Download Yesos
Document related concepts
no text concepts found
Transcript
Cap261 17/7/06 11:41 Página 1839 Sección 22 ■ Capítulo 261 Yesos F. Santonja, Y. Martínez Matos, R. Jiménez Leal Los yesos se utilizan como inmovilización para la mayoría de las fracturas, para muchas roturas ligamentosas y tendinosas, así como para diversas luxaciones, lesiones capsulares y articulares. En ortopedia, también se utilizan para la corrección de deformidades como el pie zambo o para la prevención de deformidades por desequilibrio neuromuscular. Este capítulo trata sobre las indicaciones de los yesos y su correcta aplicación, con el objetivo de conocer los aspectos de este procedimiento, que serán de utilidad cuando atendamos a pacientes que los lleven. Los yesos cerrados no suelen ponerse en atención primaria, puesto que el tratamiento adecuado de las fracturas (reducción e inmovilización de las mismas) quedan fuera del ámbito del médico de familia. Los centros de salud generalmente carecen del material necesario para su retirada (tijeras de yeso, sierra), en el caso de que tenga que retirarse. Vendaje enyesado estándar Generalidades El yeso se caracteriza porque envuelve completamente el perímetro de la región a inmovilizar. Son inmovilizaciones cerradas. Se diferencia de la férula porque, en ésta, la escayola sólo cubre una parte del perímetro. Con el yeso se consigue la completa inmovilización de una o varias articulaciones, por lo que es considerado como un tratamiento definitivo. El material más utilizado es la escayola, que se encuentra impregnada en las vendas, aunque existen otros materiales para confeccionarlo. Las vendas de yeso se moldean fácilmente y se adaptan a la forma de la extremidad sin demasiado esfuerzo; sin embargo, uno de sus inconvenientes es que no acaban de fraguar hasta pasadas 36-48 horas, por lo tanto, la región escayolada no se puede forzar hasta pasado ese tiempo. En el caso de un botín de escayola, no podrá apoyarse el pie hasta transcurridas unas 48 horas, debiendo hacerlo con un zapato especial. El yeso se ablanda si se moja, pudiendo debilitarse hasta deshacerse. Indicaciones • Fracturas óseas. • Esguinces graves (grado III). • Luxaciones y lesiones capsulares. • Lesiones tendinosas. • Inmovilizaciones rígidas tras cirugía traumatológica. Material necesario • Venda tubular elástica o venda de papel (opcional). • Venda de algodón. • Vendas de yeso, de varios tamaños, según la región del cuerpo que se quiera inmovilizar: – Pulgar y dedos: 5 cm. – Muñeca, brazo y antebrazo: 10 cm. – Muslo y pierna: 15 y 20 cm. – Tobillo y pie: 10 y 15 cm. • Guantes. • Palangana con agua para introducir las vendas de yeso. Cirugía menor y procedimientos en medicina de familia 1839 Cap261 17/7/06 11:41 Página 1840 Sección 22: Procedimientos de traumatología, ortopedia, rehabilitación y medicina del deporte en medicina de familia Colocación 1. Se recubre la región con la venda tubular, sobrepasando unos 3-5 cm los límites del yeso. Se envuelve con algodón el miembro afecto (fig. 1a), prestando especial atención (almohadillando más) a los resaltes óseos, donde el yeso puede ocasionar úlceras por presión. 2. Se moja la venda de yeso en agua tibia (igual que lo explicado en el capítulo de férulas), manteniéndola sumergida hasta que dejen de salir burbujas. Se escurre suavemente. No debe exprimirse porque perderían mucho yeso. 3. Se va desplegando la venda de yeso, rodeando la región a inmovilizar (fig. 1b). Hay que incluir las articulaciones pro- a b ‡d e ximal y distal a la lesión. Según se va vendando, simultáneamente se va modelando el yeso a la región que se está inmovilizando (fig. 1c). Debe comenzar a aplicarse por la porción distal e ir progresando hacia la proximal. 4. Se colocan varias capas de yeso hasta conseguir la consistencia adecuada (fig. 1d), generalmente de ocho a diez capas en los niños y de 12 a 14 en los adultos. 5. Se coloca la venda sin apretar, evitando dobleces y giros sobre su eje, ya que pueden ocasionar bridas que dificulten la circulación. Debe alisarse bien la venda para evitar rugosidades. 6. La articulación debe inmovilizarse en posición funcional (fig. 1e), excepto que la reducción de la fractura precise una c e’ Figura 1. a) Se coloca una capa homogénea de algodón, sobrepasando un poco los límites que tendrá el yeso. b) Se coloca el yeso a su caída de distal a proximal. La presión ha de ser homogénea desde el principio. No puede comprimirse en exceso. c) Simultáneamente se va desenrollando y modelando la venda de escayola sobre el antebrazo. d) Se colocan dos o tres vendas de escayola, hasta que adquiera la consistencia deseada. Se cuidan los límites de extensión de la escayola. e) Finalización del yeso antebraquial. La muñeca está en posición funcional. Hay que limpiar los dedos para observar su coloración. e') Muñeca en posición funcional. Longitud adecuada del yeso. Dedos limpios. 1840 Cirugía menor y procedimientos en medicina de familia Cap261 17/7/06 11:41 Página 1841 Capítulo 261: Yesos determinada posición, como en la fractura de Colles (fig. 2). 7. Se comprueba que los extremos del yeso no compriman y permitan la función de las articulaciones vecinas. 8. Se debe limpiar la piel de la escayola, sobre todo en las zonas distales para poder observar la coloración de los pulpejos de los dedos (fig. 1e’). En algunos hospitales, para evitar un síndrome compartimental, tras colocar el yeso, lo abren longitudinalmente con una sierra de yeso, consiguiendo una separación entre los bordes de 2 ó 3 mm y, tras asegurarse de que el edema va cediendo, rellenan el espacio con algodón y lo suelen enyesar de nuevo. Precauciones Miembro superior • El brazo debe colocarse en cabestrillo con la mano más alta que el codo. • Debe realizar flexo-extensión de los dedos desde el primer momento, pero sin intentar mover la muñeca. • Hay que evitar realizar movimientos forzados con la muñeca y/o con el codo, durante las primeras 48 horas, hasta que fragüe completamente el yeso. • Vigilar si se hinchan los dedos y la mano (fig. 3a). Cuando estén hinchados y con Figura 3. a) Edema de mano y dedos a las 72 horas de colocado el yeso braquial, tras una fractura de la muñeca. b) Elevación de la mano. Mejoró claramente el edema tras 30' en esta posición. Mantuvo en su domicilio la mano en alto durante unos días. La evolución fue buena. a Figura 2. Yeso antebraquial con desviaciones ulnar y palmar por una fractura de Colles. dificultad para moverlos (por el hinchazón), pero no se ha incrementado el dolor, elevar mucho la mano, dejándola colgada de un soporte e indicar que realice movimientos continuos de los dedos (fig. 3b). Valorar cada 10-15 minutos. Habitualmente se resolverá el edema. Puede añadirse un AINE intramuscular. • No debe mojarse el yeso, ya que se deteriora y permite más movilidad. • Se ha de observar que, al disminuir el edema, el yeso no quede muy holgado. En el caso de una fractura precisará sustituirlo. Miembro inferior • Cuando se siente, deberá poner la pierna sobre un cojín, para que el pie esté más alto que la rodilla y ésta que la cadera. b Cirugía menor y procedimientos en medicina de familia 1841 Cap261 17/7/06 11:41 Página 1842 Sección 22: Procedimientos de traumatología, ortopedia, rehabilitación y medicina del deporte en medicina de familia • No puede apoyar sobre el yeso, ni realizar movimientos forzados con el tobillo y/o con la rodilla, en las primeras 48 horas, hasta que fragüe completamente el yeso. Para deambular deberá utilizar dos bastones ingleses. • El apoyo se podrá hacer a partir de las 48 horas con un zapato especial, siempre que lo autorice su médico. • Se ha de observar que no se afloje el yeso al disminuir el edema. Si queda muy holgado y tiene una fractura, habrá que sustituirlo. • No debe mojarse el yeso ya que, al deteriorarse, pierde su capacidad de sujeción. Yesos más habituales en el miembro inferior • Yeso cruropédico (fig. 4). Va desde el 1/3 proximal del muslo, hasta la raíz de los dedos. Está indicado para las lesiones de la rodilla. • Calza de yeso o yeso cilíndrico (fig. 5). Va desde el 1/3 proximal del muslo hasta justo por encima de los maléolos (supramaleolar). Precisa colocar una venda elástica adhesiva en el pie y en el tobillo. Está indicado para las lesiones de la rodilla. Tiene la ventaja de que permite la movi- Figura 4. Yeso cruro-pédico por una luxación traumática de la rótula. 1842 lidad del tobillo, pero también el inconveniente de que, cuando se queda un poco holgado, suele molestar en el tobillo al descender todo el yeso. • Polaina (fig. 6). Cubre sólo la pierna, dejando libre las articulaciones del tobillo y de la rodilla. Está indicado para las fracturas diafisarias de la tibia. Yesos de resina polimerizada Generalidades Consisten en vendas de algodón o fibra de vidrio impregnadas en una resina que se endurece con el agua. Tiene las siguientes ventajas: • Fraguan alcanzando la máxima solidez en 30 minutos (el yeso estándar se seca totalmente tras 48 horas). • Son resistentes al agua. • Son radiolúcidas. • Tienen gran porosidad, por lo que pesan menos que el yeso estándar. Sus desventajas: • Son más caras. • Son rígidas, por lo que resultan más difíciles de poner, modelándose peor que el yeso estándar. Indicaciones • Fracturas recientes estables en las que se espera se produzca poca hinchazón. • Tras reducirse la hinchazón en traumatismos recientes que precisan inmovilización rígida. Figura 5. Calza de yeso. El tobillo y el pie se vendan para evitar su edema. Cirugía menor y procedimientos en medicina de familia Cap261 17/7/06 11:41 Página 1843 Capítulo 261: Yesos Figura 6. Polaina para una fractura del tercio medio de la tibia sin desplazar. Material necesario Comentario final • Vendaje tubular elástico. Hay que movilizar lo antes posible las articulaciones libres del yeso. En las primeras horas, sólo deben moverse los dedos para reducir la inflamación. Si existe inflamación distal, dolor y color azulado de los dedos, se eleva la extremidad y, si no mejora claramente tras 15-30 minutos, habrá que abrir longitudinalmente el yeso o retirarlo. Si nos consultan porque hay introducido un objeto dentro de la escayola, habrá que abrir una ventana (si se sabe donde está o se visualiza en una radiografía, por el riesgo de ocasionar úlceras por presión, que pueden ser profundas si el objeto permanece durante mucho tiempo entre la piel y la escayola). Si no se sabe dónde está el objeto o se sospecha que pueda haber varios, como sucede con los niños más pequeños, habrá que retirar la escayola y volver a colocar otra (véase “Instrucciones al paciente”). • Venda de algodón. • Venda de fibra de vidrio. • Guantes. • Palangana con agua tibia para introducir la venda. • Venda de gasa inextensible. Colocación 1. Se coloca un vendaje tubular elástico que sobrepase en 3-5 cm los límites que alcanzará el yeso. 2. Se aplica algodón para proteger las prominencias óseas. 3. Se abren los paquetes de vendas de uno en uno para evitar un fraguado prematuro. Se manipulan con guantes de goma (fig. 7), evitando así la sensibilización o las adherencias a la piel. 4. Se sumerge la venda en agua templada durante dos a cinco segundos, estrujándola varias veces. 5. Se coloca cada vuelta de la venda tapando la mitad de la que está inmediatamente debajo. Antes de las últimas vueltas, se dobla el vendaje tubular y se aplica la venda por encima del mismo. 6. Se mejora el moldeado del yeso colocando una venda mojada sobre el mismo, que se retira cuando éste se haya endurecido. Figura 7. Material de resina polimerizada. Cirugía menor y procedimientos en medicina de familia 1843 Cap261 17/7/06 11:41 Página 1844 INSTRUCCIONES AL PACIENTE Enfermo escayolado • Mantenga en alto la extremidad lesionada. • Mueva con frecuencia los dedos y las articulaciones no inmovilizadas. • No debe recortarse o modificar la escayola, aunque sea “muy poquito”. • No introduzca agujas ni otros instrumentos para rascarse, ya que pueden producir heridas. • Si aparece dolor intenso o inflamación, deberá elevar mucho el miembro inmovilizado y realizar ejercicios de abrir y cerrar la mano. Si no mejora o tiene dudas, acuda a Urgencias. • Las escayolas de la extremidad inferior no pueden apoyarse, ya que se deformarán. Existe el peligro de resbalarse si intenta andar con ella. El apoyo de la escayola, sólo puede ser autorizado por su médico. • Si su médico le ha dado permiso para apoyar la escayola tras 48 horas, en las ortopedias existe un zapato de marcha que permite apoyar el pie sin peligro de caerse. Para andar con mayor comodidad, es aconsejable que se ponga un alza de dos centímetros bajo el zapato del miembro sano. • Si no puede apoyar el botín, utilice bastones ingleses para los desplazamientos. • No lleve anillos en los dedos de la mano o del pie que esté inmovilizado. • No la moje. Para el aseo personal envuelva el miembro inmovilizado con una bolsa de plástico cerrada. Asegure el cierre con una goma elástica en la raíz del miembro 1844 Cirugía menor y procedimientos en medicina de familia