Download Descargar este archivo PDF
Document related concepts
no text concepts found
Transcript
r fi isti cit m 5 G. Zornoza/ J. Ezcurdia/ J.L. Hernández/ P. HerranzH RESUMEN Se presenta un caso de dermatofibroma o histiocitoma fibroso de la mama, en una niña de 8 años. Se estudia y revisa la literatura sobre estos tipos de tumores, analizándose la escasa incidencia de presentación, la rareza de dicha localización, asf como las dificultades que a veces puede presentar el diagnóstico, fundamentalmente en lo que respecta a su posible malignidad. Introducción Bajo el término "Fibrosis nodular subepidérmica'', se han incluido 6 una serie de entidades anatomopatológicamente distintas, entre las cuales se incluyen: el dermatofibroma, el histiocitoma y el hemangioma esclerosante. Ackerman 1 y otros autores 7 incluyen el dermatofibroma dentro de los tumores de posible origen histiocitario, englobándolos en el capítulo de "histiocitomas fibrosos", en la hipótesis de que los histiocitos son células con capacidad facultativa de transformarse en fibroblastos. Genéricamente, los histiocitomas de la piel son tumores rigurosamente benignos, habiéndose admitido largo tiempo que los únicos procesos neoplásicos malignos mesodérmicos a este nivel eran el dermatofibrosarcoma y el fibrosarcoma, incluibles dentro de las neoplasias de estirpe • Departamento de Cirugia General. Cllnica Universitaria. Facultad de Medicina. Universidad de Navarra. ** Departamento de Anatomia Patológica. Clínica Universitaria. Facultad de Medicina. Universidad de Navarra. 46 REVISTA DE MEDICINA DE LA UNIVERSIDAD DE NAVARRA fibroblástica. No obstante, estudios posteriores 2• 4, 5 han demostrado la existencia de tumores de naturaleza histiocitaria y evolución maligna, proponiendo Stout 7 para ellos la denominación de fibro-histiocitomas malignos. Presentación del caso María J. O. C., hembra de 8 años, que presenta desde hace 3 meses una induración con progresivo aumento del tamaño de la mamila derecha. No dolor ni fiebre, sólo enrojecimiento y progresivamente coloración violácea. Fue tratada al parecer con antibióticos y fermentos proteolíticos sin que con ello mejorara, habiéndose ulcerado en los últimos días. Exploración Tumoración en región mamaria derecha de 3 x 2 cm, que penetra en profundidad, aun cuando es desplazable. Piel adelgazada y ulcerada en la zona correspondiente al pezón, que no existe como tal, quedando cubierta por una costra que sangra al ser retirada, dejando un fondo sucio sangrante. No adenopatías regionales. Estudio analítico Sangre. L: 9.000mm 3 ; H: 4.800.000; Hb: 13,6 g %; Htc: 39 %. Fórmula leucocitaria: (c 2; s 48; 1 39; e 10). Velocidad de sedimentación: l.ª hora: 36; 2.ª hora: 60. T. Sangría: 4 min; T. coagulación: 6,30 min; T. Protrombina: 14 seg (82 %). Grupo sanguíneo: A; Rh: +. Fig. l.-Se aprecia una tumoración en región mamaria derecha, con ulceración central. incluyendo la fascia pectoral y músculo en relación con la tumora ción. El estudio anatomopatológico de la pieza señala : "tumoración de 2,5 x 2 x 1,5 cm, que eleva la piel alterando toda la estructura de la mamila. Al corte se observa una tumoración que, teniendo su origen en la dermis, infiltra el tejido adiposo. En la base, el tumor parece estar delimitado . El estudio histiológico muestra la presencia de abundante celularidad de morfología variada, histiocitos con citoplasma claro y aspecto granular, células de aspecto fusiforme, así como hemosiderina y la presencia de atipias y mitosis: dermatofibroma o histiocitoma fibroso" . El postoperatorio ·fue normal y las revisiones periódicas, la última de las cuales se ha efectuado a los 4 años, no evidencia signos de recidiva. Fig. 2.-Radiografla de tórax en la que se evidencia una condensación en la proyección de la tumoración sobre hemitórax derecho . Discusión Fig. 3.-Hematoxilina-eosina (x25): se observa la epidermis y diversas clreas celulares que, desde la dermis media, alcanzan en profundidad todo el campo . Algunas fibras musculares lisas cruzan el campo. Orina. Densidad: 1.023; pH: 6. Sedimento: sin anormalidades. Radiografía de tórax. Sobre la zona correspondiente a mama derecha se proyecta una sombra redondeada, de bordes nítidos, densa. Se practica pequeña biopsia en cuña, cuyo estudio anatomopatológico señala: "bajo la piel, existe una proliferación de tejido conjuntivo, constituido por linfocitos, fibroblastos y moderada cantidad de colágena . Dentro de la morfología celular hay un moderado grado de atipias y alguna mitosis: dermatofibroma" . A la vista del resultado del estudio histológico, se procede a la estirpación en bloque de la tumoración, A la vista de la bibliografia consultada, existe un gran confusionismo en torno a estos tumores, confusionismo que incluye a la misma nomenclatura y que, en parte, se debe a la variable capacidad evolutiva del histiocito y a la posibilidad de asentamiento del mismo tanto en tejidos de tipo linfoide, como en otros de estirpe puramente fibroblástica. Por otro lado, la complejidad y variable composición celular de estos tumores, ha hecho que los distintos autores hayan aplicado los nombres en consonancia con las peculiaridades celulares en cada caso, olvidando tal vez la capacidad evolutiva del histiocito hacia formas celulares distintas, pero con un origen común. En todas las ocasiones y sobre la base de un componente histiocitario primario, se asocian dos postulados clásicos 3 : presencia de células espumosas y almacenamiento de grasas y pigmento férrico . En el caso de tratarse de un histiocitoma fibroso (dermatofibroma o fibro histiocitoma) existe una celularidad de morfología variada, en la que se asocia al componente histiocitario señalado, otro de tipo fibromatoso, con células fusiformes, productores de fibras colágenas y reticulares . La malignidad de un tumor de esta naturaleza viene dada por su carácter agresivo, traducido por la presencia de anomalías tisulares y celulares, así como por su conducta REVI STA DE MEDICINA DE LA UNIVERSIDAD DE NAVARRA 47 ta del tumor, como única forma de evitar la recidiva local, incluso en los benignos; y si tenemos en cuenta esa dificultad que en ocasiones presentan para poderse determinar su potencial de malignidad, se justifica el que la exeresis incluya estructuras vecinas, que den un margen de seguridad posterior. Finalmente, el control evolutivo perió'dico es obligado y será el que en última. instancia aportará la confirmación de un diagnóstico y una terapéutica correctas. Bibliografía l. Ackerman. Surgical pathology. CV Mosby Co. St. Louis. 1974. 2. Escalona J. Estudio delfibrohistiocitoma maligno de la piel por medio de cultivo de tejidos. Patología 2, 55, 1970. 3. Escalona J, Báez P. Contribución al encuadramiento nosológico del llamado granuloma óseo eosinófilo. Acta Oncol. 2, 165, 1963. 4. Kauffman SL, Stout AP. Histiocytic tumors lfibrous-xanthoma and histiocytoma). Cancer 14, 469, 1961. 5. O'Brien JE, Stout AP. Malignant fibrous xanthomas. Cancer 17, 1.445, 1964. 6. Rentiers PL, Montgomery H. Nodular subepidermal fibrosis (dermatofibroma versus histiocytoma). · Arch Dermat Syph. 59, 568, 1949. 7. Stout AP, Lattes R. Tumors of the soft tissues. Arch Forc Inst Path Washington. 1967. Fig. 4.-Hematoxilina-eosina (x250): abundantes fibroblastos y entre ellos fibras de coldgena. evolutiva 2 • Kauffman 4 incluye a estos tumores en el grupo de los benignos, cuando el número de mitosis está entre O y 13 por 50 campos de gran aumento y potencialmente malignos cuando la proporción varía entre 15 y 38 mitosis por 50 campos de gran aumento; señalando no obstante que hay casos en los que no es posible establecer un criterio definitivo de dife- renciación de su potencial de malignidad. La aplicación del cultivo de tejidos a estos casos puede servir para conocer las peculiaridades de su patrón de crecimiento 2 • El diagnóstico diferencial puede plantear dudas con otros tumores: fibroma, fibrosarcoma, fibromatosis, hemangiopericitoma, etc. En todo caso el único tratamiento es la extirpación quirúrgica comple- DERMATOFIBROMA OR FIBROUS HISTIOCYTOMA Summary The case history of an 8 year-old girl presenting a dermatofibroma or fibrous histiocytoma is reported. An up-to-date review of the literature available regarding these tumours shows the low incidence and the rarity of this localization. The difficulties in the diagnosis, especially with respect to its possible malignancy, are pointed out. 48 REVISTA DE MEDICINA DE LA UNIVERSIDAD DE NAVARRA