Download perfil del paciente con accidente cerebro
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UNIVERSIDAD DE CHILE FACULTAD DE MEDICINA ESCUELA DE KINESIOLOGÍA PERFIL DEL PACIENTE CON ACCIDENTE CEREBRO VASCULAR EGRESADO DEL COMPLEJO ASISTENCIAL BARROS LUCO ENTRE ENERO Y JUNIO, 2007 VERÓNICA OLEA CASTRO MARIELA OLIVARES GÁLVEZ 2007 PERFIL DEL PACIENTE CON ACCIDENTE CEREBRO VASCULAR EGRESADO DEL COMPLEJO ASISTENCIAL BARROS LUCO ENTRE ENERO Y JUNIO, 2007 Tesis Entregada a la UNIVERSIDAD DE CHILE En cumplimiento parcial de los requisitos para optar al grado de LICENCIADO EN KINESIOLOGIA FACULTAD DE MEDICINA por VERÓNICA PATRICIA OLEA CASTRO MARIELA IVONNE OLIVARES GÁLVEZ 2007 DIRECTOR DE TESIS: Dr. Gonzalo Quiroz Zenteno PATROCINANTE DE TESIS: Sylvia Ortiz Zúñiga FACULTAD DE MEDICINA UNIVERSIDAD DE CHILE INFORME DE APROBACION TESIS DE LICENCIATURA Se informa a la Escuela de Kinesiología de la Facultad de Medicina que la Tesis de Licenciatura presentada por el candidato: VERÓNICA PATRICIA OLEA CASTRO MARIELA IVONNE OLIVARES GÁLVEZ Ha sido aprobada por la Comisión Informante de Tesis como requisito para optar al grado de Licenciado en Kinesiología, en el examen de defensa de Tesis rendido el …………………………………………………………………………………………….. DIRECTOR DE TESIS: Dr. Gonzalo Quiroz ……………..……………... COMISIÓN INFORMANTE DE TESIS Nombre: Firma: …………………………………………. …………...…………………... …………………………………………. ………...……………………... …………………………………………. ………………...……………... …………………………………………. ………………………...……... A mis padres y a mi hermano por todo el amor y apoyo entregado durante mi vida, A mi Tata por sus sabias palabras que día a día me reconfortan, A mi abuela por su fe y a mis amigos por su cariño. (Verónica Olea Castro) A mis papás por permitirme terminar este segundo sueño, A mi hermana y a mi familia por todo su amor, A mis amigos por su alegría Y a Ignacio por su incondicionalidad. (Mariela Olivares Gálvez) AGRADECIMIENTOS Agradecemos al Servicio de Neurología del CABL por permitirnos realizar este estudio y facilitarnos las epicrisis. Al Dr. Rodrigo Aracena, neurólogo del Servicio, quien nos apoyó en todo el proceso de recolección de datos, estando siempre dispuesto a ofrecernos su ayuda y tiempo. A la Srta. Alicia (secretaria del Servicio de Neurología) por su buena disposición y humor durante nuestras jornadas de recolección de datos. Al Dr. Jorge Nogales, jefe del Servicio de Neurología y al Klgo. Iván Mardones, jefe del Servicio de Neurokinesiología del CABL. Al Comité de Ética por autorizarnos a realizar el estudio. A nuestros profesores de la Escuela de Kinesiología quienes nos apoyaron en los momentos más difíciles de este proyecto (Ana María Rojas, Verónica Vargas, Mario Herrera, Francisco Herrera, Rodrigo Rojo, Jaime Leppe y Tomás Hernández). Un agradecimiento especial al profesor Juan Tortella por su paciencia, cariño y entendimiento. A las secretarias de la Escuela de Kinesiología Adri y Xime. Finalmente un agradecimiento especial a nuestro tutor Dr. Gonzalo Quiroz, quien se sumó y creyó en este proyecto entregándonos todo su apoyo y tiempo. ÍNDICE RESUMEN i ABSTTRACT ii LISTA DE ABREVIATURAS iii I.INTRODUCCÍON 1 II. MARCO TEÓRICO 2 1. Accidente cerebro vascular 2 o Epidemiología 3 o Clínica 4 o Clasificación fisiopatológica 4 o Clasificación según duración de los síntomas 10 o Clasificación según localización anatómica 11 o Clasificación etiopatogénica 11 o Clasificación Oxfordshire 12 2. Factores de riesgo 12 3. ACV y Kinesiología 14 o Secuelas 14 o Terapia de Rehabilitación 15 o ACV en la actualidad 16 o Score en la escala de Rankin Modificada 16 4. Garantías Explícitas en Salud 17 5. Complejo Asistencial Barros Luco 17 III. PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA 18 - Pregunta de Investigación 18 - Justificación 18 - Objetivos 19 IV. MATERIALES Y MÉTODO 20 - Tamaño y definición de la población 20 - Diseño del estudio 20 - Metodología y procedimiento de obtención de datos 20 - Definición de variables 20 - Criterios de inclusión 22 - Criterios de exclusión 22 V. RESULTADOS 23 VI. CONCLUSIÓN 29 VII. DISCUSIÓN 31 VIII. PROYECCIONES 34 BIBLIOGRAFÍA 35 ANEXOS 38 - Anexo 1 Clasificación según localización anatómica 38 - Anexo 2 Clasificación Etiopatogénica 40 - Anexo 3 Clasificación y definición del infarto cerebral del proyecto Ictus de la comunidad Oxfordshire 43 - Anexo 4 Score en Escala de Rankin Modificada 45 LISTA DE TABLAS Tabla I Número de pacientes con ACV según género 24 Tabla II Número de pacientes con ACV según rango etario en años 24 Tabla III Estadística de edad en años según población total, vivos y fallecidos 25 Tabla IV Presencia de factores de riesgo clásicos en pacientes con ACV 26 Tabla V Distribución de pacientes según tipo de ACV y presencia de factores de riesgo 27 Tabla VI Distribución de los pacientes según Score en la escala de Rankin Modificada 28 LISTA DE FIGURAS Figura 1 Casos egresados del CABL, primer semestre 2007 23 Figura 2 Número de episodios de infartos isquémicos y hemorrágicos 25 Figura 3 Número de episodios de ACV isquémicos 26 Figura 4 Derivación a kinesiología en pacientes vivos 28 RESUMEN La importancia que adquiere el Accidente Cerebro Vascular en las últimas décadas en la población mundial es de gran interés. Debido a las razones epidemiológicas ocurridas en nuestro país, a que es una patología recientemente incorporada en las Garantías Explícitas en Salud y a la gran carga asistencial que éste implica en los Servicios de Atención Pública, en cuanto a su diagnóstico, tratamiento y rehabilitación, es que surge la inquietud de conocer el perfil del paciente con Accidente Cerebro Vascular en el centro de referencia del Servicio de Salud Metropolitano Sur a 10 años de un estudio similar realizado en el mismo lugar. Para la recolección de datos se revisaron las epicrisis de los pacientes egresados del Servicio de Neurología del Complejo Asistencial Barros Luco, durante el primer semestre del año 2007. Los datos fueron analizados mediante la utilización de la hoja de cálculo de Microsoft Excel. Del total de epicrisis revisadas, el Accidente Cerebro Vascular corresponde a 265 casos, siendo así la patología más frecuente en el Servicio de Neurología del Hospital, lo que representa un 55,56%. Del total de casos se obtiene que un 84,53% corresponden a Accidente Cerebro Vascular isquémico y un 11,70% a hemorrágico, las Crisis Isquémico Transitorias corresponden a un 3,77%. La distribución según género, muestra que la mayoría corresponde a sexo masculino con un 52,45%. En cuanto a los factores de riesgo, el de presentación más habitual es la Hipertensión Arterial con un 70,94%, seguida por la Diabetes Mellitus con un 23,77%. El promedio de edad de los pacientes fue de 68,26 años cuyo rango está entre 22 y 96 años. Un 89,81% de los pacientes egresaron en condición de vivos. Finalmente, solo un 31,09% de los pacientes fue derivado a Kinesiología, sin embargo, un 47,92% de ellos egresa con un Rankin entre 2 y 5, es decir, con incapacidad funcional. i ABSTRACT The importance that acquire the Stroke the last decade in the population it (generates)`s a great interest. Due to the epidemiological reasons of the Stroke occurred in our country, and that it is a new pathology incorporated into the Warranties Explicit Health and the great burden of care that implies Services Public Attention, regarding its diagnose, treatment and rehab, arises the concern of knowing the patient profile with Stroke at the center of reference of the South Metropolitan Health Service having now 10 years since a similar study was conducted in the same place. In order to collect data were reviewed epicrisis of patients graduates of the Neurology Department of Complejo Asistencial Barros Luco, during the first half of the year 2007. Data was analyzed using the spreadsheet Microsoft Excel. Of the total revised epicrisis, the stroke corresponds to a 265 cases, making it the most frequent pathology at the Neurology Department of Hospital 55,56%. Of the 265 cases that were obtained, 84,53% were Ischemic Stroke and 11.70% to Hemorrhagic stroke, Crises Ischemic Transitory relate to 3,77%.The distribution by gender, shows that most corresponds to male 52,45% and risk factors the most common presentation is the Hypertension 70,94% followed by the Diabetes 23.77%. The age average of patients with stroke was 68,26 years being the maximum of 96 and the minimum 22 for the general population. A 89.81% of patients graduated in living condition. Finally, only 31,09% of the patients were referred to Kinesiology, however, a 47,92% of them leave with a Rankin between 2 and 5, ie functional disability. ii ABREVIATURAS ACO: anticonceptivos orales ACV: accidente cerebro vascular ASA: American Stroke Association ATE: ACV aterotrombótico AUGE: Acceso Universal para Garantías Explícitas AVD: Actividades de la Vida Diaria CABL: Complejo Asistencial Barros Luco CIT: crisis isquémica transitoria DM: Diabetes Mellitus GES: Garantías Explícitas en Salud HIC: hemorragia intracerebral HSA: hemorragia sub-aracnoídea HTA: hipertensión ICCA o TACI: infartos completos de la circulación anterior ICP o POCI: infartos parciales de la circulación posterior IPCA o PACI: infartos parciales de la circulación anterior LACI: infartos lacunares NINCDS: National Institute of Neurological and Communicative Disorders and Stroke OCSP: Oxfordshire Community Stroke Project OH: alcohol PICA: arteria cerebelosa postero-inferior PAME: Programa de Atención Musculo Esquelética RMN: Resonancia Magnética Nuclear SDC: síndrome de dolor central SNC: Sistema Nervioso Central TAC: tomografía axial computarizada TOAST: Trial of Org 10172 in Acute Stroke Registry. iii I. INTRODUCCIÓN El informe publicado por la Organización Mundial de la Salud (OMS) el año 2003, ubica al Accidente Cerebro Vascular (ACV) en el cuarto lugar entre los responsables de la carga global de enfermedades para los mayores de 15 años, alcanzando el segundo lugar en la población mayor de 60 años. Nuestro país no está ajeno a dicha carga, siendo el ACV una de las principales causas de muerte y de discapacidad en la población y cuyo riesgo aumenta con la edad. Es por esta causa, que el ACV representa una patología con una importante carga asistencial en los Servicios de Salud chilenos. El Complejo Asistencial Barros Luco (CABL), es el centro de referencia del Servicio de Salud Metropolitano Sur. Durante el año 2006, su población asignada fue de 1.102.925 habitantes. Consultaron en su urgencia con el diagnóstico presuntivo de ACV, 814 pacientes, siendo hospitalizados 529 de ellos. La siguiente tesis tiene como objetivo conocer el perfil del paciente con ACV egresado del CABL en el primer semestre del año 2007, mediante la revisión de las epicrisis correspondientes, generando así, un registro con las características más relevantes de esta patología, incorporada recientemente en el AUGE. 1 II. MARCO TEÓRICO 1. Accidente Cerebro Vascular La enfermedad cerebrovascular está dentro de las patologías circulatorias junto con la enfermedad cardiovascular, enfermedad isquémica del corazón y la enfermedad hipertensiva, siendo las principales causas de morbilidad y mortalidad a nivel mundial. Sin embargo, en la mayoría de los países de América Latina, las tasas de años potenciales de vida perdida (APVP) han ido disminuyendo con el paso del tiempo (OMS, 1998) y en Estados Unidos, la mortalidad por causa de ACV ha disminuido debido al tratamiento y prevención de la hipertensión arterial (HTA) (Whisnant, 1984) que es el principal factor de riesgo de esta patología. A pesar de todo esto, el ACV sigue siendo una de las principales causas de muerte. Hace mas de 2.400 años, el padre de la Medicina, Hipócrates, reconoció y describió el ACV como el inicio repentino de parálisis (NINDS, 2000). Un accidente cerebro vascular ocurre cuando el suministro de sangre a una parte del cerebro se interrumpe repentinamente o cuando un vaso sanguíneo en el cerebro se rompe, derramando sangre en los espacios que rodean a las células cerebrales (NINDS, 2000). Según la American Stroke Association (ASA), el ACV es una patología cardiovascular que afecta a los vasos sanguíneos cerebrales. Se puede producir por dos mecanismos: obstrucción o ruptura de un vaso. Cuando esto ocurre, el aporte de oxígeno al cerebro se ve disminuido, con la consiguiente muerte del territorio afectado (ASA, 2007). 2 Epidemiología El ACV ocupa el cuarto lugar entre los responsables de la carga global de enfermedades para los mayores de 15 años, alcanzando el segundo lugar en la población mayor de 60 años (OMS, 2003) En Estados Unidos, el ACV es la tercera causa de muerte y de incapacidad crónica en la población (Elkind MS, 1998). Datos similares se encuentran en la población escocesa, donde además la mortalidad inmediata es alta, y el 20% aproximado de los pacientes con ACV mueren en el plazo de 30 días (SIGN, 2002). En Sudamérica, el ACV tiene una prevalencia de 1.74 – 6.51 por 1000 habitantes y una incidencia anual de 0.35 a 1.83 por 1000 habitantes. Los patrones de ACV son diferentes a los divulgados en otras regiones del mundo, con una frecuencia más alta de hemorragias cerebrales, alteraciones vasculares cerebrales y lesiones ateroscleróticas intracraneales. Tales diferencias se pueden relacionar con los factores genéticos, ambientales y socioculturales, y además, con las diferencias en el control de los distintos factores de riesgo del ACV (Saposnik, G. 2003). En Chile el ACV figura entre las diez primeras causas de muerte en hombres y mujeres a partir de los 20 años de edad, con tasas que aumentan sostenidamente a medida que se envejece. De acuerdo al censo del año 2002, realizado en Chile, el 11% de la población es mayor de 60 años, con una expectativa de vida promedio de 76 años. La proyección para el año 2025 es que el 18% de la población tendrá más de 60 años (INE, 2002). Según el estudio PISCIS Project realizado en la ciudad de Iquique, la tasa cruda anual de ACV fue de 95,8 por 100.000 habitantes. La tasa cruda anual de incidencia 3 del primer evento de ACV fue de un 73,6 por 100.000 habitantes en Iquique y de 97,4 por 100.000 habitantes cuando se ajustó a la población chilena en el año 2002 (Lavados, P. 2005). La distribución de ACV en nuestro país es de un 88% para los ACV de origen isquémico, de los cuales, entre un 60-70% son aterotrombóticos y entre un 10-20% son embólicos. Un 12% de los ACV son de origen hemorrágico, de los cuales, un 9% son de origen intracerebral y un 3% son subaracnoídeos (INE, 2000). Sin embargo, un estudio realizado en el año 1997, en el Hospital Barros Luco, muestra que un 51.8% son ACV isquémicos, un 45.6% son hemorrágicos y un 2.6% son crisis isquémico transitorias (CIT). Clínica El conocimiento de los síntomas de advertencia del ACV se determinan usando el cuestionario establecido por la American Stroke Association y la National Institute of Neurological Disorder and Stroke. Los síntomas de advertencia del ACV incluyen (Kamalesh, D. 2007): Parálisis repentina, debilidad o pesadez de la cara, piernas y brazos, especialmente a un lado del cuerpo. Confusión repentina o dificultad para hablar o entender palabras. Problemas repentinos en uno o en ambos ojos. Problemas repentinos en la marcha, mareos o pérdida del equilibrio y coordinación. Severos dolores de cabeza sin causa conocida. Clasificación fisiopatológica Esta clasificación es la más común dentro del ACV. Está determinada por el mecanismo fisiopatológico que lo produce. Según esto, existen dos principales 4 tipos de ACV: Hemorrágico e Isquémico. En el ACV hemorrágico, la sangre queda contenida dentro de la cavidad craneal producto de una ruptura de un vaso con el consecuente sangramiento; y en el isquémico no existe un flujo adecuado de sangre debido a una obstrucción de los vasos arteriales que aportan sangre al cerebro. La isquemia conduce finalmente a un infarto (Bogousslavsky, J. 2007). 1. ACV Hemorrágico El ACV hemorrágico puede ser dividido en dos tipos: a. Hemorragia Intracerebral (HIC): es una colección de sangre dentro del parénquima cerebral, producida por una rotura vascular espontánea (Delgado, G. 1999). Su causa más común es la HTA que aumenta el riesgo de que una pared arterial quebradiza ceda y libere sangre dentro del tejido cerebral circundante, además puede ser causada por un trauma, sangramientos, angiopatía amiloidea, uso de drogas ilícitas (aminas y cocaína) y malformaciones vasculares. Ocasionalmente es causada por sangramientos en tumores. El sangramiento usualmente proviene de las arteriolas o arterias pequeñas y la hemorragia está directamente en el cerebro formando un hematoma localizado. Los síntomas son tempranos e indican la porción del cerebro que contiene el hematoma. Estos síntomas neurológicos usualmente aumentan en minutos o pocas horas y suelen ser bruscos y de máxima intensidad desde el comienzo. Luego de los cambios en la presión intracraneal se presenta dolor de cabeza, vómitos y disminución de los niveles de conciencia. En hemorragias pequeñas estos síntomas están ausentes. (Bogousslavsky, J. 2007). 5 b. Hemorragia Subaracnoídea (HSA): es una hemorragia bajo las meninges o membranas externas del cerebro, entre la aracnoides y la piamadre al espacio delgado lleno de fluido cerebroespinal que rodea el cerebro. En esta hemorragia, una de las pequeñas arterias dentro del espacio subaracnoide se rompe, inundando de sangre el área y contaminando el fluido cerebroespinal que fluye a través del cráneo, dentro de los espacios del cerebro, lo que puede conducir a un daño total de éste, por lo cual, la HSA es el más mortal de todos los ACV (NINDS, 2000). Sus causas más comunes son los traumas craneocefálicos, aneurismas, angiopatías amiloideas y uso de drogas ilícitas. Sin embargo, la causa más frecuente es el trauma craneocefálico, pero si sólo se considera la HSA no traumática o espontánea, la más frecuente sería el aneurisma cerebral (Johnston, S. 1998). La HSA debida a aneurismas rotos es una urgencia con alta morbi-mortalidad independiente de sus tratamientos, lo que hace que los médicos reevalúen constantemente a estos pacientes en su tratamiento y rehabilitación posterior para una adecuado retorno a una vida normal ya que un 50% de éstos quedan con secuelas y un 45% fallecen dentro del primer mes (González, M. 2006). Los síntomas en pacientes con aneurisma subaracnoídeo tienen un comienzo brusco. El aumento repentino de la presión intracraneal puede causar una disminución o cesación de la actividad del individuo, pérdida de la memoria e inestabilidad en las rodillas. El dolor de cabeza es un síntoma que está siempre presente, es severo y se puede irradiar al cuello. El vómito ocurre cercano al inicio y generalmente, no ocurre ningún síntoma neurológico focal importante a menos que la hemorragia se produzca en el cerebro y en el fluido cerebroespinal al mismo tiempo. 6 2. ACV Isquémico Ocurre cuando una arteria que suministra sangre al cerebro queda bloqueada, reduciendo repentinamente o interrumpiendo el flujo de sangre, y con el tiempo, ocasionando un infarto en el cerebro. Los coágulos de sangre son la causa más común del bloqueo arterial y de infarto cerebral. EL ACV isquémico se divide en cuatro subgrupos dependiendo del tipo de obstrucción, las que a su vez se clasifican en los subtipos embólico (cardiogénico), aterotrombótico, lacunar, causa desconocida y otros. Los tres primeros son los subtipos más frecuentes de ACV isquémico. En la mayoría de ellas la obstrucción vascular es por un trombo. El subtipo de causa desconocida corresponde de un 14% a un 40% de los casos de ACV isquémico según las diferentes series (Tapia, J. 1992). a. ACV Embólico: Un émbolo es una migración de un material extraño a los componentes intracraneales del Sistema Nervioso por medio de las vías arteriales. Los émbolos con mayor frecuencia son de origen cardiaco y se asocian con arritmia; trombos murales; endocarditis bacteriana subaguda; enfermedades de las válvulas cardiacas y defectos de los septos cardiacos. Las fuentes no cardiacas incluyen lesiones de la aorta, arterias carótidas, arterias vertebrales y arterias intracraneales. Los émbolos pueden estar compuestos por plaquetas trombosadas, residuos ateroscleróticos, grasa, aire, células tumorales, materiales infecciosos. Un coágulo que se forma en una zona distinta al cerebro, que se desprende y viaja a través del torrente sanguíneo y que generalmente proviene desde el corazón, puede quedar atrapado en una arteria cerebral generando isquemia. Esto es lo que se conoce como un ACV embólico (NINDS, 2000). Los sitios receptores más comunes de 7 émbolos son las arterias cerebrales medias, las arterias vertebrales intracraneales, la arteria basilar y principalmente su rama la arteria cerebelosa postero-inferior (PICA). Los síntomas neurológicos dependen de la región del cerebro donde ocurre la isquemia. El émbolo bloquea repentinamente el sitio receptor de modo que el inicio de los síntomas es precipitado y máximo en el comienzo (Bogousslavsky, J. 2007). b. ACV aterotrombótico (ATE): De acuerdo a los postulados clásicos de Virchow, la formación de un trombo involucra tres factores interrelacionados: alteración de la pared del vaso, del flujo sanguíneo y de la coagulabilidad de la sangre (Perry, D. 1997). Virchow señala que un trombo es la insudación de líquido con grasas en la capa íntima. Una trombosis es la formación de un coágulo de sangre en una de las arterias cerebrales que permanece fijo a la pared arterial hasta que aumenta de tamaño, lo suficiente para bloquear el flujo de sangre al cerebro. El tejido necrótico con abundantes grasas constituye el ateroma y el material colágeno neoformado, el componente esclerótico. La proliferación y necrosis de las fibras musculares lisas representa la concepción de Virchow (Chuaqui, B. 2007) La vasoconstricción es una de las condiciones más comunes de oclusión seguida de la disección arterial y de las oclusiones traumáticas. En pacientes con trombosis, los síntomas neurológicos fluctúan, remiten o progresan de forma gradual, cambiante o de una manera predecible (Bogousslavsky, J. 2007). c. ACV lacunar o enfermedad arterial de pequeño vaso: es un infarto de pequeño tamaño lesional (<15 mm diámetro), localizado 8 en el territorio de distribución de las arteriolas perforantes cerebrales, que ocasiona clínicamente un síndrome lacunar. Aunque la microateromatosis y la lipohialinosis de las arteriolas perforantes cerebrales constituyen el substrato patológico más frecuentemente hallado en los infartos lacunares. Otras causas potenciales, aunque infrecuentes, son el embolismo cardíaco, el embolismo arteria-arteria, la arteritis infecciosa o el estado protrombótico (Arboix, A. 2002). La clínica de los infartos lacunares es un buen predictor del territorio lesionado. Estos infartos se localizan en la profundidad del hemisferio cerebral o en tronco cerebral, principalmente en cápsula interna, tálamo, núcleo caudado, protuberancia y parte del bulbo (Gállego, J. 1989) d. ACV de causa desconocida o infrecuentes: se ha calculado que un 2.9% de los ACV son causados por procesos poco frecuentes (NINDS, 2004).Estos afectan principalmente a sujetos jóvenes y son responsables del 40% de las ACV en menores de 50 años. La causa más importante es la disección arterial, un problema propio de la pared arterial, la cual al lesionarse, genera la entrada de sangre al espacio, la que se coagula produciendo estenosis de esa arteria. Ésta se caracteriza por un cuadro doloroso en la zona del territorio carotídeo o vértebro-basilar, posterior al cual se instala el cuadro neurológico focal. Otras causas asociadas a fenómenos vasculíticos, incluyen a algunos procesos autoinmunes (Artritis reumatoide (AR), lupus), cuadros aislados de vasculitis en el SNC, y otros tipos de patologías (infecciones, cáncer, trombosis venosa cerebral). 9 Clasificación según duración de los síntomas 1. Crisis Isquémica Transitoria (CIT): La CIT se define como episodios breves de un déficit neurológico focal, secundario a una disminución o interrupción temporal súbita del flujo sanguíneo cerebral en un territorio vascular arterial específico (Clainborne, S. 2002); implica el concepto de reversibilidad del cuadro clínico. Desde hace muchos años, el tiempo de recuperación para este déficit neurológico se definió arbitrariamente en 24 horas, sin embargo, en la mayoría de los casos (70%) los síntomas resuelven en menos de 20 minutos (Johnson, R. 2002). Por regla general, los episodios de CIT tienen las siguientes características clínicas: son de inicio abrupto, son máximos desde el inicio, resuelven gradualmente (la mayoría antes de una hora), síntomas que se localizan según el territorio vascular afectado y pueden presentarse en forma repetitiva (Rosales, L. 2006). 2. Accidente Cerebro Vascular propiamente tal: La terminología anglosajona ha adoptado las palabras “stroke” e “ictus” para referirse al episodio agudo de enfermedad cerebrovascular. La enfermedad cerebrovascular es un grupo amplio de lesiones clínicas que incluye la crisis isquémica transitoria (CIT), el accidente cerebrovascular (ACV), el infarto cerebral y la hemorragia cerebral intracerebral (HIC) o subaracnoidea (HSA) (Pérez, G. 2006). Es un síndrome clínico, en el cual los síntomas se presentan durante un período mayor a las 24 horas. Es muy probable la existencia de una lesión orgánica cerebral considerando la prolongada duración del cuadro. 10 Clasificación según localización anatómica (Anexo 1) Se pueden clasificar en (Lacruz, F. 2000): 1. Infartos en territorio de carótida interna 2. Infarto de la arteria cerebral media 3. Infarto de la arteria cerebral anterior 4. Infartos del territorio vértebro-basilar Clasificación Etiopatogénica (Anexo 2) La siguiente clasificación se ha fundamentado en los criterios National Institute of Neurological and Communicative Disorders and Stroke (NINCDS) (1990), criterios Trial of Org 10172 in Acute Stroke Registry (TOAST) (1993), Laussane Stroke Registry (1997) y del Comité Ad Hoc del Grupo de Estudio de Enfermedades Cerebrovasculares de la Sociedad Española de Neurología (1998). Su puesta en marcha exige la realización de los diferentes exámenes complementarios encaminados a la valoración del estado cerebral (TAC, RMN cerebral) y vascular (Doppler, Doppler Transcraneal, Angioresonancia y Angiografía digital) y cardiovascular (Ecocardiografía). Infarto aterotrombótico Laussanne Stroke Registry Criterios TOAST Infarto en relación con enfermedad de vaso pequeño Infarto embólico Otras etiologías o de causa inhabitual Infartos de causa no determinada 11 Clasificación y definición del infarto cerebral del proyecto Ictus de la comunidad Oxfordshire (Anexo 3) En 1991 la Oxfordshire Community Stroke Project (OCSP) propuso una nueva clasificación validada con posterioridad en numerosos trabajos, destacando que permite valorar la localización y tamaño de la lesión además de ofrecer información pronóstica precoz, rápida, sencilla y de alta probabilidad. En una reciente publicación se demuestra que la clasificación OCSP puede predecir el tamaño y localización de la lesión en el 75% de los pacientes. Infartos completos de la circulación anterior ( ICCA ó TACI) Infartos parciales de la circulación anterior ( IPCA ó PACI ) Infartos lacunares (LACI) Infartos de la circulación posterior (ICP ó POCI) 2. Factores de Riesgo del ACV El efecto de un Factor de Riesgo en la probabilidad de producir un ACV está determinado por tres consideraciones: El riesgo relativo del Factor de Riesgo. El predominio del Factor en la población. Efecto de la intervención. El riesgo relativo de generar un ACV puede ser confuso o ser modificado por otras variables o por la interacción de éstas. Estos efectos se pueden determinar por el análisis de las múltiples variables. La prevalencia de estos factores está afectada por la geografía, edad y sexo (Whisnant, J. 1997). Es de suma importancia conocer los factores de riesgo y contribuyentes al ACV, como una forma efectiva de prevenir la enfermedad y su catastrófico 12 impacto, en las personas más susceptibles, ya que las medidas terapéuticas médicas y quirúrgicas no ofrecen una recuperación plena de las secuelas en muchos de los casos. Estudios muestran una relación del ACV con otras afecciones cardiovasculares y las consecuencias de la HTA como la cardiopatía coronaria y la insuficiencia cardiaca congestiva. La HTA es el factor más importante para los ACV. La Diabetes Mellitus (DM) y los trastornos de la función cardiaca con el antecedente de enfermedad coronaria previa o de anomalías electrocardiográficas o de insuficiencia cardiaca, también son factores de riesgo importantes. La elevación de lípidos plasmáticos (dislipidemia), el hábito tabáquico, el sexo (hombres mayor probabilidad) y la obesidad son importantes, aunque en menor medida. Los ACV embólicos son principalmente consecuencia de enfermedad cardiaca, valvulopatías (estenosis mitral), infartos al miocardio, arritmias (fibrilación auricular) y complicaciones de cirugía cardiaca. La HIC se relaciona con la HTA por la ruptura de los microaneurismas, o como complicación de terapia anticoagulante o fibrinolítica. La HTA puede estar asociada a ruptura de un aneurisma en la HSA y a riesgo de infarto cerebral aterotrombótico y de hemorragia cerebral hipertensiva. El uso de Anticonceptivos Orales (ACO) en las mujeres, constituye también un factor de riesgo más significativo en aquellas que además son hipertensas, fuman, son mayores de 35 años o son jaquecosas. Por último, se mencionan el uso de drogas ilícitas como la cocaína (Jiménez, O. 2003). 13 3. ACV y Kinesiología Secuelas El ACV puede afectar diversos ámbitos, dejando secuelas como parálisis, déficit en la coordinación motora, déficits cognoscitivos, problemas del habla, dificultades emocionales dolor y trastornos sensitivos, los que pueden generar problemas en las actividades de la vida diaria (NINDS, 2007). Una incapacidad común que resulta de un ACV es la parálisis, la cual si afecta a un solo lado del cuerpo (hemicara, brazo y pierna) se le llama hemiplejia y cuando ésta es tan solo una debilidad se denomina hemiparesia. Esta parálisis o debilidad se origina en el lado cerebral contrario de donde se manifiesta el ACV. La hemiplejia y la hemiparesia generan problemas en las actividades de la vida diaria (AVD), ya que al afectarse la corteza motora, en los lóbulos frontales del cerebro, resulta un déficit motor y al dañarse el cerebelo o ganglios de la base se afecta la coordinación y el equilibrio. Además de la parálisis, posterior a un ACV se encuentran: Déficits cognoscitivos: un ACV puede generar problemas de raciocinio, conciencia, atención, aprendizaje, juicio y memoria. Si los problemas son mas severos, el paciente puede presentar por ejemplo una apraxia, agnosia y negligencia (el paciente no tiene conocimiento de un lado del cuerpo o la visión). Déficits de habla y lenguaje: generalmente se presenta como afasia (déficit de comprensión o emisión de lenguaje) y disartria (problemas al hablar). Los problemas de lenguaje resultan generalmente del daño a los lóbulos frontales y parieto-temporales izquierdos. 14 Déficits emocionales: los pacientes que sufren un ACV pueden tener dificultad en controlar sus emociones o pueden expresar emociones inapropiadas en ciertas situaciones. Estos pacientes generalmente sufren de depresión cuyo comportamiento clínico puede dificultar la recuperación y la rehabilitación e incluso puede concluir en un suicidio. El tratamiento para ésta es mediante medicamentos. Dolor y déficit sensitivo: los pacientes pueden experimentar dolor, entumecimiento y parestesia después de sufrir un ACV. Estas sensaciones se pueden deber a varios factores, entre ellos, daño de las regiones sensoriales del cerebro. Un tipo poco común de dolor es llamado Síndrome de Dolor Central (SDC), el cual, resulta del daño del tálamo. Entre sus sensaciones se encuentran: frío y calor, ardor, parestesia, falta de sensación, punzadas agudas, dolor intenso. Este dolor se manifiesta generalmente en las extremidades manos y pies. Terapia de Rehabilitación Las terapias de rehabilitación post ACV se pueden dividir en: Terapia Física: esta terapia en muchos pacientes se vuelve la piedra angular en el proceso de rehabilitación. Está a cargo de un kinesiólogo, el cual utiliza la enseñanza, los ejercicios y la manipulación física del cuerpo del paciente con la intención de restaurar el movimiento, equilibrio y la coordinación. El objetivo de la terapia física es lograr que el paciente que sufre un ACV, vuelva a aprender actividades motoras simples, tales como caminar, sentarse, ponerse de pie, acostarse y el proceso de cambiar de un tipo de movimiento a otro. Terapia ocupacional: los objetivos de esta terapia incluyen volver a aprender a comer, beber, vestirse, bañarse, cocinar y el cuidado personal. 15 Terapia de dicción o del habla: a cargo de un fonoaudiólogo, cuyo objetivo principal es enseñar el lenguaje y las destrezas de comunicación. Terapia Neuropsicológica: aliviar algunos problemas mentales y emocionales relacionados (depresión). ACV en la actualidad Estudios con animales han demostrado que la lesión cerebral ocurre dentro de unos minutos después de ocurrir un ACV y puede hacerse irreversible dentro de un periodo de solo una hora. En los seres humanos, el daño cerebral comienza en el momento en que empieza el ACV y a menudo continúa por días después de ocurrir el mismo. Los científicos saben ahora que hay una "ventana de oportunidad" muy reducida para tratar la forma más común del ACV. Debido a éstos y a otros adelantos en el campo de la enfermedad cerebrovascular, los pacientes que sufren de esto, tienen ahora una probabilidad de sobrevivir y recuperarse. Pero quizás el acontecimiento nuevo más interesante en el campo de la investigación del ACV es la aprobación reciente de un tratamiento a base de medicamentos que puede invertir su curso, si se administra en las primeras horas después de aparecer los síntomas (NINDS, 2000) Score en la Escala de Rankin Modificada La Escala de Rankin Modificada es utilizada para la evaluación de la recuperación funcional de los pacientes con ACV. Esta escala consta de seis grados, los cuales van en progresión, siendo el grado I el de menor incapacidad y el grado VI la muerte del paciente (Tapia, F. 1992) (Anexo 4). 16 4. Garantías Explícitas en Salud (GES) Debido a la importancia que el ACV isquémico adquiere en la población chilena, es que se incluye en el listado de las cincuenta y seis patologías que forman parte del régimen de Garantías Explícitas en Salud (GES) y que entró en vigencia el 1º de julio del año 2007. En éste, se garantiza el diagnóstico del ACV dentro de las 72 horas por medio de una Tomografía Axial Computarizada (TAC), la hospitalización dentro de 24 horas desde la confirmación del ACV y el seguimiento a toda persona tratada que accederá a una consulta con un especialista dentro de los 10 días desde el alta hospitalaria y de ser necesario consulta con kinesiólogo y/o terapeuta ocupacional. Esta garantía explicita está indicada a toda persona de 15 años o más que sufra un accidente cerebro vascular. 5. Complejo Asistencial Barros Luco El CABL es el centro de referencia del Servicio de Salud Metropolitano Sur, el cual posee una de las poblaciones asignadas más grandes de nuestro país, abarcando a once comunas. Durante el año 2006, egresaron 28.615 pacientes, de los cuales 814 ingresaron a urgencia y 529 fueron hospitalizados a causa de ACV. Con estos datos se entiende que la carga asistencial para el Servicio de Neurología es bastante elevada, incluyendo el área de kinesiología, la cual, actualmente cuenta con dos kinesiólogos para rehabilitación y no sólo de pacientes con ACV, si no de todos los pacientes neurológicos derivados al Servicio de Kinesiología. 17 III. PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA Pregunta de investigación Por lo anterior, es que surge la necesidad de conocer ¿Cuál es el perfil del paciente que egresa del Servicio de Neurología del CABL con el diagnóstico de ACV entre los meses de enero y junio del año 2007? Justificación Las Enfermedades del Sistema Circulatorio ocupan el primer lugar de las causas de muerte en nuestro país. De éstas, el ACV (no especificado como hemorrágico ni isquémico) ocupa el segundo lugar después del Infarto Agudo al Miocardio, con un total nacional de 1531 hombre v/s 1729 mujeres, sumando 3260 personas fallecidas en el período 1997-2003 (INE, 2003). Cerca de un 90% de los ACV presentan secuelas que incapacitan al individuo por un tiempo determinado, causando una demanda de cuidados y una necesidad de institucionalización con un elevado gasto sanitario y social (INE, 2000). Entre el 15% y 30% resultan permanentemente discapacitados y el 20% necesitan ser internados durante los primeros 3 meses después del accidente (CDC, 2007). Es acá donde nace la importancia de esta investigación, ya que constituiría un registro que permitirá conocer la realidad hospitalaria del CABL al describir el perfil de los pacientes con ACV de su Servicio de Neurología, siendo ésta una evidencia fundamental para la realización de estudios y proyectos posteriores en nuestro país. 18 Objetivos General Determinar el perfil del paciente que egresa del Servicio de Neurología del CABL con ACV entre el 1º de enero y el 30 de junio del año 2007. Específicos Determinar el número de casos de ACV en el Servicio de Neurología del CABL en el período de estudio. Identificar género y edad de presentación más común de los pacientes con ACV egresados del Servicio de Neurología del CABL. Determinar porcentaje de episodios de ACV hemorrágicos e isquémicos. Caracterizar y cuantificar tipo de ACV. Determinar la presencia de factores de riesgo clásico para ACV en los pacientes estudiados. Determinar el estado funcional de los pacientes mediante el Rankin de egreso, según Score en la Escala de Rankin Modificada. Cuantificar el número de casos de ACV que fueron derivados al Servicio de Kinesiología. 19 IV. MATERIALES Y MÉTODOS Tamaño y definición de la población de estudio La población correspondió a todos los pacientes que egresaron con diagnóstico de ACV del Servicio de Neurología del CABL durante el periodo entre el 1º de enero y el 30 de junio del año 2007, lo que corresponde a 265 casos. La elección de la población de estudio fue por conveniencia Diseño del estudio El estudio, es de tipo Descriptivo, Transversal. Metodología y procedimiento de obtención de datos del estudio Para la obtención de los datos que identifican el perfil de la población en estudio, se recolectó la información desde las epicrisis de los pacientes con ACV (demostrado con TAC cerebral) que hayan egresado del Servicio de Neurología del CABL en el período entre el 1º de enero hasta el 30 de junio del año 2007, lo cual corresponde a 265 casos. Definición de variables Edad Conceptual: Tiempo que ha vivido o vive una persona. Operacional: años de edad. 20 Sexo Conceptual: Género de la persona. Operacional: Hombre o Mujer. Factores de riesgo Características que aumentan la probabilidad de incidencia de una enfermedad u otra consecuencia específica. Los factores de riesgo para el ACV son: obesidad, dislipidemia, HTA, DM, hábito tabáquico, alcoholismo (OH), sedentarismo, ACV previo, uso de anticonceptivos orales y drogas Características del ACV Tipo ACV Conceptual: Clasificación del ACV dependiendo si se producen por una isquemia cerebral o por una hemorragia. Operacional: Tomografía Axial Computarizada (TAC). Condición de egreso Score en la escala de Rankin del paciente Conceptual: Puntaje otorgado al paciente dependiendo de la condición motora que éste tenga al egreso. Operacional: I al VI, siendo I sin síntomas y VI muerte del paciente. Derivación a kinesiología Conceptual: Proceso por el cual el paciente es derivado al servicio de kinesiología posterior a su alta médica. Operacional: Si, No, Fallecido. 21 Variables desconcertantes Epicrisis extraviadas. Interpretación errada de las epicrisis. Epicrisis incompletas. Criterios de Inclusión Pacientes con diagnóstico de ACV egresados del Servicio de Neurología del CABL en el periodo entre el 1º de enero y el 30 de junio del año 2007. Pacientes con ACV de 15 años y más. Criterios de Exclusión Pacientes que fueron trasladados a otro servicio asistencial previo al egreso. Pacientes cuyas epicrisis se hayan extraviado. 22 V. RESULTADOS Los datos se analizaron según requerimientos del estudio mediante la utilización de la hoja de cálculo de Microsoft Excel (MS OfficeTM). De un total de 14.444 pacientes egresados del CABL durante el período de estudio, 477 egresaron del Servicio de Neurología, de éstos, 265 (1,83%) egresaron con diagnóstico clínico de ACV y 212 (1,47%) con un diagnóstico diferente. El resto de los pacientes que corresponden a 13.967 (96,7%) egresaron de un Servicio distinto al de Neurología (Figura 1). Figura 1: Casos egresados del CABL, primer semestre 2007 Del total de pacientes egresados del Servicio de Neurología a causa de ACV, la mayor cantidad de ellos corresponde al sexo masculino (52,45%), mientras que un 47,55% corresponde al sexo femenino (Tabla I). 23 Tabla I: Número de pacientes con ACV según género Género n % Hombre 139 52,45 Mujer 126 47,55 Total 265 100 Para la variable edad, los datos fueron agrupados en rangos. El rango donde se encuentra la mayoría de los casos de ACV en el periodo de estudio es entre 61 y 75 años, representando un 40% del total de casos (Tabla II). El promedio de edad de la muestra corresponde a 68,26 años, con un rango entre 22 y 96 años. La moda corresponde a los 77 años y la desviación estándar es de 13,78, representando una dispersión mayor a la población fallecida. El promedio de edad cuya condición es fallecido, es mayor al promedio de la población total, mientras que el de los casos donde su condición es de vivo, el promedio de edad es menor al de la población total (Tabla III). Tabla II: Número de pacientes con ACV según rango etario en años. Edad 22-30 n 1 % 0,38 31-45 19 7,17 46-60 48 18,11 61-75 106 40,0 76-90 86 32,45 91-96 5 1,89 Total 265 100,0 24 Tabla III: Estadística de edad en años según población total, vivos y fallecidos Promedio Total 68,26 Vivos 67,08 Fallecidos 78,67 Máxima 96 94 96 Mínima 22 22 60 Moda 77 77 88 Mediana 71 68 77 Desviación Estándar 13,78 13,70 9,68 De los 265 casos registrados en el período de estudio, los infartos se clasifican según diagnóstico clínico de egreso en ACV de origen isquémico (TACI, PACI, LACI y POCI) con 224 casos (84,53%) y ACV de origen hemorrágico (HIC y HSA) con 31 casos (11,70%) (Figura 2). Los CIT corresponden a 10 casos (3,77%). Figura 2: Número de episodios de infartos isquémicos y hemorrágicos Al realizar la clasificación de OCSP para los ACV de origen isquémico, se encuentra que la mayor frecuencia de casos corresponde a los ACV de tipo PACI con 115/224 casos (51,34%), le siguen los de tipo LACI con 61/224 casos (27,23%) y los POCI con 38/224 casos (16,96%) (Figura 3). 25 Figura 3: Número de episodios de ACV Isquémico (TACI: Infartos completos de la circulación anterior, PACI: Infartos parciales de la circulación anterior, LACI: Infartos lacunares, POCI: Infartos de la circulación posterior) En cuanto a los factores de riesgo fue consignada su presencia o ausencia en los casos de ACV registrados en el periodo de estudio. Se muestra que la HTA es el factor de riesgo más frecuente con un 70.94%, le siguen la DM con un 23,77% y la Dislipidemia con un 20,55% (Tabla IV). Tabla IV: Presencia de factores de riesgo clásicos en pacientes con ACV Factor de Riesgo n % HTA 188 70.94 DM 63 23.77 Dislipidemia 55 20.55 ACV previo 52 19.62 Tabaquismo 51 19.25 Cardiopatía emboligena 40 15.09 OH 18 6.79 Obesidad 16 6.04 Hipertrofia VI 11 4.15 Uso de drogas ilícitas 6 2.25 Trombofilia 4 1.51 26 La HTA y la DM son los dos factores de riesgo más comunes en el ACV, excepto en la HSA, donde existe sólo un caso, el cual no presenta ninguno de estos dos factores de riesgo. En el resto de los casos, ambos están presentes. Según tipo de ACV, en los de origen isquémico, la HTA se encuentra en 158/ 224 casos (70.54%), con una mayor frecuencia en los POCI (84.21%). En cambio, en los ACV hemorrágicos ésta presente en 21/ 31 casos (67.74%). La DM se encuentra en 59/224 casos (26.34%) para los ACV de origen Isquémico y su mayor porcentaje lo encontramos en los POCI (39,47%). En cuanto a los ACV de origen hemorrágico, se presenta en 1/31 casos (9.68%). Finalmente, en cuanto a los CIT, se observa que un 90% presenta HTA y un 10% DM. (Tabla V). Tabla V: Distribución de pacientes según tipo de ACV y presencia de factores de riesgo HTA DM Tipo de ACV Total ACV Total % Total % TACI 10 8 80 1 10 PACI 115 74 64,35 25 21,74 LACI 61 44 72,13 18 29,5 POCI 38 32 84,21 15 39,47 HIC 30 21 70 3 10 HSA 1 CIT 10 9 90 1 10 265 188 70,94 63 23,77 (TACI: Infartos completos de la circulación anterior, PACI: Infartos parciales de la circulación anterior, LACI: Infartos lacunares, POCI: Infartos de la circulación posterior, HIC: Hemorragias intracerebral, HSA: Hemmorragia Subaracnoídea, CIT: Crisis isquémica transitoria). De la totalidad de los pacientes en estudio, 238 (89,81%) egresaron en condición de vivos y 27 (10,19%) fallecen durante la hospitalización (puntaje 6 27 en el Score en la Escala de Rankin Modificada). De los pacientes vivos, 74/238 (27,92%) fueron derivados a kinesiología. Del total de pacientes vivos, egresan con grado 1 del Score en la escala de Rankin (según funcionalidad) 90 pacientes que corresponde a un 33,96%, representando el grado más común de la población de estudio y 127 pacientes se encuentran entre los rangos 2 y 5 lo que corresponde al 47.92%. (Tabla VI). Tabla VI: Distribución de los pacientes según Score en la escala de Rankin Modificada RANKIN AL EGRESO 1 n % 90 33,96 2 33 12,45 3 38 14,34 4 38 14,34 5 18 6,79 6 27 10,19 No consignado Total 21 7,92 265 100 De los 238 pacientes que egresaron en condición de vivos, 74 (31,09%) fueron derivados a Kinesiología y 164 (68,91%) no lo fueron. Figura 4: Derivación a kinesiología en pacientes vivos. 28 VI. CONCLUSIONES Del total de epicrisis revisadas en el Servicio de Neurología del CABL, 265 corresponden a diagnóstico clínico de ACV al egreso, lo cual indica que es el diagnóstico más frecuente, abarcando más de la mitad de los casos totales en este Servicio. De los datos obtenidos de las epicrisis revisadas en el Servicio de Neurología del Hospital, se concluye que la mayoría de los pacientes son de sexo masculino. Respecto a la edad, el promedio del total de los casos, está dentro del rango de edad de distribución más común en la población de estudio, sin embargo, el promedio de edad de los pacientes fallecidos, no se encuentra dentro de este rango y es mayor al promedio obtenido por los pacientes que egresan en condición de vivos, el que sí cae dentro de la distribución etaria más común. Acerca del tipo de ACV, se concluye que la gran mayoría de los casos corresponden a ACV de tipo isquémico. El resto de los casos corresponden a ACV de tipo hemorrágico y la minoría fue clasificada como CIT. Según la clasificación de OCSP para los ACV isquémicos, el subtipo que presenta el mayor porcentaje en la población de estudio corresponde a los Infartos Parciales de la Circulación Anterior (PACI), le siguen los Infartos Lacunares (LACI) y posteriormente los Infartos Parciales de la Circulación Posterior (POCI). En relación los factores de riesgo, se observó que la HTA es significativamente el más común en la población de estudio, cuyos valores están por sobre el resto de los factores de riesgo. Posteriormente, al asociar la HTA con los ACV de origen isquémico, incluidas las CIT, este factor de riesgo se encuentra en la 29 mayoría de los casos, al igual que en los de origen hemorrágico, donde la distribución es un poco menor, pero sigue siendo el factor de riesgo más común. Luego de la HTA, el factor de riesgo más común en la población, es la DM, sin embargo, la cantidad de casos encontrados con DM es bastante menor a los encontrados con HTA. Finalmente, se observó que la mayor cantidad de casos corresponden al grado 1 del Score en la escala de Rankin Modificada, es decir, pacientes sin incapacidad, capaces de realizar todas sus actividades previas sin limitación mental ni física. Luego del grado 1, los grados aumentan en relación a la incapacidad, siendo el grado 6 la muerte del paciente, representando en el estudio a la población fallecida, la cual, es bastante menor a la población que egresa en condición de viva. Por lo tanto, la mayoría de los casos, se encuentran entre los grados 2 y 5, es decir, son pacientes que egresan con algún tipo de incapacidad funcional que va desde leve a severa, lo que podría indicar que estos pacientes necesitan de atención kinesiológica. Sin embargo, del total de casos en que el egreso fue en condición de vivo, un bajo porcentaje de los pacientes fueron derivados a kinesiología. 30 VII. DISCUSIÓN Si bien los datos de este estudio muestran el perfil del paciente con ACV dentro de un centro hospitalario de la Región Metropolitana, hay otras variables que no fueron consignadas en éste, como por ejemplo las infecciones intrahospitalarias como la neumonía, las cuales inciden en la evolución de esta patología aumentando su estada hospitalaria, pero no son propias al paciente con ACV hospitalizado, por lo cual, no fueron desarrolladas en este estudio. Es así como los datos obtenidos fueron aquellos que, mediante la literatura, se pueden establecer como parte de un ACV. El ACV fue la principal causa de egreso del Servicio de Neurología durante el primer semestre del año 2007, lo cual es considerablemente menor a lo ocurrido en el año 1997 en el mismo centro. Sin embargo, sigue siendo la mayor causa de egreso de este Servicio. Los casos de ACV según género, no concuerdan con la literatura (Nogales, J. 2000) e información estadística nacional (INE 2002), donde se señala que la mayor cantidad de pacientes con ACV son de sexo femenino. El promedio de edad de los casos es similar a lo encontrado en otro estudio en nuestro país, donde se muestra un promedio levemente por debajo de lo hallado en el estudio actual (66,8) (Tapia, J. 1992). Sin embargo, el actual promedio está 4 puntos más arriba del promedio de edad en comparación a un estudio realizado en el CABL (Nogales, J. 2000). El porcentaje de presentación para los ACV de tipo isquémico (incluidos CIT) concuerda con las cifras alcanzadas en países desarrollados como EEUU, donde este tipo de ACV alcanza un 80% y se contrapone a lo señalado para 31 países de Latinoamérica donde los de origen hemorrágico representan entre un 23% y un 46% del total de los ACV (Saposnik, G. 2003). La mayoría de los ACV registrados corresponden a PACI, lo cual concuerda con un estudio publicado el año 2006 realizado en el Hospital Clínico de la Universidad de Chile. Sin embargo, en este estudio, el ACV con mayor frecuencia luego del PACI es el POCI, lo que difiere con el presente estudio, donde el segundo lugar lo ocupa el ACV de tipo LACI y el tercer lugar el de tipo POCI (Díaz, V. 2006). Hay acuerdo con que la HTA es el factor de riesgo más común para los casos de ACV. Los otros 4 factores de riesgo que siguen a la HTA de mayor a menor frecuencia son: DM, dislipidemia, ACV previo y tabaquismo. Cabe destacar que la relación que existe entre casos totales de ACV y cantidad de factores de riesgo es de 1,9, lo cual representa que por cada caso de ACV puede existir más de un factor de riesgo. A partir del Score en la Escala de Rankin Modificada se obtiene el grado de funcionalidad del paciente al egreso hospitalario, donde la mayoría de casos registrados corresponden al grado 1. Esto significa que es un paciente sin incapacidad mental ni física y con la capacidad de realizar sus actividades previas sin inconvenientes. El porcentaje de casos en que el Score fue 6, es mucho menor a lo publicado en el mismo centro hospitalario hace 10 años, lo que podría significar que después de este estudio, hubo un cambio en el manejo del paciente con ACV, el cual tuvo repercusión en cuanto a la mortalidad hospitalaria del paciente, ya que este estudio constituyó la base de un proyecto de innovación en el manejo del ACV agudo. 32 El bajo porcentaje de derivación a Kinesiología se puede explicar debido a que la mayoría de los casos egresaron con un Score en la Escala de Rankin Modificada grado I, sin embargo, el resto de los pacientes vivos que sí presentan un grado de incapacidad motora (47,92%) no necesariamente fueron derivados. Esto podría ser explicado por razones médicas, sociales, económicas y familiares. 33 VIII. PROYECCIONES El presente estudio puede ser utilizado como una base de datos actualizada para conocer las características del paciente egresado con diagnóstico de ACV en un centro de Salud de la Región Metropolitana. La información que entrega este estudio permite tener un conocimiento actual acerca de las características de esta patología, en el mismo año donde es integrada de manera oficial al programa GES y en proyecto de ser integrada al programa PAME. La información acerca de los factores de riesgo son de suma importancia en el área de prevención y salud pública, ya que este registro incitaría a realizar un adecuado control y tratamiento para aquellos que mostraron ser de mayor frecuencia en la población de estudio, ya que a pesar de que la HTA es uno de los factores de riesgo más controlados en la actualidad, sigue siendo el más importante para el ACV. Este estudio deja la inquietud de seguir investigando acerca de por qué los pacientes a pesar de tener un Score mayor a 1 en la Escala de Rankin Modificada, y que no hayan fallecido, no sean derivados a Kinesiología, sabiendo que éstos sí presentan un compromiso funcional y/o motor. El conocimiento de esto podría fomentar una correcta derivación por parte de los neurólogos y sería un paso importante para realizar con estos pacientes un trabajo transdisciplinario sin olvidar el rol de la familia en la posterior recuperación del paciente, ya que muchas veces, debido a la falta de recursos económicos y problemas en el traslado del paciente para sus futuras terapias, al abandono y a la negación de ellos para iniciarla, hacen que el paciente no concurra a su posterior y tan importante rehabilitación. 34 BIBLIOGRAFÍA 1. Arboix, A., Díaz, J., Pérez-Sempere, A., Álvarez, S. 1998. Ictus: Clasificación y criterios diagnósticos. Sociedad Española de Neurología (SEN). 13: 3-10. 2. 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Scottish Intercollegiate Guidelines Network (SIGN). 2002. Management of patients with srokes. Rehabilitation, prevention and management of complications, and discharge planning a national clinical guideline. 64. 28. Tapia, J., Corbalán, R., Huete, I. 1992. Estudio multidisciplinario del Accidente Vascular Encefálico. Revista Médica de Chile. 120: 1414-1422. 29. Whisnant, J.P. 1984. The decline of Stroke. Stroke. 15 (1): 160-168. 30. Whisnant, J. P.1997. Modelling of risk factors for ishaemik stroke. The Willis Lecture. 28: 1840-1844. 31. WHO (World Health Organization). The world health report. 2003. Shaping the future, Geneva: world Health Organization. 37 ANEXOS ANEXO 1 Clasificación según localización anatómica Se pueden clasificar en (Lacruz, F. 2000): 1. Infartos en territorio de carótida interna La clínica provocada por la enfermedad ateromatosa de la arteria carótida interna es muy variable. El mecanismo puede estar en relación con estenosis crítica u oclusión trombótica con embolismo distal arteria-arteria desde la placa arterioesclerosa ulcerada, o la hemorragia intraplaca con oclusión aguda. En su máxima expresión puede manifestarse como un infarto masivo del territorio de las arterias cerebral media y cerebral anterior. La arteria carótida interna puede ocluirse en ausencia completa de síntomas si existe una buena circulación colateral a través del polígono de Willis y del circuito pial. La Amaurosis fugax o ceguera monocular transitoria es un síntoma de estenosis u oclusión sintomática de arteria carótida interna y debe ser evaluada como una urgencia, tratando siempre de excluir patología carotídea ipsilateral especialmente en el adulto. La manifestación clínica más frecuente de enfermedad de la arteria carótida interna se debe a la pérdida de función neurológica de los territorios cerebrales irrigados por ramas de la arteria cerebral media, ya que la arteria cerebral anterior suele compensarse por la arteria comunicante anterior. Los síntomas más frecuentes son hemiplejia, hemianopsia, trastorno de sensibilidad, 38 desviación óculo-cefálica, trastorno del lenguaje y anosognosia, alteración de esquema corporal según el hemisferio cerebral afectado. 2. Infarto de la arteria cerebral media La oclusión trombótica o embólica del tronco principal de la arteria cerebral media produce déficit masivo grave como se ha descrito anteriormente. La oclusión de ramas superior/inferior o preferentes profundas da lugar a diversas variantes sindromáticas. 3. Infarto de la arteria cerebral anterior La obstrucción proximal de la arteria cerebral anterior puede compensarse por una arteria comunicante anterior permeable. Si no existe flujo o el contralateral es escaso, producirá debilidad de predominio en la pierna contralateral. Así mismo puede asociarse desviación óculo-cefálica, incontinencia urinaria, reflejos de liberación frontal, apatía, alteraciones conductuales, hipertonía oposicionista, etc. 4. Infartos del territorio vértebro-basilar La arteriosclerosis es la lesión predominante de la porción proximal u ostium de la arteria vertebral extracraneal. Está relacionada con la edad, el sexo masculino, la HTA, el tabaco y la enfermedad coronaria. La mayor parte de las oclusiones o lesiones graves de la arteria vertebral son un hallazgo incidental o juegan un pequeño papel en la isquemia cerebral y son marcadores de arteriosclerosis. No es infrecuente que estos pacientes tengan a menudo enfermedad carotídea o vértebro-basilar y coronaria. Cuando la enfermedad ateromatosa es la responsable de una isquemia cerebral el mecanismo más frecuente es el embólico arteria-arteria o embolismo intra-arterial. La patología 39 vertebrobasilar en sus diferentes aspectos ha sido descrita de forma minuciosa en una excelente monografía. ANEXO 2 Clasificación Etiopatogénica La siguiente clasificación se ha fundamentado en los criterios NINCDS (1990), criterios TOAST (1993), Laussane Stroke Registry (1997) y del Comité Ad Hoc del Grupo de Estudio de Enfermedades Cerebrovasculares de la Sociedad Española de Neurología (1998). Su puesta en marcha exige la realización de los diferentes exámenes complementarios encaminados a la valoración del estado cerebral Transcraneal, (TAC, RMN Angioresonancia cerebral) y y vascular Angiografía digital) (Doppler, y Doppler cardiovascular (Ecocardiografía). 1. Infarto aterotrombótico El infarto aterotrombótico ocurre cuando se forma un trombo sobre una placa ateroesclerótica u otra lesión del endotelio y de la pared arterial. Se asocia con ateroesclerosis de arterias extracraneales (bifurcación carotídea, carótida interna, arterias vertebrales) o grandes arterias intracraneales (arteria cerebral media, arteria cerebral posterior, o arteria basilar) en ausencia de otra etiología que lo explique. El infarto aterotrombótico suele ir asociado a factores de riesgo vascular: hipertensión, diabetes mellitus, tabaquismo, hiperlipemia, sobrepeso, y suele asociarse a enfermedad aterosclerótica sistémica (cardiopatía isquémica, enfermedad arterial periférica). A efectos de clasificación es necesario recalcar que el infarto aterotrombótico y el embólico arteria-arteria se incluyen en el mismo grupo. 40 2. Laussanne Stroke Registry a. Aterosclerosis con estenosis ≥50% de la luz u oclusión de la arteria extracraneal correspondiente o de las arteria cerebral media, anterior, posterior y la arteria basilar en ausencia de otra etiología. b. Aterosclerosis sin estenosis o con estenosis < 50% en la arteria cerebral media, anterior, posterior y la arteria basilar en ausencia de otra etiología y en pacientes con por lo menos dos de los siguientes cinco factores de riesgo: >50 años, HTA, diabetes, tabaquismo o hipercolesterolemia. 3. Criterios TOAST En esta clasificación el diagnóstico de ictus aterotrombótico no puede establecerse si el Doppler, o angiografía son normales o con mínimas alteraciones (< 50% de estenosis). El infarto hemodinámico se incluye también dentro del grupo aterosclerótico. Su etiopatogenia está relacionada con fenómenos de hipoperfusión por lo general debida a hipotensión sistémica asociada a enfermedad vascular oclusiva proximal a la lesión parenquimatosa e inadecuada circulación colateral. Puede ocurrir en ausencia de ateromatosis grave o significativa de los troncos supraórticos. En estos casos se asocia a paro cardíaco y cirugía extracorpórea. Las lesiones tienden a producirse en territorios fronterizos entre las zonas de irrigación de dos arterias principales (cerebral media y cerebral anterior, en el lóbulo frontal y centro semioval) (entre cerebral media y cerebral posterior en región parieto-occipital). Se distinguen dos tipos de infartos fronterizos ("borderzone"): 41 a. Infartos limítrofes: entre dos territorios arteriales con red colateral arteriolar recíproca, por ejemplo las regiones piales. También denominados en inglés "watershed infarcts" b. Infartos término-terminales o "end artery border-zone infarct": entre dos territorios arteriales sin circulación colateral. Así los infartos subcorticales entre las arterias lenticuloestriadas y las medulares de las arterias corticales o piales. 4. Infarto en relación con enfermedad de vaso pequeño Se debe en general a oclusiones de las arterias de pequeño calibre con cuadro anatomo-patológico degenerativo de la pared arterial conocido como lipohialinosis, estrechamente relacionados con la hipertensión arterial. Se refiere al infarto de pequeño tamaño (menor de 1,5 cm) en el territorio de las arterias perforantes profundas, generalmente en pacientes con hipertensión y diabetes como factores de riesgo. Desde el punto de vista clínico suele cursar con un síndrome lacunar y corresponde al llamado infarto lacunar. 5. Infarto embólico En este apartado nos referiremos exclusivamente a los infartos por embolismo de origen cardiaco. Su diagnóstico exige la presencia de una fuente embolígena mayor o de alto riesgo y ausencia de enfermedad aterosclerótica significativa. Los infartos suelen ser de tamaño medio o grande. 6. Otras etiologías o de causa inhabitual En ella se agrupan una variedad de causas más o menos heterogéneas de isquemia cerebral (disección arterial, displasia fibromuscular, aneurisma sacular, vasculitis infecciosa o inflamatoria, síndrome antifosfolípido, etc. 42 7. Infartos de causa no determinada a. Aquellos infartos en los que no se descubre una causa después de realizar el estudio exhaustivo, en ausencia de factores de riesgo que lo expliquen. Constituyen el verdadero infarto de etiología indeterminada. b. Los caracterizados por un estudio incompleto, por lo general en ausencia de estudios vasculares (doppler, angiografía). En este grupo se incluyen generalmente pacientes con déficits iniciales muy graves o de muy avanzada edad. c. Los caracterizados por la coexistencia de dos o más causas potenciales de enfermedad vascular cerebral isquémica. La comorbilidad es rara, cerca del 7%, aumenta con la edad y suele combinar la etiología aterotrombótica y la cardioembólica. ANEXO 3 Clasificación y definición del infarto cerebral del proyecto Ictus de la comunidad Oxfordshire En 1991 la Oxfordshire Community Stroke Project propuso una nueva clasificación validada con posterioridad en numerosos trabajos, destacando que permite valorar la localización y tamaño de la lesión además de ofrecer información pronóstica precoz, rápida, sencilla y de alta probabilidad. En una reciente publicación se demuestra que la clasificación OCSP puede predecir el tamaño y localización de la lesión en el 75% de los pacientes. 43 1. Infartos completos circulación anterior (ICCA o TACI) Combinación de disfunción cerebral cortical como disfasia, discalculia, trastorno visuoespacial con hemianopsia y déficit motor y/o sensitivo que afecta por lo menos a dos áreas (cara, brazo, pierna). En presencia de alteración de la conciencia se asume afectación de la función cortical. Territorio de la arteria cerebral media completo superficial y profundo, o cerebral anterior. Alta mortalidad precoz (con frecuencia por hernia transtentorial). Posibilidad escasa de buena recuperación funcional. Etiología cardioembólica (la más frecuente) y aterotrombótica. 2. Infartos parciales de la circulación anterior (IPCA o PACI) Pacientes con sólo dos de los tres componentes del ICCA, con trastorno cortical aislado, o con déficit sensitivo y/o motor más restringido que aquellos clasificados como infartos lacunares (confinado a un miembro o a la cara y mano pero no a todo el brazo). La localización más prevalente es la división superior e inferior de la arteria cerebral media, estriato capsulares y cerebral anterior. La mayoría obedecen a embolismo arteria-arteria o cardíaco. Estos infartos manifiestan una tasa alta de recurrencia precoz, con díficits acumulativos. 3.Infartos lacunares (LACI) Clínica de síndrome lacunar clásico. Se excluyen casos con afectación monomiélica. Hay una baja tasa de mortalidad, pero alta proporción de pacientes funcionalmente afectados. 44 4. Infartos de la circulación posterior (ICP o POCI) Presentan cualquiera de los siguientes síndromes: síndrome alterno con participación de pares craneales, déficit sensitivo/ o motor bilateral, trastorno conjugado de la mirada, disfunción cerebelosa, no ataxia hemiparesia, o déficit campimétrico aislado. Riesgo significativo de recurrencia. Mortalidad inicial baja. El embolismo arteria-arteria o cardiaco constituyen la principal causa de los infartos múltiples de la circulación posterior. ANEXO 4 Score en Escala de Rankin Modificada Grado Definición I Sin incapacidad: capaz de realizar todas sus actividades previas sin limitación mental ni física. II Incapacidad leve: incapacidad de realizar algunas de las actividades previas o disfasia leve, pero capaz de cuidar de sí mismo y sin deterioro orgánico cerebral. III Incapacidad moderada: capaz de caminar sin ayuda, pero necesita algún apoyo para vestirse y aseo y/o disfasia moderada y/o deterioro leve. IV Incapacidad moderadamente severa: requiere ayuda para caminar y cuidado de sí mismo y/o deterioro orgánico cerebral severo. V Incapacidad severa: postrado en cama o silla, habitualmente incontinente, requiere constante apoyo de enfermería y atención. VI Fallece 45