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Arzobispo Thomas Wenski
Curriculum Vitae
Tuesday, April 20, 2010
Communications Department - Archdiocese of Miami- PC
www.newmiamiarch.org
Lema: Ser todo para todos (1 Corintios 9:22)
El Obispo Wenski nació en West Palm Beach el 18 de octubre de
1950 y se crió en Lake Worth, Florida donde asistió a la escuela
Católica de su parroquia, Sacred Heart. Estudió en Miami, en el
Seminario San Juan Vianney, después en el Seminario Mayor San
Vincent de Paul en Boynton Beach, y se ordenó sacerdote de la
Arquidiócesis de Miami el 15 de mayo de 1976. Obtuvo el título
(B.A) de Filosofía (1972), y la Maestría en Divinidad (1975) del
Seminario de Boynton Beach, y en 1993 la Maestría de la Escuela
de Sociología de la Universidad de Fordham en Nueva York.
También ha tomado cursos de verano en la Universidad Católica
de Lublin (en Polonia).
Sirvió tres años como pastor asociado de la Iglesia de Corpus
Christi, una parroquia predominantemente hispana en Miami. En
1979, después de un breve ministerio en Haití, fue asignado al Apostolado haitiano recientemente creado
en la Arquidiócesis. Fue sub-director y más tarde director del Centro Católico Haitiano Pierre Toussaint
en Miami desde ese tiempo hasta su nombramiento como Obispo en 1997. El Centro Católico Haitiano
Pierre Toussaint, además de cubrir las necesidades pastorales y espirituales de las comunidades haitianas
del sur de la Florida, también proporcionó numerosos servicios sociales, educativos y legales a
inmigrantes haitianos recién llegados. Al mismo tiempo también sirvió como pastor de tres misiones
parroquiales haitianas en la Arquidiócesis - Notre-Dame d’Haití en Miami, Divine Mercy en Fort
Lauderdale, y San Joseph in en Pompano Beach.
En la década de los 80’s el Obispo Wenski realizó un ministerio ambulante que culminó en la creación de
comunidades Católicas haitianas en áreas desde Homestead en el sur, hasta Fort Pierce en el norte,
Immokalee al oeste y Fort Lauderdale al este. Su asistencia hacia la comunidad haitiana también se
extendió a Wachula, Winter Haven, y Ruskin en la costa oriental de la Florida.
Celebró la misa televisada semanal en inglés para los incapacitados en el canal local afiliado con ABC,
durante 1992-1997. Dirigió el Ministerio de Grupos Étnicos no hispanos de la Arquidiócesis de Miami.
En Enero de 1996, todavía siendo “Padre Wenski”, lo designaron Director Arquidiocesano de Caridades
Católicas, una de las agencias de servicios sociales Católicos más grandes en los Estados Unidos. En esta
capacidad ayudó a facilitar una colaboración con Caritas Cuba, el servicio social de la Iglesia Católica en
Cuba. Desde el 1996 ha viajado a Cuba a nombre de la Iglesia en innumerables ocasiones.
A fines de 1996 encabezó una operación de ayuda que entregó más de 150,000 libras de alimento a Caritas
Cuba para su distribución a personas que perdieron sus hogares debido al huracán Lily. Esta fue la
primera vez que los cubanos en Miami tomaron parte en un esfuerzo humanitario dirigido a Cuba. En
años subsiguientes, esfuerzos similares fueron dirigidos también a Haití, a la República Dominicana,
Colombia, y países de América Central.
Designado Obispo Auxiliar de Miami el 24 de junio de 1997, el Obispo Wenski fue ordenado al episcopado
el 3 de septiembre de 1997 junto con el Obispo Gilberto Fernández en el estadio de Miami.
Además de sus responsabilidades en la Arquidiócesis de Miami donde sirvió en numerosos comités, tales
como el Hospicio Católico, Caridades Católicas, Servicios Legales, y la Universidad de Santo Tomas, y
luego como Obispo Coadjutor y Ordinario de Orlando, también sirvió como Presidente del Comité de
Migración de la Conferencia de Obispos Católicos de los Estados Unidos (2001-2004), miembro del
Secretariado para América Latina de dicha Conferencia y de CLINIC [Red Católica Legal de Inmigración]
(1998-2001); y presidente del Comité de Política Internacional de la Conferencia (2004-2008) del cual
continúa activo como consultor al Comité de Migración, y miembro del Secretariado de la Conferencia
para la Iglesia en América Latina, el comité de Justicia y Paz Internacional, y CLINIC (Red Católica Legal
de Inmigración). Su trabajo en estos comités, lo ha llevado a viajar al Congo y a la región de los Grandes
Lagos de África, al Caribe, Centro y Sur América, al igual que a Israel y Palestina.
También ha servido en un sinnúmero de organizaciones cívicas en la comunidad, incluyendo la fundación
para personas sin hogar del condado de Miami-Dade, la junta Coordinadora del condado de Broward; y en
2001 el Gobernador Bush lo designó miembro de la junta a cargo de los desamparados en el estado de la
Florida. Actualmente, es el Moderador Episcopal de los Servicios Católicos para la Salud de la Conferencia
de Obispos Católicos en la Florida.
El Papa Juan Pablo II designó al Obispo Wenski como Obispo Coadjutor de la Diócesis de Orlando el 1º de
julio, 2003.
En Agosto 2004, el Ministro de Justicia de los Estados Unidos designó al Obispo Wenski para formar
parte del Grupo de Trabajo del Tráfico Humano.
En Septiembre 2004, el Gobernador Jeb Bush designó al Obispo Wenski para formar parte del Equipo
Operativo del Gobernador en Haití.
El Obispo Wenski asumió el cargo de cuarto Obispo de la Diócesis de Orlando el 13 de Noviembre, 2004.
El Obispo Wenski fue elegido presidente del Comité de Política Internacional de la Conferencia de
Obispos Católicos de los Estados Unidos el 16 de Noviembre del 2004.
En Octubre del 2007, el Obispo Wenski fue seleccionado para servir en la Junta Directiva de The Florida
Specialty Crop Foundation (La Fundación de Cultivos Especializados de la Florida), una caridad pública
sin fines lucrativos que responde a los retos que confrontan los fabricantes de cultivos especializados y sus
depositarios.
En Marzo del 2009, el Obispo Wenski se une al consejo de asesoría nacional del Instituto de Líderes
Católicos (Catholic Leadership Institute) por su programa “Buenos Líderes, Buenos Pastores”.
En Junio del 2009, el Obispo Wenski fue electo a un término de cuatro años a la Junta de Directores de La
Universidad Católica de América.
El 20 de abril del corriente año, el Papa Benedicto XVI lo designa como cuatro Arzobispo de Miami y la
Provincia Metropolitana de Miami (la cual incluye las siete diócesis del Estado de la Florida).
Será instalado como Arzobispo de Miami el 1ro de junio, 2010.
En adición a Inglés, el Obispo Wenski haba el Creole Haitiano y el Español con fluidez y predica y celebra
la Misa regularmente en ambos idiomas. Aprendió el español cuando era aún seminarista y trabajó con
varios grupos hispano parlantes incluyendo Cubanos, Puertorriqueños y Mexicanos durante su
entrenamiento en el seminario y sus primeros años de sacerdocio. También tiene conocimiento limitado
del polaco, el idioma de su padre inmigrante y su madre Polaco/Americana. Sus padres se mudaron a la
Florida desde Detroit, Michigan poco después de su matrimonio en el 1947. Ambos han fallecido. Su
hermana y su sobrina residen en Lake Worth. Es el único obispo nativo de la Florida.
Declaración Del Reverendísimo John C. Favalora, Arzobispo De Miami
Tuesday, April 20, 2010
Communications Department - Archdiocese of Miami- PC
En el día de hoy, se anunció oficialmente en
el Vaticano que el Papa Benedicto XVI ha
aceptado mi carta de renuncia como
arzobispo de Miami. Por casi dieciséis años
he tenido el privilegio y la bendición de
servir como arzobispo metropolitano de
Miami. Difícilmente existe un lugar tan
excitante y con tantos retos como el sur de
la Florida. Al iniciar la transición a mis
años de retiro, me llevo lindos recuerdos de
mi ministerio con nuestros dedicados
sacerdotes y diáconos, los maravillosos religiosos, religiosas y seminaristas, y el laicado fiel y trabajador
de la Arquidiócesis.
Hoy continúa la sucesión apostólica con el nombramiento del obispo Thomas Wenski, de la Diócesis de
Orlando, como el Cuarto Arzobispo Metropolitano de Miami. Con profunda alegría, damos la bienvenida
de regreso a casa al Arzobispo Wenski. Este hijo nativo nuestro nos sirvió muy bien en el pasado como
párroco, director del apostolado haitiano, director de Caridades Católicas, y obispo auxiliar. El Arzobispo
nos conoce muy bien y no es un extraño para nosotros.
Sus numerosos dones pastorales le califican excepcionalmente bien para ser nuestro pastor principal. Su
extenso entendimiento y su experiencia con las naciones de Centro y Sur América, y de las islas del Caribe,
fortalecerán las relaciones internacionales que ya disfrutamos. Sus destrezas en el lenguaje le facilitarán la
comunicación con las naciones y las iglesias vecinas.
Es con gran placer que ahora les presento al arzobispo Thomas Wenski.
Declaración de Arzobispo Designado Thomas Wenski
Tuesday, April 20, 2010
Communications Department - Archdiocese of Miami- PC
El 20 de abril, al aceptar la solicitud de retiro del Arzobispo
Favalora, el Papa Benedicto XVI me ha designado como el
cuarto arzobispo de la Sede Metropolitana de Miami.
Jesús una vez dijo a Pedro “Duc in altum” (Remar mar
adentro). Ahora el sucesor de Pedro me pide que haga lo
mismo confiándome esta nueva responsabilidad.
Se me ha llamado a regresar a la Iglesia local donde me ordené sacerdote y donde serví como sacerdote
parroquial y obispo auxiliar. Aquí, en el Sur de la Florida, aprendí cómo ser sacerdote entre los cubanos y
otros hispanos y luego pasé la mayoría de mi tiempo como sacerdote entre los haitianos cuya fe en medio
de adversidades nos ha impresionado mucho. Sintiéndome muy humilde ante la confianza que el Santo
Padre ha puesto en mí, y conciente de mis limitaciones y defectos, pido nuevamente la intercesión de
María, madre de la Iglesia, para poder dignamente cumplir con mis nuevos deberes como cuarto
Arzobispo de Miami una vez sea instalado el 1ro de junio de 2010.
Al regresar al Sur de la Florida, yo sé que esta comunidad tan diversa y a la vez muy dinámica me dará la
bienvenida y me hará sentir como en mi casa al volver a familiarizarme con la gente que vive en los
condados de Miami-Dade, Broward y Monroe que componen la Arquidiócesis.
Le ofrezco al Arzobispo John C. Favalora mis enhorabuenas. Deseo que su retiro le provea la oportunidad
de poder estar tan ocupado como desee – sin estar preocupado.
Esas preocupaciones recaen sobre mis hombros a partir del 1ro de junio. Me dicen que Miami tiene sus
retos, pero ¿es esto algo nuevo? El Señor nos dice: “No tengan miedo” (Mt 28:5). Pero el reto fundamental
que enfrentamos juntos es: “mostrar la capacidad de la Iglesia para promover y formar discípulos y
misioneros que respondan a la vocación recibida y comuniquen por doquier con desborde de gratitud y
alegría, el don del encuentro con Jesucristo. No tenemos otro tesoro que éste. No tenemos ninguna otra
dicha, ni otra prioridad que ser instrumentos del Espíritu de Dios, en Iglesia, para que Jesucristo sea
encontrado, seguido, amado, adorado y anunciado y comunicado a todos, no obstante todas las
dificultades y resistencias.” (Documento Conclusivo de Aparecida –V Conferencia de CELAM).
Cuando estaba en Orlando, siempre decía a mis sacerdotes que nunca les pediría que trabajaran más
fuerte que yo. A los sacerdotes de Miami, les digo lo mismo. Y los sacerdotes trabajan durísimo – y
nuestros fieles lo aprecian; y, tienen todo el derecho a esperarlo: no que nos quememos, pero sí que nos
consumamos por amor de ellos y de nuestro Señor. Al prepararme para ser el Arzobispo, les pido a todos
los católicos sus oraciones y su apoyo. Pido lo mismo de las otras comunidades cristianas y de las de los
judíos, los musulmanes y las demás comunidades de fe del Sur de la Florida, y espero colaborar con ellos y
con nuestros líderes cívicos y políticos para promover el bien común y la dignidad del ser humano creado
a “imagen y semejanza de Dios.”
Juan Pablo II nos recuerda: debemos recordar el pasado con gratitud, vivir el presente con entusiasmo y
mirar hacia el futuro con confianza. Y así, con una mezcla de gratitud, entusiasmo y confianza, deseo
concluir con estas palabras del Papa Benedicto XVI:
“A veces, el exceso de necesidades y lo limitado de sus propias actuaciones le harán sentir la tentación del
desaliento. Pero, precisamente entonces, le aliviará saber que, en definitiva, él no es más que un
instrumento en manos del Señor; se liberará así de la presunción de tener que mejorar el mundo —algo
siempre necesario— en primera persona y por sí solo. Hará con humildad lo que le es posible y, con
humildad, confiará el resto al Señor. Quien gobierna el mundo es Dios, no nosotros. Nosotros le
ofrecemos nuestro servicio sólo en lo que podemos y hasta que Él nos dé fuerzas. Sin embargo, hacer todo
lo que está en nuestras manos con las capacidades que tenemos, es la tarea que mantiene siempre activo
al siervo bueno de Jesucristo: « Nos apremia el amor de Cristo » (2 Co 5, 14).
Palabras de John C. Favalora Administrador Apostólico
Tuesday, April 20, 2010
Communications Department - Archdiocese of Miami- PC
Querido Monseñor/Padre: En el día de hoy, la Arquidiócesis de Miami ha recibido la buena nueva de que
nuestro Santo Padre, el Papa Benedicto XVI, ha nombrado a uno de nuestros reconocidos hijos nativos
como cuarto Arzobispo Metropolitano. A nombre de todos nosotros, felicito al arzobispo Thomas Wenski,
y le expreso nuestra alegría, oraciones y apoyo.
A la vez, deseo expresar mi agradecimiento a Su Santidad por haber tenido la bendición y el privilegio de
servirles como su pastor principal por casi 16 años. En el otoño de 2008, inicié el proceso de preparar mi
sucesión. Me parecía cada vez más claro que la complejidad de la Arquidiócesis ameritaba que se
considerara un coadjutor. Nuestra diversa mezcla de culturas, las múltiples relaciones e interacciones
internacionales debido a nuestro componente inmigrante, al igual que nuestros desafíos pastorales y
económicos, parecían indicar que al arzobispo sucesor le convendría tener tiempo para familiarizarse y
estar involucrado en las decisiones que afectarían su incumbencia.
A finales de 2008 recibí permiso para buscar un coadjutor, y a finales de la primavera de 2009 comenzó el
proceso oficial. En marzo de 2010, supe cuál era la selección del Santo Padre. De inmediato, me pareció
claro que nuestro nuevo arzobispo no tendría necesidad de familiarizarse, pues tenía muchos años más de
ministerio activo aquí que yo. No había razón para retardar su nombramiento hasta diciembre.
A mi juicio, realizar la transición más temprano sería de mayor provecho para las necesidades y el
bienestar de la Arquidiócesis. A solicitud mía, se me permitió presentar mi renuncia, y recibí la bendición
del Santo Padre de acuerdo con el canon 401, §2. Aunque reitero que aún disfruto de buena salud,
también reconozco que ya no tengo la fuerza ni el espíritu de los años anteriores.
Es más, reconozco que los actuales desafíos que enfrenta la Arquidiócesis ahora se pueden beneficiar de
nuevos ojos, entendimiento y energía. Creo que el arzobispo Wenski traerá estos y muchos otros dones a
este oficio. Él nos dirigirá muy bien. Dentro de poco, me mudaré a Villa McCarthy para iniciar mis años de
retiro, algo que hago con mucha paz. Agradezco a todos y cada uno de ustedes su dedicado servicio a
nuestro pueblo. Les agradezco su apoyo y oraciones durante mis años como su pastor principal. Juntos
hemos enfrentado muchas tormentas, y juntos hemos disfrutado la luz del sol. Les expreso mi
agradecimiento por manifestarme su amabilidad de tantas maneras.
Con la gracia de Dios, espero disfrutar un tiempo muy necesario para la lectura, la oración y para trabajar
entre los pobres, algo que anhelo con anticipación. Por último, deseo expresarles mis constantes oraciones
fraternales por ustedes. Les ruego que me encomienden a diario ante el Señor Eucarístico.
Que el Señor continúe bendiciéndoles en abundancia, y a su ministerio sacerdotal. Con los mejores
deseos, quedo de ustedes, sinceramente en el Señor,
John C. Favalora
Administrador Apostólico