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VOL. 19 r FA S C . 2 r NÚM. 47 r OCTUBRE 2012 REVISTA DE LA ASOCIACIÓN ESPAÑOLA DE ARTROSCOPIA (A.E.A.) VOL. 19 - FASC. 2 - NÚM. 47 - OCTUBRE 2012 Fundador: Dr. Enrique Galindo Andújar Director: Prof. Javier Vaquero Martín Redactor Jefe: Dr. Antonio Pérez-Caballer Secretarios de Redacción: Dr. Alejandro Espejo, Dr. Albertino Amigo Fernández JUNTA DIRECTIVA ACTUAL CONSEJO DE REDACCIÓN Presidente: Dr. Joan Carles Monllau García Dr. Joaquín Cabot Dalmau Dr. Ramón Cugat Bertomeu Dr. Juan José Rey Zúñiga Dr. Enrique Galindo Andújar Dr. Javier Vaquero Martín Dr. José Achalandabaso Alfonso Dr. Antonio Estévez Ruiz de Castañeda Dr. Manuel Díaz Samada Dr. José María Altisench Bosch Vicepresidente: Dr. Rafael Canosa Sevillano Secretario: Dr. Rafael Otero Fernández Tesorero: Dr. José Luis Pais Brito Vocales: Dr. José Luis Ávila Lafuente Dr. Juan Sarasquete Reiriz Dr. Eduardo Sánchez Alepuz Copyright de los textos originales 2012. Reservados todos los derechos. Ninguna parte de esta publicación puede ser reproducida, transmitida en ninguna forma o medio alguno, electrónico o mecánico, incluyendo fotocopias, grabaciones o cualquier sistema de reproducción, sin la autorización por escrito de los titulares del Copyright. Los editores no se declaran responsables de las opiniones reflejadas en los artículos publicados. REVISTA DE LA ASOCIACIÓN ESPAÑOLA DE ARTROSCOPIA (A.E.A.) VOL. 19 - FASC. 2 - NÚM. 47 - OCTUBRE 2012 SUMARIO Reparación artroscópica de la luxación acromioclavicular aguda con sistema de suspensión coracoclavicular. Técnica isométrica y anatómica F. Abat, P. Gelber, J. Sarasquete .......................................................................................... 6 Resultados mejorados y bajo índice de rerrupturas con aplicación de algoritmo de actuación en reparaciones artroscópicas de rupturas completas del manguito rotador O. García Martínez, A.R. Hernández Rodríguez, J.L. Candelario Álvarez, E. Buess ............... 13 Tratamiento endoscópico del atrapamiento del nervio ciático en el espacio subglúteo. Síndrome del glúteo profundo/piramidal L. Pérez Carro, V. de Diego, N. Fernández Escajadillo, M. Rupérez Vallejo, M. Sumillera, I. Sainz .......................................................................................................... 24 Técnicas de reconstrucción del ángulo posterolateral de la rodilla según el grado de lesión. Orientación de los túneles según un modelo cadavérico P.E. Gelber, J.I. Erquicia, F. Abat, G. Sosa, X. Pelfort, M. Tey, J.C. Monllau ............................ 34 Introducción de la cirugía artroscópica en Camboya en tres fases, en el seno de un proyecto de cooperación al desarrollo Í. Úbeda Pérez de Heredia, J.R. García Medina, E. López-Vidriero Tejedor, J.L. Paulín Seijas, A.D. Sánchez González, M. Díaz Álvarez .................................................. 41 Uso de la cincha de velcro para mantener la hiperflexión de la rodilla en el momento de realizar el túnel femoral en la cirugía de reconstrucción del ligamento cruzado anterior por vía anteromedial (modificación de la técnica clásica) J.P. Pizzuti Dopazo, J.C. Teixidor Martí, P.J. Amorós Barceló, Á.M. Sanjuán Castillo, J. Swiatlo, R. Revoredo .................................................................... 48 Noticias ............................................................................................................................ 52 Premios ............................................................................................................................ 55 4 Cuadernos de Artroscopia. Vol. 19, fasc. 2, n.º 47, octubre 2012 REVISTA DE LA ASOCIACIÓN ESPAÑOLA DE ARTROSCOPIA (A.E.A.) VOL. 19 - FASC. 2 - N.º 47 - OCTOBER 2012 CONTENTS Arthroscopic repair of acute acromioclavicular joint dislocation with coracoclavicular suspension device. Anatomic and isometric technique F. Abat, P. Gelber, J. Sarasquete .......................................................................................... 6 Improved results and low re-tear index with the application of an action algorithm in the arthroscopic repair of complete rotator cuff tears O. García Martínez, A.R. Hernández Rodríguez, J.L. Candelario Álvarez, E. Buess ............... 13 Endoscopic management of sciatic impingement in the subgluteal space. Deep gluteus/pyramidalis syndrome L. Pérez Carro, V. de Diego, N. Fernández Escajadillo, M. Rupérez Vallejo, M. Sumillera, I. Sainz .......................................................................................................... 24 Reconstruction of the posterolateral corner of the knee depending on degree of injury. Orientation of the tunnels in a cadaveric model P.E. Gelber, J.I. Erquicia, F. Abat, G. Sosa, X. Pelfort, M. Tey, J.C. Monllau ............................ 34 Three-phase introduction of arthroscopic surgery in Cambodia in the context of a development cooperation project Í. Úbeda Pérez de Heredia, J.R. García Medina, E. López-Vidriero Tejedor, J.L. Paulín Seijas, A.D. Sánchez González, M. Díaz Álvarez .................................................. 41 Use of the sailmaker’s sling for maintaining knee hyperflexion at the time of femoral tunnelization in anterior cruciate ligament reconstruction surgery through the anteromedial approach (a modification of the classical technique) J.P. Pizzuti Dopazo, J.C. Teixidor Martí, P.J. Amorós Barceló, Á.M. Sanjuán Castillo, J. Swiatlo, R. Revoredo .................................................................... 48 News ................................................................................................................................ 52 Awards ............................................................................................................................. 55 Cuadernos de Artroscopia. Vol. 19, fasc. 2, n.º 47, octubre 2012 5 Reparación artroscópica de la luxación acromioclavicular aguda con sistema de suspensión coracoclavicular. Técnica isométrica y anatómica F. Abat, P. Gelber, J. Sarasquete Servicio de Cirugía Ortopédica y Traumatología. Hospital de la Santa Creu i Sant Pau. Universidad Autónoma de Barcelona Correspondencia: Dr. Ferran Abat González Servicio de Cirugía Ortopédica y Traumatología Hospital de la Santa Creu i Sant Pau Universidad Autónoma de Barcelona c/ Mas Casanovas, 90. 08025 Barcelona Correo electrónico: fabat@santpau.cat Objetivo: Exponer la técnica de reconstrucción artroscópica de las luxaciones agudas acromioclaviculares de grados III-V. Método: Se realiza una exposición minuciosa de la técnica de reducción artroscópica mediante sistemas de suspensión acromioclavicular con técnica isométrica y de reconstrucción anatómica, así como los pequeños consejos que pueden facilitar la correcta ejecución de la técnica. Relevancia clínica: Dado que la reconstrucción artroscópica con sistema de suspensión coracoclavicular –ya sea mediante técnica isométrica o anatómica– es una técnica segura y reproducible para reparar las luxaciones acromioclaviculares agudas, se debe conocer este procedimiento, así como sus puntos clave. Arthroscopic repair of acute acromioclavicular joint dislocation with coracoclavicular suspension device. Anatomic and isometric technique Objective: To describe arthroscopic reconstruction technique for acute grades III-V acromioclavicular dislocations. Method: A detailed description of the arthroscopic reduction technique done by means of acromioclavicular suspension systems with an isometric technique and anatomic reconstruction as well as a little advice that may facilitate execution of the technique. Discussion and clinical relevance: Given that arthroscopic reconstruction by means of a coracoclavicular suspension system using an anatomic or isometric technique is safe and reproducible for the repair of acute acromioclavicular dislocations, knowledge of this procedure and its key aspects is a must. Palabras clave: Reparación artroscópica. Luxación. Aguda. Acromioclavicular. Coracoclavicular. Key words: Arthroscopic repair. Dislocation. Acute. Acromioclavicular. Coracoclavicular. 6 Cuadernos de Artroscopia. Vol. 19, fasc. 2, n.º 47, octubre 2012 F. Abat, P. Gelber, J. Sarasquete INTRODUCCIÓN cópica de las luxaciones agudas AC de grados III-V mediante sistemas de suspensión coracoclavicular (ZipTightTM, Biomet, Warsaw, Indiana [EE UU]) con técnica isométrica o de reconstrucción anatómica, así como algunas recomendaciones que puedan facilitar la correcta ejecución de la técnica. El tratamiento de las luxaciones acromioclaviculares (AC) está influenciado por una sociedad cada vez mas exigente con los resultados estéticos y funcionales obtenidos tras una lesión. Las luxaciones de dicha articulación se producen con una frecuencia en torno al 9% en pacientes jóvenes (mayoritariamente hombres) deportistas o aquellos implicados en accidentes de TÉCNICA QUIRÚRGICA alta energía(1). Se producen por un traumatismo en el acromion con el brazo en aducción, desProcedimiento isométrico encadenando dolor intenso y deformidad a niSe pretende realizar una reparación isométrivel AC con protrusión distal de la clavícula. Para ca. Utilizando un solo dispositivo de suspensión que la clavícula se desplace, es necesario cierto CC, se procede a reducir la luxación AC posiciogrado de lesión de los ligamentos acromioclavinando el sistema de tracción centrado entre los culares y de los coracoclaviculares (CC) (conoiligamentos conoide y trapezoide. de y trapezoide), clasificándose este desplazaBajo anestesia general asociada a un bloqueo miento según los grados de Rockwood(1). interescalénico, se coloca al paciente en posición de silla de playa (semisentado) con el braLas indicaciones actuales de tratamiento quizo en flexión anterior de 50-70° y 3 kg de tracrúrgico en lesiones agudas de grados IV y V pación (Figura 1a). Se realiza un portal posterior recen claramente establecidas(2). En las lesiode acceso al espacio glenohumeral, para realines de grado III, la tendencia actualmente es zar una exploración completa y estudiar posisu resolución quirúrgica en pacientes con alta bles lesiones asociadas, siguiendo la sistemádemanda funcional(3). Actualmente, la controtica descrita por Snyder(5). Seguidamente, con versia se centra en la elección de la técnica quirúrgica, pudiendo realizarse tratamiento abierun portal de visión antero-lateral a 2-3 cm del to o artroscópico para reducir dicha luxación. borde lateral del acromion y con un portal de Se emplean tendones (auto- o aloinjertos)(4) o trabajo anterior, se accede al espacio subacromial (Figura 1b). Es importante realizar un dispositivos sintéticos para dicho fin(2). Es tema desbridamiento suficiente de la bursa con el de debate la utilización de un sistema de suspensión coracoclavicular (CC) situado en un punto isométrico entre los ligamentos conoide y trapezoide, o el empleo de dos sistemas que emulan estos dos ligamentos(2). Al tratarse de lesiones agudas, se cree que al reparar los ligamentos CC de forma primaria con dispositivos artificiales, manteniendo así reducida la articulación AC, se consigue la necesaria cicatrización de los ligamentos, actuando los dispositivos artificiales como guías o andamios. Se debe tener presente que los resultados clínicos presentados hasta el momento obtienen una recuperación clínica y funcional favorable, pero persistiendo alrededor de un 30-40% de desplazamiento residual, aunque sin repercusión clínica aparente(2,3). Figura 1. a) Posicionamiento del paciente en silla de playa. b) Portales El propósito de este trabajo es expo- quirúrgicos. c) Ligamento coracoacromial (CA). d) Base de la apófisis ner la técnica de reconstrucción artros- coracoides tras ser desbridada. Cuadernos de Artroscopia. Vol. 19, fasc. 2, n.º 47, octubre 2012 7 Reparación artroscópica de la luxación acromioclavicular aguda […] sinoviotomo hasta visualizar el ligamento coracoacromial (Figura 1c), para luego seguirlo en dirección medial hasta encontrar su inserción en el extremo de la coracoides. Se prosigue el desbridamiento con la ayuda del motor y vaporizador del tejido bursal, que se encuentra entre la apófisis coracoides y el in- tervalo rotador. Así se logra acceder a la base de la apófisis coracoides utilizando una visión inferior de la misma con el artroscopio (Figura 1d). También desde allí se puede visualizar el tendón del subescapular. Se debe extremar la precaución en este punto, ya que, medial a la coracoides, encontramos el plexo braquial y la arteria axilar. Para el abordaje sobre la clavícula se recomienda realizar una mínima incisión (2 cm), alejada unos 3 cm de su extremo acromial, abriendo la fascia deltotrapezoidea hasta visualizar la clavícula. Esta distancia de 3 cm desde el borde de la clavícula es el punto central entre los ligamentos conoide y trapezoide. Se utiliza la guía del sistema de suspensión coracoclavicular (ZipTight TM, Biomet) (Figura 2a), posicionándola en la zona inferior de la base de la apófisis coracoides (intentando ir hacia posterior), y la otra parte de la guía centrada sobre la clavícula con una angulación aproximada de 70-90° (Figura 2b). La retirada de la tracción puede facilitar la colocación en posición Figura 2. a y b) Visión externa y anatómica de la guía para brocado correcta sobre la clavícula si ésta se enclavícula-coracoides. c) Visión artroscópica del túnel isométrico. d) cuentra muy posterior. Es importanVisión artroscópica de los túneles anatómicos. te este paso, ya que una entrada de la guía centrada en la clavícula y posterior en la apófisis coracoides asegura suficiente pared ósea a ambos lados del túnel, minimizando el riesgo de fracturas durante la implantación del dispositivo. Seguidamente se realiza el túnel con una broca canulada de 4,5 mm desde clavícula hasta coracoides, sobre una aguja guía de 2,4 mm (Figura 2c y d), a través del cual se pasa una sutura transportadora, que es recuperada desde el portal anterior. Se procede a introducir el sistema de suspensión guiado desde craneal (clavícula) hacia caudal. Se acomoda el implante rectangular de titanio en la apófisis coracoides y la arandela en la clavícula (Figura 3a). Para sacar el implante de la coracoides y girarlo, se reFigura 3. a) Visión anatómica del implante colocado. b) Localización comienda la utilización de una pinza de los túneles anatómicos en clavícula. c) Visión artroscópica del imartroscópica o un empujanudos, eviplante en técnica isométrica. d) Visión artroscópica de los implantes tando realizar así un exceso de tensión en técnica anatómica. 8 Cuadernos de Artroscopia. Vol. 19, fasc. 2, n.º 47, octubre 2012 F. Abat, P. Gelber, J. Sarasquete que pueda provocar la fractura de la apófisis coracoides. Utilizando el abordaje sobre la clavícula, apoyamos un punzón o instrumental similar directamente sobre el extremo distal de la misma. Liberamos la tracción y realizamos contratracción, empujando el codo en dirección craneal. Esto nos permite reducir la luxación AC para proceder entonces a la fijación del sistema de suspensión. Es importante un cuidadoso cierre de la fascia deltotrapezoidea, dejando las suturas en su profundidad. Esto evitará una posible intolerancia de las mismas durante el postoperatorio. En el caso de tener una rotura de la fascia acromioclavicular asociada, se procede al cierre completo de la misma. El postoperatorio consiste en la colocación de un cabestrillo durante 4-6 semanas, empezando ejercicios pendulares en la cuarta semana y aumentando su intensidad de manera progresiva desde la sexta semana para ir ganando rango de movilidad. Se deben evitar deportes de contacto o grandes esfuerzos durante 4-6 meses. Procedimiento anatómico Cuando se pretende realizar una reparación anatómica de los ligamentos CC (conoide y trapezoide), se deben utilizar dos dispositivos de suspensión CC. Esto permite reproducir sendos trayectos de los ligamentos conoide y trapezoide. Los primeros pasos, como colocación del paciente, procedimiento anestésico, desbridamiento y localización anatómica de la apófisis coracoides, son iguales a la técnica isométrica previamente descrita. Una vez tenemos localizada la base de la coracoides, debemos identificar los dos puntos donde realizaremos sendos túneles. Para posicionar los túneles en la clavícula, usamos como referencia su extremo acromial. El túnel para el ligamento conoide se realizará a 4,5 cm de ésta, y el túnel para el trapezoide a 2,5 cm (Figura 3b). A nivel de la apófisis coracoides, deben situarse en su base y con una separación aproximada de 1cm entre ambos (Figura 2d). El túnel del ligamento conoide se sitúa a 5 mm del borde medial; y el túnel del ligamento trapezoide, en posición algo más anterior y a 5 mm del borde lateral. A partir de aquí se sigue el mismo procedimiento que para colocar un solo dispositivo Cuadernos de Artroscopia. Vol. 19, fasc. 2, n.º 47, octubre 2012 (Figura 3c). Los dos botones del sistema de suspensión CC deben quedar en la cara inferior de la coracoides paralelos entre sí y perpendiculares a la base de la apófisis coracoides (Figura 3d). En el momento de reducir la luxación AC (que se realizará con el mismo proceder antes expuesto) se debe tensar primero parcialmente un dispositivo, siguiendo posteriormente con el segundo, para terminar el tensionado de ambos en un punto final. ESTUDIO CLÍNICO PRELIMINAR Material y métodos La serie está formada por 17 pacientes con diagnóstico de luxación AC de grados III-V de Rockwood, intervenidos consecutivamente bajo técnica artroscópica por el mismo cirujano sénior (J.S.). La edad promedio era de 36 años (24-52). El seguimiento fue de entre 12 y 27 meses. Tres luxaciones eran de tipo III, cuatro de tipo IV y diez de tipo V. Un paciente presentó una pérdida de reducción a los tres meses tras traumatismo que requirió una reintervención quirúrgica, siendo excluido del seguimiento. En todos los casos se usó un solo dispositivo de suspensión coracoclavicular situado de forma isométrica. Fueron evaluados funcionalmente mediante el SF-36, el test de DASH (disabilities of the arm, shoulder, and hand) y la escala visual analógica (EVA). El estudio radiológico incluyó radiografías anteroposteriores y la proyección axial/método de Alexander. Resultados El test de DASH y la EVA mostraron una mejoría de resultados desde la valoración preoperatoria, tal y como se puede ver en la Tabla 1. Los valores del SF-36, a su vez, también mostraron mejoría (Tabla 2), tanto en el componente mental como en el físico. Para poder comparar los resultados del SF-36, se han tomado como valores base las medias según grupo de edad, tal como mostró el trabajo de Vilagut et al.(6). Los resultados radiológicos fueron satisfactorios en un 75% de los casos (12 de 16), obteniendo buena reducción de la luxación AC sin desplazamientos secundarios sustanciales. En los cuatro pacientes restantes se evidenció un desplazamiento residual superior al 50% de la distancia AC en dirección superior y/o posterior, 9 Reparación artroscópica de la luxación acromioclavicular aguda […] la técnica artroscópica permite identificar posibles lesiones asociadas tanto del espacio glenoTABLA ILUSTRATIVA DE LOS RESULTADOS humeral como del subacromial, y permite una CLÍNICOS OBTENIDOS excelente visualización directa de la cara inferior de la coracoides, así como asegurar el ópFinal del Preoperatorio seguimiento timo posicionamiento del implante. Cabe mencionar el beneficio de no exponer al paciente Valor Ratio Valor Ratio ni al personal sanitario a radiación X durante el EVA 7,83 6-9 1,94 1-3 acto quirúrgico. El tiempo quirúrgico empleado DASH 80,4 58,2-90,1 3,5 0,2-9,2 en estas técnicas es comparable al tiempo empleado con técnicas abiertas, aunque represenDASH: discapacidades brazo, hombro y mano; EVA: ta un coste económico mayor y una necesaria escala visual analógica curva de aprendizaje. Se debe tener presente que estas técnicas no cierran la puerta a futuros actos quirúrgicos, en sin alcanzar el grado de desplazamiento inicial. caso de que éstos fueran necesarios. A su vez, en este grupo de pacientes los resulSe han descrito múltiples técnicas, la mayoría tados clínicos y funcionales han sido satisfactode ellas basadas en modificaciones sobre el prorios hasta el momento actual. En dos pacientes cedimiento de Weaver-Dunn(8) o la realización se retiró el material por intolerancia, con un resultado final satisfactorio. artroscópica de dicha técnica, como describe Lafosse(9). Entre estas técnicas destacan las que reparan la anatomía de los ligamentos conoide y trapezoide, como las descritas por Imhoff(2). DISCUSIÓN Otros autores, como Dimakopoulos(10), Choi(11), Baumgarten(12) o Tomlinson(13), usan lazadas con La reparación de las luxaciones AC por vía artroscópica reporta unos resultados funcionales tendones alrededor de la coracoides y fijación satisfactorios, con una baja morbilidad. A peen la clavícula. sar de la pérdida de reducción durante el seguiLa técnica artroscópica presentada utiliza un miento que se reporta, ésta no ha presentado sistema de suspensión coracoclavicular con un correlación clínica. dispositivo inicialmente diseñado para la reLa técnica descrita es de mínima invasión, y construcción de la sindesmosis tibioperonea(7). permite reparar la función de los ligamentos En dicha técnica, la reconstrucción isométriconoide y trapezoide(7). Se obtienen, además, ca alcanzada parece obtener buenos resultados a pesar de no restablecer la anatomía por mejores resultados estéticos en comparación completo(3). Es por ello que cada vez se tiende con los tratamientos no artroscópicos, y se evita la necesidad de retirar material, como placasa reparaciones más anatómicas, que emulan la gancho, agujas o tornillos. El posicionamiento acción de los ligamentos conoide y trapezoide la incisión sobre la clavícula facilita el prode(2,11). En el presente trabajo se sustituyen los cedimiento de retirada del dispositivo durante ligamentos CC por dispositivos artificiales, que el seguimiento si así fuera necesario. A su vez, teóricamente actúan como guías o andamios para la cicatrización secundaria de dichos ligamentos. Tabla 2 Un punto clave en la discusión se basa en la necesidad TABLA DE LOS RESULTADOS SF36 de reparar ambos ligamentos (conoide y trapezoide). A Final del Media Preoperatorio (6) menudo sólo se lesiona uno seguimiento control de los dos ligamentos (14), Valor Ratio Valor Ratio pero en estos casos nos enSF-36 (físico) 30,1 18,1-45,2 57,2 54,5-62 54,83 contramos ante luxaciones AC de grado II. Aunque esSF-36 (mental) 45,5 29,6-54,5 55,1 46-58 52,94 tudios biomecánicos (7,14,15) abogan por la reparación de SF-36: cuestionario salud de 36 ítems Tabla 1 10 Cuadernos de Artroscopia. Vol. 19, fasc. 2, n.º 47, octubre 2012 F. Abat, P. Gelber, J. Sarasquete ambos ligamentos, los resultados clínicos parecen indicar similares resultados con la técnica de reparación basada en el posicionamiento centrado en coracoides (entre la inserción de los ligamentos conoide y trapezoide)(15). Los autores que insisten en que la reparación no anatómica no obtiene un buen control de la estabilidad vertical se basan en el estudio de Breslow(16), que describe los ligamentos coracoclaviculares como los limitantes del desplazamiento vertical, mientras que la cápsula y los ligamentos acromioclaviculares se encargan de la translación anteroposterior. A su vez, aunque en la literatura se habla de un 5% de desplazamiento anterior residual o de un 15-40% global de pérdida de reducción de la clavícula, el superoinferior no ha mostrado repercusión clínica(2,3,17). En la presente serie, en el 25% de los pacientes se evidenció un desplazamiento residual superior al 50% de la distancia AC en dirección superior y/o posterior, aunque nunca recuperando el grado de desplazamiento inicial. Sin embargo, los resultados clínicos y funcionales de estos pacientes han sido satisfactorios hasta el momento actual. Las complicaciones que puede mostrar esta técnica, además de aquellas inherentes a cualquier intervención quirúrgica, son la ya mencio- nada pérdida de reducción, las fracturas relacionadas con la tunelización de la clavícula y de la apófisis coracoides y la intolerancia de las suturas supraclaviculares (si no se sitúa el implante bajo la fascia deltotrapezoidea). Tal y como muestran los resultados presentados, ésta es una técnica no exenta de complicaciones. Debe estudiarse individualmente a cada paciente para valorar la idoneidad de este tratamiento. En la literatura actual existen pocos trabajos comparativos entre cirugía o tratamiento conservador(18) o que comparen diferentes técnicas quirúrgicas entre sí. Éstos son claramente necesarios para determinar la superioridad de una técnica sobre otra y la repercusión del desplazamiento radiológico residual en la función del hombro. El estudio preliminar presentado tiene varias limitaciones, como el corto seguimiento, la influencia de la curva de aprendizaje y la falta de un grupo control. Como conclusión, la reconstrucción artroscópica con un sistema de suspensión coracoclavicular con técnica isométrica o anatómica obtiene resultados moderadamente satisfactorios en la reparación de las luxaciones acromioclaviculares agudas. BIBLIOGRAFÍA 1. Rockwood CJ, Williams G, Young D. Disorders of the acromioclavicular joint. En: Rockwood CJ, Matsen FA III (eds.). The Shoulder (2nd ed.). Philadelphia (PA): WB Saunders; 1998. p. 483-553. 2. Salzmann GM, Walz L, Buchmann S, et al. Arthroscopically assisted 2-bundle anatomical reduction of acute acromioclavicular joint separations. Am J Sports Med 2010; 38: 1179-87. 3. Scheibel M, Dröschel S, Gerhardt C, et al. Arthroscopically assisted stabilization of acute high-grade acromioclavicular joint separations. Am J Sports Med 2011; 39: 1507-16. 4. Jiang C, Wang M, Rong G. 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Vol. 19, fasc. 2, n.º 47, octubre 2012 Resultados mejorados y bajo índice de rerrupturas con aplicación de algoritmo de actuación en reparaciones artroscópicas de rupturas completas del manguito rotador O. García Martínez1, A.R. Hernández Rodríguez1, J.L. Candelario Álvarez1, E. Buess2 1 Especialista de II grado en ortopedia y traumatología. Hospital Provincial General Docente Dr. Antonio Luaces Iraola. Ciego de Ávila (Cuba) 2 Especialista de ortopedia. Experto en cirugía artroscópica de hombro. Asesor de la cirugía artroscópica de hombro en Cuba. Instituto Shouldercare. Berna (Suiza) La reparación de las rupturas completas del manguito rotador (MR) por técnica artroscópica es una cirugía utilizada universalmente con favorables resultados funcionales. Existen informes con excelentes resultados clínicos, pero se anuncian con frecuencia altos índices de rerrupturas. Nuestro propósito es aplicar un algoritmo de actuación teniendo en cuenta principios diagnósticos fundamentales en la interpretación de la ruptura. Combinamos estos principios diagnósticos y las técnicas de reparación con el objetivo de obtener una cicatrización sin tensión y mejorar los resultados. Evaluamos las reparaciones artroscópicas en las rupturas completas del manguito rotador, utilizando un algoritmo de tratamiento creado y aplicado en nuestro servicio, desde febrero de 2006 hasta octubre de 2009. Se describen los resultados obtenidos en 78 pacientes con un seguimiento promedio de 19 meses (rango de 13 a 26 meses), evaluados con la escala de Constant-Murley. La distribución según sexo (55 masculinos [69,6%] y 24 femenino [30,4%]) y un promedio de edad de 57 años (rango de 46 a 68 años). Se ha obtenido un 95% de resultados excelentes y buenos a los 12 meses de evolución de los pacientes, y un 98,8% de resultados excelentes, buenos y regulares. Las complicaciones no afectaron a los resultados funcionales. El índice de rerruptura fue del 5,06%, y cuatro pacientes sufrieron rerrupturas después de la aplicación de nuestro protocolo. Improved results and low re-tear index with the application of an action algorithm in the arthroscopic repair of complete rotator cuff tears Arthroscopic repair of complete tears of the rotator cuff is a universally used surgical procedure with good functional results. Excellent clinical results have been reported, but there are also frequent reports of high re-tear incidences. Our aim has been to apply an action algorithm considering fundamental disgnostic principles in the interpretation of the tear. These diagnostic principles are combined with the repair techniques with the aim of achieving tensionfree healing and improving the results. The arthroscopic repair interventions in complete rotator cuff tears using a therapeutic algorithm created and used at our Service have been assessed from February 2006 to October 2009. We report the results achieved in 78 patients (55 males [69.6%] and 24 females [30.4%]; mean age 57 years [range, 46-68 years]) with a mean follow-up of 19 months (range, 13 to 26 months), assessed using the Constant-Murley scoring scale. The results achieved were classed as excellent-good in 95% of the cases after twelve months’ evolution of the patients, and as excellent-goodfair in 98.8%. complications did not affect the functional results. The re-tear index was 5.06%: four patients with re-tear after application of our protocol. Palabras clave: Ruptura del manguito rotador. Reparación artroscópica. Key words: Rotator cuff tear. Arthroscopic repair. Cuadernos de Artroscopia. Vol. 19, fasc. 2, n.º 47, octubre 2012 13 Resultados mejorados y bajo índice de rerrupturas con aplicación de algoritmo […] INTRODUCCIÓN MATERIALES Y MÉTODO La reparación de las rupturas completas del manguito rotador (MR) por técnicas artroscópicas es una cirugía utilizada universalmente con excelentes resultados funcionales(1-4). Las indiscutibles ventajas diagnósticas con énfasis en la configuración de la ruptura han sido mencionadas en la literatura con el objetivo de favorecer los mejorados resultados en las reparaciones(5-7). La visión integradora que ofrece el diagnóstico artroscópico puede ser utilizada eficientemente en la planificación de la reparación. La regla esencial en la cirugía del MR es optimizar la unión entre la huella ósea y el tejido tendinoso del MR, principio que cumple la sutura transósea con una alta fuerza de fijación(7). El rápido desarrollo de la cirugía artroscópica se ha acompañado de un desarrollo tecnológico acelerado de las suturas y los anclajes. Estudios biomecánicos han investigado la fijación del MR con sutura y anclajes, y éstos cumplen los objetivos de la reparación del MR(7,8). Según las fuentes consultadas, el objetivo de la reparación artroscópica del MR es alcanzar una alta fuerza de fijación inicial, minimizando la formación de aberturas en el tendón, y mantener una estabilidad mecánica en la zona de curación, para obtener una cicatrización biológica del tendón al hueso. Con la curación del MR se elimina el dolor y mejora la fuerza y el rango de movimiento(7). Existen informes sumamente favorables de la cicatrización del tendón, proporcionales con los resultados clínicos, pero con una frecuencia de recurrencia de rupturas de entre el 11% y el 36%(9-13). Los fracasos de las reparaciones artroscópicas del MR que se reportan en la literatura pueden estar asociados a factores que influyen en la cicatrización del tendón al hueso y en los resultados finales. El tamaño de la lesión, la cronicidad, el envejecimiento del tendón, la edad del paciente, la atrofia muscular, la calidad del tejido tendinoso, la calidad del hueso y la tensión de la sutura son los más significativos(14). Nosotros consideramos como hipótesis que si creamos un algoritmo de actuación, teniendo en cuenta principios diagnósticos fundamentales en la interpretación de la ruptura, basado en las clasificaciones ya existentes y lo combinamos con las técnicas de reparación, logramos el objetivo de una cicatrización biológica sin tensión y podemos obtener resultados favorables. Desde febrero de 2006 hasta octubre de 2009 practicamos reparaciones artroscópicas primarias de rupturas del MR en 84 hombros consecutivos de 83 pacientes, todas las cirugías efectuadas por el mismo cirujano. La valoración clínica del hombro incluyó anamnesis y examen físico; prueba de Jobe para la ruptura del tendón del supraespinoso, prueba de Patte y rotación externa para el tendón del infraespinoso y redondo menor, pruebas de abrazo del oso, Gerber y presión del estómago para el tendón subescapular. Practicamos radiografías simples en dos posiciones: antero-lateral y túnel del supraespinoso, y se realizó estudio ecográfico con transductor de 14 Hrz a todos los pacientes, preoperatorio y en el seguimiento postoperatoria. Los criterios de inclusión utilizados fueron dolor crónico de seis meses de evolución, fracaso del tratamiento conservador, deterioro del estilo de vida, mínimo de tres infiltraciones de esteroides previas a la cirugía y diagnóstico clínico confirmado por la ecografía. Se excluyeron: un paciente con evidencia de cirugías abiertas anteriores, un paciente con asociación a otra patología clínica, dos pacientes con rupturas irreparables y un paciente que presentó la ruptura del MR combinada con una lesión de Bankart. Nuestro estudio incluye 79 hombros en 78 pacientes a los que se les realizó un seguimiento promedio de 19 meses (rango de 13 a 26 meses). La distribución según sexo fue de 55 varones (69,6%) y 24 mujeres (30,4%) y un promedio de edad de 57 años (rango de 46 a 68 años) en el momento de la cirugía. De los pacientes incluidos, la cirugía se realizó en el miembro dominante en 57 (72,2%). 14 Técnica quirúrgica Utilizamos la posición de “silla de playa”, con sistema de tracción de partes blandas al miembro afectado. A través de un manguito que se fija con vendaje elástico estéril al miembro afectado, se realiza una tracción de 3-5 kg para abrir el espacio articular. Se utiliza anestesia general hipotensora y un bloqueo interescalénico preoperatorio, que garantiza la analgesia postoperatoria. Delimitamos con lápiz dermográfico los contornos óseos del extremo distal de la clavícula, Cuadernos de Artroscopia. Vol. 19, fasc. 2, n.º 47, octubre 2012 O. García Martínez, et al. Patrón de la ruptura Configuración según Ellman y Gartsman Media luna (C) Forma de U, L, L inversa y V (triangular) Reducción directa Reducción indirecta Grado de retracción tendinosa Clasificación según Patte Grado I Grado II Reductible Irreductible Movilidad del componente anterior y posterior Movilidad MR anteroposterior según Burkart Convergencia de márgenes hueso Reductible Reductibilidad según Milano Grado III Reducción completa sin tensión Irreductible Reducción completa con tensión Reducción incompleta Simple línea de sutura Doble línea de sutura Tipo de reparación Sutura de puente Convergencia de márgenes Desbridamiento Bursectomía Acromioplastia Tenodesis PLB Prótesis inversa Reparación específica según la configuración Figura 1. Algoritmo para la reparación artroscópica de las rupturas completas del manguito rotador. el acromion, la espina de la escápula, la coracoides y los portales a utilizar. Comenzamos con un portal posterior estándar para explorar la cavidad glenohumeral, que permite obtener otros portales. Realizamos el recorrido artroscópico para el diagnóstico, según el protocolo de Snyder, inspeccionando las estructuras a través de los 15 puntos estandarizados, en particular los puntos 5 y 6 para superficie articular del MR(15). Utilizando un portal anterior-superior, introducimos un explorador y confirmamos el diagnóstico palpando con el instrumento. Continuamos con el diagnóstico artroscópico inspeccionando el espacio subacromial, implantamos el artroscopio en un portal postero-lateral, exploramos a través de un portal lateral y realizamos bursectomía parcial para visualizar el techo del espacio subacromial, la superficie bursal del MR y la ruptura. Definimos si la huella Cuadernos de Artroscopia. Vol. 19, fasc. 2, n.º 47, octubre 2012 ósea está expuesta en la tuberosidad mayor y realizamos otros portales artroscópicos si son necesarios. Nosotros utilizamos el sistema de clasificación 1 artroscópica para las rupturas del MR desarrollado por Snyder basado en la localización de la ruptura: A: superficie articular; B: superficie bursal; C: rupturas completas(15). En las rupturas completas del MR evaluamos la retracción de los tendones utilizando la clasificación de Patte(16). Posteriormente definimos el patrón de la ruptura en forma de medialuna (C), forma de U, forma de L, forma de L inversa y forma triangular (V), según la clasificación de Ellman y Garstman(17). Utilizamos el método de sutura y anclaje para las reparaciones. En nuestra serie, la reparación de las rupturas completas se planificó con base en el patrón de la ruptura y la clasificación de la misma, así 15 Resultados mejorados y bajo índice de rerrupturas con aplicación de algoritmo […] a b MA MR c MP MR CM CG CG HLL CH Figura 2. a) Ruptura masiva en U del MR, retracción a nivel de cavidad glenoidea (CG), margen posterior del MR (MP MR). b) Margen anterior del MR (MA MR). c) Convergencia de márgenes (CM) a nivel de la huella (HLL). como la movilidad del tendón, según nuestra propuesta de algoritmo (Figura 1). En los pacientes que presentaron rupturas en forma de medialuna, se realizó reparación directa del tendón al hueso independiente a sus dimensiones. En los demás patrones con retracción en estadios II y III, donde el vértice de la ruptura se localiza a nivel de la cavidad glenoidea (Figura 2a y b), se le realizó inicialmente una sutura de convergencia de márgenes(18), después de obtener una movilidad suficiente del remanente anterior y posterior del tendón, con el objetivo de disminuir la profundidad de la ruptura y lograr una mejor reinserción del tendón a la huella (Figura 2c). Posteriormente se evaluó la movilidad medial a lateral del MR y su reducibilidad sobre la huella ósea (Figura 3), con base en los criterios de reducción completa sin tensión, reducción completa con tensión y reducción incompleta(19), y según el grado de reducción alcanzado se planifica una reparación sin tensión (Tabla 1) medialmente hasta el borde lateral de las tuberosidades (Figura 4a). Cuando sólo logramos la reducción completa con tensión o incompleta, preferimos realizar una técnica de simple línea de sutura situada medialmente, en el borde externo del cartílago articular de la cabeza humeral (Figura 4b y c), con el fin de disminuir la tensión que produce en el tendón la reparación. Cuando obtenemos la reducción completa sin tensión, practicamos una técnica de reparación de doble línea de sutura, agregando una segunda línea de sutura situada en el borde lateral de la huella ósea (Figura 5a), 16 proporcionando una mayor área de contacto del tendón con la superficie ósea cuando anudamos las suturas en el dorso del tendón (Figura 5b), obteniendo una reinserción completamente anatómica (Figura 5c). Las rupturas de tendón del subescapular se evaluaron según la clasificación de Fox y Romeo(20), y se repararon con técnica transtendinosa las rupturas parciales cuando coincidió con rupturas completas de otros tendones, similar a otras localizaciones, y las completas con técnica de simple línea de sutura. Evaluación clínica de los resultados Nuestros pacientes fueron evaluados utilizando la escala de Constant-Murley(21) preoperatoriamente, seis y doce meses después de la cirugía. La escala evalúa la intensidad del dolor con 15 puntos, la actividad de la vida diaria con 20 puntos, el rango de movimiento con 40 puntos y la fuerza con 25 puntos, para un total de 100 puntos. Califica los resultados según la puntuación obtenida por el paciente en cada momento (Tabla 2). Los datos se obtuvieron a través de una historia clínica confeccionada para el seguimiento y evaluación periódica de los pacientes, se introdujeron en una base de datos y posteriormente fueron procesados para la obtención de los resultados finales por el sistema analítico SPSS. Manejo postoperatorio Nuestros pacientes permanecieron hospitalizados durante 24 horas, y en 10 días se les retiraron las suturas. Se colocó un cabestrillo de tela, que se utilizó durante un periodo de 6-8 Cuadernos de Artroscopia. Vol. 19, fasc. 2, n.º 47, octubre 2012 O. García Martínez, et al. a b c MR Mv MR Rt MR CH CH CH Figura 3. a) Ruptura completa en C del MR. b) Exploración de la movilidad del tendón del MR (Mv NR). c) Exploración de la reductibilidad de los tendones sobre la huella (Rt MR). a b c MR MR ANCLA CH 1 LS CH HLL HLL CH Figura 4. a) Representa ruptura en U poco profunda del manguito rotador (MR), exposición de la huella (HLL) y el cartílago articular de la cabeza humeral (CH). b) Implantación del ancla en el borde del cartílago humeral (CH). c) Primera línea de sutura (1 LS). a b c MR CH HLL 2 LS MR CH Figura 5. a) Representa la segunda línea de sutura (2 LS). b) El MR por su cara bursal reparado. c) Cara articular del MR reinsertado en la huella ósea a partir del borde cartilaginoso de la cabeza humeral (CH). semanas. Se permitieron ejercicios para movilizar el codo y la muñeca después del postoperatorio inmediato. Se continuó con programa de Cuadernos de Artroscopia. Vol. 19, fasc. 2, n.º 47, octubre 2012 rehabilitación institucional de ejercicios pasivos y activos asistidos, para conseguir rangos de movilidad normal en las primeras 3-4 semanas. 17 Resultados mejorados y bajo índice de rerrupturas con aplicación de algoritmo […] mostraron patrones en U, L, L inversa y V Reducibilidad del manguito rotador Tipo de reparación que presentaron estaReducción completa sin tensión Doble línea de sutura dio de retracción II y III de Patte. En siete rupReducción completa con tensión Simple línea de sutura turas (8,9%) de la seReducción incompleta Simple línea de sutura rie con estadio de retracción I de Patte, se realizó convergencia de márgenes-hueso. En nuestra serie se logró la Durante este periodo se permitieron actividades reducción completa sin tensión en 32 rupturas ligeras en el hogar sin soporte de peso. Des(40,5%), la reducción completa con tensión en pués, se continuó con ejercicios fortalecedo38 rupturas (48,1%) y la reducción incompleta res de la musculatura intrínseca y extrínseca del en 9 rupturas (11,4%). Se practicó la técnica de hombro, hasta su completa rehabilitación. doble línea de sutura en 32 rupturas, en las que se obtuvo reducción completa sin tensión, y técnica de simple línea de sutura en las 47 rupturas RESULTADOS restantes (59,5%). No se presentaron diferencias significativas al comparar los resultados de ambas En nuestra serie de 79 hombros, la distribución técnicas con la prueba de Wilcoxon. en el sistema de clasificación artroscópica para La evaluación general preoperatoria a tralas rupturas completas del MR, según el Instituvés de la escala de Constant-Murley fue de un to de Ortopedia del Sur de California, mostró 82,2% de malos resultados en nuestros paciencuatro rupturas de grado C I (<1 cm) (5,1%), 32 tes. Cuando unimos los resultados malos y aderupturas (40,5%) de grado C II (<2 cm), 25 rupcuados en la etapa preoperatoria, obtenemos turas (31,6%) de grado C III (3-4 cm) y 18 ruptuun 93,6%, que representa una incapacidad sigras (22,7%) de grado C IV (ruptura masiva). Senificativa. Nuestra primera evaluación general de gún la clasificación de Patte para la retracción de los resultados la realizamos a los seis meses del la ruptura completa, se presentaron con estadio I postoperatorio, obteniendo el 63,3% de resulta18 rupturas (22,7%); con estadio II, 40 rupturas dos excelentes y buenos, y un 79,7% de resul(50,6%); y con estadio III, 21 rupturas (26,6%). tados excelentes, buenos y regulares (Tabla 3). Se realizó sutura directa del tendón al hueso La evolución continuó mejorando con el en 49 pacientes (62%), que presentaron un patiempo, y cuando evaluamos los resultados trón de configuración de la ruptura en medialuna. generales de los 79 hombros en los pacienSe observaron once pacientes (14%) con patrón tes operados, después de 12 meses, éstos fuede rupturas en forma de L inversa, siete pacienron alentadores. En nuestra serie se obtuvo un tes (8,9%) en forma de L, diez pacientes (12,7%) 95% de resultados excelentes y buenos a los con rupturas en forma de U y sólo dos pacientes doce meses de evolución de los pacientes, y un (2,5%) con patrón de rupturas en forma triangu98,8% de resultados excelentes, buenos y relar (V). gulares (Tabla 4). Se practicó convergencia de márgenes en 18 Existieron altas diferencias significativas con rupturas completas (22,8%) de la serie, que la prueba de Wilcoxon al comparar los resultados preoperatorios y postoperatorios a los seis y doce meses de evolución. Se presentaron complicaciones que no afectaron a los resultados Tabla 2 funcionales: cuatro pacientes sufrieron neuResultados Puntuación ropraxia por estiramiento del plexo braquial; Excelentes 91-100 dos pacientes presentaron rechazo al material de sutura en periodos avanzados de la rehaBuenos 81-90 bilitación; y en un paciente se presentó un heRegular 71-80 matoma extenso, que se reabsorbió espontáAceptables 61-70 neamente. En nuestra serie, cuatro pacientes Malos < 60 (5,06%) presentaron rerrupturas después de la Tabla 1 18 Cuadernos de Artroscopia. Vol. 19, fasc. 2, n.º 47, octubre 2012 O. García Martínez, et al. Tabla 3 Escala total preoperatoria Valoración total 6 meses TOTAL Malos Adecuados Regulares Buenos Excelentes Malo 4 12 13 31 5 65 (82,2%) Adecuado 0 0 0 4 5 9 (11,4%) Regular 0 0 0 4 0 4 (5,1%) Bueno 0 0 0 0 1 1 (1,3%) Total 4 (5,1%) 12 (15,2%) 13 (16,4%) 39 (49,4%) 11 (13,9%) 79 (100%) Tabla 4 Escala total preoperatoria Valoración total a los 12 meses Total Malos Regulares Buenos Excelentes Malo 1 3 30 31 65 (82,2%) Adecuado 0 0 0 9 9 (11,4%) Regular 0 0 0 4 4 (5,1%) Bueno 0 0 0 1 1 (1,3%) Total 1 (1,3%) 3 (3,8%) 30 (38%) 45 (57%) 79 (100%) aplicación del protocolo, durante el tiempo de seguimiento. DISCUSIÓN A comienzos de la pasada década no estaba bien establecido si la extensión anatómica de las rupturas completas del MR representaba un factor predictivo para los resultados anatómicos y funcionales de la reparación (22-25). La descripción de estas rupturas se ha limitado por mucho tiempo a simples clasificaciones que utilizan grados o mensuraciones en centímetros(24,25), pero se necesita una interpretación acertada de la configuración específica en dos dimensiones para rupturas completas. También es imprescindible la interpretación del cable rotador como estructura anatómica y el concepto de trasmisión de fuerzas uniformemente distribuidas por el principio de suspensión de puente para lograr la eficiencia en la función del MR. Thomazeau, Gleyze y Lafosse, en una valoración artroscópica de rupturas completas del MR, aplicaron reductibilidad de los tendones del MR a la huella ósea de medial a lateral, y obtuvieron resultados inferiores en un 50% que con la cirugía abierta(19). Concluyeron que Cuadernos de Artroscopia. Vol. 19, fasc. 2, n.º 47, octubre 2012 las limitaciones en la reductibilidad se debían a una valoración subjetiva de los componentes anterior y posterior del MR por los cirujanos, fundamentalmente en rupturas que se extendían al infraespinoso y, en menor parte, al subescapular, pero refirieron que esto abriría nuevas motivaciones. Gartsman había planteado que las limitaciones para la reductibilidad se relacionaban con tenolisis incompleta de los tendones(26). Burkhart ha interpretado las rupturas del MR, dando a conocer por qué no todas son fáciles de reparar. Sostiene la hipótesis de que, para tener buenos resultados, tiene que haber un balance entre el remanente anterior y posterior del MR a través de la movilidad y reducción antero-posterior de estos componentes. Establece el concepto de convergencia de márgenes por la unión de estas porciones a través de una sutura artroscópica de la ruptura en profundidad de los patrones de configuración en U, L y L inversa, uniendo el MR en un solo componente(7,18). Describe una serie de 62 pacientes con un 95% de excelentes y buenos resultados aplicando estos principios, sin diferencias significativas con relación a la talla de la ruptura(6). La técnica de convergencia de márgenes disminuye el área de la ruptura y la tensión, y permite 19 Resultados mejorados y bajo índice de rerrupturas con aplicación de algoritmo […] reparar rupturas extensas imposibles de reparar por cirugía abierta. Logra mayor movilidad de medial a lateral y mejora significativamente la reductibilidad sobre la huella ósea. Un reciente estudio biomecánico ha validado la eficiencia biomecánica de la técnica y avala los buenos resultados clínicos obtenidos(27). Nosotros aplicamos la técnica de convergencia de márgenes en las rupturas completas, que presentaron un componente en profundidad en estadios II y III de Patte, con patrones de rupturas en U, V, L y L inversa, independientemente de la talla antero-posterior de la ruptura, en el 22,8% de nuestros pacientes. En el estadio I de Patte aplicamos convergencia de márgenes-hueso en el 8,9% de los pacientes en estos patrones, y en todos obtuvimos buenos y excelentes resultados. La reductibilidad de medial a lateral, obteniendo un máximo desplazamiento de los tendones del MR sobre la huella ósea, ha sido mejorada con los principios anteriormente expuestos. El restablecimiento de un contacto extenso entre el tendón y la huella ósea es un estimulante concepto para la cirugía del MR, y se muestran excelentes resultados clínicos. Sin embargo, existen experiencias donde persisten defectos residuales, y continúa vigente la discusión sobre las técnicas de fijación del tendón al hueso. Estudios clínicos y biomecánicos han mostrado que la técnica de reparación por simple línea de sutura proporciona una reconstrucción parcial de la huella(28-31). Sin embargo, existen informes favorables de los resultados clínicos de la técnica. Lichtenberg reporta un favorable índice de rerruptura menor del 25% con simple línea de sutura(32). El concepto de reparación de la huella ósea a través de doble línea se introdujo para garantizar el contacto tendón-hueso sobre la totalidad de la huella del MR(33,34). Algunos estudios mantienen la hipótesis de que es crucial restablecer la huella ósea para mejorar la cicatrización y la fuerza inicial del MR(29,34). Los estudios biomecánicos en cadáveres y modelos de animales establecen la superioridad mecánica para la reparación de doble línea sobre la simple línea de sutura, pero evalúan la reparación en tiempo cero y no son apropiados para determinar la calidad de la cicatrización y las desventajas de éstos(8,35,36). Wall, Keener y Brophy seleccionaron cinco artículos, tres con nivel de evidencia I y dos 20 artículos con nivel de evidencia II, que comparaban la técnica de simple y doble línea de anclaje y sutura, y no encontraron diferencias significativas en los resultados clínicos a corto plazo(37). Grasso, Milano y Salvatore evaluaron 72 pacientes en dos grupos con rupturas completas y aplicaron técnicas de reparación de simple y doble línea. Al comparar resultados, no obtuvieron diferencias significativas(38). También consideraron desventajas potenciales de la técnica de doble línea. La biología del tendón patológico es diferente a la del tendón sano, y la rigidez de la sutura puede tener un efecto negativo en el suplemento vascular del tendón y obstaculizar el potencial de cicatrización. Sugieren que en la reparación de doble línea existe un conflicto que afecta a los requerimientos vasculares y biológicos de la cicatrización, y las ventajas biomecánicas ofrecidas teóricamente producen más isquemia que la reparación en simple línea de sutura. Otros estudios recientes, aunque reportan mejoras en la cicatrización del tendón con la fijación de doble línea de sutura y mayor fuerza para rupturas extensas, muestran resultados clínicos similares entre la reparación de simple línea y doble línea de sutura(39-42). Sugaya reporta una serie de 106 pacientes con rupturas completas del MR reparadas por técnicas artroscópicas de doble línea con anclaje y sutura(13). En un seguimiento promedio de 30 meses, el estudio mostró un índice global de rerrupturas de un 17%. Anderson también reporta un índice global de rerrupturas del 17% en una serie de 48 pacientes tratados por reparación artroscópica con técnica de doble línea(43). Nosotros consideramos que la cicatrización del tendón al hueso no sólo depende de la fuerza mecánica de fijación de la sutura, sino de múltiples factores que deben ser evaluados durante el preoperatorio y el transoperatorio para la decisión acertada sobre la técnica de reparación y la correcta aplicación de la misma. Las causas estudiadas de los fracasos las estructuramos en intrínsecas a la reparación: área de superficie reparada, factores biomecánicos (como fuerza de fijación de la reparación), lazos de suturas a través del tendón, la tensión de la sutura, los fallos del nudo, formación de aberturas y movimiento en la unión (interface). Éstas son la conexión con los factores extrínsecos a la reparación: la cronicidad de la ruptura, la pobre calidad del tendón y el hueso de Cuadernos de Artroscopia. Vol. 19, fasc. 2, n.º 47, octubre 2012 O. García Martínez, et al. la huella, la edad del paciente, enfermedades crónicas, el tamaño y el patrón de la ruptura, y la carga que ejercen las estructuras dinámicas (músculos), que afectan al óptimo ambiente para una cicatrización biológica(38,39,44). Después de comprender estos principios, y teniendo presente estos factores, nosotros aplicamos el concepto de la reductibilidad combinado con la tensión en rupturas completas, para no afectar el estado circulatorio local y obtener una curación efectiva. Obtuvimos reducción incompleta en diez rupturas (12,5%). En 38 rupturas (47%) obtuvimos reducción completa con tensión; en estos casos preferimos disminuir la tensión, regresando a la reducción incompleta, y realizar en ambos grupos una técnica de simple línea de sutura medial sin tensión. En 32 pacientes (40% de las rupturas completas) obtuvimos reducción completa sin tensión y practicamos reparación por técnica de doble línea de sutura, una línea de sutura medial y otra lateral, favoreciendo los resultados del parámetro fuerza sin afectar el estado circulatorio al realizar una sutura sin tensión. Se obtienen resultados globales excelentes y buenos en el 95%. No encontramos diferencias estadísticas significativas en ningunos de los tres grupos aplicando las técnicas de reparación descritas. También debemos mencionar que la reparación de doble línea es técnicamente más demandante, cara y consume más tiempo que la reparación de simple línea de sutura, sin proporcionar una mejora significativa en los resultados clínicos. Recientes estudios biomecánicos muestran una nueva configuración: la técnica de sutura de puente (suture bridge technique) para la reparación del MR, basada en el modelo equivalente transóseo. Muestra significativamente mejores resultados que la reparación de doble línea de sutura estándar, en términos de área de contacto tendón-hueso, fuerza de fijación y cicatrización biológica del tendón(8,35,45). Consideramos que es una excelente oportunidad para continuar mejorando las técnicas de reparación artroscópicas del MR. Actualmente se continúa evaluando la eficacia y eficiencia clínicas de este procedimiento. Tenemos en consideración para su utilización en nuestro medio el alto coste-efectividad, relacionado con dispositivo utilizado para el proceder (Pushlock), como principal desventaja para esta técnica. Aunque lo consideramos como una propuesta totalmente válida si cumplimos con los criterios de convergencia de márgenes y de reductibilidad expresados anteriormente. Los defectos residuales están relacionados con los malos resultados clínicos según estudios de resonancia magnética nuclear y ultrasonidos. Nosotros evaluamos la curación durante el postoperatorio para observar los resultados estructurales obtenidos utilizando ultrasonidos de alta resolución, motivo de exposición de estos resultados específicos en otro estudio. Consideramos que el índice de rerrupturas se debe a causas múltiples y que se pueden obtener resultados mejorados utilizando elementos diagnósticos específicos para llevar a cabo la reparación. BIBLIOGRAFÍA 1. Gartsman GM, Khaan M, Hammerman SM. Arthroscopic repair of full-thickness tears of the rotator cuff. J Bone Joint Surg Am 1998; 80: 832-40. 2. Bennet WF. Arthroscopic repair of full-thickness supraspinatus tears (small-to-medium): A prospective study with 2-4 year follow-up. Arthroscopy 2003; 19 (3): 249-56. 3. Wolf E, Pennington T, Agrawal V. Arthroscopic rotator cuff repair: 4- to 10-year results. Arthroscopy 2004; 20 (1): 5-12. 4. Buess E, Steuber KU, Waibl B. Open versus arthroscopic rotator cuff repair: A comparative view of 96 cases. 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Arthroscopy 2010; 26 (3): 316-23. 23 Tratamiento endoscópico del atrapamiento del nervio ciático en el espacio subglúteo. Síndrome del glúteo profundo/piramidal L. Pérez Carro, V. de Diego, N. Fernández Escajadillo, M. Rupérez Vallejo, M. Sumillera, I. Sainz Hospital Clínica Mompía. Hospital Universitario Marqués Valdecilla. Santander Correspondencia: Dr. Luis Pérez Carro Correo electrónico: lpcarro@gmail.com Objetivos: Presentar la técnica y nuestros resultados preliminares en el tratamiento endoscópico del síndrome del glúteo profundo/piramidal. Material y métodos: Revisión prospectiva de seis pacientes intervenidos de síndrome del glúteo profundo mediante técnica endoscópica. Resultados: Todos los pacientes mejoraron clínicamente. La recuperación global posquirúrgica se inicia a las 4-6 semanas y comienza a ser completa a los 3-6 meses. Discusión y conclusiones: El síndrome del glúteo profundo es una causa de ciática de origen no discogénico con una prevalencia alta, pero actualmente infradiagnosticado. El tratamiento endoscópico es efectivo, con menor morbilidad y la misma eficacia en comparación con la cirugía abierta. Palabras clave: Cadera. Ciático. Piramidal. Endoscopia. Endoscopic management of sciatic impingement in the subgluteal space. Deep gluteus/pyramidalis syndrome Aim: To present the surgical technique and our own preliminary results in the endoscopic management of the deep gluteus/pyramidalis síndrome. Material and methods: Prospective review of six patients with deep gluteus syndrome managed through an endoscopic technique. Results: All patients evidenced clinical improvement. Overall post-surgical recovery started 4-6 weeks after surgery and begins to be complete after 3 to 6 months. Discussion and conclusions: The deep gluteus síndrome is a non-discogenic cause of sciatic pain, with high prevalence but at present underdiagnosed. Its endoscopic management is effective and entails much less morbidity and similar efficacy as compared to open surgery. Key words: Hip. Sciatic pain. Pyramidalis muscle. Endoscopy. Primer premio a la mejor comunicación tipo póster. XXX Congreso AEA. Valencia, 2012 24 Cuadernos de Artroscopia. Vol. 19, fasc. 2, n.º 47, octubre 2012 L. Pérez Carro, et al. INTRODUCCIÓN Y RECUERDO ANATÓMICO Recientemente se ha definido el término síndrome del glúteo profundo para definir la compresión/irritación de origen no discogénico del nervio ciático en la región anatómica del espacio subglúteo. El espacio subglúteo se sitúa anteriormente y por debajo del glúteo mayor y posterior al borde posterior del cuello del fémur; lateralmente está la línea áspera; la fascia sacrotuberosa y falciforme aparece medial; en posición supe- Figura 1. Esquema del espacio subglúteo: IT: isquiotibiales, LA: línea áspera, LT: trocánter menor, OI: obturador interno, PF: piramidal, QF: cuadrado femoral, SSL: ligamento sacroespinoso, STL: ligamento sacrotuberoso. rior tenemos el margen inferior de la escotadura ciática, y en posición inferior se encuentra el origen de los músculos isquiotibiales (Figura 1). Hay seis estructuras nerviosas que salen por la pelvis a través de la escotadura ciática mayor: el nervio ciático, el nervio pudendo, el nervio cutáneo femoral posterior, el nervio glúteo superior, el nervio glúteo inferior y el nervio obturador interno. Dentro del espacio subglúteo están el nervio ciático, el músculo piriforme, el obturador interno/externo, el gémino, los isquiotibiales, los nervios glúteo superior e inferior, los vasos recurrentes de la arteria circunfleja medial, el isquión, los ligamentos sacrotuberosos y sacroespinosos y el origen del ligamento isquiofemoral (Figura 2). El nervio ciático tiene origen en las ramas ventrales de las raíces L4 hasta S3, formando un tronco único en la pelvis que sale por la escotadura ciática por debajo del músculo piriforme. Cubierto por el músculo glúteo mayor, dentro de la región glútea profunda, el nervio ciático pasa entre la tuberosidad isquiática y el trocánter mayor, extendiéndose cerca de la cápsula posterior de la articulación de la cadera(1), inervando luego los músculos isquiotibiales(2). Proximal al músculo piriforme están los nervios glúteo superior e inferior. Distal al músculo piriforme está el nervio del cuadrado femoral/ músculo gemelo inferior y el nervio del obturador interno/gemelo superior. El objetivo de nuestro trabajo es presentar la técnica y nuestros resultados preliminares del tratamiento endoscópico del síndrome del glúteo profundo. MATERIAL Y MÉTODOS Figura 2. Disección anatómica del espacio subglúteo. Por cortesía del Dr. Iván Sainz. Cuadernos de Artroscopia. Vol. 19, fasc. 2, n.º 47, octubre 2012 En el periodo de mayo de 2011 a febrero de 2012, seis pacientes (cuatro mujeres y dos hombres) diagnosticados de síndrome del glúteo profundo, fueron intervenidos mediante técnica endoscópica. El diagnóstico fue clínico mediante historia, presentación de los síntomas (dolor en la nalga con o sin radiculopatía, síntomas en la sedestación o incapacidad para permanecer sentado durante 30 minutos, dolor nocturno e inconsistencia de los síntomas con los hallazgos intraarticulares o patología de choque fémoro-acetabular, dolor radicular de la parte baja de la espalda o de la cadera, 25 Tratamiento endoscópico del atrapamiento del nervio ciático en el espacio subglúteo y parestesias de los miembros inferiores afectados) y recreación del dolor posterior en la cadera con maniobras específicas: test de estiramiento pasivo del piriforme en sedestación y test activo del piriforme. Se excluyó en todos los casos, mediante resonancia magnética nuclear (RMN) de columna lumbar, posible causa de atrapamiento del ciático de origen en la columna lumbo-sacra. Todos los pacientes presentaron test positivos de estiramiento pasivo del piriforme Figura 3. Esquema de los portales para la realización de la liberación en sedestación y de contracción activa endoscópica del nervio ciático en el espacio subglúteo. Los portales del piriforme, así como dificultad o im- posteriores descritos por el Dr. Hal Martin permiten un acceso directo posibilidad para la sedestación prolonga- para la liberación del nervio ciático cerca de la escotadura ciática. da. Dos pacientes presentaban asociada una ruptura de labrum y choque fémoro-acetabular de tipo mixto; un paciente presentaba un cuadro de condromatosis sinovial; y en tres pacientes el cuadro era aislado. El tiempo medio de presentación de síntomas fue de tres años (rango: 1-7). En todos los pacientes se había realizado tratamiento conservador durante más de un año mediante rehabilitación prolongada, test de infiltración con corticoide en cinco casos y con toxina botulínica en un caso. Todos los pacientes precisaban altas dosis de narcóticos para el control del dolor. Dos pacientes refirieron antecedente traumático (caída). En cuanto al estudio neurofisiológico, cinco pacientes presentaban electromiograma normal y Figura 4. Abordaje del espacio peritrocantéreo con el porun paciente presentaba radiculopatía L5-S1 sin tal distal anterolateral. Óptica en portal medioanterior. denervación paravertebral. Técnica quirúrgica Bajo anestesia general y en posición de decúbito supino, se realizó mediante abordajes anterior, anterior medio oblicuo, distal anterolateral, posterior y accesorio posterior liberación endoscópica del piramidal y de bandas fibrovasculares que comprimían el ciático en todos los casos (Figuras 3-7). Se inicia la técnica mediante abordaje del espacio peritrocantéreo (Figuras 8 y 9) con limpieza de bursa trocantérica e identificación de inserción del tendón del glúteo mayor por debajo del vasto externo. A continuación se localiza e identifica el nervio ciático y se inicia su liberación progresiva de bandas fibrovasculares (Figura 10). Finalmente, se libera la porción tendinosa del piramidal (Figuras 11-16). Dentro de estas bandas fibrovasculares se tuvo especial atención con la coagulación previa a la liberación de la rama arterial de la glútea inferior en 26 Figura 5. Óptica en portal anterior e instrumental motorizado en portal posterior. proximidad con el piramidal. En todos los casos se extirpó la bursa trocantérea. Adicionalmente Cuadernos de Artroscopia. Vol. 19, fasc. 2, n.º 47, octubre 2012 L. Pérez Carro, et al. dor de los isquiotibiales que precisaron ser liberadas para conseguir la movilidad del nervio (Figura 18). En el postoperatorio inmediato se inició movilización suave de extremidad inferior y carga asistida con muletas durante un periodo de dos semanas. Posteriormente, se inició un programa de fisioterapia con movimientos de estiramiento, fortalecimiento y recuperación del equilibrio en la cadera. RESULTADOS Figura 6. Exteriores: óptica en portal anterior, instrumental motorizado en portal distal anterolateral. Agujas en los portales posterior y accesorio posterior. se liberó el obturador interno en un caso (Figura 17). En todos los casos se comprobó la movilidad del ciático en flexión y rotación interna y externa. Un caso presentaba adherencias alrede- El seguimiento medio de los pacientes ha sido de seis meses. Todos los pacientes mejoraron clínicamente, con una disminución importante del dolor ciático con sedestación prolongada (cinco total y uno parcial). Todos los pacientes presentaron negativización de los test pasivo y activo del piramidal. La mejoría en la escala de Harris modificada fue de 56 (35-72) a 84 (6989) (Tabla 1). La recuperación global posquirúrgica se inicia a las 4-6 semanas y comienza a ser completa a los 3-6 meses, aunque algunos pacientes continúan evolucionando hasta el año. No se presentaron complicaciones postoperatorias, y la estancia hospitalaria fue de un día en todos los casos. DISCUSIÓN Figura 7. Radioscopia intraquirúrgica que muestra la situación de la óptica y del instrumental motorizado. Figura 8. Abordaje del espacio peritrocantéreo e inicio del portal del trabajo. Cuadernos de Artroscopia. Vol. 19, fasc. 2, n.º 47, octubre 2012 En un estudio en cadáver de Miller et al.(3), el nervio ciático fue localizado de media a 1,2 ± 0,2 cm lateral al borde de la tuberosidad isquiática, y el origen proximal de los isquiotibiales fue encontrado alrededor del nervio glúteo inferior y de la arteria del nervio ciático. Con la flexión de la cadera, el nervio ciático experimenta una movilización hacia proximal de unos 28 mm(4). En condiciones normales, el nervio ciático es capaz de estirarse y deslizarse para acomodarse en compresiones y tensiones moderadas asociadas a la movilización articular. Los pacientes que presentan atrapamiento del nervio ciático, habitualmente tienen un antecedente traumático y síntomas en la sedestación (incapacidad para permanecer sentado durante 30 minutos), dolor radicular de 27 Tratamiento endoscópico del atrapamiento del nervio ciático en el espacio subglúteo Figura 9. Limpieza de bursa trocantérica e identificación de inserción del tendón del glúteo mayor por debajo del vasto externo. Imagen central: (a) vasto externo, (b) tendón glúteo mayor. Imagen derecha: (a) tendón de la fascia lata con síndrome de fricción asociado, (b) tendón del glúteo mayor. la parte baja de la espalda o de la cadera y parestesias de los miembros inferiores afectados(5). El nervio ciático puede ser atrapado proximalmente (central) o distalmente (periférico) de la región glútea, por lo que el origen en la columna lumbo-sacra debe ser excluido como posible origen del atrapamiento. Las pruebas de exploración física que han sido recomendadas para el diagnóstico clínico son el test de estiramiento pasivo y el test de contracción activa del piriforme. Otros test orientativos para el diagnóstico son: el signo de Lasègue doloroso al estiramiento de la pierna (con flexión de cadera a 90°)(6,7), el signo de Pace, dolor y debilidad a la abducción en contrarresistencia y rotación externa de la cadera(8) y el signo de Freiberg, dolor con rotación interna y la cadera en extensión(6,7). Una variación del test de Freiberg incluye flexión, abducción y rotación interna de la cadera(5,9). El test de estiramiento del piriforme en sedestación es una flexión/adducción y rotación interna con el paciente sentado. El examinador realiza extensión de la rodilla y movimientos pasivos de rotación interna mientras palpa 1 cm lateral al isquión (tercer dedo) y proximalmente a la escotadura ciática (dedo índice). Se da como positivo si existe una recreación del dolor en cara posterior de la cadera. El examinador palpa en tres posiciones en el área glútea: el piriforme (lateral/ superior), a nivel de los rotadores externos, y lateral al isquión. Si el dolor está localizado en el isquión, afecta a la bursa 28 Figura 10. Imágenes que muestran la identificación del ciático e inicio de liberación de bridas. Arriba izquierda: (a) trocánter mayor e inserción del glúteo mediano; (b) grasa sobre el nervio ciático. Arriba derecha: (a) nervio ciático. Cuadernos de Artroscopia. Vol. 19, fasc. 2, n.º 47, octubre 2012 L. Pérez Carro, et al. de los isquiotibiales; si el dolor es más medial, debe evaluarse el nervio pudendo más cuidadosamente. La compresión del nervio ciático en el espacio subglúteo puede ser producida por bandas fibrosas que contienen vasos sanguíneos(10,11) y los músculos glúteos, obturador interno, piriforme(2,5,11) e isquiotibiales(12). Teniendo en cuenta posibles variaciones anatómicas en el atra- Figura 11. Imágenes que muestran la liberación de bandas fibrosas pamiento, se ha sugerido el término sobre el ciático. síndrome de glúteo profundo (deep gluteal syndrome) (SGP) para definir la compresión del nervio ciático en cualquier región Figura 14. (a) Ciático; (b) músculo piramidal; (c) tendón piramidal. Figura 12. Nervio ciático hipovascular pasando por debajo del piramidal. Figura 13. Inicio de la liberación del tendón del piramidal. Cuadernos de Artroscopia. Vol. 19, fasc. 2, n.º 47, octubre 2012 Figura 15. (a) Inicio de la liberación del tendón piramidal; (b) ciático. 29 Tratamiento endoscópico del atrapamiento del nervio ciático en el espacio subglúteo anatómica(2) de la región glútea o aquellas ciáticas no discogénicas con origen en esta región(13). El tratamiento de inicio del síndrome del glúteo profundo es siempre conservador. En caso de persistencia de los síntomas se recomienda la liberación quirúrgica. La cirugía abierta ha sido descrita y utilizada para el tratamiento de este atrapamiento(5,11). El tratamiento endoscópico del síndrome piriforme con liberación sólo del piramidal ha sido también descrito(14); sin embargo, existen otras causas anatómicas que pueden causar la afectación del nervio ciático y de su atrapamiento a nivel del espacio subglúteo. H.D. Martin ha publicado recientemente la técnica endoscópica de liberación del nervio ciático en todo el espacio subglúteo(15). El espacio peritrocantéreo se encuentra al lado del nervio ciático en la región glútea profunda, y la artroscopia permite acceder desde portales establecidos a la evaluación del nervio ciático(16). Al realizar la técnica endoscópica, accedemos al espacio peritrocantéreo y al ciático por los portales anterolaterales y posterolaterales, y debemos realizar una inspección sistemática del dicho espacio peritrocantéreo con una óptica estándar de 70° y con ópticas extralargas. Se puede realizar un portal accesorio (posterolateral accesorio) 3 cm posteFigura 16. Liberación terminada: (a) ciático; (b) nervio rior y 3 cm proximal al trocánter mayor, lo que glúteo superior; (c) tendón piramidal cortado. permite una mejor visualización del nervio ciático hasta la escotadura ciática. Se debe realizar, tal y como describe Coppieters(4), una evaluación dinámica del nervio ciático, realizándola en flexión rotación interna y externa, y en extensión completa también en rotación interna y externa. La inspección del nervio ciático se inicia distal al cuadrado femoral y por debajo del extremo proximal de la inserción del glúteo mayor en la línea áspera. Mediante el uso de palpador, se inspecciona el nervio ciático, estructuras vasculares próximas, el cuadrado femoral, el gemelo inferior, bandas Figura 17. Secuencia de liberación del tendón del obturador fibrovasculares y el músculo piriforme. Todas interno. (a) Obturador interno. Figura 18. Liberación del túnel distal o isquiático. (a) Nervio ciático; (b) nervio cutáneo femoral posterior. 30 Cuadernos de Artroscopia. Vol. 19, fasc. 2, n.º 47, octubre 2012 L. Pérez Carro, et al. Tabla 1 Preoperatorio MHHS Resultados clínicos 56 (35-72) las estructuras que puedan comprimir el nervio ciático se deben disecar, comprobando, cuando se moviliza la cadera, que la movilidad del nervio ciático es la adecuada. Al abordar el nervio ciático, podemos detectar, antes de la descompresión, adherencias sobre el isquión posterior e inferior, ramificaciones fibrosas múltiples sobre tejido cicatricial, hipovascularización del nervio ciático en apariencia macroscópica o atrapamiento significativo sobre tejido cicatricial. Puede detectarse engrosamiento excesivo de la bursa trocantérea con tejido cicatricial que se extiende hasta el nervio ciático y atrapamiento asociado del nervio ciático por el tendón piriforme. La hipertrofia de la bursa y las cicatrices se deben extirpar mediante sinoviotomo y disección roma. Las cicatrices fibrovasculares se deben cauterizar con radiofrecuencia, con especial atención a las ramas de la arteria glútea inferior que se extiende hacia las proximidades del músculo piriforme. Estas bandas cicatriciales liberadas del nervio ciático deben valorarse con la cadera en flexión y en extensión en rotación interna y rotación externa. Tanto el músculo glúteo mayor como el músculo obturador interno y el tendón del bíceps femoral engrosado sobre el isquión pueden atrapar el nervio ciático. En el diagnóstico del síndrome del glúteo profundo se debe realizar una evaluación clínica detenida para descartar diferentes patologías que pueden concurrir o asemejarse al SGP. Así se debe examinar la columna lumbar, la articulación sacroilíaca o el choque fémoro-acetabular como posible origen del dolor posterior de cadera. Para ello, debe incluirse una RMN de columna lumbar para descartar origen en esta zona. Una historia clínica detallada debe incluir condicionantes, tales como fecha de inicio del dolor, causa del dolor (mecánico o no mecánico), factores que incrementen dicho dolor, intervenciones previas, consultas previas, evaluación analógica del dolor y uso de analgésicos. La funcionalidad de la cadera se puede obtener a partir del MHHS (Modified Harris Hip Score)(17-21). En los síntomas, debemos detallar si se presenta dolor a la sedestación, dolor nocturno, dolor posterior y presencia de parestesias o dolor radicular. Todos los pacientes deben ser evaluados con Cuadernos de Artroscopia. Vol. 19, fasc. 2, n.º 47, octubre 2012 artro-RMN(22,23), test de infiltración, radiografías de pelvis Postoperatorio anteroposteriores(24) y latera84 (69-89) les(25), y las mediciones radiológicas deben incluir el ángulo cérvico-diafisario, ángulo centro-borde lateral acetabular, espacio articular, ante/retroversión acetabular y femoral. En el diagnóstico clínico del SGP debe evaluarse el desarrollo de la clínica, su presentación y la posible asociación de patología intraarticular o con choque fémoro-acetabular. Los estudios de electromiografía (EMG) y conducción nerviosa son beneficiosos para el diagnóstico del SGP. Los pacientes que presentan síntomas de atrapamiento del nervio ciático puede que no presenten denervación paravertebral, incluso existiendo radiculopatía. El atrapamiento piriforme del nervio ciático a menudo se presenta con alteraciones del nervio tibial y/o peroneal. Se debe prestar atención a la medición de esta alteración, pues no estará presente cuando la rodilla esté en extensión y, sin embargo, sí se presentará cuando la cadera esté en flexión, adducción y rotación interna y la rodilla en flexión. En esta posición, el músculo piramidal comprime el nervio ciático lo suficiente como para retrasar la conducción nerviosa distal. El síndrome piramidal está asociado con dolor en la nalga exacerbado en los movimientos de flexión de cadera combinados con rotación interna o externa del miembro afecto. El síndrome piramidal habitualmente está asociado a una contusión en la nalga, con el resultado de una formación de hematoma y una cicatrización entre el nervio ciático y los rotadores externos(5). El origen proximal de los isquiotibiales, en íntima relación con el nervio ciático, puede cicatrizar tras un traumatismo en los isquiotibiales o avulsión de los mismos. La irritación del obturador interno/gémino superior/gémino inferior es habitual y normalmente infradiagnosticada, y puede causar dolor parecido a la irritación del nervio ciático(26-28). Para llevar a cabo el diagnóstico diferencial del SGP debemos evaluar la columna (principalmente lumbar), la articulación sacroilíaca y la patología femoroacetabular. Es recomendable en los casos de dolor posterior de cadera realizar un examen físico protocolizado, incluyendo el test de Lasègue, el test de Pace y el test de estiramiento pasivo del piriforme en sedestación. El test de Lasègue puede alertar al examinador de un dolor radicular, pero no siempre es 31 Tratamiento endoscópico del atrapamiento del nervio ciático en el espacio subglúteo positivo en el SGP. El test de Pace es una evaluación en contrarresistencia del músculo piriforme. En el test de estiramiento pasivo del piriforme en sedestación se realiza en adducción y rotación interna con una flexión de la cadera y extensión completa de rodilla(21). La recreación del dolor posterior con uno o varios de estos test puede ayudar al diagnóstico diferencial del dolor posterior de cadera. No obstante, estos test necesitan mejor sensibilidad y validez. La evaluación de criterios radiológicos no muestra correlación con el SGP, aunque el reciente interés en esta patología puede determinar mejores técnicas de visualización del espacio peritrocantéreo posterior(29-32). CONCLUSIONES El síndrome del glúteo profundo es una causa de ciática de origen no discogénico con una prevalencia alta, pero actualmente infradiagnosticado. El uso rutinario de los test de evaluación, junto con una sospecha diagnóstica, determinará la incidencia real de esta problemática. El tratamiento endoscópico es efectivo y añade mucha menor morbilidad y eficacia en comparación con la cirugía abierta. Recomendaciones para realizar este tipo de cirugía tUso de vaina y ópticas extralargas. tUso del portal auxiliar accesorio posterolateral. tBusqueda y coagulación de la rama de la arteria glútea inferior. tChequear movimiento libre del nervio ciático al final de la cirugía. tTécnica artroscópica en cadera a nivel alto. tConocimiento anatómico perfecto. tEnsayo en cadáver previo a cirugía en vivo. BIBLIOGRAFÍA 1. Clemente C. Gray’s anatomy: Anatomy of the human body. Baltimore: Williams and Wilkins; 1985. p. 1235-9. 2. McCrory P, Bell S. 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Spine 2009; 34: E245-E250. 33 Técnicas de reconstrucción del ángulo posterolateral de la rodilla según el grado de lesión. Orientación de los túneles según un modelo cadavérico P.E. Gelber1,2, J.I. Erquicia2, F. Abat1, G. Sosa2, X. Pelfort2, M. Tey2, J.C. Monllau1,2 1 2 Servicio de Ortopedia y Traumatología. Hospital de la Santa Creu i Sant Pau. Universitat Autònoma de Barcelona Unidad de Artroscopia y Rodilla. ICATME-Institut Universitari Dexeus. Universitat Autònoma de Barcelona Correspondencia: Pablo Eduardo Gelber Servicio de Ortopedia y Traumatología. Hospital de la Santa Creu i Sant Pau. Universitat Autònoma de Barcelona c/ Sant Quintí, 89. 08041 Barcelona Correo electrónico: pablogelber@gmail.com Objetivo: Remarcar la importancia de reconstruir el ángulo posterolateral de la rodilla según el grado de lesión, determinando el mejor grado de angulación de los túneles femorales. Métodos: Basado en la clasificación de Fanelli, se describen las técnicas recomendadas para cada grado de lesión. Adicionalmente se simularon los túneles del ligamento colateral lateral (LCL) y tendón poplíteo (TP) en 8 rodillas cadavéricas a 0° y 30° en el plano coronal y axial y del ligamento cruzado anterior (LCA) y posterior (LCP). Se estudiaron mediante tomografía computarizada (TC). Resultados: Para las lesiones de grado A se describe la reconstrucción aislada del ligamento poplíteo-peroneo (LPP); en las de grado B se adiciona el LCL; y en las de grado C, ambos más un refuerzo transtibial. El túnel del TP tiene riesgo de colisión con el del LCA a 0° en el plano coronal (p < 0,001) y con el de LCP a 0° en ambos planos y a 30° en el axial (p < 0,001). El LCL sólo evitaba interferir con el del LCA a 30° de desviación axial y 0° de desviación coronal. Conclusiones: La técnica de reconstrucción del ángulo posterolateral de la rodilla debe determinarse según el grado de lesión de Fanelli. Si se reconstruye concomitantemente con el LCA, los túneles del TP se deben realizar a 30° de desviación axial y coronal, y los del LCL a 30° en el plano axial y 0° en el plano coronal. Palabras clave: Ángulo posterolateral. Interferencia de túneles. Rodilla multiligamentaria. Luxación de rodilla. Clasificación. Reconstruction of the posterolateral corner of the knee depending on degree of injury. Orientation of the tunnels in a cadaveric model Purpose: To emphasize the significance of reconstruction of the posterolateral corner of the knee depending on the degree of injury. Secondly, to determine the best angulation for the femoral tunnels. Methods: Based on Fanelli’s Classification, different technique are described for each degree of injury. In addition, tunnels of the fibular collateral ligament (FCL) and popliteus tendon (PT) were simulated in 8 cadaveric knees. They were performed at 0° and 30° in the coronal and axial planes. Tunnels of the anterior cruciate ligament (ACL) and posterior cruciate ligament (PCL) were also drilled. They were assessed with computed tomography. Results: In Fanelli A, an isolated reconstruction of the popliteofibular ligament is described. In Fanelli B a reconstruction of the FCL is also performed. In Fanelli C, a tibial sling is also added. The PT tunnel showed a risk of tunnel collision with the ACL tunnel when drilled at 0° in coronal plane (p < 0,001) and with the PCL at 30° in axial and 0°/30° in coronal planes (p < 0,001). FCL only avoided collision with the ACL tunnel at 30° axial and 0° coronal angulation. Conclusions: The chosen technique to reconstruct the posterolateral corner of the knee must be in concordance with the Fanelli’s classification. When the ACL is concomitantly reconstructed, the PT tunnel should be drilled at 30° axial/coronal deviation and the FCL tunnel at 30° axial and 0° coronal angulation. Key words: Posterolateral corner. Tunnel collision. Multiligament knee. Knee dislocation. Classification. Primer premio a la mejor comunicación. XXX Congreso AEA. Valencia, 2012 34 Cuadernos de Artroscopia. Vol. 19, fasc. 2, n.º 47, octubre 2012 P.E. Gelber, et al. INTRODUCCIÓN Las infrecuentes lesiones del ángulo posterolateral (APL) de la rodilla pueden conducir a una discapacidad crónica secundaria a una inestabilidad persistente y al deterioro del cartílago articular si no son apropiadamente tratadas. Estudios anatómicos y biomecánicos recientes sobre el APL han remarcado su importancia en la estabilidad de la rodilla(1,2). Para entender el APL y, consecuentemente, afrontar su reconstrucción, es elemental un completo conocimiento de su anatomía y biomecánica, ya que son la base de un correcto diagnóstico clínico, radiológico y abordaje quirúrgico. Mientras que el bíceps femoral, el tracto iliotibial, la cabeza lateral del gemelo y el complejo poplíteo proveen la estabilidad dinámica del APL, la estabilidad estática es principalmente provista por el ligamento colateral lateral (LCL) y el ligamento poplíteo-peroneo (LPP). Un diagnóstico temprano puede permitir la reparación primaria de las estructuras dañadas en lugar de su reconstrucción en los casos de lesiones de más tiempo de evolución. Las lesiones del APL que no son tratadas han demostrado incrementar los fallos de las plastias del LCA y LCP(3-5). Una óptima clasificación de las lesiones del APL debe incluir no solamente la estabilidad en varo, como es el caso de la clasificación más utilizada en la literatura(6), sino que debe necesariamente incluir la estabilidad rotacional. En opinión de los autores, la clasificación de Fanelli y Larsen(7) evalúa satisfactoriamente ambos aspectos de la estabilidad. Ésta ha demostrado, asimismo, una alta correlación entre el grado de lesión y las diferentes estructuras anatómicas afectadas(7). Se han descrito numerosas técnicas de reconstrucción del LPP y del LCL. La gran mayoría de ellas incluyen la realización de tunelizaciones a través del cóndilo femoral lateral, que acaban interesando tanto al intercóndilo como al cóndilo medial. Aún más, como en la gran mayoría de casos las reconstrucciones del APL se realizan concomitantemente a reconstrucciones de los ligamentos cruzados, se presentan desafíos de falta de espacio en cuanto a situar de forma segura todos los túneles. En la bibliografía hay numerosos artículos que estudian los túneles del LCA y sus consecuencias en cuanto a su Cuadernos de Artroscopia. Vol. 19, fasc. 2, n.º 47, octubre 2012 biomecánica, riesgos neurovasculares, relaciones con estructuras lindantes, riesgos de roturas de los túneles, etc.(8-11). Sin embargo, llama la atención la falta de estudios en la bibliografía respecto a la realización de túneles para reconstruir las estructuras del APL. En este contexto, el primer objetivo del presente estudio fue remarcar la importancia de tratar las lesiones del APL según las estructuras anatómicas basadas en la clasificación de Fanelli, recomendando para ello una técnica diferente en cada grado de lesión. El segundo objetivo fue determinar cómo se deben realizar los túneles femorales en cuanto a la angulación en los tres planos del espacio, para evitar realizar túneles cortos o que interfieran con los túneles usados en la reconstrucción de los ligamentos cruzados. MATERIAL Y MÉTODOS Clasificación y técnicas quirúrgicas Para la clasificación de las lesiones del ángulo posterolateral, se utilizó la descrita por Fanelli y Larsen(7): t5JQP" Son inestabilidades rotacionales aisladas debido a una lesión del complejo poplíteo y, más específicamente, al ligamento poplíteo-peroneo. Hay un aumento de la rotación externa sin nada o con un mínimo componente de inestabilidad en varo. t5JQP# Además de la inestabilidad rotacional secundaria a la lesión del LPP, se asocia una inestabilidad leve con bostezo en varo a 30° de flexión menor de 5 mm, con la presencia de un claro tope final. Esto es debido a la atenuación o lesión parcial del LCL. t5JQP$ Son inestabilidades graves tanto en el componente rotacional como en el varo (>6 mm) , el cual no presenta tope final en este caso. Anatómicamente, se debe a una rotura completa del complejo poplíteo, del LCL, de la cápsula lateral y de los ligamentos cruzados. Siguiendo las correlaciones entre los hallazgos clínicos que determinan el tipo de lesión de Fanelli y las estructuras lesionadas, se recomiendan y describen tres diferentes técnicas de reconstrucción del APL. Estudio cadavérico Se utilizaron ocho rodillas cadavéricas frescas (cinco izquierdas y tres derechas) del Departa35 Técnicas de reconstrucción del ángulo posterolateral de la rodilla […] mento de Ciencias Morfológicas de la Universidad Autónoma de Barcelona. Tenían una media de edad de 74,7 años. Se descartaron previamente aquellas rodillas que presentaban cambios degenerativos, signos de intervenciones quirúrgicas previas, o una movilidad inferior a 135° de flexión. Los especímenes se montaron en un soporte específico de rodilla (Extremity Holder®, Sawbones, Suecia). Se realizaron mediante técnica artroscópica por el mismo cirujano los túneles femorales del LCA y del LCP: tEl túnel femoral del LCA se realizó en el centro anatómico de su huella a través del portal anteromedial, con las siguientes características técnicas: 5 mm en todo el espesor del cóndilo femoral lateral y 10 mm menos de un diámetro de 9 mm. Esto simula la utilización de un sistema de suspensión cortical. tEl túnel femoral del LCP se realizó en el centro anatómico del fascículo anterolateral, alto (aproximadamente a la una en punto en la esfera horaria en una rodilla derecha) y a unos 7 mm en profundidad desde el margen del cartílago articular. Se realizó dicho túnel de 9 mm de diámetro en todo el espesor del cóndilo femoral medial, simulando una técnica fuera-dentro. Posteriormente se realizó la disección de las partes blandas de la región posterolateral de la rodilla, aislando sin desinsertar el LCL y el TP. Se inició el estudio de dos tipos de túneles: uno a nivel de la inserción femoral del LCL y otro a nivel de la inserción del tendón del músculo poplíteo. Con una aguja guía de 2,4 mm se realizaron cuatro diferentes perforaciones en cada uno de los dos puntos de entrada citados. Se valoraron dos angulaciones en el plano coronal y otras dos en el plano axial; por lo tanto, fueron realizadas cuatro diferentes perforaciones en cada uno de los dos túneles estudiados (Figura 1): 1. LCL con 0° en el plano axial y 0° en el plano coronal. 2. LCL con 0° en el plano axial y 30° en el plano coronal. 3. LCL con 30° en el plano axial y 0° en el plano coronal. 4. LCL con 30° en el plano axial y 30° en el plano coronal. 5. TP con 0° en el plano axial y 0° en el plano coronal. 6. TP con 0° en el plano axial y 30° en el plano coronal. 36 Figura 1. Reconstrucción 3D-TC de un especimen cadavérico que explica todos los túneles evaluados en cada rodilla. Fotos interiores del momento de este estudio radiológico. 7. TP con 30° en el plano axial y 0° en el plano coronal. 8. TP con 30° en el plano axial y 30° en el plano coronal. Una vez estudiadas las relaciones mediante tomografía computarizada (TC), se calculó que el túnel en una situación clínica sería de 7 mm; por lo tanto, los límites del túnel serían 2,3 mm más anchos que el túnel realizado (se determinó un margen de seguridad de 0,2 mm más amplio). Teniendo en cuenta una referencia bibliográfica reciente(12), se descartó previamente realizar tres orientaciones en cada plano. Este estudio sólo encontró diferencias entre los túneles realizados a 0° con los realizados a 20° y 40°. Por este motivo, se eligieron 0° y 30° para este trabajo. Se estudiaron las relaciones de los túneles mediante TC con una técnica volumétrica con reconstrucciones en 3D en el tomógrafo LightSpeed VCT Pro 5-Beat Cardiac con AW VolumeShare (GE Healthcare, Waukesha, WI, EE UU) en el Institut Universitari Dexeus de Barcelona. Se midieron las relaciones de cada perforación respecto tanto al espacio intercondíleo (clínicamente produciría la apertura del túnel intraarticularmente) como de los túneles femorales del LCA y LCP (clínicamente produciría el daño de la plastia o su sistema de fijación dentro de ellos). Se midió la distancia más Cuadernos de Artroscopia. Vol. 19, fasc. 2, n.º 47, octubre 2012 P.E. Gelber, et al. a b Figura 2. Imagen intraoperatoria de la reconstrucción del ligamento poplíteo-peroneo en una rodilla derecha. a) Las dos agujas guía en el peroné convergen desde el borde anterior de la cabeza del hueso hasta 2 mm debajo de la punta de su apófisis estiloides porsteromedialmente. b) Cada extremo del injerto se pasa retrógradamente por cada uno de los túneles realizados. corta de cada túnel de 2,4 mm en cada uno de los tres planos del espacio. Como se comentó previamente, se estableció un margen de seguridad de 2,5 mm. Las mediciones se realizaron con referencia en: túneles del LCA y del LCP, profundidad de seguridad para no caer en el intercóndilo (se midió cuántos mm eran necesarios hasta el techo del intercóndilo) y entre los del TP y LCL. El estudio estadístico se realizó mediante el análisis de la varianza (ANOVA), con mediciones repetidas para comparaciones múltiples de los valores medios de cada ángulo estudiado, y con el test de Greenhouse-Geisser para evitar cualquier posible violación de la asunción de esfericidad. Se utilizó para ello el software SPSS 19 (SPSS Inc., Chicago, Illinois, EE UU), mientras la significancia estadística fue la habitual de 0,05. RESULTADOS Técnicas quirúrgicas Se accede mediante una incisión longitudinal lateral estándar centrada en el epicóndilo lateral paralelo a la fascia lata y que se extiende longitudinalmente a un punto intermedio entre el tubérculo de Gerdy y la cabeza de peroné. Según la técnica, se puede alternativamente realizar tres miniincisiones que favorecen una mejor cosmesis y una menor morbilidad postoperatoria. Cuadernos de Artroscopia. Vol. 19, fasc. 2, n.º 47, octubre 2012 Lesiones de tipo A de Fanelli Esta técnica se puede realizar mediante la vía estándar o con miniincisiones. En ningun caso es necesario aislar el nervio peroneo. Se utilizan dos agujas guía introducidas en la cara anterior de la cabeza del peroné, separadas entre ellas por 10 mm. Se dirigen en dirección posterior y proximal, de forma convergente a un punto 2 mm distal a la punta de la apófisis estiloides del peroné en su borde posteromedial (Figura 2a), el cual es el origen anatómico de inserción del LPP. Por este motivo es necesario localizar y aislar el nervio peroneo, que se encuentra mucho más distalmente (>30 mm) a nivel del cuello del peroné. Se realizan los túneles del diámetro del injerto disponible (5-7 mm). Cada extremo del injerto se introduce retrógradamente por cada uno de dichos túneles'JHVSBøC . Se procede a realizar un túnel ciego de 25 mm centrado en la inserción del tendón poplíteo en el quinto proximal de su surco femoral, de un diámetro que coincida con la medición del injerto duplicado. Ambos extremos del injerto se pasan profundos al LCL y se introducen en el túnel femoral. Se fijan con un tornillo interferencial a 30° de flexión y con leve rotación interna (10°). Lesiones de tipo B de Fanelli También se pueden utilizar los dos tipos de incisiones descritos precedentemente, para reconstruir tanto el LPP como el LCL. En este caso, se realiza sólo un túnel a nivel de la cabeza del pe37 Técnicas de reconstrucción del ángulo posterolateral de la rodilla […] roné, con las mismas recomendaciones de orientación que en la anterior técnica, y se pasa retrógradamente uno de los extremos del injerto disponible. Se fija a nivel peroneal con un tornillo interferencial para individualizar biomecánicamente ambos extremos. En este caso, se realizan dos túneles a nivel femoral. Uno similar al realizado en la técnica anterior y otro túnel a nivel de la inserción del LCL, unos 2 mm proximal y posterior al epicóndilo lateral. El extremo del injerto que sale del peroné posteriormente se fija en el túnel del tendón poplíteo, siguiendo las mismas instrucciones que en la anterior técnica. Esto simula el LPP. Superficialmente a éste, se pasa y fija el otro extremo del injerto en el túnel correspondiente al LCL. Esto se realiza a 60° de flexión y forzando levemente en varo. Lesiones de tipo C de Fanelli En estos casos recomendamos realizar la incisión amplia estándar y localizar el nervio peroneo para protegerlo y retirarlo de forma distal. La técnica descrita por Laprade(13) es la recomendada. En la misma, se utilizan dos aloinjertos provenientes de un tendón de Aquiles dividido longitudinalmente. Se realizan los mismos túneles que los realizados en la técnica precedente en conjunto con un túnel tibial anteroposterior. Éste es más fácilmente realizado con la ayuda de una guía tibial de LCA, situando su centrador tibial en posición medial y distal al tubérculo de Gerdy y su punta en el surco poplíteo tibial posterior, aproximadamente 10 mm distal al margen del cartílago articular (Figura 3). Por un lado, se reconstruye el tendón poplíteo fijando el taco óseo de uno de los injertos a nivel del túnel femoral en la inserción del tendón poplíteo, llevando el otro extremo posteriormente para pasarlo de posterior a anterior por el túnel tibial. Por el otro lado, se reconstruye el LCL y el LPP fijando el taco óseo del otro injerto a nivel del túnel femoral del LCL, llevando el otro extremo al orificio anterior del túnel del peroné, pasándolo por dicho túnel hacia posterior y fijándolo con un tornillo interferencial. Esto representa al LCL. El remanente de este injerto se recupera también de posterior a anterior por el túnel tibial, representando al LPP. Finalmente, se fijan juntos ambos injertos en el túnel tibial con un tornillo interferencial, pudiendo suplementarse con una grapa de ligamentos para mayor seguridad a la salida de ambos injertos en la cara anterior de la tibia. 38 Figura 3. Imagen intraoperatoria en una rodilla izquierda. La guía tibial de LCA facilita la realización del túnel tibial en la técnica recomendada para las lesiones de tipo C de Fanelli. Angulación de los túneles femorales Los túneles del TP y LCL que se realizan en las tres técnicas descritas deben respetar determinadas angulaciones derivadas de las siguientes observaciones del estudio en cadáveres: tCon el túnel del TP a 0° de desviación axial, se observó un alto riesgo de colisión con el túnel del LCA. tSólo se evitó la colisión del TP con el túnel del LCP cuando se angulaba la guía 30° en el plano coronal (p < 0,001). tSólo el túnel del TP realizado a 30° en ambos planos evitó atravesar el espacio intercondíleo. tSólo los túneles del LCL a 30° en el plano axial y 0° coronal no colisionaron con el túnel del LCA (p < 0,001). tSólo los túneles del LCL realizados a 0° en ambos planos atravesaron el intercóndilo o interfirieron con el túnel del LCP (p < 0,001). DISCUSIÓN El presente trabajo se centra en la correcta elección de la técnica quirúrgica de las reconstrucciones del APL de la rodilla basado en el tipo de lesión según la clasificación de Fanelli(7). Asimismo, y tras un estudio en un modelo cadavérico, se definieron las orientaciones que los túneles femorales de dichas reconstrucciones deben tener para realizarlo de forma fiable. Cuadernos de Artroscopia. Vol. 19, fasc. 2, n.º 47, octubre 2012 P.E. Gelber, et al. Figura 4. Imagen cenital intraoperatoria de una rodilla derecha en que se observan el entrecruzamiento de las agujas guía al realizar los túneles del ligamento colateral lateral (LCL) y tendón poplíteo (TP). Las imágenes interiores describen todas las angulaciones evaluadas en el estudio cadavérico, resaltando en rojo la orientación recomendada para el LCL y en amarillo para el TP. El ángulo posterolateral de la rodilla tiene una anatomía muy compleja, en parte debido a sus cambios filogenéticos. En animales inferiores, la cabeza del peroné articulaba con el fémur y el músculo poplíteo se originaba del peroné. En animales superiores, el peroné migró distalmente y el tendón poplíteo adquirió una inserción femoral, mientras mantuvo su inserción peroneal(14). Para entender el APL y, consecuentemente, afrontar su reconstrucción, es elemental un completo dominio de su anatomía y biomecánica, ya que son la base para un correcto diagnóstico clínico, radiológico y, por supuesto, de su tratamiento quirúrgico. Mientras que el bíceps femoral, el tracto iliotibial, la cabeza lateral del gemelo y el complejo poplíteo proveen la estabilidad dinámica del APL, la estabilidad estática es principalmente provista por el ligamento colateral lateral y el ligamento poplíteo-peroneo. La importancia de un apropiado dominio y consecuente tratamiento del ángulo posterolateral de la rodilla se basa en el hecho conocido de que lesiones no diagnosticadas de esta región anatómica han demostrado incrementar la tasa de fallo de las reconstrucciones de los ligamentos cruzados(3-5). Se han descrito numerosas técnicas quirúrgicas de reconstrucción del ángulo posterolateral. Se debe comprender que las lesiones dicho ángulo no son todas iguales. Muy por el contrario, es imprescindible saber qué estructuras Cuadernos de Artroscopia. Vol. 19, fasc. 2, n.º 47, octubre 2012 biomecánicamente importantes se encuentran lesionadas en cada caso. Esto es lo que permite categorizar correctamente estas lesiones según la clasificación de Fanelly y Larson(7), al contrario que la clasificación habitualmente utilizada(6) en la literatura. Así, se recomienda una técnica quirúrgica diferente para cada grado de lesión dentro de esta clasificación. Las reconstrucciones del APL de la rodilla son habitualmente realizadas junto a reconstrucciones de ligamentos cruzados. Ante esto, uno de los interrogantes que los cirujanos presentan ante estas cirugías es cómo orientar los túneles a nivel femoral para que no haya un conflicto entre tantos túneles realizados en el cóndilo lateral del fémur. Por ello, se llevó a cabo la valoración en un modelo cadavérico, donde se constató un alto riesgo de colisión entre túneles cuando el ángulo posterolateral de la rodilla es reconstruido concomitantemente con los ligamentos cruzados. Sin embargo, dicha situación puede ser evitada dirigiendo el túnel del LCL anteriormente, con una desviación en el plano axial de 30°, manteniéndose a 0° en el plano coronal y dirigiendo el túnel del TP también 30° en el plano axial, pero con una dirección proximal de 30° en el plano coronal (Figura 4). Esto fue valorado mediante TC, la cual ha sido recientemente validada como método de estudio en este tipo de investigaciones(10-12). Dentro de las limitaciones del estudio se encuentra el hecho de que sólo se valoraron cuatro angulaciones de los túneles. Sin embargo, angulaciones adicionales fueron descartadas con base en un estudio recientemente publicado(12). Otra limitación es que sólo se evaluaron dos tipos de túneles femorales del LCA y del LCP. El actual trabajo remarca la importancia de reconstruir las lesiones del APL de la rodilla teniendo en cuenta el grado de lesión de Fanelli. Además, se demostró que tanto el túnel del LCL como el del TP deben ser realizados a determinadas angulaciones. Esto es más relevante incluso cuando se realizan en el contexto de reconstrucciones concomitantes de los ligamentos cruzados. En este sentido, el túnel del TP debe ser realizado a 30° en los planos axial y coronal, y el túnel del LCL también a 30° en el plano axial, pero manteniendo una angulación neutra de 0° en el plano coronal, ya que otras angulaciones pueden conducir a colisiones con los túneles de los ligamentos cruzados o a desembocar prematuramente en el espacio intercondíleo. 39 Técnicas de reconstrucción del ángulo posterolateral de la rodilla […] BIBLIOGRAFÍA 1. Moorman CT 3rd, LaPrade RF. Anatomy and biomechanics of the posterolateral corner of the knee. J Knee Surg 2005; 18: 13745. 2. Sanchez AR 2nd, Sugalski MT, LaPrade RF. Anatomy and biomechanics of the lateral side of the knee. Sports Med Arthrosc Rev 2006; 14: 2-11. 3. Harner CD, Vogrin TM, Hoher J et al. Biomechanical analysis of a posterior cruciate ligament reconstruction: Deficiency of the posterolateral structures as a cause of graft failure. Am J Sports Med 2000; 28: 32-9. 4. LaPrade RF, Resig S,Wentorf F, et al. 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Evaluation of the transverse femoral fixation in a cadaveric model. Arthroscopy 2010; 26: 651-7. 10. Gelber PE, Torres R, Reina F, et al. Anatomical single-bundle anterior cruciate ligament reconstruction with a transverse femoral fixation can be performed safely: A cadaveric study. Am J Sport Med 2010; 38: 1877-84. 11. Gelber PE, Erquicia J, Abat F, et al. Effectiveness of a footprint guide to establish en anatomical femoral túnel in anterior cruciata ligament reconstruction. Computed tomography evaluation in a cadaveric model. Arthroscopy 2011; 27: 817-24. 12. Camarda L, D'Arienzo M, Palermo-Patera G, et al. Avoiding tunnel collisions between fibular collateral ligament and ACL posterolateral bundle reconstruction. Knee Surg Traumatol Arthrosc 2011; 19: 598-603. 13. LaPrade RF, Johansen S, Wentorf FA, et al. An analysis of an anatomical posterolateral knee reconstruction: An in vivo biomechanical study and development of a surgical technique. Am J Sports Med 2004; 32: 1405-14. 14. LaPrade RF, Ly TV, Wentorf FA, et al. The posterolateral attachments of the knee: a qualitative and quantitative morphologic analysis of the fibular collateral ligament, popliteus tendon, popliteofibular ligament, and lateral gastrocnemius tendon. Am J Sports Med 2003; 31: 854-60. Cuadernos de Artroscopia. Vol. 19, fasc. 2, n.º 47, octubre 2012 Introducción de la cirugía artroscópica en Camboya en tres fases, en el seno de un proyecto de cooperación al desarrollo Í. Úbeda Pérez de Heredia1, J.R. García Medina2, E. López-Vidriero Tejedor3, J.L. Paulín Seijas4, A.D. Sánchez González5, M. Díaz Álvarez6 Hospital FREMAP Sevilla. 2 Hospital FREMAP Barcelona. 3 Ibermutuamur Sevilla. Clínica Pakea. Mutualia San Sebastián. 5 Centro Hospitalario de Alto Rendimiento. Écija. 6 Complejo Hospitalario de Cáceres 1 4 Correspondencia: Dr. Íñigo Úbeda Pérez de Heredia Hospital FREMAP Sevilla. Avenida de Jerez, s/n. 41014 Sevilla Correo electrónico: dr.iubedap@gmail.com Introducción: Se diseña un programa de formación en cirugía artroscópica para los cirujanos camboyanos, buscando fortalecer el sistema sanitario y ofrecer los beneficios de esta técnica a la población. Material y método: Se configuran tres equipos quirúrgicos que viajan a Camboya en tres fases, a intervalos de 6-8 meses. El trabajo de campo tiene una duración de tres semanas para cada equipo e incluye ponencias, talleres con modelos de plástico, semiología y exploración, cirugía y consultas. En las interfases se seleccionan nuevos casos. La actividad se centraliza en la capital (Phnom Penh), invitando a participar a cirujanos de otras provincias. El reclutamiento y traslado de los pacientes es competencia de organizaciones no gubernamentales involucradas en el proyecto. Discusión: Se comprueba la viabilidad del proyecto. Las actividades se desarrollan en un hospital público con la participación de profesionales del propio centro y de otros hospitales. Se provee del material necesario y se da continuidad a los programas a través de sesiones clínicas virtuales. En un futuro se prevé la aplicación progresiva de la artroscopia en otras articulaciones. Resultados: Se han realizado más de 300 consultas y 90 cirugías artroscópicas, y se han consolidado los conocimientos básicos de 20 profesionales camboyanos. Three-phase introduction of arthroscopic surgery in Cambodia in the context of a development cooperation project Introduction: A training programme in arthroscopic surgery for Cambodian surgeons has been designed with the aim of strengthening the health care system and offering the benefits of this technique to the population. Material and methods: Three surgical teams were established, which traveled to Cambodia in three phases with 6-8 month intervals. The duration of the field work was three weeks for each team, and comprised lectures, workshops using plastic models, semiology and exploration, surgery and clinical consultation. In the intervening periods, new cases were selected. The activities centered in the capital city (Phnom Penh), and surgeons from other provinces were invited to participate. The recruitment and transportation of the patients was competence of non-governmental organizations involved in the project. Results: Over 300 consultations and over 90 arthroscopic surgical interventions were carried out, and the basic knowledge and abilities of 20 Cambodian professionals was consolidated. Discussion: The viability of the project has been proved. The activities are carried out at a public hospital with the participation of professionals both from the hospital itself and from elsewhere. The necessary material is provided, and the programmes are given continuity through virtual clinical sessions. Progressive application of arthroscopic surgery to other joints is planned for the future. Palabras clave: Camboya. Artroscopia. Formación. Cooperación. Desarrollo. Key words: Cambodia. Arthroscopy. Training. Cooperation. Development. Premio especial al póster. XXX Congreso de la AEA. Valencia, 2012 Cuadernos de Artroscopia. Vol. 19, fasc. 2, n.º 47, octubre 2012 41 Introducción de la cirugía artroscópica en Camboya en tres fases INTRODUCCIÓN En noviembre de 2010, a partir de la experiencia alcanzada en un proyecto de cooperación al desarrollo iniciado 7 años antes y denominado “Cirugía ortopédica y traumatología en Camboya” (COTCAM), que nació con el objetivo de asistir a la población discapacitada y formar a los médicos camboyanos en el manejo de determinadas patologías musculoesqueléticas, se diseñó un programa de intervención directa para la formación teórico-práctica en artroscopia de rodilla, destinado a aquellos cirujanos y personal sanitario cuyo trabajo se desarrolla en el ámbito médico-quirúrgico (enfermeros y enfermeras, fisioterapeutas, promotores de salud y auxiliares camboyanos). El objetivo es contribuir al fortalecimiento del sistema sanitario público de Camboya a través de la capacitación de dicho personal local y ofrecer los avances de la medicina moderna en beneficio de la población camboyana, dando prioridad a aquellos con menos recursos económicos. Se trata de un proyecto de cooperación al desarrollo y de sensibilización que se lleva a cabo en el seno de la organización no gubernamental de desarrollo (ONGD) Asociación para la Colaboración y Desarrollo de Camboya (Acádica), en el cual participan de forma altruista profesionales de nuestro país, incidiéndose en la diversificación de los equipos de manera que se pueda dar cabida a la mayor parte de voluntarios que deseen participar. El proyecto se estructura y planifica a partir de un estudio de viabilidad siguiendo el marco Formación deficitaria Discriminación social lógico al que debe ceñirse cualquier proyecto de esta índole(1). MATERIAL Y MÉTODO Camboya está situado en el sudeste asiático y está considerado uno de los países en vías de desarrollo donde existe mayor desigualdad entre crecimiento y pobreza(2,3) (Figura 1). Tras el genocidio de los jemeres rojos (19751979) y la ulterior invasión vietnamita (19791989), el sistema económico, político y social de Camboya quedó desestructurado. Ejemplo de ello resulta el precario sistema de salud que, a día de hoy, presenta evidentes carencias(4). En el terreno de la cirugía ortopédica y la Figura 1. Familia en Kompong Thom. En el área rural la mayoría de la población vive en condiciones de pobreza extrema. Aumento de prevalencia de patología del aparato locomotor Carga familiar Sistema de salud deficiente Imposibilidad de trabajar (agrícola) Aumenta la pobreza Endeudamiento Desestructuración familiar Figura 2. Flujograma. 42 Cuadernos de Artroscopia. Vol. 19, fasc. 2, n.º 47, octubre 2012 Í. Úbeda, et al. Sistema sanitario deficiente Humanos (formación insuficiente) Técnicos Falta de medios Incapacidad de detección precoz No tratamiento adecuado Aumento prevalencia de patología musculoesquelética Figura 3. Flujograma. traumatología, no existe personal médico debidamente especializado, lo cual agrava la creciente demanda de una población sin disponibilidad de atención sanitaria traumatológica y mantiene el país en los primeros puestos entre aquellos con mayor tasa de discapacitados. En un país de subsistencia mayoritariamente agrícola (80% de la población), la patología del sistema locomotor implica la imposibilidad de trabajar y, por lo tanto, conlleva inevitablemente un incremento del nivel de pobreza y la consecuente desestructuración del núcleo familiar (Figura 2). La patología del aparato locomotor tiene alta prevalencia en Camboya debido a malformaciones congénitas y accidentes en el ámbito rural, minas antipersona y, últimamente, accidentes de tráfico o laborales, entre otros(5). No existen estadísticas de la incidencia y prevalencia de las diferentes lesiones o enfermedades; no obstante, es constatable la falta de medidas de detección y tratamiento precoz (Figura 3). El proyecto COTCAM surgió en el año 2003 como una iniciativa personal de varios médicos de nuestro país en la idea de aplicar sus conocimientos en el marco de un proyecto que englobara solidaridad, concienciación y sensibilización con la población empobrecida de Camboya. Desde su inicio abordó tres pilares básicos: la formación sanitaria, el fortalecimiento del deficitario sistema de salud y la atención médica, quirúrgica y de rehabilitación en el campo de la ortopedia y la traumatología. Las actividades se han venido realizando en el National Pediatric Hospital (NPH) de Phnom Penh, hospital de ámbito público con una infraCuadernos de Artroscopia. Vol. 19, fasc. 2, n.º 47, octubre 2012 estructura adecuada para el desempeño de la actividad quirúrgica traumatológica. El NPH recibe apoyo económico y logístico de diferentes países, como Corea y Japón, y periódicamente acoge equipos de brigadistas médicos de diferente nacionalidad y especialidad (neurocirugía, cirugía plástica, otorrinolaringología y cirugía general), asumiendo los equipos de voluntarios de la ONGD Acádica la especialidad de traumatología y ortopedia. Pese a que básicamente se trata de un hospital pediátrico, también se da cabida a pacientes adultos, y en los últimos años se ha posicionado como hospital de referencia de diversas patologías, habiendo sido acreditado como el único centro hospitalario de la capital con capacidad para formar regladamente a médicos residentes internos. La idea de introducir la cirugía mínimamente invasiva (CMI) en Camboya partió del interés mostrado por los propios cirujanos locales que, interesados por las técnicas artroscópicas, sugirieron la posibilidad de desarrollar un proyecto formativo mediante el cual se sentaran las bases para el conocimiento y su aplicación en ese país en vías de desarrollo (Figura 4). El proyecto, apadrinado por la ONGD Acádica, comenzó a hacerse realidad gracias al soporte y suministro de material por parte de las entidades públicas y privadas Oxidoc Exclusivas, Conmed-Linvatec, Grifols, Indumed, ayuntamientos de Oviedo y Castrillón, Principado de Asturias y Caja Badajoz; a la colaboración de donaciones puntuales de personas físicas y a la involucración de ONGD de ámbito local e internacional con el 43 Introducción de la cirugía artroscópica en Camboya en tres fases desarrollo, y la preparación, formación y distribución de tareas de los nuevos voluntarios que formarán parte del equipo siguiente. Al término de las tres fases se pretendía lograr la consolidación de los conocimientos en el manejo de la artroscopia de rodilla básica en al menos veinte profesionales camboyanos, los cuales lo transmitirán a los respectivos equipos de sus centros de trabajo (Tabla 1 y Figura 7). RESULTADOS Figura 4. Inauguración del I curso teórico-práctico de artroscopia. cometido de reclutar y centralizar a los pacientes, así como asumir el tratamiento postoperatorio. La introducción de la artroscopia en Camboya se ha hecho a través de un programa que comprende tres fases, en cada una de las cuales participa un equipo formado por cirujanos ortopédicos-traumatólogos, anestesiólogos, enfermeros (DUE)-instrumentistas y fisioterapeutas, que viajan a Camboya en tres periodos con un intervalo de 6-8 meses entre cada misión. Por cuestiones logísticas y presupuestarias, la segunda fase tuvo que dividirse en dos subfases (2a y 2b), quedando finalmente el proyecto constituido en cuatro periodos. Cada fase tiene una duración de seis meses y abarca un periodo de campo de dos a tres semanas (media: 17 días), durante las cuales se desarrollan de forma reglada la formación teórica, talleres de semiología y exploración, talleres prácticos de artroscopia de rodilla con modelo de plástico (“fantoma”), consultas pre- y poscirugía, sesiones clínicas y quirúrgicas y cirugía artroscópica, en la que participan por turno todos los asistentes al curso (Figuras 5 y 6). El periodo entre cada trabajo de campo comprende el control y seguimiento de los pacientes intervenidos por parte de los cirujanos y fisioterapeutas camboyanos y el tratamiento artroscópico de patologías simples. A través de sesiones clínicas virtuales entre la plantilla del NPH y el coordinador del proyecto en España, se discuten casos clínicos y se resuelven posibles dudas y cuestiones. Asimismo, se establece el diseño de la siguiente fase que abarca la formulación del nuevo programa y su presentación en las convocatorias oficiales de proyectos de cooperación al 44 Finalizadas las tres primeras fases indicadas en la formulación de este proyecto (fase 1, fase 2a y fase 2b), se han obtenido los siguientes resultados: tRealización de más de 300 consultas y de 90 cirugías artroscópicas de rodilla (meniscectomías y ligamentoplastias). Figura 5. Imagen del Dr. López-Vidriero impartiendo un taller de exploración. Figura 6. El Dr. García Medina y cirujanos camboyanos practicando una artroscopia de rodilla. Cuadernos de Artroscopia. Vol. 19, fasc. 2, n.º 47, octubre 2012 Equipo 2 2 COT, 1 fisioterapeuta, 1 DUE Fase 2 Equipo 3 Coordinador, 2 COT 1 anestesiólogo, 1 fisioterapeuta, 1 DUE Fase 3 Cuadernos de Artroscopia. Vol. 19, fasc. 2, n.º 47, octubre 2012 — t"ZVOUBNJFOUPEF Oviedo t"DÈEJDB Oxidoc Exclusivas Financian Apoyan — 7 mayo 2011 20 noviembre 2010 Fecha de finalización 1 noviembre 2010 — — 29 noviembre 2011 19 noviembre 2011 t1SJODJQBEPEF Asturias t"ZVOUBNJFOUPEF Castrillón t"DÈEJDB Diciembre 2011 Trabajo de campo: 12 noviembre 2011 31 mayo 2011 Trabajo de campo: 2 noviembre 2011 Conmed-Linvatec, Conmed-Linvatec, Oxidoc, Indumed, Grifols Grifols t"ZVOUBNJFOUPEF Oviedo t"DÈEJDB 30 mayo 2011 Trabajo de campo: 8 abril 2011 1 noviembre 2010 Trabajo de campo: 21 marzo 2011 — — Mayo 2012 Trabajo de campo: abril 2012 Enero 2012 Trabajo de campo: marzo-abril 2012 23 abril 2011 Equipo 1 Coordinador, 3 COT 1 anestesiólogo, 1 cirujano general, 1 fisioterapeuta, 1 DUE Fase 1 Fecha de inicio Equipo 3 Coordinador, 2 COT, 1 anestesiólogo Fase 3 t+PSOBEBTEFDJSVHÓB t**$POWPDBUPSJB t$VSTPUFØSJDP Jornadas de cirugía t**$POWPDBUPSJB Nacional Jornadas artroscópica práctico de cirugía artroscópica nacional. Jornadas de de cirugía programada mínimamente invasiva: programada con cirugía artroscópica artroscópica t4FNJOBSJPTEF artroscopia de rodilla. profesionales programada t"DUJWJEBEFTDMÈTJDBT t"DUJWJEBEFTDMÈTJDBTEFM exploración física locales t"DUJWJEBEFTDMÈTJDBT del proyecto t4FNJOBSJPTEF proyecto COTCAM del proyecto COTCAM interpretación COTCAM radiológica t4FTJPOFTRVJSÞSHJDBT Equipo 2 2 COT, 1 anestesiólogo, 1 fisioterapeuta Fase 2 Real Actividades t$VSTPUFØSJDP práctico de cirugía mínimamente invasiva: artroscopia de rodilla t"DUJWJEBEFTDMÈTJDBT del proyecto COTCAM Equipo 1 Coordinador, 2 COT, 1 anestesiólogo Fase 1 Prevista PROGRAMACIÓN Y ACTIVIDADES DEL PROYECTO Tabla 1 Í. Úbeda, et al. 45 Introducción de la cirugía artroscópica en Camboya en tres fases Figura 7. Los Dres. Paulín, García Medina, Úbeda y Cabezas con colegas camboyanos. tConsolidación de los conocimientos básicos sobre artroscopia de la rodilla en veinte profesionales camboyanos. tAcceso a asistencia traumatológica-ortopédica de la población rural de las diferentes provincias. tBuena respuesta y adhesión de los participantes al programa. tAlto índice de satisfacción (objetivado con diferentes fuentes de verificación). El desarrollo de la última fase dará comienzo en junio de 2012, estando previsto el trabajo de campo para el mes de marzo de 2013. Se pretende realizar una nueva convocatoria en la que participarán parte de los profesionales que han recibido la formación a lo largo de las diferentes etapas del proyecto, y que ampliarán sus conocimientos en artroscopia, así como otros nuevos que puedan beneficiarse del programa y que comiencen a introducirse en el manejo de las patologías más sencillas. DISCUSIÓN Camboya es un país situado en los últimos puestos en la escala del desarrollo, y el acceso a la formación especializada es prácticamente inexistente, lo que ha contribuido a la buena acogida del proyecto entre los beneficiarios (personal médico-sanitario local y pacientes intervenidos). 46 La viabilidad en términos de eficiencia (costebeneficio) ha sido posible gracias a la donación de material de las diferentes casas comerciales, y el índice de satisfacción, medido objetivamente mediante encuestas, ha resultado positivo tanto a nivel formativo como asistencial. Las actividades se desarrollan en el NPH por tratarse de un hospital de ámbito público y, por tanto, supeditado a las normas dictadas por el sistema de salud camboyano. Las actividades del curso se han realizado con la plantilla de dicho centro, conjuntamente con profesionales de hospitales y clínicas de diferentes provincias que han sido invitados al curso. Se ha abastecido al centro con el material médico-quirúrgico necesario, y en la actualidad sigue dándose continuidad a los programas a través de sesiones clínicas virtuales en las interfases del proyecto. Una vez finalizada la última fase, se prevé la continuación del proyecto con la aplicación progresiva de la técnica artroscópica en otras articulaciones. CONCLUSIONES tTécnicamente, el proyecto se desarrolla en el marco de la cooperación al desarrollo, teniendo como fondo promover la solidaridad, la concienciación y la sensibilización con la población empobrecida de los países del Sur. tLa formación del personal sanitario camboyano en la cirugía artroscópica es viable desde el punto de vista de eficacia y eficiencia. tSe ha introducido la cirugía mínimamente invasiva en Camboya a través de la cirugía artroscópica de la rodilla. tEl programa alcanza a médicos, enfermeros y fisioterapeutas de diferentes centros y hospitales de las diferentes provincias. tSe brinda asistencia médica, quirúrgica y de rehabilitación a un amplio sector poblacional gracias a la colaboración de ONGD. tSe asegura la continuidad del proyecto en base a los buenos resultados y a la demanda de la población y de los profesionales camboyanos. tEl proyecto constituye el punto de partida para la aplicación y el desarrollo de la cirugía artroscópica en el país. Cuadernos de Artroscopia. Vol. 19, fasc. 2, n.º 47, octubre 2012 Í. Úbeda, et al. BIBLIOGRAFÍA 1. Camacho H, Cámara L, Cascante R, et al. El enfoque del marco lógico: 10 casos prácticos. Cuaderno para la identificación y diseño de proyectos de desarrollo. Madrid: Fundación CIDEAL y Acciones de Desarrollo y Cooperación; 2001. 2. Evaluación de los resultados de desarrollo. Evaluación de la con- tribución del PNUD Camboya. Resumen ejecutivo 2009. 3. Estrategia de la cooperación española en Camboya 2006-2008. Plan de Actuación Especial”. Publicaciones del Ministerio de Asuntos Exteriores y de Cooperación. Camboya. p. 25-32. www.maec. es. Cuadernos de Artroscopia. Vol. 19, fasc. 2, n.º 47, octubre 2012 4. Ovesen J, Trankell I. Cambodians and their doctors. A medical anthropology of colonial and postcolonial Cambodia. Conpenhague: NIAS Press; 2010: 233-70. 5. WHO’s Country Health Profile in Cambodia. http://www.who.int/ countries/khm/en/ 47 Uso de la cincha de velcro para mantener la hiperflexión de la rodilla en el momento de realizar el túnel femoral en la cirugía de reconstrucción del ligamento cruzado anterior por vía anteromedial (modificación de la técnica clásica) J.P. Pizzuti Dopazo1,2, J.C. Teixidor Martí1, P.J. Amorós Barceló1, Á.M. Sanjuán Castillo3, J. Swiatlo2, R. Revoredo2 Unidad de Traumatología Deportiva. Hospital Sant Jaume de Calella (Barcelona) Unidad de Medicina Deportiva. Asociación del Fútbol Argentino (AFA) 3 Servicio de Traumatología y Ortopedia. Hospital Sant Jaume de Calella (Barcelona) 1 2 Correspondencia: Servicio de Cirugía Ortopédica y Traumatología Hospital Sant Jaume de Calella Sant Jaume, 24. 08370 Calella (Barcelona) Correo electrónico: jpizzu@msn.com, jpizzuti@medisportmaresme.es Varios estudios comentan la importancia de mantener una buena hiperflexión en el momento de realizar el túnel femoral en la cirugía de reconstrucción del ligamento cruzado anterior por vía anteromedial. El uso de la cincha de velcro para mantener una hiperflexión constante y homogénea es práctica, sencilla y segura, y facilita la posición para la realización del túnel femoral. Use of the sailmaker’s sling for maintaining knee hyperflexion at the time of femoral tunnelization in anterior cruciate ligament reconstruction surgery through the anteromedial approach (a modification of the classical technique) A number of studies stress the importance of maintaining good knee hypreflexion at the time of femoral tunnelization during ACL reconstruction surgery using the anteromedial approach. The use of the sailmaker’s sling for maintaining homogeneous and constant hyperflexion is practical, simple and safe, and it also facilitates positioning for boring out the femoral tunnel. Palabras clave: Túnel femoral anteromedial. Hiperflexión de rodilla. Key words: Anteromedial femoral tunnel. Knee hyperflexion. 48 Cuadernos de Artroscopia. Vol. 19, fasc. 2, n.º 47, octubre 2012 J.P. Pizzuti, et al. INTRODUCCIÓN Múltiples estudios comentan la importancia de mantener una buena hiperflexión en el momento de realizar el túnel femoral por la vía anteromedial en la reconstrucción del ligamento cruzado anterior(1,2). En nuestra experiencia, y revisando la bibliografía, corroboramos la dificultad de mantener una hiperflexión constante durante el tiempo de realizar el túnel femoral, ya que un ayudante tiene que efectuar la hiperflexión de la rodilla(3,4). Esta genuflexión no es constante ni tiene una fijación estable, por lo que pequeños movimientos en la flexoextensión pueden complicar la realización del túnel. Por ello, creemos práctico y sencillo utilizar una cincha de velcro (la misma que se utiliza para realizar tracción lateral en la artroscopia de hombro) para mantener la hiperflexión de la rodilla durante todo el tiempo que empleamos en realizar el túnel femoral, sin dañar ni comprimir partes blandas de la extremidad. MATERIAL Y MÉTODOS 1. Preparamos una cincha de tracción esteril del set de artroscopia de hombro (Figura 1). 2. Realizamos la isquemia con expresión de la extremidad inferior. 3. Después de la asepsia con alcohol yodado, colocamos una protección de softband esteril en la zona del tobillo a operar (Figura 2). Luego vendamos el pie como se realiza habitualmente (Figura 3). 4. Colocación del entallado habitual para la cirugía de reparación del ligamento cruzado anterior. 5. En el momento de realizar el túnel femoral, hiperflexionamos la rodilla y colocamos la cincha de velcro en la zona que previamente habíamos protegido con el softband desde la zona anterior del tobillo y ajustamos Figura 1. Cincha de tracción. Figura 2. Colocación de protección softband. Cuadernos de Artroscopia. Vol. 19, fasc. 2, n.º 47, octubre 2012 Figura 3. Vendaje del pie. 49 Uso de la cincha de velcro para mantener la hiperflexión de la rodilla […] Figura 4. Anclaje de la cincha de velcro. en la cara anterior del muslo, anclando la cincha por encima y por detrás del mango de isquemia (Figura 4). 6. Realizamos el túnel femoral con la seguridad de que la hiperflexión se mantiene constante y sin provocar daño en las partes blandas de la extremidad (Figura 5). 7. Retiramos la cincha de velcro para continuar con los siguientes pasos de la cirugía (realizar el túnel tibial, fijación, etc.). 50 Figura 5. Realización del túnel femoral. CONCLUSIONES El uso de la cincha de velcro para mantener la hiperflexión durante la realización del túnel femoral es útil, práctica y sencilla. Facilita un paso de la cirugía de reparación del ligamento cruzado anterior por vía anteromedial que de por sí conlleva una dificultad intrínseca, al tener que mantener la hiperflexión constante durante todo el tiempo de la realización del túnel femoral. No se comercializan sistemas de fijación de la rodilla en hiperflexión(6,7), por lo que nos parece un sistema fácil y seguro de lograr una correcta hiperflexión para realizar el túnel femoral. Cuadernos de Artroscopia. Vol. 19, fasc. 2, n.º 47, octubre 2012 J.P. Pizzuti, et al. BIBLIOGRAFÍA 1. Musahl V, Plakseychuk A, VanScyoc A, et al. Varying femoral tunnels between the anatomical footprint and isometric positions: Effect on kinematics of the anterior cruciate ligament-reconstructed knee. Am J Sports Med 2005; 33: 712-8. 2. Yamamoto Y, Hsu WH, Woo SL, et al. Knee stability and graft function after anterior cruciate ligament reconstruction: a comparison of a lateral and an anatomical femoral tunnel place- ment. Am J Sports Med 2004; 32: 1825-32. 3. McKeon BP, Bono JV, Richmond J. Knee arthroscopy. Springer Science+Business Media, LLC; 2009. p. 129-53. 4. McGinty J. Artroscopia quirúrgica. Madrid: Marbán; 2005. p. 347-66. 5. Johnson D. The ACL made simple. 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Para salir de dudas, qué mejor que hablar con el responsable de docencia de la SECOT, el Dr. Joan Nardi. Nos citamos en su consulta para estar más tranquilos. José M.ª Altisench: Veo que compartes consulta con Ramón Cugat, pero no puedo por más que José M.ª Altisench y Joan Nardi. preguntar si la artroscopia forma parte de tu arsenal terapéutico. Joan Nardi: (Se ríe.) Hace más de 15 años que colaboro con Ramón, y él se encarga de la artroscopia. JMA: Joan, ¿qué me aporta la SECOT? JN: La SECOT ha ido evolucionando. En los últimos años hemos ido incorporando nuevos cursos de formación, no sólo teóricos, sino prácticos, como los cursos de abordajes quirúrgicos en cadáveres. La relación con la American Academy of Orthopaedic Surgeons (AAOS) y las retransmisiones on line en nuestra nueva página web han puesto al alcance de todos los socios de la SECOT el congreso de la sociedad americana como si estuvieras allí, o mejor, ya que un grupo de expertos de cada articulación se encargaban de condensar todo lo que se decía en un día en tiempo real. En cuanto a las publicaciones y los monográficos conjuntos con la AAOS, ahora todos los miembros pueden tener acceso a ellos desde la página web. JMA: Reconozco que habéis mejorado, porque era una lástima que, si no tenías contacto con la industria farmacéutica –que era la que patrocinaba la distribución de la publicación–, a pesar de ser socio de la SECOT, no tenías acceso a los monográficos. Pero vayamos con el tema que me preocupa como responsable de docencia de la AEA: ¿estáis enfadados con la artroscopia? Porque no veo en vuestros programas cursos de formación sobre artroscopia… JN: Será porque lo hacéis vosotros muy bien (vuelve a reir). Nos hemos concienciado de la importancia de cubrir ese vacío que teníamos. Hemos empezado con un posgrado en artroscopia en Colombia, en colaboración con el Centro Latinoamericano de Entrenamientos en Cirugía de Mínima Invasión (CLEMI) y la Sociedad Colombiana de Ortopedia y Traumatología, por un acuerdo de nuestro presidente J.R. Altónaga y su presidente N. Restrepo (y el actual J.C. Palacio). Los profesores han sido españoles, y esto tendrá su contrapartida el próximo año en el curso que haremos con ellos en España. Además, estamos proyectando cursos de artroscopia para todos los niveles. En éstos confiamos en contar con vuestra ayuda. JMA: Sabes que siempre hemos querido colaborar, y la prueba la tienes en los temas que tocamos en el día de las especialidades. Por cierto, ¿no crees que tendríamos que mejorar ese día y hacer que realmente fuera un día de las especialidades, en lugar de 3-4 horas para tratar un tema dentro del congreso? JN: Éste es un tema complejo dentro del organigrama del Congreso de la SECOT, pero sí puedo decirte que estamos trabajando en ello para acercarnos un poco al modelo americano. Bueno, creo que la SECOT sigue cambiando para bien. Nosotros sí que no cambiamos, y seguiremos con nuestros cursos, favoreciendo la enseñanza de la artroscopia y compartiendo con todas las sociedades que soliciten nuestra colaboración y, por supuesto, con nuestra sociedad madre. 52 Cuadernos de Artroscopia. Vol. 19, fasc. 2, n.º 47, octubre 2012 Noticias CURSOS AEA Queridos amigos: En 2011 hemos realizado cinco cursos, con la participación de 53 profesores. Para el 47% de ellos era la primera colaboración como instructores en un curso de la AEA. Para los que no conocéis la dinámica de los cursos, la Junta Directiva, que es la responsable de la Comisión de Docencia, elige un director para cada curso. Este director esboza un programa y una relación de instructores, de los cuales alrededor del 50% tienen que ser primerizos como instructores. Esto nos da una renovación constante y el excelente nivel y prestigio que tienen los cursos de formación de la AEA. Si los nuevos aprietan, los antiguos no podemos dormirnos. Esto es lo que hace grande y dinámica a nuestra AEA. Despues del curso, los alumnos valoran la sede, a los instructores, los temas y el material. El resultado de estas encuestas en el 2011 refleja que el 93% de alumnos ha puntuado entre 8 y 10 nuestro trabajo, lo que nos anima a seguir. Hemos ido cambiando el formato para hacerlo más dinámico, y siempre escuchando los criterios e inquietudes del director de cada curso. Los monitores en el 2011 han sido los Dres.: Terol, Margalet, Cañete, Darder, De la Cuadra, Juando, Marín, Martín, Mediavila, García Medina, Pina, Verdú, Zurita, Achalandabaso, Ayala, Centenera, Escudero, Vilaro, De Lucas, Fernández, Gastaldi, Gómez, Mas, Mesa, Tey, Pérez Carro, Arriaza, Canosa, Cuéllar, Pais, Rivera, Ruiz Iban, Torres, Díaz Samada, Calvo, Espejo, Gavin, Massanet, Mora, Pelfort, Ruiz Molina, Sarasquete, Soler, Tercedor, Leyes, Altisench, Beltrán, Palomo, Calvo, Crespo, Cruz, Monllau y Silberberg. Gracias a todos por vuestro tiempo y profesionalidad. Un abrazo. José M.ª Altisench ESCUELA DE ARTROSCOPIA DE CADERA En el II Curso de la Escuela de Artroscopia de Cadera, patrocinado por Smith&Nephew y dirigido por Marc Tey, salieron a debate muchos temas, pero quizás lo más relevante fue el comentario de Roberto Seijas, del equipo de Ramon Cugat: “El paciente que puede beneficiarse de una artroscopia de cadera no es una excepción. Saber detectar estos pacientes es esencial para variar la historia natural de algunos tipos de artrosis de cadera. Pacientes jóvenes, muchos de ellos menores de 20 años, que realizan una actividad deportiva intensa, como fútbol, y que presentan dolor inguinal muchas veces etiquetado como roturas fibrilares o sinovitis, pueden ocultar un pinzamiento fémoro-acetabular. Muchos de estos pacientes abandonan la práctica del fútbol y, con ello, disminuyen los síntomas de su cadera. Al reiniciar sus actividades deportivas, como tenis o footing, hacia la treintena los síntomas reaparecen, incluso en la cuarentena, cuando ya están afectados en sus actividades de vida diaria, pero a veces con cambios degenerativos que ya condicionan un peor pronóstico. Es por ello imprescindible un buen conocimiento de los síntomas y signos del pinzamiento fémoro-acetabular, y con ello diagnósticos precoces cuya resolución mejore el pronóstico de los pacientes.” Cuadernos de Artroscopia. Vol. 19, fasc. 2, n.º 47, octubre 2012 53 Noticias LA REBELIÓN DE LOS SARGENTOS José Luis Ávila, nuestro querido, inagotable e incansable amigo, ha puesto en marcha a todos nuestros jóvenes leones, formando grupos de trabajo que seguro nos harán poner las pilas a los menos jóvenes (los que no entramos en tenodesis de bíceps, plastias LCA, etc.) y seguro que nos divertiremos. Gracias, José Luis. CURSO A LA CARTA Siguiendo la norma de hacer cursos cada vez más interesantes, Manuel Leyes ha conseguido juntar a todas las casas comerciales y hacer un curso a la carta. En dicho curso, cada alumno podía elegir 6 técnicas quirúrgicas, que realizaba junto a un experto durante los dos días que ha durado la experiencia. Es un placer trabajar en la Fundación Universitaria San Pablo CEU. Las instalaciones dirigidas por Paco Forriol cada día están mejor acondicionadas. En el curso se han tratado temas como la lesión del complejo posterolateral. Ante la lista de espera que ha generado este modelo, seguro que lo repetiremos. Felicidades y gracias por tu esfuerzo, Manolo. 54 Cuadernos de Artroscopia. Vol. 19, fasc. 2, n.º 47, octubre 2012 Premios PREMIOS FUNDACIÓN ESPAÑOLA DE ARTROSCOPIA 2012 PREMIOS OTORGADOS POR LA FUNDACIÓN ESPAÑOLA DE ARTROSCOPIA EN EL XXX CONGRESO DE LA ASOCIACIÓN ESPAÑOLA DE ARTROSCOPIA, CELEBRADO EN VALENCIA DEL 9 AL 11 DE MAYO DE 2012 Mejor artículo Premio al mejor artículo publicado en la revista Cuadernos de Artroscopia: “Compensación de los resultados clínicos de la reparación del manguito rotador en doble fila frente a fila simple en pacientes con compensación laboral” J.E. García Rellán, E. Sánchez Alepuz, R. Calero, V. Carratalá, R. Castro Servicio de Cirugía Ortopédica y Traumatología. Hospital Universitario y Politécnico La Fe. Valencia. Instituto Traumatológico de Unión de Mutuas. Valencia Mejor comunicación Premio a la mejor comunicación oral presentada en el XXX Congreso de la AEA: “Evaluación mediante TC en modelo cadavérico de la seguridad en la realización de los túneles del ángulo posterolateral en reconstrucciones multiligamentarias de rodilla” E. Gelbert, J.I. Erquicia, F. Abat, G. Sosa, X. Pelfort, J.C. Monllau ICATME. Institut Universitari Dexeus. Barcelona. Hospital de la Santa Creu i Sant Pau Mejor póster Premio al mejor póster presentado en el XXX Congreso de la AEA: “Tratamiento endoscópico del atrapamiento de nervio ciático en el espacio subglúteo. Síndrome del glúteo profundo/piramidal” L. Pérez Carro, V. de Diego, M. Rupérez Vallejo, M. Sumillera, R. García Renedo Hospital Clínica Mompía. Hospital Universitario Marqués de Valdecilla. Santander Premio Especial Fundación Española de Artroscopia “Introducción de la cirugía artroscópica en Camboya en tres fases, en el seno de un proyecto de cooperación al desarrollo” I. Úbeda, J.R. García Medina, J.L. Paulin, M. Díaz, A.D. Sánchez, E. López-Vidriero Hospital FREMAP. Ibermutuamur. Sevilla Cuadernos de Artroscopia. Vol. 19, fasc. 2, n.º 47, octubre 2012 55 Premios PREMIOS FUNDACIÓN ESPAÑOLA DE ARTROSCOPIA 2012 PREMIOS OTORGADOS POR LA ASOCIACIÓN ESPAÑOLA DE ARTROSCOPIA EN EL XX CURSO DE ENFERMERÍA, CELEBRADO EN VALENCIA DEL 9 AL 11 DE MAYO DE 2012 Mejor comunicación Premio a la mejor comunicación oral presentada en el XX Curso de Enfermería: “Vigilancia peri- y postoperatoria de morbilidad neurológica en el uso de los sistemas de tracción en cirugía artroscópica de hombro” S. Llobera, P. Coloma, M. Sánchez de las Matas, E. Íñiguez, Y. Gómez, M. Pérez Hospital Universitario Fundación Alcorcón. Madrid Mejor póster Premio al mejor póster presentado en el XX Curso de Enfermería: “Informatización de la trayectoria clínica en pacientes intervenidos de rodilla por artroscopia en el Hospital Monográfico de Traumatología” M. Jané Bassas, N. Escamilla Belizón Hospital Asepeyo Sant Cugat. Barcelona BECAS DE INVESTIGACIÓN 2012 Estudio comparativo de la operación de latarjet realizada a cielo abierto y por artroscopia en el tratamiento de la inestabilidad de hombro Investigadores: E. Calvo1, D. Morcillo1, G. Bermejo2, E. Fontoira3, A.M. Foruria1, A. Fernández-Bravo2 1 Servicio de Cirugía Ortopédica y Traumatología. 2 Servicio de Rehabilitación. 3 Servicio de Diagnóstico por Imagen. Instituto de Investigación Sanitaria. Fundación Jiménez Díaz. Madrid Efecto sobre la biomecánica de la rodilla de la desinserción de la raíz posterior del menisco externo y su posterior reinserción Investigador principal: A. Espejo Baena Hospital Universitario Virgen de la Victoria, Málaga Optimización en el uso de células troncales mesenquimales derivadas de tejido adiposo para la reparación de lesiones meniscales en zona vascular. Un estudio preclínico Investigadores: M.Á. Ruiz Ibán1, J. Díaz Heredia1, M. García Arranz2, H. Gómez Santos1, C. Correa Gorospe1 1 Hospital Universitario Ramón y Cajal. 2 Hospital Universitario La Paz. Madrid 56 Cuadernos de Artroscopia. Vol. 19, fasc. 2, n.º 47, octubre 2012 Cursos de la AEA 03 $*» ." &' *»/ &41" º0 "40 $*"$ DIRECTOR SPONSOR ARTICULACIÓN Noviembre 2012 Camp. Bellvitge Barcelona F. Soler ConMed™ Linvatec Rodilla-Hombro Noviembre 2012 Hospital Quirón Madrid R. Canosa DePuy Mitek Hombro Univ. Francisco de Vitoria A. Salvador Arthrex Muñeca Abril 2013 / ÓB 34 $6 UPN B BODBJSVHDÓ ØQJDB Z USPT BS % 04 LUGAR N DP B QJ P D PT US BS BF X XX FECHA -"% &"3 530 4$0 1*" Índice de anunciantes LABORATORIO PRODUCTO PÁGINA Smith & Nepheww Healicoil PK 2 Arthrex TRIMANO 59 ConMed™ Linvatec Y-Knot™ 60 Cuadernos de Artroscopia. Vol. 19, fasc. 2, n.º 47, octubre 2012 57 Sponsors Oro Sponsor Plata Sponsors Bronce Redacción y publicidad: Grupo Acción Médica c/ Fernández de la Hoz, 61, entreplanta. 28003 MADRID. 5GOPt'BY Correo electrónico: publicaciones@accionmedica.com c/ Balcells, 21-25, bajos, oficina 1. 08024 BARCELONA Dirección general: Javier Baglietto Redactora jefe: Celerina Ramírez Redacción: Mamen Gómez, Daniel Dorrego, Rosana Jiménez Director de arte: Domingo Roldán Diseño y maquetación: Agustín Sánchez Secretaria de redacción: Carmen González Dep. legal:.t47t*44/ 58 Cuadernos de Artroscopia. Vol. 19, fasc. 2, n.º 47, octubre 2012 Shoulder Restoration System ™ Pequeño, Versátil, Seguro. C M Y CM MY CY CMY K COMMITTED TO INNOVATION Linvatec Spain, S.L. Gran Via Carles III, 124, 3-2a 08034 Barcelona, Spain Tel: 93 206 40 70 Fax: 93 206 40 71 www.linvatec.com