado la enseñanza sobre la gestión de riesgos y la prevención de eventos adversos, no identificando a la Odontología como una profesión potencialmente generadora de daños al paciente. Como consecuencia, desde la perspectiva legal, se ha comprobado que la inobservancia de principios de seguridad ha orillado a los pacientes a demandar no sólo a los cirujanos dentistas sino también a técnicos y personal auxiliar, en función de resultados adversos y secuelas de tratamientos que no les fueron advertidos, o por realizar procedimientos inadecuados, los cuales generan responsabilidad por parte del profesional de la salud. En ese contexto a la odontología le corresponde garantizar la seguridad, prevención, tratamiento y control de los procesos y procedimientos relacionados con el ejercicio de la profesión, obligándose a la aplicación e implementación de conceptos éticos, clínicos, científicos y legales para evitar dañar a sus pacientes. La enseñanza de la Odontología En relación a la enseñanza de la Odontología, es importante mencionar que la metodología docente que predomina en la mayoría de las escuelas corresponde a modelos tradicionales, que se han visto superados por aquellos donde se favorece la participación activa de los estudiantes y los profesores que adoptan un papel distinto. Es decir, el papel de facilitadores y orientadores del proceso de aprendizaje de los estudiantes, para que éstos no solo memoricen sino aprendan a buscar y analizar la información científica de una manera crítica. Por otra parte, la forma de organización de las actividades clínicas de los alumnos, expresa la visión de la práctica profesional que las escuelas tienen y por lo tanto, transmiten a sus estudiantes. Es indiscutible que las clínicas universitarias de atención a la salud bucodental han contribuido a paliar la demanda social de la salud bucal, pero se requieren esfuerzos coordinados y a mayor escala que implique, entre otras medidas, incluir la profesión odontológica con un estatus definido dentro del sector salud, así como la coordinación con organizaciones gremiales en la apuesta por una educación para la salud bucal con especial atención a los procesos de gestión de la calidad y seguridad en la atención a la salud. A pesar de los esfuerzos de algunas instituciones educativas, por orientar la enseñanza clínica hacia una atención integral, se ha identificado que es más un ideal que una realidad y la instrucción aún se enfoca principalmente en los procedimientos mismos, más que en la atención Revista CONAMED, vol. 19, suplemento 2014, pags. S3-S4 ISSN 2007-932X S3 R E V I S T A al paciente, derivándose en una visión utilitarista del alumno en su etapa de formación, misma que aplicará durante su ejercicio profesional. En la actualidad el vínculo entre la odontología y la medicina resulta insuficiente para preparar a los estudiantes en el manejo de pacientes con problemas médicamente más complejos y para aprovechar las estrategias orientadas hacia la prevención, el diagnóstico y el tratamiento. Además se reconoce la existencia de planes y programas de estudio con un matiz eminentemente restaurador, dejando un papel secundario a la prevención, consecuentemente alejados de los conceptos sobre seguridad en la atención dental de los pacientes. Propuesta Educativa Derivado del planteamiento anterior, se propone capacitar en las Instituciones Educativas a docentes, alumnos y cuerpo directivo, utilizando un modelo educativo que permita migrar del plan educativo tradicional pasivo/receptivo, al auto dirigido, activo y reflexivo para desarrollar capacidades en los recursos en formación, que contribuyan a la mejora de su desempeño. Por tanto, se establece la necesidad de la implementación de una propuesta educativa cuyos objetivos estratégicos, estén orientados a: 1. Incorporar a la malla curricular, elementos que impulsen el conocimiento sobre el tema de calidad y seguridad del paciente y en la prevención y gestión de riesgos, para su aplicación desde los contactos iniciales de los recursos en formación con sus pacientes. 2. Impulsar la investigación y la educación continua, a través de la implementación de cursos, talleres, seminarios y diplomados que aborden la temática sugerida sobre Calidad y Seguridad en la atención Odontológica. 3. Propiciar una mayor integración de la Odontología y la educación médica, a través del trabajo interdisciplinario. 4. Desarrollar proyectos que promuevan la interacción entre las diversas disciplinas de las Ciencias de la Salud. 5. Privilegiar durante la formación académica, los principios que regulan el acto odontológico: éticos, científicos y legales. 6. Diseñar y establecer esquemas de colaboración entre Universidades, industria, gobierno, S4 asociaciones gremiales y organizaciones no gubernamentales; que faciliten la implementación de proyectos de investigación y asistenciales. 7. Desarrollar una estrategia que involucre a los docentes en la investigación y la superación académica. 8. Crear un modelo de atención a la salud bucodental enfocado en el paciente y la comunidad, que propicie el trabajo en equipo entre académicos y recursos en formación. CONCLUSIONES La enseñanza de la Odontología y su relación con la Seguridad del Paciente. Es indudable que esta propuesta sobre el proceso de actualización llevará implícita la oposición de quienes se resisten a un cambio en el paradigma de la enseñanza de la profesión y la práctica asistencial; sin embargo, es de esperarse que este nuevo esquema de atención vaya ganando cada vez más adeptos al ir mejorando su comprensión del método científico aplicado al sector salud y la capacidad de valorar críticamente la información. Esta propuesta ofrece la posibilidad de generación del conocimiento y apertura del trabajo académico odontológico, por lo que se debe impulsar la formación de recursos humanos altamente competitivos, para hacer posible el desarrollo disciplinar, el avance del conocimiento y el abatimiento de costos. El aumentar la seguridad clínica de nuestros pacientes aumentará la seguridad legal de los Cirujanos Dentistas. Las Instituciones Educativas son las responsables de proporcionar el conocimiento necesario a sus estudiantes acerca de los riesgos a los que expone la práctica odontológica, sus efectos y medidas de prevención. Por tanto, será necesario promover en los centros de profesionalización, el desarrollo de una Práctica Odontológica dentro de los parámetros de Calidad y Seguridad, a través de un proyecto permanente y de constante actualización, que favorezca la disminución de los eventos adversos que se presentan de manera constante durante el proceso de atención a la salud bucodental, así como de los riesgos a los que están expuestos quienes participan en dicho proceso. C.D. JORGE TRIANA ESTRADA Editor Invitado revista@conamed.gob.mx Revista CONAMED, vol. 19, suplemento 2014, pags. S3-S4 ISSN 2007-932X R E V I S T A Artículo Especial Rev CONAMED 2014;(supl): S5-S9 Calidad y seguridad en la atención odontológica, una propuesta educativa Quality and safety in dentistry care, an educational proposal Jorge Triana-Estrada1 RESUMEN La atención a la salud bucodental presenta características que la diferencian de otros procesos de atención a la salud. Ésto se debe a que la mayor parte de esta atención se lleva a cabo en consultas privadas individuales, lo cual hace que el profesional esté aislado y sobre él recaigan las responsabilidades de atención, gestión administrativa y del personal, control de existencias, mantenimiento y esterilización de materiales e instrumental, control de citas, eliminación de residuos, entre otras. Para realizar sus funciones requieren gran variedad de equipos y materiales, por lo que están expuestos a sufrir accidentes y a entrar en contacto con diversos agentes infecciosos. Las nuevas tecnologías, con instrumental y materiales cada vez más sofisticados, han variado los riesgos de este profesional. Dentro del grupo de los trabajadores se encuentran el estomatólogo, técnicos protésicos, higienistas y asistentes, aunque la mayor parte de los riesgos son comunes a todo el grupo, existen también problemas específicos en cada categoría profesional y lugar de trabajo (consultorio, laboratorio de prótesis, quirófano, entre otros). Asimismo, el paciente corre una serie de riesgos inherentes a la práctica estomatológica debidos a los aspectos mencionados anteriormente, por lo que es indispensable tenerlos en cuenta al hablar de seguridad de la atención del paciente estomatológico. En virtud de estos planteamientos se hace necesario que en el lugar de trabajo de estos profesionales, se integren los elementos necesarios que les permitan el desarrollo de sus actividades dentro de los parámetros de calidad, seguridad, condiciones y medio ambiente de trabajo, de tal forma que la atención bucodental y el espacio donde se brinda, tendrá que contemplar todos estos elementos, para asegurar una atención de calidad y seguridad para el proveedor del servicio, el paciente y el escenario. Palabras clave: seguridad del paciente, calidad para el cuidado bucal, educación. ABSTRACT Oral healthcare presents characteristics that differentiate it from other healthcare processes, majorly because most of the attention is given as individualistic private consults, which causes the professional to be isolated and for him to assume all responsibilities: care, economic, personnel and administrative management, stock control, maintenance and sterilisation of the equipment and tools, appointment control, waste disposal, among others. To be able to perform their tasks a great number of apparatus and utensils are necessary, therefore the professionals are exposed to accidents and to Facultad de Estudios Superiores (FES) Iztacala, UNAM. México. 1 Folio 276/2014- Artículo Recibido: 26/06/2014 Artículo Reenviado: 22/07/2014 Artículo Aceptado: 27/08/2014 Correspondencia: C.D. Jorge Triana Estrada, Profesor de asignatura “A” definitivo. Facultad de Estudios Superiores (FES) Iztacala, UNAM. México. Correo electrónico: jtrianae@hotmail.com. Revista CONAMED, vol. 19, suplemento 2014, pags. S5-S9 ISSN 2007-932X S5 R E V I S T A different infectious agents. New technology, with more sophisticated tools and materials, has modified such risks. Under these approaches, it is necessary that the work place for these professionals integrates the necessary elements, this will allow them to develop their activities within the parameters of PROPUESTA EDUCATIVA PARA FORMAR FACILITADORES Marco de referencia En las iniciativas de mejora en la atención a la salud, las intervenciones requieren ser individualizadas y vinculadas a la disposición al cambio del personal de salud para reducir la resistencia, el estrés, el tiempo para implementarlas y acelerar el movimiento hacia la etapa de acción. El primer paso en el proceso de mejora del proceso clínico es identificar y definir los objetivos, clarificar las metas de la intervención, inducir a los líderes al cambio y finalmente comunicar la decisión al resto de la organización. Un proceso exitoso de mejora de la práctica clínica requiere que el personal de salud: • • • • • Obtenga información acerca del proceso de atención. Participe en grupos de trabajo interdisciplinarios. Incluya a los pacientes en la toma de decisiones. Cambie los procesos de trabajo en respuesta a nuevos conocimientos. Utilice efectivamente la tecnología. El personal de salud, con frecuencia interpreta toda intervención de mejora de la práctica clínica como una amenaza a la autonomía profesional y son escépticos acerca de que una técnica de gestión pueda mejorar el resultado de la atención médica. Existe una serie de obstáculos que se oponen a la adherencia a nuevas intervenciones, entre ellas, barreras de conocimiento (conciencia del problema de salud y alternativas de solución), barreras en las actitudes (desacuerdos, falta de confianza en las habilidades propias) y barreras en las conductas (inercia de la práctica, creencia de un impacto bajo de la recomendación). Por otra parte, al analizar S6 quality, safety, working conditions andenvironment, in a manner that oral care and the space in which it is treated will have to contemplate all these elements, in order to achieve a quality and safety attention for the service provider, the patient and the room. Key words: patient safety, oral care quality, education. la eficacia de diversas estrategias de educación médica continua se ha encontrado que la mayoría de las intervenciones utilizadas, materiales educativos y conferencias entre otros, tienen poco efecto en la disposición del personal para cambiar sus conductas. Al respecto hay un conocimiento creciente de que el éxito de las intervenciones depende en parte de la disposición individual al cambio, de la dinámica de la difusión y de la diversidad y sinergia de las modalidades educativas. La propuesta que se presenta a continuación tiene como punto de partida el planteamiento del cambio entendiéndolo, como un progreso en el tiempo a través de una serie de etapas: precontemplación, contemplación, preparación, acción y mantenimiento mediante actividades cognitivas, afectivas y conductuales, así como en el modelo de adopción de la innovación, para definir las estrategias educativas, los factores que promueven la incorporación de la innovación incluyen: identificar y apoyar a los innovadores, invertir en los adoptadores tempranos, hacer observable la actividad de los adoptadores tempranos, crear espacios de actividad para el cambio y guiar mediante el ejemplo directivo. Ninguna estrategia por sí misma es mejor que otra, sino que debe adaptarse a las particularidades de la propuesta de cambio del grupo objetivo, al contexto y a los obstáculos encontrados, antes y durante el proceso. La mejor estrategia es multifactorial, adecuando las intervenciones en cada etapa del proceso de cambio, entre estas estrategias didácticas múltiples tenemos: • Estimulan la motivación individual o de pequeños grupos y el individuo se siente parte del proceso de cambio: aprendizaje basado en problemas, discusión en pequeños grupos y desarrollo de consensos. Revista CONAMED, vol. 19, suplemento 2014, pags. S5-S9 ISSN 2007-932X Educación en calidad y seguridad odontológica Triana-Estrada J. • Apelan a la racionalidad en la toma de decisiones, mediante la búsqueda, la síntesis y la difusión de evidencias disponibles: guías de práctica clínica, árboles de decisión, informes de evaluación de tecnología en salud. • Evalúan el desempeño, retroalimentan al profesional y lo proveen de información para tomar mejores decisiones: sistemas de auditoría y retroalimentación, recordatorios, incentivos. • Enfatizan que el aprendizaje y el cambio surgen de la interacción con y de la influencia de otras personas a las que se consideran importantes: visitas de apoyo académico, revisión por pares, influencia de líderes de opinión, intervenciones mediadas por pacientes. Dadas las características y cobertura del personal de salud a capacitar, disponibilidad de recursos financieros y de facilitadores de los procesos educativos y de capacitación, así como del tiempo asignado para estas actividades; la estrategia que cubriría dichos supuestos sería la de capacitar al personal de salud, mediante la modalidad de aprendizaje autodirigido y práctica clínica autónoma, con la convergencia de diferentes intervenciones educativas, a esta modalidad se le ha denominado: ”intervención educativa sinérgica”, cuyas características se muestran a continuación. ”Intervención Educativa Sinérgica” Modelo educativo que permita transitar del modelo tradicional educativo pasivo-receptivo al autodirigido, activo y reflexivo para desarrollar capacidades en el personal de salud que contribuya a la mejora de su desempeño, entendiendo a éste como la capacidad para desarrollar una actividad y lograr los objetivos institucionales. El proyecto contribuye a: • Instrumentar modalidades didácticas interactivas. • Desarrollar intervenciones educativas con base en las necesidades específicas e individuales del participante. • Incluir un modelo de reflexión acerca de las prácticas y procesos de trabajo cotidiano. • Valorar las decisiones médicas con base en el análisis del juicio clínico y la mejor evidencia disponible. • Promover la inclusión de líderes de opinión como facilitadores del proceso educativo. Los aspectos centrales del proceso de aprendizaje son: • Fortalecer la práctica clínica efectiva mediante la conducción de tareas, trabajo en equipo, discernimiento y toma de decisiones clínicas. • Establecer procedimientos estándar para brindar la atención a la salud necesaria, a través de la definición de tareas específicas. • Difundir información clínica para la toma de decisiones. • Incorporar la queja como área de oportunidad. • Educar al paciente (empoderarlo, transmitirle responsabilidades y atribuciones) en relación a asumir la responsabilidad de su salud, estableciendo prioridades, planes, metas y realizar entrevistas educacionales. La metodología incluye: • • • • • Elegir estrategias de aprendizaje: Utilizar modalidades interactivas, participativas, reflexivas. Elaborar el programa educativo: Integrar las modalidades educativas, contenidos, tiempos y responsables del proceso. Desarrollar la intervención educativa: Capacitar a los facilitadores de las unidades a intervenir quienes facilitarán el proceso educativo en dichas unidades. Evaluar el proceso: Aplicar el método “Análisis del juicio clínico”. Mantener la intervención: Estabilizar las conductas logradas mediante retroinformación del desempeño exitoso y no exitoso. Las técnicas didácticas recomendadas son: 1. Aprendizaje basado en problemas: método de razonamiento clínico colaborativo para identificar un problema y encontrar una solución con base en las ciencias básicas y clínicas. 2. Aprendizaje en pequeños grupos: provee un contacto social efectivo con pares y profesores con tres características participación activa, propositiva y cara a cara 3. Visitas académicas: permite el aprendizaje cara a cara con un experto, en un ambiente amigable, propio de la práctica clínica, con información confiable, que toma en consideración las creencias, valores y actitudes del personal 4. Auditoría y Retroalimentación: recopilación y análisis del desempeño clínico en un periodo específico e incluye recomendaciones para la Revista CONAMED, vol. 19, suplemento 2014, pags. S5-S9 ISSN 2007-932X S7 R E V I S T A acción en prevención, manejo de la enfermedad, pruebas diagnósticas, prescripción, entre otros. 5. Análisis del juicio clínico: es una evaluación de la atención médica con estándares o criterios explícitos que incluye la intervención clínica, la gestión y los derechos del paciente. 6. Difusión de materiales educativos tales como: guías clínicas explícitas, probadas y apoyadas en estudios clínicos; boletines; recordatorios y soporte informático. Objetivos 1. Incorporar a la práctica odontológica una cultura de calidad en la atención y seguridad del paciente. 2. Inclusión de la temática de calidad, seguridad y temas afines en la atención estomatológica, en los planes y programas de formación, capacitación y educación contínua. 3. Definir de manera consensuada la terminología orientada a la práctica estomatológica. 4. Establecer los contenidos mínimos para cada área temática y proponer la modalidad para su inclusión en las mallas curriculares (asignatura, módulo, materia optativa, diplomado para titulación, curso extracurricular, entre otros). 5. Definir los mecanismos para la incorporación en los planes y programas de formación, capacitación y educación continua para el odontólogo. 6. Elaborar instrumentos/herramientas para la evaluación de la implantación de esta nueva estructura académica y a largo plazo la evaluación de su incorporación a la práctica odontológica. 7. Explorar las oportunidades que permitan crear una Sociedad del Conocimiento en estomatología, para compartir conocimientos, experiencias, buenas prácticas, así como crear espacios para el análisis y reflexión crítica, y con esto contribuir en la mejora de la calidad y seguridad de la atención estomatológica. Líneas de acción: 1. Diagnóstico situacional: • Escuelas o facultades de odontología que estén o hayan incorporado la temática de calidad y seguridad en sus planes y/programas de estudio, con la finalidad de identificar experiencias exitosas, replicables y aprender de las que no lo fueron. • Personal experto en los temas de calidad, S8 seguridad y mejora continua, con el propósito de contar con un capital intelectual que apoye las actividades de capacitación y formación de facilitadores y posteriormente colabore en la definición de la malla curricular en calidad y seguridad en la atención estomatológica. • Escenarios para la educación a distancia. Identificar las posibilidades y capacidades de contar con los elementos mínimos necesarios para aulas virtuales y/o tecnología en comunicación e información. 2. Construir las competencias que el odontólogo requiere desarrollar para integrar a su práctica profesional la cultura de calidad, seguridad y mejora continua. 3. Definir programas de capacitación y actualización para el personal docente que impartirá esta nueva estructura académica. 4. Establecer alianzas, acuerdos, convenios interinstitucionales e intersectoriales para promover la cultura de calidad y seguridad en la atención del paciente estomatológico. 5. Difundir en diversos foros nacionales e internacionales la experiencia, resultados y retos. Metodología Para el desarrollo de las actividades definidas en esta estrategia, es recomendable utilizar las tecnologías de la información y de las comunicaciones lo que permitirá una mayor cobertura, diversificará los escenarios de aprendizaje y con ello generar oportunidades para el análisis y la reflexión crítica de la práctica odontológica. Los programas para sensibilizar, formar y capacitar contemplarán: 1. Desarrollo de contenidos por profesionales con reconocimiento académico y social en las áreas del conocimiento correspondientes. 2. Presentarán un equilibrio entre contenidos teóricos y prácticos. El alumno resolverá casos para crear conocimiento en calidad, seguridad y temas afines. 3. Para el diseño de la (s) intervención (es) educativa (s) programas académicos y/o programas operativos será necesario considerar: • Involucrar en el modelo educativo y en la práctica médica otros saberes como el de la antropología, sociología, filosofía, etnología que tienen una visión más amplia sobre la Revista CONAMED, vol. 19, suplemento 2014, pags. S5-S9 ISSN 2007-932X Educación en calidad y seguridad odontológica Triana-Estrada J. salud y la enfermedad lo que brindaría elementos para el replanteamiento de las políticas para la atención odontológica y la co-participación de la comunidad en esta atención. Sinergizar estos saberes, para contar con una perspectiva interdisciplinaria. • Cosmovisión de la salud-enfermedad: Conocimientos de las comunidades en sus prácticas para promover su salud y atender la enfermedad. • La atención odontológica en el marco de los derechos humanos, ética y bioética, así como en el contexto de la atención a la salud basada en la mejor evidencia disponible.2, 3, 4, 5, 6, 7, 8 Bajo estos referentes, se establecerán las estrategias que permitan incluir en los procesos educativos del personal odontológico, además de las competencias técnicas para cada perfil, las competencias que les permitan acotar una práctica clínica reflexiva y un desempeño sobresaliente, fundamento de los procesos de mejora de la calidad y seguridad en la atención médica, en el marco de las tendencias del mercado laboral global y los avances científico-tecnológicos, de la bioética y derechos humanos, de la información y de las comunicaciones. La EDUCACIÓN es la aliada estratégica para contribuir a tener una buena salud, a partir de la creación de una cultura del servicio, enfocada a las necesidades de los usuarios de los sistemas de salud, teniendo como base el factor humano y sustentado en valores y principios éticos, establecer los criterios explícitos para la mejor atención al proceso salud-enfermedad basada en la mejor evidencia disponible para favorecer que la población tome decisiones informadas y participe en el cuidado de su salud. Las acciones que se instituyan tendrán que estimular la acumulación de capital humano adecuado, el acceso al conocimiento y la generación de una cultura de calidad y seguridad en la atención odontológica. REFERENCIAS 1. León-Ramírez N. Consideraciones de seguridad en el diseño de un consultorio odontológico. Acta Odontol Venez. 2009; 47(3): 1-16. 2. Brockett RG, Hiemstra R. El aprendizaje autodirigido en la educación de adultos. Barcelona: Paidós Educador; 1993. 3. Bullough C, Graham W. Clinical audit-learning from systematic case reviews assessed against explicit criteria. En: Beyond the numbers: reviewing maternal deaths and complications to make pregnancy safer. Geneva: WHO; 2004. p. 125-140. 4. Denia P, Walhlstrom R, de Saintonge MCH, Haaijer RF. The value of clinical judgment analysis for improving the quality of doctor’s prescribing decisions. Medical Education 2002; 36: 770-80. 5. Levesque AD, Prochaska MJ, Prochaska OJ, Dewart RS, Hamby SL, Weeks BW. Organizational Stages and processes of change for continuous quality improvement in health care. Consult Psychol J. Practice and Research Summer 2001; 53 (3): 139-153. 6. Prochaska OJ, DiClemente CC. Norcross CJ. In search of how people change. Am Psychol. 1992 Sep;47(9):1102-14. 7. Neufeld VR, Barrows HS. “The McMaster Philosophy”: an approach to medical education. J Med Educ 1974,49:1-11. 8. Nogueira SM, Michelena NR, Blanco HF. Desarrollo de competencias para la gestión docente en educación médica superior. Educ Med Super 2003; 17:1-5. Revista CONAMED, vol. 19, suplemento 2014, pags. S5-S9 ISSN 2007-932X S9 R E V I S T A Artículos Especiales Artículo Especial Rev CONAMED 2014;(supl): 2014;19(2):59-66 S10-S13 Guía práctica para afrontar las emergencias en el consultorio dental Practical guide to confront emergencies at the dental office Roberto Gómez-García1 Rocío Luna-Navarro2 RESUMEN ABSTRACT Las emergencias médicas son eventos agudos, generalmente no previsibles, que ponen en peligro la vida del paciente, un órgano o una función por lo que requieren atención inmediata; afortunadamente, en la práctica odontológica son poco frecuentes y de magnitud moderada. Se presenta una propuesta de botiquín cromático para implementar la atención de emergencias en los consultorios dentales. Palabras clave: seguridad del paciente, emergencias médicas, botiquín cromático, carro rojo. Medical emergencies are acute events, generally unforeseen, that put the patient’s life, an organ or a function in danger, therefore immediate attention is needed; fortunately, in the practice of dentistry such events are uncommon and of moderate magnitude. In this guide a chromatic first-aid kit is proposed to implement emergency assistance in dental offices. Key words: patient’s safety, medical emergencies, chromatic first-aid kit, resuscitation trolley. Evento INTRODUCCIÓN Las emergencias médicas son eventos agudos, generalmente no previsibles, que ponen en peligro la vida del paciente, un órgano o una función por lo que requieren atención inmediata1; afortunadamente, en la práctica odontológica son poco frecuentes y de magnitud moderada como se desprende de analizar los datos expuestos por Malamed en 2010, quien reporta los eventos adversos que vivieron 2 704 dentistas de Estados Unidos y Canadá a lo largo de 10 años2 como se muestra en el Cuadro 1. Esta información demuestra: Frecuencia FR Relativa Síncope 4161 30.6% Reacción alérgica moderada 2583 18.9% Hipotensión postural 2475 18.2% Hiperventilación 1326 9.7% Hipoglicemia 709 5.2% Angina de pecho 644 4.7% Convulsiones 644 4.7% Ataque de asma* 385 2.8% Sobredosis de anestésico local 204 1.5% Infarto agudo del miocardio* 187 1.4% Choque anafiláctico* 169 1.2% Paro cardiaco* Total • En promedio, cada dentista afrontó un evento adverso cada dos años. 148 1.1% 13635 100% Cuadro 1. Eventos adversos en 2704 dentistas de Estados Unidos y Canadá, 2010. Facultad de Estudios Superiores (FES) Iztacala, Universidad Nacional Autónoma de México. México. Práctica odontológica privada. México. 1 2 Folio 287/14 - Artículo Recibido: 15/10/2014 Artículo Reenviado: 18/10/2014 Artículo Aceptado: 13/11/2014 Correspondencia: Dr. Roberto Gómez-García. FES Iztacala. Av. Los Barrios N° 1, Col. Los Reyes Iztacala. Tlanepantla, Estado de México, México. Correo electrónico: rgomezg@servidor.unam.mx. S10 Revista CONAMED, vol. 19, suplemento 2014, pags. S10-S13 ISSN 2007-932X Guía para afrontar emergencias en el consultorio dental Gómez-García R, Luna-Navarro R. • La mayoría de estos eventos no son consecuencia de la atención odontológica ya que corresponden a condiciones patológicas que pudieron haberse presentado en cualquier lugar y momento. • Los eventos potencialmente letales (señalados con asterisco en la tabla) tuvieron una tasa de 0.03 eventos por dentista por año. Esta baja tasa de incidencia provoca al mismo tiempo un exceso de confianza en estos profesionistas y un deterioro de las habilidades adquiridas durante sus estudios profesionales para afrontar estos eventos, toda vez que conocimientos y habilidades que no se practican periódicamente tienden a perderse, lo que explica claramente los hallazgos de Gutiérrez-Lizardi y colaboradores3, que indican que más del 59 % de los dentistas encuestados “no se sentían con la capacitación necesaria para realizar el diagnóstico y manejo de una urgencia médica”; Conscientes de esta situación múltiples autores han emitido recomendaciones para la integración de los botiquines o “Carros rojos” en los consultorios dentales, adoleciendo –en opinión de los autores- de excesos académicos que los hacen poco viables en la práctica de la odontología real y cotidiana. Por ejemplo, Rosenberg4 considera como equipo esencial en el consultorio el siguiente: • Cilindro de oxígeno portátil (tamaño S) con regulador. • Dispositivos de suministro de oxígeno suplementario. • Cánula nasal. • Mascarilla nasal con reservorio de oxígeno. • Campana nasal. • Dispositivo bolsa -válvula-mascarilla con reservorio de oxígeno. • Tubo orofaríngeo (tamaños adulto 7, 8, 9 cms). • Fórceps Magill. • Desfibrilador externo automático. • Estetoscopio. • Esfigmomanómetro con tamaños de manguitos pequeños, medianos y grandes. • Reloj de pared con segundero. En un esfuerzo de honestidad habría que reconocer que prácticamente ninguna clínica o consultorio dental en México cuenta o con este equipo “básico”, y en caso que realizara la inversión que significaría su adquisición, el personal carecería de la habilidad vigente necesaria para su uso, por ejemplo, del desfibrilador. Conscientes de esta realidad, Gutiérrez Lizardi y colaboradores3 señalan: “en nuestro medio recomendamos varios equipos: el de apoyo respiratorio, de signos vitales, canalización intravenosa y un listado de las drogas más comunes para el tratamiento de las urgencias médicas más frecuentes” integrado por: Medicamentos 1. 2 ampolletas (amp.) de Adrenalina. 2. 1 amp. de Lidocaina a 2 %. 3. 2 amp. de Atropina. 4. Sales de Amonia en vaporizador. 5. 2 amp. LasixMR Furosemide 20 mg. 6. 2 tabletas de Ketorolaco sublingual 30mg. 7. 1 amp. Clorotrimetón 10 mg. 8. Solución glucosada al 5 % de 250 ml. 9. 1 amp. Ketorolaco 30 mg. 10.Isosorbide sublingual 5 mg. 11.Agua inyectable 5 ml. 12.Salbutamol en spray. 13.1 frasco ámpula de tabletas de hidrocotisonaMR 100 mg. 14.1 frasco ámpula de bicarbonato de sodio al 7.5 % Equipo de Apoyo Respiratorio a) 1 Ambú. b) 1 Máscara de oxígeno. c) 1 Mascarilla Laríngea. d) 1 Cánula de Guedel. Equipo de Toma de Signos Vitales a) 1 Baumanómetro aneroide. b) 1 Estetoscopio. c) 1 Termómetro. MR Instructivo para Manejo de Implementos Esta útil propuesta sigue siendo inadecuada en la práctica odontológica porque, si bien durante su formación profesional el Odontólogo adquirió los conocimientos y practicó las técnicas de, por ejemplo, inyección intravenosa y venoclisis, y en casos extraordinarios practicó el manejo del ambú para la ventilación respiratoria asistida y probablemente en ningún caso habrá practicado Revista CONAMED, vol. 19, suplemento 2014, pags. S10-S13 ISSN 2007-932X S11 R E V I S T A fatiga, l Figura 1. Guía de Referencia Rápida para afrontar emergencias en el consultorio dental. para la colocación de la cánula endotraqueal de Guedel; al cabo de pocos meses de no practicar las técnicas puede afirmarse que se habrán perdido las habilidades para su uso. Así las cosas, para disponer de un equipo práctico para afrontar las emergencias en el consultorio dental, debe partirse del reconocimiento de la realidad antes descrita, para ofrecer a los Cirujanos Dentistas de práctica clínica “común y corriente”, una guía que le permita contar con los insumos y guías de manera eficiente, por lo que se propone el siguiente modelo. Se integró una Guía de Referencia Rápida que se imprime y coloca a la vista del personal que labora en el área Clínica, como se muestra en la Figura 1. S12 En esta Guía se indica al personal que lo primero que debe hacer es iniciar las acciones para afrontar el evento adverso y llamar al médico para su control, para lo cual se indican los números telefónicos que deberá marcar, porque muy probablemente no se recuerden en ese preciso momento por el estrés en que se encontrará todo el personal. En esta misma Guía se recuerdan los principios básicos de prevención de riesgos: A. Historia Clínica completa. B. Preguntar sobre medicamentos que toma. C. Tomar y registrar Signos Vitales. D. Pacientes con riesgo: Realizar interconsulta con su médico tratante (cardiólogo, internista, etc.). Revista CONAMED, vol. 19, suplemento 2014, pags. S10-S13 ISSN 2007-932X Guía para afrontar emergencias en el consultorio dental Gómez-García R, Luna-Navarro R. Para facilitar el reconocimiento del evento adverso, esta Guía expone de manera breve, clara y precisa los signos y síntomas de los eventos más frecuentes y trascendentes que pudieran presentarse, de manera que el Odontólogo y/o sus colaboradores puedan identificar la patología a que se enfrentan. Una vez identificado el cuadro clínico, la Guía indica con un color específico el medicamento, la dosis y la vía de administración. Junto a la Guía de Referencia Rápida, se habrán preparado paquetes con los insumos necesarios e identificados con los colores respectivos para ser utilizados de inmediato con pocas probabilidades de error, lo que se traduce en beneficios directos en la seguridad del paciente, principio rector de la actividad médica y odontológica. REFERENCIAS 1. Reglamento de la Ley General de Salud en Materia de Prestación de Servicios de Atención Médica. DOF 2403-2014. 2. Malamed SF. Knowing Your Patients. JADA 2010;141 (suppl 1):3S-7S. 3. Arsati, Gutiérrez Lizardi P, Rivera Silva G, Martínez Menchaca H. Importancia actual de las urgencias médicas en el consultorio dental. Rev ADM 2012; LXIX (5); 208:21. 4. Rosenberg MR. Preparing for medical emergencies. The essential drugs and equipment for dental office. J Am Dent Assoc 2010;141(suppl 1):14S-19S. Revista CONAMED, vol. 19, suplemento 2014, pags. S10-S13 ISSN 2007-932X S13 R E V I S T A Artículos Especiales Artículo Especial Rev CONAMED 2014;(supl): 2014;19(2):59-66 S14-S17 Seguridad del paciente en los consultorios dentales Patient safety in the dental office Enrique Acosta-Gío1 RESUMEN ABSTRACT Existen riesgos específicos a la Seguridad del Paciente en los consultorios dentales. Para brindar a nuestros pacientes una atención más segura, las escuelas y facultades de odontología deben incorporar la Seguridad del Paciente a sus programas de investigación y planes de estudios. Palabras clave: seguridad del paciente, educación sanitaria, investigación. There are specific risks to the patient safety in the dental office. To provide patients with a safer attention, the dentistry schools and faculties need to incorporate the subject of patient safety to their research programs and study plans. Key words: patient safety, health education, research. INTRODUCCIÓN El objetivo primordial de la atención a la salud es ayudar al paciente para que recupere y conserve su bienestar. Sin embargo, no debemos perder de vista que cualquier procedimiento, en la atención a la salud, lleva implícitos riesgos de magnitud variable. “Todos los sistemas de atención a la salud tienen el potencial de lastimar, sin querer, a los pacientes a quienes tratan de ayudar”. Los eventos adversos son situaciones imprevistas que dañan al paciente física, psicológica o económicamente. El daño puede ser reversible, permanente y hasta fatal. 1 Evidencia del Daño Existe mayor documentación y experiencia sobre Seguridad del Paciente en los hospitales. El personal de enfermería, de farmacia y los médicos cirujanos pueden ver los eventos adversos y sus secuelas, ya que las complicaciones del tratamiento, el exceso en días de hospitalización, las infecciones nosocomiales y los desenlaces fatales son documentados y cuantificados por los servicios de epidemiología hospitalaria. “Los eventos adversos ocurren también en los consultorios dentales”. División de Estudios de Posgrado e Investigación, Facultad de Odontología, Universidad Nacional Autónoma de México. México. Folio 284/2014 - Artículo Recibido: 15/10/2014 Artículo Reenviado: 18/10/2014 Artículo Aceptado 3/11/2014 Correspondencia: Dr. Enrique Acosta Gío. Profesor Titular en la División de Estudios de Posgrado e Investigación, Facultad de Odontología. Universidad Nacional Autónoma de México. Correo electrónico: acostag@unam.mx. S14 Revista CONAMED, vol. 19, suplemento 2014, pags. S14-S417 ISSN 2007-932X Seguridad del paciente en consultorios dentales Acosta-Gío E. En contraste, hay poca información sobre la seguridad de consultorios y clínicas no hospitalarias, donde el paciente acude “de entrada por salida”. En los servicios de atención ambulatoria como las clínicas y consultorios dentales, es muy difícil documentar y cuantificar el daño causado por los eventos adversos. Alianza global para la seguridad del paciente. En el mundo entero, son tantos los pacientes que sufren eventos adversos que, en 2002 la Asamblea General de la Organización Mundial de la Salud (OMS) instó a los países miembros para atender la Seguridad del Paciente como un problema grave. En 2004, la OMS impulsó la formación de la Alianza Global para la Seguridad del Paciente. La Alianza convocó la participación de los pacientes que han sufrido eventos adversos para crear redes de “Pacientes por su propia seguridad”. Los pacientes o quienes les sobreviven, ofrecen su propia experiencia para la prevención de eventos adversos similares a los que dañaron o causaron la muerte a un ser querido. El objetivo principal de las redes de Pacientes es integrar a éstos y a su familia en los Programas Institucionales de mejora de la Seguridad del Paciente1. Inicialmente, la Alianza Mundial lanzó dos retos (www.who.int/patientsafety/campaigns/en) globales: • “Una atención limpia es atención más segura y la cirugía segura salva vidas”. 1. Una atención limpia es una atención más segura. Las infecciones asociadas con la atención a la salud son el evento adverso más común que daña a los pacientes. Sólo en los Estados Unidos mueren entre 80,000 y 100,000 pacientes cada año por infecciones asociadas con la atención a la salud. Existen numerosos reportes sobre la transmisión de infecciones mediante instrumental que fue sometido a la “esterilización en frío” por inmersión en desinfectantes. Desde luego, cualquier instrumento contaminado puede transmitir infecciones, pero el riesgo es mayor con el uso de los instrumentos huecos que tienen una geometría compleja y sitios difíciles de lavar y desinfectar. Los instrumentos dentales preferentemente deben ser esterilizados por vapor a presión o mediante calor seco. Aún existen inmensos retos para la esterilización de todo el instrumental dental. Los dentistas fuimos alertados sobre la presencia de saliva y sangre en los mecanismos internos de las piezas de mano de alta y baja velocidad. Entonces, se propuso un nuevo estándar industrial para construir estos instrumentos con materiales que permiten su esterilización mediante vapor a presión. Sin embargo, pocas facultades y escuelas de odontología instruyen a sus alumnos sobre la selección, compra y esterilización de piezas de mano y aún se permite la comercialización de piezas de mano no esterilizables. En ausencia de una política para la seguridad de los pacientes en las clínicas de enseñanza, y sin la orientación basada en evidencia, los estudiantes de odontología continuarán adquiriendo los instrumentos más económicos aun cuando estos no puedan ser esterilizados2. En México, es obligatoria la verificación biológica de los ciclos de esterilización (VBCE) en todos los consultorios dentales. Sin embargo pocos dentistas cumplen con esta indicación de la NOM-013-SSA2-2006. En 19 años recibimos 6,998 pruebas de 113 clínicas dentales. De estos ciclos de esterilización sometidos a verificación biológica fallaron 709 (10.1 %). Si cada consultorio esterilizó instrumental una vez al día en cada uno de 200 días laborales, entonces se realizaron 429,400 ciclos de esterilización. Aplicar la prueba cada día o cada ciclo revelaría todas las fallas que ocurren. Al disminuir la frecuencia de las pruebas se hace ineficaz aplicar este control de calidad. Existen también otros desafíos como la reutilización de instrumental desechable en las endodoncias o la comercialización de desinfectantes ineficaces. En México, los fabricantes y distribuidores de productos para desinfectar instrumental médico y dental emplean indistintamente los términos antisepsia, desinfección y esterilización. Con la evaluación que realizamos a petición del Gobierno de la Ciudad de México demostramos que la mayoría de las formulaciones presentadas a las autoridades de salud del Distrito Federal carecen de la capacidad para esterilizar que se indica en su marbete2. Revista CONAMED, vol. 19, suplemento 2014, pags. S14-S17 ISSN 2007-932X S15 R E V I S T A 2. La cirugía segura salva vidas Algunos eventos adversos son atribuibles a fallas en la vigilancia de la sedación o anestesia. Otros eventos adversos están asociados con errores en la identificación del paciente, del sitio quirúrgico o del procedimiento a realizar. Las encuestas realizadas entre dentistas indican que la extracción “del diente equivocado” es un evento adverso común. Al dar seguimiento a los pacientes de una clínica de enseñanza, se identificaron eventos adversos en hasta 50 % de las extracciones dentales realizadas. Algunos alumnos son más propensos a causar eventos adversos y existen pacientes, que por su edad o compromiso sistémico, son más vulnerables. El profesorado deberá vigilar más estrechamente al alumnado y el plantel debe dar seguimiento a los pacientes para estudiar los eventos adversos que ocurren en sus clínicas3. La Importancia de la Ética Profesional El ejercicio respetuoso, prudente y probo es fundamental para la protección del paciente. Prácticamente todas las instituciones formadoras de estomatólogos imparten la ética profesional en sus programas académicos. La conducta ética es una de las garantías que los profesionales de la salud ofrecemos a nuestros pacientes. Sin embargo, el comportamiento ético no evita que ocurran los eventos adversos, ya que estos derivan generalmente del error humano y de las fallas del sistema; los errores, las distracciones y los olvidos pueden tener sus raíces en la forma en la que el cerebro humano procesa la información, y en como funcionan nuestros entornos de trabajo1,3. Interés Renovado por la Seguridad del Paciente Los profesionales de la salud procuramos realizar los procedimientos clínicos y quirúrgicos en forma segura, pero aún carecemos de una estrategia estructurada y sistemática para reducir la incidencia y mitigar el impacto de los eventos adversos. De hecho, la cultura de calidad y las medidas para la Seguridad del Paciente son de reciente introducción en las disciplinas de la salud. S16 “La Seguridad del Paciente se logra mediante un conjunto de estructuras y procesos organizacionales que reducen la probabilidad de eventos adversos”1,3,4. Es necesario promover, mejorar y facilitar la educación para la Seguridad del Paciente en todas las escuelas y facultades de medicina, odontología y enfermería. La Seguridad del Paciente está emergiendo como una nueva disciplina que todos los profesionales de la salud debemos cursar. Ahora sabemos que es necesario analizar los eventos adversos, comprender las causas de raíz de aquellas situaciones en las que un paciente fue lastimado, aprender de los errores y recomendar procedimientos clínicos más seguros2. Los profesionales de la salud debemos mirar hacia otras industrias “de alto riesgo” que aprendieron a disminuir el error humano y las fallas del sistema para lograr trabajar con mayor seguridad. La aviación y sus múltiples listas de cotejo son un notable ejemplo a seguir. En pro de la Seguridad del Paciente, los profesionales de la salud y los pacientes debemos tomar conciencia de la importancia de documentar y analizar los eventos adversos para comprender los diversos factores y situaciones riesgosas que contribuyeron a causar un daño al paciente. Sólo así evitaremos que ocurran nuevamente. Sin embargo, existe resistencia para admitir o revelar que ocurrió un evento adverso. Esta actitud negativa impide identificar las situaciones de riesgo y tomar medidas preventivas o correctivas5, 6. La Guía Curricular de la OMS Con la finalidad de facilitar la formación de profesores en Seguridad del Paciente e integrar esta nueva asignatura en la formación de profesionales de la salud, la Organización Mundial de la Salud publicó la Guía Curricular para la Seguridad del Paciente4. El contenido de la Guía es aplicable a los profesores y estudiantes de medicina, enfermería, farmacia y odontología. En 2013, la Guía fue presentada en Buenos Aires y en la Ciudad de México. La Guía fue traducida al castellano en Argentina por la Facultad de Medicina de la Universidad del Salvador y puede ser descargada del portal de la OMS (http://www.who.int/patientsafety/education/curriculum/en/index.html). Revista CONAMED, vol. 19, suplemento 2014, pags. S14-S17 ISSN 2007-932X Seguridad del paciente en consultorios dentales Acosta-Gío E. Seguridad del Paciente en las Escuelas y Facultades Las instituciones formadoras de estomatólogos ofrecen condiciones favorables para aprender sobre los retos a la Seguridad del Paciente en el entorno odontológico. Se deben establecer sistemas para el reporte, la documentación y el análisis de los eventos adversos. Así, administradores, profesores y alumnos identificarán los riesgos en la práctica clínica y podrán emitir recomendaciones para hacer más seguros los procedimientos odontológicos5, 6. Los nuevos planes de estudios, para la enseñanza de una odontología basada en evidencia, integran guías clínicas y enfatizan la Seguridad del Paciente. Una colección de eventos adversos, explicados como casos de estudio permitirá a la comunidad del plantel aprender de los errores cometidos y realizar mejoras para la Seguridad del Paciente3, 4. Si bien existen riesgos, se realizan esfuerzos correctivos para garantizar la Seguridad del Paciente. Los establecimientos académicos podrán compartir las experiencias aprendidas y colaborar ampliamente con los Ministerios de Salud, las Organizaciones Gremiales, las Agrupaciones de Pacientes, y con la industria de insumos odontológicos5, 6. REFERENCIAS 1. World Health Assembly. Resolution WHA55.18. Geneva: WHO 2002. Disponible en http://apps.who. int/gb/archive/pdf_files/WHA55/ewha5518.pdf acceso 2014-10-31. 4. Patient Safety Curriculum Guide: Multi-professional Edition www.who.int/patientsafety/education/ curriculum/meeting/en/index.html último acceso 2014-10-31. 2. Acosta-Gío AE, Rueda-Patiño JL, Sánchez- Pérez L. Sporicidal activity in products to sterilize or disinfect medical and dental instruments. Am J Infect C. 2005;33(5):307-309 5. Christman A, Schrader S, John V, Zunt S, Maupome G, Prakasam S. Designing a safety checklist for dental implant placement: a Delphi study. J Am Dent Assoc. 2014;145(2):131-40. 3. Brennan TA et al. Incidence of adverse events and negligence in hospitalized patients: results of the Harvard Medical Practice Study I. NEJM. 1991;324:370–6. 6. Perea-Pérez B, Santiago-Sáez A, García-Marín F, Labajo González E. Proposal for a 'surgical checklist' for ambulatory oral surgery. Int J Oral Maxillofac Surg. 2011; 40(9):949-54. Agradecimiento Este grupo de trabajo recibió apoyo de la Dirección General de Asuntos del Personal Académico de la Universidad Nacional Autónoma de México, mediante el proyecto PAPIME 202911. Revista CONAMED, vol. 19, suplemento 2014, pags. S14-S17 ISSN 2007-932X S17 R E V I S T A Artículo de Revisión Rev CONAMED 2014;(supl): S18-S23 Seguridad del paciente en cirugía bucal: predicción de riesgo para dificultad quirúrgica y eventos adversos Patient safety in oral surgery: predicting risk for surgical difficulty and adverse events Vallery Fuentes-Arciniega1 RESUMEN La Calidad y Seguridad del paciente en cirugía no son conceptos desconocidos, en las ciencias de la salud, si bien pretenden estandarizar métodos, técnicas y criterios, con la finalidad de disminuir error, soslayando complicación o adversidad, la cirugía es una ciencia que se encuentra en constante cambio y actualización. Lo que representa un reto para los involucrados como clínicos especialistas, dentistas, técnicos, finalmente seres falibles y recursos e instalaciones que en diversas ocasiones no cuentan con características o presupuestos ideales para optimizar las condiciones en el desarrollo de un modelo de atención segura en cirugía bucal. Una de las áreas de mayor oportunidad para mejoramiento, es la valoración cuidadosa y particular de los casos clínicos, investigando factores que permitan advertir dificultad quirúrgica y posibles complicaciones, admitiendo una planeación consiente a cada uno de los retos que pudiera representar este evento, permite la reducción de tiempo y facilita toma de decisiones. Al revisar la literatura y sumar el producto de la experiencia docente en cirugía bucal, se buscó identificar los factores predictivos de dificultad quirúrgica y los eventos adversos frecuentes en cirugía bucal. Aplicarlos con la finalidad de mostrar la marca que tiene en la reducción de complicaciones y secuelas en los pacientes y la mejora en seguridad en cirugía bucal. Palabras Clave: Cirugía bucal, Factores de riesgo, Evento adverso, Calidad y Seguridad. ABSTRACT Quality and Patient Safety in Surgery are not unknown concepts in the health sciences, although intended to standardize methods, techniques and criteria, in order to reduce errors, bypassing complication or adversity, surgery is a science that is constantly changing and updating. Representing a challenge for those involved as clinicians, professionals, technicians, and ultimately fallible resources and facilities on several occasions not have ideal characteristics or budgets to optimize conditions in the development of a model for safe care in oral surgery. One of areas of greatest opportunity for improvement is particularly careful assessment of clinical cases, investigating factors that allow warn surgical difficulty and potential complications, admitting planning consents to each of the upright that could represent this event, allows the reduction of time and facilitates decision-making. The authors make a review of the literature and adding the product Facultad de Estudios Superiores (FES) Iztacala. Universidad Nacional Autónoma de México. México. 1 Folio 284/2014 - Artículo Recibido: 15/10/3014 Artículo Reenviado: 18/10/2014 Artículo Aceptado: 3/11/2014 Correspondencia: CD. CMF. Vallery Fuentes Arciniega. Profesora de asignatura, FES Iztacala, UNAM. Av. Los Barrios N° 1, Col. Los Reyes Iztacala. Tlanepantla, Estado de México, México. Correo electrónico: fuentesvallery@hotmail.com. S18 Revista CONAMED, vol. 19, suplemento 2014, pags. S18-S23 ISSN 2007-932X Predicción de riesgo quirúrgico y eventos adversos odontológicos Funtes-Arciniega V. of our teaching experience in oral surgery, seeking to identify predictors of surgical difficulty and frequent adverse events in oral surgery. Apply in order to show the brand has in reducing complications and sequelae in patients and improved safety oral surgery. Key Words: Oral surgery, Risk Factors, Adverse eventos, Quality and Safety. INTRODUCCIÓN La cirugía que tenemos Actualmente modelos de cirugía mayor segura son utilizados en centros hospitalarios de todo el mundo. De acuerdo al Informe de calidad y seguridad en el paciente del 2010 en el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado en México (ISSSTE) existen resultados en relación a disminución de eventos adversos principalmente relacionados a infección de la herida, muerte del paciente y cirugía no indicada, por citar algunos1; paralelamente se ha encontrado una reducción de quejas de índole legal y costo para las instituciones, adicionalmente la calidad de atención de los pacientes ha mejorado exponencialmente. Sin embargo, no existen programas que impulsen la calidad y seguridad de la cirugía bucal en nuestro país, centros de atención publica, privada, educativa y asistencial no continúan protocolos dirigidos a envolver estos aspectos. En México no se han documentado cifras exactas de eventos adversos relacionados a procedimientos de cirugía bucal menor, como la extracción simple, extracción quirúrgica, exeresis de terceros molares y órganos dentarios retenidos, entre otros. El perfil epidemiológico de Salud Bucal en México 2012 muestra que el 85 % de los sujetos han perdido el primer molar en el maxilar y 75 % en mandíbula. En un grupo más joven 20 a 34 años la pérdida de dientes fue poco frecuente, mientras que en los adultos de 65 años o más, afectó a más de la mitad de la población, especialmente en los molares y premolares de ambos maxilares2. Estos datos muestran la frecuencia con la que se realizan estos procedimientos, las incógnitas actuales son: ¿bajo qué términos de valoración y predicción de riesgos previos se llevan a cabo?, ¿se toman las medidas necesarias para evitar los eventos adversos y sus secuelas?, ¿se cuenta con el adiestramiento y los insumos necesarios para atender cualquier evento adverso?, ¿se desarrollan conocimientos informados particulares de acuerdo a estos riesgos, estos incluyen posibles adversidades, secuelas y costos? El desarrollo en la técnicas quirúrgicas, junto con la aplicación de nuevas tecnologías entre las que destacan los sistemas de corte por ultrasonido, nuevos anestésico locales, materiales de sutura, hemostasia e injertos óseos o regeneradores tisulares permiten brindar mejores oportunidades de rehabilitación a nuestros pacientes. Mantenernos actualizados en un continuo aprendizaje de estos conocimientos y adiestrados en nuevas técnicas son una necesidad profesional, la actualización del equipo e insumos de trabajo tienen un valor en el diario ejercicio profesional, pero brindar atención con seguridad y calidad a los pacientes es una compromiso ético profesional. Desafortunadamente, la mayoría de estos procedimientos como mencionamos antes se llevan a cabo con tiempos reducidos para una valoración correcta, bajo niveles de estrés elevado, con pocos recursos tecnológicos y en áreas de trabajo poco organizadas, en la mayoría de casos además observamos insuficiente capacitación del personal, la toma de decisiones sin fundamentos por profesionales con reducida capacidad de análisis y la escasa costumbre de aplicar tratamientos producto de razonamiento lógico deductivo resultan en eventos adversos constantes, secuelas temporales, permanentes o incluso de muerte, que en numerosas ocasiones tiene alcances de índole legal. Si bien se han publicado algunos casos clínicos reportando eventos adversos como fractura mandibular, infección viral o bacteriana y daño nervioso,3, 4, 5 aun son escasos los reportes de eventos adversos en nuestro país y son reducidos los artículos que plantean posibles técnicas para disminuir la adversidad,6 pero insuficientes para mostrar la realidad en atención en odontología, a su vez para desarrollar instrumentos que permitan mejorar la calidad de atención y Revista CONAMED, vol. 19, suplemento 2014, pags. S18-S23 ISSN 2007-932X S19 R E V I S T A con ello la reducción de eventos adversos, secuelas y costos por demandas de índole penal. La seguridad no es un tema nuevo, sin embargo en los últimos 25 años, son las superinfecciones, la mutilación de órganos sanos y el alto costo económico de las demandas, lo que atrae la atención a los protocolos en relación a la valoración y toma de decisiones clínicas en cirugía bucal. En 1987 Howe escribe “la presencia de diversos obstáculos durante la extracción dental, se puede evitar si el dentista no ignora ninguna señal de alerta sobre la posibilidad de estas, incluyendo los eventos adversos en extracciones previas”, mostrando como los pacientes pueden poseer factores que permitan anticipar riesgo y dificultad.7 Howe y colaboradores, en 1960 hacen mención de la evaluación del nervio lingual con la finalidad de prevenir su daño y del nervio alveolar inferior aun sin mencionar estrategias especificas.8 Históricamente, la dificultad de la cirugía bucal ha sido evaluada utilizando factores puramente radiográficos, específicamente morfología de los dientes y la posición, como evidencia las múltiples clasificaciones radiográficas donde eje del órgano dentario, la profundidad vertical u horizontal, son los principales estimadores de riego8,9,10. Algunos autores mencionan la apertura bucal, la relación con los dientes adyacentes, la morfología radicular, la patología dental del órgano a extraer y del adyacente como nuevos indicadores de riesgo clínico y radiográficos, para adversidad quirúrgica.11 Progel en 2012, es de uno de los pocos autores que clasifica los complicaciones asociadas a cirugía de tercer molar en dos grupos: los de corta duración (alveolitis, reacciones a fármacos por citar algunas, hemorragia) y los de larga duración o permanentes (trastornos temporomandibulares, lesión nerviosa, y lesión del seno maxilar)12. Varios autores citan la edad como factor de riesgo predictivo para la dificultad quirúrgica.12-16 Ptlanteando que, ocurre la calcificación transcurrido un año posterior a la formación del ápice y con ello la reducción del espacio periodontal y folicular, aumentando la posibilidad de complicaciones exponencialmente y el tiempo quirúrgico extendido asociado por otros autores con dolor, infección, inflamación, alveolitis, entre otros.12,17,18,19,20 Diversas técnicas se han desarrollado teniendo como objetivo reducir el daño nervioso.21 Planteando modificaciones durante la planeación y desarrollo de la odontosección, con ayuda de retracciones y modificación de la técnica de angulación S20 en el corte, con la finalidad de evitar el contacto con las fibras nerviosas. Autores como Susarla23 Yuasa,24 plantean los factores anatómicos del órgano dentario como principal factor de riesgo, dejando a los factores operativos y demográficos con mínima influencia, en la adversidad. Diversos autores han demostrado que las clasificaciones de terceros molares no tienen aplicación en la predicción de riesgo, por lo que además de profundidad y orientación, los factores anatómicos del órgano dentario, así como la fisiomorfología buco-facial juegan un papel importante.23, 24, 25 Algunos estudios reportan la lesión del nervio alveolar inferior como una de las complicaciones más importantes asociadas a cirugía de tercer molar, que en la mayoría de los casos resuelve dentro de los primeros 6 meses posteriores a la lesión; sólo un 0.16 % presentará secuelas permanentes. Estos autores muestran como factores predictivos de lesión nerviosa a la profundidad dental y el adiestramiento del cirujano como principales indicadores, y en caso de lesión al nervio lingual este se presenta relacionada a la elevación del colgajo distal y osteotomía.26, 27 A pesar del interés en relación a los eventos adversos, no existen estudios cualitativos en relación a temor, ansiedad, o sensación traumática de la cirugía bucal y su asociación a la poca cooperación o dificultad quirúrgica, la percepción de la comunidad clínica es sombría en relación a compartir el fracaso, la adversidad o el error. Esto en mucho sentidos frena la posibilidad de establecer factores predictivos y medidas concretas con la finalidad de obtener métodos específicos para el mejoramiento de la calidad de atención en cirugía bucal. Factores predictivos de riesgo en cirugía bucal Un análisis completo del estado de salud del paciente nos permitirá conocer los factores sistémicos como diabetes, hipertensión, cardiopatía isquémica, que puedan desencadenar una emergencia médica, crisis de ansiedad; al mismo tiempo nos permite conocer los diferentes fármacos utilizados en el tratamiento de estos padecimientos; con ello nos es posible revisar con antelación los efectos secundarios, adversos o interacciones que pueden presentar. Los datos de inmunosupresión que representen riesgo de infección, como mal nutrición, diabetes, insuficiencia renal, VIH, tabaquismo severo, etc. Un análisis cuidadoso de los Revista CONAMED, vol. 19, suplemento 2014, pags. S18-S423 ISSN 2007-932X Predicción de riesgo quirúrgico y eventos adversos odontológicos Funtes-Arciniega V. factores clínicos entre los que se encuentra limitación de apertura, dificultad de accesos al objetivo quirúrgico, edad, historia de tratamiento de conductos, trastornos de articulación temporomandibulares, microstomas, pérdida de estructura coronal, tipo esquelético y con ellos el espesor cortical, que imposibiliten la visibilidad, instrumentación o que provoquen fractura no deseada y medio de traumatismo a tejidos adyacentes. Una valoración profunda, que envuelva análisis radiográfico, con instrumentos adecuados, gracias a las nuevas tecnologías, permite observar contacto o proximidad nerviosa, cambios en la morfología radicular, densidad ósea, reabsorción interna, fracturas, lesiones patológicas asociadas, tratamiento de conductos, mayor número de raíces, nos permitirán establecer la necesidad y orientación de odontosección y ventanas óseas, además de establecer riesgos como parestesias, fracturas o daño a otras estructuras. Caso clínico Masculino de 20 años de edad, sin antecedentes personales patológicos de importancia, cuenta con terceros molares incluidos e impactados sobre los segundo molares, refiere dolor local ocasional que resuelve con analgésicos, ausencia de factores de riesgo sistemático y clínico. Radiográficamente en contacto con el paquete dentario, raíz dilacerada y proximidad con el segundo molar. Para su planeación se tomó en cuenta una odontosección y ventana ósea para reducir presión sobre el paquete nervioso y el segundo molar, así como para facilitar la remoción. Se le informó al paciente del riesgo de parestesia, la sensación, localización que podría sentir y tiempo que representaría riesgo de lesión. Se indicó que al trascurrir dicho tiempo y de presentarse estos síntomas tendría que acudir a la brevedad para iniciar tratamiento con láser terapéutico, complejo B y manejo del edema de acuerdo a lo planteado por Hupp. El paciente se comunicó esa misma tarde transcurridas 6 horas manifestando dichos síntomas, por lo que se inició el manejo temprano. Al término de su séptima sesión de láser y manejo médico la parestesia resolvió gradualmente en su totalidad. El paciente participó de manera activa y cooperadora en su recuperación. Durante la cirugía no se advirtió daño directo o sección de la fibra nerviosa. Éste es un ejemplo de la aplicación clínica del análisis, la toma de decisiones razonadas, planeación específica y desarrollo de consentimiento informado, donde paciente y clínico deciden riesgo y tratamiento en caso de presentarse, compartiendo responsabilidad y compromiso. Durante la realización de 287 cirugías bucales ambulatorias, se encontraron en 17 casos riesgo de lesión por presentar contacto con el paquete dentario en todos lo casos de siguió la misma conducta de predicción, planeación y tratamiento, se presentaron 3 parestesias en total, todas iniciaron su manejo temprano y la resolución total de los síntomas, mostrando que si bien el riesgo de adversidad existe, y no es posible la eliminación total, una reducción de las complicaciones, con una participación activa y consiente de los pacientes sobre sus secuelas, permite un mejor manejo de éstas y la resolución de las mismas.24, 25, 26, 27 La cirugía que queremos La necesidad en generar espacios para registrar y documentar, eventos adversos, complicaciones, sucesos centinela, sin buscar culpables, sin emitir juicios y de manera anónima; este enfoque nos permitiría planear estudios retrospectivos que valoren las características que permitieron estos eventos, así como plantear estudios prospectivos con la finalidad de buscar posibles riesgos, que predecir dificultad y adversidad, así como establecer parámetros de organización en el trabajo, materiales e insumos, para establecer secuelas, secuencias y recomendaciones para su manejo. Establecer el grado de dificultad quirúrgica, tiene aplicaciones, clínicas, operativas y legales, entre las que se encuentran predecir riesgos para evento adverso. Además, nos permitirá decidir entre recursos, insumos, personal con mayor experiencia, formular consentimientos informados más específicos, dando información a los pacientes de posibles riesgos y secuelas específicas, al tiempo que se indicará del posible manejo y costo, así como reducir el tiempo operatorio. De acuerdo a Calderón Martínez la apreciación de la calidad y de la bioética en el ejercicio de la autonomía como valor y derecho en la práctica odontológica, supone la verificación del consentimiento informado como proceso de reflexión en la toma de decisiones, garantizando así la seguridad del paciente. Sin embargo, consentimientos informados generales escuetos y no dirigidos son firmados todos los días en la práctica odontológica, relegando la reflexión previa y dando apertura a posibles demandas. Revista CONAMED, vol. 19, suplemento 2014, pags. S18-S23 ISSN 2007-932X S21 R E V I S T A Nosotros sugerimos el desarrollo de listas de verificación, previa a la planeación quirúrgica y durante la misma, con la finalidad de llevar a la reflexión en la toma de decisiones para incisión, osteotomía, odontosección, procedimientos adyuvantes y sutura con el propósito de reducir riesgos. Esta lista nos permitirá advertir al paciente de complicaciones e instruir de las actitudes a tomar en el caso de presentarlas, y para ofrecer un mejor tratamiento, reducir las secuelas y si es posible, eliminarlas. CONCLUSIONES El desarrollo de un lista de verificación en cirugía bucal permitirá determinar y evaluar factores sistémicos, clínicos y radiográficos asociados a dificultad quirúrgica en cirugía bucal, planificar las técnicas, advertir error en la zona a intervenir, prevenir daño a estructuras adyacentes y la interpretación inadecuada o incompleta de la historia clínica, establecer protocolos correctos de profilaxis antibiótica preoperatoria, y minimizar el tiempo quirúrgico extendido, traumatismo al tejido, y la infección, disminuir el error en la prescripción médica. Reforzará el compromiso de informar, advertir y dar seguimiento adecuado a los pacientes, comprobar en momentos diferentes la identidad del paciente, sus antecedentes, el grado de dificultad, y el procedimiento a realizar, para determinar el material e insumos necesarios. Lograr una cirugía bucal segura, necesita cirujanos motivados no sólo por indicadores numéricos como ingresos y productividad, sino un pensamiento complejo incluyente de las necesidades del paciente y su entorno. El desarrollo de ésta técnica y la evaluación previa de los recursos disponibles aunado al seguimiento de códigos de conducta ético-morales, ayudará a popularizar los conceptos de calidad y seguridad, como un estilo de trabajo superior que logre satisfacer al sistema de salud mexicano público y privado, formación más exigente de profesores y de alumnos en adiestramiento, con planes de estudio enfocados en principios que giren sobre estos mismos preceptos y no en cuestiones numéricas, además de generar sistemas para evaluación de seguridad continua, enfocados en satisfacción del paciente, aprendizaje, desarrollo de habilidades, reducción del error y secuelas. Los cirujanos dentistas, orales y maxilofaciales de nuestro país necesitan una participación más activa, incluirnos en el sistema de salud es nuestra responsabilidad, practicar la cirugía bucal segura y con principios de calidad es posible y necesario. REFERENCIAS 1. ________. Evaluación del desempeño hospitalario: Cirugía Segura. Congreso Internacional de seguridad del Paciente, ISSSTE. Octubre del 2010. 2. Subdirección General Médica del ISSSTE. Primera Encuesta de Salud Bucal ISSSTE 1998-1999. Informe Ejecutivo. 3. Lida S, Hassfeld S, Reuther T, Nomura K, Muhling J. Relationship between the risk of manibular angle fractures and the status of incompletely erupted mandibular third molar. J Cranio Maxillofacial Surg. 2003; 33(3):158-163. 4. Figueiredo R, Valmaseda-Castellón E, Berini-Aytés L, Gay-Escoda C. Incidence and clinical feactures of delayed-onset infections after extraction of lower third molars. Oral Surg Oral Med Oral Pathol Oral Radio Endod. 2005; 99(3):265-269. S22 5. 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S18-S23 ISSN 2007-932X S23 R E V I S T A Artículo de Opinión Rev CONAMED CONAMED 2014;(supl): 2014;(supl): S24-S28 La seguridad del paciente en odontología, un punto de vista bioético Patient safety in dentistry, a bioethic point of view Jorge Alberto Calderón-Martínez1 RESUMEN ABSTRACT La Seguridad del Paciente siempre ha estado relacionada a un carácter ético-deontológico y a la necesidad que la sociedad tiene con sus integrantes. Otorgar un servicio odontológico seguro y con calidad, es un merecimiento indubitable para cualquier persona. Sin embargo, la evolución para otorgar esta atención segura en la profesión dental ha tenido un retraso por las características de la formación del estomatólogo y el desconocimiento de los usuarios. Recientemente se está exigiendo, con un sentido normativo, que los profesionales de la salud en el campo de la odontología proporcionen atención dental bajo las reglas del movimiento internacional de Seguridad del Paciente. La gran dificultad estriba en que la estructura funcional de los servicios estomatológicos se abocan al desarrollo de la productividad utilitarista y plantear un cambio en su composición. Palabras clave: Seguridad del paciente, bioética, odontología, ética médica. Patient safety has always been related to an ethical-deontological character and the need that society has with his members. Provide a safe and quality dental service, is an undoubted merit for anyone. However, this evolution to provide safe care in the dental profession has been delayed by the characteristics of the formation of the dentist and the ignorance of users. Recently it is demanding, with a normative sense, that health professionals in the field of dentistry providing dental care under the rules of the international movement of Patient safety. The great difficulty is that the functional structure of dental services have a particular relationship to the development of utilitarian raise productivity and a change in its composition. Key words: Patient safety, bioethic, odontology, medical ethics. 1 Facultad de Estudios Superiores Iztacala. Universidad Nacional Autónoma de México. México. Folio 288/2014 - Artículo Recibido: 15/10/2014 Artículo Reenviado: 18/10/2014 Artículo Acepatado: 3/11/2014 Correspondencia: M. en C. Jorge Alberto Calderón Martínez. Orthokinder. Profesor de Asignatura A Definitivo, Facultad de Estudios Superiores Iztacala, Universidad Nacional Autónoma de México. Ciudad Satélite, Naucalpan, Estado de México, México. Correo electrónico: orthokinder@gmail.com. S24 Revista CONAMED, vol. 19, suplemento 2014, pags. S24-S28 ISSN 2007-932X Bioética y seguridad odontológica Calderón-Martínez JA. Algunos conceptos respecto a la seguridad del paciente en la atención odontológica se refieren a considerar que su evaluación debe hacerse en base a indicadores objetivos y a aclarar la metodología empleada, pero el cómo evaluar los aspectos bioéticos dentro de la seguridad del paciente, implica un análisis diferente.1, 2, 3 Se puede comenzar con la identificación de los hechos concretos para poder traducir lo subjetivo, por ejemplo, cuantificar el tiempo de espera de los pacientes nos podría indicar que un tiempo prolongado afecta la dignidad y el que el valor de la responsabilidad está disminuido, además que el riesgo de proporcionar la atención con menor oportunidad puede afectar seriamente el estado de salud de una persona.4, 5, 6, 7 El reconocimiento de la calidad y seguridad en la atención estomatológica ha cobrado gran importancia como fenómeno que se inicia en los procesos pragmático administrativos; progresivamente se ha llevado al campo de la salud con el hito que marcó en medicina el estudio To err is human: Building a Safer Health System y se introdujo paulatinamente a la relación clínica estomatológica.7 La gestión en materia de salud que se realiza con gran esfuerzo intelectivo, traspasa los conceptos de calidad relacionados con la producción de bienes al área de los servicios, donde las decisiones determinan condiciones de daño o una estructura de productividad con indicadores de prejuicios en términos de eficacia, pero se observa que la conceptualización de la calidad no considera plenamente que los valores éticos están integrados con ella de una manera intrincada y confusa, pues vienen desde paradigmas deontológicos y de la ética médica clásica hasta la concepción actual de la Bioética.2 Cuando hablamos de seguridad del paciente, necesariamente debemos aclarar el campo semántico del elemento que constituye la esencia del concepto de evento adverso y ese es el daño que se puede causar en el paciente. Se debe precisar que no hay evento adverso si no existe daño. Este elemento es fácil de identificar cuando es evidente, en el caso de una lesión permanente como la extracción dental de una pieza equivocada o una parestesia, pero no siempre es así.8 La temporalidad de una lesión o la ausencia de secuelas no descarta la presencia de un evento adverso. El mayor número de eventos adversos resuelven satisfactoriamente en ocasiones sin dejar secuelas y frecuentemente el efecto que tienen en el paciente puede ser una incomodidad menor, como el dolor dental después de la colocación de una resina o la periodontitis periapical aguda por no sacar de oclusión un diente al comenzar un tratamiento de conductos. La mayor parte de estos eventos se resuelven y en ocasiones el paciente ni se entera.7,8 Los eventos adversos temporales de baja severidad, a menudo, nos llevan a descartarlos como eventos adversos o no los registramos como tales. Sin embargo, estos eventos entrañan una relevancia sustancial por su potencialidad de generar daños más graves. Existe un tipo de evento adverso que con cierta frecuencia se descarta, los llamados daños psicológicos y morales, especialmente cuando no se asocia a ningún daño físico. El ejemplo característico es el estrés al que se somete un paciente con el ruido de la pieza de mano, asociado a la insuficiente profundidad analgésica en cualquier procedimiento que entrañe dolor o la realización de procedimientos sin el consentimiento del paciente o su tutor.8 Al discutir el concepto de evento adverso se debe considerar la ausencia de intencionalidad, pues claramente se advierte un daño involuntario. El análisis de los eventos adversos debe partir de la base de que ningún profesional de la salud, incluyendo al dentista, tiene la intención de ocasionar un daño en el paciente. Por esta razón, se aduce que el propósito del dentista es mantener, recuperar y en ocasiones mejorar las condiciones de salud de los pacientes.7,8 La profesión dental, está basada en una ética socrática-aristotélica que se refiere a procesos de análisis y reflexión del profesionista. Esto permite la continua renovación de juicios y la regulación de actos que repercuten en el campo de la moral y se clasifican como moralmente buenos o moralmente malos. Si se toma en cuenta que la educación médico-odontológica está fincada en reglamentos rígidos y códigos deontológicos como el Juramento Hipocrático, se observa que uno de los puntos esenciales es primum non nocere (lo primero es no hacer daño) que se inserta en el área de seguridad del paciente.9 Por esta razón, si se sospecha de intencionalidad de un daño, se habla de un acto ilícito con dolo. En esta situación escapa del alance de los procesos de seguridad del paciente, por lo tanto las herramientas y metodologías corresponden al ámbito del Derecho Penal, pues la seguridad del paciente carece de dichas herramientas o Revista CONAMED, vol. 19, suplemento 2014, pags. S24-S28 ISSN 2007-932X S25 R E V I S T A metodologías para poder abordar el análisis o prevención de los daños intencionales.9 La involuntariedad permite entender la definición de seguridad del paciente propuesta por la Alianza Mundial para la seguridad del paciente, que la señala como la ausencia de daño accidental.10 Básicamente podemos encontrar dos tipos de eventos adversos: los evitables y los no evitables. Los primeros se refieren a lesiones o daños no intencionales causados por la intervención del profesional de la salud, que son ejecutados con error, como ejemplo una lesión en la lengua por la acción de la fresa de una pieza de alta velocidad al preparar una cavidad en un molar, por no haber colocado un aislado con dique de hule. Y los segundos son lesiones o daños no intencionales que son ejecutados por el profesional de la salud sin error, los cuales ocurren, por ejemplo, cuando se administra un medicamento en dosis o una técnica forma adecuada pero ocasionan un daño que puede ser inherente o no al mismo, como los tratamientos de conductos, que llegan a tener una reacción aun cuando se realiza el procedimiento como el protocolo lo indica. Un error se puede definir como el uso de un plan equivocado para el logro de un resultado esperado o como una falla al complementar una acción como se tenía planeada. Los errores pueden ser cons cientes o inconscientes y por acción u omisión.7,8 El hecho de que exista un error no supone que exista un evento adverso y el que exista un evento adverso no presupone que exista un error. La seguridad del paciente es percibida de manera diferente entre la población, para algunos simplemente es no hacer daño, aunque el tiempo de espera y el trato sean indignos. La conceptualización de Seguridad del Paciente que nos llega de las áreas industrializadas ha sido muy diversa. Por ejemplo, el paradigma de Phil Crosby es cero errores, para Deming es hacerlo bien a la primera vez y para Ishikawa es control total. En la práctica dental es complicado aplicar el paradigma de Crosby aunque necesariamente se haga un esfuerzo por conseguirlo. Puede afirmarse, inclusive, que es un derecho del dentista equivocarse y lo mismo puede decirse del enunciado de Deming.7, 8 En cuanto a la concepción de Ishikawa de control total, la parte que resulta difícil de aplicar es la referente al control como una expresión que sugiere coerción y no convicción para actuar para la seguridad del paciente.8 S26 En suma, la modificación de la estructura ya establecida en la práctica profesional del dentista, por principio tiene un alto costo, pues no se trata solamente de adecuar con simples ajustes lo devengado por años sino dar un giro de 180o . La normatividad de la odontología se desprende de una ética médica tradicional, por lo que tiene un esquema inflexible desenvuelto en un modelo paternalista, con una franca cancelación de la participación del usuario de los servicios de salud dental. La cual ha sido rebasada por los avances tecnológicos y científicos que han revolucionado la manera de atender las necesidades de los pacientes.9 Por esta razón hubo una fractura en el esquema deontológico y de la ética médica tradicional, que se veían arropados con un sentido de humanismo compasivo, que hacían sentir al dentista como alguien que tenía poder y sus favores menesterosos hacía el paciente como actos compasivos. La conciencia de seguridad del paciente es inherente al ser humano que siempre a deseado lo que considera mejor, lo que se identifique con su dignidad y los más cercano a su comodidad para lograr un estado de plenitud. En el contexto social y político se han introducido a la relación odontólogo-paciente, hoy llamada relación clínica, el derecho y el valor de la autonomía, con lo cual, el paciente deja de ser un ente sumiso y subordinado entregado a las decisiones unívocas del profesional de la salud para convertirse en un paciente deseoso de compartir la información y sobre todo ávido de tomar sus decisiones de acuerdo con sus intereses y con su concepto de salud en el ejercicio de su autonomía a pesar de que ésta sea una autonomía adolescente. En la práctica dental, tener calidad y seguridad para el paciente ha sido un reclamo de muchos años. En cuanto la sociedad descubrió que tener acceso a la atención odontológica segura es un derecho y además, cuando el Estado cayó en cuenta que la población debía ser atendida no sólo como un acto de caridad sino como un deber legal y humanitario, la práctica dental se convirtió en una práctica en el marco del derecho. En el ámbito de la bioética, la orientación principialista es la más socorrida en torno a la seguridad del paciente pues retoma los principios del famoso texto de Beuchamp y Childress Principles of Biomedical Ethics, los cuales siguen vigentes y ayudan a los propósitos fundamentales de la bioética que incide en la seguridad del paciente, Revista CONAMED, vol. 19, suplemento 2014, pags. S24-S428 ISSN 2007-932X Bioética y seguridad odontológica Calderón-Martínez JA. al contribuir en el quehacer continuo del hombre para humanizar sus actos.1 La seguridad del paciente en la atención clínica es una oportunidad para colaborar en ese arduo trabajo de humanización en torno a la salud y bienestar de las personas, para que la tendencia humanista no se confunda con el trato amable y diligente, sino que se considere el resguardo de la dignidad, el ejercicio pleno de la responsabilidad en un marco de libertad y la conciencia de los derechos elementales del ser humano. Actualmente, el manejo de la seguridad del paciente está en la precisión de indicadores y el diseño de procesos, además de la unión en el establecimiento de un monitoreo cuidadoso de acciones y resultados obtenidos; sin embargo, el problema de los indicadores y el manejo de procesos radica en la estructura de la atención estomatológica, ya que está conformada por rutinas de productividad y no necesariamente de calidad, por tanto la información que se recaba de esto no expresa condiciones cualitativas a mejorar.8,9 Uno de los objetivos fundamentales de la seguridad del paciente es evitar, en la medida de lo posible, sucesos adversos como accidentes, complicaciones o errores asociados a la asistencia odontológica, lo que se relaciona estrechamente con la calidad de la atención. Se debe tomar en cuenta que en el objeto rector de la seguridad del paciente nos topamos con la existencia de un retraso en el área estomatológica, pues difícilmente puede llevarse a cabo un registro como se hace en otras áreas de la salud debido a la forma de su ejercicio profesional que generalmente es de manera privada y en menor grado institucional, por lo que se teme que la notificación de efectos adversos en los tratamientos, reversibles o no reversibles, repercuta en la economía del consultorio o desemboque en un problema legal. De igual forma, los aspectos morales del paciente han frenado el avance en esta área, por la falsa creencia de que los padecimientos bucales son de menor importancia que los atendidos en otras disciplinas médicas. Dentro de los indicadores de seguridad del paciente en la atención estomatológica que inciden en el valor de la autonomía, está el instrumento llamado consentimiento informado. Esta herramienta ayuda a explicar al usuario del servicio odontológico las ventajas, riesgos y beneficios de los procedimientos terapéuticos que se van a practicar, así como las posibles complicaciones que se derivan de ellos. Este instrumento, bien aplicado, contribuye a disminuir malos entendidos durante los tratamientos propuestos por los profesionales de la salud, además que informa al paciente de los efectos adversos que pueden ocurrir; del mismo modo se evitan complicaciones, se previenen accidentes y en cierta medida se reducen los errores. Al considerar las variables de aplicación del consentimiento bajo información, se puede evaluar cuantitativamente el número de errores cometidos por falta de información, esto se puede conocer si se multiplica por cien el número de formatos aplicados y se divide el resultado entre el número de personas a quienes se debió aplicarlo; de esta forma, el resultado óptimo debe ser del 100 %. Por otra parte, la evaluación cualitativa puede medirse a partir de las circunstancias en que fue aplicado dicho formato, de este modo, debe observarse si hubo o no presión o coacción en el paciente, el estado en el que éste llegó y la información que se le brindó respecto al tratamiento que se le realizaría, puesto que, como se mencionó con antelación, por temor de ver una disminución económica ciertos dentistas podrían omitir información relevante para que el paciente tome una decisión respecto al tratamiento que se le pretende realizar. La apreciación de la Seguridad del Paciente y de la Bioética en el ejercicio de la autonomía como valor y derecho en la práctica odontológica, supone la verificación del consentimiento nformado como proceso de reflexión en la toma de decisiones, lo que pudiese garantizar la disminución de errores en la atención dental; su aplicación es indispensable para evitar malos entendidos que generen problemas y afecten la relación entre el profesional de la salud y el usuario del servicio odontológico.4, 9 Este procedimiento que busca informar con verdad se inicia estableciendo una comunicación fluida y bidireccional, para explicar amablemente donde se parte de la base que el dueño de la verdad es el paciente; de la práctica desinformada se derivan las principales quejas, pues los usuarios no conocen con oportunidad y veracidad los tratamientos a los que son sometidos.9 Los errores que emanan del diagnóstico y específicamente aquellos obtenidos por la omisión de pruebas indicadas, podrían evitarse en beneficio del usuario del servicio odontológico; si se siguiesen los procedimientos establecidos en los protocolos se obtienen resultados benéficos. Esta Revista CONAMED, vol. 19, suplemento 2014, pags. S24-S28 ISSN 2007-932X S27 R E V I S T A práctica cuidadosa y responsable, emana de la corriente principialista, antes mencionada, que tiene como eje rector la no maleficencia, la beneficencia, la autonomía y la justicia.1, 4, 5, 6 Un indicador fundamental de la Bioética, en términos de la Seguridad del Paciente y la calidad, que resume un conjunto de actividades realizadas, es la responsabilidad no interpretada acuciosamente como de carácter persecutorio, sino como el hecho de cumplir y obtener respuestas coherentes con las convicciones morales de la persona. Los datos de comprobación o indicadores pueden ser la puntualidad, el apego a una norma o el cumplimiento de una técnica, para lo cual no es necesario verificar exhaustivamente el acatamiento de ésta paso a paso; pues basta con sólo revisar los puntos clave en los que están centrados determinados procedimientos.4, 9 Se puede concluir que, la seguridad del paciente en odontología, incluye ineludiblemente a la bioética, pues no puede existir en ningún acto médico u odontológico si prescinde de una base de reflexión ética, por lo tanto, hablar de seguridad y calidez sería redundante. La seguridad para el paciente comprende una atención humana, como lo señala la concepción de los valores y principios bioéticos, que además son principios de una práctica de calidad; todo momento debe existir una mediación entre lo que espera el usuario, lo que se oferta, lo considerado por el profesional de la salud y la posible reacción de la terapia en el organismo del paciente. Con ésto se obtienen buenos indicadores que evaluar, se hacen mejoras en los sistemas y disminuyen los eventos adversos que se derivan de la relación clínica estomatológica. REFERENCIAS 1. Beauchamp T. and Childress J. Principles of biomedical ethics. New York: Oxford University; 2009. 417 p. 2. Calderón Martínez J. Bioética, Calidad y Seguridad del Paciente en la Atención Dental. News Oral-B. 2012; 7 (23): 12-14. 3. Cortina A. Ética mínima. España: Tecnos; 2012. 304 p. 4. Domínguez Márquez O. Bioética y calidad en la atención médica. México: DEM; 2008. 142 p. 5. Engelhardt T. Los fundamentos de la Bioética. Barcelona: Paidos. 1995; p. 108. 6. Gracia D. Fundamentos de bioética. Madrid: Eudema; 1989; p.41. S28 7. Kohn L, Corrigan J and Donalson M. To Err is Human: Building a Safer Health System. Washington DC: NAP; 2000. 312 p. 8. Luengas S. Seguridad del paciente. Rev Centro de Gestión Hospitalaria. 2009. Julio; 48: 6-20. 9. Martín M, Cabré L. Aspectos éticos y legales sobre la seguridad del paciente. Rev Bioética, Derecho 2009 enero; 15:6-14. 10. Organización Mundial de la Salud [Internet] Seguridad del Paciente [acceso 10-10-2014]. Disponible en: http://www.who.int/patientsafety/research/es/. Revista CONAMED, vol. 19, suplemento 2014, pags. S24-S28 ISSN 2007-932X R E V I S T A Artículo de Opinión Rev CONAMED CONAMED 2014;(supl): 2014;(supl): S29-S32 Reflexiones acerca de los principios éticos y legales de mayor trascendencia en la práctica médica y su relación en la calidad y seguridad de los pacientes Reflections on the ethical and legal principles of major importance in medical practice and its relationship to quality and patient safety Armando Martínez-Ramírez1, Salvador Chávez-Ramírez1, Francisco Javier Barrera-Sánchez1, Miguel Roberto KumazawaIchikawa1, Enriqueta Guadalupe Cambero-González1, Erika Karina Ortega-Larios1 RESUMEN. ABSTRACT. Existen numerosas quejas por trato carente de amabilidad y cortesía de cualquier trabajador de la salud, problemas administrativos y falta de respeto a la ética y a la seguridad del paciente durante su atención a la salud. Como eje de estas reflexiones se seleccionaron los siguientes principios: Beneficencia, Equidad, Autonomía, Confidencialidad, Respeto, Solidaridad, Honestidad y Justicia. Los autores consideran que en ellos quedan incluidos los preceptos éticos y legales más relevantes de la práctica médica. Es indudable que el primer paso para resolver el problema de la mal praxis en la atención médica, es conocer la actitud del personal de salud ante los principios éticos y legales. Palabras clave: Práctica médica; principios éticos-legales; seguridad del paciente; calidad de la atención médica. There are numerous complaints about treatment devoid of kindness and courtesy of any health worker, administrative problems and lack of respect for ethics and patient safety during health care. For these reflective work, were selected the following principles: Charity, Equality, Autonomy, Confidentiality, Respect, Solidarity, Honesty and Justice. Authors consider that they are including the most relevant ethical and legal principles of medical practice. It is clear that the first step to solving the problem of malpractice in health care is to know the attitude of health personnel to the ethical and legal principles. Key words: Medical practice; Ethical and legal principle; patient safety; quality of healthcare. INTRODUCCIÓN El avance de la medicina en la segunda mitad del siglo XX y lo que ha transcurrido del siglo XXI, ha sido más rápido que en el resto de su historia; sin embargo los avances que se han logrado en la mejora de la tecnología para mejorar la calidad y la seguridad de la asistencia sanitaria no han sido homogéneos; se ha priorizado e incrementado la tecnología y deteriorado el humanismo en la prestación de los servicios médicos, la relación médico paciente es ahora más distante, la comunicación es menos efectiva y la práctica clínica ha sido sustituida progresivamente por la tecnología1. Por otro lado, el desarrollo tecnológico de los medios de información y comunicación ha propiciado que los usuarios de los servicios de salud estén mejor informados, lo que ha generado demandas de más y mejor atención de sus necesidades y expectativas, es decir, mayor calidad Cuerpo Académico 463 de Profesores-Investigadores: “Gestión de la Calidad y la Seguridad en los Servicios de Salud”. Departamento de Salud Pública. Centro Universitario de Ciencias de Salud. Universidad de Guadalajara. 1 Folio 285/2014 - Artículo Recibido: 23-09-2014 Artículo Reenviado: 17-10-2014 Artículo Aceptado: 4-11-2014 Correspondencia: Dr. Armando Martínez Ramírez. Profesor-Investigador del Departamento de Salud pública. Centro Universitario de Ciencias de la Salud. Universidad de Guadalajara. Teléfono: (33)38170171. Dirección: Calle Asunción # 1875, Col. Colomos Providencia, Guadalajara, Jalisco, México. C.P. 44660. Correo electrónico: drmartinezr@hotmail.com. Revista CONAMED, vol. 19, suplemento 2014, pags. S29-S32 ISSN 2007-932X S29 R E V I S T A y seguridad clínica, que incluye el respeto de los derechos humanos y de los principios éticos de la práctica médica. De igual manera, como resultado de las facilidades existentes para obtener información sobre aspectos médicos y para manifestar su insatisfacción, los pacientes han incrementado las quejas y demandas ante las instituciones de salud, las comisiones de los derechos humanos y las instancias de conciliación y arbitraje médico. Es importante señalar que la insatisfacción de los pacientes y familiares no es únicamente en contra del médico, ni siquiera ésta es la más frecuente. Existen numerosas quejas por trato carente de amabilidad y cortesía de cualquier trabajador de la salud, problemas administrativos y falta de respeto a la ética y a la seguridad del paciente durante su atención hospitalaria.2 Es indudable que las intervenciones de atención a la salud y a la enfermedad se realizan con el propósito de beneficiar al paciente, pero también pueden causarle daño por acción u omisión. Las combinaciones complejas de procesos, tecnología e interacciones humanas que constituyen el sistema moderno de prestación de servicios sanitarios pueden aportar beneficios importantes. Sin embargo, también conlleva un riesgo inevitable de que ocurran eventos adversos y, efectivamente, ocurren con demasiada frecuencia. Numerosas publicaciones señalan la gravedad del problema de la calidad y seguridad del paciente, indicando que uno de cada veinticinco pacientes hospitalizados presenta un daño prevenible.3 Se informa además, que en Estados Unidos el costo total por eventos adversos prevenibles fue de entre $17,000 millones de dólares anuales, en tanto que en la Gran Bretaña e Irlanda el costo por estancia hospitalaria adicional fue de 2,000 millones de libras esterlinas.4 En México, se cuenta con un estudio realizado en el Instituto Mexicano del Seguro Social en 2006, donde se menciona que los principales eventos adversos en los hospitales de segundo y tercer nivel son: caídas de pacientes, seguido por el trauma al nacimiento, la administración errónea de medicamentos, las complicaciones originadas por procedimientos, equipo, y el retraso en el tratamiento. Se omite incluir en este estudio a las infecciones adquiridas en los hospitales como un evento adverso importante, ya que es indudable que se deriva de una deficiente calidad de la atención médica.5 S30 El presente trabajo busca lograr un consenso acerca de los principios éticos y legales de mayor trascendencia en la práctica médica y su relación en la calidad y seguridad de los pacientes durante su atención. La reflexión En un intento de tratar de responder a la pregunta sobre que parte de la mal praxis médica se debe a la variabilidad en el uso apropiado de los principios éticos y/o legales de la práctica médica y su impacto en la calidad y seguridad de los pacientes, se analizó la fundamentación científica de los mencionados principios éticos y legales a través de la revisión de la literatura y en el juicio colectivo de un panel de expertos. Se conformó un panel de expertos, integrado con especialistas de las siguientes disciplinas: Bioética, Gestión de la calidad y seguridad clínica, Salud pública, Gerencia en servicios de salud, Aspectos legales de la práctica médica y Estadística. Los expertos realizaron una revisión crítica de la bibliografía, cuya metodología de análisis y validación serán objeto de un estudio subsecuente. Se consensuaron los siguientes principios, los cuales tienen fundamentos éticos y legales, como Beneficencia, Equidad, Autonomía, Confidencialidad, Respeto a la dignidad del paciente, Solidaridad, Honestidad y Justicia, por ser considerados, por consenso del panel de expertos, como los más relevantes de la práctica médica.1 Discusión fundamentada de los principios • A pesar de que el Dr. Aguirre-Gas1, considera a los principios de Beneficencia, Equidad, Autonomía, Confidencialidad, Respeto a la dignidad del paciente, Solidaridad, Honestidad y Justicia, como de carácter eminentemente ético, es indudable que en su definición y descripción incluyen muchos aspectos de orden legal, por ejemplo: • Principio de Beneficencia. Este principio nos compromete a dirigir todos los actos de la práctica médica hacia el beneficio del paciente. Este principio lleva implícito el “Principio de no maleficencia” que nos obliga a prevenir y evitar cualquier acto que pueda causar daño al paciente. Ya el “Juramento de Hipócrates” hace referencia al “Principio de no maleficencia” al decir “primero Revista CONAMED, vol. 19, suplemento 2014, pags. S29-S32 ISSN 2007-932X Reflexiones ético-legales sobre calidad y seguridad del paciente Martínez-Ramírez A. no hacer daño, no prescribir un fármaco mortal, no practicar el aborto y no practicar intervenciones para las que no esté preparado”. En este contexto debe identificarse a los eventos adversos que ocurren, como consecuencia de errores o mala práctica durante el proceso de atención, entre los cuales están las infecciones hospitalarias, las caídas de pacientes, los errores en la administración de medicamentos y en la identificación de los pacientes. • Principio de equidad. El concepto relativo a este principio, implica que se trate a todos los seres humanos con igualdad, sin distinciones, privilegios, ni preferencias y sin hacerlos sujetos de estigmatización. Sin embargo no sería equitativo tratar como iguales a pacientes desiguales, teniendo en cuenta que el único rasgo relevante que puede justificar un trato preferencial para un paciente, son sus mayores necesidades de salud. • Principio de autonomía. Dentro del concepto universal de los derechos humanos y las libertades fundamentales, está la “libre elección de los planes de vida y la adopción de ideales de excelencia humana”. En tal sentido las personas en uso pleno de sus facultades mentales y libres de coacción o manipulación, tienen el derecho de tomar las decisiones importantes que afecten a su vida y a su persona, conforme a sus valores, deseos y preferencias, con el respaldo de la ley, siempre y cuando no afecten los derechos de terceros, en su persona o su libertad. • Principio de confidencialidad. Conforme a la Ley, la información que es emitida durante la relación médico paciente, solo puede ser utilizada para los propósitos para los cuales hubiera sido obtenida, a menos que exista autorización formal del paciente para que sea utilizada para otros fines. Por lo tanto, la responsabilidad del médico va más allá de un compromiso moral, para constituirse como un derecho del paciente y una responsabilidad propia, sujeta al ejercicio de la ley. Principio de respeto a la dignidad del paciente. Los avances vertiginosos de la ciencia y la tecnología, que han permitido mejorar las expectativas de tiempo y calidad de vida de las personas, deben ser analizados, teniendo en cuenta el respeto debido a la dignidad de la persona humana, a los derechos humanos y a las libertades fundamentales. El principio de respeto de la dignidad de los pacientes determina que no se puede privar de su bienestar en forma injustificada a una persona, ni utilizarla sin su consentimiento como medio para satisfacer el bienestar de otra, como tampoco puede aceptarse imponerle sacrificios o privaciones que no sean en su beneficio. Principio de solidaridad. Desde el Juramento de Hipócrates se hace mención al reconocimiento a los maestros y el compromiso solidario con los hijos de ellos y con sus alumnos. La Declaración Universal sobre Bioética y Derechos Humanos señala en sus principios, la política de “fomentar la solidaridad entre los seres humanos y la cooperación internacional a este efecto”, particularmente en cuanto a la difusión y aprovechamiento compartido de los conocimientos científicos, tecnológicos y desarrollados a través de la investigación científica; entre personas, grupos sociales y profesionales de la medicina, particularmente con los grupos vulnerables. Quizá este principio de solidaridad es el único en el que no se advierten responsabilidades legales, ya que está sustentado en preceptos morales transmitidos por la tradición verbal o escrita, por lo cual dependen únicamente de su buena voluntad. Principio de honestidad. La honestidad en la práctica médica está sustentada en valores personales, principios éticos y compromisos morales, así como disposiciones legales y normativas. Dentro de ellas puede destacarse los compromisos laborales contenidos en cada contrato laboral; Ley Federal del Trabajo, Ley Reglamentaria del Artículo 5° Constitucional, Código de Conducta para el Personal de Salud de la Secretaría de Salud y Código Penal Federal. La UNESCO en su Declaración Universal sobre Bioética y Derechos Humanos señala que: “…se debería promover el profesionalismo, la honestidad, la integridad y la trasparencia en la adopción de decisiones, en particular de las declaraciones de todos los conflictos de interés…”. Principio de Justicia. El derecho a la salud, además de estar considerado en los derechos humanos universales, está incorporado a la Constitución y leyes que emanan de ella. La Declaración Universal sobre Bioética y Derechos Humanos de la UNESCO, señala que habrá de respetarse la igualdad fundamental de todos los seres humanos en dignidad y derecho, de tal manera que los pacientes sean tratados con justicia y equidad; amplía el concepto de Revista CONAMED, vol. 19, suplemento 2014, pags. S29-S32 ISSN 2007-932X S31 R E V I S T A protección a la salud, incluyendo el derecho a la promoción de la salud, disponibilidad de los medicamentos requeridos, atención preventiva en materia de nutrición y vuelve a hacer énfasis en el derecho a una atención médica de calidad. Sólo para enfatizar la estrecha relación que existe entre los principios éticos y los aspectos legales de la práctica médica podemos mencionar que del principio de justicia se desprenden los siguientes preceptos: • Derecho Constitucional a la salud. • Otorgar al paciente la atención que su padecimiento requiera. • No se permite la negativa de atención, particularmente en casos de urgencia. • No es aceptable el abandono de pacientes. • Está proscrita la práctica de procedimientos ilegales. Por otro lado, en la búsqueda intencionada de estudios que abordaran los aspectos éticos y legales, solo encontramos una tesis recepcional para optar por el título profesional de Licenciada en Enfermería: “La aplicación de los principios bioéticos por la enfermera y la percepción del paciente atendido en el Hospital Hipólito Unane, Tacna-2012” realizado por Karina Magaly Vicente Vega en Tacna, Perú en 2012, sin embargo, esta investigación no incluye los aspectos legales y solo aplica unos principios éticos y no la totalidad de los mismos. Los autores consideran que las reflexiones y consensos planteados en este artículo, pueden fundamentar la operacionalización de variables basadas en las definiciones de los principios éticos y legales que aquí se han revisado para, en estudios posteriores, evaluar cuál es la percepción del personal de salud acerca de los principios éticos y legales de la práctica médica y su relación e impacto en la calidad y seguridad de los pacientes durante su atención. REFERENCIAS 1. Aguirre-Gas HG. Aspectos éticos de la seguridad del paciente. En: Gestión de la calidad y seguridad Clínica. Armando Martínez Ramírez, Coordinador. IDEA, Guadalajara, Jalisco, México, 2010. 2. Calidad de atención: seguridad del paciente (diciembre, 2001). Organización Mundial de la Salud. Consejo Consultivo. 109ª reunión EB109/9, diciembre de 2001. 3. Brenan T, Leappe LL, Laid MN et al. Incidence of adverse events and negligence in hospitalized patients: results of the Harvard Medical practice Study I. NEJM. 1991: 324: 370-6. 4. World Health Organization. Fifty fifth World health Assembly. Geneve, Swiss, 2002. 5. Instituto mexicano del Seguro Social. Dirección de Prestaciones Médicas. Unidad de Atención Médica. Registro de Eventos Adversos en el Instituto Mexicano del Seguro Social México: Instituto Mexicano del Seguro Social; IMSS;2006. Agradecemos de manera especial al Dr. Héctor Gerardo Aguirre Gas por permitirnos utilizar material de su autoría para el desarrollo del presente trabajo. S32 Revista CONAMED, vol. 19, suplemento 2014, pags. S29-S32 ISSN 2007-932X R E V I S T A Artículo de Opinión Rev CONAMED CONAMED 2014;(supl): 2014;(supl): S33-S37 Farmacoseguridad en odontología Dentistry Pharmaco-Safety Vallery Fuentes-Arciniega1, Jorge Alberto Calderón-Mártinez1 RESUMEN ABSTRACT La prescripción farmacológica es una competencia profesional en desarrollo en odontología. Las diferentes variables que intervienen en la selección de un fármaco, el conocimiento de los efectos colaterales no deseados y los errores en la prescripción odontológica son áreas a fortalecer en la formación del odontólogo, para aumentar la seguridad de los pacientes y la calidad de la atención en salud. Palabras clave: fármaco-seguridad, los eventos adversos, la seguridad del paciente. Pharmacology prescription is a professional competence in development in Dentistry. The several variables involved in the selection of a drug, knowledge about adverse side effects and errors in odontological prescription are areas to enforce in dentist formation, to increase the patient’s safety and quality of healthcare. Key words: pharmaco-safety, adverse events, patient safety. INTRODUCCIÓN La prescripción médica farmacológica es un área en proceso de desarrollo en odontología. De acuerdo a la Organización Mundial de la Salud, se conocen como efectos colaterales a los efectos conocidos que, aunque son distintos al deseado, están relacionados con las propiedades farmacológicas. También denominados como reacciones adversas, los efectos colaterales no deseados ocurren cuando se produce un daño inesperado al paciente, como resultado de una acción justificada, aun cuando se siguió el procedimiento correcto para el contexto en el que usó del medicamento. Un error relacionado con la medicación es todo evento prevenible, que puede ocasionar o conducir al uso inadecuado de medicamentos o a producir un daño al paciente. El control de la medicación, dependiendo del contexto clínico, puede recaer sobre un profesional de la atención clínica o sobre el paciente o un familiar. La muy frecuente observación de estos eventos adversos asociados con la prescripción, hacen que sea necesario fomentar medidas de seguridad en relación con la farmacología en odontología. Los errores relacionados con medicamentos constituyen la principal causa de eventos adversos en los hospitales y representan el 19.4 % del total de lesiones que producen discapacidad o muerte.1 Facultad de Estudios Superiores (FES) Iztacala. Universidad Nacional Autónoma de México. México. 1 Folio 290/2014 Artículo Recibido: 15/10/2014 Artículo Reenviado: 28/10/2014 Artículo Aceptado: 3/12/2014 Correspondencia: CD. CMF. Vallery Fuentes Arciniega, Dentofacial-art, Colina de acónitos No. 43, Int. 105 Col. Bulevares Naucalpan de Juárez, CP 53140, Estado de México. Correo electrónico: fuentesvallery@hotmail.com. Revista CONAMED, vol. 19, suplemento 2014, pags. S33-S37 ISSN 2007-932X S33 R E V I S T A Realizar una prescripción adecuada tiene resultados favorables en diversas áreas de la salud, tales como la reducción del tiempo de atención médica, la baja frecuencia de complicaciones asociadas a infecciones, la prevención de eventos adversos, la disminución de la resistencia bacteriana y la vigilancia cuidadosa de la interacciones farmacológicas, además de contribuir a obtener resultados clínicos favorables y el éxito de los tratamientos. El odontólogo clínico está facultado para prescribir medicamentos por la Ley General de Salud; desafortunadamente, esta actividad no siempre se realiza de manera correcta. Existen diversos factores que complican el proceso de prescripción, tales como carga de trabajo excesiva, la dificultad diagnóstica producida por historias clínicas incompletas y los estudios auxiliares insuficientes a causa de un escaso acceso y alto costo de los mismos. El incremento de la esperanza de vida en México a 74.4 años y la creciente prevalencia de la obesidad, predicen aumentos en la incidencia de problemas de salud como la diabetes y las enfermedades cardiovasculares2, que ocupan para su manejo polifarmacias y tratamientos complejos, como diálisis, marcapasos y trasplantes. Cada uno de ellos acarrea nuevos efectos secundarios, como insuficiencia renal y cardíaca, que incrementan la posibilidad de errores en la prescripción. La capacitación odontológica es limitada en cuanto a medicina clínica integral, fisiopatología sistémica y farmacología, con lo cual se eleva el riesgo de errores relacionados con el uso de medicamentos. De manera paralela, todos los días acuden a urgencias hospitalarias de segundo y tercer nivel, pacientes con procesos infecciosos severos, producto de una inadecuada valoración e insuficiente prescripción, o de una retardada administración de antibiótico en pacientes que los requerían. Conjuntamente, se han reportado en la literatura complicaciones como la infiltración accidental de hipoclorito de sodio y cloruro de benzalconio. Adicionalmente, algunos pacientes alérgicos a las penicilinas han recibido erróneamente prescripciones de estos fármacos, que han desencadenando eventos adversos severos. También es frecuente la indicación de dosis insuficientes de los medicamentos, que no son ajustadas de acuerdo a peso, edad y padecimiento.3,4,5 S34 Se ha identificado que la inadecuada aplicación de materiales dentales es probablemente producto de una insuficiente capacitación o de errores durante la manipulación de dichos materiales.6 Marx y Escobar publicaron diversos casos clínicos de osteonecrosis asociada a bifosfonatos, que muestra el desconocimiento de los efectos adversos odontológicos asociados a medicamentos sistémicos.7, 8 En entrevistas a odontólogos que interconsultaron por complicaciones relacionadas a infecciones cervicofaciales en un área de urgencias médicas, acerca de su conocimiento y de sus hábitos de manejo de protocolos de profilaxis antibiótica, se identificó en 80 % de los entrevistados un nulo conocimiento del tema y de los requisitos y cuidados necesarios para una correcta aplicación de los protocolos de profilaxis. El mismo estudio encontró desconocimiento en más de 80 % de los encuestados, acerca de los criterios para ajuste de dosis de medicamentos en pacientes con padecimientos sistémicos. Las malas praxis en la prescripción odontológica puede tener origen en diferentes momentos de la atención dental con repercusiones de diferentes magnitudes. (Cuadro 1) Farmacoseguridad La prescripción es producto de un proceso de razonamiento lógico–deductivo, que se deriva del establecimiento de un diagnóstico, el cual, a su vez, es resultado del análisis de una historia clínica correctamente elaborada. Para llevar a cabo con éxito este proceso, se requiere conocer la patología, su etiología probable, así como la fisiología humana y los mecanismos de acción y defensa. El odontólogo debe ser competente en el campo de la farmacología, para realizar la prescripción en un marco de legalidad y seguridad para el tratamiento de sus pacientes. Para ello es necesario tomar siempre en cuenta, las características del paciente, su estado general, los antecedentes y evolución de su padecimiento, además del costo, eventos adversos y reacciones secundarias frecuentes de la medicación seleccionada, para prevenir posibles errores y detectar/atender oportunamente las complicaciones que pudieran presentarse .10 (Figura 1) Es imperioso fomentar grupos que documenten los eventos adversos asociados a fármacos y Revista CONAMED, vol. 19, suplemento 2014, pags. S33-S37 ISSN 2007-932X Farmacoseguridad en odontología Fuentes-Arciniega V. Valoración de paciente • • • • • • • Quirúrgico Infección presente Historia clínica superficial. Desconocimiento de los factores predictivos de riesgo asociados a infección. Incorrecta interpretación de la sintomatología. Desconocimiento de profilaxis antibiótica. Desconocimiento de la patología sistémica. Desconocimiento de la patología infección Desconocimiento en relación a antibioticoterapia, mecanismos de acción. • • • • • • • • Tiempos prolongados. Mal manejo de tejidos Poca habilidad e instrucción quirúrgica. Insuficiente valoración de los hallazgos quirúrgicos, como reducir la presencia de tejido necrótico, alimentos, material purulento. Desconocimiento de la clasificación de heridas de acuerdo a tiempo y localización. Desconocimiento de la flora bucal presente. Desconocer el tiempo de inicio, duración, dosis y combinación de antibióticos de acuerdo a la etapaclínica. Solo se administra terapia antimicrobiana, no se establecen drenajes, procedimientos oportunos o inadecuada fisioterapia. Posquirúrgico Infección complicada. • • Resistencia a la interconsulta. Desconocer la historia natural de la infección cervicofacial. La falta de contacto hospitalario el odontólogo. La reducida valoración clínica. Temor a la administración parenteral. La reducida farmacología antimicrobiana. Inadecuada fisioterapia. • • • • • Cuadro 1. Momentos y repercusiones de la mala praxis farmacoseguridad en odontología. los errores de prescripción más frecuentes y los más graves, identificar y dar a conocer nuevas entidades nosológicas cuando sea el caso, así como la difusión amplia de consensos terapéuticos que estén basados en evidencias médicas. La constante actualización desembocará en odontólogos generales y especialistas experimentados. Otro punto esencial es que los odontólogos conozcan y cumplan la normatividad vigente tanto nacional como internacional. CONCLUSIONES El odontólogo debe conocer todos los procesos que participan en el desarrollo de la prescripción médica y el seguimiento de la evolución del padecimiento del paciente hasta su resolución. Debe además, ampliar sus conocimientos en relación con los padecimientos sistémicos más frecuentes; en cuanto a fisiopatología y farmacología, debe tomarse el tiempo para conocer todos los medicamentos (o al menos los más . . . . . Figura 1. Etapas de la medicación y errores presentes. Revista CONAMED, vol. 19, suplemento 2014, pags. S33-S37 ISSN 2007-932X S35 R E V I S T A frecuentes), que se utilizan en el tratamiento de estos padecimientos y las posibles interacciones que pueden desarrollar. Es necesario establecer protocolos de análisis para una terapéutica razonada, como mínimo para las patologías más frecuentes de su consulta. Adicionalmente, el odontólogo clínico requiere herramientas para reducir los errores de medicación -como por ejemplo-, tablas de dosis, para familiarizarse con los fármacos más utilizados y detectar oportunamente los signos, síntomas y factores personales de riesgo. Para seleccionar medicamentos con base en la terapéutica razonada, se debe seguir una secuencia de pasos que van desde la definición a través de la valoración del paciente, siguen con la comprensión de cuál es el objetivo terapéutico correcto, continúan con la selección de tratamientos tanto médicos, fisioterapéuticos y procedimentales, se plasman en la instrucción y desarrollo de prescripciones correctas y finalizan con la evaluación de los resultados terapéuticos. Todos estos pasos son productos de la evaluación clínica constante. (Figura 2) al grado de severidad, los órganos diana de cada medicamento y los criterios de selección de un antibiótico de acuerdo a su vida media, patrón de resistencia y, cuando sea necesario, la combinación de antibióticos. La combinación de antibióticos deber realizarse racional y razonadamente, con la finalidad de: 1) ampliar el espectro terapéutico, 2) reducir la resistencia microbiana y lograr 3) un efecto bactericida eficiente.9 La Organización Mundial de la Salud (OMS), en la Guía Curricular sobre Seguridad del Paciente edición Multiprofesional 2011, propone algunas acciones sencillas que permitirán la reducción del error.10 (Figura 3) ´ ´ Figura 3. Propuesta para reducir los errores de medicación OMS. ´ ´ Figura 2. Terapéutica razonada. El odontólogo tiene la obligación de familiarizarse con los protocolos profilácticos establecidos, los criterios de indicación de acuerdo a la etiología correcta de la infección, los datos clínicos y paraclínicos que permitan realizar el diagnóstico oportuno, los ajustes requeridos en la administración de los medicamentos que son necesarios de acuerdo al tiempo de evolución y S36 Como es bien conocido, la formación profesional adecuada es necesaria para la toma de decisiones clínicas correctas, por lo que las instituciones deben incluir en sus programas educativos, contenidos que incluyan la normatividad en salud y las guías de práctica clínica nacionales e internacionales, para promover la farmacología con fundamentos teórico-científicos, además de fortalecer sus códigos de conducta y ética, fundamentados en actividades que permitan el desarrollo de la reflexión, la toma de decisiones producto del análisis, así como una enseñanza de calidad y la actualización continua. Los profesionales deben ser preparados en procedimientos técnicos, además de desarrollar habilidades para la investigación, la autocrítica y las buenas relaciones interpersonales. Los profesionales deben ser orientados a vencer sus límites, a perfeccionarse y a actualizarse técnicamente en una educación permanente.11 Revista CONAMED, vol. 19, suplemento 2014, pags. S33-S37 ISSN 2007-932X Farmacoseguridad en odontología Fuentes-Arciniega V. REFERENCIAS 1. Brennan TA, Leape LL, Laird NM, Hebert L, Localio AR, Lawthers AG, Newhouse JP, Weiler PC, Hiatt HH. Incidence of adverse events and negligence in hospitalized patients: Results of the Harvard Medical Practice Study. N Engl J Med. 1991 Feb 7;324(6):370-6. 2. The Organisation for Economic Co-operation and Development. [Internet]. France: OECD; 2014. Health policies and data. [acceso 2014-08-12] Disponible en: http:// www.oecd.org/els/health-systems/health-data.htm . 3. Kilic E, Er N, Alkan A, Ferahbas A. 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S33-S37 ISSN 2007-932X S37 R E V I S T A Recomendaciones Recomendaciones Rev CONAMED CONAMED 2014;19(2):67-77 2014;(supl): S38-S48 Recomendaciones para mejorar la práctica odontológica Recommendations to the improvement of odontology care INTRODUCCIÓN Y ANTECEDENTES Definiciones La Organización Mundial de la Salud (OMS) define a la salud bucodental como “la ausencia de dolor orofacial crónico, cáncer de boca o garganta, llagas bucales, defectos congénitos como labio leporino o paladar hendido, enfermedades periodontales, caries dental y pérdida de dientes, y otras enfermedades y trastornos que afectan a la boca y la cavidad bucal”.1 Las enfermedades de mayor incidencia en estomatología, acorde a la OMS, son la caries dental y la enfermedad periodontal, de frecuencia media son anomalías cráneo-facialesdentales y maloclusiones, las de frecuencia variable son el cáncer oral, alteraciones de tejidos dentales, traumatismos maxilofaciales y fluorosis dental.2 La caries dental se caracteriza por la formación de cavidades en los dientes y puede definirse como: “un proceso localizado de origen multifactorial que se inicia después de la erupción dentaria, determinando el reblandecimiento del tejido duro del diente y evoluciona hasta la formación de una cavidad”. El agente etiológico más frecuente es el Streptococcus mutans. La enfermedad periodontal, es una infección bacteriana que afecta a los tejidos periféricos del diente, que produce inflamación y si no se atiende, puede evolucionar produciendo pérdida de la inserción dentaria, movilidad, dolor y mal aliento (halitosis), hasta llegar incluso a la pérdida del diente.3 Las alteraciones estomatológicas por su alta incidencia, condicionan al incremento en el ausentismo escolar y laboral, ya que la caries dental afecta al 90% de los escolares en el mundo, rebasando, por su alto costo económico, la capacidad del S38 sistema de salud y de la población. Los focos infecciosos en boca son factores de riesgo y predisponentes para la aparición de diversas enfermedades y alteraciones crónico-degenerativas que afectan la salud del individuo.1, 2 Es importante señalar que la mayoría de las enfermedades estomatológicas pueden ser controladas con medicina preventiva y a través de un diagnóstico temprano. Por este motivo es necesario unificar y establecer criterios de atención a la salud bucal, con especial énfasis en la prevención, en los sectores privado y público, así como en la mejora de la calidad de la atención estomatológica que se brinda a la población. El modelo de atención para enfermedades bucales deberá sustentarse en el conocimiento de un complejo y dinámico conjunto de factores conocido como salud-enfermedad, así como sus aspectos preventivos para la correcta conservación de la estructura anatómico-funcional del aparato estomatognático, que permita disminuir la incidencia y prevención de enfermedades bucales más frecuentes en la población mexicana. Menos del 5 % de individuos se ven libres del ataque de la caries dentaria, lo cual indica que posiblemente se trata de la enfermedad predominante de la humanidad. No es extraño, que el primer ataque carioso se produzca poco después de la erupción de los primeros órganos dentarios primarios.4, 5 Estadísticamente, la predominancia de caries dental, suele expresarse mediante un índice llamado CPO, es decir la suma del número de dientes permanentes con lesiones cariosas (c), el número de dientes extraídos (p = perdidos) y el número de dientes con restauración (o = obturados). La Revista CONAMED, vol. 19, suplemento 2014, pags. S38-S48 ISSN 2007-932X Recomendaciones para mejorar la práctica odontológica Triana-Estrada J. Organización Mundial de la Salud define el índice CPO en dentición permanente como indicador de salud bucal de una población y clasifica la gravedad de la caries en cinco niveles: Muy bajo 0.0 – 1.1, Bajo 1.2 – 2.6, Moderado 2.7 – 4.4, Alto 4.5 – 6.5 y Muy alto +6.6.6 En México, los individuos de 20 años de edad, presentan un promedio de casi 15 dientes atacados por caries dentaria. De tales dientes, sólo se han restaurado6, mientras que un promedio de 5 órganos dentarios habían sido extraídos. En los adultos mayores, aumenta el número de dientes perdidos por enfermedad periodontal, por consiguiente se señala, que por encima de los 50 años, faltan en promedio 20 dientes o más. Casi el 100 % de la población mexicana manifiesta cierto grado de enfermedad periodontal destructiva crónica hacia los 45 años de edad.7 En el Cuadro I, se compara la prevalencia y severidad de la patología en nuestra población,8, 9, 10 en relación con la de otros países. Núm. de orden Núm. de orden (% CPO) 1 Etiopía 1.0 2 India (Punjab) 1.5 3 Myanmar 2.0 4 Tailandia 3.0 5 Libano 4.0 6 Esquimales, Alaska 7.0 7 Ecuador 8.0 8 Chile 12.0 9 México 15.0 10 Colombia 17.0 Cuadro 1. Prevalencia y severidad de la enfermedad periodontal destructiva crónica en el mundo. Estos datos se pueden transpolar a otras entidades patológicas estomatológicas, como las que citan a continuación: 1. El 80 % de la población norteamericana, padece enfermedad periodontal (gingivitis-periodontitis).11 2. El 13 % de la población del Reino Unido, antes de cumplir los 21 años, ya han perdido la totalidad de sus órganos dentarios.12 3. El 96 % de la población mundial padece caries.13, 14 4. El 90 % de la población Mexicana padece caries. 5. La OMS considera a la caries y a la enfermedad periodontal, como 2 de las afecciones de más alta incidencia, a nivel mundial global. 6. El 50 % de toda la población mundial, presenta algún signo de disfunción de la articulación temporo – mandibular (proporción de mujeres- varones 3:1).15 7. El 50 % de niños sin maloclusión, tienen malos hábitos que las inducen subsecuentemente. 16 8. La prevalencia de la maloclusion en los Esta dos Unidos oscila entre el 60 y 65 % (sólo el 35 % posee oclusión normal).17, 18 • Maloclusión de causa desconocida 60 % • Maloclusión de causa conocida 5 %19, 20, 21 9. En los Estados Unidos, 100 % de la población requiere asistir con el profesional de la salud bucal, 40 % lo hacen durante el año y solo 15 % acude con regularidad.22, 23 10.La proporción de curación de un cáncer oral en Estados Unidos, no sobrepasa el 30 %.24, 25, 26 En México, las estadísticas relacionadas con los servicios de odontología reportadas en 2007, señalan que existen 4,538 odontólogos y 1,993 pasantes de odontología en contacto con pacientes en la Secretaría de Salud.27 Se considera a la odontología como una profesión característicamente independiente, ya que en 2004, 81 % de los profesionales laboraban en el sector privado. El ejercicio privado del odontólogo tiene dos modalidades principales: por cuenta propia 47 %, y como trabajador a sueldo fijo 39 %. Esta situación puede obedecer, entre otras causas, a que el número de plazas para odontólogos en las instituciones públicas y de la seguridad social son reducidas y se orientan a atención básica, pese a la creciente demanda de este tipo de servicios.28 QUEJAS DE ODONTOLOGÍA EN LA CONAMED A partir de las quejas recibidas en la CONAMED y registradas en la base de datos del Sistema de Atención de Quejas Médicas (SAQMED), se obtuvo la información sobre las quejas relacionadas con Odontología, durante el periodo de mayo de 2001 a octubre de 2011. Se analizó la información derivada del SAQMED de las siguientes variables: edad y género de los p cientes, tipo de institución en donde fue atendido, entidad federativa, tipo de procedimiento realizado, el motivo de la queja y la modalidad de conclusión de las quejas. Posteriormente se analizó la Valoración Médica Integral Revista CONAMED, vol. 19, suplemento 2014, pags. S38-S48 ISSN 2007-932X S39 R E V I S T A (VMI), para obtener información más específica sobre los casos, cuando esto fue posible. Para el análisis se empleó estadística descriptiva, para este propósito se utilizó el paquete estadístico SPSS versión 18. RESULTADOS Se analizaron 1066 quejas correspondientes al área de Odontología de mayo de 2001 a octubre de 2011. De acuerdo al género el 68 % (724 casos) de las quejas correspondieron al femenino y el 32 % (342 casos) al masculino (Figura 1). De acuerdo al tipo de institución en donde recibieron la atención odontológica los casos se distribuyeron de la siguiente forma: en primer lugar los servicios privados con 896 casos (84.05 %), en segundo lugar los de Seguridad Social con 115 casos (10.79 %), los servicios de asistencia social con 42 casos (3.94%), seguidos de la población sin seguridad social con 10 casos (0.94 %) y finalmente la asistencia privada con 3 casos (0.28 %) (Figura 3). Seguridad Figura 3. Quejas de odontología de acuerdo al tipo de institución, CONAMED 2001-2011. N=1066 Figura 1. Quejas de odontología de acuerdo al género de los pacientes, CONAMED 2001-2011. La distribución de la edad de los pacientes por grupos fue la siguiente: el primer lugar fue para el grupo de 65 y más años con 203 casos (19.43 %) el segundo lugar fue para el grupo de 55 a 64 años con 199 casos (19.04 %), el tercer sitio fue para el grupo 35 a 44 años con 159 casos (15.22 %), los porcentajes para los grupos de edad restantes se observan en la Figura 2. Por entidad federativa se partió de una muestra de 1066 casos, sin embargo, en 71 de ellos no se contaba con la información. En este caso la mayor parte de las quejas correspondieron al Distrito Federal, con 757 casos (76 %), el segundo lugar fue para el Estado de México con 124 casos (12 %), el tercero para Guanajuato con 17 casos (2 %) y los 97 casos restantes (10 %) correspondieron a otras entidades (Figura 4). Figura 4. Quejas de Odontología por entidad federativa, CONAMED 2001-2011. N=995 Figura 2. Quejas de Odontología de acuerdo a grupos de edad, CONAMED 2001-2011. N=1045 S40 Los motivos de queja que refieren los pacientes están relacionados con el tratamiento médico en un 73.74 % de los casos, seguidos por quejas relacionadas con tratamiento quirúrgico con 18.55 %, además los problemas originados Revista CONAMED, vol. 19, suplemento 2014, pags. S38-S48 ISSN 2007-932X Recomendaciones para mejorar la práctica odontológica Triana-Estrada J. en la relación dentista-paciente representan un 1.56 %, el 1.45 % correspondió a problemas en el diagnóstico, los problemas relacionados con atención inicial con 0.22 % (Figura 5). Cuadro 2. Modalidad de la conclusión de las quejas de odontología, CONAMED 2001-2011 Resultado frecuencia % 5 0.5 653 61.3 Improcedencia 13 1.2 No conciliación 101 9.5 No conciliación por falta de interés procesal 56 5.3 Por emisión de dictamen 20 1.9 Amigable composición Conciliación Por fallecimiento del quejoso 1 0.1 Por falta de interés procesal 175 16.4 41 3.8 Por laudo Sin dictamen Total Figura 5. Fases de la atención que originaron las quejas de Odontología, CONAMED 2001-2011. N=895 En cuanto al tipo de procedimiento realizado, se obtuvo información en 1066 casos, los procedimientos realizados en orden decreciente fueron de prótesis (30.02 %), ortodoncia ge neral (19.98 %), ortodoncia (14.92 %), prostodoncia (13.6 %), cirugía bucal y maxilofacial con 8.63% exodoncia con 6.47 % así como implantología dental con 3.94 y finalmente odontología pediátrica y periodoncia con 1.22 % (Figura 6). 1 0.1 1066 100% Se llevó a cabo un sub-análisis de 687 casos con el fin de evaluar la presencia de conflictos por la atención estomatólogica, se observó que en el 47 % existió buena práctica, desde el punto de vista de la valoración estomatológica integral realizada por CONAMED y el 53 % tuvieron alguna deficiencia en atención, manejo inadecuado o mala práctica (Figura 7). Figura 7. Tipo de práctica odontológica en las quejas de la CONAMED 2001-2011. N=687. Figura 6. Quejas de Odontología por tipo de procedimiento, CONAMED 2001-2011. N=1066 Las principales modalidades de conclusión de las quejas de odontología correspondieron a los siguientes tipos: el primer lugar fue para la conciliación (53.1 %), el segundo lugar quejas enviadas a arbitraje (11.9 %) y en tercer lugar, derechos a salvo* otras modalidades se observan en el Cuadro 2. *Derechos a salvo se refiere a la forma de conclusión de un asunto que se atiende en CONAMED, cuando las partes en conflicto no logran conciliar sus diferencias y no aceptan el compromiso arbitral, por lo que quedan en libertad para abandonar el asunto o llevar su conflicto a las instancias jurisdiccionales correspondientes. En las quejas de odontología se identifican problemas cuyo origen se encuentra en la falta de comunicación o problemas de comunicación en la relación del profesional de la salud bucal– paciente, como los problemas que se señalan a continuación: • Maltrato al paciente. • No se proporciona al paciente y sus familiares explicaciones sobre su tratamiento en términos accesibles. • No se enfatiza el alcance y las limitaciones del tratamiento. • No se informa el costo y riesgo/beneficio de Revista CONAMED, vol. 19, suplemento 2014, pags. S38-S48 ISSN 2007-932X S41 R E V I S T A la atención (probabilidades de fracaso del tratamiento). • Inexactitudes e imprecisiones por parte del prestador del servicio. • Delegación de responsabilidades por parte del profesional de la salud bucal. • Modificación de convenios en cuanto a modo, tiempo y costo de la atención brindada. DISCUSIÓN En el análisis de la quejas odontológicas recibidas ante esta Comisión, es importante enfatizar y destacar, que en nuestro país se cuenta con regulaciones de la Ley General de Salud, Normas Oficiales Mexicanas, Guías Nacionales de Práctica Clínica y Lineamientos Técnicos, entre otras normativas que deben difundirse entre el gremio estomatológico institucional y privado. Asimismo, se señala la urgente necesidad de orientar al paciente en cuanto al conocimiento de sus derechos y obligaciones ante una rehabilitación estomatológica integral y por supuesto la inherente optimización en la calidad de los servicios brindados por parte del profesional de la salud. Al realizar el análisis de los casos (n = 1066) con el fin de evaluar la presencia de conflictos por la atención estomatológica, se observó que en 57 % de los casos existió buena práctica y 43 % tuvieron alguna deficiencia en la atención brindada desde el punto de vista de la valoración estomatológica integral realizada por la CONAMED (manejo inadecuado o mala práctica). En estos casos las irregularidades con mayor incidencia y frecuencia se citan a continuación: En primer lugar, la falta de comunicación entre el profesional de la salud bucal y el paciente que puede englobarse de la siguiente manera: maltrato al paciente, el profesional de la estomatología no se explica con términos accesibles para el usuario, no se enfatiza el alcance y las limitaciones del tratamiento en cuestión, no se informa del costo y riesgo/beneficio de la atención (posibilidad de rango de fracaso del procedimiento otorgado), caer en inexactitudes e imprecisiones por parte del prestador del servicio, así como la delegación de responsabilidades por parte del profesional de la salud bucal y finalmente, la modificación de convenios en cuanto a modo, tiempo y costo de la atención brindada. En segundo lugar, la emisión de falsas expectativas del profesional de la salud bucal hacia S42 sus pacientes, reseñadas de la siguiente forma: uso y manejo equivocados de materiales y procedimientos no indicados, así como tratamientos simulados, pretensiones clínicamente inalcanzables y técnicas clínicas inexpertas. En tercer lugar, el incumplimiento de obligaciones: • De medios: ausencia de expediente clínico, omisión de historia clínica y consentimiento válidamente informado29-31 que se remiten en anulación del sustento legal de las declaraciones clínicas del paciente, carencia de auxiliares diagnósticos (estudios radiográficos, estudios de gabinete, referencia de interconsulta, inadecuado manejo farmacológico) así como la subsecuente deficiencia de un pronóstico y plan de tratamiento. • De seguridad: Exponer al paciente a riesgos innecesarios, no salvaguardando la integridad física, clínica y psicológica del usuario. • De resultados: Insatisfacción del paciente ante los ofrecimientos prometidos a priori por el facultativo, tratamientos exageradamente prolongados y costosos. En cuarto lugar, el desconocimiento del profesional de la salud bucal de la Ley General de Salud y las Normas Oficiales Mexicanas, que regulan la normatividad del ejercicio de la profesión odontológica, así como la relación con sus pacientes. En quinto lugar, el anteponer las técnicas rehabilitatorias mutilantes a las técnicas preventivas conservadoras de calidad.32, 33 En sexto lugar, matización de una ética profesional deficiente, expresada en la prevalencia de intereses personales del profesional de la salud bucal a los del paciente, una ausencia de actualización profesional, al ejercicio indebido del menester odontológico (ejercicio de la profesión sin las acreditaciones respectivas) y la práctica de una medicina bucal defensiva.34-39 Finalmente, cabe enfatizar que el diagnóstico, pronóstico y plan de tratamiento constituyen la piedra angular para otorgar al paciente las óptimas condiciones de salud estomatológica e integral, y que son las razones que sustentan el existir de la profesión odontológica. Recomendaciones para Mejorar la Práctica Odontológica 1. Fomentar las estrategias preventivas de manera intensiva para evitar la aparición prematura de enfermedades estomatológicas. 20, 21 Revista CONAMED, vol. 19, suplemento 2014, pags. S38-S48 ISSN 2007-932X Recomendaciones para mejorar la práctica odontológica Triana-Estrada J. • Reforzar las prácticas de autocuidado que favorezcan la salud bucal. • Intensificar en el ejercicio profesional una educación encaminada a la terapéutica dental preventiva. • Promover la visita al consultorio dental de manera periódica para coadyuvar a los procedimientos preventivos conservadores de integridad estomatológica así como el óptimo mantenimiento de los tratamientos rehabilitatorios bucales pre-existentes. • Incrementar las actividades de promoción de la salud bucal especialmente en grupos de riesgo. 2. Practicar todo acto estomatológico diagnóstico resolutivo y rehabilitatorio, en un marco legal que asegure el cumplimiento jurídico de su proceder. Atender a los contenidos de las siguientes disposiciones: Ley General de Salud (LGS): Consultorio (Art. 59, NOM-005-SSA3-2010, NOM-016-SSA3-2012) Deberá contar con instalaciones sanitarias adecuadas, buen estado de aseo, conservación y espacio suficiente para la atención odontológica. Botiquín Urgencias (Art. 63 Reglamento LGS) El consultorio deberá contar con botiquín de urgencias que establecen las normas son insumos que establecen las NOM 013SSA2-2006, NOM 005-SSA3-2010, NOM 016-SSA3-2012. Curso Básico de RCP (Art. 245 Ley reglamentaria de la LGS). Receta Médica (Art. 37 y 64 Reglamento de la LGS en materia de Prestación de Servicios de Atención Médica). Debe contener: Nombre del médico, Nombre de Institución que la expide, Título y Cédula Profesional, Domicilio y Nombre del Establecimiento y Fecha de expedición. Instrumental y equipo (Art. 245 del Reglamento LGS). El consultorio debe contar con personal suficiente e idóneo, equipo, material o local de acuerdo a los servicios que preste. Auxiliares y especialistas, médicamente vigentes e instrumentos mínimos de acuerdo a la NOM 016-SSA3-2012 Y NOM-005-SSA3-2010. Normas Oficiales Mexicanas Marco Legal NOM 013 SSA2 – 2006 Para la prevención y control de enfermedades bucales. NOM 010 SSA – 2010 Para la prevención y control de la infección por el virus de inmuno – deficiencia humana. NOM 087 – ECOL –SSA1–2002 Requerimientos para la separación, almacenamiento, recolección, transporte, tratamiento y disposición final de residuos peligrosos biológicos-infeccioso que se generan en establecimientos que prestan atención médico-odontológica. NOM-004-SSA3-2012 Del Expediente Clínico. Ley Reglamentaria del Articulo 5° Constitucional, relativo al ejercicio de las profesiones en el Distrito Federal: • Obligación de medios: Todos los recursos empleados para poder obtener un diagnóstico, plan de tratamiento y pronóstico; sobresaliendo los medios auxiliares de diagnóstico y la elaboración del expediente clínico. • Obligación de seguridad: Son todos los medios utilizados para prevenir cualquier accidente. • Obligación de resultados: La odontología en algunos procedimientos podrá comprometer resultados, pudiendo ser estos funcionales o estéticos. 3. Favorecer y promover la comunicación respetuosa y permanente entre el profesional de la salud bucal, el paciente, sus familiares o representantes legales. • Establecer una comunicación clara, accesible y explícita, con el paciente y sus familiares. • Siempre brindar la atención en caso de urgencia calificada. • Enterar de la posibilidades de éxito o de fracaso de cualquier procedimiento estomatológico, así como de sus riesgos y beneficios, sin crear falsas expectativas. • Considerar al paciente como un ente integral y no únicamente como una boca. • Proponer, las alternativas idóneas para el Revista CONAMED, vol. 19, suplemento 2014, pags. S38-S48 ISSN 2007-932X S43 R E V I S T A tratamiento del paciente, considerando para ello las circunstancias de modo, tiempo y lugar, siempre en apego a los lineamientos científicos. • Respetar los derechos del paciente, así como de otros profesionales de la salud. • Ganar la atención y confianza del paciente, familiares o representantes legales demostrando empatía e interés por su padecimiento. 4. Integrar un expediente clínico que incluya una historia clínica, así como un consentimiento válidamente informado. • El expediente es el instrumento documental que garantiza recíprocamente la relación del profesional de la salud tbucal y el paciente, desde el punto de vista jurídico y clínico. • Sistematizar toda acción estomatológica y optimizar su proceder. • Conservar el expediente clínico un mínimo de 5 años. • Aceptación recíproca (profesional de la salud bucal-paciente) de la información acerca de los riesgos y beneficios previstos, así como probables complicaciones ante el proceder diagnóstico, terapéutico y rehabilitatorio. • Elaborar el expediente de acuerdo a la normatividad existente y lo sugerido por los grupos de consenso. 5. Determinar un diagnóstico oportuno, así como un pronóstico y plan de tratamiento acordes con las bases éticas y científicas. • Considerar al paciente como un ente integral. • Evitar simular o demorar tratamientos. • Solamente actuar cuando se tiene capacidad profesional. • Recurrir a una actualización continua. • Salvaguardar siempre la integridad física del paciente. • Fomentar una atención especializada y multidisciplinaria cuando el caso lo requiera. • El profesional de la salud bucal tiene el deber de brindarse al servicio de su actuar con compasión, respeto y honestidad a la dignidad de sus colegas, de sus pacientes y sus familiares. RECOMENDACIONES GENERALES PARA MEJORAR LA PRÁCTICA ODONTOLÓGICA Recomendaciones Generales Aspectos Relevantes 1. Fomentar las estrategias preven- • tivas de manera intensiva para evitar la aparición prematura de enfermedades estomatológicas. • • • S44 Reforzar las prácticas de autocuidado que favorezcan la salud bucal. Intensificar una educación encaminada a la terapéutica dental preventiva. Promover la visita al consultorio dental de manera periódica para coadyuvar a los procedimientos preventivos conservadores de integridad estomatológica así como el óptimo mantenimiento de los tratamientos rehabilitatorios orales pre-existentes. Incrementar las actividades de promoción de la salud bucal en grupos de riesgo. ¿Qué previene? • • • • • • La aparición de condiciones patológicas bucodentales que al no ser diagnosticadas generan complicaciones mayores y consecuentemente quejas o inconformidades. La presencia de malos hábitos estomatológicos que compliquen la salud integral. Desconocimiento de medidas promotoras y preservadoras de la homeostasis bucal. La aparición y diseminación. de neoplasias orales. La odontología mutilante. Revista CONAMED, vol. 19, suplemento 2014, pags. S38-S48 ISSN 2007-932X Recomendaciones para mejorar la práctica odontológica Triana-Estrada J. Recomendaciones Generales Aspectos Relevantes 2. Practicar todo acto estomatológi- • co diagnóstico resolutivo y rehabilitatorio en un marco legal. • • • • • • • • • • 3. Favorecer y promover la comu- • nicación respetuosa y permanente entre el profesional de la salud bucal, el paciente y sus • familiares o representantes. • • • • • ¿Qué previene? Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos. Articulo 4°, párrafo IV, Determina el derecho que tiene toda persona a la protección de la salud, para lo cual la ley determinará las bases y modalidades param el acceso a los servicios y establecerá la concurrencia de la Federación y Entidades Federales en materia de salud en general conforme al Articulo 73, Fracción XVI. Ley General de Salud. Art. 51. Los usuarios tendrán derecho a obtener prestaciones de salud oportunas y de calidad idónea y a recibir atención profesional y éticamente responsable, así como trato respetuoso y digno de profesionales, técnicos y auxiliares. Ley General de Salud. Art. 59. NOM-005-SSA3-2010. NOM-016-SSA3 -2012. Área de consultorio. Ley General de Salud. Art. 245. NOM 013 SSA2-1994. NOM-005- SSA3-2010. NOM 168 SSA1 – 1998 y su actualización NOM- 004-SSA32012. NOM 087 – ECOL –SSA1-2002. • Establecer una comunicación clara, accesible y explícita, con el paciente y sus familiares. Siempre brindar la atención en caso de urgencia calificada. Enterar de las posibilidades de éxito o de fracaso de cualquier procedimiento estomatológico de sus riesgos y beneficios. Considerar al paciente como un ente integral y no únicamente como una boca. Proponer las alternativas idóneas para su tratamiento, considerando para ello la circunstancia de modo, tiempo y lugar, siempre en apego a los lineamientos científicos. Respetar los derechos del paciente y de otros profesionales de la salud Ganar la atención y confianza del paciente familiares o representantes legales a través expresarle empatía e interés por su padecimiento. • • Revista CONAMED, vol. 19, suplemento 2014, pags. S38-S48 ISSN 2007-932X • • • • • • • • El ejercicio indebido de la práctica estomatológica. Práctica no aceptada e ilegal. La omisión de obligaciones. de seguridad para el paciente. La improvisación de procedimientos rehabilitatorios. Falsas expectativas del tratamiento. Maltrato y mala relación entre cirujano dentista–paciente. Desconocimiento del alcance del tratamiento y sus posibles limitaciones. La desinformación del caso riesgo, beneficio de procedimiento estomatológico. Inexactitudes e imprecisiones de tratamiento. La desconfianza en el grupo odontológico. S45 R E V I S T A Recomendaciones Generales Aspectos Relevantes 4. Integrar un expediente clínico • que incluya una historia clínica, así como la elaboración de un consentimiento válidamente informado. • • • • • 5. Determinar un diagnóstico opor- • tuno, así como un pronóstico y plan de tratamiento acordes con • las bases éticas y científicas. • • • • • S46 ¿Qué previene? El expediente clínico es el instrumento documental que garantiza recíprocamente la relación proveedor de los servicios de la salud bucal y el paciente, desde el punto de vista jurídico y profesional. Sistematizar toda acción estomatológica y optimizar su proceder. Conservar el expediente clínico un mínimo de 5 años. Informar de los alcances reales del tratamiento. Aceptación recíproca (profesional de la salud bucal-paciente) de la información acerca de los riesgos y beneficios previstos, así como probables complicaciones ante el proceder diagnóstico, terapéutico y rehabilitatorio. Elaborar el expediente clínico de acuerdo a la normatividad existente y lo sugerido por los grupos de consenso. • Considerar al paciente como un ente integral. Evitar simular, o demorar tratamientos. Solamente actuar cuando se tiene capacidad profesional. Recurrir a una actualización continua. Salvaguardar siempre la ntegridad física del paciente. Fomentar una atención especializada y multidisciplinaria, cuando el caso lo requiera. El profesional de la salud bucal tiene el deber de brindarse al servicio de su profesión con compasión, respeto y honestidad a la dignidad de sus colegas, de sus pacientes y sus familiares. • • • • • • • • • • • Problemas de control y seguimiento del tratamiento odontológico. Falta de información al paciente sobre los estudios y procedimientos terapéuticos estomatológicos a realizar al paciente. Se evita el manejo inadecuado por la omisión de información asignada al expediente. El incumplimiento de obligaciones de medios. La remisión y delegación de la responsabilidad por parte del profesional de la salud. Retraso en diagnóstico, pronóstico y plan de tratamiento. Aplicación de tratamientos injustificados. Evitar incertidumbre al paciente. Tratamientos innecesarios. Diagnósticos erróneos Omisión de obligaciones de resultados. La práctica de la odontología defensiva. Revista CONAMED, vol. 19, suplemento 2014, pags. S38-S48 ISSN 2007-932X Recomendaciones para mejorar la práctica odontológica Triana-Estrada J. REFERENCIAS 1. Organización Mundial de la Salud. Salud Bucodental. WHO Media Centre. Nota informativa N°318, Febrero de 2007. [acceso 25-10-2012] Disponible en: http://www.who.int/mediacentre/ factsheets/fs318/es/index.html. 13. Imfeld TN, Marthaler TM. Predictions of future caries increments for children. J Dent Educat. 1995; 59: 941-4. 2. Arnin SS. Microcosms of the Human Mouth. Role in J Tenn Dent Assoc. 1959; 39: 3. 15. Blasberg B, Greenberg MS. Temporomandibular disorders. 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