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A da 6 2 SOC I E DA octubre 2015 OLOGI C C HILE un F la serena GE DE D d a e n 19 Comportamiento geoeléctrico de una zona de falla: resistividad eléctrica y arquitectura de un segmento del Sistema de Falla Liquiñe-Ofqui ,1,2 1,2 1 1 1 1 Tomás Roquer* , Gloria Arancibia , Nicolás Pérez-Estay , Gonzalo Yáñez , Ronny Figueroa , Pablo Iturrieta 1. Departamento de Ingeniería Estructural y Geotécnica, Pontificia Universidad Católica de Chile; 2. Centro de Excelencia en Geotermia de los Andes (CEGA) * E-mail: teroquer@uc.cl Resumen. El comportamiento geoeléctrico de zonas de falla que no afloran se ha estudiado desde escala métrica a kilométrica por diversos autores, quienes han sido capaces, por ejemplo, de inferir las dimensiones de los componentes de una zona de falla (núcleo vs. zona de daño . Sin embargo, la aplicación de este método en afloramientos de zonas de falla es escasa, a pesar de la importancia de poder validar estas mediciones con la observación geológica directa. En este estudio se presentan resultados preliminares del comportamiento geoeléctrico en una zona de falla aflorante del Sistema de Falla Liquiñe-Ofqui. Los resultados sugieren que es posible discriminar la respuesta geoeléctrica de los dominios estructurales principales: el núcleo se muestra como un conductor, mientras que la zona de daño presenta mayor resistividad relativa. Esta metodolog a podr a ser utilizada para una mejor caracterización de zonas de falla. Palabras Claves: arquitectura de una zona de falla, método geoeléctrico, resistividad eléctrica, Sistema de Falla Liquiñe-Ofqui 1 Introducción Desde el punto de vista de su arquitectura, una zona de falla está compuesta de un núcleo (simple o múltiple) o una zona de daño que lo rodea (Faulkner et al., 2010). Las propiedades geoeléctricas de zonas de falla, en estructuras de escala decamétrica a kilométrica, han sido estudiada por distintos autores. Por ejemplo, se han realizado estudios magnetotelúricos para inferir la geometría de zonas de falla activas y la estructura eléctrica de zonas de subducción (e.g. Ingham, 2005; Xiao et al., 2012). Asimismo, Ball et al. (2010), a partir de sondajes eléctricos de resistividades a escala métrica a decamétrica, determinaron la disposición espacial y estructura interna de una zona de falla que no se mostraba en superficie. Sin embargo, aunque se ha logrado inferir la arquitectura de una zona de falla en base a su comportamiento geoeléctrico a diferentes escalas, estas inferencias no han sido validadas por la observación directa de un afloramiento que exhiba claramente su núcleo y zona de daño. Este estudio tiene por objetivo evaluar cómo se correlacionan las propiedades resistivas de una zona de falla con su arquitectura, tomando como caso de estudio un afloramiento expuesto de la traza norte del Sistema de 21 Falla Liquiñe-Ofqui (SFLO). En esta zona se realizó un levantamiento de datos estructurales y un estudio geoeléctrico de corriente continua en roca, para observar la relación entre las propiedades eléctricas y la arquitectura de una zona de falla a una escala decimétrica a métrica. 2 Marco conceptual 2.1 Marco Geológico y Tectónico El Sistema de Falla Liquiñe-Ofqui (SFLO) es un sistema de fallas intra-arco de ca. 1200 km de longitud desarrollado a partir del mesozoico y aún activo. Sus trazas maestras tienen rumbo NS a NNE y sus trazas subsidiarias tienen rumbo NE a ENE, con movimiento dextral y dextral-normal mayormente desarrollado durante los últimos 6 Ma (Cembrano y Lara, 2009; Melnick et al., 2006). El afloramiento de estudio corresponde a una sección de ca. 100 m de longitud y está ubicado en la traza norte del SFLO, donde la zona de falla corta rocas andesíticas miocenas de la Formación Curamallín (Figuras 1a y 1b). 2.2 Estudio geoeléctrico 2D Este método geofísico busca obtener una sección de resistividades aparentes usando la ley de Ohm y ecuaciones de Maxwell (Telford et al., 1990). Mediante esta ley constitutiva, para obtener la resistividad de un medio se hace circular una corriente controlada I, midiendo el voltaje V que genera esta corriente (Figura 2). Dados estos parámetros, se obtiene la resistividad aparente ρ de acuerdo a la siguiente expresión: 𝜌𝜌 = 𝑉𝑉2𝜋𝜋 𝐼𝐼𝐼𝐼 Donde G se conoce como un factor geométrico, que corrige la distancia relativa entre puntos de inyección de corriente y medición del potencial eléctrico asociado. Para este estudio se utilizaron las geometrías dipolo-dipolo y Schlumberger. En la mayoría de las rocas superficiales la resistividad medida está determinada críticamente por la cantidad de agua, la concentración de iones disueltos, la mineralogía de las rocas y, secundariamente, por la ST 1 TECTÓNICA Y DEFORMACIÓN CORTICAL ANDINA temperatura (Grant y West 1965; Zohdy, 1974; Revil et al. 1998). 3 Metodología En este trabajo se utilizó la combinación de información geológica de campo y una prospección geofísica de la resistividad de la roca. Para ello se realizó un levantamiento de datos estructurales y se midió la respuesta geoeléctrica de las unidades litológicas mediante un estudio geoeléctrico de corriente continua 2D, a lo largo de un segmento ortogonal al núcleo de la zona de falla, en una transecta de 22 m de longitud (Figura 1c). La medición geoeléctrica se llevó a cabo utilizando el equipo eléctrico TIGRE soportado por el software ImagerPro2006. La instalación en terreno consideró un ensayo realizado en una sección de roca, cuyo perfil entrega un modelo de resistividad en planta. Cada línea eléctrica contó con dos tendidos que se traslaparon con el propósito de conseguir una mayor resolución espacial en la zona de interés. Los distancia dipolar fue de 0.5 m y cada tendido constó de 32 electrodos con un traslape de 23 estacas. Esto conforma una línea de 41 electrodos de una longitud de 20 m, que podría teóricamente tener una penetración máxima de 5 m (Figura 2) Con el perfil de resistividades aparentes se realizó una inversión de datos para obtener una sección geoeléctrica, para lo cual se usó el software proporcionado por el equipo, ImagerPro 2006. El software Oasis fue utilizado para la presentación de los resultados finales. un dominio conductor al SW del dominio anterior, con resistividades que varían entre 30-350 ohm-m (dominio 3); y (iv), un dominio resistivo al NE del perfil, con mayor, cuyos valores oscilan-varían entre 250 y 500 ohm-m (dominio 4). 5 Discusión y conclusiones preliminares Los resultados estructurales y eléctricos sugieren que la arquitectura de la zona de falla se ve reflejada en las resistividades obtenidas (Figuras 3a y 3b). Se considera que el dominio resistivo horizontal (dominio 1) es el resultado de la meteorización reciente de la roca expuesta, por lo que está sometida a un proceso similar en toda la extensión del ensayo únicamente en la zona más somera. Por otro lado se pueden correlacionar los valores menores de resistividad de los dominios 2 y 3 al núcleo y zona de daño muy fracturada en el bloque colgante. Asimismo, el dominio 4, un cuerpo resistivo respecto a su medio, tiene un comportamiento geoeléctrico consistente con el hecho de que el bloque yacente presente menor desarrollo de vetas. En ese sentido, se puede apreciar que el contraste de resistividad entre el bloque colgante y el núcleo versus el bloque yacente, es en promedio 300 ohm-m. Estos resultados son consistentes con la mayor densidad de fracturas del bloque colgante y la naturaleza del núcleo, donde el relleno mineral y la presencia de fases hidratadas jugarían un rol de primer orden en las resistividades medidas. De este trabajo se pueden extraer las siguientes conclusiones preliminares: a) 4 Resultados El levantamiento estructural mostró una zona de falla que corta roca andesítica, con un núcleo simple de 0.5 m de potencia y una zona de daño asimétrica de 5 m potencia en el bloque colgante y 15 m en bloque yacente. El núcleo, de 0.5 m de espesor, está compuesto de un dique microdiorítico con salbanda de falla en sus bordes y tiene rumbo WNW. La zona de daño presentó un mayor desarrollo de vetas en el bloque colgante que en el bloque yacente, mostrando discontinuidades centimétricas a decimétricas rellenas de ceolitas. Por otro lado, la sección geoeléctrica en planta mostró valores de resistividad que varían entre 30-750 ohm-m. Como muestra la figura 3a, se tienen valores resistivos relativos (en rojo), conductores (en azul) y combinaciones intermedias. En la sección eléctrica se logró distinguir cuatro dominios (Figura 3a): (i) un dominio horizontal (dominio 1) y resistivo de ca. 0.5 m de espesor, con valores que varían entre 100 -750 ohm-m; (ii) un dominio conductor penetrativo, de potencia cercana a 0.5 m, con valores que varían entre 30-200 ohm-m (dominio 2); (iii) A pesar de que la litología del bloque colgante y yacente es la misma, una roca andesítica, la diferencia entre la naturaleza del núcleo (dique microdiorítico con salbanda de falla) y la roca de caja (roca andesítica) se tradujo en una diferencia de resistividad medible (ca. 300 ohm-m). b) La información geoeléctrica de un estudio geoeléctrico 2D puede reflejar la arquitectura de una zona de falla a escala decimétrica a métrica. Por ende, y en concordancia con Ball et al. (2010), este método geofísico podría aplicarse en la caracterización de zonas de falla fósiles que no afloren en superficie. Agradecimientos Los autores agradecen al Centro de Excelencia en Geotermia de los Andes (CEGA, Proyecto FONDAP CONICYT 15090013) y al proyecto FONDECYT 1130030. El Equipo TIGRE fue aportado por el proyecto FONDEF D10I1027. 22 AT 1 GeoloGía ReGional y Geodinámica andina Referencias Ball, L.B.; Ge, S.; Caine, J.S.; Revil, A.; Jardani, A. (2010). Constraining fault-zone hydrogeology through integrated hydrological and geoelectrical analysis. Hydrogeology journal, 18(5), 1057-1067 Cembrano, J.; Lara, L. (2009). The link between volcanism and tectonics in the Southern Volcanic Zone of the Chilean Andes: A review. Tectonophysics, 471(1), 96–113. Faulkner, D.; Jackson, C.; Lunn, R.; Schlische, R.; Shipton, Z.; Wibberley, C.; Withjack, M. (2010). A review of recent developments concerning the structure, mechanics and fluid flow properties of fault zones. Journal of Structural Geology, 32(11), 1557–1575 Grant, F.S.; West, G.F. (1965). Interpretation theory in applied geophysics: Part 3, electrical conduction and electromagnetic induction methods. McGraw-Hill, New York Ingham, M. (2005). High resolution electrical imaging of fault zones. Physics of the Earth and Planetary interiors, 150(1), 93-105. Melnick, D.; Folguera, A.; Ramos, V. A. (2006). Structural control on arc volcanism: the Caviahue–Copahue complex, Central to Patagonian Andes transition (38 S). Journal of South American Earth Sciences, 22(1), 66-88. Revil, A.; Cathles, L.M.; Losh, S.; Nunn, J.A. (1998). Electrical conductivity in shaly sands with geophysical applications. Jounal of Geophysical Research. Solid Earth 103(B10):23925– 23936 Xiao, Q.; Zhang, J.; Wang, J.; Zhao, G.; Tang, J. (2012). Electrical resistivity structures between the Northern Qilian Mountains and Beishan Block, NW China, and tectonic implications. Physics of the Earth and Planetary Interiors, 200, 92-104. Zohdy, A.A.; Eaton, G.P.; Mabey, D.R. (1974). Application of surface geophysics to ground-water investigations. US Government Printing Office, 2-D1, pp 5–66. Figura 1. Contexto geológico del área de estudio. (a) Sistema de Fallas de Liquiñe-Ofqui. (b) Geología regional del área de estudio (en punto negro). (c) Afloramiento de la zona de falla de estudio, indicando núcleo y zona de daño en el bloque yacente y en el bloque colgante. 23 ST 1 TECTÓNICA Y DEFORMACIÓN CORTICAL ANDINA Figura 2. Esquema de la instalación de uno de los arreglos del estudio geoeléctrico 2D. I representa la corriente inyectada en la roca; V la diferencia de potencial media. Los electrodos de corriente están representados por C1 y C2; mientras que los de potencial por P1 y P2. Arreglo Schlumberger. = = 2 = = = Figura 3. (a) Resultados de la inversión eléctrica para un perfil de 20 m medido en roca (vista en planta). (b) Modelo conceptual de los dominios eléctricos evidenciados en la arquitectura de la zona de falla. 24