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El reino de las plantas.
Las plantas son organismos pluricelulares, es decir están formadas
por muchas células y además las células que las forman se
caracterizan por tener un núcleo con material genético (ADN). Sus
células además están recubiertas por una pared celular formada por
una sustancia llamada celulosa y poseen una organela llamado
cloroplasto en donde se produce el proceso de fotosíntesis para la
obtención de su alimento. Es decir las plantas son organismos que
producen su propio alimento por las que se las denomina autótrofos.
Las plantas se caracterizan por realizar fotosíntesis por lo que se
las considera como los principales organismos productores de
alimento y de oxígeno en el medio terrestre. Poseen diferentes
pigmentos fotosintéticos, los verdes o clorofilas, los anaranjados o
carotenos, etc. Estos pigmentos se encuentran en los cloroplastos
de las células que es en donde se produce la fotosíntesis. Las
células de las plantas se organizan en tejidos y estos en órganos,
siendo los órganos como las hojas, los tallos, las raíces y las flores
el máximo nivel de complejidad de las plantas.
Imagen de plantas de un bosque
templado.
Los musgos, plantas muy sencillas y antiguas
Las plantas de organización más sencilla son los musgos debido a
que no poseen un verdadero sistema de transporte de nutrientes en
su interior. Es decir no tienen conductos o vasos internos donde
circula el agua y los nutrientes. Por no tener esta característica se
los llama plantas no vasculares. Tampoco tienen bien diferenciado el
tallo, las hojas y no producen flores.
Los musgos suelen crecer muy bien en condiciones de mucha
humedad sobre rocas o sobre otras plantas. Tampoco debe haber
mucha luz directa ya que no tienen mecanismos para evitar secarse.
Los
musgos
son
pequeños midiendo a la sumo un par de centímetros de longitud o menos.
muy
Otro grupo de plantas; los Helechos.
Las plantas que tienen vasos de conducción en su interior por los
que circulan agua y nutrientes se llaman plantas con cormo o
cormofitas. Las cormofitas son plantas con raíz, vasos de
conducción y hojas. Los helechos son plantas cormófitas cuyas
raíces crecen en forma de racimo, es decir que sus raíces no tienen
un eje principal con ramificaciones sino son como un racimo de
raíces todas de una longitud semejante. En el caso de los helechos
de las raíces crecen directamente las hojas. Pueden vivir en
ambientes más secos que los musgos ya que sus hojas están
cubiertas de una sustancia llamada cutícula que evita la desecación
de
la
planta.
El helecho llamado comúnmente serrucho es muy frecuente de ver
en viveros y casas de Bs As. Es de regiones selváticas tropicales.
Los helechos son plantas muy antiguos, evolucionaron de los musgos
primitivos. Fueron la principal fuente de alimentación de los
primeros animales terrestres. Tanto los musgos como los helechos
necesitan del agua para poder reproducirse. En la imagen las
distintas partes de un helecho.
Las plantas con semillas o espermatofitas
Entre las plantas vasculares evolucionó un grupo de plantas que no
necesitó del agua para reproducirse. De esta manera pudo colonizar
ambientes más secos y fríos. Esta independencia del agua se logró
gracias al desarrollo de una nueva estructura de las plantas; el
grano de polen, que tiene como función proteger las células sexuales
masculinas. Otra adaptación que tuvieron las plantas con semillas,
en la protección del embrión de la planta llamada semilla que
germina cuando las condiciones ambientales son las adecuadas. A
estas plantas que producen semillas se las llaman espermatofitas. El
palo borracho y los jazmines son algunos ejemplos de plantas
espermatofitas
Imagen de
Palo borracho. Es un árbol que en condiciones naturales se lo puede
encontrar en la selva misionera. El tronco del palo borracho está
cubierto de unas púas muy filosas que sirven para protección y sus
tallos tienen formas muy características.
Imagen de Jazmín del
país. Es una planta muy aromática y con gran valor en decoración.
Las primeras plantas espermatofitas o plantas con
semillas
Entre las primeras espermatofitas aparecieron un grupo de plantas
cuyas semillas se forman en estructuras leñosas llamadas conos o
piñas. En las piñas o conos se forman separadamente las células
sexuales, los óvulos y los granos de polen. Cuando se produce la
fecundación de los óvulos la piña se cierra, se forman las semillas y
cuando éstas están maduras las piñas se abren y se esparce la
semilla. Los pinos y las araucarias son algunos de los ejemplos de
este
grupo
de
plantas
llamadas
gimnospermas.
Las araucarias son plantas gimnospermas frecuentes en el sur de Argentina precordillera Neuquen
Piñas de araucania.
Hay muchas especies de pinos. En
este
caso
una
plantación
de
pinos
ornamentales.
Las piñas de los pinos se abren en dos
oportunidades. Una para dejar entrar el grano de polen para
fecundar al óvulo maduro. Luego se cierran, se desarrolla y madura
la semilla y se vuelven a abrir cuando la semilla está madura y ésta
cae.
Las plantas con semillas protegidas o gimnospermas.
La aparición de las flores permitió a las plantas poder colonizar casi
todos los ambientes del planeta. Los que son muy húmedos y
también los que son muy secos como los desiertos. Estas plantas se
caracterizan por tener a sus semillas protegidos por sus frutos.
Este grupo de plantas está formado por una gran diversidad de
formas y tamaños. Algunos muy grandes como los eucaliptus y otros
muy pequeños como los pastos. Hay una gran variedad de flores.
Las rosas y las hortensias son flores de gran valor ornamental.
Las
azaleas
son
plantas
muy
ornamentales y frecuentes en la zona del delta del Tigre.
Esquema de corte de una flor. En el androceo
se encuentran los granos de polen con la célula sexual masculina. En
el gineceo se encuentran los óvulos o él óvulo que será fecundado
por la célula sexual masculina. La corola es el conjunto de pétalos de
una flor que muchas veces sirven para atraer a agentes
polinizadores, es decir animales que transportan el polen de una flor
a otra para favorecer la fecundación. El receptáculo es donde se
apoya el gineceo y el cáliz es el conjunto de sépalos que protege la
flor por debajo. En general es de color verde.
Las plantas y la elaboración de su alimento. El
proceso de fotosíntesis
El proceso mediante el cual los organismos autótrofos producen su
propio alimento se denomina fotosíntesis. El nombre proviene de
las palabras foto, que significa luz y síntesis que significa
combinación/agregado. La fotosíntesis solo puede producirse en
presencia de luz y en general se utiliza la energía proveniente del
sol para llevarla a cabo. La fotosíntesis se realiza en el interior de
las hojas y de los tallos verdes de las plantas en una parte de la
célula llamada cloroplasto. Los cloroplastos tiene distintas partes y
en una de ella se encuentra la clorofila, que es un pigmento
encargado de capturar o retener por millonésimas de segundo la
energía lumínica del sol. Aunque la clorofila no es el único pigmento
de color que puede retener la energía lumínica es el color más
abundante en el reino Plantae.
En el primer esquema se puede ver
una célula vegetal característica con todas sus organelas. En el
segundo esquema se puede ver un dibujo sencillo de un cloroplasto
con sus partes. La tercera imagen es un conjunto de células donde
se pueden ver a un conjunto de cloroplastos dentro de cada una de
ellas.
El proceso de fotosíntesis consta de dos etapas, una que se realiza
en presencia de luz y por ello se denomina etapa lumínica o
fotoquímica y otra que no requiere luz y se llama etapa oscura o
bioquímica.
En la etapa fotoquímica se almacena la energía lumínica en unas
moléculas especiales. Por otro lado en esta etapa la energía es
utilizada para descomponer a las moléculas de agua, que hay en el
interior de las células. De esta manera por cada molécula de agua
que se descompone quedan libres dos átomos de hidrógeno y uno de
oxígeno. Los átomos de hidrógeno será utilizados en la etapa
bioquímica y los átomos de oxígeno se unen de a pares formando
moléculas de oxígeno que se liberan a la atmósfera.
La etapa bioquímica consiste en una sucesión de reacciones
químicas en las que se utilizan los átomos de hidrógeno y la energía
obtenidos en la etapa lumínica. También interviene la molécula de
dióxido de carbono que la planta toma del aire. Como resultado de
esta serie de reacciones químicas la planta sintetiza moléculas de
glucosa que serán utilizadas por la planta para alimentarse y
obtener energía de ella. De la glucosa la planta forma luego todas
las sustancias que necesita, como hidratos de carbono complejos,
lípidos y proteínas. Para completar este proceso utiliza también los
minerales
obtenidos
del
suelo.
Para obtener una molécula de glucosa la planta necesita seis
moléculas de agua, seis de dióxido de carbono y libera seis
moléculas de oxígeno a la atmósfera.
La molécula de glucosa
que se forma como resultado del proceso de fotosíntesis puede
tener distintos destinos, puede ir a las raíces, al tallo a otras hojas
a formar parte de los frutos y de ser utilizada como alimento por la
misma planta y de esta forma obtener energía.