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PREVENCIÓN DEL CÁNCER: Cáncer de Cérvix (Cáncer del cuello uterino o de la matriz); Cáncer de seno (cáncer de mama); Cáncer de Testículo; Cáncer de Próstata 1. Generalidades El cáncer es un crecimiento anormal de células, caracterizado por ser un crecimiento incontrolado y persistente, con la capacidad de invadir tejidos normales vecinos o a distancia. El cáncer en sus etapas iniciales no se ve, ni se siente, pero puede propagarse y avanzar hasta ocasionar la muerte de la persona si no se detecta y se trata a tiempo. El cáncer puede ser benigno o maligno. El cáncer benigno se caracteriza por un crecimiento lento y menos invasivo que el maligno, tiene límites definidos y no reaparece una vez es extirpado; por el contrario, el cáncer maligno presenta por lo general un crecimiento rápido, con invasión progresiva de los tejidos y de los ganglios vecinos, así como la invasión a distancia y a reproducirse luego de ser extirpado. 2. Objetivos de aprendizaje Conocer los tipos de cáncer más frecuentes en la población general. Conocer los factores de riesgo asociados a la generación del cáncer. Reconocer los síntomas más frecuentes de los principales tipos de cáncer. Conocer la metodología de la autoevaluación para identificar precozmente los signos y síntomas de algunos cánceres. Tomar conciencia de la importancia que tiene la realización de exámenes médicos periódicos para prevenir la aparición del cáncer. 3. Causas generales Las causas del cáncer son múltiples y variadas, algunas conocidas y otras no, pero no hay duda que en la inducción del cáncer es importante la constitución genética del individuo. Múltiples teorías e hipótesis se han hecho al respecto y actualmente ya se tiene conocimiento sobre algunas sustancias cancerígenas (sustancias con capacidad para inducir el cáncer) involucradas en el origen de algunos tipos de cáncer. Por ejemplo: Factores genéticos: El hecho de que no todos los seres humanos que se exponen una misma dosis de una sustancia cancerígena desarrollan cáncer, indica que los factores inherentes a las personas intervienen de manera importante en el proceso de producción del cáncer. Existen algunos trastornos familiares y genéticos que pueden aumentar el riesgo de cáncer, pero no se conoce aún el mecanismo por el cual este se produce. Se ha demostrado que las hijas de mujeres que presentan cáncer de seno (mama), tienen de tres a cinco veces más probabilidad de sufrir este tipo de cáncer que las mujeres que no tienen este antecedente familiar. Factores raciales: Los negros y otros grupos raciales con piel muy pigmentada están protegidos del melanoma y de otros cánceres que son inducidos por la exposición a los rayos solares. Virus: Se ha encontrado que algunos virus pueden causar cánceres en los seres humanos. Hormonas sintéticas: Juegan un papel importante en la generación y desarrollo de algunos cánceres benignos y malignos de la mama (seno o pecho), del útero, del endometrio (parte interna del útero), del ovario, de la próstata, del testículo, de la cápsula de las glándulas suprarrenales (glándulas ubicadas sobre el polo superior de los riñones), de la tiroides y de la hipófisis (glándula ubicada en la base del cerebro), entre otros. Agentes químicos, entre estos, tenemos: Se ha encontrado que los aceites vegetales producen cáncer en los tejedores de algodón. Los derivados del alquitrán figuran a la cabeza de las principales sustancias alto potencial para inducir el cáncer. Estas sustancias se hallan en abundancia en el humo del tabaco, en el aire contaminado y en gran cantidad de polvos y humos industriales. Un ejemplo, lo constituye el cáncer del escroto (bolsa que contiene los testículos) en los deshollinadores, el cual es debido al alquitrán que se encuentra en el hollín. El consumo de carnes y pescados ahumados favorece la generación de cáncer en el aparato digestivo, como consecuencia de la ingestión de los carburos producidos durante el proceso de ahumado. Sustancias tales como el cromo, el cobalto, el níquel, el selenio, el berilio y el hierro pueden generar cáncer. El arsénico puede producir cáncer en los obreros que lo manipulan y en los cultivadores de uva que utilizan insecticidas que contienen esta sustancia. Ciertos colorantes que contienen anilinas pueden producir cáncer de vejiga. El alcohol facilita la aparición del cáncer en laringe, esófago, cavidad bucal y faringe. Así mismo, el hábito del cigarrillo conlleva a la generación de cáncer de pulmón, laringe, esófago, vejiga y cuello uterino (cérvix uterino), entre otros. Irradiaciones: La piel sensible de ciertos individuos que trabajan expuestos al sol, puede sufrir cánceres múltiples de la piel, cuando la exposición es prolongada y sin ningún tipo de protección. Los rayos X pueden producir cáncer tanto en los médicos que los manipulan como para los pacientes tratados por ellos. Sin embargo, este tipo de cáncer es poco frecuente hoy en día como consecuencia del uso de elementos y técnicas de protección que se usan actualmente. Los rayos gamma y los neutrones pueden inducir la aparición de leucemia. En conclusión puede decirse que el humo del cigarrillo, el de las fábricas, el de los tubos de escape y el de los aparatos de calefacción contienen sustancias cancerígenas (sustancias capaces de inducir el cáncer). Estas sustancias también pueden encontrarse en los pescados, carnes y embutidos (carnes frías enlatadas), así como las carnes y pescados asados, principalmente cuando la grasa cae sobre el carbón y produce llamas. Los estrógenos sintéticos (hormonas) son sustancias cancerígenas comprobadas. Según diferentes estudios y observaciones, el ambiente y los factores climáticos intervienen en la distribución de la frecuencia y evolución del cáncer, al igual que el grado de desarrollo económico de las regiones. En cuanto a si el cáncer se hereda o no, los estudios no son concluyentes y por lo tanto no hay una respuesta clara al respecto. Se ha demostrado que existe cierta susceptibilidad de algún tejido u órgano que puede presentarse entre los miembros de una misma familia y que hace que algunos tipos de cáncer sean más frecuentes en determinados grupos familiares. 4. Signos y síntomas generales Las manifestaciones clínicas del cáncer son variadas y dependen fundamentalmente del órgano o sistema afectado. Existen algunos síntomas o signos que alertan sobre la posible presencia de un cáncer y que hacen que la consulta médica sea obligatoria. Entre estos signos y síntomas tenemos: Cambios en el funcionamiento habitual de los intestinos o vejiga. Estreñimiento o diarrea crónicos en personas mayores de cuarenta años de edad. Lesiones costrosas o ulcerosas de la piel, persistentes a pesar de tratamiento médico adecuado. Flujo o pérdida anormal de sangre por vagina, recto o en la orina. Abultamiento indoloro y persistente de los senos o en cualquier otra parte del cuerpo. Pérdida inexplicable (sin causa aparente) de peso. Cambios en una verruga o lunar. Dolor de garganta o dificultad al tragar persistentes Tos o ronquera persistentes. Manchas blanquecinas indoloras persistentes en los labios, las encías o la boca. Cualquier otro signo o síntoma no usual que nos llame la atención. Esté alerta, si descubre alguna de las anteriores señales de peligro, usted deberá consultar al médico inmediatamente. 5. ¿Cómo cáncer? prevenir el La mejor manera de prevenir el cáncer es viviendo armónicamente, huyendo de los excesos emocionales, alimenticios y de trabajo; dedicando suficiente tiempo al descanso y al ejercicio; evitando las drogas y los tóxicos (alcohol, cigarrillo, café y el exceso de medicamentos) y consumiendo una dieta balanceada. El cáncer es curable si se detecta y se trata a tiempo. Para su tranquilidad ponga en práctica los siguientes consejos en relación con lo que usted puede hacer para prevenir el cáncer: No fume: Una forma de disminuir el riesgo de sufrir de cáncer de pulmón, laringe, esófago, vejiga y cuello uterino, entre otros, es evitando el consumo de cigarrillo; es por ello que en la actualidad millones de personas en el mundo diariamente dejan de fumar. No se sobreexponga al sol sin la debida protección: Con el fin de evitar la aparición de cáncer de piel protéjase de la radiación solar mediante el empleo de lociones protectoras (antisolares), sombreros de ala ancha, sombrillas, entre otros. Alimentación balanceada: Con el fin de prevenir el cáncer de mama, endometrio, esófago, estómago, colon y recto, siga las siguientes recomendaciones en su dieta: Consuma frutas y vegetales frescos, alimentos que contengan fibra, pollo, pescado, leche descremada, derivados lácteos bajos en contenido de grasa y aceites vegetales. Disminuya el consumo de bebidas alcohólicas, carnes rojas, el exceso de sal y comidas asadas o ahumadas. Practique periódicamente el examen de la cavidad oral: Examínese mensualmente usted mismo y consulte periódicamente a su médico y odontólogo. Practique mensualmente el autoexamen de piel, mama y testículo: Examínese usted mismo cada mes para descubrir el cáncer a tiempo y poder realizar un tratamiento efectivo. Hágase una citología cérvico-uterina (citología vaginal) regularmente: La citología vaginal es un examen rápido, sencillo e indoloro, y puede descubrir el cáncer cérvico-uterino antes de que aparezcan los síntomas y cuándo aún es curable la enfermedad. Practíquese chequeos médicos periódicos: El chequeo médico completo periódicamente le permite conocer su estado de salud. En las personas mayores de cuarenta años el chequeo médico deberá hacerse anualmente. Recuerde, el cáncer es curable si de detecta y se trata a tiempo. La clave está en la acción, por ello esté atento(a) a las señales de peligro y consulte a su médico si descubre alguna de estas señales. A continuación se describen los tipos de cáncer más comunes que aquejan a la población general. 6. Cáncer de Cérvix (Cáncer del cuello uterino o de la matriz) 6.1 Generalidades El cáncer de cérvix también constituye un problema de salud pública debido a que continua siendo uno de los cánceres más frecuentes en la población general. 6.2 Factores de riesgo asociados con la generación de cáncer de cérvix Las mujeres que tienen un mayor riesgo de desarrollar cáncer de cérvix son aquellas que: Iniciaron a temprana edad de las relaciones sexuales (antes de los 15 años) Han tenido varios compañeros sexuales (dos o más). Han tenido gran número de hijos (más de cinco). Han sufrido infecciones ginecológicas y tienen malos hábitos higiénicos. Han tenido una mala atención sanitaria después del parto. Tienen el hábito de fumar. 6.3. Manifestaciones clínicas No existen manifestaciones clínicas en las etapas iniciales del cáncer de cérvix. Los síntomas aparecen cuando el cáncer se encuentra en etapas avanzadas, desafortunadamente cuando éste es irreversible y difícil de curar. En las etapas iniciales del cáncer de cérvix el único signo que se presenta es el relacionado con cambios en la citología vaginal. En las etapas avanzadas del cáncer de cérvix pueden presentarse los siguientes síntomas: 6.4 Cómo prevenir la enfermedad? La mejor manera de prevenir el cáncer de cérvix es evitar y controlar los factores de riesgo asociados que incrementan el riesgo de sufrirlo y la realización periódica de la citología vaginal. Control de factores de riesgo asociados: Inicie sus relaciones sexuales después de los 20 años de edad. Evite tener relaciones sexuales con varias personas (evite la promiscuidad sexual). Limite el número de hijos. Esté atenta a cualquier signo o síntoma de infección ginecológica y consulte al médico oportunamente. Procure mantener buenos hábitos higiénicos. Procure que sus partos siempre sean atendidos en instituciones de salud idóneas para tal fin. Si usted es fumadora, deje el hábito de fumar, y no lo es, evite el comenzar a fumar. 7. Cáncer de seno (cáncer de mama) 7.1 Generalidades El cáncer de seno constituye un problema de salud pública debido a que continua siendo uno de los cánceres más frecuentes en la población general. El cáncer de mama es más común en las mujeres que en los hombres. Los hombres que presentan alteraciones en el metabolismo de los estrógenos presentan un riesgo elevado para el cáncer de mama. Debido a la frecuencia más o menos baja de cáncer de mama en los hombres casi no se ha estudiado sus causas. 7.2 Factores de riesgo asociados con la generación de cáncer de seno Edad: El riesgo aumenta con la edad de la mujer. Historia menstrual: La menstruación temprana, la menopausia tardía (después de los 55 años de edad) y la irregularidad del ciclo menstrual parecen ser factores que aumentan el riesgo. Antecedentes familiares: Las mujeres con madres o hermanas con antecedentes de cáncer de seno tienen mayor riesgo de sufrir la enfermedad que aquellas que no tienen estos antecedentes familiares. Antecedentes personales de enfermedades benignas de los senos aumentan el riesgo de sufrir de cáncer de seno hasta cuatro veces. Dieta rica en grasas animales ejerce cierta influencia en el metabolismo de los estrógenos después de la menopausia y por lo tanto incrementar el riesgo de cáncer de seno. Radiaciones Ionizantes (rayos X, gamma, entre otros) son un riesgo importante en la generación del cáncer de seno. 7.3 Manifestaciones clínicas Nódulos o protuberancias (abultamientos) en los senos. Cambios en el contorno de los senos, tales como hinchazón, hoyuelos. Cambios en el pezón. Secreción de líquidos o sangre por el pezón. Retracción del pezón o de alguna otra parte del seno. 7.4 Cómo prevenir la enfermedad? La mejor forma de prevenir el cáncer de seno es practicándose mensualmente el autoexamen del seno y consultando al médico periódicamente y ante la presencia de alguno de los síntomas descrito en el ítem “Manifestaciones Clínicas”. El autoexamen del seno deberá realizarse mensualmente, una semana antes de la menstruación, momento en el cual los senos no se encuentran congestionados ni dolorosos. Después de la menopausia (cierre de edad) examínese los senos el primer día de cada mes. 7.5 Autoexamen de los senos A continuación explicaremos la técnica para la realización del autoexamen de los senos: Durante el baño: Examine sus senos durante el baño, deslizando sus manos sobre la piel mojada. Parada debajo de la ducha, coloque la mano derecha detrás de la parte posterior de su cabeza y con los dedos de la mano izquierda examínese suavemente el seno derecho, en su totalidad. Repita el mismo procedimiento para el seno izquierdo. En posición de Píes: 1). Párese frente de un espejo grande que le permita visualizar bien la mitad superior del cuerpo, con la mitad superior del cuerpo desnudo y con los brazos extendidos a los lados de éste, inspeccione sus senos buscando cambios en el contorno de éstos. 2). Luego, coloque sus manos a lado y lado de la cintura y observe nuevamente el contorno de los senos, buscando cambios en éste. 3). Por último, suba lentamente los brazos y coloque sus manos entrelazadas por detrás del cuello, llevando los codos hacia atrás y observe cualquier cambio en el contorno de cada seno. En posición acostada: Acuéstese boca arriba sobre una superficie dura, coloque una almohada medianamente gruesa debajo de la paleta (omoplato) del lado derecho y la mano derecha debajo de la cabeza. Con los dedos en extensión (planos) de la mano izquierda presione suavemente el seno derecho, en forma circular, de afuera hacia el pezón, buscando la presencia de nódulos o engrosamientos. Finalmente presione el pezón y si sale cualquier tipo de líquido a través de éste consulte a su médico. Repita este mismo procedimiento para el seno izquierdo. 8. Cáncer de Testículo 9.1 Generalidades El cáncer de testículo viene cobrando interés desde el punto de vista de la salud debido a que su frecuencia se ha venido incrementando en la población masculina durante los últimos años. 9.2 Factores de riesgo asociados con la generación de testículo Edades entre los 15 y 35 años. Pubertad precoz (antes de los 15 años) Descenso testicular anormal (criptorquídea). Antecedentes familiares en primer grado [padres y hermanos (as)] de cáncer de testículo o de mama. Raza negra. 9.3 Manifestaciones clínicas Masa pequeña, dura y dolorosa. Sensación de peso en el testículo. Cambio en la consistencia del testículo. Acumulación de líquido o sangré en el testículo. 9.4 Cómo prevenir la enfermedad? La mejor manera de prevenir el cáncer de testículo es la práctica periódica del autoexamen de los testículos. 9.5 Autoexamen de los testículos A continuación le explicaremos como hacerse el autoexamen de los testículos: Examínese mensualmente después de un baño con agua tibia. Desnudo y parado frente a un espejo, observe que no haya hinchazón o abultamiento en la piel del escroto (bolsa en la cual se encuentran los testículos) o en las áreas que lo rodean. Palpe suavemente con ambas manos toda la extensión del testículo buscando cualquier anormalidad. Luego, con los dedos índice, pulgar y medio palpe la superficie por debajo del testículo. Si encuentra alguna anormalidad, consulte a su médico. 10. Cáncer de Próstata 10.1 Generalidades El cáncer de la próstata es el segundo tipo enfermedad maligna más común en los hombres mayores de 50 años y es la tercera causa de muerte por cáncer en los mayores de 55 años. La frecuencia del cáncer de próstata se aumenta con la edad. La frecuencia entre los hombres negros es más elevada que en los hombres blancos, sin que se conozca la razón para esta diferencia. 10.2 Manifestaciones clínicas En etapas tempranas del cáncer no hay síntomas ni signos que orienten a un diagnóstico temprano. Al momento del diagnóstico, un 80% de los casos se encuentran en etapas avanzadas. Las molestias que generalmente se presentan son Ardor para orinar (disuria) Dificultad para orinar y disminución en el calibre del chorro de la orina. Aumento del número de veces que se orina, pero en poca cantidad. Dolor en la región lumbar o en la cadera. Sangre microscópica (que no se ve a simple vista) en la orina. 10.3 ómo prevenir la enfermedad? La mejor manera de prevenir el cáncer de testículo es mediante la realización de un examen médico periódicamente (por lo menos una vez al año), en el cual se incluya un tacto rectal. El tacto rectal es de suma importancia porque permite palpar la próstata y predecir el diagnóstico oportuno del cáncer, lo cual mejora el pronóstico y facilita el tratamiento.