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TOP 20. La metodología utilizada El proceso global de evaluación El estudio Top 20 determina, de entre los hospitales participantes, los 24 centros que mejor se comportan globalmente con relación a un conjunto de seis indicadores que recogen las dimensiones de calidad asistencial, funcionamiento y sostenibilidad económica de la práctica clínica. Tras un proceso de validación interno de datos, los centros hospitalarios incluidos en el estudio se clasifican en primer lugar en dos categorías: hospitales que trabajan mayoritariamente para el Sistema Nacional de Salud (SNS) y hospitales que atienden mayoritariamente pacientes de cobertura privada. Los hospitales que trabajan preferentemente para el SNS se clasifican en uno de los cinco niveles de hospitales mutuamente excluyentes de acuerdo a parámetros estructurales simples. En los centros privados se ha diferenciado dos niveles: un primer nivel de baja complejidad de los pacientes que atiende y otro de complejidad elevada al tratar pacientes de especialidades terciarias. A continuación se calculan los valores de cada uno de los indicadores considerados para cada hospital. Tras la normalización de los valores obtenidos en cada indicador, convertidos así a la misma escala de medida, se suman dichos valores normalizados de tal forma que los hospitales considerados como Top son los dos, o cuatro hospitales de cada uno de los niveles hospitalarios que presentan una suma favorable, constituyendo el "Benchmark" de ese grupo. A lo largo de la publicación se muestra información descriptiva de los valores promedio (medias aritméticas) obtenidos para cada uno de los indicadores desde una triple perspectiva: 1. A nivel global para la totalidad de los hospitales incluidos en el proceso de evaluación. Iasist © 2008. 1 2. Estratificando por niveles de hospitales. 3. Estratificando por hospitales Top (grupo "Benchmark") y no Top (resto de hospitales). Las diferencias entre los valores medios de los indicadores del grupo "Benchmark" y el resto de hospitales, tanto a nivel global como para cada nivel considerado, se han contrastado mediante la U de Mann-Whitney, para un nivel de significación del 5%. Al comparar los resultados del grupo "Benchmark" con el resto de hospitales, los datos se presentan en porcentaje de mejora, entendido como el porcentaje de incremento o reducción del valor del indicador observado en el grupo "Benchmark" respecto del resto de hospitales en la dirección considerada favorable para los índices y razones. Valor favorable del Grupo Indicadores "Benchmark" Expresión de la mejora IMAR ICAR IRAR Menores valores Estancia media ajustada por casuística y severidad Porcentaje de la diferencia en el "Benchmark" sobre el resto Coste por unidad de producción ajustada Mayores valores ICSIA Universo a estudio A lo largo del estudio se han utilizado dos fuentes de información distinta de los hospitales, por un lado el CMBD del año 2007, y por otro lado, un cuestionario sobre estructura, actividad y gasto. Un total de 147 hospitales españoles han participado voluntariamente en el programa en esta edición. De ellos, 120 atienden mayoritariamente pacientes a cargo de la Seguridad Social (82%), y 27 (18%) se dedican principalmente a tratar pacientes puramente privados o que tienen contratados seguros privados. Iasist © 2008. 2 Clasificación de hospitales: comparaciones homogéneas En cualquier ejercicio de comparación, y este estudio no es una excepción, es necesaria una consideración previa sobre qué entidades van a compararse entre ellas y cuáles no admiten una comparación directa frente a otras, de acuerdo con sus distintas características o funciones, especialmente si éstas influyen en los parámetros finalmente objeto de comparación. Para el caso de los hospitales, esta consideración es todavía más pertinente, si cabe: la organización eficiente del sector de cuidados para la salud, de acuerdo con sus condicionantes (básicamente economías de escala y de alcance), aboga por una respuesta organizacional distinta ante diferentes necesidades sanitarias, lo que se acaba traduciendo en la necesidad de distintos tipos de hospitales, bien en cuanto a sus objetivos o bien con relación a sus recursos para cumplir con los mismos. En este sentido, para obtener comparaciones equitativas es necesario tener en cuenta las características individuales de cada proveedor de servicios sanitarios, como el tamaño del hospital, la presencia o ausencia de formación de residentes, la estructura tecnológica instalada. Por otro lado, el reconocimiento de la existencia de distintos tipos de hospitales no implica que la definición de dichos tipos pueda realizarse de una forma pura o absoluta. Cualquier clasificación de hospitales respecto al criterio que se elija es compleja y puede resultar arbitraria, especialmente en las fronteras de discriminación entre grupos. La inclusión de más de un criterio de clasificación seguida en este estudio, pretende paliar en parte este fenómeno, aunque siempre van a existir centros que se sitúan en los límites de los grupos definidos. Se ha constituido un grupo específico de hospitales privados debido a que las características organizativas propias del sector dificultan la comparabilidad con los hospitales del SNS. Clasificación de los hospitales del Sistema Nacional de Salud El método de clasificación de hospitales ha sufrido variaciones sustanciales en la presente edición del Programa Hospitales TOP 20, especialmente en lo que concierne a los hospitales del SNS. De acuerdo con la creciente tendencia en nuestro país hacia la estaturización de hospitales tradicionalmente encuadrados en los llamados grupos de nuevas formas Iasist © 2008. 3 de gestión, ha resultado imposible mantener los mismos grupos de hospitales empleados en las dos últimas ediciones del Programa. Así, en ausencia de efectivos suficientes para estructurar grupos de hospitales homogéneos en su estructura, funcionalidad y naturaleza de su gestión, se ha optado por volver a los criterios de clasificación de los hospitales empleados en las seis primeras ediciones del programa. En la novena edición del programa TOP 20 se establecen cinco grupos de hospitales que trabajan para el SNS: Hospitales generales pequeños Hospitales con menos de 129 camas. Hospitales generales medianos Hospitales con un número de camas comprendido entre 130 y 249, ambos incluidos. Grandes hospitales generales Hospitales con un número de camas comprendido entre 250 y 574 camas, ambos incluidos, sin ninguna especialidad de referencia entre las seleccionadas. Las especialidades consideradas de referencia son neurocirugía, cirugía cardiaca, cirugía torácica y trasplante renal. La presencia de dichas especialidades en un hospital se ha determinado a partir de la presencia y volumen de un conjunto de GRD trazadores. Hospitales con especialidades de referencia Hospitales con un número de camas comprendido entre 250 y 574 camas, ambos incluidos, con al menos una especialidad de referencia entre las seleccionadas. Las especialidades consideradas de referencia son neurocirugía, cirugía cardiaca, cirugía torácica y trasplante renal. La presencia de dichas especialidades en un hospital se ha determinado a partir de la presencia y volumen de un conjunto de GRD trazadores. Grandes hospitales de referencia regional y nacional Hospitales con un número de camas superior a 574 camas y con tres o más especialidades de referencia entre las seleccionadas. Las especialidades consideradas de referencia son neurocirugía, cirugía cardiaca, cirugía torácica y Iasist © 2008. 4 trasplante renal. La presencia de dichas especialidades en un hospital se ha determinado a partir de la presencia y volumen de un conjunto de GRD trazadores. Clasificación de los hospitales privados Para identificar los hospitales Top en el nivel de hospitales privados, esta categoría de centros se estratifica en dos subniveles: un subnivel de clínicas privadas de baja complejidad y un subnivel de centros privados de elevada complejidad. Se identifican dos hospitales Top para cada uno de estos subniveles. El criterio que se ha seguido para clasificar un centro privado en el subnivel de elevada complejidad es el cumplimiento, como mínimo, de dos de los siguientes criterios: Número de camas igual o superior a 100 Número de altas de hospitalización igual o superior a 10.000 Número de plantilla de DUE igual o superior a 130 Número de urgencias igual o superior a 20.000 Indicadores utilizados en la evaluación En el proceso de evaluación de esta edición se ha utilizado seis indicadores que recogen las dimensiones de calidad asistencial, funcionamiento y sostenibilidad económica de la práctica clínica. Estos seis indicadores son: los índices de mortalidad (IMAR), complicaciones (ICAR) y readmisiones (IRAR) ajustados por riesgo, por lo que respecta al análisis de la calidad asistencial; la estancia media ajustada por casuística y severidad (EMACS), y el índice de cirugía sin ingreso, en lo referente al análisis del funcionamiento hospitalario; y el coste por unidad de producción ajustado, indicador de la sostenibilidad económica de las prácticas clínicas analizadas. En la evaluación de hospitales privados no se ha valorado la actividad de hospitalización de día y a domicilio. A continuación se presenta la metodología de los 6 indicadores utilizados. Indicadores de calidad asistencial Iasist © 2008. 5 Índice de mortalidad ajustado por riesgo (IMAR) En tanto que uno de los resultados posibles en los procesos asistenciales hospitalarios es la muerte, este indicador mide como la mortalidad observada en el hospital se corresponde con la mortalidad esperada en función, tanto de las características de los pacientes atendidos, como del hospital tratante. El objetivo de realizar comparaciones válidas de la calidad de los servicios médicos de los hospitales, impone la necesidad de ajustar estas medidas entre centros, en función de las diferencias atribuibles a la distinta casuística y la distinta severidad de los casos atendidos1. Es, asimismo, necesario tener en cuenta las características que pueden estar relacionadas con la prestación de los servicios médicos, como la ubicación geográfica, el tamaño del centro hospitalario, si se trata de un hospital que realiza formación postgraduada y el tipo de comunidad a la que sirve, y que no dependan directamente de la casuística tratada. El método utilizado por IASIST utiliza información de cada uno de los pacientes, con el fin de controlar de manera eficaz las diferencias de la casuística y severidad tratadas mediante la evaluación de los códigos de diagnóstico y procedimientos CIE-9-MC, y de ajustar la severidad en cada uno de los grupos clínicos. Los pacientes son comparados con otros pacientes de similares características respecto a edad, sexo, diagnóstico principal, procedimientos recibidos y comorbilidades, para realizar, de este modo, comparaciones esperadas o normativas. Otro objetivo de esta metodología es asegurar, además, que los centros sanitarios puedan compararse con otros de características similares. Dicha metodología ha sido ampliamente probada en EE.UU. y ha demostrado su capacidad para realizar comparaciones normativas válidas basándose en datos administrativos de fácil obtención que no precisan, por tanto, de una recogida de datos adicionales. El establecimiento de modelos matemáticos eficaces en la predicción del riesgo individual de muerte de los pacientes ha sido un objetivo perseguido desde mediados de la década de los 80, comenzando con el desarrollo de metodologías destinadas a medir el riesgo de muerte de los pacientes tratados en las Unidades de cuidados intensivos, a partir de la severidad demostrada por la desviación en los parámetros fisiológicos2 o de determinadas características clínicas de los pacientes a su ingreso en las UCI3 y siguiendo con metodologías aplicables, con escasas restricciones, a la totalidad de los pacientes tratados en un hospital de agudos4 5, se han aplicado modelos basados mayoritariamente en técnicas de regresión logística Iasist © 2008. 6 múltiple, que requieren tan solo la información rutinariamente recogida en el CMBD. El IMAR desarrollado por IASIST se basa, por un lado, en la información existente en nuestra base de datos nacional de hospitalización de agudos del año 2006, que contiene la información del CMBD de 2.641.064 altas de 210 hospitales y en la información de la estructura hospitalaria publicada por el Ministerio de Sanidad en el Catálogo Nacional de Hospitales. Utilizando esta información construimos una base de datos que incluye edad, sexo, la circunstancia de ingreso, códigos CIE-9MC del diagnóstico principal y de los diagnósticos secundarios, códigos CIE-9-MC de los procedimientos, identificación del hospital y estado al alta. Esta información es enlazada, a partir del código nacional de identificación del hospital, con la base de datos del Catálogo Nacional de Hospitales para los datos de ubicación y dotación tecnológica. Se calculan las tasas de mortalidad específicas de cada código CIE-9-MC de la base de datos normativa de IASIST (en adelante, la denominaremos Norma). Se utilizan modelos de regresión logística múltiple para calcular el riesgo de muerte para cada paciente. El modelo logístico empleado en el programa Hospitales Top 20 se ha basado en la información de actividad de hospitalización de agudos del año 2006. Se ha desarrollado un modelo logístico general, aplicable a la totalidad de la casuística hospitalaria, con excepción de los neonatos, y un modelo específico, aplicable a los neonatos. Las únicas condiciones de exclusión de estos modelos han sido las derivadas de la calidad de información (errores en las variables independientes: edad, sexo, diagnósticos, procedimientos, circunstancia de alta, etc.), los pacientes trasladados a otro centro de agudos, los pacientes con estancia inferior a 1 día y los pacientes médicos con diagnóstico principal de neoplasia maligna, las unidades de curas paliativas y los pacientes con hospitalización a domicilio. El modelo general recoge las variables independientes: edad, sexo, riesgo de muerte del diagnóstico principal, riesgo de muerte del diagnóstico secundario con máximo riesgo, riesgo de muerte del procedimiento con máximo riesgo, circunstancia de admisión (urgente/no urgente), tipo de GRD (quirúrgico/no quirúrgico), nivel del hospital, ámbito rural o urbano y si el centro deriva o no pacientes a otros centros de larga estancia; mientras que el modelo destinado a neonatos contempla aspectos más específicamente relacionados con estos procesos, como el peso del neonato, el número de diagnósticos presentes, la Iasist © 2008. 7 presencia de malformaciones congénitas, de infecciones neonatales, enfermedad respiratoria, hemorragia cerebral, etc. En estos modelos se han derivado los pesos de cada una de las variables relacionadas estadísticamente con la mortalidad de los pacientes y el valor del interceptor que se ha empleado en el cálculo de la mortalidad esperada en la actividad del año 2007 de cada uno de los centros analizados. Esta probabilidad esperada de muerte se basa en la experiencia en la Norma para pacientes de similares características (edad, sexo, diagnósticos, procedimientos, circunstancia de admisión, tipo de proceso) en instituciones similares (tamaño del hospital, organismo sanitario responsable de la asistencia, docencia postgraduada, localización rural o urbana, etc.). Sumarizando para cada centro las probabilidades de muerte de cada uno de los pacientes, se obtiene el número de pacientes que en función de sus características clínicas, demográficas, y tras ajustar por las características del centro tratante, se esperaría que fallecieran. El IMAR es el cociente entre el número de pacientes efectivamente fallecidos y el número de pacientes que se esperaría que falleciesen. Ejemplos: 10 fallecimientos observados / 10 fallecimientos esperados = 1.0 El número observado de eventos es igual al número esperado basado en la experiencia de la norma 10 fallecimientos observados / 5 fallecimientos esperados = 2.0 El número observado de eventos es el doble al número esperado basado en la experiencia de la norma 10 fallecimientos observados / 25 fallecimientos esperados = 0.4 El número observado de eventos es un 60% inferior al número esperado basado en la experiencia de la norma En consecuencia, un índice de 1.0 indica que no existen diferencias entre el resultado observado en un hospital y el esperado de acuerdo con la mortalidad encontrada en la Norma de referencia. Un índice mayor que 1.0 indica un exceso en el número observado versus el número esperado, basado en la experiencia de la Norma. Un índice inferior a 1.0 indica menos fallecimientos observados que los que se esperarían basándonos en la experiencia de la Norma. Es asimismo posible interpretar la diferencia entre 1 y el índice obtenido como el porcentaje inferior o Iasist © 2008. 8 superior de fallecimientos con relación a la Norma. En otras palabras, un índice de 1.05 indica un 5% más de mortalidad y un índice de 0.9 indica un 10% menos de mortalidad que la esperada basada en la experiencia de la Norma. Existe una serie de factores empíricos que deben ser examinados para asegurar el buen funcionamiento del modelo escogido, generalmente con relación a la calibración y discriminación. La calibración se refiere a la concordancia entre los valores predichos por el modelo y los valores observados en la muestra. En otras palabras, determinar si el resultado predicho se ajusta al resultado observado. La discriminación se refiere a la capacidad del modelo para diferenciar correctamente a los pacientes que experimentan un determinado resultado (muerte, en este caso) respecto a los que no lo experimentan. El resultado predicho global es la primera medida de calibración del modelo. La tasa esperada debe ser similar a la tasa observada en la muestra y a la que conocemos en la población problema. La sensibilidad, la especificidad y el porcentaje de casos correctamente clasificados ofrecen, cada uno, una diferente perspectiva. La sensibilidad mide el porcentaje de pacientes correctamente clasificados entre aquellos que presentan el resultado medido (muerte). La especificidad se refiere al porcentaje de pacientes correctamente clasificados entre aquellos que no presentan el resultado medido. El porcentaje de casos correctamente clasificados describe el porcentaje de pacientes en los cuales el resultado predicho es similar al observado. Estas tres medidas estadísticas utilizan el resultado observado como el umbral, o valor de punto de corte, para asignar el resultado predicho. 25% 1,0 R2 = 0,999 0,8 Sensibilidad Mortalidad esperada 20% 15% 10% 5% 0% 0% 0,6 0,4 0,2 5% 10% 15% 20% 25% Mortalidad observada Comparación de la mortalidad observada 0,0 0,0 0,2 0,4 0,6 0,8 1,0 1 - Especificidad Curva ROC del modelo IMAR respecto a la esperada Iasist © 2008. 9 El área bajo la curva ROC, donde el área máxima es 1, es un importante dato estadístico de medida de discriminación del modelo. Está directamente relacionada con la sensibilidad y especificidad del modelo. Estos parámetros con relación al modelo del IMAR aplicado en el Top 20 muestran unos valores que indican un correcto funcionamiento del modelo desarrollado, la mortalidad observada es del 2,9%, en tanto que la esperada es del 3,2%, la proporción de episodios correctamente clasificados es del 82%, la sensibilidad del 91,5%, la especificidad del 81,6% y el área bajo curva de 0,937. Midiendo la bondad de ajuste (calibración) del modelo como la correlación al cuadrado (R2) entre mortalidad observada y esperada, tras estratificar todos los casos en 10 deciles de riesgo creciente, el valor es de 0,999. Índice de complicaciones ajustado por riesgo (ICAR). De modo similar al índice anterior, este indicador mide en qué grado las complicaciones producidas durante el proceso asistencial efectivas superan o son inferiores a las esperadas, de acuerdo con las características tanto de los pacientes atendidos como de los centros tratantes. El cálculo del indicador viene dado por el cociente entre el número de episodios que presentan algún tipo de complicación y el número de episodios con complicación esperados, de acuerdo con el riesgo individual de cada uno de los pacientes atendidos. El ICAR es otro modelo que calcula el riesgo que tiene cada paciente de presentar una complicación y permite, por tanto, estimar las complicaciones esperadas dada una población atendida por un hospital. Se evalúan dos 'complicaciones tipos centinela' de y complicaciones las en 'complicaciones el proceso ajustadas asistencial, por riesgo'. las Las complicaciones centinela son resultados que, independientemente del tipo de episodio tratado, no deberían ocurrir e indican un patrón de cuidados subestándar. Ejemplo de las mismas son la reacción transfusional por incompatibilidad ABO o el extravío de un cuerpo extraño en el interior de un paciente tras intervención. Las denominadas complicaciones ajustadas por riesgo se refieren a resultados que Iasist © 2008. 10 pueden considerarse como complicación sólo en función del resto de información del proceso asistencial. Ejemplo de este tipo de complicaciones sería la hemorragia digestiva como complicación gastrointestinal en postoperatorio; sólo se consideraría si existiese un código de diagnóstico secundario de hemorragia digestiva, en un episodio clasificado en un GRD quirúrgico que no pertenezca a la Categoría Diagnóstica Mayor de sistema digestivo o hepatobiliar y pancreático y que coexista con un código de diagnóstico secundario que indique que la hemorragia es una complicación del proceso asistencial. El listado completo de complicaciones consideradas en el modelo ICAR se exponen en la tabla 1. Tabla 1. Complicaciones del modelo ICAR Complicaciones Ajustadas por Riesgo Complicaciones postoperatorias relacionadas con el tracto urinario Complicaciones pulmonares postoperatorias Hemorragia gastrointestinal postoperatoria o ulceración tras cirugía no gastrointestinal Úlcera decúbito Septicemia, absceso o infección de herida en postoperatorio Neumonía por aspiración Anormalidades cardíacas en postoperatorio excepto IAM Complicación mecánica debida a dispositivo, implante o injerto, excepto transplante de órgano Complicaciones quirúrgicas misceláneas Complicaciones misceláneas Shock post o intra operatorio debido a la anestecia Complicaciones postoperatorias relacionadas con el sistema nervioso central o periférico Infarto agudo de miocardio en postoperatorio Perforación o laceración relacionada con procedimiento Trastornos fisiológicos y metabólicos en postoperatorio Estupor o coma postoperatorio Neumonía postoperatoria Complicaciones relacionadas con agentes anestésicos y otros depresores del SNC Trombosis venosa y embolismo pulmonar Hemorragia ohematoma tras procedimiento Caída o fractura de cadera intrahospitalaria Complicación tras procedimiento de otros sistemas orgánicos Complicaciones relacionadas con la medicación Complicación de trasplante de órgano Reabertura de herida operatoria Complicaciones Centinela Iasist © 2008. 11 Gangrena gaseosa Absceso del sistema nervioso central Lesión anóxica cerebral Cuerpo extraño dejado accidentalmente durante un procedimiento Reacción de incompatibilidad ABO Reacción de incompatibilidad Rh Embolia gaseosa que complica atención médica Reacción aguda a sustancia extraña dejada accidentalmente durante un procedimiento El modelo ICAR empleado en el programa Top 20 se ha basado en la información de actividad de hospitalización de agudos del año 2006 de 210 hospitales, que incluye 2.641.064 altas. Se ha desarrollado un modelo logístico general, aplicable a la totalidad de la casuística hospitalaria, con excepción de los procesos obstétricos y pediátricos y un modelo específico, aplicable a los partos vaginales con complicaciones. Las únicas condiciones de exclusión de estos modelos han sido las derivadas de la calidad de información (errores en las variables independientes, edad, sexo, diagnósticos, procedimientos, circunstancia de admisión o circunstancia de alta), los pacientes trasladados a otro centro de agudos, los pacientes con estancia inferior a 1 día y la casuística clasificada en GRD de rehabilitación, enfermedad mental y abuso de alcohol o drogas. El ICAR utiliza como variable dependiente la presencia o ausencia de complicación y como variables independientes: edad, sexo, riesgo de complicación del diagnóstico principal, riesgo de complicación del diagnóstico secundario con máximo riesgo, riesgo de complicación del procedimiento con máximo riesgo, circunstancia de admisión (urgente/no urgente), tipo de GRD (quirúrgico/no quirúrgico), nivel del hospital, ámbito rural o urbano y número de diagnósticos por alta del centro. Los parámetros de calibración y discriminación, anteriormente explicados con respecto al modelo IMAR, y adaptados al modelo de ICAR aplicado en el Top 20 muestran unos valores que indican un correcto funcionamiento del modelo desarrollado. La proporción de episodios con complicación es del 3,4%, en tanto que la proporción esperada es del 3,5%, la proporción de episodios correctamente clasificados es del 84,5%, la sensibilidad del 73,2%, la especificidad del 84,3% y el área bajo curva de 0,86. Midiendo la bondad de ajuste (calibración) del modelo como la correlación al cuadrado (R2) entre complicaciones observadas y esperadas, tras estratificar todos los casos en 10 deciles de riesgo creciente el valor es de 0,998. Iasist © 2008. 12 25% R = 0,99827 20% 0,8 15% Sensibilidad Complicaciones esperadas 1,0 2 10% 5% 0,6 0,4 0,2 0% 0% 5% 10% 15% 20% 0,0 0,0 25% 0,2 Complicaciones observadas 0,4 0,6 0,8 1,0 1 - Especificidad Comparación de la mortalidad observada Curva ROC del modelo IMAR respecto a la esperada El ICAR supone un claro avance respecto a los indicadores tradicionales que medían la tasa de complicaciones, puesto que se centra exclusivamente en las complicaciones posiblemente relacionadas con el proceso asistencial (tanto por lo que se refiere a los eventos centinela como a las complicaciones ajustadas por riesgo), separando éstas de las comorbilidades presentes en los distintos pacientes, por lo que cubre de una manera más exhaustiva la dimensión de calidad asistencial. La interpretación de este indicador es análoga a la del índice de mortalidad ajustado por riesgo. Índice de readmisiones ajustado por riesgo (IRAR). Desde el punto de vista de calidad asistencial, es deseable el menor número de readmisiones no programadas que estén relacionadas con el proceso asistencial desarrollado en el episodio hospitalario original. Desde esta perspectiva, la readmisión se define como: una readmisión a 30 días del primer ingreso de un paciente y que ésta se catalogue como urgente al registrar su circunstancia de admisión. De modo similar a los índices anteriores, este indicador pretende la identificación de readmisiones con elevada probabilidad por circunstancias relacionadas con la calidad asistencial, aislando en lo posible las readmisiones motivadas por factores Iasist © 2008. 13 organizativos de la asistencia o inherentes al proceso de cuidados de determinadas patologías. El modelo de readmisiones ajustado por riesgo de IASIST contempla las diferencias en las características de los hospitales y tipo y severidad de los pacientes tratados. El IRAR es el número observado de readmisiones urgentes, a 30 días del episodio de ingreso original y relacionado con ese episodio, dividido por el número esperado de readmisiones de las mismas características, durante los primeros once meses del año 2007, en función de las características del paciente y su patología. Se considera readmisión relacionada: si la CDM de la readmisión es igual a la CDM del episodio origen, a excepción de la CDM 08 que tiene un tratamiento especial, no se considera readmisión relacionada sólo por reingresar en la misma CDM 08, sino que para cada GRD de esta CDM se han seleccionado unos GRD comunes y otros específicos de admisión relacionada; cualquiera de las siguientes combinaciones de CDM de episodio origen y readmisión: CDM episodio origen CDM readmisión 04 05 05 04 07 06 12 11 13 06 14 13 24 08 24 01 y cuando el GRD de la readmisión sea alguno con alta probabilidad de relación con un ingreso anterior próximo en el tiempo, por ejemplo: 015 - ictus transitorios y oclusiones precerebrales 023 - coma y estupor de origen no traumático 089-091 - neumonía simple y pleuritis 320-322 - infecciones del riñón y tracto urinario 449-451 - envenenamiento / efecto toxico de fármacos etc. Iasist © 2008. 14 De las readmisiones relacionadas se excluyen los episodios en los que se involucra la práctica de cateterismo cardiaco según los siguientes criterios: readmisión por cateterismo cardíaco (GRD 124-125); ingreso GRD 124 y readmisión GRD 103-112; e ingreso GRD 125 y readmisión GRD 103-112. El modelo IRAR empleado en el programa TOP 20 se ha basado en la información de actividad de hospitalización de agudos de 208 hospitales, que incluye 2.692.168 altas. De estas altas, un 83% corresponden a actividad del año 2001, mientras que un 11% y un 6% pertenecen a los años 2000 y 1999 respectivamente. Se ha desarrollado un modelo logístico general, aplicable a la totalidad de la casuística hospitalaria. Debido a que en determinadas patologías o procedimientos terapéuticos es esperable la existencia de más de un ingreso hospitalario en la pauta de cuidados, se han creado dos tipos de exclusiones: las exclusiones a priori, es decir, antes de asignar la readmisiones, y las exclusiones a posteriori, después de haber identificado las readmisiones. Las condiciones de exclusión a priori, son los episodios de quimioterapia (GRD 410, 492), SIDA (CDM 25), cáncer (D1 140-239), neonatos (CDM 15), psiquiatría (CDM 19), alcohol y drogas (CDM 20), diálisis (GRD 317), diagnósticos pre-parto (GRD 379, 382-384), leucemia (GRD 400-405, 473), otros trastornos mieloproliferativos y neoplasias mal diferenciadas (GRD 406-408, 413-414), radioterapia (GRD 409), rehabilitación (GRD 462) y GRD inválidos (GRD 468, 469, 470, 476, 477). Las únicas condiciones de exclusión a posteriori de este modelo han sido las derivadas de la calidad de información (errores en las variables independientes, financiador, circunstancia de admisión, circunstancia de alta, sexo o edad), los pacientes trasladados a otro centro de agudos, los exitus y los pacientes con alta en el mes de diciembre, para dar el margen de 30 días para la readmisión, según el criterio establecido. El IRAR utiliza como variable dependiente la presencia o ausencia de una readmisión relacionada a 30 días urgente y como variables independientes: edad, sexo, circunstancia de admisión (urgente/no urgente), probabilidad de readmisión del Diagnóstico Principal en el cual se clasifica el episodio del primer ingreso, probabilidad de readmisión del Diagnóstico Secundario que presenta a su vez una mayor probabilidad de readmisión, probabilidad de readmisión del Procedimiento que presenta a su vez una mayor probabilidad de readmisión, estancia media del primer episodio, financiador del primer episodio, tipo de GRD (quirúrgico/no quirúrgico) y nivel de hospital en el cual ha sido tratado el paciente. Iasist © 2008. 15 1,0 16% R 2 = 0,9934 0,8 12% Sensibilidad Readmisiones esperadas 14% 10% 8% 6% 4% 0,6 0,4 0,2 2% 0% 0% 2% 4% 6% 8% 10% 12% 14% 16% 0,0 0,0 Readmisiones observadas Comparación de la mortalidad observada 0,2 0,4 0,6 0,8 1,0 1 - Especificidad Curva ROC del modelo IMAR respecto a la esperada Los parámetros de calibración y discriminación, anteriormente explicados con respecto al modelo IMAR, y adaptados al modelo de IRAR aplicado en el Top 20, muestran unos valores que indican un correcto funcionamiento del modelo desarrollado. La proporción de episodios con readmisión relacionada a 30 días urgente es del 4,4%, en tanto que la proporción esperada es del 4,2%, la proporción de episodios correctamente clasificados es del 69,1%, la sensibilidad del 70,8%, la especificidad del 69,0% y el área bajo curva de 0,764. Midiendo la bondad de ajuste (calibración) del modelo como la correlación al cuadrado (R2) entre readmisiones observadas y esperadas, tras estratificar todos los casos en 10 deciles de riesgo creciente el valor es de 0,993. La interpretación de este indicador es análoga a la del índice de mortalidad ajustada por riesgo. Indicadores Funcionales Estancia media ajustada por casuística y severidad (EMACS) La estancia media es uno de los indicadores clásicos en la valoración de la eficiencia en la gestión de los recursos de los centros hospitalarios. Es evidente, sin embargo, que la simple utilización de la estancia media bruta de los centros sólo tiene sentido cuando se comparan centros de similares características estructurales, que tratan parecida casuística y sobre pacientes con el mismo grado de severidad. Con la intención de construir un indicador comparable entre hospitales se ha utilizado Iasist © 2008. 16 como indicador la estancia media ajustada por casuística y severidad (EMACS), basado en técnicas de estandarización de tasas por el método directo. Los ajustes de severidad se realizan para este indicador mediante la utilización de los GRD Refinados. Los GRD Refinados permiten la estratificación de los episodios agrupados en un mismo GRD en tres grupos de severidad creciente para los GRD médicos, y en cuatro grupos para los quirúrgicos, de acuerdo con las complicaciones y las comorbilidades que presenta cada uno de los episodios. La agrupación mediante GRD Refinados repercute en una exhaustividad mayor que la que muestra el simple ajuste por GRD cuando se trata de medir la severidad real de los pacientes atendidos por un hospital. La EMACS debe interpretarse como la estancia media que presentaría el hospital si hubiera atendido la misma casuística y severidad (medidas mediante la distribución por GRD Refinados) que su conjunto de comparación con su propia estancia media por GRD y nivel de severidad. Lógicamente, cuanto menor es la EMACS de un hospital respecto a la estancia media del conjunto del grupo de hospitales de referencia, más eficiente es dicho hospital respecto al resto de hospitales de su conjunto de comparación. Índice de cirugía sin ingreso ajustado La Cirugía Sin Ingreso (CSI) permite aumentar el flujo de pacientes intervenidos, liberando camas de hospitalización y reportando menos costes. Desde este punto de vista, tasas de substitución más elevadas se asocian a mayores resoluciones de demanda, pero también a una mayor adecuación a ésta. El nuevo indicador de cirugía sin ingreso se calcula mediante el cociente entre el número de intervenciones efectivamente realizadas en régimen de CSI i el número de intervenciones esperadas, obteniendo las intervenciones de CSI esperadas por hospital mediante un modelo de regresión logística binaria, resolviendo, así, el efecto que pueden tener algunos factores que influyen en el fenómeno de ambulatorización. Los episodios esperados de CSI se obtienen sumando las probabilidades de ambulatorización de cada uno de los episodios atendidos en el hospital. La probabilidad de ser un procedimiento ambulatorizable de cada intervención programada se obtiene por el modelo de regresión logística descrito. Iasist © 2008. 17 Para la selección de los procedimientos ambulatorios se realizó una exploración de todos los procedimientos quirúrgicos de una base de datos del año 2006 con un total de 210 hospitales. Se seleccionaron aquellos procedimientos quirúrgicos programados con alta a domicilio y 0 días de estancia, que presentaban al menos 50 episodios de CSI en un mínimo de 5 hospitales. El modelo de regresión logística tiene como variables independientes: sexo, edad, probabilidad de la combinación del diagnóstico principal y el procedimiento, diagnósticos secundarios, centro público o privado y nivel del hospital. Obtenidas después de un proceso de ajuste en el que se han ido retirando paso a paso todas aquellas variables recogidas en el CMBD que no aportan significativamente explicación de la cirugía sin ingreso. La tasa de cirugía sin ingreso observada en la base de datos con la que se realizó el modelo es del 58%, año 2006. La sensibilidad del modelo (proporción de pacientes en los que se ha predicho las intervenciones sin ingreso entre las que se han realizado) es del 82%. La especificidad del modelo (proporción de pacientes en los que se ha predicho las intervenciones sin ingreso entre los que finalmente han sido ingresados) es del 82%. La capacidad de discriminación del modelo, expresado por el área de la curva ROC por todos los posibles puntos de corte de cirugía sin ingreso es de 0,91. Tanto en el numerador como en el denominador solamente se contabilizan los episodios que no cumplen los criterios de exclusión (considerando episodios de exclusión aquellos con errores en las variables independientes, diagnóstico principal de trastornos mentales, alcohol y drogas, neonatos, quemadazos, infecciones por VIH, traumatismos múltiples, partos y cesáreas Indicador económico Coste por unidad de producción ajustada El coste por unidad de producción ajustada mide la relación entre los gastos de explotación en que incurre el hospital para llevar a cabo su actividad (en el Iasist © 2008. 18 numerador) y la producción efectivamente realizada por el hospital (en el denominador). La información utilizada para el cálculo del indicador, tanto en lo referente a la cifra de gastos de explotación -o capítulos I y II del presupuesto como para la actividad ambulatoria no recogida en el CMBD, se ha obtenido a partir de los cuestionarios rellenados por los hospitales participantes, mientras que la actividad de hospitalización y su complejidad se han obtenido a partir del CMBD de cada hospital. La inexistencia generalizada de contabilidad analítica a nivel de paciente, impide por el momento tratar la productividad de las distintas líneas de producto de forma separada, por lo que el indicador comprende, como denominador, la producción total del hospital ponderada por tipo de asistencia. La ponderación de la casuística total atendida por el hospital pretende convertir los distintos productos realizados por el hospital a una misma unidad de medida frente a la que relacionar los gastos de explotación. Concretamente, la unidad de medida utilizada han sido las unidades de complejidad de la actividad de hospitalización (incluyendo la CMA), medidas mediante la composición del número de altas en cada GRD y el peso medio de dichos GRD, en su versión HCFA 20.0. Posteriormente, se ha convertido el resto de actividad realizada por el hospital a las unidades de complejidad anteriores. La ponderación de las líneas de producto se realiza a partir de estimaciones de coste estándar que provienen de dos estudios realizados en el entorno nacional67 (los cuales muestran ponderaciones realmente parecidas entre líneas de producto) y recoge la actividad relacionada con la cirugía menor ambulatoria, las consultas externas, las urgencias y las sesiones de hospital de día. Las ponderaciones finalmente utilizadas en el cálculo del indicador asumen que una primera visita en consulta externa consume un 3,3% de lo que consume una alta de peso medio unitario, una visita sucesiva un 2%, una intervención de cirugía menor un 3,1%, una urgencia un 4% y una sesión de hospital de día entre un 2,5% y un 8%, dependiendo de la especialidad clínica. Del gasto de explotación total se excluyen las amortizaciones (ante las diferencias registradas en cuanto a criterios de amortización y disponibilidad de la información) y el gasto derivado de los medicamentos administrados en régimen ambulatorio, como por ejemplo los retrovirales o los fármacos para el tratamiento de la fibrosis quística y la esclerosis múltiple (en virtud de su imposible atribución a producto final). Iasist © 2008. 19 Otros indicadores Índice de resolución en consulta externa Con cerca de un 25% de la producción hospitalaria coste-equivalente, la atención especializada ambulatoria realizada en las consultas externas supone un área importante de la actividad hospitalaria actual de la que es posible, además, obtener información mínimamente detalla a partir de los sistemas de información rutinarios. La medida de la resolución clínica del proceso asistencial ambulatorio tiene como objeto analizar cuántas visitas necesita un hospital concreto para ‘solucionar’ el episodio promedio atendido. En una lógica análoga a la Estancia Media en la actividad de hospitalización, la resolución en Consulta Externa pretende suponer una medida indirecta de la productividad de la asistencia ambulatoria, en el sentido en que permite una mayor rotación de procesos atendidos. En ausencia de información a nivel de episodio asistencial, y con la finalidad de normalizar las necesidades de distintas poblaciones atendidas, el indicador utiliza la especialidad clínica (o servicio) como elemento de ajuste, bajo el supuesto que el paciente promedio de cada especialidad presenta distintas necesidades asistenciales. El indicador resulta del cociente entre las visitas sucesivas observadas en el hospital y las visitas esperadas. Éstas últimas son las visitas que se esperaría que tuviera si se comportara como el estándar de comparación; es decir, las visitas que realizaría si atendiera los procesos que efectivamente atiende en cada una de sus especialidades con la relación sucesivas por primera visita de cada especialidad en el estándar de comparación. La interpretación del indicador, en consecuencia, es idéntica a la de los indicadores de calidad incluidos en el programa: valores por encima de 1 indican un ‘sobreconsumo’ relativo de visitas sucesivas respecto al estándar de comparación y valores inferiores a 1 indican un ‘ahorro’ relativo de visitas sucesivas. La consideración de las visitas sucesivas desliga de responsabilidad al hospital sobre el mix de pacientes a los que atiende (las primeras visitas, que se asumen en este caso relacionadas con las necesidades de su población de referencia) y se centra exclusivamente en analizar cómo resuelve el hospital cada proceso concreto comparándolo con la resolución global observada en el estándar. Iasist © 2008. 20 Dadas las distintas estructuras de especialidades asociadas a distintos tipos de hospitales, se ha optado por considerar dos estándares de comparación diferentes (uno para hospitales de referencia y otro para hospitales comarcales y generales) . No ha sido posible, dado el tamaño de la muestra*, trabajar con tantos estándares como grupos de hospitales usados en el Top 20. * Dado que se juzgó imperativo segmentar por especialidad, añadir una variable más de segmentación como el nivel de hospital Top 20, con cinco valores posibles, dejaba muchas especialidades con un número demasiado bajo de observaciones (hospitales) como para extraer medias robustas de tasas de reiteración. En estas circunstancias, se optó por perder comparación entre grupos (resultado de trabajar con estándares agregados en los que salen generalmente mejor valorados los hospitales más pequeños de cada grupo) a expensas de mejorar la robustez de las medidas intragrupo (que son las que se emplean finalmente en la ‘liga’ que juega cada hospital). El método de ordenación Los hospitales incluidos en el estudio se han ordenado de acuerdo con la suma de los valores normalizados obtenidos para los distintos indicadores. Así, el método de ordenación utilizado tiene en cuenta las distancias existentes entre cada uno de los hospitales y el resto, para los distintos indicadores, más allá de la posición. Para cada nivel de hospitales, se han estandarizado los valores obtenidos por cada hospital en cada indicador y se han sumado estos valores. En las variables en que los valores más deseados son los más bajos, en vez de sumarse, se restan. De esta manera, los hospitales con una suma superior corresponden a los hospitales Top ("Benchmark") del nivel correspondiente. Se excluyen de la posición de hospital TOP aquellos centros que presentan alguna de las siguientes características: En los indicadores de calidad asistencial un valor superior a 1,40. Es decir, aquellos hospitales que presentan índices de mortalidad, complicaciones y readmisiones ajustadas superiores en un 25% o más a los valores esperados. Un promedio de diagnósticos codificados inferior a 1,75. Iasist © 2008. 21 Un porcentaje de altas no agrupables (GRD 470) superior al 5%. Ausencia de altas de actividad de Cirugía Mayor Ambulatoria. Por qué lo utilizamos Cálculo Comentario Valores favorables Indicadores de calidad asistencial Índice de mortalidad ajustado por riesgo (IMAR) Este El número de pacientes El muestra indicador cuándo se fallecidos mortalidad ajustada por producen muertes de año 2007 dividido por riesgo pacientes no esperadas el número esperado de contempla en las pacientes fallecidos en diferencias los función del riesgo de características muerte hospitales, y el tipo y función de características de nos mismos. durante de el cada paciente individual. modelo de de Inferiores a la mediana. Iasist las en severidad de de las los los pacientes tratados. Índice de complicaciones ajustado por riesgo (ICAR) El ICAR nos muestra El número de pacientes El cuándo con complicaciones se producen complicaciones no complicación durante el año 2007 modelo de ajustadas por riesgo de función dividido por el número Iasist de las características de esperado de pacientes diferencias los pacientes. con complicaciones en características función del riesgo de hospitales, y el tipo y complicación severidad esperadas en de cada Inferiores a la mediana. contempla en de de las las los los pacientes tratados. paciente individual. Índice de readmisiones ajustado por riesgo (IRAR) Desde el punto de vista El número observado de calidad asistencial, de readmisiones identificación de es deseable el menor urgentes, a 30 días del readmisiones por número de episodio circunstancias readmisiones no de ingreso El modelo maximiza la original y relacionadas relacionadas programadas que estén con calidad relacionadas dividido por el número aislando en lo posible esperado de las readmisiones, en motivadas por factores proceso desarrollado episodio original. con el asistencial en el hospitalario dicho función del episodio, riesgo individual del paciente. con Inferiores a la mediana. la asistencial, readmisiones organizativos de asistencia. modelo de El la readmisiones ajustadas por riesgo de Iasist contempla diferencias características en de las las los hospitales, y el tipo y severidad de los pacientes tratados. Iasist © 2008. 22 Indicadores de funcionamiento Estancia media ajustada por casuística y severidad (EMACS) Una menor estancia media ajustada riesgo y La estancia media que La estandarización por presentaría un hospital directa de los pacientes severidad si tratara la distribución atendidos se indica, por lo general, de casos por GRD y mediante los un clase de severidad de refinados, su desagregan consumo eficiente de recursos así más los hospitalarios como un grupo de comparación. Inferiores a la mediana. realiza GRD que los GRD médicos en tres niveles menor de severidad y los GRD riesgo para el paciente. quirúrgicos en cuatro. Índice de cirugía sin ingreso ajustado (ICSIA) Para medir la Cociente entre Superiores permite mediana. aumentar el número la actividad del hospital correspondientes hacia intervenciones intervenidos, liberando ambulatorios, en razón quirúrgicas mayores sin camas de ingreso observadas y el hospitalización número reportando su mayor coste- efectividad. episodios La Cirugía sin Ingreso orientación efectiva de servicios de el a de flujo de de y unos menores quirúrgicas mayores sin aquellos. ingreso punto de vista, índices atendidos por cada de la pacientes intervenciones esperadas a costes Desde sustitución a este más elevados se asocian a hospital. mayores de resoluciones demanda, pero también a una mayor adecuación a esta. Indicador de sostenibilidad de la práctica clínica Coste por unidad de producción ajustada cociente convierte los realizada un el total de actividad, distintos productos del hospital y los gastos en ponderada de acuerdo hospital a unidades de que éste incurre para con su coste estándar producción realizarla. estimado, realizada por homogéneas, cada función uno de los del gastos de explotación y hospitales. entre denominador El relación la producción por cociente El Este indicador pone en los de Inferiores a la mediana. en su coste esperado. Iasist © 2008. 23 Bibliografía: 1. David Foster. Comparación de metodologías: Grupos relacionados con el diagnóstico refinados (R-GRD) de HCIA versus los All-Patient grupos relacionados con el diagnóstico refinados (APR-DRG) de 3M. Revista de Calidad Asistencial 1999;14:9-13. 2. Knaus WA, Draper EA, Wagner DP, et al. An evaluation of outcome from intensive care in major medical centers. Ann Intern Med 1986;104:410 Lemeshow, S. Teres, D. 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