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Centro de Entendimiento con la Naturaleza
Macizo de Peñas Blancas. BOSAWAS
Guía básica sobre bambú
Les agradecemos a los bambúes que sean parte de nuestra vida
Y que hayan devuelto la fertilidad y el agua a los suelos del CEN
Alan Bolt
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Macizo de Peñas Blancas. BOSAWAS
Sobre el bambú
El bambú es una planta que pertenece a la familia Poaceae, de las gramíneas
herbáceas, con la extraordinaria cualidad de ser leñosa. Contiene almidón, sacarosa
desoxidado, grasa, proteínas, silicio en la capa externa y en concentraciones menores resinas,
taninos, cera, sales orgánicas como calcio, potasio, magnesio y manganeso. Puede haber
variaciones con los diferentes tipos de suelo. El bambú está constituida en un 50% por
celulosa y un 30% de lignina, lo cual la hace un buen candidato como materia prima para la
conversión de biomasa en etanol por su alto contenido de celulosa y menor cantidad de
lignina favoreciendo la conversión de la celulosa por la disponibilidad de esta a la hidrólisis.
Los bambúes toleran temperaturas bajo 0°C y hasta 26 °C, aunque se conocen casos de
temperaturas más altas (como en El Cuá y cerca del triángulo minero, donde la cantidad de
agua que cae es mayor que la que pierde por evapotranspiración). En términos de
precipitación se desarrollan en zonas desde 500 mm de lluvia/año, pero prospera mejor y más
rápido desde 1,000 hasta 5,000 mm/año1. Lo anterior muestra un amplio rango de hábitat en
los cuales el bambú se desarrolla.
Los bambúes son plantas extremadamente diversas y económicamente importantes que
crecen en regiones tropicales y temperadas de Asia y América. Se conocen como las
gramíneas más grandes del mundo y se distinguen del resto de ellas por ser perennes, con
sistema de raíces (rizomas) bien desarrollados y con tallos (culmos) en muchas especies
lignificados y fuertes.
En el mundo existe un total de 90 géneros y 1100 especies, que se distribuyen desde los 51°
de latitud norte hasta los 47° de latitud sur y desde el nivel del mar hasta los 4000 metros de
altura en los Andes Ecuatoriales, en el ecosistema llamado páramo2.
Los bambúes más grandes pertenecen a los hábitats húmedos de las selvas nubladas y selvas
bajas tropicales, aunque algunos crecen en hábitats secos como Dendrocalamus strictus de
Asia y Guadua paniculata de América.
En nuestro continente, América, existían originalmente 45 géneros y 515 especies, es decir
la mitad de la diversidad mundial, distribuidas desde los Estados Unidos, a lo largo y ancho
de Centro y Sudamérica, en las Islas del Caribe, hasta el sur de Chile. Desde 1945, cuando
MacLure estableció colecciones en diferentes centros de la United Fruit Co. hasta hoy, el
interés por esta planta se ha incrementado y eso ha provocado que se haya enriquecido el
número de géneros y especies presentes en cada país.
Ese interés se manifiesta en la compra y venta de plántulas y semillas de bambú, con
algunas especies alcanzando el precio de USD 10 por cada semilla; así como en el
1
Judziewicz et al., (1999) y Londoño (2001)
2
Londoño (2002)
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uso de diferentes especies para recuperación de fuentes de agua y suelos, como la
masiva reforestación que se está haciendo en Etiopía, después de 7 años de sequía.
Los bosques en general ayudan a:
Mantener la regularidad de la lluvia
regular el flujo del agua sobre el suelo: ojos de agua, quebradas, ríos y lagos
regular los acuíferos subterráneos,
mantener la humedad atmosférica,
reducir la erosión, la sedimentación y la polución.
Los bosques de bambú cumplen estas funciones, ofreciendo:
alta capacidad de absorción del agua de la lluvia a través de un denso sistema de raíces
que mejora la infiltración.
una espesa corona de follaje que reduce la temperatura bajo ella
restauración y conservación de suelos: una permanente capa de hojas rica en sílice
sobre los suelos, que se mantiene relativamente intacta durante mucho tiempo, - y que
se enriquece continuamente - generando mecanismos de restauración de fertilidad aún
poco estudiados y menos comprendidos, de gran eficiencia. Las especies menores de
Guadua pueden producir y aportar al suelo entre 2 y 4 ton/ha/año de biomasa,
volumen que varía según el grado de intervención del guadual o bambusal. Esta
biomasa constituye entre el 10 y 14% de la totalidad de material vegetal que se genera
en un guadual. La biomasa es importante, ya que contribuye a enriquecer y mejorar
la textura y estructura del suelo. El aporte anual de la biomasa general en especies de
mayor tamaño en pleno desarrollo oscila entre 30 y 35 ton/ha/año
En estudios realizados por otros autores a 8 640 culmos de Guadua angustifolia, el
aporte de biomasa, (que incluye al rizoma, culmo, ramas, hojas caulinares y follaje),
es de 108.67 de toneladas de peso seco por hectárea. La captación de carbono
obtenida en estos experimentos alcanzó la cifra de 33 toneladas al año, lo cual
coincide con lo ya planteado anteriormente de que el bambú puede captar entre 2040 toneladas de carbono por hectárea al año, dependiendo de la especie.
En estudios realizados sobre las pérdidas de suelo ocurridas en cuatro parcelas con
diferentes cultivos agrícolas y forestales, se pudo constatar, durante dos años de
estudios, que en la parcela ocupada por bambú, las pérdidas de suelo fueron mínimas,
con valores inferiores a 0,20 t/ha durante el período de las observaciones. Hubo
diferencias altamente significativas entre las parcelas agrícolas y las parcelas con
diferentes mecanismos de protección de suelos. En la parcela cultivada de forma
tradicional, con monocultivo (café) y sin medidas de conservación de suelos se
perdieron 25,39 t/ha/2 años, durante todo el período de las investigaciones, o sea un
promedio de 12,64 t/ha/año.
En el CEN Peñas Blancas transformó la arcilla pesada rica en hierro y aluminio en un
suelo poroso, suelto, rico en micro organismos, de excelente calidad.
En Colombia ya se vende la micorriza del bambú, empacada al igual que cualquier
fertilizante, como un mejorador de suelos. Las micorrizas del bambú son
notablemente mejores que cualquier fertilizante y si uno cuida el suelo, es una sola
inversión.
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el follaje denso y la capa de hojas secas, conservan la humedad del suelo, facilitando
que su vitalidad, la dinámica de millones de micro organismos diversos, pueda tener
las condiciones adecuadas para prosperar
la densidad de los tallos ayuda a controlar la velocidad de los vientos, algo muy útil
para plantaciones de rubros con poca profundidad en sus raíces y pobre anclaje, como
las diferentes especies de musáceas (guineos, plátanos)o sensibles a los vientos
porque le provocan deshidratación (café)
limpia el agua de quebradas, ríos y lagos, absorbiendo materia orgánica e inorgánica,
impide casi totalmente la erosión cuando se usa como barrera - una excelente barrera
- para detener suelo, enriqueciéndolo con sus micorrizas, con lo que luego se puede
fomentar la fertilidad en cualquier lugar del cultivo
Es con sus diferentes géneros y especies, la planta de más rápido crecimiento. Una de
ella, la Gigantochloa, crece a un ritmo de 1 metro con 6 centímetros cada 24 horas,
cuando se encuentra ya establecida y tiene el suelo adecuado sin que tenga que
crearlo. Así que para programas de reforestación en tiempos de cambio climático, el
bambú es nuestro gran aliado.
El bambú se adapta a condiciones muy duras si se le aprecia. En el CEN El Ocote –
Parque de Rocas y Bosque – se ha adaptado a crecer sobre la roca madre, en apenas
2 cm de suelo. Luego ha ido generando su propio suelo y generando sus mecanismos
para anclarse, retener agua y sobrevivir con excelente salud. Los 3 años de sequía –
del 2013 al 2016 – no lo secaron.
Retención de agua: el bambú ha sido capaz de producir un permanente flujo de agua
de 3 pulgadas en el CEN Peñas Blancas. Tuvimos que construir una laguneta para
retener su agua transparente. Hay especies que sobreviven y prosperan con solamente
500 mm de lluvia al año. Una hectárea de bambú puede almacenar 30 mil 375 litros
de agua, es decir, el agua para 150 personas por día (se asume un consumo promedio
de 200 litros/día/persona3).
Varias especies son excelentes para la construcción de casas, puentes, muebles; otras
son para producir pisos ya industrializados y paneles para paredes; otros son para
producir telas; otros para tejer canastos que se usan para transportar frutas o animales
pequeños; y hay especies que son comestibles.
El carbón de bambú se usa para aparatos electrónicos y para filtros de agua.
Los retoños de bambú de algunas especies constituyen son muy nutritivos y una
fuente de alimentación para millones de personas. Solo Taiwán consume
80.000 toneladas anuales de retoños de bambú, una industria de millones de dólares.
Otra de las cualidades que tiene el bambú es su rápido crecimiento. Según datos del
Centro Agronómico Tropical de Investigación y Enseñanza (CATIE, 2004), su tasa
de crecimiento durante los primeros 30 días alcanza 4 a 6 cm de altura en 24 horas,
el 60% de este crecimiento es durante la noche; después de los 90 cm de altura, el
promedio de crecimiento es de 9 a 11 cm por cada 24 horas. Esto implica una gran
actividad fisiológica que hace que los bambúes sean considerados como un elemento
de notable importancia para el balance de oxígeno y dióxido de carbono en la
atmósfera. Se reporta que la cantidad de carbono retenida en la parte aérea de una
plantación en Huatusco, Veracruz, de Bambusa oldhamii es de 51.3 Mg/ha¯¹.4
3
4
Centro Nacional para el estudio del bambú Guadua. Colombia.
Castañeda et al., (2005: 114)
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Lamentablemente estas cualidades del bambú no le importaban mucho a la gente, ni siquiera
a quienes se beneficiaban de ellas. En Nicaragua los bosques de bambú a las orillas de los
grandes ríos han venido desapareciendo porque las personas los cortan y los queman para
sembrar. Han descubierto que donde hay bambú la tierra es buena para sembrar diversos
cultivos anuales, como arroz, pero en vez de sembrar bambú por todas partes para mejorar
los suelos y poder tener esos cultivos, destruimos los bosques de bambú. La consecuencia de
esa locura es que se ha contribuido a la sedimentación de los ríos y a que se vayan secando.
¿A dónde nos vamos a ir cuando no haya agua?
Su dureza es comparable con la del roble y su ductilidad con la del sauce, con la ventaja que
un bosque de guadua se regenera en sólo 6 años sin necesidad de replantación, mientras que
el roble toma entre 50 y 100 años para desarrollarse. Las fibras exteriores del bambú
especialmente la hacen muy resistente a fuerzas axiales.
La construcción consume la mitad de la energía que los seres humanos utilizan, un 25% el
transporte y el otro 25% la industria. Las empresas urbanizadoras y los arquitectos deben
reflexionar y buscar nuevos sistemas constructivos prácticos, eficientes y sostenibles que no
consuman tanta energía.5
¿Sabía usted del bambú, lo siguiente?
- la primera aguja de gramófono utilizada por Alexander Graham Bell estaba hecha de bambú
- el filamento de la primera bombilla de luz eléctrica desarrollada por Edison estaba hecho
de bambú
- 80 % de la celulosa utilizada en la India para producir papel se obtiene del bambú
- la madera del bambú picado en pedazos se utiliza como alimento del ganado y de los peces
- en la provincia china de Sichuan existen puentes colgantes de 40 metros de longitud
construidos con bambú
5
Sophia y Stefan Behling en su libro Sol Power, La Evolución de La Arquitectura Sostenible.
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- han sido identificadas copas de bambú con adornos muy complejos, que datan de 1500 años,
en total conservación
- hay tipos de bambú en el sur de Francia que han alcanzado hasta 24 metros de altura en sólo
2 meses de vida
- el bambú ha sido utilizado para construir botes y zepelines y aeroplanos y domos geodésicos
- un 70 % de las viviendas de Bangladesh son construidas con bambú
- en Borneo y en las Colinas Naga de la India hay casas comunales de bambú de 30 metros
de longitud (Ref.1)
- Buckminster Fuller, Frei Otto, Renzo Piano, Shoei Yoh, Yona Friedman y Arata Isozaki se
encuentran entre los arquitectos de renombre mundial que han experimentado con el bambú
para construcción de estructuras espaciales
- hacen falta 60 años para reemplazar un árbol de 20 metros, mientras que sólo son necesarios
59 días para reemplazar un bambú de igual altura
- existe en Kioto, Japón en el bello Rakusai Bamboo Park, un Museo del Bambú accesible
por Internet (Ref.3)
- existe en Colombia, en el municipio de Córdoba, un Museo de la Guadua y el Bambú
- en Medellín, Colombia, la infraestructura de la zona cafetalera ha sido construida sobre
todo con bambú y en el año 2013 se construyó una catedral de bambú.
Aprovechamiento y Productividad
La productividad es de entre 1200 y 1350 cañas por hectárea, por año. El proceso de
lignificación tarda entre 4 y 6 años.Existe un retorno de 3 a 5 años (ciclo de cosecha) para
una nueva plantación de bambú (guadual), asumiendo un ritmo de producción sostenido.
Bajo condiciones ideales, el bambú Guadua puede producir un total de 7.000-10.000 culmos
(tallos) por hectárea. Por su parte, algunas especies de Guadua brasileña pueden llegar a
producir hasta 60.000 culmos por hectárea.
A lo largo de su vida, una misma mata puede producir hasta 15 kilómetros de tronco útil de
hasta 30 cm de diámetro.
Desde el punto de vista ecológico y económico puede considerarse a un guadual como un
sistema de producción en el cual se persigue el equilibrio en sus salidas y entradas con el fin
de mantener un rendimiento sostenible.
Durante la cosecha, los tallos son cortados a pocos centímetros por encima del primer nudo.
Para evitar la acumulación de agua de lluvia y subsiguiente putrefacción. Gradualmente, la
reproducción de tallos después de cada cosecha va conformando en el tiempo una masa
(macolla) de rizomas que actúa como base de sustentación de futuros crecimientos.
Información básica de la fisiología y la morfología
El rizoma
El rizoma tiene una gran importancia, no solo como órgano, en el cual se almacenan los
nutrientes que luego distribuye a las diversas partes de la planta, sino como un elemento
básico para propagación del bambú o guadua, la cual se efectúa asexualmente pro
ramificación de los rizomas. Esta ramificación se presenta en dos formas diferentes con
hábitos de crecimiento también diferentes lo que permite clasificarlos en dos grandes grupos
principales y un intermedio, cada uno de los cuales comprenden géneros y especies distintas.
Los bambúes del tipo paquimorfo se distinguen porque sus tallos aéreos se desarrollan en el
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espacio en forma aglutinada o cespitosa, formando manchas; en cambio en los del tipo
leptomorfo, los tallos se presentan en forma aislada o difusa.
En los bambúes del tipo anfipodial, o intermedio, que son pocos, los rizomas presentan una
ramificación combinada de los dos grupos principales.
El tallo de los bambúes de las diferentes especies de guadua está constituido por fibras de
celulosa, como un árbol, pero a diferencia del árbol, su madera está conformada por lignina
y sílica, con una capa muy delgada de Quitina, su porte es esbelto, liviano. Su forma hueca y
sus tallos nudosos lo hacen muy resistente lateralmente. Su resistencia mecánica en el sentido
longitudinal y vertical es muy superior a la del acero común.: 1 tonelada por cm2.
Expuesto a altas temperaturas puede ser fácilmente doblado, manteniendo esa forma
producida artificialmente sin perder ni elasticidad ni solidez. Es también muy inflamable.
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Fuerza Comparativa del Bambú
El bambú es la planta más resistente del reino vegetal. Comparable con el acero en fuerza de
tracción y con el concreto e fuerza de compresión, es único en ese doble sentido. Mientras su
fuerza a la tensión se mantiene igual a lo largo de la vida de la planta, su resistencia a la
compresión se incrementa en el tiempo. La fuerza a la tensión es de 28,000 por pulgada
cuadrada contra 23,000 del acero.
Estudios realizados en Alemania, Holanda y Colombia sobre las propiedades físicas y
mecánicas que determinan la resistencia de las fibras del bambú arrojaron información
contundente acerca de su resistencia a la compresión que superó los 600 kilogramos por
centímetro cuadrado y en tracción superó los 900 kilogramos por centímetro cuadrado. La
densidad básica es de 0,6 a 0,7 gr/cc.
Virtudes y Fortalezas
A guía de orientación se dice que en una parcela de 20x20 m2, en el curso de 5 años se pueden
construir dos viviendas de 8x8 mts. A partir de la guadua cosechada allí. Y cada año a partir
de esa primera cosecha se podrá construir una casa más por parcela.
Un guadual admite la cosecha de nuevos culmos (tallos) cada año. En el caso de los árboles
maderables es necesario esperar entre 10 y 20 años para repetir la cosecha, con el consabido
riesgo de deforestación y de erosión. En contraste, en una plantación de bambú, sólo se
eliminan los tallos utilizados mientras la planta los reemplaza por nuevos tallos.
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En cuanto al crecimiento, los bambúes carecen de tejido cambium y por eso no presentan
crecimiento en diámetro, solamente tienen crecimiento primario o apical que los hace crecer
únicamente en altura muy rápidamente.
Si comparamos con los árboles, los bambúes en general son de rápido crecimiento y de mayor
productividad. Generalmente entre los 4 y 6 años la guadua está lista para ser utilizada y, si
se maneja adecuadamente, una vez establecida, puede ser productiva ilimitadamente. Por lo
general, el ciclo de crecimiento de un bambú constituye una tercera parte del ciclo de un árbol
de rápido crecimiento, y su productividad por hectárea es dos veces la del árbol. Además, los
bambúes emergen del suelo con su diámetro establecido, sin presentar incrementos en
diámetro con el tiempo como sucede con los árboles.
Energía calórica
El bambú produce más de 7,000 kilocalorías por kilogramo, superior a la madera y la mitad
de lo correspondiente al petróleo crudo. El carbón de bambú, como tal, posee un vasto
potencial de aplicación.
Beneficios diversos del bambú para las comunidades, las y los productores
Usos por edad
En función de su tiempo de vida se puede agrupar los usos del bambú de la siguiente forma:
A los 30 días bueno para comer
De los 6 a 9 meses para hacer cestas
De los 2 a 3 años para elaborar tabiques y laminados
De 3 a 6 años para construcción.
A los 6 años el bambú comienza a perder vitalidad y puede morir un tallo o culmen a los 12
años.
Diversificación de productos.
El bambú tiene un papel vital para la vida socio-económica de las comunidades que se
benefician de su utilización y un impacto ambiental en el devenir de las mismas:
Es el mejor aliado para conservar y restaurar las fuentes de agua a corto plazo;
es un recurso natural renovable a corto plazo con relación a otras maderas,
biodegradable, con más de un millar de usos, con una enorme diversificación de
productos, además materia prima de bajo costo para vivienda y construcción;
es un recurso eficiente para bajar la temperatura;
con él se puede hacer mobiliario de todo tipo, cercas para el ganado; herramientas
agrícolas; implementos de cocina; instrumentos musicales; artesanía; bastones;
medicinas contra el asma, tos y enfermedades del riñón, entre otras; materia prima para
elaboración de juguetes, perfumes y papel;
es fuente de alimentación para seres humanos y animales;
ha sido probado como preservativo de alimentos e inhibidor de crecimiento bacteriano;
desodorante ambiental; deshumidificador;
es un excelente combustible vegetal, etc.
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Bambú como alimento
Uno de los recursos renovables de bambú son los brotes comestibles de bambú que brotan
del rizoma. En realidad, los pandas había descubierto la bondad de las hojas y brotes de
bambú en su dieta siglos antes de que el género humano lo hiciera.
Después de lluvias de Mayo-Junio, y a veces hasta Julio-Agosto se pueden encontrar los
brotes de bambú que brotan de bambú principal. Estos se comen como alimento y se deben
cortar antes de que crezcan un pie de altura. En Asia e Indonesia los brotes de bambú son una
hortaliza tradicional y una delicadeza, sin embargo, está ganando popularidad en otras
regiones también.
Propiedades del bambú
Los brotes de bambú no sólo añaden variedad y sabor a un plato, hay muchos beneficios para
la salud, ya que son muy bajos en calorías y ricos en comestible, una taza de brotes tiernos
cortados proporciona solo 13 calorías.
Debido a su alto contenido en fibra dietética, incluso el estreñimiento crónico puede ser
curado. También ayuda a la buena digestión y estimular el sistema inmunológico.
Los brotes de bambú son ricos en potasio. Mantienen los niveles de colesterol bajo control,
así como previenen el cáncer de colon. El potasio también es bueno para bajar y mantener la
presión arterial.Son una buena fuente de lignanos y otros antioxidantes que tienen
propiedades anti-cancerígenas, anti-bacterianas, anti-hongos y anti-virales.
Además de ser una buena fuente de selenio, los brotes de bambú tienen 17 aminoácidos y
gran cantidad de minerales, incluyendo calcio, magnesio, fósforo, potasio, sodio (muy alto
en contenido de sodio), cobre, manganeso y hierro.
El jugo de brotes tiernos de bambú se utiliza para limpiar las heridas infestadas por larvas,
llagas y úlceras. El jarabe hecho con jugo de bambú y azúcar morena de palma se usa para
limpiar la placenta después del parto. Un estudio austriaco encontró que el bambú es una de
las plantas uterotónicos.
Los brotes de bambú son buenos para los problemas respiratorios, trastornos menstruales y
lombrices. Las hojas del bambú son ricas en ácido cianhídrico y benzoico. Una decocción
hecha con hojas tiernas se utiliza para tratar la diarrea.
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Para preparar los brotes para cocinarlos
Las hojas exteriores o la vaina de brotes de bambú tiene que ser retiradas y la parte interior
de color crema y tierno se utiliza como ingrediente alimentario. El resultado se corta en
rodajas finas. Las rodajas se remojan primero en agua durante unas pocas horas, y luego se
hierve sin cubrir por lo que los compuestos que causan amargura se disipan en el aire.
Después de hervirlas, se saca el agua y se hierven de nuevo en agua dulce durante 5 minutos.
Los brotes de bambú están listos para usar en sopas, ensaladas y frituras y también se pueden
almacenar en frío.
Cualidades del bambú para construcción de casas, puentes, muebles y
artesanías menores
Determinación de la edad del tallo
 La dimensión o el diámetro de un tallo de bambú no son criterios para la
determinación de su edad, como sucede con los árboles. En el caso del bambú los
criterios son los relativos a cambios o características que se presentan en la planta
periódicamente, algunos de los cuales pueden variar de una especie a otra; los más
conocidos hasta hoy son los siguientes:
 Tallos de 4 años son verdes, con poca o ninguna pelusa, en lugares fríos a parecen en
la superficie de los internudos, manchas oscuras que salen fácilmente al sobarlas. Aun
en tallos de mayor edad se ven manchas amarillas sobre el verde que es signo de
madurez.
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 Tallos de 3 años generalmente no tienen brácteas pero si alguna permanece esta
descolorida y rota, sin caer por algo que la obstruye. La pelusa ya no es uniforme pero
está jaspeada con manchas más oscuras y no se cae al sobarla con el dedo. Los tallos
de uno a dos años pueden aun retener la brácteas en ciertos puntos y en tal caso están
muy secas y de un color oscuro, algunas veces erectas y otras colgando de los nudos,
que se desprende al sobarla ligeramente con el dedo. Las ramas de los lados están
presentes en los nudos.
 Los tallos nuevos o menores de un año producidos en las últimas lluvias se ven
frescos, con brácteas aun adheridas a los nudos y los entrenudos están cubiertos con
una pelusa blanca cerosa que se desprende con tocarla. Usualmente estos tallos tienen
pocas o ninguna rama.
 Otro sistema para determinar la edad del bambú, por medio de las cicatrices que se
forman en las ramas cada vez que le bambú renueva sus hojas, lo que sucede cada
año o año y medio. Cuando las hojas s caen, nuevas ramas y hojas se desarrollan en
la parte más próxima al nudo de donde se desprendieron las primeras
 La posición del bambú en la mata. Generalmente la mata de bambú del tipo
paquimorfo o cespitoso, se desarrolla hacia la periferia por lo tanto, los bambúes
localizados más hacia el centro de la mata, están más maduros que los de la periferia.
 El contenido de humedad. Los bambúes inmaduros tienen un contenido inicial de
humedad mayor que los maduros, el contenido de humedad en las diferentes partes
del tallo es casi el mismo para bambúes inmaduros, pero en los maduros la humedad
decrece con la altura del tallo.
 Dureza externa. La superficie de los bambúes inmaduros es blanda y la de los
maduros dura.
 El color de los bambúes inmaduros es oscuro, el de los maduros es más claro.
 El bambú es llamado acero vegetal por sus cualidades físicas y mecánicas. Una vara
de bambú equivale a una vara de acero de la mejor calidad.
 En Nicaragua nos conviene por sus cualidades antisísmicas y su rapidez para crecer.
4 años después de su brote se puede usar. El Gigantochloa puede alcanzar hasta 35 m
de altura.
 Tenemos 13 especies introducidas en 1945 y unas 4 especies propias, del género
Guadua, las mejores para la construcción de espacios privados o públicos
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Especies de Nicaragua
 Guadua Angustifolia
Esta especie extraordinariamente útil para fines constructivos, constituye la punta de lanza
de la construcción con bambú. Los mejores ejemplares de esta especie crecen en alturas
ubicadas entre los 900 y los 1200 metros. En Nicaragua se encuentra una población no
cuantificada en los departamentos de Matagalpa y Jinotega, hasta donde sabemos.
Guadua Aculeata
Esta especie se encuentra ahora en pocos ríos de Jinotega y sus cercanías. Hay un bosquete
maduro de esta especie en el río Los Pedernales, cerca de El Cuá. Se ha visto en las orillas
del río Bocay. El Tumón, Río Grande de Mataagalpa y del río Babaska.
 Guadua Amplexifolia
Esta especie es la más abundante en los ríos de la RAAN y el Norte de la RAAS.
 Carrizo, una Chusquea, que se encuentra como parte del sotobosque de la Nebliselva.
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De las condiciones para el cultivo del bambú
El mejor desarrollo de la Guadua Aculeata se ha encontrado en las orillas de los ríos, en el
trópico basal o zonas bajas, de unos 300 a 1,000 msnm, en donde ha sido – hasta donde
sabemos - con la Amplexifolia, la especie dominante. En cambio la Guadua angustifolia, se
ha encontrado más bien – en Colombia – en la zona de cafetales de altura, en sitios con
altitudes entre 1.300 y 1.500 m.s.n.m. Dicho desarrollo está representado en una mayor
cantidad de individuos con diámetros elevados y en una mejor resistencia mecánica de la
madera.
Cuando la Guadua Angustifolia se siembra en zonas con alturas superiores a 1.500 msnm
tiene un desarrollo más lento, debido a las temperaturas bajas (frío) por espacios de tiempo
prolongados. A la vez, para esta Guadua, son poco adecuados los sitios con alturas por debajo
de los 1.000 msnm, que muestran temperaturas elevadas (mayores a 26 °C), lo que ocasiona
la pérdida de agua de la lámina foliar y del suelo y, por consiguiente, un retraso en el
desarrollo y crecimiento. La humedad del suelo es un elemento esencial para el desarrollo de
esta especie.
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Hoy en día, con el cambio climático, hemos visto que en algunas zonas altas la pérdida de la
humedad se ha incrementado por las masas de aire caliente y el aumento de la luminosidad.
En general, la lluvia – poca o mucha, bien o mal distribuida a lo largo del año - es el factor
que más afecta el desarrollo y crecimiento de casi todos los bambúes.
Por lo general los suelos francos, fértiles y de buen drenaje, ubicados en valles y zonas
onduladas de montaña son los de mejor desarrollo del bambú. En suelos muy pesados y
arcillosos, no crece muy bien la planta.
No todas las especies de bambú tienen la misma demanda de lluvia, una de las que toleran y
tienen buen crecimiento a pesar de la poca pluviosidad, es la Otatea acuminata, de México,
crece en suelos calcáreos y clima seco. De Asia, la Bambusa vulgaris y vulgaris variegata,
tienen bastante resistencia a la poca pluviosidad y cuando hace falta, pierden la hoja, para
retoñar cuando reaparece la humedad.
En el CEN los bambúes han tomado más tiempo para crecer y especies altas y gruesas no han
desarrollado todavía todo su potencial, porque el suelo había sido destruido por la ganadería
extensiva y cuando los sembramos lo que había era arcilla pesada y ácida, un lodo pegajoso
que dificultaba enormemente el crecimiento de las raíces y que en el verano, al rajarse,
dañaba a las plantas. En realidad le dimos a los bambúes una tarea suicida: componer los
suelos donde estaban plantados, devolviéndoles la fertilidad, retener agua y proteger los
suelos alrededor con sus hojas ricas en sílice. Sin embargo, no solamente han sobrevivido,
sino que han cambiado todo.
En el CEN, a unos 1,100 msnm, la Guadua Angustifolia es la que más ha tenido problemas
de crecimiento. Las otras especies están creciendo muy bien. Pero, de acuerdo a la
experiencia, en la medida en que vaya transformando el suelo, va a crecer mejor y más
rápidamente.
Reproducción
Además de la reproducción por semilla, existen métodos vegetativos, lo que incluye el cultivo
de tejidos en laboratorio. En el caso de las semillas, por experimentos realizados, se encontró
que semillas con la capacidad germinación de 56 por ciento, que habían sido guardadas en
tinas selladas durante 1, 2 y 3 años, mostraron al cabo de este tiempo, una capacidad
germinación de 54%, 43% y 5% respectivamente. Pero cuando se guardaron en sacos de yute
no se obtuvo germinación alguna después de un año. Antes de guardarse las semillas por uno
o dos años, debe protegerse contra insectos. Una forma es guardar la semilla en recipientes
bien sellados con ceniza y chile seco.
La propagación de los bambúes paquimorfos (los que forman macolla) puede realizarse por
cualquiera de los siguientes métodos:
1. Por trasplante directo
2. Por rizoma y parte del tallo
3. Por rizoma sólo
4. Por segmentos del tallo
Alan Bolt
Centro de Entendimiento con la Naturaleza
Macizo de Peñas Blancas. BOSAWAS
Por trasplante directo
En este caso el propágulo está constituido por el tallo completo con ramas, follaje y rizoma,
que es trasladado y sembrado en el sitio correspondiente, tratando de conservar las diversas
partes lo más intactas posible. Este sistema da el más alto grado de éxito tanto por el
porcentaje de supervivencia como del subsecuente desarrollo. Dado el esfuerzo que implica
sacar los tallos con sus raíces, se suele emplear este sistema solo cuando se desea trasplantar
un número muy pequeño de tallos con fines ornamentales.
En cuanto la preparación del material es de gran importancia al separar el rizoma del bambú
madre, cortar la parte más delegada del cuello con el fin de que la superficie cortada tenga la
menor área posible y sellar las heridas con Lechada de cal o con Caldo bordelés, con la
ventaja de que el tejido en este punto tiene una gran resistencia a los ataques de hongos,
bacterias e insectos. Se recomienda obtener los propágulos de la periferia de la mata, que son
los mejores para lograr buenos resultados.
Por rizoma y parte del tallo
Este sistema presenta mayores ventajas sobre el anterior, en cuanto se refiere a economías de
material, transporte, facilidad de preparación y de obtención. Tradicionalmente es el método
preferido para la propagación de ciertas especies de bambúes, los propágulos deben
prepararse de tallos que tengan en lo posible un año de edad y nunca mayores de dos años,
siendo necesario que mantengan una porción del rizoma al menos con una yema, como
mínimo cuidando de no lastimarla en el momento de plantarla. El culmen o tallo debe ser
cortado a un metro del suelo, dejando el sello del entrenudo en el extremo superior, para que
no entre el agua.
El éxito de este método depende a) del suelo en que vamos a sembrar (debe ser profundo y
arenoso); de la viabilidad del rizoma utilizado (debe tener al menos una yema de crecimiento)
y de la época del año en que se siembre (debe llover).
Si los rizomas se toman de plantas jóvenes y saludables y se siembra simultáneamente con
la iniciación de las lluvias, puede esperarse éxito; pero si los rizomas son tomados de viejas
plantas y sembrados antes de las lluvias resultará un completo fracaso. El grado de éxito es
variable, pero puede ser del 100%.
Por rizoma
El éxito de este método depende a) del suelo en que vamos a sembrar (debe ser profundo y
arenoso); de la viabilidad del rizoma utilizado (debe tener al menos 2 yemas de crecimiento)
y de la época del año en que se siembre (debe llover).
Si los rizomas se toman de plantas jóvenes y saludables y se siembra simultáneamente cola
iniciación de las lluvias, puede esperarse éxito; pero si los rizomas son tomados de viejas
plantas y sembrados antes de las lluvias resultará un completo fracaso. El grado de éxito es
variable, pero puede ser del 100%.
Los rizomas deben tomarse de la periferia de la planta y deben sellarse las heridas para evitar
infecciones.
Alan Bolt
Centro de Entendimiento con la Naturaleza
Macizo de Peñas Blancas. BOSAWAS
Por entrenudos o segmentos del culmen
En este caso que el propágulo está constituido por una sesión completa del tallo de uno o dos
años de edad, que tengan dos nudos con yemas o ramas. El entrenudo que se va a sembrar
debe quedar sellado en sus extremos Las ramas generalmente se cortan hasta 30 centímetros,
de longitud. Estos entrenudos pueden ser sembrar verticalmente, acostados o en ángulo y
deben tener al menos un nudo bien cubierto.
Algunos bambúes del tipo paquimorfo no responden favorablemente a este método de
propagación. Uno de los sistemas de cultivo del bambú empleando segmentos del tallo, que
el CEN ha experimentado con buenos resultados consiste en sembrar un entrenudo haciendo
un corte en medio para rellenar de agua el interior y seleccionando las mejores ramas que
salen de los nudos.
Propagación de bambúes del grupo Leptomorfo
La propagación vegetativa de los bambúes del grupo leptomorfo puede realizarse por uno de
los siguientes métodos:
1. Por trasplante directo.
2. Por tallo con raíces y rizoma.
3. Por cepa con raíces y rizoma.
4. Por rizoma.
Por trasplante directo
El proceso de trasplante directo del grupo leptomorfo es similar al paquimorfo, con la
diferencia de que en este caso, el rizoma debe ser cortado en dos partes. La planta puede ser
podada antes de cortar las raíces o inmediatamente después, para disminuir la pérdida de agua
a través de las hojas. Es aconsejable dejar tanto follaje como sea posible, proteger el
propágulo del sol y regarlo.
Por tallo con raíces rizoma
Se utilizan en este método tallos jóvenes nacidos en el mismo año o en el anterior. Se prefiere
la utilización de tallos grandes pero los pequeños también pueden ser usados. Se dejan las
ramas en varios nudos, removiéndose la parte superior del tallo. El rizoma del tallo debe ser
de color amarillento, joven, vigoroso y portador de buenas yemas. No deben usarse rizomas
viejos. La longitud de los rizomas debe ser de 40 a 60 centímetros, con aproximadamente 10
nudos y yemas. Las raíces fibrosas del tallo y rizoma deben dejarse. El rizoma debe cortarse
con serrucho o sierra. Debe evitarse corte con hacha o machete para no dañar las yemas.
Cepa con raíces y rizoma
En este caso el tallo no tiene ramas y se cortan de una longitud de 30 centímetros. El
procedimiento es igual han indicado en el párrafo anterior.
Mata joven completa con raíces y rizoma
Este procedimiento se usa con el bambusoides, una especie de bambú corredor, excelente
para la conversación de suelos y humedad.
Alan Bolt
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Macizo de Peñas Blancas. BOSAWAS
Por rizoma con raíces
Ueda, considera de acuerdo a su experiencia, que los rizomas con raíces que se utilicen deben
tener de 50 a 60 centímetros de longitud con 10 a 15 nudos. Los rizomas con raíces de dos a
tres años de edad son los más satisfactorios. Rizomas mayores de cinco años son
inapropiados. Este método se recomienda para el transporte a lugares distantes. En tal caso
de deben envolverse en musgo, cubriéndolos luego con plástico después de removida la
tierra. Posteriormente deben dejarse en el vivero, en una camada de 20 centímetros de altura
cubiertos con tierra. En la siguiente temporada de lluvias pueden trasplantarse cuando los
tallos comiencen a crecer
.
Alan Bolt