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Agua bendita En caso de que se pueda: Agua traída de algún Santuario Mariano (por ej. de Lourdes, de Fátima, etc....) En caso de que se pueda es muy importante tener: sal y agua para exorcismos En caso de que se pueda, tener aceite bendecido o para unción Velas/veladoras bendecidas Crucifijos bendecidos, por lo menos uno Sello del Dios Vivo, en cualquier formato autorizado o en escapulario, bendecido si es posible Imágenes bendecidas del Sagrado Corazón de Jesús, de Jesús de la Misericordia y de María Santísima en cualquier advocación. Imágenes de algún santo de nuestra devoción como San José, Sta. Teresa, etc. Rosarios (fijarse que no tengan símbolos raros) Detente, Agnus Dei, Escapularios, sobre todo el verde, y el del Carmen Medallitas y Cruz de San Benito, Medallas de la Virgen Milagrosa, Medalla de la Salvación, Medalla o imágen de San Miguel arcángel, También traten de conservar los distintos sacramentales bendecidos en fiestas especiales del año litúrgico: cruces de palma, ramos, velas de la Candelaria, etc. ** Si también tienen otras medallitas religiosas y cruces o crucifijos bendecidos asi como sus velas de la Primera Comunión, de Bautizo, también son importantes al rezar en familia, en tiempos angustiosos de la familia o cuando hay enfermedades ** ----------- La Santa Biblia (la de Staubinger, la de Navarra, la de Jerusalén son de las mejores) Libros estrictamente espirituales (vidas de algunos santos, libritos de oraciones y devociones piadosas como triduos, novenas, consagraciones a los corazones de Jesús y María, catecismo, algún libro que nos afiance nuestra fe como por ejemplo cualquier libro escrito por Tomas Kempis, o alguno escrito por nuestro querido Papa Benedicto XVI, el Via crucis, etc.) y para los que tienen niños más pequeños, tener libros católicos para dibujar o material para elaborar un nacimiento por ejemplo, o algún pasaje de la Biblia, etc. El agua Bendita ocupa un lugar fundamental en todos los ritos litúrgicos. Su importancia nos remonta a la aspersión bautismal. A lo largo de la oración de bendición, se reza al Señor para que la aspersión de esta agua nos procure los tres beneficios siguientes: el perdón de nuestros pecados, nuestra defensa contras las trampas tendidas por el Maligno y el don de la protección divina. La oración de exorcismo del agua habla de eliminar la más mínima porción de poder del demonio con el fin de extirparla y de rechazarla, e igualmente luego destaca otros efectos como el de sanar enfermedades, de acrecentar la Gracia divina, de proteger las casas y los lugares donde los fieles se guardan de toda influencia inmunda ejercida por Satanás. Y ella agrega: que las trampas del enemigo infernal sean frustradas y que la serenidad y la salud de los habitantes sean garantizadas protegiéndolos de toda presencia susceptible de entorpecer su seguridad o su inquietud. Los fieles de Cristo pueden conservar esta agua Bendita, asperjándola en los enfermos, las casas, los campos y otras cosas. Ellos pueden tener en sus habitaciones, con el fin de poder asperjarla una vez al día, y más. El aceite exorcizado, utilizado con Fe, permite igualmente aniquilar el poder de los demonios, sus ataques y los fantasmas que ellos suscitan. También se aprovecha para la salud del alma y del cuerpo; recordemos simplemente el antiguo uso que consistía en untar las heridas con aceite, y el poder de sanar a los enfermos por la imposición de manos y la unción del aceite que Jesús confirió a los apóstoles. El aceite exorcizado tiene por otra parte la propiedad específica de librar el cuerpo de aquello que le es nefasto. Me ha sucedido muchas veces de bendecir a personas que habían sido víctimas de hechizos comiendo o bebiendo alguna cosa maléfica. En estos casos, el organismo, para liberarse, debe evacuar todo lo maléfico que contiene. El aceite exorcizado ayuda enormemente al organismo a arrastrar y librar el cuerpo de estas impurezas. Se puede también, para este fin, beber agua bendita. Los fieles de Cristo pueden conservar este aceite para las casas, las cosas que ellos deseen poner bajo la protección del Señor. Se usará este aceite para friccionar las partes enfermas de nuestro cuerpo. La sal exorcizada sirve ella también para expulsar los demonios y a preservar la salud del alma y del cuerpo. Pero su propiedad específica consiste en proteger los lugares de las influencias o de presencias maléficas. Aconsejo habitualmente de esparcir sal exorcizada en el umbral de la casa y en los cuatro rincones de la habitación o de las habitaciones en las cuales se sospecha estar infestadas. Se le puede poner en sobres bajo el colchón y los asientos, sin olvidar los vehículos: auto, moto, etc. ORACIONES Para esparcir la sal. “Imploro humildemente la protección de mi Señor Jesucristo sobre mí, mi familia y todos los que me rodean, imploro tu misericordia, la bondad y clemencia para que todo aquello que sea tocado por esta sal bendecida carezca de toda inmundicia y de toda impregnación del mal. En nombre de Dios Vivo, en nombre de Dios verdadero, en nombre de Dios Santo, ordeno que toda esterilidad, toda maldad, toda acción del maligno, todo espíritu maligno y conjurado que haya en esta casa se aleje en este momento y nunca más regresé a perturbarme y a hacerme daño. Amén” Para consumir la sal bendecida. “Señor Dios Omnipotente, tú creaste la sal para uso del género humano, con humildad reclamo la promesa de la sanación por medio de la sal como Dios padre lo mandó al profeta, que al ser puesta en el agua para sanar su esterilidad, te suplico Señor que al comerla me traiga la salud del alma y del cuerpo. Amén.” Para esparcir el agua bendita por la casa. “Por la aspersión de vuestra Sangre, oh Señor Jesús, y por la virtud de vuestra Pasión, láveme de todas mis manchas, y purifíqueme de todo pecado. En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, como era en el principio, ahora y siempre por los siglos de los siglos. Amén.” O, “Te suplicamos Señor que visites esta casa y repele lejos de ella todos los obstáculos del enemigo, que Tus Santos Ángeles vengan a habitarla para permanecer en la Paz y que Tu bendición permanezca para siempre sobre nosotros por Cristo Nuestro Señor, Nuestro Padre, te Saludo María. Amén”. O, “En el Nombre de Dios Padre, en el Nombre de Jesucristo nuestro Señor y con El poder del Espíritu Santo, al asperjar esta agua bendita sobre esta casa ahuyente toda fuerza del enemigo erradique y arranque de este lugar al maligno con sus ángeles apóstatas. Señor mío Jesucristo has que esta casa quede libre en tu nombre de toda inmundicia y de todo mal, que no recida más un espíritu pestilente, se alejen todas las insidias del enemigo, y si hay algo que esté perjudicando a los que habitan aquí o impida su tranquilidad por la aspersión de esta agua bendita huyan y de ahora en adelante reine la presencia del Espíritu Santo y les conceda tu Misericordia y tus Bendiciones por todos los días de nuestra vida. Amén” Para consumir el agua bendita. “Esta agua que hemos preparado con estas purificaciones, Y qué ha sido bendecida de manos del sacerdote en Nombre de Dios Padre, Dios Hijo y Dios Espíritu Santo, la tomo invocando el nombre poderoso del Señor Jesucristo para que aleje toda enfermedad de mi alma y de mi cuerpo y que mediante la presencia del Espíritu Santo me concedas bondadosamente Tu misericordia. Amén” Para la utilización personal del aceite bendecido. (Se prohíbe total y rotundamente ungir a un enfermo para que no se confunda con la unción de los enfermos que sólo puede hacerla el sacerdote, el aceite bendecido es de uso personal únicamente) “Dios padre omnipotente que este aceite bendecido me de la salud mental y corporal para que obtenida la salud te dé gracias a ti Dios Vivo y Verdadero, que quede libre de toda enfermedad, de todo dolor y de toda insidia del enemigo, siendo libre de toda adversidad no sea herido por la mordedura de la antigua serpiente, ya que he sido redimido por la Sangre de Jesucristo mi Señor y Salvador. Amén” O, “Jesús me (te)Bendiga, Jesús me (te) sane”. O, “Señor Jesús, Hijo del Dios viviente, por esta unción del aceite santificado por tu Iglesia con el Espíritu Santo, vivifica mi cuerpo y mi alma. libéralos de las acciones y de las invasiones de las fuerzas de las tinieblas y sánalos de toda enfermedad. Concédeme el socorro de tu gracia para amarte mejor y servirte, en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén“ (P. Paul-Marie MBA) O para la protección de lugares y casas. Para tomar una MEDICINA (o remedio) “Oh Señor Dios Todopoderoso, Tú me creaste a imagen y semejanza Tuya y me formaste maravillosamente, te has dignado socorrerme con múltiples remedios en las diferentes enfermedades que aquejan mi cuerpo, haz que esta medicina la tome en Tu Nombre y con toda la fe de mi corazón recibiendo de tu Presencia la salud de la mente y del cuerpo. Por Jesucristo el Señor. Amen.” VIRTUD Y EFICACIA DEL AGNUS DEI El sacramental del “Agnus Dei” (que significa Cordero de Dios) es bendecido por el santo Padre (o Papa) que para este fin dirige a Dios una oración fervorosa suplicándole que bendiga y santifique esta imágen de tal manera que, los que la veneran con gran fe y verdadera devoción puedan obtener: 1. Que a simple vista o contacto con el “Agnus Dei” representada en estas figuras, inflame los corazones de los fieles para contemplar los misterios de nuestra Redención, los lleve a agradecer, alabar y venerar la Divina bondad y así les obtenga el perdón de sus pecados. 2. Que la señal de la Cruz los aparte de los malos espíritus, el granizo, los truenos, los vientos y las tempestades. 3. Que por la virtud de la Bendición Divina, no caigan en las asechanzas y tentaciones del demonio. 4. Que las mujeres embarazadas sean preservadas de todo mal y obtengan un felíz parto. 5. Que la peste, la epilepsia, el agua y el fuego no puedan perjudicar a los verdaderos cristianos. 6. Que los cristianos piadosos sean en fin amparados por la Protección Divina en la prosperidad y en la adversidad; y que por los misterios de Vida y de Pasión de nuestro Señor Jesucristo, sean ellos preservados de la muerte repentina e inesperada y de cualquier otro peligro o mal. --- Basta con usar uno pequeño --Con aprobación eclesiástica - Carmelo de San José - Fátima Algunas fotos de como pueden ser los sacramentales del Agnus Dei, su elaboración también puede ser en metal y es como si fuera un “DETENTE” es decir de tela y en muchos solo tiene las letras “AD” El DETENTE o SALVAGUARDIA DEL SAGRADO CORAZóN DE JESúS El "detente" es un pequeño emblema que se lleva sobre el pecho, con la imagen del Sagrado Corazón. Es propio de quien ama llevar consigo un signo de su amado, así el "detente" es signo de nuestro amor al Sagrado Corazón de Jesús y de nuestra confianza en su protección contra las acechanzas del maligno. Le decimos "detente", en nombre de Jesús, al demonio y a toda maldad. Se le conoce también como el “Pequeño Escapulario del Sagrado Corazón”, aunque no es, en el sentido estricto de la palabra, un escapulario. Origen: Proviene de Santa Margarita María Alacoque, como lo atestigua una carta dirigida por ella a la Madre Saumaise el 2 de Marzo de 1686 en la que le dice: “Él (Jesús) desea que usted mande a hacer unas placas de cobre con la imagen de su Sagrado Corazón para que todos aquellos que quisieran ofrecerle un homenaje las pongan en sus casas, y unas pequeñas para llevarlas puestas.” (Vida y Obras, vol. II, p.306, nota). Ella misma llevaba una sobre su pecho, debajo del hábito e invitaba a sus novicias a hacer lo mismo. Hizo muchas de estas imágenes y recomendaba que su uso era muy agradable al Sagrado Corazón. El uso del detente se extendió grandemente, especialmente desde el 1866, durante los estragos producidos por la epidemia del cólera de Amiens, Roubaix, Cairo y otras partes. Su influencia beneficiosa se hizo evidente. Después de la guerra Franco-Alemana los “Salvaguardia” probaron ser en mas de una ocasión, un escudo que protegió a muchos soldados franceses de las balas enemigas. (Cf. Messager du Coeur de Jésus, vol. XIX, p. 180). INDULGENCIA El Papa Pío IX le concedió en el año 1872, una indulgencia de 100 días una vez al día a todos los fieles que usaran alrededor de sus cuellos este emblema piadoso y rezaran un Padre Nuestro, Ave María y Gloria. (Preces et pia opera, n. 219). En un breve de fecha 20 de Junio de 1873 encontramos la respuesta a dos preguntas en referencia al Detente: 1. Como no es un escapulario en el sentido estricto de la palabra, sino mas bien un escudo o emblema del Sagrado Corazón, las reglas generales para el escapulario propiamente llamado, no son aplicable a él. Así que no necesita ni una bendición especial, ni una ceremonia o inscripción. Es suficiente con usarlo para que cuelgue en el cuello. 2. La leyenda “Detente, el Corazón de Jesús está aquí” no es requerido. (Beringer, op. cit., n. 953; Preces et pia opera, n. 219.) El Detente significa: ¡Detente Satanás, el Corazón de Jesús está conmigo! Por tanto, llevar el Detente del Sagrado Corazón y llevarlo con fe, es lo mismo que si lleváramos un escudo contra toda clase de peligros. Procurad que los enfermos, niños, ancianos y todo el mundo, lleven de alguna forma, en la cartera o debajo de la almohada, un detente del Sagrado Corazón de Jesús. ESCAPULARIO DE LA VIRGEN DEL CARMEN La palabra escapulario viene del Latín "scapulae" que significa "hombros". Y como el escapulario cae de los hombros es que se le ha dado este nombre. Significado Espiritual del Escapulario: Es evidente que Maria quiere revelarnos de manera especial el escapulario. En las apariciones de Fatima, reporta Lucia, hoy Hermana Maria del Inmaculado Corazón, que en la última, la Virgen se apareció vestida con el hábito carmelita y con el escapulario en la mano. Y recordó que los verdaderos hijos de Ella lo usaran y que lo llevaran con reverencia. También que los que se consagraran a ella lo usaran como signo de dicha consagración. El escapulariotiene 3 significados: 1) El amor y la protección maternal de Maria: el signo es una tela o manto pequeño. Vemos como Maria cuando nace Jesús lo envuelve en un manto. La Madre siempre trata de cobijar a sus hijos. Envolver en su manto es una señal muy maternal de protección y cuidado. Señal de que nos envuelve en su amor maternal. Nos hace suyos. Nos cubre de la ignominia de nuestra desnudes espiritual. Vemos en la Biblia: *Dios cubrió con un manto a Adán y Eva después de que pecaron. (Manto signo de perdón) *Jonás le dio su manto a David: símbolo de amistad. *Elías dio su manto a Eliseo y lo lleno de su espíritu en su partida. *S. Pablo: revístanse de Cristo: vestirnos con el manto de sus virtudes. 2) Le pertenecemos a Ella: Llevamos una marca que nos hace sus hijos escogidos. El escapulario se convierte en el símbolo de nuestra consagración a Maria. Consagración: `pertenecer a Maria'. Reconocer su misión maternal sobre nosotros y entregarnos a ella para dejarnos guiar, ensenar, moldear por Ella y en su corazón. Así podremos ser usados por Ella para la extensión del Reino de su Hijo. En 1950 Papa Pio XII escribió acerca del escapulario: "que sea tu signo de consagración al Inmaculado Corazón de María, lo cual estamos particularmente necesitando en estos tiempos tan peligrosos" 3) El suave yugo de Cristo: "Carguen sobre ustedes mi yugo y aprendan de mí, porque soy paciente y humilde de corazón, y así encontraran alivio. Porque mi yugo es suave y mi carga liviana". (Mt 11:29 30) El escapulario simboliza ese yugo que Jesús nos invita a cargar pero que Maria nos ayuda a llevar. La Promesa: "Este debe ser un signo y privilegio para ti y para todos los carmelitas: quien muera usando el escapulario no sufrirá el fuego eterno". Explicación de la Promesa: Muchos Papas, santos y teólogos católicos han explicado que esta promesa significa que quien tenga la devoción al escapulario y lo use, recibirá de ella a la hora de la muerte: la gracia de la perseverancia en el estado de gracia o la gracia de la contrición. O sea que el escapulario no es una barita mágica que nos libra del infierno, sino que Maria como dispensadora de gracias, nos ayudara a morir en estado de gracia o sea sin pecado grave o morir habiendo tenido un auténtico arrepentimiento. Testimonio: “un sacerdote de Chicago fue llamado para ir a asistir a un moribundo que había estado lejos de su fe y de los sacramentos por muchos anos. El moribundo no quiso recibirlo, ni hablar con él. Pero el sacerdote insistió y le enseñó el escapulario que llevaba. Le pregunto si le permitiría ponérselo. El hombre acepto con tal que el sacerdote lo dejara en paz. Una hora más tarde el moribundo mando a llamar al sacerdote pues deseaba confesarse y morir en gracia y amistad con Dios" El mismo día que S. Simon Stock recibió de Maria el escapulario y la promesa, él fue llamado a asistir a un moribundo que estaba desesperado. Cuando llego puso el escapulario sobre el hombre, pidiéndole a la Virgen que mantuviera la promesa que le acababa de hacer. Inmediatamente el hombre se arrepintió, se confesó y murió en gracia de Dios" Alerta: Los Papas y Santos han muchas veces alertado acerca de no abusar de la promesa de nuestra madre y usar el escapulario como una manera fácil de evadir la conversión. El Papa Pio XI: "aunque es cierto que la Virgen Maria ama de manera especial a quienes son devotos de ella, aquellos que desean tenerla como auxilio a la hora de la muerte, deben en vida ganarse dicho privilegio con una vida de rechazo al pecado y viviendo para darle honor" Es inconcebible que alguien quien deliberadamente comete pecado, contando en la Promesa del Escapulario de salvarlo, moriría usándolo. Vivir en pecado y usar el escapulario como ancla de salvación es cometer pecado de presunción. Testimonio: Durante la guerra civil en 1930, siete comunistas fueron sentenciados a muerte por sus crímenes. Un sacerdote Carmelita trato de prepararlos. Ellos se negaron. Después de tratar de hacerlo a través de visitas amistosas, él les pregunto: ¿me dejarían ponerles unos escapularios? seis de ellos aceptaron pero uno no. Los seis fueron a confesión excepto el séptimo que no quiso usarlo. Cuando llego el momento de la ejecución, el séptimo hombre dijo claramente que él no deseaba hablar con ningún sacerdote, aunque andaba colgado el escapulario. Finalmente, dispararon y siete hombres sin vida cayeron al suelo. Misteriosamente, un escapulario fue encontrado aproximadamente a 50 pasos de los cuerpos. Al revisar los cuerpos, seis hombres murieron con el escapulario, menos el séptimo. El Beato Claudio de Colombiere (director de St. Margarita Maria) nos explica: 'tu preguntas ¿y si yo quisiera morir con mis pecados?, yo te respondo, `entonces morirás en pecado' pero no morirás con tu escapulario". El Privilegio Sabatino: (sábado) Este privilegio se basa en una bula o edicto que fue proclamada por el Papa Juan XXII en Marzo 3, 1322. Este privilegio le fue anunciado en una aparición que el Papa recibió de la Virgen y consiste en la liberación del purgatorio el primer sábado (día que la Iglesia ha dedicado a la Virgen) después de la muerte a través de una intercesión especial de la Virgen. Condiciones: (para que aplique este privilegio) 1) que usen el escapulario con fidelidad 2) observar castidad de acuerdo al estado de vida 3) rezo del oficio de la Virgen (oraciones y lecturas en honor a la Virgen) o rezar diariamente 5 décadas del rosario, es decir 1 rosario completo. El Papa Pablo V confirmo en una proclamación oficial que se podía ensenar acerca del privilegio sabatino a todos los creyentes. Imposición del Escapulario: El primer escapulario debe ser bendecido por un sacerdote e impuesto por el mientras dice: "recibe este escapulario bendito y pide a la Virgen Santísima que por sus méritos, lo lleves sin ninguna mancha de pecado y que te proteja de todo mal y te lleve a la vida eterna" San Alfonso Liguori: "heréticos modernos se burlan del escapulario como si fuera algo anticuado y sin sentido" Pero todos sabemos que muchos Papas lo han aprobado y recomendado. Gregorio X fue enterrado con su escapulario. 600 años más tarde cuando abrieron su tumba, su escapulario estaba intacto. S. Alfonso Liguori y S. Juan Bosco: tenían una especial devoción a la Virgen del Carmen y usaban el escapulario. Cuando murieron los enterraron con sus vestiduras sacerdotales y con su escapulario. Muchos anos después cuando abrieron sus tumbas encontraron que todo era ceniza, excepto sus escapularios, estaban intactos. Recordemos si, que el escapulario es un signo del amor y protección maternal de Maria y de su llamada a una vida de santidad y sin pecado. Usar el escapulario es una respuesta de amor a la Madre que vino a darnos un regalo de su misericordia. Debemos usarlo como recordatorio que le pertenecemos a ella, que deseamos imitarla y vivir en gracia bajo su manto protector.