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Evaluaciones de conducta funcional:
¿Qué, por qué, cuándo, dónde, y quién?
por Stephen Starin, Ph.D.
Las recientes enmiendas a la ley IDEA son finales. Los distritos escolares están obligados a
realizar análisis de comportamiento funcional de los problemas de conducta, bajo ciertas
circunstancias.
Desafortunadamente, IDEA no proporciona líneas específicas sobre la realización de una
evaluación funcional de conducta. Cada distrito escolar se deja a su suerte en la
interpretación de las líneas y normas y puede optar por opciones de menor calidad.
A continuación se encuentran mis comentarios sobre la realización de una evaluación de
comportamiento funcional (FBA por sus siglas en Ingles). Estos comentarios se basan en
mi entrenamiento formal como analista de comportamiento y más de 20 años de
experiencia trabajando con niños, adolescentes y adultos con problemas de conducta
graves. He tratado de evitar la jerga técnica para facilitar la discusión.
¿Qué es una "Evaluación Funcional del Comportamiento"?
El término "Evaluación funcional del Comportamiento" viene de lo que se llama una
"evaluación funcional" o "Análisis Funcional" en el campo del análisis aplicado del
comportamiento. Este es el proceso de determinar la causa (o "funciones") del
comportamiento antes de desarrollar una intervención. La intervención debe basarse en la
causa hipotética (función) de la conducta.
¿Por qué hacer evaluaciones de conducta funcional?
El no basar la intervención en la causa específica (función) muy a menudo da lugar a
procedimientos restrictivos ineficaces e innecesarios.
Por ejemplo, consideremos el caso de un niño que ha aprendido que gritar es una forma
eficaz de evitar o escapar de las tareas desagradables. El uso de tiempo de espera (time out)
en esta situación sería proporcionar al niño exactamente lo que quiere (evitando la tarea) y
es probable que el problema se empeore y no que mejore. Sin una adecuada evaluación de la
conducta funcional, no sabríamos la verdadera función de los gritos del niño, por lo que
puede ser que se seleccione una intervención inapropiada.
¿Cómo se determina la causa o función de la conducta?
Hay tres maneras de llegar a la función (causa) de la conducta:
(A) entrevistas y escalas de calificación,
(B) observación directa y sistemática del comportamiento de la persona, y
(C) la manipulación de diferentes eventos ambientales para ver cómo los
comportamientos cambian.
Los dos primeros se conocen en general como evaluaciones funcionales mientras que la
tercera se refiere generalmente como un análisis funcional.
Varias entrevistas y escalas de calificación han sido desarrolladas para tratar de llegar a la
función (causa) de la conducta. Sin embargo, la confiabilidad es por lo general pobre y estos
deben ser utilizados sólo como punto de partida para la observación sistemática y directa
de la conducta de la persona. Confiar exclusivamente en entrevistas y escalas de calificación
nunca debe ser considerado una evaluación funcional. Además de tener escasa
confiabilidad, nunca se sostendría en la corte con un testigo experto.
Un método más confiable consiste en la observación directa de la conducta de la persona
en su entorno natural y el análisis de los antecedentes de la conducta (eventos ambientales
que preceden inmediatamente a la conducta problemática) y consecuencias (eventos
ambientales que siguen inmediatamente a la conducta problemática).
Tipos de problemas de comportamiento
Los problemas de comportamiento típicamente caen en uno o más de tres categorías
generales:
(A) El comportamiento que produce la atención y otros eventos que desee (por
ejemplo, el acceso a los juguetes, actividades deseadas),
(B) El comportamiento que permite a la persona evitar o escapar de las demandas u
otras actividades/eventos no deseados y
(C) el comportamiento que se produce a causa de sus consecuencias sensoriales
(alivia el dolor, se siente bien, etc.)
Los antecedentes y las consecuencias se analizan para ver qué función (es) el
comportamiento cumple. Los problemas de comportamiento también pueden servir más de
una función, complicando aún más el asunto. La entrevista, junto con la observación directa
de la conducta es lo que la mayoría de la gente utiliza para determinar la función de la
conducta. Esto está bien cuando los datos recogidos en los antecedentes y consecuencias
son claros. La mayoría de las veces, es suficiente para determinar el comportamiento de la
función (es).
La manipulación sistemática de Medio Ambiente
En algunos casos, sin embargo, la observación directa no da una imagen clara de las
funciones de la conducta y se hace necesaria la manipulación sistemática de diversos
eventos ambientales. La forma más común de la manipulación sistemática del medio
ambiente es poner a la persona en varias situaciones diferentes y observar cuidadosamente
cómo cambia el comportamiento.
Por ejemplo, para determinar la función delos gritos, podríamos prestarle atención al niño
cada vez que grita y medir la frecuencia con que se producen los gritos. También
podríamos hacer demandas al niño, deteniendo estas demandas cada vez que grita y medir
la frecuencia con que se produce. Además, se podría dejar al niño solo y medir la frecuencia
de los gritos. Si los gritos son más frecuentes cuando se presta atención, la hipótesis es que
los gritos se dan para llamar la atención. Si los gritos son más frecuentes cuando se le hacen
demandas, podemos suponer que los gritos han servido para que la persona escape o evite
las demandas. Por último, si gritar es más frecuente cuando se queda solo, se puede asumir
que se están produciendo debido a sus consecuencias sensoriales. Este tercer método debe
reservarse para situaciones en las que las funciones de comportamiento no son claras a
través de la observación sistemática y directa.
¿Qué hay de las capacidades y del entrenamiento?
Una pregunta importante es "¿Quién debe participar en la evaluación de la conducta
funcional?" La entrevista es importante en la recopilación de información preliminar que
servirá de guía para la observación directa. Como tal, es importante hablar con la gente que
conoce mejor al niño: padres, maestros y otras personas significativas.
La observación directa debe llevarse a cabo solamente por una persona que se ha entrenado
a fondo en la recolección y el análisis de este tipo de información. La manipulación directa
de los eventos del entorno debe ser llevada a cabo sólo por un analista de comportamiento
bien entrenado u otra persona con un alto grado de formación y experiencia en la
realización de estas manipulaciones ya que pueden presentar peligros a la persona
evaluada si no se hace correctamente.
Como se puede ver, una evaluación de comportamiento funcional es más que un grupo de
personas que se sientan alrededor de una mesa tratando de determinar la causa. Aunque es
importante recopilar información de las personas importantes en la vida de la persona, no
es suficiente.
Alguien con conocimientos sobre el comportamiento debe estar en el aula y / o en el hogar
observando directamente y midiendo la conducta. Aunque esto lleva tiempo, por lo general
es un tiempo bien empleado porque es más probable que la intervención sea más eficaz que
la desarrollada sin una cuidadosa consideración de la función (es) del comportamiento.
¡No pierda tiempo valioso!
El tiempo es precioso. El tiempo no debe ser desperdiciado en intervenciones (ya sea de
comportamiento o de otro tipo) cuando no hay evidencia de que esta intervención en
particular es probable que funcione, para este niño en particular, en esta situación
particular.