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TRABAJO ORIGINAL Características clínicas y factores asociados al cáncer de páncreas Clinical characteristics and associated factors to pancreatic cancer Mery Carold Pareja-Sebedo,1 Mario Valdivia-Roldán2 y Julio Grados-Doroteo3 RESUMEN Objetivo. Determinar las características de presentación y los factores asociados al cáncer de páncreas (CP). Material y métodos. Estudio descriptivo, retrospectivo, tipo serie de casos; la muestra estuvo conformada por historias clínicas de pacientes mayores de 18 años, registrados en la base de datos del servicio de Estadística del Hospital Nacional Arzobispo Loayza, durante el período de enero 2007-diciembre 2012, con diagnóstico de egreso de CP. Resultados. De un total de 133 pacientes, la edad media de presentación de CP fue de 65 años, el 61,7 %, fue de mujeres. Los síntomas/signos clínicos al momento del diagnóstico más frecuentes fueron dolor abdominal (87,2 %); hiporexia (85 %), ictericia (79,7 %), pérdida de peso (73,7 %), náuseas/vómitos (39,8 %), masa abdominal (18,8 %), coluria (16,5 %), el prurito (8,3 %), ascitis (3,8 %) y ascitis (0,8 %). Solo dos casos presentaron antecedentes familiares de CP y de los factores no hereditarios asociados, se tuvo obesidad (32,3 %), tabaquismo (16,5 %), diabetes mellitus (12,0 %) y colecistectomía (10,5 %). Conclusión. El dolor abdominal fue el síntoma de presentación más común al momento del diagnóstico de cáncer de páncreas, y la obesidad, el tabaquismo y la diabetes son los factores asociados no hereditarios más frecuentes. Palabras clave. Cáncer pancreático, dolor abdominal, ictericia, obesidad, tabaquismo, diabetes mellitus, colecistectomía. ABSTRACT Objectives. To determine the characteristics of presentation and associated factors with cancer of the pancreas. Material and methods. Descriptive and retrospective study, series of cases was carried out. The sample comprised the medical records of patients aged 18 years and older, recorded on the data base of the statistics’s service of the Archbishop Loayza National Hospital, during the period of January 2007-December 2012, with a diagnosis at discharge of pancreatic cancer. 1. Médico internista. 2. Médico gastroenterólogo. Servicio de Gastroenterología. Facultad de Medicina, Universidad Peruana Cayetano Heredia. Hospital Nacional Arzobispo Loayza (HNAL). 3. Médico oncólogo. Servicio de Oncología, HNAL. 58 Rev Soc Peru Med Interna. 2014;27(2):58-62 Results. A total of 133 patients was included, with a mean age of presentation of pancreatic cancer of 65 year-old; and, 61,7 %, women. The most frequent symptoms/clinical signs at the time of the diagnosis were abdominal pain (87,2 %); hyporexia (85,0 %), jaundice (79,7 %), weight loss (73,7 %), nausea/vomiting (39,8 %), abdominal mass (18,8%), coluria (16,5 %), pruritus (8,3 %), ascites (3,8 %) and ascites (0,80 %). Only two cases had a family history of pancreatic cancer and the associated non-heritable factors were obesity (32,3 %), smoking (16,5 %), diabetes mellitus (12,0 %) and cholecystectomy (10,5 %). Conclusion. Abdominal pain was the most common presentation symptom at diagnosis of pancreatic cancer; and, obesity, smoking, and diabetes were the most frequent nonheritable associated factors. Key words. Anemia, pregnancy, prevalence, urban, rural. M. C. Pareja-Sebedo, M.Valdivia-Roldán, J. Grados-Doroteo INTRODUCCIÓN El cáncer de páncreas (CP) representa por lo menos 2% de todos los cánceres a nivel mundial.1-6 En Perú, la incidencia es de 3,1 casos por 100 000 habitantes; la relación hombre/mujer, 1/1 y la media de edad, 70 años.7 El pronóstico del CP es muy pobre y con una supervivencia actual a tres años menor de 5%.8-10 Su etiología es desconocida, aunque la predisposición genética es el principal factor de riesgo para su desarrollo.11,12 El grupo sanguíneo ha sido estudiado pero el mecanismo exacto de esta asociación aún no está determinado.13,14 Dentro de los factores ambientales, el tabaquismo es el más relacionado con esta neoplasia.15,16 La relación con la diabetes continúa generando controversia mientras que el papel de la obesidad ha tomado importancia en los últimos años.17,19,20,22 Se ha reportado la asociación entre el CP y el antecedente de colecistectomía así como con el contacto previo con el virus de la hepatitis B.23,24,26 La relación entre el CP y el uso de ácido acetilsalicílico se encuentra en estudio.27,28 Usualmente, en su estadio inicial, el CP es silente y solo se manifiesta después de invadir los tejidos adyacentes o presentar metástasis.29,30 El objetivo de este estudio fue conocer las características clínicas y los factores asociados al CP en un hospital general. MATERIAL Y MÉTODOS Se realizó un estudio descriptivo, retrospectivo, tipo serie de casos, y la muestra estuvo conformada por historias clínicas de pacientes mayores de 18 años, registrados en la base de datos del servicio de Estadística del Hospital Nacional Arzobispo Loayza (HNAL), Lima, durante el período de enero 2007-diciembre 2012, con diagnóstico de egreso de CP, realizado mediante hallazgos anatomopatológico o de imágenes (tomografía o ecografía abdominal). Se tuvo 368 historias clínicas con el diagnóstico de egreso de CP. No se pudieron encontrar 105 historias clínicas por haber sido depuradas del archivo. Otras 117 correspondieron a neoplasias de otros órganos gastrointestinales o síndromes ictéricos de etiología no determinada. De las 146 historias clínicas con diagnóstico de CP, 13 de ellas se excluyeron por encontrarse incompletas, por lo que finalmente quedaron 133 historias clínicas para el estudio. Hubo 36 casos diagnosticados por anatomía patológica y 97 casos, por imágenes. No se tomó datos que pudieran vulnerar la intimidad y/o la confidencialidad de la información personal de los pacientes. Definiciones Datos demográficos: se recolectó los datos corres pondientes a sexo y edad del paciente. Factor asociado: aquel que contribuye al desarrollo de una enfermedad. Se consideró los siguientes factores asociados al CP: •Hereditarios –Grupo sanguíneo: la presencia de grupos sanguí neos del tipo no O (A, B o AB) –Antecedente familiar: el antecedente de CP en familiares de primer grado. • No hereditarios –Tabaquismo: consumo acumulado de cigarrillos de 10 o más paquetes al año. –Uso de fármacos: antecedente de empleo de ácido acetilsalicílico, en consumo mayor o igual a 6 tabletas de 100 mg, por semana, durante un tiempo no menor de 6 meses. –Obesidad: índice de masa corporal (IMC) igual o mayor de 30 kg/m2. –Diabetes mellitus: diagnóstico de diabetes mellitus tipo 2 con una antigüedad mayor de un año previo al diagnóstico de CP. –Infecciones: infección previa por hepatitis B. –Intervenciones quirúrgicas: antecedente de cole cistectomía con una antigüedad de dos o más años previos al diagnóstico de CP. Exámenes de laboratorio • Anemia: hemoglobina (Hb) menor de 13 g/dL en varones o menor de 12 g/dL en mujeres. • Hipoalbuminemia: albúmina sérica menor de 3,5 g/dL. • Hiperbilirrubinemia: bilirrubina total mayor de 1,5 mg/dL. Para el procesamiento de la información se empleó el programa SPSS V.21. Los datos de las variables cualitativas se expresaron en frecuencias absolutas y relativas y las cuantitativas, en medias y desviación estándar. Rev Soc Peru Med Interna 2014;27(2):58-62 59 Características clínicas y factores asociados al cáncer de páncreas RESULTADOS En un total de 133 pacientes, la edad media de presentación de CP fue 65 ± 12,3 años (rango: 24-89 años); y, 82 (61,7 %) fueron de sexo femenino y 51 (38,3 %), de sexo masculino. Los síntomas/signos clínicos presentados al momento del diagnóstico fueron dolor abdominal (116 casos, 87,2 %), hiporexia (113, 85,0 %), ictericia (106, 79,7 %), pérdida de peso (98, 73,7 %), náuseas/vómitos (53, 39,8 %), masa abdominal palpable (25, 18,8 %), coluria (22 casos, 16,5 %), prurito (11, 8,3 %), ascitis (5, 3,8 %) y derrame pleural (1, 0,8 %). Las hallazgos de laboratorio más frecuentes fueron hiperbilirrubinemia (105 casos, 75,0 %), anemia (90 casos, 66,7 %) e hipoalbuminemia (60 casos, 45,1 %). Con respecto a los factores hereditarios asociados al CP, solo dos casos (1,5 %) presentaron antecedentes familiares de CP. En lo referente al grupo sanguíneo, este dato solo se reportó en 82 historias clínicas, el grupo O fue el más frecuente (56 casos, 68,3 %), seguido de los grupos A (25 casos, 30,5 %) y B (1, 1,2 %). En cuanto a los factores no hereditarios asociados al CP, los presentes fueron obesidad, tabaquismo, diabetes mellitus y colecistectomía (Figura 1). DISCUSIÓN Durante los últimos años, el estudio del CP ha adquirido relevancia debido a su alta mortalidad, que, a pesar de tener una baja incidencia, ocupa el cuarto lugar en mortalidad por cáncer en los países desarrollados.1-6 En este estudio se encontró que la edad promedio al momento del diagnóstico fue 65 años, valor menor al reportado a nivel nacional y por otros autores;2,3,5,7 pero, que coincide con otros reportes.4,34 El hallazgo del presente estudio de la predominancia de mujeres difiere de lo reportado, donde es 30 % más común en varones.2,5,6 Esto puede explicarse por la mayor población femenina que atiende el HNAL, con una relación mujer/hombre de 2,3/1. Se conoce que el CP suele ser clínicamente silente en sus estadios iniciales, y solo se manifiesta después de invadir los tejidos circundantes o realizar metástasis. Esto y los síntomas inespecíficos de presentación contribuyen a un diagnóstico tardío del CP.5,6,29,30 En este estudio se encontró que el síntoma más frecuente fue el dolor abdominal, lo que coincide con lo reportado en varios estudios.10,29,31 El dolor se localizó, por lo general, en el epigastrio y el hipocondrio derecho, lo que se debe fundamentalmente a la infiltración de los plexos celíaco y mesentérico superior.6,22 Esto convierte al dolor en un síntoma de mal pronóstico, asociado con menor probabilidad de resección y de supervivencia.6,22,30 La frecuencia de hiporexia e ictericia fue mayor a la reportada en otras series de casos, 50 % a 60 %.10,31 Los altos porcentajes de pérdida de peso, náuseas/vómitos y masa abdominal palpable hallados coincidieron con lo reportado.30 Otros síntomas/signos como coluria, prurito, ascitis y derrame pleural se presentaron con menor frecuencia en comparación con otros trabajos.2,29,31 Figura 1. Factores no hereditarios asociados al cáncer de páncreas, Hospital Nacinal Arzobispo Loayza. 45 32,3 % 40 35 30 16,5 % 25 12,0 % 20 10,5 % 15 10 5 0 60 Obesidad Tabaquismo Rev Soc Peru Med Interna. 2014;27(2):58-62 Diabetes Colecistectomía 0% 0% Ácido acetilsalicílico Hepatitis M. C. Pareja-Sebedo, M.Valdivia-Roldán, J. Grados-Doroteo La alta frecuencia de hiperbilirrubinemia e hipoalbumi nemia indica que predominó un compromiso obstructivo del tumor primario y hubo deterioro del estado general del paciente al momento del diagnóstico de CP. De los factores hereditarios asociados, se encontró un porcentaje inferior a los reportados en diversos estudios, en los que alcanzan de 5 % a 10 % de todos los casos de CP.1-3 El grupo sanguíneo más frecuente en nuestra población estudiada fue el O, seguido del A. Según otros estudios se determinó que los individuos con tipo sanguíneo no O (A, B o AB) tienen un mayor riesgo de CP, aunque el mecanismo real de esta asociación no está dilucidado.13,14 La obesidad fue el factor no hereditario más frecuente hallado y fue superior al reportado en otro estudio descriptivo.31 Los individuos obesos tienen 20 % más de riesgo de desarrollar CP que aquellos que tienen un peso corporal normal. Los tejidos adiposos actúan en la regulación de la liberación de ácidos grasos libres, citocinas y hormonas, lo que conduce al desarrollo de resistencia a la insulina y de hiperinsulinemia crónica compensatoria. El aumento de los niveles de insulina y de IGF-1 podría promover la proliferación celular e inhibir la apoptosis, lo que contribuye a la carcinogénesis pancreática.20-22 También se ha sugerido que un incremento en el daño del ADN en el páncreas, causado por un elevado nivel de peróxido en pacientes con un IMC elevado, proporcionaría otra posible relación entre la obesidad y la predisposición al CP.22 El tabaquismo fue el segundo factor no hereditario más frecuente hallado. En los reportes de estudios previos se ha determinado que el tabaquismo es responsable de 20% de los casos de CP.2,3 La mayoría de los estudios establecen que los fumadores tenían dos veces más riesgo de desarrollar CP comparado con los no fumadores, y este riesgo persiste durante un mínimo de cinco a diez años después de dejar de fumar.15,16 Se sabe poco sobre el impacto del humo del cigarrillo en la carcinogénesis pancreática, los estudios han demostrado que la nicotina y algunos carcinógenos del humo del tabaco tienen la capacidad de llegar, a través de la circulación sanguínea, a la glándula pancreática, donde pueden ser metabolizados en sustancias tóxicas.15 La diabetes ocupó el tercer lugar en frecuencia dentro de los factores no hereditarios asociados al CP. La relación entre la diabetes y el CP es compleja, pero los últimos estudios apoyan la asociación.3,10 Se han postulado diversos mecanismos que podrían explicar la relación entre la diabetes de larga duración y el CP, en particular que la insulina actúa como un promotor de crecimiento y mitógeno. Es probable que altas concentraciones de insulina estén implicadas en la etiología del CP.17-19 En el presente estudio se encontró 10,5 % con antecedente de colecistectomía y, aunque este factor se encuentra en debate, algunos estudios han informado de un mayor riesgo de CP relacionado con el aumento de la liberación de colecistocinina después de una colecistectomía.23,24 A pesar de los avances tecnológicos, el diagnóstico de CP continúa siendo tardío, principalmente, a consecuencia de su sintomatología inespecífica, por lo que la identificación precoz de factores asociados permitiría reconocer el grupo de pacientes con una mayor probabilidad de desarrollar esta enfermedad. Este reconocimiento ayudaría a producir estrategias para reducir la prevalencia de este tipo de cáncer o colaborar en nuevos enfoques terapéuticos. A pesar de las limitaciones de este estudio retrospectivo, se considera que da suficiente información sobre el CP en la población estudiada. En conclusión, el dolor abdominal fue el síntoma de presentación más común al momento del diagnóstico de cáncer de páncreas, y la obesidad, el tabaquismo y la diabetes son los factores asociados no hereditarios más frecuentes. REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS 1. Hidalgo M. Pancreatic cancer. N Engl J Med. 2010;362:1605-1617. 2. Raimondi S, Maisonneuve P, Lowenfels AB. Epidemiology of pancreatic cancer: an overview. Nat Rev Gastroenterol Hepatol. 2009;6:699-708. 3. Krejs G. Pancreatic cancer: epidemiology and risk factors. Dig Dis. 2010; 28:355-358. 4. Lowenfels A, Maisonneuve P. Epidemiology and risk factors for pancreatic cancer. Hematol Oncol Clin N Am. 2002;16:1-16. 5. 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Fecha de aprobación: 15 de mayo de 2014. Declaración de conflicto de interés: ninguno según los autores. Financiamiento: por los autores. trabajo original Pacientes con enfermedades no transmisibles y sepsis atendidos en la sala de emergencia Patients with non-communicable diseases and sepsis treated in the emergency room Eduardo Carcausto-Huamaní1 y Betty Díaz-Zubieta2 RESUMEN Objetivo. Describir las características clínicas de los pacientes con enfermedades no transmisibles y sepsis que ingresan al servicio de Emergencia de un hospital general. Material y métodos. Se realizó un estudio de serie de casos consecutivos sobre las hospitalizaciones en el servicio de Emergencia del Hospital Nacional Cayetano Heredia, Lima, en pacientes con enfermedades no transmisibles y con criterios de sepsis, entre diciembre de 2010 y mayo de 2011. Se registró los datos demográficos, las fechas de ingreso y de alta, los diagnósticos y la condición al alta. Resultados. En 45 casos consecutivos, la edad promedio fue 67,4 ± 14,9 años; 40 % fueron varones, 60 % tuvieron una estancia mayor de una semana, 45 % presentaron dos o más comorbilidades, entre las que la diabetes mellitus fue la más frecuente (35,5 %). El foco infeccioso más frecuente fue el respiratorio (68,8 %). Los factores asociados con la estancia hospitalaria prolongada fueron el tener un estado laboral no productivo (69 % vs. 31 %) y un tiempo de enfermedad mayor. Conclusión. Los pacientes con enfermedades crónicas y sepsis fueron, en su mayoría, adultos mayores, portadores de diabetes mellitus y con una estancia hospitalaria prolongada. El origen de la sepsis fue principalmente un foco respiratorio. Palabras clave. Sepsis, morbilidad, hospitalización, enfermedades crónicas no transmisibles. ABSTRACT Objective. Describe the clinical characteristics of patients with non-communicable diseases and sepsis admitted to a general hospital emergency service. Material and methods. A study of series of consecutive cases of hospitalizations was performed in the service of emergency of the Hospital Nacional Cayetano Heredia, Lima, in patients with non-communicable diseases and with criteria of sepsis, between December 2010 and May 2011. It was recorded demographic data, admission and discharge dates, diagnoses and discharge condition. 1. Médico internista. Investigador del Centro de Investigaciones Ricardo Palma. 2. Médico auditor. Médico de Personal, Ministerio Publico, sede Central. Results. In 45 consecutive cases, the average age was 67,4 ± 14,9 year-old, 40% males, 60% had greater than one week stay, 45 % had two or more co-morbidities, being diabetes mellitus the most frequent (35,5 %). The most frequent infectious focus was the respiratory (68,8 %). Associated factors with prolonged hospital stay were to have a non-productive employment status (69 % vs. 31 %) and a prolonged time disease. Conclusion. Patients with chronic diseases and sepsis were, mostly, seniors, diabetes mellitus carriers and with a prolonged hospital stay. The origin of the sepsis was mainly a respiratory focus. Key words. Sepsis, morbidity, hospitalization, chronic noncommunicable diseases. Rev Soc Peru Med Interna 2014;27(2):63-67 63 Pacientes con enfermedades no transmisibles y sepsis atendidos en la sala de emergencia INTRODUCCIÓN MATERIAL Y MÉTODOS A nivel mundial, las enfermedades no transmisibles (ENT) son causas de alta mortalidad y son responsables de 80 % de muertes en países de medianos y bajos ingresos. Las enfermedades cardiovasculares, diabetes mellitus, enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC) y cáncer son las ENT más frecuentes. La prevalencia de las ENT en población menor de 60 años es similar a la de personas mayores y la mortalidad por estas enfermedades en este grupo etario es de 29 % en países de bajos y medianos ingresos, comparado a 13 % en países de altos ingresos.1 Se realizó un estudio tipo serie de casos consecutivos de portadores de ENT y sepsis en el servicio de Emergencia del Hospital Nacional Cayetano Heredia (HNCH) de Lima, que cuenta con 36 camas de hospitalización. El HNCH es un hospital de referencia del norte de la ciudad de Lima y atiende a una población aproximada de tres millones de habitantes. La mortalidad por sepsis es de 20 % a 50 %,3 es la segunda causa de muerte entre los pacientes en unidades intensivas no coronarias y lleva a la reducción de la calidad de vida de los que sobreviven.4 La sepsis suele afectar más a los adultos mayores. En un estudio observacional y multicéntrico, SOAP (Sepsis Occurrence in the Acutely Ill Patients), la edad media fue 61 ± 17 años. En otro estudio, que evaluó 10 millones de adultos con sepsis en un período entre 1979 y 2002, los pacientes con edad mayor de 65 años representaron 65 % de los casos de sepsis. En Europa, un estudio multicéntrico de pacientes con sepsis reportó una edad media de 61 ± 17; mientras que en otro estudio de altas hospitalarias con sepsis, la edad media fue 62,5 años. Una serie de casos local de pacientes en unidades de cuidados intensivos (UCI) que ingresaron a un hospital de referencia mostró que la edad media fue 68 ± 13 años, de los cuales 76,6 % tuvieron alguna comorbilidad.4-7 La atención hospitalaria de los pacientes con ENT y sepsis en los servicios de emergencia comparte los problemas de admitir a pacientes con enfermedades agudas y pacientes con enfermedades crónicas complejas con el uso de recursos materiales y humanos, en ambientes comunes que aumentan los riesgos de seguridad del paciente. Los indicadores de gestión se centran en los seis aspectos siguientes: seguridad, tiempo de atención, centrado en el paciente, eficiencia, efectividad y equidad.8 En este sentido, el objetivo de este trabajo fue presentar las características epidemiológicas y clínicas de los pacientes con enfermedades crónicas y sepsis que acuden a la emergencia de un hospital general. 64 Rev Soc Peru Med Interna. 2014;27(2):63-67 Se incluyó las hospitalizaciones de pacientes con enfermedades crónicas como hipertensión arterial, diabetes mellitus, asma, EPOC, fibrosis pulmonar, insuficiencia cardíaca y neoplasias, que cumplían criterios de sepsis en el período de diciembre de 2010 a mayo de 2011 y que fueron dados de alta del servicio. Los datos fueron recolectados de manera consecutiva en fichas predeterminadas que incluían el número de historia clínica, la edad, el sexo, la fecha de ingreso, fecha de alta y los diagnósticos. Estos últimos fueron codificados según la Décima Revisión de la Clasificación Internacional de Enfermedades (CIE-10). Definición de variables • Enfermedad crónica: condición médica caracterizada por la incapacidad para la curación y su progresión. • Tiempo de hospitalización prolongado: estancia mayor de siete días. Fuentes de información Se obtuvo los datos de las historias clínicas de la Emergencia. Se obtuvo permiso de la jefatura del servicio de Medicina y de la oficina de Archivo y Estadística para el acceso a las historias clínicas. Análisis estadístico El análisis de la base de datos fue realizado con Stata 10.0v. Se utilizó tablas de frecuencias, ji cuadrado, para variables categóricas, y U de Mann-Whitney, para comparar medias de variables continuas, se consideró significativo un valor de p ≤ 0,05. RESULTADOS Se tuvo 45 casos con una edad promedio de 67,4 ± 14,9 años, con una mediana de 67 años, y un rango que varió de 28 a 97 años. Dieciocho casos (40 %) fueron varones, y 26 (60 %) mujeres. El grupo de pacientes mayor de 60 años representó 71,1 % de la muestra total. Respecto a los días de hospitalización, 60 % de los E. Carcausto-Huamaní, B. Díaz-Zubieta Tabla 3. Características clínicas del grupo de estudio según estancia hospitalaria. Tabla 1. Características demográficas de la población de estudio. Estancia hospitalaria Menos de 7 d Más de 7 d Total p •Edad 70,72 ± 18,5 65,1 ± 11,8 0,11 •Sexo – Varón – Mujer 8 (44,4%) 10 (55,6%) 10 (37,0%)17 (62,96%) •Estado laboral – No productivo – Productivo 12 (25,8%) 19 (74,1%) 31 (68,9%) 0,004 10 (71,4%) 4 (28,6%) 14 (31,1%) 18 (40%) 0,61 27 (60%) •Domicilio – Red Rímac-San Martín de Porres-Los Olivos 7 (30,4) 16 (69,5) 23 (51,1%) 0,222 – Red Túpac Amaru 7 (70%) 3 (30%) 10 (22,2%) – Red Puente Piedra 2 (50%) 2 (50%) 4 (8,8%) – Red Lima Cercado 1 (33,3) 2 (66,6) 3 (6,7%) – Otros * 1 (20%) 4 (80%) 5 (11,1%) •Estado civil – Unido – No unido 9 (40,9%) 13(59,1%) 22 (48,9%) 0,54 9 (39,1%) 14(60,8%) 23 (51,1%) •Instrucción – Sin instrucción 4 (33,3%) 8 (66,6%) 12 (26,7%) 0,83 – Básica 13 (41,9%) 18 (58,0%) 31 (68,8%) – Técnico o superior 1 (50%) 1 (50%) 2 (4,4%) * San Juan de Lurigancho,Villa María del Triunfo, Chosica, Ate, Cercado, Surco, Miraflores, Provincias. pacientes tuvieron una estancia mayor de una semana; 11 %, una estancia de tres días y 24,4 %, una estancia mayor de dos semanas. La variable estancia hospitalaria se dividió en dos categorías, menos de siete días y más de siete días. Tabla 2. Enfermedades crónicas en la población de estudio. • Hipertensión arterial (HTA) •Diabetes mellitus (DM2) • Insuficiencia renal crónica • DM2 + HTA •Neoplasia • Insuficiencia cardíaca • Fibrosis pulmonar •Asma • Cirrosis hepática • Enfermedad pulmonar obstructiva crónica Frecuencia% 21/45 16/45 12/45 11/45 8/45 7/45 5/45 4/45 2/45 1/45 46,7 35,5 26,7 24,4 17,7 15,5 11,1 8,8 4,4 2,2 Estancia hospitalaria Menos de 7 d Más de 7 d Total •Tiempo de enfermedad – Menos de 2 días – De 2 a 7 días – De 7 a 14 días – Más de 14 días •Presencia de diabetes – Sí – No 7 (50,0) 7 (43,8) 1 (25,0) 3 (27,3) p 7 (50,0) 14 (31,1) 0,67 9 (56,3) 16 (35,6) 3 (75,0) 4 (8,9) 8 (72,7) 11 (24,4) 4 (25,0) 12 (75,0) 16 (35,5) 0,2 14 (48,3) 15 (51,7) 29 (64,4) •Inestabilidad hemodinámica – Sí 3 (42,8) 4 (57,1) 7(15,6) 0,87 – No 15 (39,5) 23 (60,5) 38 (84,4) •Foco asociado – Pulmonar – Urinario – Partes blandas – Gastrointestinal •Diagnósticos – Uno – Dos – Tres o más 14 (45,2) 3 (42,9) 1 (20,0) 0 (50,0) 17 (54,8) 31 (68,9) 0,47 4 (57,1) 7 (15,6) 4 (80,0) 5 (11,1) 2 (100,0) 2 (4,4) 8 (30,8) 18 (69,2) 26 (57,8) 0,31 7 (50,0) 7 (50,0) 14 (31,1) 3 (60,0) 2 (40,0) 5 (11,1) En la Tabla 1 se describe las variables demográficas, según las dos categorías de la variable estancia hospitalaria. Las ENT más frecuentes en la población de estudio fueron la hipertensión arterial (46,7 %), la diabetes mellitus (35,5 %) y la insuficiencia renal crónica (26,7 %). Tabla 2. En la Tabla 3 se describe las características clínicas tiempo de enfermedad, presencia de diabetes, inestabilidad hemodinámica, foco asociado y número de diagnósticos del grupo de estudio, según la estancia hospitalaria. En la Tabla 4 se resume la distribución del foco infeccioso en la población de estudio, según sus características demográficas y la estancia hospitalaria. Se realizó la correlación entre tiempo de enfermedad en días y tiempo de hospitalización. Con la aplicación de la conversión de log, para que las variables fueran normales, se encontró una correlación leve (r = 0,2) no significativa (p = 0,1). Figura 1. Rev Soc Peru Med Interna 2014;27(2):63-67 65 Pacientes con enfermedades no transmisibles y sepsis atendidos en la sala de emergencia Tabla 4. Distribución del foco infeccioso en la población de estudio, según características demográficas y estancia hospitalaria. Foco Respiratorio Urinario Partes blandas Gastrointestinal •Edad 69 ±15,2 65,8 ± 13,7 68,2 ± 12,3 45 ± 4,2 0,16 •Sexo – Hombre – Mujer 14 (77,8) 17 (62,9) 0 (0) 7 (25,9) 2 (11,1) 3 (11,1) 2 (11,1) 0 (0) 0,027 • Estado laboral – Productivo – No productivo 21 (67,7) 10 (71,4) 6 (19,4) 1 (7,14) 4 (12,9) 1 (7,14) 0 (0) 2 (14,3) 0,19 • Estado civil – Unido – No unido 15 (48,4) 16 (64,0) 5 (25,0) 2 (8,0) 0 (0) 5 (20,0) 0 (0) 2 (8,0) 0,04 • Estancia hospitalaria 9,1 ± 7,7 9 ± 6,2 22 ±14,6 21,5 ± 16,3 0,01 DISCUSIÓN En el presente estudio, los adultos mayores de 60 años fueron 71 %, lo que refleja un predominio de la demanda de los pacientes geriátricos en emergencia, a diferencia de otras series donde la población adulta mayor constituyó 15 % de los pacientes que usan los servicios de emergencia y 50 % de los ingresos a las UCI. Este hecho puede explicarse por la poca disponibilidad de camas en UCI para pacientes con sepsis y que permanecen en observación de emergencia.9 Cabe resaltar que 42 % de los pacientes presentaron dos o más comorbilidades, casi el doble de lo reportado Figura 1. Relación entre el tiempo de enfermedad y el tiempo de hospitalización. log de días de hospitalización 4 dhosplog Valores ajustados 3 2 1 0 -2 66 0 2 4 log de tiempo de enfermedad Rev Soc Peru Med Interna. 2014;27(2):63-67 6 p en una serie local de sepsis en una UCI (25,5 %). En lo que sí coincidieron fue en que las comorbilidades más frecuentes son la hipertensión arterial, la diabetes mellitus tipo 2, la insuficiencia renal y una neoplasia. Esto puede explicarse por el aumento progresivo de las enfermedades crónicas, fenómeno conocido en la transición epidemiológica del Perú. Otro trabajo local demostró que la estancia fue 13,16 ± 22,6 días y en uno más reciente, 13,6 días.10,11 Otros estudios epidemiológicos en EE UU evidencian que la estancia hospitalaria en pacientes mayores de 65 años con sepsis que no requieren UCI puede llegar a 7,6 días, lo cual significa que en nuestro medio fue mucho más prolongada debido, quizás, a aspectos sociales, criterios del médico y aspectos relacionados al sistema de salud.12 Un aspecto importante del presente trabajo fue que la procedencia de los pacientes no fue de la jurisdicción que correspondía, 49 % procedían de otras redes del cono norte y 17,7 %, de otros distritos. Esto puede deberse a que el hospital es de referencia pero también constituye un problema que conlleva a la sobredemanda. Otro hallazgo fue la relación entre la estancia hospitalaria y el estado laboral de los pacientes; la estancia es mayor en los pacientes no productivos (69 % vs. 31 %), lo que se debería a que estos pacientes son de menor edad (56,4 vs. 72,3; p < 0,005) y al ser productivos hay mayor soporte económico que en el caso de los pacientes no productivos y mayores. E. Carcausto-Huamaní, B. Díaz-Zubieta También se observó que tres de cada cuatro pacientes diabéticos se hospitalizaron más de siete días, lo cual se corresponde con el concepto de que la hiperglicemia se asocia a un mayor tiempo de hospitalización, tal vez explicado por las complicaciones generalmente de tipo infeccioso.13-16 La inestabilidad hemodinámica no estuvo asociado con la estancia hospitalaria ni con el número de enfermedades crónicas. El tiempo de enfermedad se encontró asociado a estancia hospitalaria, en el análisis cuantitativo (Figura 1), se observa que a mayor tiempo de enfermedad mayor es la estancia hospitalaria. Una hipótesis sería que los pacientes con más tiempo enfermos suelen tener mayores complicaciones que aquellos con un tiempo de enfermedad más corto. Esto tendría explicación en una falta de acceso a los servicios de consulta ambulatoria, lo que determinaría complicaciones para terminar hospitalizándose en emergencia con los problemas descritos. Se necesita estudios más sólidos para establecer esta correlación. Es importante señalar que en la distribución del foco infeccioso en la población de estudio, todas las infecciones urinarias se dieron en mujeres y todos los pacientes con foco infeccioso de partes blandas no tenían un soporte social definido, por la ausencia de una pareja estable. Asimismo, la estancia hospitalaria significativamente fue mayor en los pacientes con foco infeccioso en partes blandas o gastrointestinal; esto puede explicarse porque estas infecciones requieren más procedimientos de curaciones y cuidados de enfermería. Que a mayor tiempo de enfermedad mayor es el tiempo de hospitalización, refuerza el concepto de que una correcta identificación en atención primaria podría reducir el tiempo de hospitalización. En conclusión, los pacientes con enfermedades crónicas y sepsis fueron, en su mayoría, adultos mayores, portadores de diabetes mellitus y con una estancia hospitalaria prolongada. El origen de la sepsis fue principalmente un foco respiratorio. Agradecimientos A los doctores Claudia Ugarte y Raúl Acosta, por todo su apoyo en la obtención de los datos. Al Dr. Germán Málaga, por su invaluable revisión y comentarios. REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS 1. Global status report on noncommunicable diseases 2010. URL disponible en: http://www.who.int/nmh/publications/ncd_report2010/en/ (Fecha de acceso: 02-04-12). 2. Martin GS, Mannino DM, et al. The epidemiology of sepsis in the united states from 1979 through 2000. N Engl J Med. 2003;348:1546-54. 3. 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Financiamiento: por los autores. Conflicto de interés: ninguno, según los autores. Rev Soc Peru Med Interna 2014;27(2):63-67 67 TRABAJO ORIGINAL Morbilidad y mortalidad de las derivaciones biliodigestivas Morbidity and mortality in biliary bypasses Leonardo Concepción-Quiñones,1 Dianelys Gutiérrez-Ayala1 y Jorge Luis Anaya-González1 RESUMEN Objetivo. Determinar la morbilidad y la mortalidad en las derivaciones biliodigestivas en el servicio de Cirugía general en el Hospital Enrique Cabrera, de enero de 2007 a diciembre de 2011. Material y métodos. Se realizó una investigación observacional, descriptiva y prospectiva. La muestra fue constituida por 51 pacientes a los que se les realizó una o más derivaciones biliodigestivas. Las variables estudiadas fueron edad, sexo, causa de intervención, técnica quirúrgica, complicaciones, estado al egreso y causa de muerte. Se calculó la frecuencia de complicaciones y la mortalidad para cada técnica Resultados. Fueron intervenidos quirúrgicamente 51 pacientes, con un promedio de edad de 57,5 años. El tumor de cabeza de páncreas correspondió a 56,9 % de los casos y la lesión de vía biliar, a 17,6 %. La infección del sitio quirúrgico ocurrió en 33,3 %. Fallecieron 50 % de los operados por técnica de Whipple. La técnica quirúrgica más utilizada fue la coledocoduodenostomía. La mortalidad fue 11,8 % y la principal causa de muerte, la falla multiorgánica. Conclusiones. El tumor de cabeza de páncreas fue la causa de intervención más frecuente La pancreatoduodenectomía de Whipple reportó la mayor morbimortalidad. Las tasas de incidencia de complicaciones y de mortalidad para la cirugía biliodigestiva fueron altas. Palabras clave. Derivaciones biliodigestivas, ictericia obstructiva, cáncer, carcinoma, páncreas, morbilidad, mortalidad. ABSTRACT Objectives. To determine the morbidity and mortality in biliary bypasses in the Service of General Surgery at the Enrique Cabrera Hospital from January of 2007 to December of 2011. Material and methods. It was carried out an observational, descriptive and prospective study. The sample constituted by 51 patients who had underwent a biliary bypass. The studied variables were: age, sex, intervention cause, surgical technique, complications, condition at discharge and cause 1. Especialistas de Primer Grado en Cirugía general del servicio de Cirugía general, Hospital General Universitario Enrique Cabrera. La Habana, Cuba. 68 Rev Soc Peru Med Interna. 2014;27(2):68-74 of death. Frequency of complications and mortality were calculated for each technique. Results. Fifty one patients underwent a biliary bypass, age average of 57,5 year-old. The head’s pancreas tumor was 56,9 % and biliary’s ducts lesions 17,6 %. Surgical wound infection occurred in 33,3 % of cases, and 50 % of those who underwent a Whipple’s technique died. The more used surgical technique was the choledocoduodenostomy. The mortality was of 11,8 % and the main cause of death was multiorganic failure. Conclusions. The head’s pancreas tumor was the cause that underwent surgery. The Whipple’s pancreatoduodenectomy reported the highest morbidity and mortality. The frequency of complications and mortality for a biliary bypass were high. Key words. Biliary bypass, obstructive jaundice, cancer, carcinoma, pancreas, morbidity, mortality. L. Concepción-Quiñones, D. Gutiérrez-Ayala, J. L. Anaya-González INTRODUCCIÓN Se conoce como derivación biliodigestiva (DBD) al establecimiento quirúrgico de un cortocircuito entre alguna porción del árbol biliar y el tracto digestivo. Estas derivaciones persiguen uno de los dos objetivos siguientes: curativo o paliativo, según la naturaleza del obstáculo y la localización de la lesión.1,2 En 1556, el anatomista Realdo Colombo realizó la primera descripción de cálculos en el colédoco, en un reporte sobre cálculos en la vesícula, el colédoco y uno que había erosionado la vena porta.3 En 1880, Winiwarter practicó la primera colecis toenterostomía (colecistocolostomía).4 En 1882, Carl Langenbuch efectuó la primera colecistectomía, cuya técnica se mantendría sin muchas variantes durante más de 100 años.5 En 1887, Monastyrski efectuó la colecistoyeyunostomía en un tiempo. La primeras colecistoduodenostomía, por Bardenheuer, y colédocoduodenostomía, por Riedel, fueron realizadas en 1888.4 En 1891, Sprangel comunicó la primera anastomosis coledocoduodenal para tratar una sección de la vía biliar principal. En 1899 y en 1905, Kehr realizó dos reparaciones cabo a cabo sin tubo tutor, con buenos resultados.6 Gersuny, en 1892, efectuó la primera colecistogastrostomía debido a una oclusión del colédoco.4 La primera colecistoduodenostomía laterolateral fue ejecutada por Mayo-Robson, en 1898, y la primera hepaticoduodenostomía, por Kehr, en 1902. La hepatocolangiogastrostomía y la hepatocolan gioenterostomía fueron sugeridas por Langenbuch, en 1897, y ejecutadas por Kehr, Maylard, Garre y otros. Wolff practicó la primera colecistocoledocostomía, en 1909, por sección del colédoco.5 Czerny, en 1902, fue el primero que hizo la implantación de una fístula biliar externa en el tubo digestivo. En 1905, Mayo reportó la primera coledocoduodenostomía para la reconstrucción de una lesión de la vía biliar. Posteriormente, Monprofit, con el mismo fin, realiza una hepaticoyeyunostomía en Y de Roux. En 1905, Jenckel introdujo uno de los extremos de un tubo de goma en el extremo del conducto hepático seccionado y el otro, en el duodeno, antes pasó el tubo por un canal formado con la pared duodenal, como en la gastrostomía de Witzel.4,5 La primera reparación biliar que utilizó el conducto hepático izquierdo fue realizada en el Hospital Bichat, en 1956, y fue comentada en un informe por Hepp y Couinaud.5 En 1965, Hallenbeck propuso una nueva técnica para el tratamiento de las estenosis biliares, la creación de un estoma cutáneo del asa de yeyuno en Y de Roux como acceso para el manejo de la hepaticoyeyuno anastomosis.6-8 En 1975, en el Hospital Lucía Iñiguez de Holguín, en Cuba, se realizó una técnica modificada diferente a las empleadas habitualmente, la intrahepatoduc toyeyunostomía de Lorenzo y demostraron, después de 25 años, una mortalidad postoperatoria menor que la reportada en otras estadísticas, una supervivencia mayor, sin dehiscencia de sutura y con recuperación postoperatoria más rápida.9 En la actualidad, las colecistectomías se realizan con gran frecuencia y esto trae consigo la posibilidad de ocurrencia de lesiones iatrogénicas de la vía biliar principal. La lesión de la vía biliar a un paciente le puede cambiar totalmente su vida, debido a las graves consecuencias de este hecho, que pueden ir desde una prolongada cirugía abierta –con la permanente posibilidad de cuadros de colangitis a repetición, reestenosis y reoperaciones– hasta la cirrosis biliar y la muerte.10 A pesar del progreso alcanzado, las lesiones en la vía biliar se han vuelto más frecuentes, debido al cercano uso de instrumentos como el electrocoagulador y las grapas metálicas para clipar la arteria y el conducto cístico. Se ganó en magnificación, pero se perdió la estereovisión y los grados de libertad de movimiento.11,12 El propósito de esta investigación fue lograr una caracterización de las DBD en el Hospital Enrique Cabrera de La Habana. MATERIAL Y MÉTODOS Se realizó un estudio observacional, descriptivo y prospectivo, con el objetivo de determinar la morbilidad y la mortalidad por DBD en el servicio de Cirugía general del Hospital Enrique Cabrera de La Habana, Cuba, de enero de 2007 a diciembre de 2011. El universo estuvo constituido por todos los pacientes a los que se les realizaron DBD, cumpliendo con los protocolos de actuación de las Normas Cubanas de Cirugía, independientemente de la causa. Se excluyó a los operados en otros centros. Se utilizó las variables edad, sexo, causa de la intervención, técnica quirúrgica, complicaciones, estado al egreso y causa de muerte. Rev Soc Peru Med Interna 2014;27(2):68-74 69 Morbilidad y mortalidad de las derivaciones biliodigestivas Los investigadores se limitaron a observar los resultados del tratamiento de los pacientes sin intervenir directamente. Se garantizó la protección de la confidencialidad de los participantes. Los datos se obtuvieron con propósitos puramente investigativos. Todos los procedimientos respetaron las normas éticas concordantes con la Declaración de Helsinki actualizada en 2008. Figura 1. Causas de derivación biliodigestiva. 35 56,9 % 30 Nnúmero de pacientes 25 20 15 10 17,6 % 11,8 % 5 0 RESULTADOS 11,8 % La muestra quedó constituida por 51 pacientes; de ellos, 26 (51,0 %) fueron mujeres y 25 (49,0 %) varones. El grupo etario predominante fue el de 50 a 79 años, con predominio del sexo masculino, seguido por el de 20 a 49 años, con amplia superioridad de mujeres; el menos representado fue el de pacientes mayores de 80 años. 2,0 % Litiasis Tumor de Neoplasia Lesión de Colecistocoledociana cabeza de de vía biliar vía biliar pancreatitis páncreas Las fuentes de información fueron las historias clínicas, los informes operatorios y los informes de necropsias del departamento de Anatomía patológica del hospital. Los datos fueron recogidos desde el ingreso, tanto de forma electiva como urgente, hasta el alta hospitalaria. Se utilizaron medidas de resumen para variables cualitativas como porcentajes y números absolutos y test de comparación de proporciones (χ2 de Pearson) con un nivel de significación de 0,05. Se calculó la tasa de incidencia de complicaciones y la tasa específica de mortalidad para cada técnica. El promedio de edad general fue 57,5 años; para el sexo femenino, 52,5 años y para el masculino, 61,2. La causa de intervención más frecuente fue el tumor de cabeza de páncreas (56,9 % del total), seguida por la lesión de la vía biliar (17,6 %). Figura 1. La técnica quirúrgica más utilizada fue la coledocoduodenostomía, realizada en 29,4 % de los pacientes, seguida por la colecistoyeyunostomía, en 23,5 % y la pancreatoduodenectomía de Whipple, en 19,6 %. Figura 2. En todos los pacientes con diagnóstico de litiasis coledociana y colecistopancreatitis, se utilizó la Figura 2. Técnicas quirúrgicas empleadas. 16 29,4 % 14 12 10 23,5 % 19,6 % 8 13,7 % 6 4 7,8 % 2 0 70 2,0 % 2,0 % 2,0 % Coledocoduodenostomía Colecistoyeyunostomía Hepatoyeyunostomía Técnica Hepatoduodenostomía Pancreatoduodenectomía Coledocoyeyunostomía de Longmire de Whipple Triple derivación Rev Soc Peru Med Interna. 2014;27(2):68-74 L. Concepción-Quiñones, D. Gutiérrez-Ayala, J. L. Anaya-González Figura 3. Distribución de técnicas quirúrgicas empleadas según causa. Coledocoduodenostomía Colecistopancreatitis Coledocoyeyunostomía Coledocoduodenostomía Lesión de vías biliares Neoplasia de vías biliares Hepatoyeyunostomía Hepatoduodenostomía Técnica de Longmire Colecistoyeyunostomía Triple derivación Coledocoduodenostomía Tumor de cabeza de páncreas Técnica de Longmire Pancreatoduodenectomía Colecistoyeyunostomía Coledocoduodenostomía Litiasis coledociana 0 1 2 3 4 coledocoduodenostomía. En pacientes con tumor de cabeza de páncreas, las técnicas más realizadas fueron la colecistoyeyunostomía y la pancreatoduodenectomía de Whipple (34,5 % cada una). La técnica de preferencia en las lesiones de vías biliares fue la hepatoyeyunostomía (77,8 %). En las neoplasias de vías biliares, la más utilizada fue la técnica de Longmire (50,0 %). Figura 3. 5 6 7 8 9 10 La infección del sitio quirúrgico fue la complicación más frecuente. En los pacientes a los que se les practicó colecistoyeyunostomía, además, se observó fístula externa. En aquellos a los que se les realizó hepatoyeyunostomía, se reportó infección del sitio quirúrgico, coleperitoneo y bronconeumonía. De los casos en que se realizó coledocoduodenostomía se Figura 4. Complicaciones según técnica empleada. 9 8 no complicados infección sitio quirúrgico fístula externa derrame pleural coleperitoneo oclusión intestinal coleperitoneo 7 6 5 4 3 2 1 0 Coledocoduodenostomía Colecistoyeyunostomía Pancreatoduodenectomía de Whipple Hepatoyeyunostomía Hepatoduodenostomía Rev Soc Peru Med Interna 2014;27(2):68-74 71 Morbilidad y mortalidad de las derivaciones biliodigestivas Tabla 1. Estado al egreso según complicaciones. Estado al egreso Complicaciones Vivo Fallecido Total N% N% N% • Infección sitio quirúrgico 12 0 12 • Fístula externa 28,0 28,0 4 16,0 • Derrame pleural 3 1 4 • Coleperitoneo 00,0 14,0 14,0 • Oclusión intestinal 14,0 00,0 14,0 • Bronconeumonía 14,0 28,0 3 12,0 Total 19 76,0 6 24,0 25100,0 48,0 12,0 0,0 4,0 48,0 16,0 reportó infección del sitio quirúrgico, fístula externa y oclusión intestinal. El paciente al que se le realizó hepatoduodenostomía presentó infección del sitio quirúrgico. En la intrahepatoductoyeyunostomía por técnica de Longmire, la coledocoyeyunostomía y la triple derivación no se reportaron complicaciones perioperatorias. Todos los pacientes a los que se les realizó pancreatoduodenectomía de Whipple presentaron complicaciones, la más frecuente fue el derrame pleural (Figura 4). DISCUSIÓN Hubo complicaciones en 49 % de los operados. Los seis fallecidos representaron 11,8 % del total de la muestra, cinco ocurrieron con pancreatoduodenectomía de Whipple (9,8 %) y uno, con hepatoyeyunostomía (2,0 %). En el resto de las técnicas empleadas, no se reportaron fallecidos. La mortalidad para los pacientes pancrea toduodenectomizados fue 50,0 % y para los pacientes a los que se les realizó una hepatoyeyunostomía, 14,3 %. En los varones existió mayor incidencia de litiasis coledociana entre lo 35 y 49 años, por la frecuencia de la enfermedad litiásica biliar, y de la neoplasia de la vía biliar en mayores de 80 años, por el aumento de la detección de las enfermedades neoplásicas en edades avanzadas. En la lesión de la vía biliar y la colecistopancreatitis, se vieron más afectadas las mujeres de 35 a 49 años, en contrario con un estudio realizado por Socarrás,14 donde se analizaron pacientes con obstrucción de la vía biliar, y la enfermedad más frecuente en varones resultó ser la neoplasia de cabeza de páncreas y en las mujeres, la litiasis coledociana. Dos tercios de los bronconeumonía como como la mitad de los externa. Además, se pacientes con derrame Tabla 1. pacientes que presentaron complicación fallecieron así que presentaron fístula biliar reportaron como fallecidos pleural y con coleperitoneo. Entre las causas de muerte, tras la realización de una pancreatoduodenectomía de Whipple están la falla multiorgánica y la bronconeumonía bacteriana en 33,3% y el tromboembolismo pulmonar, en 16,7%. La falla multiorgánica fue la causa de muerte tras la hepatoyeyunostomía. 72 Rev Soc Peru Med Interna. 2014;27(2):68-74 En el período de estudio se halló una media de diez DBD realizadas por año, donde las variables demográficas asociadas a los pacientes se corresponden con otras investigaciones en las que la diferencia entre ambos sexos no es estadísticamente significativa y predominan edades entre 50 y 70 años, con promedios entre 54 y 58 años, lo cual se encuentra en relación con una considerable incidencia de enfermedades neoplásicas.13-17 La mayor parte de los pacientes estudiados por ictericia obstructiva por Rahman,18 en Nigeria, entre enero de 1991 y diciembre de 2004, se encontró en la sexta década de vida y el diagnóstico más frecuente fue también el tumor de cabeza de páncreas, y a la mayor parte de ellos se les realizó una colecistoyeyunostomía. La coledocoduodenostomía fue la técnica quirúrgica más empleada, tanto por enfermedades benignas como en L. Concepción-Quiñones, D. Gutiérrez-Ayala, J. L. Anaya-González enfermedades neoplásicas. En estas últimas por ser una indicación relativa, muchas veces cuando la expectativa de sobrevida es corta, cuya técnica requiere menor tiempo quirúrgico y mejora la calidad de vida. Las neoplasias pancreatobiliares, en la mayoría de los pacientes, no pueden ser resecadas, generalmente porque ya existe enfermedad avanzada que contraindica la intervención.19 En estos casos, el objetivo del tratamiento es aliviar la obstrucción biliar y las complicaciones que se asocian. La paliación puede realizarse por vía percutánea, endoscópica, quirúrgica convencional o laparoscópica.20 Aún existe controversia acerca de cómo obtener un mejor resultado y existen varios estudios que muestran la superioridad de uno u otro método. La ventaja de la cirugía convencional parece encontrarse en que las secuelas a largo plazo son raras, y, según Schwartz, llegan a preferirse.21 Algunos creen que la derivación quirúrgica se asocia con mayor morbilidad y mortalidad en comparación con la vía endoscópica y estudios prospectivos han demostrado que no existen diferencias significativas. La evidencia disponible sugiere que una derivación quirúrgica correctamente ejecutada ofrece una opción paliativa más duradera que la obtenida mediante vía percutánea o endoscópica.19,20,22 Ejemplo de esto son los tumores de cabeza de páncreas, curables en menos de 20 % al momento de su diagnóstico, quienes los presentan requieren en ocasiones de procedimientos quirúrgicos para aliviar la obstrucción biliar y las principales opciones en estos casos son la colecistoyeyunostomía y la coledocoyeyunostomía.23 Quienes apoyan la primera afirman que es una operación simple, rápida y capaz de aliviar la ictericia con una mínima pérdida hemática; y, aquellos que defienden la segunda sostienen la mayor fiabilidad del colédoco para la descompresión biliar. En 2012, Hirano y col.24 abordaron varias técnicas de reconstrucción de la vía biliar y concluyeron que la hepatoyeyunostomía se ha convertido en un procedimiento que ha probado ser seguro y factible y aporta una buena opción de calidad de vida en el tratamiento de la enfermedad maligna hepatobiliar, y como alternativas a la coledocoduodenostomía y la hepatoduodenostomía. En este trabajo solo se detectó el uso de la hepa toyeyunostomía en la reparación de las lesiones de la vía biliar. Una de las razones por la que se la prefiere es el tiempo quirúrgico significativamente más corto que en la hepatoduodenostomía y, entre otras, minimiza posibles complicaciones.25,26 La morbilidad por DBD ha ido decreciendo progresivamente según la literatura revisada, debido entre otros factores a los avances tecnológicos que permiten perfeccionar los cuidados perioperatorios y al desempeño de los cirujanos.20,26,27 La infección del sitio quirúrgico resultó ser la complicación más frecuente reportada en varios estudios consultados, lo que coincidente con esta investigación; otras complicaciones fueron las fístulas biliocutáneas, la fuga anastomótica, el sangrado digestivo alto y las alteraciones respiratorias.20,25 Cuando se comparan la hepatoyeyunostomía y la colecis toyeyunostomía, existe mayor incidencia de morbilidad en la segunda, según Tarcan, de igual forma como se observó en el presente estudio.28 Distler practicó triple derivación solo en los pacientes con evidencia de obstrucción duodenal y no reportó aumento de la morbilidad.27 Hirano, en su investigación sobre técnicas de reconstrucción de la vía biliar en el tratamiento de enfermedades benignas, reportó una mayor incidencia de complicaciones cuando utilizó duodeno que cuando usó yeyuno.24 La mortalidad en el perioperatorio reportada en esta investigación es considerada baja, si se tiene en cuenta la elevada incidencia de enfermedad maligna avanzada como causa de la cirugía. En la casuística de Rodríguez,16 la mortalidad reportada fue 7,9 %, predominó en los pacientes con estenosis malignas y la sepsis fue la principal causa de muerte. Santiesteban reportó una mortalidad de 16,1 %.29 En otro estudio, el rango de mortalidad de la cirugía paliativa para los cánceres pancreático y periampular estuvo alrededor de 4,8 % y la morbilidad postoperatoria, 26,5 %.30 La muertes se debieron a falla hepática, trombosis mesentérica, fuga anastomótica y neumonía que llevó a la falla múltiple de órganos. Fallecieron dos casos después de pancreatoduodenectomía, debido a dehiscencia de la anastomosis biliodigestiva con peritonitis y a insuficiencia cardíaca, y un caso después de una cirugía paliativa, debido a embolismo pulmonar. En el presente estudio, la mortalidad fue alta por operación de Whipple, ya que fallecieron 50 % de los pacientes, en comparación con lo que en la actualidad algunos estudios indican que la mortalidad por resecciones pancreáticas puede mantenerse entre 5 % y 15 %.20,22 Rev Soc Peru Med Interna 2014;27(2):68-74 73 Morbilidad y mortalidad de las derivaciones biliodigestivas REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS 1. Mosby. Diccionario de medicina, enfermería y ciencias de la salud. Madrid: Harcourt; 2003. 2. Pardo G. Derivaciones biliodigestivas. Rev Cub Cir. 2008;47;4. 3. Csendes A, Burdiles P, Diaz JC. Present role of classic open choledocostomy in the surgical treatment of patients with common bile duct stones. World J Surg. 1998;22:1167-1170. 4. Operaciones quirúrgicas en la vesícula biliar y en los conductos biliares. En: Técnica quirúrgica en las operaciones abdominales. Spivack; 2002: p. 463-525. 5. Barkun AN, et al. 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Palliative surgery for unresectable pancreatic and periampullary cancer: a reappraisal. J Gastrointest Surg. 2006;10(2):386-291. Correspondencia a: Dr. Leonardo Concepción Quiñones lconcepcion@infomed.sld.cu Fecha de recepción: 10 de febrero de 2014. Fecha de aprobación: 15 de marzo de 2014. Financiamiento: por los autores. Conflicto de interés: ninguno, según los autores. TRABAJO ORIGINAL Cáncer de mama triple negativo Triple negative breast cancer Gonzalo Mendoza-del Solar1 y Fiorella Cervantes-Pacheco2 RESUMEN Objetivo. Determinar la frecuencia de cáncer de mama triple negativo en un hospital centro de referencia oncológico en el sur del Perú. Material y métodos. Se realizó un estudio descriptivo y retrospectivo con las historias clínicas de las pacientes con cáncer de mama diagnosticadas en el departamento de Oncología del Hospital Goyeneche de Arequipa, y atendidas entre enero de 2007 y diciembre de 2012. Se incluyó solo a las que tenían resultados de biopsias o piezas operatorias con estudios inmunohistoquímicos para receptores de estrógenos, de progesterona y HER2. Resultados. De 75 pacientes con diagnóstico de cáncer de mama, 65 cumplieron los requisitos de inclusión. Se halló que 33 (50,8 %) expresaron receptores de estrógeno; 29 (44,6 %), receptores de progesterona; 15 (23,1 %), receptores de HER2; y, 20 (30,8 %) fueron triple negativo. Conclusión. El cáncer de mama triple negativo constituyó la tercera parte de todos los cánceres de mama diagnosticados en el Hospital Goyeneche de Arequipa. Palabras clave. Cáncer de mama, triple negativo, receptor, estrógeno, progesterona, HER2. ABSTRACT Objective. To determine the frequency of negative triple breast cancer in an Oncology reference hospital center in the South of the country. Material and methods. A descriptive and retrospective study was done with the medical records of patients who had a diagnosis of breast cancer at the Department of Oncology of the Goyeneche Hospital, Arequipa, and attended between January 2007 and December 2012. It only included cases with biopsy or surgical tissue with immunohistochemical studies for estrogen, progesterone and HER2 receptors. 1. Cirujano oncólogo, departamento de Oncología Hospital Goyeneche, Arequipa. Profesor asociado, Universidad Católica de Santa María (UCSM), Arequipa. 2. Médico cirujano. UCSM, Arequipa. Results. From 75 patients with a diagnosis of breast cancer, 65 met the inclusion’s criteria. It was found that 33 (50,8 %) expressed estrogen receptors; 29 (44,6 %) progesterone receptors; 15 (23,1 %) HER2 receptors; and, 20 (30,8 %) were triple negative. Conclusion. Negative triple breast cancer comprised one third of all breast cancers diagnosed in our hospital. Key words. Breast cancer, triple negative, receptor, estrogen, progesterone, HER2. INTRODUCCIÓN La incidencia de cáncer de mama ha aumentado en todos los países.1 A pesar de este incremento, la mortalidad por cáncer mamario ha descendido en los países desarrollados debido principalmente a la implementación de programas de despistaje, la Rev Soc Peru Med Interna 2014;27(2):75-78 75 Cáncer de mama triple negativo administración de quimioterapia sistémica basada en el uso de antraciclina y taxanos, el progreso en el control local de la enfermedad en cáncer temprano de mama, la introducción del uso del anticuerpo monoclonal trastuzumab en los tumores que expresan receptores HER2 y el esfuerzo por distinguir los diversos subtipos de cáncer de mama que explican los diferentes resultados y permiten optimizar las estrategias terapéuticas. Mediante el uso de perfiles genéticos, se han descrito hasta cinco subtipos moleculares.2-8 El cáncer de mama involucra tumores muy heterogéneos caracterizados por un amplio espectro clínico, patológico y características moleculares.9 Este amplio espectro de factores es el responsable de las variaciones observadas en las respuestas terapéuticas y el pronóstico entre las mujeres diagnosticadas con tumores mamarios malignos.10 La clasificación molecular del cáncer de mama distingue dos grandes grupos: los receptores de estrógeno positivos, que pueden ser luminar A y B, y los receptores de estrógeno negativos, que comprende los subtipos HER2 positivo, similar al basal y similar a mama normal. A estos dos últimos se les denomina triples negativos porque no expresan receptores de estrógeno, de progesterona ni HER2, y se caracterizan por tener un peor pronóstico, con mayor porcentaje de recurrencias locales y de metástasis tempranas.11,12 Las pacientes con tumores triple negativo no se benefician con terapias endocrinas ni con trastuzumab porque estas células tumorales carecen de los blancos donde actúan estas drogas. Solo responden a la quimioterapia y mejor si es neoadyuvante.13 Por estas razones es de mucha importancia conocer la frecuencia de cánceres de mama que son triples negativos en la población donde se trabaja. Debido a la importancia de conocer el cáncer de mama triple negativo (CMTN), se buscó determinar su frecuencia de diagnóstico en el departamento de Oncología del Hospital Goyeneche de Arequipa (HGA), centro de referencia del manejo del cáncer en el sur del Perú. MATERIAL Y MÉTODOS Se efectuó un estudio descriptivo y retrospectivo, mediante la revisión de las historias clínicas de todas las pacientes con cáncer de mama diagnosticadas en el departamento de Oncología del HGA, atendidas entre enero de 2007 y diciembre de 2012 y cuyas historias 76 Rev Soc Peru Med Interna. 2014;27(2):75-78 clínicas contenían resultados de biopsias o piezas operatorias que habían sido sometidas a estudios inmunohistoquímicos, para determinar el estado de los receptores estrogénicos, de progesterona y HER2. La gran población de pacientes fue de bajos recursos y procedía de los departamentos de Arequipa, Puno, Moquegua, Tacna y Cusco. La mayoría de ellos se atendía a través del Sistema Integrado de Salud (SIS). RESULTADOS Se encontró 75 mujeres que fueron diagnosticadas con cáncer de mama en el período de estudio, pero solo 65 cumplían los requisitos de inclusión; es decir, fueran operadas o sometidas a biopsias en el servicio y contaban con pruebas de inmunohistoquímica, al menos para receptores de estrógenos, de progesterona y HER2. Se halló que 33 (50,8 %) pacientes expresaron receptores de estrógeno; 29 (44,6 %), receptores de progesterona; 15 (23,1 %), receptores HER2; y, 20 (30,8 %) fueron CMTN. DISCUSIÓN Solo un tercio de las mujeres con cáncer de mama fueron CMTN, es decir no expresaron ninguno de los marcadores inmunohistoquímicos estudiados. Estas pacientes son de peor pronóstico por mayores recidivas y solo pueden ser tratadas con quimioterapia, sin opción a tratamientos hormonales o blanco específicos hasta este momento. El cáncer de mama describe a un grupo heterogéneo de enfermedades con marcadas diferencias biológicas y diverso comportamiento clínico. Si se toma en cuenta una parte de las características biológicas, se sabe que involucra distintos perfiles de expresión genética, los cuales se han agrupado en subtipos con similares características clínicas y biológicas.11 A pesar de que inicialmente estos subtipos fueron identificados por costosos estudios de microaarreglos de ADN, actualmente es posible llegar a una aproximación mediante el estudio inmunohistoquímico de marcadores de receptores de estrógeno, de progesterona y HER2.23,24 Es así que el uso de la inmunohistoquímica en la práctica oncológica habitual es, por el momento, la única manera de aproximarse a la identificación del CMTN, entidad que constituye un desafió para el oncólogo, por su diagnóstico y tratamiento difíciles.25 Por otro lado, G. Mendoza-del Solar, F. Cervantes-Pacheco Tabla 1. Incidencia de cáncer de mama triple negativo. Lugar Incidencia (%) Autores • Sinaloa, México 28,6 Muñoz-Durán L, et al.14 • INEN, Perú 21,3 Vallejos CS, Gómez HL, Cruz et al.15 • Costa Rica 18,0 Quirós-Alpízar J, Jiménez-Rodríguez Y.16 • Venezuela 24,6 Márquez M, Lacruz JC, Borges LF.17 • Brasil 27,0 Amaral AL,Vitral I, Koifman S.18 • Montreal, Canadá 12,0-17,0 Foulkes W, Smith IE, Reis-Filho J.19 • EE UU 15,0 Kaplan H, Malmgren J, Atwood M.20 • California, EE UU 15,0-20,0 Bauer KR, et al.7 la revisión bibliográfica mostró una notable mayor incidencia de CMTN en países latinos, relacionada a presencia de raza hispana, afroamericana y autóctona. La distribución de los subtipos de cáncer de mama en una población está influenciada por la etnia, la edad y medio ambiente.7 Los afroamericanos y los hispanos tienen mayor incidencia de CMTN, tal como se observa en la Tabla 1.21 Es menester tener en cuenta que, además, la variación en las cifras halladas podría deberse a las técnicas de fijación del tejido que se utilizan en los diversos países para realizar el estudio inmunohistoquímico.22 A pesar que el término ‘triple negativo’ es ampliamente utilizado en la práctica diaria y en trabajos de investigación, no hay consenso en su definición, quizás la más apropiada es la que formula Oakma: “es un estado histoquímico para cánceres con biología y conducta clínica heterogénea”.26 Del millón de casos de cáncer de mama que cada año se diagnostica en el mundo, aproximadamente 170 000 corresponden a CMTN.27 El CMTN es un término derivado del uso de la inmunohistoquímica, es un inmunofenotipo, a diferencia del cáncer de mama tipo basal que es un término derivado del uso de las expresiones genéticas en microarreglos; es decir, es un fenotipo molecular.25 Sin embargo, no todos los CMTN son de tipo basal, pues se ha determinado hasta seis tipos moleculares diferentes y cada uno responde de forma distinta a la quimioterapia.15,26 Ver Tabla 2. De lo expuesto, se puede concluir que el tratamiento sistémico con quimioterapia, en especial doxorrubicina y taxanos, es fundamental, aunque los resultados son controversiales, con buenas respuestas iniciales, pero con menos sobrevida que otros cánceres de mama. El pronóstico empeora si luego de la neoadyuvancia hay enfermedad residual, y peor aún si hay enfermedad residual luego de la cirugía.27 El haber encontrado un alto porcentaje de CMTN en la población del estudio presente obliga ha estar alerta para buscar el mejor tratamiento con calidad y sin perder de vista el factor económico. Cabe recomendar la realización de estudios más amplios para determinar el perfil inmuhohistoquímico y la prevalencia de triples negativos en la población que habita en los Andes, para conocer la incidencia de los diversos cánceres de mama. El presente trabajo tiene limitaciones porque no todos los pacientes pueden acceder a pruebas inmunohistoquímicas, que son costosas para el promedio de ingresos que tienen los pacientes que se atienden en el hospital. Otra limitante fue que las pruebas no son Tabla 2. Fenotipos moleculares de cáncer de mama triple negativo. Tipos Características moleculares % de respuesta patológica completa • Basal 1 Genes del ciclo celular. Reparación de ADN y proliferación • Basal 2 Señalización de factores de crecimiento (EGFR, MET,Wnt,IGF1R) • IM Genes involucrados en procesos de inmunidad celular (cáncer de mama medular) • M Genes relacionados con la movilidad y diferenciación celular y con las vías de receptores que interaccionan con la matriz extracelular 30 • MSL Similar a M pero con señalización de factores de crecimiento y enriquecido con genes asociados a la transición epitelial-mesenquimal (cáncer metaplásico) 23 • LAR Genes relacionados con la señalización del receptor de andrógeno (R, DHCR24, ALCAM, FASN, FKBP5, APOD, PIP, SPDEF y CLDN8) 10 52 0 31 Rev Soc Peru Med Interna 2014;27(2):75-78 77 Cáncer de mama triple negativo realizadas en el hospital, por lo que se tiene que recurrir a laboratorios foráneos, hecho que aumenta el costo y la variabilidad de los resultados. En conclusión, el término cáncer de mama triple negativo en el presente trabajo constituyó la tercera parte de todos los cánceres de mama, cifra elevada que constituye un reto para los oncólogos del Hospital Goyeneche de Arequipa. REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS 1. Kamangar F, Dores GM, Anderson WF. Patterns of cancer incidence mortality, and prevalence across five continents: Defining priorities to reduce cancer disparities in different geographic regions of the world. J Clin Oncol. 2006;24:2137-2150. 2. Berry DA, Cronin KA, Plevritis SK, et al: Effect of screening and adjuvant therapy on mortality from breast cancer. N Engl J Med. 2005;353:17841792. 3.Early Breast Cancer Trialists’ Collaborative Group: Effects of chemotherapy and hormonal therapy for early breast cancer on recurrence and 15-year survival: An overview of the randomised trials. Lancet. 2005;365:1687-1717. 4. Overgaard M, Jensen MB, Overgaard J, et al. 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