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Aguilar Ramírez MP, et al. Directorio Editor Fundador Dr. José Manuel Correa Rovelo Editor Dr. Nahum Méndez Sánchez Coeditores Dr. Héctor Baptista González Dr. Raúl Carrillo Esper Dr. Paris Troyo Barriga Dr. Norberto Chávez Tapia Consejo Editorial Dr. Misael Uribe Esquivel Dr. Rubén Cortés González Dr. Luis Guevara González Dr. Jaime Arriaga Gracia Dr. Guillermo Castorena Arellano Dr. Manuel Martínez López Comité Editorial Dr. Luis Pablo Alessio Robles Dr. Sebastián Carranza Lira Dr. Dan Green Renner Dr. Luis Guevara Arnal Dr. Enrique Lara Oliver Dr. Javier Lizardi Cervera Dr. Mucio Moreno Portillo Dr. Ernesto Roldán Valadez Dra. Alejandra Rosete Reyes Dr. Luis Enrique Soto Ramírez Dr. Alfonso Vargas Rodríguez Dr. Rafael Vidal Tamayo Ramírez Dra. Carmen Zavala García Editores invitados Q.F.B. Carla Paulin Saucedo Dra. Jimena Muciño Bermejo Dra. Coral López y Martínez Dr. Omar Pérez Enríquez MÉDIC A SUR SOCIED AD DE MÉDICOS, A.C. MÉDICA SOCIEDAD Mesa Directiva 2010-2012 PRESIDENTE VICEPRESIDENTE SECRETARIO Dr. Paris Troyo Barriga Dr. Juan Nader Kawachi Dr. Carlo Pane Pianese PROSECRETARIO TESORERO PROTESORERO Dr. Luis Fernando Oñate Ocaña Dr. Martín Tulio Santa Rita Escamilla Dr. José Manuel Correa Rovelo SECRETARIO DE ACTAS PROSECRETARIA DE ACTAS Dr. Dan Green Renner Dra. Sara Eugenia Manjarrez Gómez COORDINACIÓN DE CREDENCIALIZACIÓN Y EDUCACIÓN MÉDICA CONTINUA ESTRATEGIAS ADMINISTRATIVAS Y RELACIONES PÚBLICAS Lic. Ma. Teresa Olvera Vargas Dra. Carmina Zavala García Médica Sur es el Órgano Oficial de Médica Sur Sociedad de Médicos, A.C. publicación trimestral. Los artículos y fotografías son responsabilidad exclusiva de los autores. La reproducción parcial o total de este número podrá hacerse siempre que se cite a la Revista y su Autor como fuente. Toda correspondencia debe dirigirse al Editor de la Revista a: Puente de Piedra No. 150, Col. Toriello Guerra, Del.: Tlalpan, C.P. 14050 México, D.F. Editor responsable: Dr. Nahum Méndez Sánchez. Núm. de certificado de licitud de título (En trámite). Núm. de certificado de licitud de contenido: (En trámite). Núm. de reserva al título de derechos de autor: 04-2008-062315024500-102. Revista de Investigación Médica Sur se encuentra compilada en internet en: IMBIOMED. Arte, diseño editorial, composición tipográfica, proceso fotomecánico, impresión y acabado por CONSORCIO EDITORIAL EL LEON LOM SHALOM LOM,, S.A. de C.V. Correo electrónico: rojimgpe1@hotmail.com • g.rosales.j@hotmail.com Oficinas en: Calle Oroya DE SHA No. 610. Col. Lindavista. C.P. 07300. México, D.F. Tel.: 5012-3360 y 5752-2918. 1 Revista de Investigación Médica Sur, México CONTENIDO Vol. 19, No. 1, Enero-Marzo, 2012 ARTÍCULOS ORIGINALES Evaluación de la calidad de vida en pacientes postoperados de reconstrucción de la vía biliar mediante el Cuestionario SF-36 .................................................................................. 4 Miguel Ángel Martínez-Flores, Manuel Cerón-Rodríguez, Martha Laura Ramírez-Montiel, Nilson Agustín Contreras-Carreto Manejo de dispositivo intrauterino traslocado ............................................................................... 7 Brenda Iliana García-López, Mauricio Pichardo-Cuevas, María Esther Meza-López, Nilson Agustín Contreras-Carreto Storage-induced morphological changes in erythrocytes ............................................................... 10 Raúl Carrillo-Esper, Carlos Alberto Carrillo-Córdova, Jorge Raúl Carrillo-Córdova, Luis Daniel Carrillo-Córdova ARTÍCULO DE REVISIÓN Trombocitopenia inducida por heparina ....................................................................................... 15 Raúl Carrillo-Esper, Verónica Zárate-Vega, Thania Medrano-del-Ángel, Gabriela Andrade-Montes de Oca CASOS PROBLEMA Tumor de Krukenberg como manifestación de cáncer gástrico .................................................... 23 Víctor J. Visag-Castillo, Diego M. García-Vivanco, Martín Tulio Santarita-Escamilla, Amado de Jesús Athié-Athié, José Manuel Correa-Rovelo Evaluación de un caso de epilepsia del lóbulo temporal medial con esclerosis hipocampal ....................................................................... 28 Nancy Edith Aguilar-Olivos, Mariana Muñoz-Monterd, Juan Carlos García-Reyna, Leticia Munive-Baez, Carlos Pla-Casamitjana, Ernesto Roldán-Valadez CASO CLÍNICO Cambios electrocardiográficos como marcadores de reperfusión en infarto agudo del miocardio con elevación del segmento S-T después de fibrinólisis con tenecteplasa ...................................................................................... 32 Daniel Aguilar-Zapata, Octavio González-Chon, Javier Sánchez-Zavala, Lidia Moreno-Castañeda, Sandra García-López ALGORITMO MÉDICO-QUIRÚRGICO Diarrea crónica: Algoritmo de abordaje diagnóstico ..................................................................... 34 Ome Zitlalli Pérez-Gutiérrez IMÁGENES EN MEDICINA Hydronephrosis and pyelonephritis in a pregnant woman: a proposal of MR urography clinical applications .......................................................................... 38 Rocío Ramírez-Carmona, Manuel Martínez-López, Ernesto Roldán-Valadez CONTENTS Vol. 19, No. 1, January-March, 2012 ORIGINAL ARTICLES Evaluation of quality of life in patients underwent reconstruction the bile duct using the SF-36 ................................................................. 4 Miguel Ángel Martínez-Flores, Manuel Cerón-Rodríguez, Martha Laura Ramírez-Montiel, Nilson Agustín Contreras-Carreto Translocated intrauterine device management ............................................................................. 7 Brenda Iliana García-López, Mauricio Pichardo-Cuevas, María Esther Meza-López, Nilson Agustín Contreras-Carreto Storage-induced morphological changes in erythrocytes ............................................................... 10 Raúl Carrillo-Esper, Carlos Alberto Carrillo-Córdova, Jorge Raúl Carrillo-Córdova, Luis Daniel Carrillo-Córdova REVIEW ARTICLE Heparin-induced thrombocytopenia ............................................................................................. 15 Raúl Carrillo-Esper, Verónica Zárate-Vega, Thania Medrano-del-Ángel, Gabriela Andrade-Montes de Oca CASE REPORTS Krukenberg tumor as a manifestation of gastric cancer ............................................................... 23 Víctor J. Visag-Castillo, Diego M. García-Vivanco, Martín Tulio Santarita-Escamilla, Amado de Jesús Athié-Athié, José Manuel Correa-Rovelo Evaluation of a case of lobe epilepsy medial temporal hippocampal sclerosis ....................................................................................... 28 Nancy Edith Aguilar-Olivos, Mariana Muñoz-Monterd, Juan Carlos García-Reyna, Leticia Munive-Baez, Carlos Pla-Casamitjana, Ernesto Roldán-Valadez CLINICAL CASE ECG changes as markers reperfusion in acute myocardial infarction segment elevation ST after fibrinolysis with tenecteplase ............................................................................................... 32 Daniel Aguilar-Zapata, Octavio González-Chon, Javier Sánchez-Zavala, Lidia Moreno-Castañeda, Sandra García-López MEDICAL-SURGICAL ALGORITHM Chronic diarrhea: Diagnosis algorithm approach .......................................................................... 34 Ome Zitlalli Pérez-Gutiérrez IMAGES IN MEDICINE Hydronephrosis and pyelonephritis in a pregnant woman: a proposal of MR urography clinical applications .......................................................................... 38 Rocío Ramírez-Carmona, Manuel Martínez-López, Ernesto Roldán-Valadez Evaluación posquirúrgica mediante el Cuestionario SF-36 ARTÍCULO ORIGINAL Evaluación de la calidad de vida en pacientes postoperados de reconstrucción de la vía biliar mediante el Cuestionario SF-36 Miguel Ángel Martínez-Flores,* Manuel Cerón-Rodríguez,** Martha Laura Ramírez-Montiel,*** Nilson Agustín Contreras-Carreto**** RESUMEN ABSTRACT Introducción. La lesión de vía biliar se define como el desgarro o sección de la misma en algún punto con o sin fuga biliar. Su incidencia fluctúa del 0.25 a 0.35%. Las secuelas son catastróficas tanto para el paciente como para el cirujano. La morbilidad asociada incluye: estenosis, hipertensión portal e incluso cirrosis hepática. Objetivo. Evaluar la calidad de vida en pacientes postoperados de reconstrucción de vía biliar por lesión incidental. Material y métodos. Se evaluó la calidad de vida mediante el uso del Cuestionario SF-36 versión 2.0 aplicado por vía telefónica a aquellos pacientes postoperados de reconstrucción de vía biliar por lesión incidental, atendidos en el Servicio de Cirugía General del Centro Médico Nacional 20 de Noviembre, ISSSTE, durante el 1 de enero 2003 al 1 enero 2008. Resultados. Se evaluaron 32 pacientes, 75% mujeres (n = 24) y 25% hombres (n = 8). La media de edad fue 52.4 ± 14.01 años. Resultados en el Cuestionario SF-36: función física 87.5 ± 16.22 puntos, desempeño físico 82.03 ± 23.65 puntos, dolor físico 55.1 ± 19.98 puntos, salud general 52.32 ± 19.98 puntos, vitalidad 68.32 ± 21.94 puntos, función social 70.93 ± 19.53 puntos, desempeño emocional 56.33 ± 20.48 puntos y salud mental 70.93 ± 19.82 puntos. Conclusiones. Los pacientes postoperados de reconstrucción de vía biliar presentan una buena calidad de vida, con un adecuado estado de salud física y mental que permitió reintegrar al paciente a una vida productiva. Evaluar la calidad de vida secundaria a procedimientos quirúrgicos es indispensable para incrementar la calidad asistencial y la satisfacción de los pacientes. En este estudio se propone el cuestionario SF-36 versión 2.0 como un instrumento de evaluación útil para este fin. Introduction. The bile duct injury is defined as the tearing or section of it at some point with or without bile leakage. Its incidence ranges from 0.25 to 0.35%. The consequences are catastrophic for both the patient and surgeon. The morbidity included: stricture, portal hypertension and even liver cirrhosis. Objective. To assess the quality of life in patients postoperative biliary reconstruction incidental injury. Material and methods. We assessed the quality of life using the SF-36 version 2.0 applied by telephone to patients postoperative biliary reconstruction incidental injury treated at the Department of Surgery, National Medical Center 20 de Noviembre, ISSSTE , Mexico City, during the period from 1 January 2003 to 1 January 2008. Results. We evaluated 32 patients, 75% (n = 24) women and 25% (n = 8) men. The mean age was 52.4 ± 14.01 years. Results in the SF-36: physical functioning 87.5 ± 16.22 points, role-physical 82.03 ± 23.65 points, bodily pain 55.1 ± 19.98 points, general health 52.32 ± 19.98 points, vitality 68.32 ± 21.94 points, social functioning 70.93 ± 19.53 points, role-emotional 56.33 ± 20.48 points and mental health 70.93 ± 19.82 points. Conclusions. The patients postoperative biliary reconstruction have good quality of life, with a proper state of physical and mental health that allowed the patient to reintegrate a productive life. To assess the quality of life secondary to surgical procedures is essential to increase the quality of care and patient satisfaction. This study proposes the SF-36 version 2.0 as an assessment tool useful for this purpose. Palabras clave. Lesión incidental de vía biliar. Calidad de vida. Key words. Incidental bile duct injury. Quality of life. *Departamento de Cirugía, Hospital Ángeles Metropolitano. **Servicio de Cirugía, Centro Médico Nacional 20 de Noviembre, ISSSTE y Clínica de Hígado y Vías Biliares del Valle. ***Servicio de Ginecología, Hospital de la Mujer, Secretaría de Salud. **** Servicio de Medicina Interna, Hospital de la Mujer, Secretaría de Salud. Correspondencia: Dr. Nilson Agustín Contreras-Carreto Clínica de Hígado y Vías Biliares del Valle. Capulín, Núm. 30 Mezzanine, Col del Valle. C.P. 03100, México, D.F. Correo electrónico: manuelceron2009@hotmail.com 4 Rev Invest Med SurEnero-Marzo Mex, 2012; 19 (1): 4-6 Rev Invest Med Sur Mex, 2012; 19 (1): 4-6 Martínez-Flores MA, et al. INTRODUCCIÓN OBJETIVO Se define como lesión de vía biliar al desgarro o sección de la misma con o sin fuga de material biliar. Es una complicación con baja incidencia, pero con serias repercusiones clínicas, psicológicas, sociofamiliares, asistenciales, económicas, jurídicas y laborales.1,2 Su incidencia se estima entre 0.1-0.3% y se presenta durante una colecistectomía hasta en 80% de los casos. Es más frecuente durante la cirugía laparoscópica con una incidencia de 0.3-0.6%. Para valorar su gravedad existen múltiples clasificaciones, entre las más utilizadas están la de Amsterdam y la de Bismuth.1-6 El diagnóstico suele realizarse en el intraoperatorio hasta en 12-46%. Esta lesión debe sospecharse cuando durante la revisión del campo operatorio se detecta bilis.7 En el postoperatorio se diagnostica en 10% durante la primera semana y 70%, en los primeros seis meses.1,2 De modo general, la ictericia postoperatoria inmediata se debe a falla quirúrgica, salvo muy raras excepciones. La lesión de vía biliar es catastrófica y puede convertir al paciente en un lisiado biliar, ya que siempre existirá el riesgo de estenosis, disfunción de la vía biliar, intentos fallidos de la reparación, reestenosis, hipertensión portal con riesgo de hemorragia y finalmente cirrosis; impacta negativamente en la calidad de vida en estos pacientes. En la actualidad se considera como salud y buena calidad de vida a la ausencia de enfermedad o defecto y a la sensación de bienestar físico, mental y social. De este modo, calidad de vida se define como el “sentimiento personal de bienestar y satisfacción con la vida”.8-10 La valoración adecuada de calidad de vida ha llevado a elaborar instrumentos que permitan su medición.8-9 El Cuestionario SF-36 es el instrumento genérico más utilizado por su fácil administración. Consta de 36 ítems con respuestas en escala variable tipo Likert, el cual permite obtener información acerca de ocho dimensiones que incluyen: función física, papel físico, dolor corporal, salud general, vitalidad, función social, papel emocional y salud mental.8,9,11,12 Su valor alfa de Cronbach demostró una confiabilidad global con coeficiente de 0.93. Cada dominio de este instrumento superó el valor alfa mínimo requerido para una buena consistencia interna. Las puntuaciones de cada una de las ocho dimensiones oscilan entre 0-100 puntos; el 100 es un resultado que indica una salud óptima y cero refleja un estado de salud precario. Existen versiones simplificadas del SF-36 en las que se reduce el número de preguntas.8,9,11,13 Evaluar la calidad de vida en pacientes postoperados de reconstrucción de vía biliar por lesión incidental mediante el uso del Cuestionario SF-36 versión 2.0 en español. MATERIAL Y MÉTODOS Se realizó un estudio retrospectivo, observacional, descriptivo y analítico realizado en una muestra de pacientes postoperados de reconstrucción de vía biliar por lesión incidental, atendidos en el Servicio de Cirugía General del Centro Médico Nacional 20 de Noviembre, ISSSTE, durante el periodo comprendido entre el 1 de enero 2003 al 1 de enero 2008. Para evaluar la calidad de vida se utilizó el Cuestionario SF-36 versión 2.0, el cual se aplicó por vía telefónica. Se incluyeron en el estudio a todos los pacientes que, previa información de los objetivos del estudio e identificación de los integrantes del equipo de investigación, autorizaron de modo verbal su participación. Se excluyeron los pacientes que no se localizaron por ningún medio o se negaron verbalmente a participar en el estudio. RESULTADOS Se obtuvo una muestra de 60 pacientes, de los cuales sólo se evaluó a 53.3% (n = 32). El 75% correspondió a mujeres (n = 24) y 25%, a hombres (n = 8). La media de edad fue de 52 ± 14 años, con un rango entre 30 a 95 años. En todos los casos la lesión incidental de vía biliar fue secundaria a colecistectomía; 22% abierta (n = 7) y 78% por vía laparoscópica (n = 25). Resultados en el Cuestionario SF-36 (Figura 1): • Componentes físicos: ° Funcionamiento físico 87.5 ± 16.22 puntos. ° Papel físico 82.03 ± 23.65 puntos. ° Dolor físico 55.1 ± 19.98 puntos, y ° Salud general 52.32 ± 19.98 puntos. • Componentes mentales: ° ° ° ° Vitalidad 68.32 ± 21.94 puntos. Función social 70.93 ± 19.53 puntos. Desempeño emocional 56.33 ± 20.48 puntos, y Salud mental 70.93 ± 19.82 puntos. Rev Invest Med Sur Mex, 2012; 19 (1): 4-6 5 Evaluación posquirúrgica mediante el Cuestionario SF-36 87.5 82.03 68.32 70.93 70.93 56.33 55.1 Puntaje 52.32 cirugía de reconstrucción de vía biliar. Pese a la morbilidad quirúrgica en este tipo de pacientes, la calidad de vida global fue buena, sin impacto sustancial en su actividad física y mental. La aplicación del Cuestionario SF-36 es una herramienta útil que permite realizar una evaluación más objetiva de la calidad de vida del paciente posquirúrgico. CONCLUSIONES La calidad de vida de los pacientes con lesión de la vía biliar es > 50 puntos en los componentes evaluados, lo que sugiere una calidad aceptable en un escenario clínico complejo. l l l al al to co ad ra cia nta er ion en ísi lid po so en oc me mi s i c o el f or it a g n a c d m V í ió lu le lud ion f Pap lor nc Sa nc pe Sa Do Fu Fu Pa Figura 1. Resultados en el Cuestionario SF-36. DISCUSIÓN En los diversos estudios publicados el parámetro para definir una buena calidad de vida son 50 puntos. Valores menores o mayores a este marco de referencia (con límite inferior cero y superior 100) permiten inferir una menor o mayor calidad de vida en la población estudiada. El funcionamiento físico se evalúa mediante la limitación en las actividades físicas por el estado de salud. El papel físico se evalúa por los problemas con el trabajo y la limitación en otras actividades de la vida diaria. El dolor es una experiencia sensorial emocionalmente desagradable asociada a un daño real o potencial del tejido, esta definición acentúa la naturaleza subjetiva y psicológica del dolor. La suma de todas las limitantes físicas secundarias al proceso mórbido define la salud general, la cual obtuvo una calificación > 50 puntos. La vitalidad es una sensación de energía expresada por los pacientes, refiriéndose agotados únicamente en el postoperatorio inmediato y mediato, sin deterioro de su función social, afectación emocional o de su salud mental global. En el presente estudio todos los componentes físicos y mentales obtuvieron calificaciones > 50 puntos, por lo que se infiere una buena calidad de vida global tras la Revista de Investigación 6 REFERENCIAS 1. Lillemoe K, Pitt H, Cameron J. Current management of benign bile duct strictures. Adv Surg 1992; 25: 119-69. 2. 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Ann Surg 2000; 232: 430-41. 8. Molina-Tuesca R. La calidad de vida, su importancia y cómo medirla. Salud Inorte Barranquilla 2005; 21: 76-86. 9. Martínez-Hernández LE, Segura-Méndez NH, Antonio-Ocampo A, et al. Validación del cuestionario SF-36 en pacientes adultos con asma y rinitis alérgica. Rev Med IMSS 2010; 48: 531-4. 10. Chaura-Guindic L, Benavides-Leon J, Villanueva-Herrrero JA, Jiménez-Bobdilla B, Abdo-Francis JM, Hernández-Labra E. Calidad de vida del paciente ostomizado. Cir Cir 2011; 79: 149-55. 11. Prieto L, Badia X. Cuestionarios de salud: concepto y metodología. Atención primaria 2001; 28: 99-107. 12. Vilagut G, Ferrer M, Rajmil L, Rebollo P, Quintana JM, Permanyer M. El cuestionario de salud SF-36 español: una década de experiencia y nuevos desarrollos. Gac Sanit 2005; 19: 135-50. 13. Guyatt G, Veldhuyzen SJ, Feeny D, Patrick DL. Measuring quality of life in clinical Trials: a taxonomy and review. Can Med Assoc J 1989; 140: 1441-8. Órgano de Difusión de la Sociedad de Médicos Rev Invest Med Sur Mex, 2012; 19 (1): 4-6 García-López BI, et al. ARTÍCULO ORIGINAL Manejo de dispositivo intrauterino traslocado Brenda Iliana García-López,* Mauricio Pichardo-Cuevas,* María Esther Meza-López,* Nilson Agustín Contreras-Carreto* ABSTRACT RESUMEN Introducción. El dispositivo intrauterino (DIU) es uno de los métodos anticonceptivos más utilizados en todo el mundo por ser efectivo, seguro y económico. El DIU traslocado (DIUT) o en posición inadecuada se presenta generalmente posterior a una perforación inadvertida del útero al momento de la colocación o a una migración de éste a los tejidos adyacentes; se puede localizar en el endometrio, miometrio, cavidad abdominal y órganos vecinos. Objetivo. Describir la incidencia y la experiencia institucional en el manejo del DIUT. Material y métodos. Estudio retrospectivo, descriptivo y analítico de una muestra de pacientes del Hospital de la Mujer, Secretaría de Salud, con diagnóstico de DIUT durante el 1 de enero 2008 al 1 de enero 2011. Resultados. Se estudió una muestra de 56 pacientes, media de edad 31.8 ± 8.55 años. DIUT 92.9% (n = 54) en cavidad uterina y 7.1% (n = 4) en cavidad abdominal. Retiro fallido en consultorio 26.8% (n = 15). Técnica utilizada: retiro con cánula de Novak 60.7% (n = 34), histeroscopia 8.9% (n = 5), histeroscopia y laparoscopia 5.4% (n = 3), LAPE 8.9% (n = 5), retiro manual simple 10.7% (n = 6), histeroscopia por retiro fallido con cánula de Novak 3.6% (n = 2) y laparoscopia 1.8% (n = 1). Complicaciones: perforación uterina 1.8% (n = 1) y HTA 3.6% (n = 2). Conclusiones. El diagnóstico de DIUT puede realizarse con métodos de gabinete habituales como rayos X de abdomen y pelvis, y ultrasonido pélvico; rara vez se requieren otros estudios adicionales. La histeroscopia como procedimiento para retiro de DIUT es un procedimiento seguro con bajo costo y efectivo y cada vez menos frecuente. Introduction. The intrauterine device (IUD) is one of the most popular of contraceptive methods, be effective, safe and economical. The translocated IUD (TIUD) or in the wrong position usually occurs after an inadvertent perforation of the uterus at the time of placement or migration of it to adjacent tissues, may be located in endometrium, myometrium, abdominal cavity and organs. Objective. Describe the incidence and institutional experience in managing of TIUD. Material and methods. Retrospective, descriptive and analytical study of a sample of patients treated in the Women’s Hospital, Ministry of Health; México, D.F., with a diagnosis of TIUD during the period from 1st January 2008 to 1st January 2011. Re sults. Sample of 56 patients, average age 31.8 ± 8.55 years. Results. TIUD 92.9% (n = 54) in uterine cavity and 7.1% (n = 4) in abdominal cavity. Retirement office failed in 26.8% (n = 15). Technique used: withdrawal Novak’s cannula 60.7% (n = 34), hysteroscopy 8.9% (n = 5), laparoscopy and hysteroscopy 5.4% (n = 3), LAPE 8.9% (n = 5), simple manual removal 10.7% (n = 6), hysteroscopy withdrawal by cannula’s Novak failed 3.6% (n = 2) and laparoscopy 1.8% (n = 1). Complications: uterine perforation 1.8% (n = 1), total hysterectomy by abdominal access 3.6% (n = 2). Conclusions. The diagnosis of TIUD can be performed by usual methods such as abdomen and pelvis x-ray and pelvic ultrasound. Rarely require additional studies. Hysteroscopy for removal TIUD is a safe and cost-effectiveness procedure and increasingly rare. Palabras clave. Dispositivo intrauterino. Dispositivo intrauterino traslocado. Complicaciones. Key words. Intrauterine device. Translocated intrauterine device. Complications. INTRODUCCIÓN El dispositivo intrauterino (DIU) es uno de los métodos anticonceptivos femeninos más utilizados en todo el mundo.1,2 Es uno de los métodos más seguros, efectivos y económicos. Se pueden colocar durante el puerperio inmediato, mediato, tardío y durante el ciclo menstrual; a dife- rencia de otros métodos temporales tiene la ventaja de que no se requiere recordar a la usuaria sobre su administración diaria, semanal o mensual. La efectividad de este método es de las más altas, proporciona una protección anticonceptiva > 90%.1,3,4 El DIU ejerce su acción anticonceptiva mediante un proceso inflamatorio del endometrio que evita la migra- * Hospital de la Mujer, Secretaría de Salud. Correspondencia: Mtro. Nilson Agustín Contreras-Carreto Jefatura de Medicina Interna, Hospital de la Mujer Prolongación Salvador Díaz Mirón, Núm. 374. Col. Santo Tomás, Deleg. Miguel Hidalgo, México, D.F. CP. 11340. Correo electrónico: medicinainterna_hmujer@yahoo.com.mx Rev Invest Med SurEnero-Marzo Mex, 2012; 19 (1): 7-9 Rev Invest Med Sur Mex, 2012; 19 (1): 7-9 7 Dispositivo intrauterino traslocado ción de los espermatozoides hacia la salpinge y, por otro lado, altera el transporte del ovocito. Su efecto anticonceptivo oscila entre tres y ocho años, depende de la cantidad de cobre que contenga (200-380 mm2) o si se utiliza DIU con progestágeno. Presenta falla anticonceptiva alrededor de 0.6-2.0% anual. Puede presentarse expulsión espontánea en 2-10% de los casos durante el primer año. Por ello es indispensable una revisión sistemática del mismo, así como el conocimiento de las posibles complicaciones asociadas a su uso. Entre las complicaciones están: sangrado uterino anormal, enfermedad pélvica inflamatoria, migración y perforación uterina.4-6 El DIU traslocado (DIUT), o en posición anormal o inadecuada, se presenta generalmente después de una perforación inadvertida del útero al momento de la colocación, la cual tiene una incidencia de 1.2/1,000 inserciones; sin embargo, en un menor número de casos es debido a una migración de éste a los tejidos adyacentes, entre ellos: la cavidad abdominal, intestino o vejiga, lo cual depende del DIU colocado, experiencia del operador, la posición del útero y el tiempo transcurrido entre el nacimiento y la inserción. En otros casos se utiliza este término para referirse al DIU que no es posible retirar de la cavidad uterina por la ausencia de las guías en el canal vaginal.3,7 En 1973 Eposito y Mahran clasificaron la perforación uterina en parcial y completa. La parcial se divide en grado 1 (endometrio) y grado 2 (miometrio). La completa o grado 3 corresponde a la presencia del DIUT en cavidad abdominal y órganos vecinos.8,10 El ultrasonido pélvico o transvaginal es el estudio inicial más apropiado. En caso de no encontrarse en la cavidad uterina puede recurrirse a la radiografía simple de abdomen y/o pelvis para determinar si el dispositivo se expulsó o migró hacia algún órgano vecino; en pocos casos se requiere de otros estudios adicionales, como la tomografía computada de abdomen.4-6,11,12 Si el DIUT se localiza dentro de la cavidad uterina puede realizarse el retiro con una cánula de Novak, incluso en el consultorio; en caso de no lograrse el retiro se recurre a la dilatación cervical y legrado uterino instrumentado (LUI) bajo anestesia en la sala de quirófano, lo que implica un incremento en la morbimortalidad y en los costos en salud. En la actualidad, la histeroscopia ha demostrado ser un excelente método para remover transcervicalmente cuerpos extraños como el DIU.3,4,7,10 A pesar de las ventajas de este procedimiento, existen contraindicaciones que es necesario considerar en todo momento: enfermedad pélvica inflamatoria agudizada, sospecha de cáncer cervical invasor, embarazo, falta de cooperación de la pacien- 8 te e inexperiencia del médico en la realización del procedimiento. Con la finalidad de evitar complicaciones (sobre todo si el DIU está parcialmente incrustado y/o migrado fuera de la cavidad uterina) es necesario realizar otros procedimientos como la laparoscopia o la exploración por laparotomía.7,9,10,12,13 OBJETIVO Describir la incidencia y la experiencia institucional en el manejo del DIUT. MATERIAL Y MÉTODOS Se realizó un estudio retrospectivo, descriptivo y analítico en el que se incluyó una muestra de pacientes atendidas en el Hospital de la Mujer, con diagnóstico de DIUT durante el 1 de enero 2008 al 1 de enero 2011. Se excluyeron aquellas pacientes con expediente clínico incompleto para las variables seleccionadas. Variables analizadas • Variables demográficas: ° Edad. • Variables asociadas a DIUT. ° Localización de DIUT según clasificación de perforación uterina (Eposito y Mahran, 1973): a) Parcial: grados 1 y 2. Endometrio y miometrio. b) Completa: grado 3. Cavidad abdominal y órganos vecinos. ° Método diagnóstico: a) Ultrasonido pélvico. b) Rayos X. c) Ultrasonido y rayos X. d) Otros. ° ° Tiempo de permanencia del DIU desde la colocación (en meses). Manejo: a) Consultorio. b) Quirófano. Rev Invest Med Sur Mex, 2012; 19 (1): 7-9 García-López BI, et al. ° requirió de LAPE en 9%, en aquellas pacientes con falla técnica en el procedimiento de mínima invasión o imposibilidad de retiro por dicho medio. Se debe enfatizar en la necesidad de un conocimiento anatómico preciso del área genital femenina y de una pericia adecuada, así como el conocimiento de las posibles complicaciones al realizar la inserción del DIU. Los dispositivos intrauterinos ya insertados requieren de una vigilancia periódica y no debe darse por expulsado un DIU sin realizarse los estudios necesarios. Técnica: a) Extracción con cánula de Novak. b) Legrado uterino. c) Histeroscopia. d) Laparoscopía. e) Laparotomía exploradora (LAPE). ° Complicaciones: a) Perforación uterina. b) Histerectomía total por vía abdominal (HTA). RESULTADOS Se analizó una muestra de 56 pacientes con una media de edad de 31.8 ± 8.55 años, con rango entre 20-55 años. El 92.9% de los DIUT (n = 54) se encontró en cavidad uterina y 7.1% en cavidad abdominal (n = 4). Tiempo de permanencia de DIU desde la colocación: 70.9 ± 58.1 meses, con rango entre 1-40 meses. Método diagnóstico: rayos X de abdomen y pelvis 10.7% (n = 6), ultrasonido pélvico 62.5% (n = 35), ambos 26.8% (n = 15). Retiro fallido en consultorio 26.8% (n = 15); 100% se retiró en quirófano bajo sedación. Técnica utilizada: retiro con cánula de Novak 60.7% (n = 34), histeroscopia 8.9% (n = 5), histeroscopia y laparoscopia 5.4% (n = 3), LAPE 8.9% (n = 5), retiro manual simple 10.7% (n = 6), histeroscopia por retiro fallido con cánula de Novak 3.6% (n = 2) y laparoscopia 1.8% (n = 1). Complicaciones: perforación uterina 1.8% (n = 1) y HTA 3.6% (n = 2). DISCUSIÓN El DIU es uno de los métodos anticonceptivos más utilizados en el mundo; sin embargo, no está exento de riesgos. La mayoría de las mujeres con perforación uterina por DIUT no manifiestan datos clínicos sino hasta meses o años después de la inserción. La incidencia de DIUT en cavidad abdominal fue baja (7%) acorde con lo reportado en la literatura. El diagnóstico se realizó en su mayoría con USG pélvico en 62%; se requirió la confirmación con rayos X de abdomen y pelvis en 27%, lo cual muestra la facilidad del diagnóstico. En 27% de las pacientes se presentó retiro fallido de DIUT en consultorio; en 100% de las pacientes se retiró en quirófano bajo sedación. La técnica más utilizada fue la cánula de Novak en 61%. La histeroscopia e histerolaparoscopia y laparoscopia se utilizaron en 20%, lo cual enmarca la importancia en el adiestramiento de procedimientos de mínima invasión. Se Revista de Investigación CONCLUSIONES El diagnóstico de DIUT puede realizarse con métodos de gabinete habituales como la radiografía de abdomen y pelvis, y el ultrasonido pélvico. Rara vez se requieren estudios adicionales. La histeroscopia como procedimiento para retiro de DIUT es un procedimiento seguro, económico y efectivo, y cada vez menos frecuente. REFERENCIAS 1. Margulies L. History of intrauterine devices. Bull N Y Acad Med 1975; 51: 662-7. 2. Alanís-Fuentes J, Amoroso-Hernández MA. Histeroscopia de consultorio para la extracción de dispositivo intrauterino. Revisión de la bibliografía. Ginecol Obstet Mex 2009; 77: 199-203. 3. Valle RF, Sciarra JJ. Hysteroscopy removal of intrauterine devices with missing filaments. Obstet Gynecol 1977; 49: 55-60. 4. Khrouf M, Slim N, Zouari F, Chelli H, Chelli M. Value of hysteroscopy in the removal of intrauterine devices lacking an examination string. Tunis Med 1985; 63: 475-7. 5. Ceballos GS, Sotelo VP. Caso inusual de un dispositivo intrauterino migrado a vejiga con cistolitiasis secundaria. Rev Mex Urol 2007; 67: 184-7. 6. Velásquez V, Nava V. Perforación de útero y yeyuno secundaria a dispositivo intrauterino. 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Bettochi S, Nappi L, Ceci O, Selvaggi L. What does diagnostic hysteroscopy mean today? The role of the new techniques. Curr Opin Obstet Gynecol 2003; 15: 303-8. Órgano de Difusión de la Sociedad de Médicos Rev Invest Med Sur Mex, 2012; 19 (1): 7-9 9 Storage-induced morphological changes in erythrocytes ARTÍCULO ORIGINAL Storage-induced morphological changes in erythrocytes Raúl Carrillo-Esper,* Carlos Alberto Carrillo-Córdova,** Jorge Raúl Carrillo-Córdova,** Luis Daniel Carrillo-Córdova** ABSTRACT RESUMEN Introducción. Los avances en las técnicas de almacenamiento eritrocitario permiten utilizar concentrados eritrocitarios que presentan importantes anormalidades morfológicas asociadas a mayor lesión en la microcirculación, disfunción orgánica múltiple e incremento en la morbimortalidad. Objetivo. Evaluar las modificaciones de la morfología eritrocitaria relacionadas con el tiempo de almacenamiento. Material y métodos. Se analizaron los cambios morfológicos eritrocitarios en relación con el tiempo de almacenamiento de los concentrados eritrocitarios transfundidos en la Unidad de Terapia Intensiva de la Fundación Clínica Médica Sur mediante la evaluación del frotis de una muestra obtenida de los concentrados eritrocitarios obtenidos. Cada uno de los frotis se tiñó con tinción de Wright; dos observadores independientes evaluaron el porcentaje de alteraciones morfológicas eritrocitarias. El tiempo de almacenamiento se definió como el lapso entre la extracción de la sangre y la transfusión del concentrado eritrocitario. Resultados. Se recolectaron 67 muestras. El promedio de anormalidades eritrocitarias fue de 40%. La media del tiempo de almacenamiento fue de 12.25 ± 6.9 días. El coeficiente de correlación de Pearson demostró correlación entre el porcentaje de anormalidades eritrocitarias y los días de almacenamiento. Después de siete días de almacenamiento 26.57% de los eritrocitos de los concentrados eritrocitarios tuvieron anormalidades morfológicas eritrocitarias que se incrementaron significativamente en los siguientes días. Con clusión. Los eritrocitos que rebasan siete días de almacenaConclusión. miento presentan alteraciones eritrocitarias significativas. Introduction. Advances in storage techniques of erythrocyte concentrates have contributed to develop significant erythrocyte morphologic abnormalities which have been associated with greater damage in the microcirculation, multiple organ dysfunction and increased morbidity and mortality. Objective. To evaluate the changes in erythrocyte morphology related to storage time. Material and methods. We analyzed the morphologic changes in erythrocyte in relation to the storage time of the globular packages that were transfused. The blood smear was wisdom with Wright’s technique and was evaluated by two observers who evaluated the percentage of morphologic alterations. Results. 67 samples were collected. The average of abnormalities in the erythrocyte package was 40%. The storage time was of 12.25 ± 6.9 days. The Pearson correlation coefficient demonstrated correlation between the percentages of erythrocyte abnormalities and storage time. After seven days of storage 26.57% of the erythrocytes of the packages had morphological abnormalities which increased significantly in the following days. Conclusions. Red blood cells with more than seven days of storage, present significant morphologic alterations, erythrocyte abnormalities. Palabras clave. Transfusión sanguínea. Anormalidades eritrocitarias. Key words. Blood transfusion. Abnormal erythrocytes. INTRODUCTION Recent investigations in the process of blood transfusion have focused on studying the morphologic changes secondary to conservation and storage in erythrocytes, these morphologic changes are named “storage lesions” and are related with erythrocyte damage and decrease of the survival after the transfusion. The efforts and investigations made during the last 40 years to maintain the corpuscular integrity and the viability and function after the transfusion have increased the storage time to up to 42 days, this was achieved thanks to the phosphate, ade- * Unidad de Terapia Intensiva, Fundación Clínica Médica Sur. ** Facultad de Medicina, UNAM. Correspondencia: Dr. Raúl Carrillo-Esper Unidad de Terapia Intensiva, Fundación Clínica Médica Sur. Puente de Piedra, Núm. 150. Col. Toriello Guerra, C.P. 14050. Tel.: 5424-7200. Correo electrónico: rcarrillo@medicasur.org.mx 10 Rev Invest Med SurEnero-Marzo Mex, 2012; 19 (1): 10-14 Rev Invest Med Sur Mex, 2012; 19 (1): 10-14 Carrillo-Esper R, et al. OBJECTIVE The aim of this report is to correlate the morphologic alterations of erythrocytes with the storage time of the transfused erythrocyte concentrates in the ICU of the Medica Sur Foundation. 100 80 Percentage nine and glucose added help with the preservation of the blood. These advances are counterproductive, because now-a-days the transfusion of morphologically-altered erythrocyte concentrates is more common, this is related with the lesion and dysfunction of the microcirculation which is an independent risk factor in the critically ill patient with organic dysfunctions and increased morbidity.1-3 60 40 20 0 0 MATERIAL AND METHODS A longitudinal, observational and prospective study was realized in the ICU of the Medica Sur hospital, blood smears of every erythrocyte concentrate were taken; the samples were taken after the transfusion, to ensure the quality and the safety of the procedure. Every smear was dyed with Wright stain and was evaluated to determine the percentage of erythrocyte abnormalities by the investigator and a citotechnician, whom didn’t know the time of storage of the transfused erythrocyte concentrates. Both observers evaluated the percentage of abnormal erythrocytes, calling abnormal every erythrocyte with a different morphology than the one of a mature erythrocyte (crenovyte, schistocyte, fragmented erythrocyte). An arithmetic average was realized of both stimations. The time of storage, defined as the time between the extraction of the blood from the donator to the transfusion, was registered. The statistic analysis was realized with the median and the SD. To evaluate the correlation of the variables, time of storage and morphologic alterations we used the Pearson correlation coefficient. RESULTS 67 consecutive samples were analyzed, the mean days of storage were 12.25 ± 6.9. Samples were classified in accordance with the storage time in three groups: • Group I from 0 to 10 days. • Group II from 11 to 20 days, and • Group III from 21 or more days. Group 1 included 30 samples, group II 29 samples and group III 8 samples. The mean of morphologic abnorma- 5 10 15 Days 20 25 30 Figure 1. Correlation between the time of storage and the erythrocyte changes. With a longer time of storage the morphologic changes are found in a larger percentage of the transfused erythrocytes. lities in the red blood cells (RBC) from the transfused concentrates was 40.4 ± 12, with a median of 40 and a mode of 50, percentage of alterations went from 10% to a maximum of 90%. In each group Pearson correlation coefficient was used finding association between the abnormalities percentage and the storage time, r = 0.8251, this result show relation with the 2 variables (Figure 1). Simple determination coefficient was r = 0.689, this shows a variability percentage of 68.09%. The inclination slope angle was 71 degrees 48 min. This indicates the relation of the morphologic abnormalities and the storage time. Based in this and according to linear correlation, after seven days of storage, 26.7% of transfused red blood cells have some morphology abnormalities, which represents one third of the transfused red blood cells. By the seventh day this number raise to 75%. DISCUSSION First autotranfusion was done in 1914, with this, the clinical limitation that vein to vein transfusion was eliminated, but it was during the Second World War when Dr. Oswald Robertson used the solution Rous-Turner, a combination of citrate and dextrose, to practice the first autotransfusion of storaged blood, and this established the first principles of preservation and storaging of blood. Like an answer to the increasing transfusional needs during Second World War, Luoitt and Mollison presented Rev Invest Med Sur Mex, 2012; 19 (1): 10-14 11 Storage-induced morphological changes in erythrocytes a new solution for preservation of RBC, this is the today well known ACD solution (Acid-citrate-dextrose). ACD solution simplified the sterilization procedure, decreased the volumen of the conservative solution and increased viability of RBC up to 21 days. On the other side, addition of phosphate and 2,3 diphosphoglycerate allow to increase the storage amount of days up to 42 and also increased the viability.4-6 The main result of this investigation is to demonstrate that there is a direct relation between storage time and percentage of abnormalities in the RBC. There is enough scientific evidence that storage time from the transfused RBC during transoperatory or during their stay in the intensive care unit is associated with an increased risk of death, more complications and more hospital stay.7-9 It is known that transfusion of RBC with a long storage time, which have energetic depletion, membrane alterations and distortion, amplify the inflammatory response when they damage and obstruct the vascular endothelium, this induce more microcirculation alteration and organic dysfunction10,11 (Figure 2). Red blood cell characteristics and changes during storage are characterized by (Table 1): • Morphologic changes. From their normal biconcave disc form, RBC deform during the pass of the storage days. The most important form are the crenocytes which are spheric erythrocytes with spicules, this spicules correspond to lipidic vesicles that protrude from the membrane. This transformation is associated with a loss of the surface/volume of the RBC, this increases the mean corpuscular heamoglobin concentration and osmotic fragility, this leads to a decrease in the capacity of the RBC to deform. There is some evidence that all this morphologic changes correlates with the ATP depletion of the RBC.12 Nakao13 reproduced these Storage lesions n Mediators of inflammation n Aggregation and adhesion of RBC TRALI p Deformability p Nitric oxide p 2-3 diphosphoglycerate p Microvascular perfusion n Immunosupression Infection Oxygen consumption n MOD n Death Figure 2. Effects of the red blood cell storage. TRALI: transfusion related acute lung injury. MOD: multiple organ dysfunctions. Table 1. Changes during storage. 12 Effects during the storage Consequences Decrease 2,3 diphosphoglycerate Increase of the affinity to oxygen and decrease of tissular contribution. Depletion of ATP Changes on the erythrocytes morphology. Increase of the osmotic fragility. Decrease of the deformability. Microvesiculation Decrease of the erythrocytes viability. Lipidic peroxidation Celular damage or death. Rev Invest Med Sur Mex, 2012; 19 (1): 10-14 Carrillo-Esper R, et al. morphologic changes secondary to prolonged storage. He also showed that reestablishing the ATP levels with adenosine made the RBC to obtain their normal biconcave structure after being crenocytes. • ATP levels. It is considered that biomechanical surface changes of RBC and cytoplasmatic viscosity occurs after the decrease of ATP. There is a low correlation between RBC ATP levels and surviving of RBC, except when ATP levels decrease > 50%. This inconsistency emphasizes in studies that very high levels of ATP have no impact in RBC surviving post-transfusion. Even though ATP depletion does not explain by itself the membrane damage, it has been thought that depletion of ATP increases the levels of secondary mediators like intracellular calcium, protein phosphorilation and membrane kinases which maintain the integrity of cell membrane. The phospholipids analysis shows a change in the phosphorylation/dephosphorilation balance in the RBC during the second and third storage week. The increase in the phosphorilated form of the phosphoinositol-4-phosphate, is accompanied with an appearance of crenocytes, this suggests a direct relation between dephosphorilation and change in the morphology of RBC.14,15 • Biomechanical changes. There is a complex interaction between the membrane phospholipids, transmembrane proteins and cytoplasmic components which has an impact in the morphology and deformability of the RBC during storage. This modifications decrease the RBC half life post-transfusion. RBC biomechanical changes are the result of the alterations of the lipidic bilayer, proteins and cytoskeleton. The interactions between these 3 components favor the formation of 20 to 80 nm vesicles, which could be detected by the second storage week. Oxidative damage is another important mechanism of RBC damage, this impacts the biomechanical by damaging the phospholipids of the membrane and the spectrine, this contributes to the formation of squistocytes and spherocytes, also contributes to the osmotic fragility.16-18 to improve tissue oxygenation this is related with de decrease of 2-3 diphosphoglycerate. This depletion is the mayor alosteric modificator over the affinity to haemoglobin. The deformability reduction of the RBC during storage has been explained like of the physiopathological mechanisms in the development of tissue lesion induced by the storaged RBC.19,20 The main objective of RBC transfusions in the critically ill patient is to improve oxygen disponibility in tissues and increase survival and organic function. All this lead to the wrong idea of tranfusing all the critically ill patients and maintain haemoglobin values > 13 g/dL, which is wrong. Different studies has demonstrated that this is not truth and using transfusions in a bad way or abusing of them increases in a significative way complications, specially infections, and morbimortality, specially when the transfused packages has more that 7-10 days of storage. Based in this, current concepts of RBC transfusions indications is to limit the number of transfusions, follow rigid transfusion politics, set transfusion cutting points in haemoglobin 7-10 g/dL, try to use new RBC, utilize leucoreduced packages in patients with sepsis and when there is evidence of microcirculation damage and trying to avoid the transfusions of RBC with more than 7 days of storage.21-24 CONCLUSIONS The morphologic, biological and molecular changes induced by the storage of erythrocytes are subjects of basic and clinical investigation because of their effects in transfused patients. The scientific evidence shows that the erythocytes with a storage time grater than 14 days induce lesions on the microcirculation and don’t increase the consumption of oxygen of cells, which favours the development of multiple organ dysfunctions. Because of that is necessary to develop a specific politic about the transfusions in the ICU’s where the use of erythrocyte concentrates with shorter storage life is prioritary, especially with patients with sepsis and organ or microcirculatory dysfunction. REFERENCES Changes in the RBC during the storage produce RBC with low efficacy and efectivity to improve oxygenation in tissues, this can be related with a depletion of the 2-3 diphosphoglycerate (DPG). This 2-3 DPG depletion is bigger within the seventh day of storage, this implies a shift to the left in the haemoglobin curve with a decrease of the p50. The clinical impact of the RBC changes induced with the storage reverberates in the poor effectiveness of these 1. Wolfe LC. The membrana and the lesions of storage in preserved red cells. Transfusion 1985; 25: 185-203. 2. Tinmouth A, Chin-Yee I. The clinical consequences of the red cell storage lesion. Transfus Med Rev 2001; 15: 91-107. 3. Ho J, Sibbald WJ, Chin-Yee IH. 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ARTÍCULO DER,REVISIÓN Trombocitopenia inducida por heparina Raúl Carrillo-Esper,* Verónica Zárate-Vega,* Thania Medrano-del-Ángel,* Gabriela Andrade-Montes de Oca* RESUMEN ABSTRACT La trombocitopenia inducida por la heparina (TIH) es un estado protrombótico mediado, inmunológicamente asociada a fenómenos tromboembólicos en la circulación arterial y venosa. La predisposición a la trombosis distingue a la TIH de otros tipos de trombocitopenia, como las inducidas por fármacos. El diagnóstico de TIH en pacientes hospitalizados con frecuencia es un reto debido al uso recurrente de heparina, presencia de trombocitopenia secundaria a otras causas y el desarrollo de anticuerpos heparina/PF4 asintomáticos en pacientes tratados con heparina. La determinación de anticuerpos heparina/PF4, anticuerpo polianion-PF4 y el examen de activación plaquetaria inducida por heparina son usados para el diagnóstico de la TIH. Para pacientes con alta sospecha o TIH confirmada, la heparina debe interrumpirse e iniciarse la anticoagulación con una alternativa, como la lepirudina o Danaparoide, en caso de no existir contraindicación. La warfarina no debe usarse hasta la recuperación de la cuenta plaquetaria. Cuando se decide por una anticoagulación combinada con warfarina debe de continuarse hasta que el cociente normalizado internacional (INR) se encuentre en rango terapéutico por dos días consecutivos. Las plaquetas no deben administrarse para profilaxis o tratamiento. La TIH es una enfermedad con elevada morbimortalidad, pero tratable y prevenible, por lo que se requiere de un elevado índice de sospecha, además de monitoreo y seguimiento estrecho de los enfermos tratados con heparina. Palabras clave. Desórdenes plaquetarios. Cociente Internacional Normalizado. Plaqueta. Heparin induce thrombocytopenia (HIT) is an immune-mediated transient prothrombotic state with very severe implications determined by thromboembolic phenomena in both the venous and arterial circulation. The propensity for thrombosis distinguishes HIT from other common drug-induced thrombocytopenias. Diagnosing HIT in hospitalized patients is often challenging because of the frequency of heparin use, occurrence of thrombocytopenia from other causes, and development of asymptomatic PF4/heparin antibodies in patients treated with heparin. The heparin-platelet factor 4-antibody assay, polyanion-platelet factor 4-antibody assay and heparin-induced platelet activation test are used for laboratory diagnosis of the immune form of heparin-induced thrombocytopenia. For patients with strongly suspected or confirmed HIT, heparin should be stopped and full-dose anticoagulation with an alternative, such as lepirudin or danaparoid, commenced (in the absence of a significant contraindication). Warfarin should not be used until the platelet count has recovered. When introduced in combination with warfarin, an alternative anticoagulant must be continued until the International Normalized Ratio (INR) is therapeutic for two consecutive days. Platelets should not be given for prophylaxis or treatment. HIT is a potentially fatal but treatable and largely preventable disease. An increased awareness of the signs and symptoms of the disorder is necessary to prevent its potentially devastating complications. Key words. Blood platelet disorders. International Normalized Ratio. Platelet. prevalencia y la baja sospecha clínica y diagnóstico en México. INTRODUCCIÓN La trombocitopenia inducida por heparina (TIH) es un síndrome clínico-inmunopatológico.1 Es un evento adverso relacionado con la administración de heparina por vía intravenosa o subcutánea. La TIH es secundaria a anticuerpos IgG contra el complejo heparina-factor plaquetario 4 (FP-4), y se caracteriza por trombocitopenia e incremento en el riesgo de trombosis arterial y venosa. El objetivo de este trabajo es actualizar a la comunidad médica sobre la entidad respecto a su elevada INCIDENCIA En Estados Unidos de Norteamérica se presentan anualmente 600,000 nuevos casos de TIH; de éstos, 300,000 desarrollan complicaciones trombóticas y 90,000 fallecen. 2 Aproximadamente 0.5-5% de los pacientes tratados con heparina desarrollarán TIH. 3 Su prevalencia es más alta en pacientes qui- * Unidad de Terapia Intensiva, Fundación Clínica Médica Sur. Correspondencia: Dr. Raúl Carrillo Esper Unidad de Terapia Intensiva, Fundación Clínica Médica Sur. Puente de Piedra, Núm. 150, Col. Toriello Guerra, Del. Tlalpan, México, D.F., C.P. 14050. Tel.: 5424-7200. Correo electrónico: rcarrillo@medicasur.org.mx Rev Invest Med SurEnero-Marzo Mex, 2012; 19 (1): 15-22 Rev Invest Med Sur Mex, 2012; 19 (1): 15-22 15 Trombocitopenia inducida por heparina Tabla 1. Frecuencia de trombocitopenia inducida por heparina. Población de pacientes Frecuencia • Cirugía cardiaca Adultos (HNF postoperatoria) Pediátricos 1-2.4% 1-3% • Cirugía ortopédica HNF postoperatoria HBPM postoperatoria 4.80% 0.60% • Medico Enfermedad cardiaca cerebrovascular Cuidados críticos Tratamiento con HNF Nuevo tratamiento con hemodiálisis 0.3-2.5% 0.40% 0.80% 3.20% • Obstetricia Raro • Alto riesgo Trasplante cardiaco Neurocirugía Indígenas 11% 15% 8% • Población general Intrahospitalaria HNF (meta análisis) HBPM (meta análisis) 1-1.2% 2.60% 0.20% rúrgicos que en pacientes tratados médicamente 4 (Tabla 1). Pocos estudios han evaluado la frecuencia de TIH en la Unidad de Terapia Intensiva (UTI). Dos reportes indicaron que es poco frecuente en la UTI; uno de ellos es un estudio de 267 pacientes posquirúrgicos con sospecha clínica de TIH, donde sólo 32 tuvieron un perfil serológico que indicó probable TIH. El segundo estudio, prospectivo, sobre factores de riesgo para trombosis venosa profunda (TVP) incluyó 261 pacientes, de los cuales 85% recibió heparina no fraccionada (HNF) y 4% recibió heparina de bajo peso molecular (HBPM). A 31 pacientes con sospecha de TIH se les realizaron pruebas, ninguno tuvo evidencia serológica de TIH.5 Se calcula que en 1/ 100 pacientes que reciben heparina no fraccionada durante al menos cinco días se desarrolla TIH asociada a trombosis.6 Stein7 realizó un estudio retrospectivo (1979-2005) con una muestra de 10,554,000 pacientes de la base de datos del National Hospital Discharge Survey. Reportó que la incidencia de TIH es aproximadamente de 0.5%. Es poco frecuente en pacientes menores de 40 años, se relaciona más con la duración que con la dosis administrada de heparina y con el empleo de HNF en relación con la HBPM. 16 De los pacientes heparinizados 8% desarrolla anticuerpos, de los cuales 1-5% desarrollará trombocitopenia y una tercera parte presentará trombosis arterial o venosa. Los anticuerpos persisten por un largo periodo (hasta de tres años), esto asociado a trombosis.8 La incidencia de TIH es particularmente alta en pacientes que reciben un trasplante cardiaco (11%) y los anticuerpos de TIH son más frecuentes en pacientes que reciben HNF (aproximadamente 20%) que en aquéllos tratados con HBPM (8%); sin embargo, los anticuerpos que se forman por la exposición a HNF presentan reacción cruzada con HBPM.9 Los factores de riesgo asociados a la TIH son: • Tipo de heparina usada (HNF de origen bovino t origen porcino t HBPM). • Tiempo de exposición a la heparina (4-14 días). • Antecedentes de exposición reciente a heparina (100 días previos). • Tipo de escenario médico (posquirúrgico t no quirúrgico t embarazo). • Género del paciente (1.5-2 veces mayor riesgo en mujeres).10 FISIOPATOLOGÍA La heparina es un glucosaminoglucano con peso molecular de 3,000-30,000 Daltons. Su mecanismo de acción es a través de la unión y activación de la antitrombina. Sólo 30% de las cadenas de HNF contienen la secuencia necesaria para activar la antitrombina. Las cadenas restantes permanecen inactivas, pero se unen inespecíficamente a otras proteínas plasmáticas, células endoteliales y FP-4.11 Tiene una alta afinidad por FP-4, una proteína tetramérica que se encuentra en los gránulos alfa de las plaquetas y en la superficie de algunas células como las endoteliales y las plaquetas. Cuando la heparina y el FP-4 se unen forman un complejo heparinaFP-4 que sufre un cambio conformacional y expone nuevos epítopes crípticos que actúan como inmunógenos. La TIH se produce por la unión de anticuerpos (habitualmente IgG) al complejo heparina-PF4. Estos anticuerpos anticomplejo heparina-FP4 activan las plaquetas, vía receptor FcJIIa, y causan la liberación de micropartículas protrombóticas, consumo de plaquetas y trombocitopenia. La activación plaquetaria implica la liberación de proteínas FP-4 de los gránulos, lo que perpetúa el ciclo formación de complejos-activación de plaquetas. Las micropartículas liberadas aumentan la producción de trombina, causa de los fenómenos trombóticos. El complejo antígenoanticuerpo también interactúa con los monocitos y causa Rev Invest Med Sur Mex, 2012; 19 (1): 15-22 Carrillo-Esper R, et al. plaquetario de 30-50% respecto a los valores basales. Se clasifica en: Plaqueta ° Gránulo alfa ° Micropartículas IgG Complejo heparina/PF4 ° Clásica: Se presenta en cinco a 14 días después de iniciar el tratamiento con heparina (70%). Inicio rápido: Ocurre a las 24 h de iniciar el tratamiento con heparina (25-30%) y resulta de la exposición a tratamientos previos con dicho fármaco. Inicio tardío: Se presenta en días o semanas después de descontinuado el tratamiento con heparina (d 5%). Es una grave enfermedad protrombótica13 (Tabla 2). MANIFESTACIONES CLÍNICAS Receptor Fc Figura 1. Patogénesis de la trombocitopenia inducida por heparina. La heparina y el PF-4 se unen, exponiendo nuevos epítopes en PF-4, los cuales conducen a la formación de anticuerpos. La heparina-PF-4 y la IgG forman complejos inmunes. Los anticuerpos en el complejo inmune unen los receptores Fc en la plaqueta, causando la activación plaquetaria. La activación plaquetaria libera micropartículas protrombóticas. la producción de factor tisular y daño endotelial; ambos procesos favorecen la trombosis12 (Figura 1). Clasificación La TIH se divide en dos tipos • Tipo I. Evolución benigna, no inmune. Se presenta en 25% de los pacientes uno a cuatro días después de iniciar la terapia con heparina, en particular en el escenario postoperatorio (se asocia con conteos plaquetarios de 100,000-130,000). Es transitoria, asintomática y secundaria a aglutinamiento plaquetario. Esta forma se autolimita y generalmente se resuelve sin tratamiento. • Tipo II. Es un síndrome mediado inmunológicamente. Se caracteriza por una disminución en el conteo Los pacientes con TIH usualmente experimentan un descenso brusco de la cuenta plaquetaria de hasta 50%, frecuentemente < 150 x 109/L, entre los días 5-14 después de iniciar la heparina.14 El paciente característico con TIH es una mujer que recibe tratamiento tromboprofiláctico posquirúrgico con HNF por más de una semana;15 sin embargo, todavía no se determinan las razones por las cuales algunos pacientes con TIH desarrollan trombosis y otros no, en estudios transversales se ha observado que las manifestaciones trombóticas se correlacionan con marcadores bioquímicos de activación plaquetaria y con el aumento de producción de trombina.16 La trombosis venosa es la complicación más común de la TIH. Sin embargo, las complicaciones tromboembólicas (oclusión de injertos venosos, trombosis venosa en pacientes con catéteres centrales, formación de trombos auriculares o ventriculares, trombosis protésica, infarto de miocardio y embolias pulmonares) pueden aparecer en el territorio arterial, el venoso o ambos. Alrededor de 75% de los casos de trombocitopenia inducida por la heparina se acompañan de trombosis sintomática, incluyendo trombosis venosa profunda de las extremidades inferiores (50% de los casos) y de las extremidades Tabla 2. Tipos de trombocitopenia inducida por heparina. Variables Frecuencia Disminución en conteo plaquetario Tiempo de inicio de terapia con heparina Anticuerpos HIT Riesgo de trombosis Riesgo de hemorragia Manejo HIT inmune (antes tipo II) HIT no inmune (antes tipo I) 2-3% Moderado o grave (60,000-20,000/PL) t 5 días Presente Alto (30-80%) Poco frecuente Interrupción de terapia con heparina; administración de anticoagulantes alternativos 10-30% Leve (100,000/microL) d 5 días Ausentes Bajo Ninguno Rev Invest Med Sur Mex, 2012; 19 (1): 15-22 Observación 17 Trombocitopenia inducida por heparina superiores (10%), embolia pulmonar aguda (25%), trombosis arterial que afecta a una extremidad (5-10%), ictus trombótico (3-5%), infarto agudo del miocardio (3-5%) y trombosis de la vena suprarrenal con necrosis hemorrágica suprarrenal (3%).17-19 La trombosis arterial asociada a TIH tiene una elevada morbimortalidad; 9-11% requiere de la amputación de una extremidad con una mortalidad que llega a 8-20% a pesar del tratamiento. Las manifestaciones trombóticas se correlacionan con marcadores bioquímicos de activación plaquetaria y con el aumento de producción de trombina. El riesgo de trombosis es mayor en pacientes con más cantidad de anticuerpos y complejo heparina-PF4 y en aquéllos con una trombocitopenia > 70% de la cuenta normal.20 Un 25% de los pacientes con anticuerpos circulantes presenta reacciones sistémicas agudas como taquicardia, fiebre, escalofríos, hipertensión, disnea o dolor torácico tras una nueva administración intravenosa de heparina.21 Por otro lado, casi 10% de los pacientes que ingresan al Departamento de Urgencias con síntomas de trombosis y una historia reciente de exposición a heparina tienen circulación de anticuerpos PF4-heparina.22 DIAGNÓSTICO El diagnóstico de TIH se basa en criterios clínicos (el dato clínico fundamental es la aparición de fenómenos trombóticos) y datos de laboratorio. La trombocitopenia o una disminución sustancial en el conteo plaquetario es la manifestación de TIH. En aquellos pacientes que recibieron heparina en los últimos 100 días se debe realizar un conteo antes de iniciar la terapia con heparina y 24 h después.23 La prueba de los anticuerpos mide la liberación de serotonina marcada con C14 a partir de plaquetas que se añaden a una muestra del suero del paciente. Un resultado positivo del análisis para anticuerpos no asegura el diagnóstico de TIH, porque esta prueba también detecta anticuerpos IgG no patógenos frente al complejo heparina-FP4. Por este motivo, para realizar el diagnóstico de TIH, la prueba para anticuerpos debe combinarse con un escenario clínico sugerente24 (Tabla 3). El Colegio Americano de Patólogos recomienda la determinación de anticuerpos heparina-PF4 en pacientes en quienes se sospecha la TIH basados en las características temporales de la trombocitopenia o en la ocurrencia de nuevos eventos de trombosis durante o después del tratamiento con heparina25 (Figura 2). El diagnóstico diferencial se debe realizar con la trombocitopenia inducida por los inhibidores de la glucoproteína IIb/IIIa, éstos causan trombocitopenia (aparece minutoshoras después, tras la administración) a causa de destrucción de plaquetas por anticuerpos preformados (trombocitopenia moderada de 4.2%, trombocitopenia grave 1%). Cuando la trombocitopenia se ha inducido por los inhibidores de la glucoproteína IIb/IIIa no se debe instaurar tratamiento anticoagulante alternativo debido a que favorece el sangrado. Otras entidades asociadas a trombocitopenia y con las que se debe hacer diagnóstico diferencial son: sepsis, coagulación intravascular diseminada, tromboembolia pulmonar o trastornos primarios de la médula ósea.26 TRATAMIENTO La TIH es una condición protrombótica asociada con un incremento en la generación de trombina (evidenciado por la presencia de niveles elevados de complejos trombina-antitrombina) y que puede ser considerada como un síndrome adquirido de hipercoagulabilidad.27 Se debe Tabla 3. Sistema de puntuación para el diagnóstico de TIH. Dos puntos Un punto Cero puntos Trombocitopenia Descenso relativo > 50% o cuenta de 20-100 x 10/L Descenso relativo 30-50% o cuenta de 10-19 x 10/L Descenso relativo < 30% o cuenta < 10 x 10/L Tiempo de exposición heparina-trombocitopenia 5-10 días o < 1 día, si exposición a heparina 30 días previos > 10 días y < 1 día, si exposición a heparina 30-100 días previos <1 día sin exposición reciente a heparinas Confirmada Dudosa No No Dudosa Confirmada Trombosis Otras causas de trombocitopenia Los puntos obtenidos en cada categoría se suman. Probabilidad pretest de TIH: 6-8 = alta probabilidad; 4-5 = probabilidad intermedia; 0-3 = baja probabilidad. 18 Rev Invest Med Sur Mex, 2012; 19 (1): 15-22 Carrillo-Esper R, et al. Trombocitopenia y/o trombosis en paciente con cualquier tipo de heparina. Sospecha alta-intermedia de TIH (sistema de puntuación de las 4 T’s). Sospecha baja de TIH (sistema de puntuación de las 4 T’s). Suspender heparinas. Valorar diagnóstico alternativo. Continuar heparina. Comenzar tratamiento anticoagulante alternativo. Realizar pruebas de detección de anticuerpos (inmunológica). Sospecha alta y con anticuerpos positivos. suspender cualquier clase de tratamiento con heparina (incluye HBPM y catéteres heparinizados) y valorar el tratamiento con un anticoagulante alternativo. Al respecto, un amplio estudio prospectivo realizado por Wallis28 dio información sobre la suspensión temprana de la heparina (dentro de las 48 h de la TIH, definida por una caída de la cuenta plaquetaria > 50% durante el tratamiento con heparina) que se asoció a mejoría en la evolución. En ausencia de un tratamiento anticoagulante alternativo, el riesgo de trombosis es de 5-10%/día en los primeros días tras la interrupción del tratamiento con heparina y el riesgo total alcanza 38-76% en el primer mes.29 Existen dos clases de anticoagulantes indicados para el tratamiento de la TIH: los inhibidores directos de la trombina y los heparinoides. Los inhibidores directos de la trombina actúan fundamentalmente reduciendo la actividad de la trombina, mientras que los heparinoides disminuyen su formación, los cuales, en su indicación, deben adecuarse al estado del enfermo (Tabla 4). • Inhibidores directos de la trombina: 30 ° TIH confirmada. Continuar tratamiento alternativo. Lepirudina: derivado de origen recombinante de la hirudina, obtenido de células de levadura. a) Inhibidor altamente específico de la trombina. b) Bloquea la actividad trombogénica de la trombina mediante la formación de un complejo con ella. c) Se produce una inhibición directa de todas las acciones de la trombina, de la libre y de la ligada a los coágulos, a diferencia de la heparina. d) Vida media: 1.7 h. e) Dosis inicial: 0.05-0.075 mg/kg/h. Sospecha intermedia y con anticuerpos positivos. Realizar pruebas funcionales Positivo: TIH confirmada, continuar tratamiento alternativo. Negativo: Valorar diagnósticos alternativos; se puede reintroducir heparina. Sospecha alta-intermedia y con anticuerpos negativos. Los efectos anticoagulantes se monitorizan con el tiempo de tromboplastina parcial activada (TTPA), de la que se recomienda mantener concentraciones de 1.5 a 2.5 veces las basales; su eliminación es por vía renal. Se debe evitar en pacientes con insuficiencia renal aguda.31 ° Argatroban: derivado de la arginina.32 Valorar diagnóstico alternativo; se puede reintroducir heparina. Figura 2. Algoritmo diagnóstico y terapéutico de TIH. a) Se une reversiblemente al sitio activo de la trombina. b) Su acción anticoagulante se ejerce cuando inhibe las reacciones inducidas o catalizadas por la trombina: formación de fibrina, activación de los factores de coagulación V, VIII y XIII; Rev Invest Med Sur Mex, 2012; 19 (1): 15-22 19 Trombocitopenia inducida por heparina Tabla 4. Medicamentos para el manejo de anticoagulación en enfermos con trombocitopenia inducida por heparina. Daño renal Daño hepático Disfunción multiorgánica Danaparoid † Lepirudin * Bivalirudin ‡ Argatroban Danaparoid † Bivalirudin * ,‡,§ Lepirudin/argatroban Argatroban * Danaparoid † Bivalirudin ‡ Lepirudin Anticoagulación con dosis profiláctica con antecedentes de TIH Danaparoid (750 unidades c/8 h SC) Fondaparinux (2.5 mg/día SC) ‡ Lepirudin (25 mg c/12 h SC) ‡ Desirudin (15 mg c/12 h SC) ‡ † *Preferiblemente usar en pacientes que requieren procedimientos invasivos con riesgo de sangrado mayor. †Usar preferiblemente en pacientes estables en la UTI que no requieren cirugía. ‡Fármaco o dosis no aprobada para TIH (requiere consentimiento informado del paciente). §Bivalirudin se degrada por trombina. Tabla 5. Trombocitopenia inducida por heparina según el tipo de población y recomendaciones para la monitorización de acuerdo con el Colegio Americano de Tórax. Tipo de población Ejemplos Frecuencia del recuento plaquetario Exposición reciente a heparina Pacientes tratados con heparina en los 100 días previos o de los que se desconozca si hubo exposición. Basal y en las primeras 24 h. Reacción sistémica aguda Pacientes con alguna reacción sistémica en los primeros 30 min tras la administración de HNF. Inmediata y comparar con previas. Riesgo de TIH > 1% Pacientes en tratamiento con HNF a dosis terapéuticas o con HBPM a dosis antitrombóticas. Basal y al menos cada dos días hasta el día 14 tras la exposición o hasta la suspensión de la heparina. Riesgo de TIH 0.1-1% Pacientes médicos o embarazadas tratadas con HNF a dosis profilácticas o tratadas con HBPM tras bolo con HNF; pacientes quirúrgicos tratados con HBPM a dosis profilácticas; pacientes tratados con bolos de HNF (catéter intravascular). Basal y cada 2-3 días desde el día cuatro al 14 tras la exposición o hasta la suspensión de la heparina. Riesgo de TIH < 0.1% Paciente en tratamiento con HBPM (dosis profiláctica). No es necesario (según la clínica). activación de la proteína C y agregación plaquetaria. c) Los efectos anticoagulantes deben monitorearse mediante el TTPA. d) Vida media: 39-51 min. e) Eliminación: vía hepática. ° Bivalirudina: Es un análogo de la hirudina.33 a) Neutraliza los efectos de la trombina. b) Interfiere con la formación de fibrina, la agregación plaquetaria, la activación del factor XII. c) Los efectos anticoagulantes desaparecen después de la interrupción del tratamiento. d) Tiene una eliminación renal y enzimática. 20 e) Vida media: 36 min. f) Sus efectos se monitorizan con el tiempo de coagulación activado (ACT). • Heparinoides: ° Danaparoide: Mezcla sintética de heparansulfato, dermatansulfato y condroitinsulfato.34 a) Actúa de forma análoga a la heparina inhibiendo el factor Xa. b) La monitorización se realiza con la concentración plasmática de antifactor Xa. c) Eliminación: vía renal. Rev Invest Med Sur Mex, 2012; 19 (1): 15-22 Carrillo-Esper R, et al. ° Fondaparinux: Es un inhibidor sintético y selectivo del factor Xa con mayor especificidad que las HNF y HBPM.35 a) Su actividad es resultado de la inhibición selectiva del factor Xa mediada por la antitrombina III. b) Vida media: 15 h. c) Efecto es reversible con factor VIIa. d) Eliminación: vía renal. CONCLUSIONES La TIH es una complicación grave de un tratamiento frecuente. En México no existen datos que reporten la incidencia de esta entidad y habitualmente no se considera en el diagnóstico diferencial de trombocitopenia en el enfermo hospitalizado. Se debe tomar en cuenta que el tratamiento no se basa en la transfusión de plaquetas debido a que puede aumentar el estado de hipercoagulabilidad y causar fenómenos trombóticos. En la actualidad se dispone de diferentes alternativas de tratamiento recomendadas, como las Guías del Colegio Americano de Tórax y las Recomendaciones del Comité Británico de Hematología para la estandarización de Hemostasia y Trombosis para la monitorización y manejo de la TIH, las cuales son similares, pero difieren con respecto a la monitorización de la cuenta plaquetaria en diferentes poblaciones de pacientes que recibieron heparina y HBPM (Tabla 5).36 Con base en lo anterior es importante que quien prescribe heparina considere este grave evento adverso para llegar a un diagnóstico y tratamiento temprano y evitar así las complicaciones. REFERENCIAS 1. Cruz GI, Sánchez LM, Sánchez P. Trombocitopenia inducida por Heparina. Rev Esp Cardiol 2007; 60: 1071-82. 2. Levy JH, Hursting MJ. Heparin-induced thrombocytopenia a prothrombotic disease. Hematol Oncol Clin N Am 2007; 21: 65-88. 3. Warkentin TE, Sheppard JI, Horsewood P. 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Órgano de Difusión de la Sociedad de Médicos Rev Invest Med Sur Mex, 2012; 19 (1): 15-22 Visag-Castillo VJ, et al. CASO PROBLEMA Tumor de Krukenberg como manifestación de cáncer gástrico Víctor J. Visag-Castillo,* Diego M. García-Vivanco,* Martín Tulio Santarita-Escamilla,* Amado de Jesús Athié-Athié,* José Manuel Correa-Rovelo* RESUMEN ABSTRACT Introducción. Los tumores metastáticos a ovarios representan cerca de 10%; entre ellos, el tumor de Krukenberg es una entidad especial, ya que no cursa con sintomatología particular. Para su diagnóstico se requiere de características histopatológicas específicas. El principal sitio de origen de este tumor metastático del ovario es el tracto gastrointestinal y su pronóstico es muy desfavorable debido al estadio clínico del tumor primario. Caso clínico. Femenino de 46 años de edad, grupo Rh A+, que presentó pirosis y dolor abdominal; se diagnosticó tumor dependiente de ovario derecho. Posteriormente se realizó laparotomía exploradora, como hallazgo se encontró tumor de grandes dimensiones dependiente de ovario derecho con reporte transoperatorio de adenocarcinoma poco diferenciado metastático, así como tumor primario en estómago con involucro del tronco celiaco. El reporte definitivo de patología determinó adenocarcinoma poco diferenciado con células en anillo de sello en ovario (tumor de Krukenberg). Conclusiones. El tumor de Krukenberg es una entidad clínica poco común con características histopatológicas específicas que se presenta en pacientes jóvenes y que tiene una supervivencia media de siete meses después de integrar el diagnóstico. Background. The metastatic ovarian tumors represents about 10%, of those, Krukenberg tumor is a special entity, with nonspecific symptoms and its diagnosis require special hystopathological features. The origin of this metastatic tumor is the gastrointestinal tract, it has very unfortunate outcome, in part of the clinical stage of the primary tumor. Clinical case. 46 year old woman A+ presenting with heart burn and abdominal pain, whom is diagnosed with an ovarian tumor and we proceed to realize exploratory laparotomy, finding a big sized tumor dependent of the right ovary, bilateral salpingo-oophorectomy was made, the histological report was of metastatic adenocarcinoma, and a gastric primary tumor involving the celiac trunk. Definite pathology report was of adenocarcinoma with ring singlet cells (Krukenberg tumor). Discussion. The Krukenberg tumor presents at a median age of 50.3 years, with a median outcome of 7.1 months. There are two different histologyical types. The presence of ascitis its a unfortunate outcome sign. Conclusion. The Krukenberg tumor is a rare clinical entity with specific hystopathological characteristics which presents in young women with a medium survival after the diagnosis is made of seven months. Palabras clave. Neoplasias ováricas. Metástasis ováricas. Neoplasias del sistema digestivo. Key words. Ovarian neoplasms. Ovarian metastasis. Digestive system neoplasms. CASO PROBLEMA Femenino de 46 años de edad, sin antecedentes crónico-degenerativos, grupo y Rh A+, antecedentes quirúrgicos de dos cesáreas en 1997 y 1999, respectivamente. Inició padecimiento cuatro meses previos al inter- namiento con pirosis y sensación de plenitud temprana acompañadas de dolor abdominal tipo cólico EVA 4/10; acudió con facultativo quien indicó tratamiento con ranitidina 150 mg/día, sin lograr mejoría. Negó pérdida de peso. La paciente tuvo dolor abdominal en hipogastrio, irradiado a ambas fosas iliacas, escala visual análoga (EVA) * Cirugía General, Hospital Médica Sur. Correspondencia: Dr. Víctor J. Visag Castillo Pitágoras, Núm. 859, Col. Del Valle, C.P. 03100, Deleg. Benito Juárez, México, D.F. Tel.: 5682-4179. Correo electrónico: victor_visag@hotmail.com Rev Invest Med SurEnero-Marzo Mex, 2012; 19 (1): 23-27 Rev Invest Med Sur Mex, 2012; 19 (1): 23-27 23 Tumor de Krukenberg 10/10, acompañado de náusea sin vómito o fiebre. Acudió con médico tratante que decidió realizar resonancia magnética pélvica; se encontró tumoración pélvica dependiente de ovario derecho de 17 x 10 x 16 cm de consistencia mixta. Se solicitaron marcadores tumorales con los siguientes resultados: antígeno sérico CA125: 835 U/mL, gonadotropina coriónica humana: < 0.5 mU, antígeno carcinoembrionario (ACE): 70.6 ng/mL. En la exploración física la paciente mostró buenas condiciones, adecuada coloración de piel y mucosas, abdomen blando depresible, se palpó tumoración en hipogastrio y mesogastrio móvil, consistencia firme, sin datos de irritación peritoneal. De manera programada se decidió realizar resección de la misma (Figura 1). Durante la exploración quirúrgica se encontró un tumor sólido quístico de 12 cm de diámetro mayor roto, firmemente adherido al peritoneo pélvico, hemoperitoneo de aproximadamente 700 mL, ascitis hemorrágica. Se practicó ooforectomía derecha y se envió a estudio transoperatorio que reportó adenocarcinoma moderadamente diferenciado metastático. En la exploración del tubo digestivo se observó actividad tumoral que infiltraba la serosa gástrica y se extendía desde la unión esofagogástrica hasta dos tercios distales del estómago; también infiltraba cara posterior a nivel de la cabeza de páncreas y actividad tumoral en ganglios a nivel del tronco celiaco, A del cual se tomó biopsia. Se efectuó ooforectomía contralateral. El reporte definitivo de patología demostró carcinoma metastático de ovario y salpinge derecha con primario en estómago (Figura 2). La evolución postoperatoria fue satisfactoria y se dio de alta para manejo por parte de Oncología Médica con diagnóstico de cáncer gástrico (Linitis Plástica Borrmann IV), estadio clínico IV. EVALUACIÓN DEL CASO PROBLEMA 1. ¿Cuál es la localización más frecuente de la tumoración primaria en esta entidad patológica? a) Faringe e hipofaringe. b) Tubo digestivo (píloro, colon, recto e intestino delgado). c) Tiroides y paratiroides. d) Páncreas y vía biliar. e) Tubo digestivo (boca, ano, ciego y válvula ileocecal). • Respuesta correcta: b. El ovario es un sitio frecuente de metástasis de neoplasias malignas; aproximadamente 10% de todos los carcinomas de ovario son secundarios.1 El tumor de Krukenberg es una variedad especial de carcinoma secundario de ovario que pue- B Figura 1. Resonancia magnética. A. Tumor grande dependiente de ovario sólido que desplaza las estructuras intraabdominales. B. Se observa la estrecha relación del tumor con las demás estructuras intraabdominales, además del gran desplazamiento que condiciona. 24 Rev Invest Med Sur Mex, 2012; 19 (1): 23-27 Visag-Castillo VJ, et al. B A Figura 2. A. Tumor de ovario derecho. Medidas: 21 x 20 x 8 cm; peso de 1,300 g. Superficie lisa con nodulaciones. B. Microscopia que muestra carcinoma de células en anillo de sello metastático. de acompañarse de un tumor primario a cualquier nivel, pero en especial a nivel del tubo digestivo, sobre todo a nivel del píloro, colon, recto, intestino delgado, hígado y vesícula biliar. El término tumor de Krukenberg no debe aplicarse a cualquier tumor de tracto gastrointestinal metastático a ovario, pues su correcto diagnóstico debe ser histológico. propusieron varios criterios diagnósticos que deben ser tomados en cuenta para el tumor de Krukenberg: 2. ¿Qué tipo de células se deben identificar para lograr el diagnóstico histológico de los tumores de Krukenberg? Wooduff y Novak (1960)3 y Hale (1968)3 reafirmaron estos criterios, que en la actualidad son aceptados por la Organización Mundial de la Salud (OMS). a) Células diana. b) Células esquistocíticas. c) Células en anillo de sello. d) Células pleomórficas. e) Células productoras de mucinas. ° ° ° Adenocarcinoma de ovario. Producción intracelular de mucina de las células en anillo de sello, y Proliferación sarcomatoide difusa del estroma ovárico. 3. ¿De cuánto es la supervivencia promedio de este padecimiento posterior a la resección quirúrgica? • Respuesta correcta: c. En 1879 Marchand describió el tumor de Krukenberg, pero de manera somera, pues desconocía sus características principales. En 1896 encargó a su alumno Friedich Krukenberg el estudio de seis tumores, de los que reportó resultados de cinco, y los denominó por error fibrosarcoma ovarii mucocellulare carcinomatodes. Krukenberg enfatizó que la presencia de células en anillo de sello en un estroma ovárico sarcomatoso es el patrón histológico predominante de este tipo de tumor.2 Kraus (1901) y Schlagenhaufer y Wagner (1902) reconocieron el error de Krukenberg y establecieron el carácter mucocelular de las células neoplásicas y establecieron su origen epitelial.2 En 1838 Novak y Gray a) 2.5 años. b) Cinco años. c) Diez años. d) 1.5 meses. e) Siete meses. • Respuesta correcta: e. El tumor de Krukenberg ocurre aproximadamente entre la tercera y séptima décadas de la vida con una media de edad de 50.3 años. De acuerdo con la serie estudiada por Gilliland et al., en Irlanda del Norte (1992) el tumor de Krukenberg ocupó 5% de todos los casos metastáticos a ovario, y tiene una incidencia global de 0.16% por 100,000 personas/año, al menos en ese país; sin embargo, Hale mencionó que en Hawaii, EU, la media de edad de la presentación de la tumoración es de 45.4 años.3 Estos Rev Invest Med Sur Mex, 2012; 19 (1): 23-27 25 Tumor de Krukenberg datos coinciden con la edad de presentación en nuestra paciente. Hale consideró la supervivencia en aproximadamente 9.8 meses en promedio, con una media de 7.1 meses.3 4. ¿Cuáles son las características histológicas del tumor de Krukenberg clásico? a) Células en anillo de sello, núcleo excéntrico arriñonado, citoplasma pálido granular y abundante. b) Células en anillo de sello; el núcleo ocupa 80% de la célula. c) Células en anillo de sello. d) Células en anillo de sello, citoplasma denso. e) Células en anillo de sello en apoptosis. • Respuesta correcta: a. Existen dos patrones de crecimiento histológico y tipos celulares: el más común es el tumor de Krukenberg clásico y el tumor de Krukenberg tubular. En el tumor de Krukenberg clásico la mayor parte de las células carcinomatosas tienen una apariencia de células en anillo de sello, con un núcleo excéntrico arriñonado y un citoplasma pálido, granular y abundante. Histológicamente, la mucina producida es del tipo neutro; sin embargo, en la mayoría de los casos se encuentran mucopolisacáridos ácidos no sulfatados (sialomucina). En ocasiones estos tumores pueden presentar función endocrina y como consecuencia algunas pacientes presentan hirsutismo y virilización.4,5 5. ¿Cuál hallazgo sugiere un mal pronóstico durante el procedimiento quirúrgico? a) Tumoraciones > 5 cm de diámetro. b) Oclusión intestinal. c) Presencia de metástasis ovárica bilateral. d) Ascitis. e) Palidez generalizada de asas intestinales. • Respuesta correcta: d. La ascitis es una característica común en los tumores de Krukenberg. Woodruff y Novak4 reportaron que 22 pacientes de 48 que estudiaron tenían ascitis al momento del diagnóstico. En nuestro caso la paciente también presentó ascitis hemorrágica, lo cual es un dato de mal pronóstico y puede ser la vía de metástasis a ovario en cáncer gástrico avanzado.6 6. ¿Cuál es el estudio de imagen que se solicita de manera inicial para valorar las masas en hueco pélvico? 26 a) Histerosalpingografía. b) Colonoscopia. c) Placa simple de pelvis. d) Urografía excretora. e) Ultrasonido transvaginal. • Respuesta correcta: e. En el diagnóstico diferencial de la patología de ovario es necesario apoyarse de los estudios de imagen en los que el ultrasonido transvaginal es la modalidad inicial para la detección de este tipo de tumoraciones, así como su caracterización. Al utilizar la modalidad Doppler incluso se realizaría una predicción acerca de la malignidad de la tumoración.7-12 7. ¿Qué estudio de imagen se considera como el de primera elección en el estudio de masas anexiales? a) Tomografía simple de abdomen. b) Ultrasonido transvaginal. c) Resonancia magnética. d) Histerosalpingoscopia. e) Placa simple de pelvis. • Respuesta correcta: c. Actualmente la resonancia magnética con gadolinio funciona en tumoraciones anexiales indeterminadas.13 De acuerdo con Mironov12 la tomografía computada es la principal herramienta para la evaluación y estatificación preoperatoria así como para el seguimiento; sin embargo, también menciona que en caso de recurrencias pélvicas la resonancia magnética es la mejor opción para la planeación de la resección quirúrgica.14 REFERENCIAS 1. Alexander-Rodríguez J. Tumor de Krukenberg como manifestación inicial de un cáncer gástrico en una mujer de 23 años. Rev Col Obst y Ginecol 2005; 56: 313-5. 2. Onuigbo W. 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Mc Cluggage WG. Primary ovarian mucinous tumors with signet ring cells: report of 3 cases with discussion of so-called primary Krukenberg tumors. Am J Surg Pathol 2008; 32(9): 1373-9. 10. Webb MJ, Decker DG, Mussey E. Cancer metastasic to the ovary. Factors influencing survival. Obstet Gynecol 1975; 454: 391-6. Revista de Investigación 11. McGill F, Ritter D, Rickard C. Krukenberg tumors: Can management be improved? Gynecol Obstet Invest 1999; 48: 61-5. 12. Mironov S, Akin O, Pandit-Taskar N, Hann L. Ovarian Cancer. Radiol Clin N Am 2007; 45: 149-66. 13. Koyama T, Mikami Y, Saga T, Kamai K, Togashi K. Secondary ovarian tumors: spectrum of CT and MR features with pathologic correlation. Abominal Imaging 2007; 32: 784-95. 14. Ha HK, Baaek SY, Kim SH. Krukenberg’s tumor of the ovary: MR Imaging features. Am J Roentgenol 1995; 49: 1716-20. Órgano de Difusión de la Sociedad de Médicos Rev Invest Med Sur Mex, 2012; 19 (1): 23-27 27 Esclerosis temporal medial CASO PROBLEMA Evaluación de un caso de epilepsia del lóbulo temporal medial con esclerosis hipocampal Nancy Edith Aguilar-Olivos,* Mariana Muñoz-Monterd,* Juan Carlos García-Reyna,* Leticia Munive-Baez,* Carlos Pla-Casamitjana,* Ernesto Roldán-Valadez* RESUMEN ABSTRACT Se presenta el caso clínico de una adolescente de 16 años de edad con antecedente de crisis convulsivas febriles en la infancia. Inició su padecimiento tres meses previos con alteraciones neuropsiquiátricas y crisis convulsivas parciales complejas. Se le realizaron múltiples estudios de imagen anatómica y funcional que llevaron al diagnóstico de epilepsia del lóbulo temporal medial secundaria a esclerosis hipocampal (ELTM-EH). La ELTM-EH es la causa más frecuente de epilepsia refractaria a tratamiento. Los hallazgos típicos en la imagen por resonancia magnética son atrofia hipocampal con hiperintensidad en las secuencias T2 y FLAIR; sin embargo, se ha demostrado que los estudios funcionales brindan información diagnóstica y pronóstica complementaria. Se realizó una evaluación a manera de caso problema. A 16 year old woman with history of febrile seizures in her childhood. She began 3 months before with neuropsychiatric disorders and complex partial seizures. Multiple anatomical and functional studies were performed to diagnose mesial temporal lobe epilepsy with hippocampal sclerosis (MTLE-HS). MTLE-HS is the most frequent cause of refractory epilepsy. The classical MRI findings of MTLE-HS include hippocampus atrophy and hiperintensity in the long TR sequences (FLAIR and T2). Functional studies provide complementary diagnostic and prognostic information. An evaluation is made by way of case problem. Palabras clave. Epilepsia de lóbulo temporal. Adolescencia. Imagen molecular. Key words. Temporal lobe epilepsy. Adolescent. Molecular imaging. CASO PROBLEMA Adolescente de 16 años de edad con antecedente de crisis convulsivas febriles en la infancia, inició padecimiento tres meses previos con un cuadro caracterizado por alteraciones de la memoria, del comportamiento y cambio en el desempeño escolar. Durante ese periodo también se refirieron episodios caracterizados por dolor epigástrico tipo calambre acompañados de desorientación y movimientos involuntarios de la boca similares a “masticación”. Se llevó a consulta neurológica y a partir de ello se inició valoración diagnóstica. La exploración física y las pruebas de laboratorio no revelaron alteraciones. Se realizó un electroencefalograma (EEG) que demostró brotes paroxísticos unilaterales de ondas agudas de mediano voltaje en el área temporal anterior derecha. La evaluación neuropsicológica mostró un patrón compatible con trastorno por déficit de atención. Se efectuó una resonancia magnética (RM) de cráneo con secuencias especiales específicas para volumetría y espectroscopia de ambas regiones temporales. En las secuencias T2 y en la de fluid-attenuated inversion recovery (FLAIR) se demostró un ligero incremento en la intensidad de ambas cabezas hipocampales (Figura 1A). La medida volumétrica de la región hipocampal derecha fue de 2.64 cm3; de la izquierda, de 2.98 cm3, con un * Fundación Clínica Médica Sur. Correspondencia: Nancy Edith Aguilar Olivos Puente de Piedra, Núm. 150, Col. Toriello Guerra. Deleg. Tlalpan, México, D.F. Tel.: 5424-6892. Correo electrónico: naedith@hotmail.com 28 Rev Invest Med SurEnero-Marzo Mex, 2012; 19 (1): 28-31 Rev Invest Med Sur Mex, 2012; 19 (1): 28-31 Aguilar-Olivos NE, et al. Figura 1. Estudio de RM de cráneo. A. Corte coronal en secuencia FLAIR, se observa incremento en la intensidad de la señal a nivel de ambos hipocampos. B. Espectroscopia del hipocampo derecho que muestra disminución del índice NAA/(Cr+Cho), también existe un ligero incremento y ampliación del pico de mioinositol asociado a una crisis epiléptica que se presentó el mismo día que se realizó el estudio. (2) Max = 12.1 SUV Mean = 7.5 SUV (6) Max = 11.6 SUV Mean = 7.1 SUV frontales superiores en donde se encontraron SUV de 8.8 a 9.3 (Figura 2). EVALUACIÓN DEL CASO PROBLEMA (6) (7) (7) Max = 7.6 SUV Mean = 5.7 SUV 1. ¿Cuál es el diagnóstico más probable en este caso? (1) (5) (3) Max = 9.3 SUV Mean = 6.5 SUV (2) (4) (4) Max = 8.1 SUV Mean = 5.8 SUV (3) a) Trastorno por déficit de atención asociado a crisis convulsivas. b) Atrofia hipocampal secundaria a crisis convulsivas febriles. c) Epilepsia del lóbulo temporal medial con esclerosis hipocampal. d) Síndrome de epilepsia del lóbulo temporal bilateral. HIPOCAMPOS Figura 2. 18F-FDG PET que muestra disminución de la actividad metabólica en ambos hipocampos, en comparación con el resto de la actividad de la corteza cerebral. índice de asimetría de 12.6%. El análisis espectroscópico fue anormal a nivel de la cabeza y cuerpo de ambos hipocampos, con un índice N-acetil aspartato/creatina + colina (NAA/Cr+Cho) de 0.60 para el lado derecho y de 0.64 para el izquierdo (valores normales > 0.71) (Figura 1B). Finalmente se realizó una tomografía por emisión de positrones (18F-FDG-PET) de cráneo en fase interictal que reportó una importante disminución de la actividad metabólica en ambos hipocampos, con valores de captación estándar (SUV) de 5.7 a 5.8 en comparación con los giros El caso se refiere a una mujer de 16 años con antecedente de crisis convulsivas febriles que presentó alteraciones cognitivas, comportamiento inadecuado y epigastralgia seguida de automatismo. El diagnóstico más probable es epilepsia del lóbulo temporal medial con esclerosis hipocampal (ELT-EH). Esta entidad es la principal causa de la epilepsia del lóbulo temporal (ELT), así como de tratamiento quirúrgico por epilepsia refractaria en los adultos. Los datos epidemiológicos son escasos debido a que el protocolo para su diagnóstico sólo se realiza en casos que no responden a tratamiento convencional.1 Se caracteriza por la pérdida neuronal y esclerosis a nivel del hipocampo que se refleja en los estudios de RM como atrofia y aumento de la intensidad de señal en T2 y FLAIR.1,2 Se considera una alteración Rev Invest Med Sur Mex, 2012; 19 (1): 28-31 29 Esclerosis temporal medial progresiva que llega a ser médicamente intratable en 60 a 90% de los casos3 y su desarrollo se ha asociado con algunas agresiones (por lo general antes de los cinco años de edad) principalmente el antecedente de crisis convulsivas febriles, pero también crisis convulsivas focales prolongadas, infecciones del sistema nervioso central o traumatismo craneoencefálico.1 2. De las siguientes opciones ¿Cuál sería una manifestación de esta entidad? a) Crisis convulsivas parciales complejas con aura. b) Automatismos. c) Síntomas neuropsiquiátricos. d) Todas las anteriores. La ELT-EH se manifiesta de manera característica por crisis convulsivas complejas parciales generalmente con presencia de aura. Estas crisis comienzan con aura abdominal, una sensación epigástrica asociada a cambios emocionales como miedo y síntomas autonómicos que sigue de la pérdida de la conciencia y automatismos, la mayoría de las veces oroalimentarios, por ejemplo movimientos de masticación. También se pueden presentar posiciones distónicas lateralizadas hacia el lado de la lesión. Las crisis duran menos de 2 minutos; al inicio de la enfermedad son de fácil control, pero a medida que pasa el tiempo hasta 90% son refractarias a tratamiento farmacológico. Las alteraciones cognitivas son frecuentes, en especial asociadas a memoria y comportamiento como hiperactividad, impulsividad, agresividad y disminución de la capacidad de aprendizaje. La respuesta es: todas las anteriores.1 3. ¿La paciente presenta una lesión unilateral o bilateral? a) Unilateral. b) Bilateral simétrico. c) Bilateral asimétrico. El reporte del EEG mostró lateralización derecha, la RM en secuencia FLAIR evidenció hiperintensidad bilateral. Volumétricamente la región hipocampal derecha fue más pequeña con un índice de asimetría significativo. El análisis espectroscópico reportó disminución bilateral de NAA con predominio del hipocampo derecho. Con estos datos se puede considerar que es una lesión bilateral asimétrica de predominio derecho. La volumetría por RM permite evaluar el tamaño de la región hipocampal con hallazgos significativos en más 30 de 93% de los pacientes.4 En comparación con la RM convencional, la espectroscopia es una herramienta más sensible para detectar anormalidades en la región del hipocampo, con valores de sensibilidad de 83.3 vs. 44.4%. La espectroscopia también es útil para definir la lateralización del foco epiléptico, así como para demostrar una patología bilateral aun cuando la RM convencional muestre una enfermedad unilateral.5 El índice NAA/Cr+Cho se considera el parámetro más sensible para detectar anormalidades causadas por epilepsia. Un valor < 0.71 es anormal cuando el índice de asimetría es > 11% y correlaciona con la lateralización en más de 81% de los pacientes.5 4. ¿Qué tratamiento ha demostrado mejores resultados? a) Ninguno. b) Quirúrgico. c) Electrofisiológico. d) Farmacológico. La ELT-EH se considera una alteración progresiva que es médicamente intratable en 60 a 90% de los casos. El tratamiento que ha demostrado mejores resultados en estos pacientes es el quirúrgico, al reportar mayor número de casos de remisión de crisis convulsivas, así como mejora cognitiva y calidad de vida; se obtienen mayores resultados satisfactorios en comparación con el tratamiento farmacológico basado en antiepilépticos.3,1 5. ¿Cuál es el estudio de función neurológica que presenta algún valor pronóstico para respuesta a tratamiento? a) EEG. b) Espectroscopia. c) RM. d) Todos los anteriores. Las descargas epileptiformes interictales (DEI) en la región temporal anterior se asocian con la ELT. La ocurrencia de estas descargas estrictamente unilaterales tienen un excelente valor predictivo para el éxito quirúrgico de la ELT-EH. Los pacientes con diagnóstico de ELT-EH y DEI frecuentes tienen una tasa de respuesta a tratamiento quirúrgico de 28%, mientras que los pacientes con DEI poco frecuente responden hasta en 80-90%.1 Los hallazgos clásicos de la RM incluyen atrofia hipocampal con incremento de la intensidad de la señal en T2 debido al incremento de agua libre como resultado de la gliosis.6 El hipocampo está rodeado por la señal hiperin- Rev Invest Med Sur Mex, 2012; 19 (1): 28-31 Aguilar-Olivos NE, et al. tensa generada por el líquido cefalorraquídeo (LCR), esto puede limitar la detección de la señal en T2; sin embargo, la secuencia FLAIR anula la señal del LCR y hace más aparentes los cambios hipocampales.7 La espectroscopia evalúa la cantidad de NAA presente en los tejidos, su disminución se presenta por la pérdida de neuronas o disfunción neuronal, debido a la supresión de la actividad mitocondrial. Tiene utilidad limitada para diferenciar esclerosis hipocampal de tumores de bajo grado; sin embargo, ofrece información sobre lateralización y puede ser predictivo del desenlace de las crisis convulsivas después del tratamiento quirúrgico. La disminución unilateral de NAA tiene una buena concordancia con la localización del foco epileptogénico con el EEG, la RM y el PET. Las anormalidades espectroscópicas son lateralizadas en 80% de los casos, por lo que en 20% se encuentran de manera bilateral simétrica o asimétrica.1 El PET con 18F-FDG es la técnica de imagen interictal indicada para identificar algún déficit funcional asociado a la esclerosis. Las lesiones asociadas con mayor frecuencia y que confieren peor pronóstico son la isquemia, hemiatrofia, tumores y malformaciones vasculares.1,8 Los factores favorables para la predicción de la disminución de las crisis convulsivas y del estado libre de convulsiones discapacitantes son, en primer lugar, la asimetría significativa con predominancia concordante por RM y EEG; y en segundo lugar, la ausencia de anormalidades en el lóbulo temporal contralateral. En los casos bilatera- Revista de Investigación les el pronóstico es hasta 4.9 veces peor que en los unilaterales. Por lo anterior la respuesta a la pregunta es: todos los anteriores.9 REFERENCIAS 1. Cersósimo R, Flesler S, Bartuluchi M, Soprano AM, Pomata H, Caraballo R. Mesial temporal lobe epilepsy with hippocampal sclerosis: study of 42 children. Seizure 2011; 20(2): 131-7. 2. Williamson PD, French JA, Thadani VM, et al. Characteristics of medial temporal lobe epilepsy: II. 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Male patient, 86 years old who presented electrocardiogram with ST-elevation in leads II, III and AVF. Thrombolytic therapy was administered. A new electrocardiogram was performed. Palabras clave. Diabetes mellitus tipo 2. Dislipidemia. Medicamentos hipoglucemiantes. Key words. Type 2 diabetes mellitus. Hypoglycemic drugs. Dyslipidemia. CASO CLÍNICO Se presenta el caso de un paciente varón de 86 años de edad, con antecedentes de diabetes tipo 2 (DM2) de larga evolución en tratamiento con hipoglucemiantes, dislipidemia en tratamiento. Se realizó un electrocardiograma al ingreso a Urgencias con supradesnivel del segmento S-T en derivaciones Figura 1. Electrocardiograma inicial. * Fundación Clínica Médica Sur. Correspondencia: Dr. Octavio González Chon Fundación Clínica Médica Sur. Puente de Piedra, Núm. 150, Col. Toriello Guerra, Deleg. Tlalpan, México, D.F., C.P. 14050. Correo electrónico: ogchon@yahoo.com.mx 32 Rev Invest Med SurEnero-Marzo Mex, 2012; 19 (1): 32-33 Rev Invest Med Sur Mex, 2012; 19 (1): 32-33 Aguilar-Zapata D, et al. Figura 2. Electrocardiograma a los 30 min después de la administración de tenecteplasa. Figura 3. Electrocardiograma a los 60 min de la terapia fibrinolítica. II, III, aVF (Figura 1). Se determinó como diagnóstico infarto agudo del miocardio de localización en cara inferior; después de manejo trombolítico se realizaron electrocardiogramas a los 30 minutos (Figura 2) y a la hora de administración del medicamento (Figura 3). De acuerdo con el Colegio Americano de Cardiología (ACC) y la Asociación Americana del Corazón (AHA) una reducción de 50% del segmento S-T en un electrocardiograma a 60 y 90 minutos después del inicio de la terapia es sugestivo de reperfusión,1 lo que se asocia con una Revista de Investigación supervivencia a diez años de 90% en aquéllos que resolvieron de forma parcial.2 REFERENCIAS 1. 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DIARREA CRÓNICA Algoritmo 1 Diarrea crónica se define como el aumento en la cantidad de las evacuaciones mayor a 200 g al día o más de tres veces al día por un periodo mayor a cuatro semanas, descartando incontinencia fecal.1 El abordaje de la diarrea crónica debe de iniciarse desde el interrogatorio. Ciertas características clínicas van a sugerir algunos diagnósticos etiológicos. Es necesario interrogar al paciente sobre las características de las evacuaciones: si son líquidas, pastosas o con sangre; si contienen grasa o lientería; el volumen. Si existe dolor abdominal, si se presenta en ayuno o postprandial o si se acompaña de otros síntomas y signos como fiebre, lesiones en la piel o artralgias, así como prácticas sexuales de riesgo. También es importante interrogar al paciente de forma dirigida hacia la ingesta de medicamentos o bebidas con sustitutos de azúcar, ingesta de lácteos o derivados del trigo, viajes recientes y las comorbilidades que presenta. Siempre es importante considerar el síndrome de intestino irritable como causa de diarrea crónica, teniendo en cuenta los criterios de Roma III, al descartar un origen orgánico y el estado nutricional del paciente, ya que en este tipo de padecimiento no se encuentran datos de desnutrición ni de deshidratación. La exploración física aporta principalmente datos del estado nutricional del paciente, así como su estado de hidratación y otros datos que orienten hacia el origen de la diarrea. Las lesiones en la piel (dermatitis herpetiforme, urticaria pigmentosa, eritema migrans necrotizante o pioderma gangrenoso) apoyan en la etiología de la diarrea (enfermedad célica, glucagonoma, mastocitosis, EII). Es necesario realizar la búsqueda intencionada de adenomegalias, hepatomegalia, masas abdominales, úlceras orales, glositis, ruborización, hiperhidrosis, temblor fino, edema de extremidades o párpados para descartar otras etiologías como enfermedad tiroidea, enteropatías perdedoras de proteínas, tuberculosis abdominal, SIDA, vipomas, entre otras. La exploración de la región anorrectal elimina la posibilidad de que el paciente tenga incontinencia fecal y no diarrea crónica (Figura 1). * Clínica de Enfermedades Digestivas y Obesidad. Fundación Clínica Médica Sur. Correspondencia: Ome Zitlalli Pérez-Gutiérrez Puente de Piedra, Núm. 150, Col. Toriello Guerra, Tlalpan, México, D.F. Tel.: 5424-7200, Ext. 6892. Correo electrónico: omezperez@gmail.com 34 Rev Invest Med SurEnero-Marzo Mex, 2012; 19 (1): 34-37 Rev Invest Med Sur Mex, 2012; 19 (1): 34-37 Pérez-Gutiérrez OZ Historia clínica • Inicio Congénito Abrupto Gradual • Evacuaciones Líquidas Disentería Grasosas • Patrón Continuo Intermitente • Incontinencia fecal • Dolor abdominal • Pérdida de peso Mal absorción Neoplasias • Factores agravantes Estrés Dieta • Factores mitigantes Dieta Medicamentos • Enfermedades sistémicas DM2 Distiroidismo Enfermedad colágeno Tumores SIDA Deficiencia de IG • Epidemiología Viajes Comida Agua Exploración física • General Hidratación Nutrición • Piel Ruborización Rash Dermatografismo • Tiroides Masas Crecimiento • Abdomen Hepatomegalia Dolor Masas Ascitis • Anorrectal Esfínter SOH • Extremidades Edema Figura 1. Semiología de la diarrea crónica Algoritmo 2 Posterior a la realización de la historia clínica el espectro de etiologías se reduce, por lo que los estudios complementarios tienen que dirigirse hacia los diagnósticos presuncionales. Iniciar con estudios de laboratorio generales es adecuado: biometría hemática (macrocitosis o microcitosis), albúmina y prealbúmina (estado nutricional), química sanguínea (niveles de glucosa), electrolitos séricos (hipercalcemia, desequilibrio hidroelectrolítico), pruebas de función tiroidea (distiroidismo) o estudios séricos especiales inclinados en las sospechas diagnósticas (beta-carotenos, D-xilosa, péptido intestinal vasoactivo, prueba de Schilling, anticuerpos como antitransglutaminasa y p-ANCA).2 Es importante el estudio de las heces fecales para caracterizar el tipo de diarrea. Se tiene que pesar y cuantificar la cantidad de grasa (> 7 g en 24 h, anormal), presencia de restos alimenticios, pH (< 6, mal absorción de carbohidratos), lactoferrina fecal, presencia de leucocitos o de sangre (origen inflamatorio); tamizaje de algunos laxantes como causa de diarrea facticia, así como la medición de electrolitos fecales para la determinación de la brecha aniónica (si es < 50 mosm/kg es diarrea secretora)3 y la búsqueda de microorganismos (parásitos).4 Los estudios de gabinete complementan el estudio de las heces fecales y los laboratorios. El tránsito intestinal puede mostrar floculación del medio de contraste, que únicamente indica mal absorción intestinal sin determinar la etiología o proporciona datos acerca de alguna tumoración intraluminal.5 El estudio endoscópico del tracto digestivo alto y bajo proporciona mucha información. Se puede realizar aspirado duodenal o yeyunal para la búsqueda de sobrecrecimiento bacteriano, además de biopsia (búsqueda de enfermedad celiaca, enfermedad de Whipple, tuberculosis, linfoma, amiloidosis, enfermedad inflamatoria intestinal, colitis microscópicas, gastroenteritis eosinofílicas) que confirmará diversas sospechas diagnósticas.6 Estudios como la tomografía computada y la resonancia magnética informan sobre tumoraciones (gastrinomas, glucagonomas, vipomas), fístulas (enfermedad de Crohn), ganglios (SIDA, tuberculosis) que pueden ser causantes de la diarrea en estudio (Figura 2). Rev Invest Med Sur Mex, 2012; 19 (1): 34-37 35 Diarrea crónica Estudios • Generales BH QS ES PFT • Heces fecales • Especiales D-xilosa Elastasa B-carotenos • Vipoma • Gabinete • Peso Tránsito intestinal • Electrolitos Brecha aniónica • pH Mal absorción de carbohidratos Endoscópico TC y RM Tumores Aspirado Tumores Mal absorción Biopsia Inflamatorias • SOH Inflamación • Leucocitos • Lactoferrina Inflamación • Grasa Sudan cuantitativamente • Laxantes Facticia Figura 2. Estudios diagnósticos útiles en la diarrea crónica. Tipo • Líquida Secretora < 50 ms/kg • Infecciosa Giardia Amibas • Inflamatoria Osmótica • Tumoral Gastrinoma Vipoma • Estructural EII • Estructural Crohn • Grasa • Infección Parásitos Virus • pH bajo Mal absorción de carbohidratos • Páncreas Elastasa fecal Quimiotripsina fecal Secretina • Pared B-carotenos D-xilosa • Mg alto Laxantes Figura 3. Posibles causas de diarrea crónica de acuerdo con el análisis de las heces. Algoritmo 3 La diarrea crónica se puede dividir en tres tipos: líquida, grasa o inflamatoria. La diarrea líquida se manifiesta en forma osmótica o secretora, diferenciándola en esen- 36 cia por la brecha aniónica. La diarrea secretora se presenta aun en ayuno y se busca una de las tres principales causas: infecciones, tumores que causen diarrea secretora (como los vipomas) y trastornos de la pared gastrointestinal como la enfermedad de Crohn y la mal absorción Rev Invest Med Sur Mex, 2012; 19 (1): 34-37 Pérez-Gutiérrez OZ de ácidos biliares. En la diarrea osmótica se va a encontrar una brecha aniónica mayor a 290 mosm/kg. Ante un pH fecal < 6 se habla de mal absorción de carbohidratos, y con una alta prevalencia de mal absorción de lactosa en nuestra población es importante tenerla presente, así como los laxantes osmóticos. Cuando en las heces fecales se encuentran leucocitos elevados, lactoferrina fecal7 o sangre, se tiene una diarrea inflamatoria. Las principales causas que hay que buscar son las infecciosas (las cuales son más comunes en nuestro medio) y la enfermedad inflamatoria intestinal (principalmente colitis ulcerativa crónica idiopática). Si la diarrea es grasa, puede tener dos orígenes: deficiencia pancreática o de la pared intestinal. Para diferenciar entre estas dos etiologías, el estudio de la D-xilosa puede ayudar a determinarla, ya que se absorbe en la pared de forma pasiva y no necesita de enzimas o transportadores. La elastasa fecal (estudio de elección en sospecha de insuficiencia pancreática exógena)8 y la quimiotripsina fecal hablan de la función pancreática y son útiles en el diagnóstico; sin embargo, tienen una baja sensibilidad en etapas tempranas de insuficiencia pancreática. Estudios más invasivos como la intubación duodenal con Revista de Investigación estimulación con secretina no se recomiendan de rutina4 (Figura 3). REFERENCIAS 1. Fine KD, Schiller LR. 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Esta técnica tiene la ventaja de no utilizar radiación ionizante, además del potencial de proveer información funcional como lo hace la tomografía, incluso más. Caso clínico. Embarazada de 25 años con dolor lumbar del lado derecho y sospecha de urolitiasis. Las imágenes de urorresonancia estática demostraron la compresión ureteral extrínseca condicionada por el útero gestante en su tercio inferior bilateral, aunque de predominio derecho. También se documentó hidronefrosis derecha y pielonefritis. La adquisición de las imágenes, guiadas durante el estudio por un radiólogo experto, se complementó con imágenes del nivel pélvico para demostrar la unión urétero-vesical sin evidencia de urolitiasis. Discusión. La urorresonancia se basa en dos estrategias de imagen que pueden complementarse para cubrir la mayor parte de los diagnósticos de patologías del tracto urinario superior. La primera técnica utiliza secuencias de pulso no contrastadas en T2 para obtener imágenes con líquido estático del tracto urinario aun si la función renal es anormal. La segunda técnica es análoga a la urografía intravenosa convencional y se llama urorresonancia excretora, en la que es necesario administrar de forma endovenosa un contraste no nefrotóxico a base de un quelato de gadolinio y después de su excreción renal la urina realzada con el gadolinio se visualiza con secuencias rápidas ponderadas a T1 con saturación grasa. El protocolo de urografía con resonancia magnética en combinación con imágenes de resonancia magnética convencional reduce la necesidad de una pielografía invasiva. Introduction. MR urography has been used satisfactorily to evaluate kidneys, pelvicaliceal system, ureters and bladder, this technique has the advantage of not using ionizing radiation and also the potential to provide functional information as CT or even more. Case report. We present a case of a 25-years-old pregnant woman with right lumbar pain and probable urolithiasis, the static fluid MR urography demonstrate extrinsic ureteral compression by the pregnant uterus at the lower third bilaterally but predominantly right as well as, right kidney hydronephrosis and pyelonephritis, with the direction of an MR specialized radiologist, pelvic complementary images were taken in order to evaluate the ureter-bladder junction without evidence of urolithiasis. Discussion. MR urography is based in two different imaging strategies basically, which can be used in a complementary manner to cover the mayor aspects in the diagnosis of the upper urinary tract diseases. The first technique utilizes unenhanced heavily T2-weighted pulse sequences to obtain static-fluid images of the urinary tract, even if the renal excretory function is abnormal. The second MR urography technique is analogous to conventional intravenous urography and is called excretory MR urography, in which is necessary to administer intravenously a non-nephrotoxic gadolinium chelate and after its renal excretion, the gadolinium-enhanced urine is visualized using fast T1-weighted fat saturated sequences. Magnetic resonance urography protocol performed in combination with standard MR imaging offers a potential to reduce the need for invasive pyelography. Palabras clave. Urorresonancia con líquido estático. Urorresonancia excretora. Urolitiasis. Obstrucción del tracto urinario. Embarazo. Paciente pediátrico. Key words. Static-fluid MR urography. Excretory MR urography. Urolithiasis. Urinary tract obstruction. Pregnant women. Pediatric patients. * MRI Unit, Medica Sur Clinic & Foundation, Mexico City. Correspondence: Ernesto Roldán-Valadez, M.D. Magnetic Resonance Unit, Medica Sur Clinic & Foundation. Puente de Piedra, No. 150. Col. Toriello Guerra. Deleg. Tlalpan. C.P. 14050, Mexico City, Mexico. Tel.: (52 55) 5666-1625. E mail: ernest.roldan@usa.net 38 Rev Invest Med SurEnero-Marzo Mex, 2012; 19 (1): 38-45 Rev Invest Med Sur Mex, 2012; 19 (1): 38-45 Ramírez-Carmona R, et al. INTRODUCTION Magnetic resonance urography (MRU) was described since 1987 at the University Hospital of Freiburg Germany, as a complementary method to evaluate urinary tract abnormalities. Due to the long T2 relaxation time of fluid in the collecting system, heavily T2-weighted sequences have been used.1 MRU provides a non-invasive visualization not only of the collecting system but also of the renal parenchyma using fast spin-echo pulse sequences as well. Currently the most common MR urographic techniques for examine the urinary tract can be divided into two categories: static-fluid MR urography and excretory MR urography. Static-fluid MR urography includes heavily T2-weighted sequences to image the urinary tract as a static collection of fluid, which can be repeated with cine MR urography principally to confirm stenosis. Excretory MR urography is performed during the excretory phase of gadolinium enhancement after de intravenous administration in patients with an adequate renal function. Diuretic administration can be useful in excretory MR urography in demonstration of nondilated collecting systems.2 There are several publications showing the utility and transcendence of MRI urography, although currently this is not a routine test, even with the acknowledgement of its special applications in pediatric and pregnant women population (Table 1). Clinical urography requires both morphological and functional information about the kidneys and collecting system. MRU performed with contrast material can meet all demands of clinical urography and in some cases, could replace conventional X-ray urography. We present a case of a 25-years-old pregnant woman in the 19th week of gestational state with urinary symptoms, right lumbar pain and no fever who underwent abdominal ultrasound and MRU. The main imaging findings are presented as well as a brief review of the relevant literature. CASE REPORT A 25-years-old woman, at 19 weeks of normal pregnancy was admitted to our hospital due to a clinical history of 7 days with dysuria, tenesmus, urinary urgency and colic pain in the right lumbar zone irradiated to the ipsilateral iliac fossa. Physical examination performed at emergency room revealed right lumbar tenderness on palpation and no fever was reported. Under this clinical setting an abdominal ultrasound dedicated to urinary system was performed, which shows bilateral pyelocaliceal dilatation predominantly in the right kidney without hyperecoic image suggesting lithiasis (Figure 1) and dilatation of right ureter was suspected in the exploration of the pelvis along the right iliac vein (Figure 2). Subsequently an MR urography was requested by the physician and carried out without contrast, this reported hydronephrosis and pyelonephritis of the right kidney, with bilateral but predominantly right ureteral dilatation secondary to external compression by pregnant uterus and no evidence of ureterolithiasis was found (Figure 3 and 5). The patient received conservative treatment for urinary infection, she was discharged of the emergency area and continued her follow-up as an outpatient with satisfactory evolution. DISCUSSION Static and excretory MRU are complementary methods for morphological and functional evaluation of the urinary system, in this case, considering the pregnancy age of the patient, only and static MRU was performed, however the obtained information was enough to make a diagnosis and decisions on treatment. This case results quite interesting due to the low frequency still of urinary system assessment using this non-invasive method, even when it is well known that MR is clinically useful in evaluating many urinary tract disorders, not only those related with urolithiasis but also, congenital anomalies, diagnosis and staging of cancers of the kidneys, bladder, and prostate gland, and even the assessment of renal function.2 The MRU has some considerations, which are important to know for clinicians: • Patient preparation. Asking the patients to void prior to entering the imager improves their comfort and prevents interruption of the study at an inopportune time. If there are no contraindications, patients should be given 250 mL of normal saline solution intravenously at the start of imaging. Usually oral negative contrast agents are not required to reduce the signal intensity of bowel contents.2 • Advantages and limitations. Inherently, MR imaging is superior to other techniques such as computed tomography (CT) in that it provides better tissue contrast resolution, greater sensitivity for contrast enhancement, and can potentially provide more information about tissue properties than does radiography or CT. Above all, unlike intravenous urography and CT urography, MR imaging does not use ionizing radiation and this favor certain patient populations such as Rev Invest Med Sur Mex, 2012; 19 (1): 38-45 39 40 Nikken Riccabona Kawashima Aerts 2004 2003 1996 Leyendecker 2008 2007 Silverman 2009 Pais O Connor 2010 2007 Author(s) Year Rev Invest Med Sur Mex, 2012; 19 (1): 38-45 Breath-hold MR urography using the HASTE technique CT urography and MR urography Potential impact of pediatric MR urography on the imaging algorithm in patients with a functional single kidney MRI of the kidney–state of the art Urolithiasis in pregnancy MR urography: techniques and clinical applications What is the current role of CT urography and MR urography in the evaluation of the urinary tract? MR urography Title AJR Radiologic Clinics of North America AJR Eur Radiol Urologic Clinics of North America Radio Graphics Radiology AJR Journal Table 1. Publications showing the transcendence of MR urography in different scenarios. Image quality was excellent in all cases: no motion-related artifacts were seen, and superimposition of fluid-filled bowel loops was not a significant problem. MR urography currently serves as an alternative imaging technique to intravenous urography and CT urography for children and pregnant women and for patients with contraindications to iodinated contrast media. MR urography allows a reliable assessment of renal and ureteral anatomy and of dysplastic or ectopic renal buds, even in non- or poorly functioning systems. MRI and CT show comparable accuracy in detection and characterization of most renal lesions. MRI can have additional diagnostic value in the evaluation of lesions with minimal amounts of fat or with intracellular fat. Data suggest that MRI has a higher sensitivity in evaluating complicated cysts, however, the clinical implications still have to be studied. MRI provides detailed, cross-sectional images without exposure to ionizing radiation, to investigate ureteral obstruction in pregnant women. Typically, hydronephrosis of pregnancy is seen as hydroureter to the level of the pelvic brim, probably by compressing the ureter between the pelvic brim and the uterus, which is readily demonstrated with this method. Static-fluid and excretory MR urography can be combined with conventional MR imaging to provide a comprehensive evaluation of the kidneys, ureters, bladder, vasculature, and soft tissues in patients with symptoms referable to the urinary tract. Despite the diagnostic superiority of CT and MR urography relative to intravenous urography, each test has its limitations and disadvantages. MRU is a useful one-stop imaging technique for pregnant and pediatric patients, for patients with impaired renal function, and for patients with congenital abnormalities. Conclusion Hydronephrosis and pyelonephritis in a pregnant woman Ramírez-Carmona R, et al. A B Figure 1. Abdominal ultrasound dedicated to kidneys shows: A. Pyelocaliceal dilatation in an oblique plane through right kidney. B. Tubular structure along the way of the right ureter without flux demonstration with Doppler modality, which probably represents dilation of right ureter. A B C Figure 2. A. Sagital MR image on FSE T2 weighted sequence demonstrate tapering of the distal right ureter due to pregnant uterus extrinsic compression without intraluminal hypointense images that suggest lithiasis. B. FSE T2 weighted axial image shows bilateral ureter dilatation in the right about 13 mm and in the left 8 mm in diameter, note is made of the voluminous uterus and the fetal head within at the pelvic cavity. C. Bilateral pyelocaliceal dilatation is also shown. Figure 3. Sequential coronalplane FSE T2-images showing a case with severe pyelocaliceal dilatation. Rev Invest Med Sur Mex, 2012; 19 (1): 38-45 41 Hydronephrosis and pyelonephritis in a pregnant woman Table 2. Advantages and some limitations of MR urography. Advantages Disadvantages No iodinating radiation is used (useful for pediatric patients, pregnant women, and patients who require frequent imaging of urinary tract). Cost (when used with gadolinium and arteries evaluation). Does not depend on renal function. Multiplanar capability. Limited retrospective reconstruction capability. Best method to evaluate chronic urolithiasis changes and exact situation of stone for evaluating their removal. Limited for detection of small size urolithiasis. High contrast resolution. Provides functional information. pregnant women, children, and patients who need repeated examinations of the urinary tract.2,3 In addition, because the number of acquisitions is not limited by factors other than the examination time, repeated acquisitions can be used to generate time intensity curves in order to assess renal function. MR is relatively insensitive for the detection of calcification, though the diagnosis of ureteral calculi often is made detecting secondary sign of obstruction such as ureteral dilatation and perinephric fluid; sometimes a persistent filling defect can be identified.3 Nonetheless, sensitivities reach 90% for the diagnosis of ureteral calculi with excretory MR urography, they depend on the technique, due to higher sensitivities have been reported for excretory MR urography than for staticfluid T2-weighted techniques.4,5 MR urography is an attractive alternative to CT urography because ionizing radiation is not used, however the sensitivity for detecting small urothelial carcinoma (due to the inferior spatial resolution relative to CT) is probably lower of MR urography3 (Table 2). Clinical applications • Urolithiasis. Calculi are encountered not only with unenhanced multidetector CT but also with MR urography. Most urinary tract calculi appear as signal voids with T1- and T2-weighted sequences. At static-fluid and excretory MR urography, calculi appear as dilling defects when surrounded by urine or contrast material. They are better visualized in axial images, instead of MIP images, the source images must always be reviewed because small defects may be obscured by the surrounding urine on MIP projections.6,7 42 However, low-signal-intensity filling defects within the urinary tract are not specific for calculi. Blood clots are seen as single or multiple filling defects that may cause temporary ureteral obstruction, but can be distinguished since they typically exhibit high-signal-intensity elements on unenhanced T1-weighted images and become much smaller or disappear within several weeks.8 Neoplasm can also show filling defects but can be distinguished since typically enhance after intravenous contrast material administration.2 Some authors such as Karabacakoglu et al. reported a better sensitivity founding collecting system calculi with diuretic-augmented excretory MR urography.4 In a study by Jung et al., diuretic-augmented excretory MR urography helped make the correct diagnosis in 64 of 72 patients with ureteric calculi, compared with 49 of 72 patients for conventional intravenous urography.9 Some additional findings of acute stone colic include increased perinephric fluid on T2-weighted images and ureteral dilatation proximal to the stone.5 Apart from its limited value in acute urolithiasis, MR urography may play a potential role in patients with chronic urolithiasis, in whom neither ultrasonography nor CT can sufficiently explain, the complicated state of the chronically affected urinary tract. The MR urography not only helps to avoid radiation exposure due to repeated CT examinations. Especially in chronic nephrolithiasis resistant to treatment, MR urography can be used to obtain valuable information about the true location of calculi and the anatomy of the stonebearing calix. Those data are clinically relevant to determine whether a stone has a potential chance to pass the infundibulum and renal pelvis after lithotripsy or during endo-urologic stone removal.10 Rev Invest Med Sur Mex, 2012; 19 (1): 38-45 Ramírez-Carmona R, et al. Figure 4. FSE T2 axial (AB) and sagittal (C-E) consecutive images of a 3-year-old patient with history of urinary infections showing prominent pyelocaliceal dilatation on the left side, that increases kidney volume and thinning of the renal parenchyma, the ureters are not visible at the pielo-ureteral to the ureteralbladder junction. • Urinary tract obstruction unrelated to urolithiasis. The differential diagnosis of ureteral obstruction include intraluminal (besides calculi, blood clots, papillary necrosis), intramural (tumor, infection diseases, post-surgery/instrumentation trauma, lesions after radiotherapy, ureterocele, megaureter) and extrinsic abnormalities (retroperitoneal fibrosis, invasion or compression by extrinsic malignancy, lymphadenopathy, inflammatory diseases).6 Especially in the patients with extrinsic obstruction the combination of MR urography and conventional axial MR pulse sequences offers a “one-stop” method.10 • Hematuria. The evaluation of hematuria requires the use of additional sequences of MR urography, they allow the detection of renal parenchymal and vascular lesions as well as urothelial abnormalities. MR imaging is excellent for the detection, characterization, and staging of renal neoplasm.11 In most solid renal lesions, neither CT nor MRI are able to reliably distinguish benign from malignant. Some solid lesions, however, may be identified as benign with high confidence, like angiomyolipomas. Though in general, if a lesion cannot be characterized as benign or malignant it should be considered malignant.12,13 In patients suspected of having a transitional cell carcinoma, there is a good opportunity to combine MR urography with standard MR imaging in the axial plane. On unenhanced T1-weithgted MR images of standard spin-echo sequences, transitional cell carcinomas are mainly isointense to the normal renal parenchyma, whereas they display a more heterogeneous signal morphology including hyperintense and cystic-like areas on T2-weighted. We also expect a moderate gadolinium enhancement of such tumors on axial T1-weihgted spin-echo images. Conventional pulse sequences may also prove useful for the assessment of a parenchymal tumor infiltration or, vice versa, for the differentiation of an intrinsic tumor from a renal cell carcinoma with secondary invasion of the collecting system.10 Rev Invest Med Sur Mex, 2012; 19 (1): 38-45 43 Hydronephrosis and pyelonephritis in a pregnant woman • Pre and post operative assessment. The role of MRU in patients undergoing urinary diversion or after renal transplantation is emerging. MRU allows visualization of anastomoses, as well as of associated complications such as strictures, ureteral compression by lymphocele or haematoma, urine leaks, fistulae, stones as signs of infection. 6 Table 3. Clinical applications of MR urography. Special considerations Without Gadolinium With Gadolinium Pediatric patients Detection of virtually all tipes of urinary tract anomalies such as: ureteroceles, bladder diverticula, markedly obstructed duplex systems, megaureters, stenosis of the ureteropelvic junction, cystic kidney diseases. Small anatomic variations such as pelvicaliceal diverticula Obstetric Lithiasis and hydronephrosis. Transplanted kidneys Urinary leaks and fistulas. Urology Assessment of urinary tract after orthotopic neobladder reconstruction. Urolithiasis with dilated and non-dilated urinary tract specially chronic. Oncology Intrinsic tumors located in the pelvicaliceal system or ureter. Figure 5. Same patient as figure 3, maximum intensity projection images (A-B) from an MR urogram obtained with a coronal 2D FIESTA (fat suppressed) sequence, note the important dilatation of left collecting system, and absence of almost the total left ureter, with just a remnant of the distal ureter which showing focal constrictions and dilatations. 44 Rev Invest Med Sur Mex, 2012; 19 (1): 38-45 Ramírez-Carmona R, et al. Some special considerations in the clinical application of MR urography are presented in table 3. CONCLUSION Static and excretory MRU are complementary methods for morphological and functional evaluation of the urinary system, which can be alternatively employed according to the degree of urinary tract dilatation and renal function. These methods have some advantages over ultrasound, conventional urography and CT urography in the diagnosis of urological diseases. The three-dimensional nature of the data permits to reformat images into any plane and better allows the diagnosis of different pathological conditions. There is also the advantage of eliminating ionizing radiation. MRU is accepted nowadays as the most important tool in the diagnostic of genitourinary pathologies in infants, small children and in pregnant women. The principal disadvantage is its low sensitivity in detecting calcifications and subtle urothelial lesions, due to the reduced spatial resolution; however dedicated protocols with longer acquisition times can overcome these situations. MRU can be offered as an alternative to conventional urography and CT urography to avoid repetitive radiation exposure in patients with chronic urolithiasis. The use of combined techniques, including conventional MRI (static images), functional MR sequences (contrast-enhanced excretory MRU) and MR angiography provide a high-quality comprehensive evaluation of the entire urinary tract, given evidence for an accurate and non-invasive diagnostic. Cost adjustments are still pending to make this tool and attractive option for clinicians allowing them to choose it as a surrogate of other imaging options. Revista de Investigación REFERENCES 1. Friedburg HG HJ, Frankenschmidt A. RARE-MR urographie: ein schnelles nicht-tomographisches aufnahmeverfahren zur darstellung der ableitenden darnwege mittels magnetischer kernresonanz. Radiologe 1987; 27: 45-7. 2. Leyendecker JR, Barnes CE, Zagoria RJ. MR urography: techniques and clinical applications. Radiographics: a review publication of the Radiological Society of North America, Inc. 2008; 28: 23-46, discussion-7. 3. 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Órgano de Difusión de la Sociedad de Médicos Rev Invest Med Sur Mex, 2012; 19 (1): 38-45 45 Instrucciones para el envío de manuscritos a la Revista de Investigación Médica Sur Normas para los Autores La Revista de Investigación Médica Sur sigue los lineamientos del Comité Internacional de Editores de Revistas Médicas. GENERALIDADES El texto de artículos observacionales y experimentales debe seguir la estructura IMRaD, con las siguientes secciones: Introducción, Material y métodos, Resultados y Discusión. Todo el manuscrito debe escribirse en letra de 11 puntos, a doble espacio, sin utilizar tipografía en negritas o subrayado, el uso de cursivas únicamente se utilizará para palabras escritas en otro idioma que no sea español, todas las páginas deben numerarse. Todos los manuscritos deben acompañarse de la lista de requerimientos. El envío del manuscrito se realizará vía electrónica al correo invbio@medicasur.org.mx. La estructura del manuscrito debe ser la siguiente: 1. Página del título: • Título del artículo. El título debe ser conciso, pero debe proveer información sensible y específica que permita la recuperación electrónica del manuscrito. • Nombres de los autores y sus afiliaciones institucionales. Comenzar con el nombre seguido de los apellidos de cada autor, deben separarse por comas y no se deben incluir grados académicos. Debajo de los nombres se debe incluir el departamento(s) e institución(es) de cada uno de ellos, indicándose con asteriscos en caso de pertenecer a distintos departamentos o instituciones. • Autor correspondiente. Se debe indicar el nombre, dirección postal, números de teléfono y fax, y la dirección de correo electrónico (e-mail) del autor responsable de la correspondencia respecto al manuscrito. • Título corto. Incluir un título informativo menor de 40 caracteres. 2. Resumen y abstract. Todos los resúmenes deben tener una extensión no 46 mayor a 250 palabras. Los artículos originales deben seguir la estructura: Introducción, Material y métodos, Resultados y Conclusión. Las revisiones y casos clínicos deben incluir un resumen narrativo menor de 250 palabras. Se deben incluir de tres a cinco palabras clave que no se mencionen en el título del manuscrito y que se encuentren en la base de datos MeSH (http:// www.ncbi.nlm.nih.gov/mesh). Se debe incluir una traducción al inglés del resumen y palabras clave. ARTÍCULOS ORIGINALES • Introducción. Proporciona un contexto o los antecedentes para el estudio. El último párrafo de la introducción debe plantear tanto el objetivo primario como los objetivos secundarios, los cuales deben ser claros. Se deben proporcionar únicamente las referencias pertinentes y no incluir datos o conclusiones del trabajo que se comunica. • Material y métodos. Esta sección debe incluir únicamente la información disponible en el momento en que se escribió el plan o protocolo del estudio; toda la información obtenida durante la conducción del estudio pertenece a la sección de Resultados. Se recomienda utilizar la siguiente secuencia: selección y descripción de los participantes, información técnica y estadística. • Resultados. Presenta los resultados en secuencia lógica en el texto, tablas y figuras; proporciona primero los hallazgos principales o más importantes. No repite en el texto todos los datos de las tablas o figuras; enfatiza o resume sólo observaciones importantes. • Discusión. Enfatiza los aspectos nuevos e importantes del estudio y las conclusiones que se desprenden de él. No repite en detalle los datos y otros materiales mencionados en la Introducción o en los Resultados. El último párrafo de la Discusión debe ser la conclusión, la cual debe ser clara y concisa (no mayor a cuatro líneas). • Referencias. Aunque las referencias de los artículos de revisión pueden ser una forma eficiente de guiar a los lectores a la literatura, los artículos de revisión no siempre reflejan con precisión el trabajo original. Por lo tanto, se debe proporcionar a los lectores las refe- Rev Invest Med SurEnero-Marzo Mex, 2012; 19 (1): 46-47 Rev Invest Med Sur Mex, 2012; 19 (1): 46-47 Normas para los Autores • • • • rencias directas a las fuentes de la investigación original siempre que sea posible. Un número pequeño de referencias a los artículos clave originales a menudo sirven igual que listas exhaustivas. El estilo de los Requisitos Uniformes se basa en el estilo convencional ANSI, adaptado de la Biblioteca Nacional de Medicina (NLM) para sus bases de datos. Para ejemplos de formatos de las referencias los autores deben consultar: http://www.nlm.nih.gov/bsd/ uniform_requirements.html, se debe evitar mencionar el número y el mes de publicación de la referencia. Tablas. Las tablas se numeran consecutivamente (números arábigos) en el orden de su primera cita en el texto y con un breve título para cada una. Sólo se deben marcar líneas horizontales. Las abreviaturas no convencionales se explican al pie de la tabla; en las notas al pie se utilizan los siguientes símbolos, en secuencia: *, †, ‡, §, ||, **, ††, ‡‡. Asegúrese de que cada tabla está citada en el texto. Figuras. Las figuras deben numerarse consecutivamente (números arábigos) de acuerdo con el orden en que se citaron en el texto. Si una figura ya se publicó se debe hacer el reconocimiento de la fuente original y enviar la autorización por escrito del que tiene el derecho de autor para reproducir el material. Se requiere autorización independientemente de la autoría o del que publica, excepto para documentos del dominio público. Las figuras deben ser adecuadas para impresión y enviarse como archivos electrónicos (por ejemplo JPEG o GIF). Las leyendas de las figuras deben incluirse en una hoja independiente. Unidades de medida. Los autores deben consultar la información del Sistema Internacional de Unidades. Abreviaturas y símbolos. Se deben usar abreviaturas estándar; el uso de abreviaturas que no son convencionales puede ser sumamente confuso para los lectores. Evite las abreviaturas en el título. El término completo que corresponde a la abreviatura debe preceder a su primera mención en el texto, a menos que sea una unidad estándar de medida. Revista de Investigación CASOS PROBLEMA La Revista no recibirá casos clínicos, en su lugar se publicarán casos problema. La finalidad de estos manuscritos es proveer información clínicamente útil basada en evidencia. La estructura de estos manuscritos será la siguiente: página de título, resumen narrativo menor de 250 palabras y breve presentación del caso. Incluir una serie de preguntas de opción múltiple (no menos de cinco preguntas ni más de diez), considerando los siguientes tópicos: etiología, fisiopatología, diagnóstico, manejo, pronóstico. Al final de cada pregunta indicar la respuesta correcta con la referencia del artículo que lo sustenta, se recomienda incluir referencias de alto valor científico. ALGORITMOS MÉDICO-QUIRÚRGICOS La Revista no recibirá casos clínicos, en su lugar se publicarán algoritmos médico-quirúrgicos, la finalidad de estos manuscritos es mostrar algoritmos de toma de decisiones diagnósticas o terapéuticas. La estructura de estos manuscritos será la siguiente: página de título, resumen narrativo menor de 250 palabras, breve presentación del caso, algoritmo (específico) para toma de decisiones (de diagnóstico y manejo), considerando lineamientos y/o mejor nivel de evidencia disponible. ARTÍCULOS DE REVISIÓN Los artículos de revisión deben seguir la siguiente estructura: página de título, resumen narrativo menor de 250 palabras, texto de la revisión, referencias, tablas, figuras y pie de figuras (el tiempo de publicación de este tipo de manuscritos es considerablemente mayor a otro tipo de trabajos). IMÁGENES EN MEDICINA La estructura de estos manuscritos es página de título, caso clínico (menor a 250 palabras), lista de referencias (no más de tres referencias), figuras y pie de figuras. Órgano de Difusión de la Sociedad de Médicos Rev Invest Med Sur Mex, 2012; 19 (1): 46-47 47