Download Domingo 28 de enero de 2007 - Trisomía 18, Información y apoyo a
Document related concepts
no text concepts found
Transcript
DIARIO EL MERCURIO Domingo 28 de enero de 2007 Tecnología: La web revoluciona los diagnósticos médicos Manuel Fernández Bolvarán Ya no es raro que los doctores, además de examinar a los pacientes, revisen la red para sacar sus conclusiones. Manuel Fernández Bolvarán El caso de una doctora estadounidense que logró diagnosticar acertadamente en un niño el inusual síndrome IPEX (disfunción inmune, poliendocrinopatía, enteropatía, ligada al cromosoma X) tras ingresar los síntomas del paciente en Google, sorprendió a las investigadoras australianas Hangwi Tang y Jennifer Hwee. ¿Podría el buscador servir para tener diagnósticos correctos? Para saberlo, tomaron 26 casos de difícil prescripción aparecidos en 2005 en la revista New England Journal of Medicine y "googlearon" los síntomas. El resultado fue que en 15 de ellos (58%), el buscador identificó correctamente la enfermedad en cuestión. "En casos de diagnóstico dificultoso, el uso de Google puede ser de utilidad", concluyó la investigación, publicada en noviembre en el British Medical Journal. El estudio puso de manifiesto la relevancia que las tecnologías de la información han alcanzado en el ambiente médico. "Es imposible para uno procesar todos los contenidos que se están generando a diario, por lo que estas herramientas se vuelven una necesidad", explica el hepatólogo de la UC Alejandro Soza. ¿Datos confiables? "En mi trabajo, el uso de Google es vital", sostiene el gastroenterólogo Abdón Guerra, del Hospital San Antonio (V Región). Él utiliza el buscador frente a sus pacientes y dice que eso le da un valor agregado a la atención: "Hay gente que cree que su enfermedad es única, pero uno abre Internet y les muestra que hay gente en todo el mundo con su problema, que hay artículos al respecto, tratamientos, etc. Eso genera en ellos una reacción muy positiva". Uno de los peros que tiene el uso de los buscadores comunes en la consulta médica, es la duda sobre la calidad de la información disponible. "Yo no los uso, porque no hay filtros y uno termina encontrando cualquier cosa", dice el traumatólogo infantil Marcelo Sajurdia. Los riesgos son claros: hallar información sin el respaldo adecuado, con escaso peso estadístico, desactualizada o sencillamente, errónea. Incluso podría tener malas consecuencias legales para un médico. "Si tuvieras un problema con un paciente, el juez pregunta cómo se hizo el diagnóstico y uno dice 'lo vi en Google', es muy distinto a decir que fue el resultado de una revisión sistemática en revistas de calidad mundial", argumenta el doctor Nicolás Droppelmann, quien ha realizado estudios sobre ciencias de la información. "Internet ofrece herramientas mucho mejores que Google", señala Sajurdia. Por eso, y para asegurarse de contar con información sólida, estos médicos recomiendan los buscadores especializados, como PubMed o Cochrane Collaboration. En ellos, se puede buscar información incluso según las características específicas del paciente. Dichos sitios han sido claves en el auge de la "medicina basada en evidencia", que tiene que ver con que la experiencia personal del doctor deje de ser el factor decisivo en su toma de decisiones. El objetivo ahora es apoyarse en los resultados de estudios que han sido publicados en las revistas especializadas y que cumplen con los estándares internacionales de calidad metodológica y científica. Pero Google tiene defensores. Como el doctor José Luis Contreras, director del Centro de Salud Familiar Edgardo Enríquez Fröedden, quien lo emplea a menudo como vademécum: "Es imposible conocer todos los remedios y sus detalles, así que en eso es una ayuda espectacular". "Google hace un trabajo de selección bastante efectivo. Por lo general, los primeros resultados que arroja son de fuentes confiables", argumenta el doctor Soza. Claro que está consciente de sus limitaciones: "El tema es que quien busca sepa del tema y sea capaz de discriminar cuáles son las fuentes de información de mayor calidad". Mejor atención Existe acuerdo en lo positivo de llevar Internet a la consulta. Por ejemplo, el doctor Sajurdia se suscribió a una comunidad española en línea de traumatólogos, donde se intercambian noticias y opiniones. Incluso le sirve para pedir puntos de vista ante casos difíciles. Por su parte, Abdón Guerra destaca la forma en que Internet ha facilitado el perfeccionamiento profesional de los médicos: "Antes uno tenía que pagar carísimo por una revista que te llegaba tres o cuatro meses tarde. Ahora está todo ahí". Otro tema interesante es lo que pasa con el e-mail. "Le doy mi correo a los pacientes y eso me ha permitido seguir mejor la evolución que van teniendo", explica Alejandro Soza. La misma idea tiene Abdón Guerra quien, por esa vía remite a sus pacientes las informaciones que estima que puedan servir para complementar sus tratamientos. Las nuevas herramientas que ha traído Internet han significado un gran cambio. "Yo me siento incompleto si no cuento con esto", dice el doctor Soza. Y añade que ante la cantidad de información disponible, el rol del médico es ser capaz de enfocarla al paciente específico que tiene delante: "Ahí es donde Google no puede hacer nada". EN INTERNET Buscadores especializados: www.pubmedcentral.nih.gov www.cochrane.org Domingo 28 de enero de 2007 Más pacientes desafían a sus especialistas De la mano de los datos que obtienen en la web, las personas están jugando un rol más activo en sus tratamientos. Muchos chilenos están optando por "googlear" sus cuadros de salud para llegar informados a la consulta con su médico. "Algunos llegan incluso con una idea preconcebida de lo que tienen y del tratamiento que hay que seguir y si uno diagnostica otra cosa, se produce un diálogo bastante activo", explica el traumatólogo Marcelo Sajurdia. En general, los médicos son partidarios de esta "democratización" de la información, pues genera pacientes más activos. Pero advierten sobre el riesgo de darles total credibilidad a los contenidos virtuales. "A veces llega gente consultando por procedimientos obsoletos, o proponiendo terapias estrambóticas que ven en internet", relata el doctor Alejandro Soza. Como la mayoría de los sitios de calidad está en inglés o usa un lenguaje técnico, es difícil encontrar una alternativa a Google en la búsqueda de información. Pero existen y una muestra es Medline Plus (http://medlineplus.gov/spanish/). Contiene información en español validada por la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos y orientada especialmente a los pacientes. Incluye artículos sobre malestares, videos de procedimientos quirúrgicos, un vademécum y una enciclopedia médica, entre otras cosas. Los pacientes de la era Google son "todo un desafío", en palabras del doctor Nicolás Droppelman. "Si una persona llega con una información que tú no manejas, la relación de confianza se ve perjudicada. Eso nos obliga a actualizarnos siempre", agrega. El tema de la confianza es el principal obstáculo para la penetración de las tecnologías de la información en el mundo médico. "Muchos doctores creen que si buscan en internet el paciente va a dudar sobre sus capacidades", señala Soza. Pero en la práctica, los miedos no se confirman. "Uno en la consulta le explica al paciente lo que tiene, pero no sabe si él está entendiendo. Así que si uno le recomienda páginas para que revise, el paciente comprende mejor su situación y la relación se fortalece", opina el doctor Adbón Guerra.