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Capítulo 1 Limitaciones de los tratamientos tradicionales del trastorno bipolar Eduard Vieta, Marc Valentí, Juan Undurraga INTRODUCCIÓN El progreso de las ciencias de la salud lleva a la aparición de nuevos tratamientos en muchas áreas de la biomedicina e, indudablemente, el trastorno bipolar ha sido una de ellas. Ello no significa que los tratamientos clásicos no hayan contribuido a mejorar la salud mental de los enfermos ni que sus efectos secundarios resulten inaceptables. Al contrario, difícilmente un nuevo tratamiento supondrá el salto cualitativo que en su momento comportaron la terapia electroconvulsiva, la clorpromacina, la imipramina o, cómo no, el litio. Sin embargo, existen poderosas razones para buscar y probar nuevas moléculas o técnicas en esta enfermedad. Dichas razones, que se enumeran en la tabla 1.1, afectan tanto a la eficacia como a la seguridad de los tratamientos vigentes. Respecto a la eficacia, los tratamientos actuales tienen limitaciones cualitativas (no sirven para todos los enferTabla 1.1. Limitaciones de los antiepilépticos clásicos • Eficacia insuficiente •Toxicidad • Efectos adversos • Necesidad de monitorización •Interacciones •Teratogenia • Aumento de peso • Mal cumplimiento asociado mos) y cuantitativas (frecuentemente se asocian a una respuesta parcial que comporta síntomas subclínicos persistentes y secuelas psicológicas). En aspectos de seguridad o tolerabilidad no cabe duda de que hay posibilidades de mejorar, como se ha demostrado en los últimos años con los nuevos fármacos antidepresivos de carácter selectivo y con los antipsicóticos de segunda generación, que por otra parte, aún mejorando de forma indiscutible el perfil de efectos adversos neurológicos, han planteado nuevos dilemas relacionados con la propensión de alguno de ellos a inducir aumento de peso y cambios metabólicos.1 El litio sigue exigiendo un manejo experto, por su estrecho margen terapéutico, riesgo de toxicidad y efectos secundarios potencialmente graves. El valproato y la carbamacepina también se asocian a efectos indeseables y requieren monitorización. Otros tratamientos, como los neurolépticos convencionales y los antidepresivos, también tienen sus limitaciones. LIMITACIONES DEL LITIO Todavía el litio resulta un fármaco fundamental en el tratamiento del trastorno bipolar. Desde el famoso artículo de Cade en 1949,2 que muestra la figura 1.1, el litio ha supuesto el principal instrumento para la prevención de recaídas en el trastorno bipolar, además de potenciar los tratamientos antidepresivos en las depresiones uni- Novedades en el Tratamiento del Trastorno Bipolar. Vieta. ©2014. Editorial Médica Panamericana. 2 Novedades en el tratamiento del trastorno bipolar Figura 1.1. Publicación de John Cade en la revista médica de Australia, en 1949, proponiendo el litio como un tratamiento potencialmente eficaz en la excitación psicótica (Cade, 1949). Estudio No de eventos/total Litio Control polares.3 Otra virtud fundamental del litio se refiere a su eficacia para reducir el riesgo de suicidio en personas con trastornos del humor4 (Fig. 1.2). Por otro lado, al tratarse de un fármaco huérfano, no dispone de los mecanismos de promoción de los que sí disfrutan otras moléculas, generalmente de precio mucho más elevado. En los últimos años, el uso del litio se ha reducido mucho en países como los Estados Unidos sin que la evidencia científica justifique dicho fenómeno. Es triste comprobar cómo en la actualidad pocos médicos residentes norteamericanos tratan a sus pacientes con litio. Los primeros estudios sobre la eficacia del litio fueron más optimistas de la cuenta (Tabla 1.2), en parte por un motivo com- Peto odds ratio Fixed (95% CI) Versus amitriptilina Weight (%) Peto odds ratio Fixed (95% CI) Glen 1984 0/57 1/50 49.9 0.12 (0.00 to 5.98) Greil 1996 0/40 1/41 50.1 0.14 (0.00 to 6.99) 0/97 2/91 100 0.13 (0.01 to 2.05) Subtotal Test for heterogeneity: χ2=0.00, df=1, P=0.95, l2=0% Test for overall effect: z=1.45, P=0.15 Versus carbamazepina Greil 1997a Greil 1997b Subtotal 1/87 5/88 74.7 0.26 (0.05 to 1.30) 1/52 1/58 25.3 1.12 (0.07 to 18.16 2/139 6/146 100 0.37 (0.09 to 1.51) Test for heterogeneity: χ2=0.80, df=1, P=0.37, l2=0% Test for overall effect: z=1.38, P=0.17 Versus lamotrigina Calabrese 2003 0/121 1/221 47.8 0.21 (0.00 to 12.83) Licht 2010 1/78 0/77 52.2 7.29 (0.14 to 367.67) 1/199 1/298 100 1.35 (0.08 to 22.91) Subtotal Test for heterogeneity: χ2=1.49, df=1, P=0.22, l2=33% Test for overall effect: z=0.21, P=0.84 Versus olanzapina Tohen 2005 Subtotal 1/87 5/88 100 7.49 (0.15 to 377.68) 1/52 1/58 100 7.49 (0.15 to 377.68) Test for heterogeneity: Not applicable Test for overall effect: z=1.01, P=0.31 Versus placebo Bauer 2000 0/14 1/15 16.8 0.14 (0.00 to 7.31) Lauterbach 2008 0/84 3/83 49.8 0.13 (0.01 to 1.27) Prien 1973a 0/45 1/39 16.7 0.12 (0.00 to 5.91) Prien 1973b 0/101 1/104 16.8 0.14 (0.00 to 7.02) 0/244 6/241 100.0 0.13 (0.03 to 0.66) Subtotal Test for heterogeneity: χ2=0.01, df=3, P=1.00, l2=0% Test for overall effect: z=2.47, P=0.01 0.001 0.1 Favorece al litio 1 10 1000 Favorece al control OR 0.13 (0.03-0.66) Figura 1.2. Forest plot que muestra los meta-análisis sobre el suicidio en los ensayos aleatorizados que comparan el litio con placebo o con comparadores activos (modificado de: Cipriani et al., 2013) Novedades en el Tratamiento del Trastorno Bipolar. Vieta. ©2014. Editorial Médica Panamericana. Capítulo 1. Limitaciones de los tratamientos tradicionales del trastorno bipolar claros inconvenientes, como su lentitud de acción, su potencia antimaníaca limitada y la ausencia de formulaciones parenterales. Varios estudios han cuestionado la eficacia a largo plazo del litio 6 indicando que con el paso de los años el número de pacientes que permanecen en remisión va decreciendo. Sin embargo, desde el punto de vista de los autores esto no significa pérdida de eficacia, sino que es más bien el resultado del paso del tiempo y la intervención de otras variables, como el abandono del tratamiento,7 acontecimientos vitales,8 la patología orgánica concurrente,9 factores relacionados con el embarazo y el parto,10 y otros factores que probablemente provocarían el mismo fenómeno con cualquier otro fármaco. De hecho, dichos estudios son posibles porque el litio sí puede utilizarse en monoterapia a largo plazo, mientras que la probabilidad de que un paciente se beneficie de la monoterapia con algún otro fármaco resulta seguramente inferior. A pesar de una serie de cuestiones metodológicas (diseños enriquecidos, muestras desequilibradas, potencial de inclusión de pacientes no respondedores en algunos estudios), el litio parece tener una clara actividad profiláctica antimaníaca y cierta eficacia, aún si inferior, en la prevención de la depresión.11 En la experiencia de los autores, que desafortunadamente aún no se puede sustentar con datos objetivos, el litio no pierde efica- Tabla 1.2. Estudios iniciales del litio en profilaxis del trastorno bipolar Duración Litio Placebo Estudio Año(meses) (% (% recaídas)recaídas) Baastrup1970 5 Melia 197024 Cundall1972 12 Coppen1971 4-26 Stallone1973 8-22 Prien 197324 0 57 33 18 44 43 55 78 83 95 93 80 Probabilidad de pertenecer eutímico pletamente involuntario: en su mayoría se trataba de estudios de discontinuación, es decir, estudios que seleccionaban a pacientes que habían respondido favorablemente al fármaco y a los que se aleatorizaba para continuar con litio o recibir placebo. Este diseño hipertrofió los resultados positivos del litio a través de dos mecanismos: al seleccionar pacientes con buena tolerabilidad y buena respuesta al fármaco y al incrementar por efecto rebote las recaídas en el grupo de placebo, ya que la interrupción brusca del tratamiento con litio supone un grave inconveniente de este fármaco5 que se da con relativa frecuencia, tanto por motivos voluntarios (abandono del tratamiento por mal cumplimiento) como involuntarios (retirada por embarazo, por ejemplo). La figura 1.3 ilustra los riesgos de la retirada brusca del litio. Por otra parte, el litio como tratamiento de la manía aguda presenta Figura 1.3. Resultados de la interrupción del tratamiento con litio en función de la velocidad de la retirada. En ambos casos se produce un número relevante de recaídas, pero éstas son más frecuentes e inmediatas en los pacientes que interrumpieron el tratamiento con litio de forma brusca (Faedda et al., 2001). 3 1.0 Gradual 0.8 Rápida 0.6 0.4 0.2 0.0 0 12 24 36 48 60 Tiempo tras la interrupción (meses) Novedades en el Tratamiento del Trastorno Bipolar. Vieta. ©2014. Editorial Médica Panamericana. 4 Novedades en el tratamiento del trastorno bipolar 1,1% 3,5% (0,8-1,5) (2,3-4,9) 4,4% (3,4-5,6) 0,6% (0,4-1,1) 0,6% (0,4-0,9) 7,4% (4,6-10,8) 42,5% (33,3-51,7) Trastornos depresivos Trastornos de ansiedad Esquizofrenia Trastorno bipolar T. de la alimentación T. conductuales de la infancia T. generalizados del desarrollo Discapacidad intelectual Abuso de alcohol Abuso de sustancias 7,4% (4,9-9,9) 7,9% (6,0-10.0) Otros trastornos mentales 9,4% (7,3-11,5) 15,3% (11,7-19,3) Figura 1.4. Proporción de años vividos con discapacidad (YLD) explicada por cada uso grupo de trastorno mental (modificado de: Whiteford et al., 2013). cia con el paso del tiempo; más bien al contrario, pero es cierto que sólo una minoría de los pacientes logra mantenerse estable a largo plazo con monoterapia (en la serie de los autores alrededor de un 25 %). En la mayor parte de los pacientes, el litio mejora el curso de la enfermedad, pero no puede mantenerles completamente libres de síntomas y de recaídas. Por este motivo, cada vez resulta más frecuente la politerapia, que en general es más eficaz, aunque no siempre más efectiva, por comportar más efectos adversos y riesgo de mal cumplimiento.12 En los últimos 20 años, los clínicos e investigadores han advertido la importancia de alcanzar una remisión completa de síntomas y de nuevos episodios en los pacientes, debido principalmente al aumento de la incidencia y del impacto global del trastorno bipolar dentro de las enfermedades que causan discapacidad. El reciente estudio sobre la Carga Global de Enfermedades, Traumatismos y Factores de Riesgo del 2010 (GBD 2010) ha constatado que los trastornos mentales representan el 7,4 % de todos los años de vida ajustados por discapacidad (DALY) en todo el mundo y constituyen la causa principal de los años vividos con discapacidad (YLD) a nivel mundial (22,9 %).13 Dentro de las enfermedades mentales, el trastorno bipolar se ha clasificado como la sexta causa mundial de DALY, como indica la figura 1.4. Además, estudios longitudinales recientes muestran que la mayor parte de los pacientes bipolares presentan síntomas afectivos durante casi la mitad de su vida (54 % del total). Asimismo, la proporción de tiempo que viven con síntomas depresivos corresponde a tres cuartas partes del total, lo cual es mucho mayor que la proporción de tiempo transcurrido con manía o hipomanía, a Novedades en el Tratamiento del Trastorno Bipolar. Vieta. ©2014. Editorial Médica Panamericana. Capítulo 1. Limitaciones de los tratamientos tradicionales del trastorno bipolar pesar del uso de tratamientos adecuados14 (Fig. 1.5). Por otra parte, la presión de las asociaciones de pacientes ha supuesto también una mayor conciencia de la necesidad de conseguir la máxima efectividad de nuestros tratamientos, combinada con una buena tolerabilidad, lo que ha comportado un incremento del número de fármacos por paciente y un mayor uso de los más seguros. Éste es precisamente el talón de Aquiles del litio, que muchos pacientes y médicos lo ven como un fármaco potencialmente peligroso, y es la razón principal por la que en países donde existe un alto nivel de litigación y medicina defensiva su empleo está decayendo a gran velocidad. En la práctica, si se monitoriza bien el tratamiento y se informa correctamente a los pacientes, el litio no plantea tantas dificultades,15 pero sin duda es respetable la voluntad de algunos pacientes y de algunos clínicos de optar de forma sistemática por otras alternativas que, en algunos casos, ya han demostrado resultar eficaces. Entre ellas se encuentran dos fármacos antiepilépticos que denominare- 5 mos «clásicos», en oposición a los nuevos: la carbamacepina y el valproato. LIMITACIONES DE LA CARBAMACEPINA La carbamacepina es un fármaco de eficacia probada en el tratamiento de la manía y en la prevención de recaídas del trastorno bipolar,16 aunque por lo general se utiliza como alternativa o complemento del litio. Efectivamente, los estudios comparativos con litio sugieren que su eficacia podría resultar algo inferior,17 si bien podría resultar más eficaz en pacientes con formas atípicas de la enfermedad, en bipolares II, en pacientes con síntomas psicóticos incongruentes con el humor y en la comorbilidad con enfermedades físicas.18 Las principales limitaciones de la carbamacepina se centran en su incompleta eficacia (no sirve para todos los pacientes), su lentitud de acción (no hay formulaciones parenterales), sus efectos secundarios (con riesgo potencial, aunque infrecuente, de síndrome de Stevens-Johnson), sus interacciones (especialmente relevantes por su capacidad de inducir el metabolismo Tiempo sintomático: Pacientes tratados Media (7 estudios, N=1581) Tondo & Baldessarini 2013 (236) Estudio (n) De Dios et al. 2010 (296) Tipo-M Baldessarini et al. 2010 (303) Tipo-D Paykel et al. 2006 (204) Total Joffe et al. 2004 (138) Post et al. 2003 (258) Judd et al. 2002 (146) 0 10 20 30 40 50 60 70 80 90 100 % tiempo sintomático Figura 1.5. Tiempo sintomático en pacientes bipolares tratados (adaptado de: Baldessarini et al., 2010). Novedades en el Tratamiento del Trastorno Bipolar. Vieta. ©2014. Editorial Médica Panamericana. Proporción de pacientes que requieren intervención 6 Novedades en el tratamiento del trastorno bipolar 0,8 Valproato (VPA) Litio (Li) 0,6 Li + VPA 0,4 0,2 0 0 3 6 9 12 15 18 Meses 21 Li + VPA vs. Li Li + VPA vs. VPA HR 0.82 0.59 95% CI 0.58, 1.17 0.42, 0.83 Valor P .27 .0023 Li vs. VPA 0.71 0.51, 1.00 .0472 24 27 30 33 Figura 1.6. Estudio BALANCE: litio y valproato combinados versus monoterapia. de numerosos fármacos, incluyendo el suyo propio), su potencial teratogenia (si bien muy inferior a la del valproato) y la necesidad/conveniencia de monitorizar periódicamente los niveles plasmáticos.19 Además, tanto la carbamacepina como el valproato se han estudiado poco en la fase depresiva del trastorno bipolar y su eficacia en esos casos no resulta convincente. La oxcarbacepina es un cetoanálogo de la carbamacepina con actividad terapéutica y menor riesgo de efectos secundarios e interacciones, y la licarbacepina y la eslicarbacepina son también primos hermanos. De ello se habla con mayor detalle en el capítulo 3. LIMITACIONES DEL VALPROATO El valproato ha demostrado su eficacia en el tratamiento de la manía de forma similar al litio;20 también existen indicios de su eficacia profiláctica, aunque un estudio reciente encontró que tanto la terapia combinada con litio más valproato como la monoterapia con litio resultaban más eficaces para evitar las recaídas depresivas y maníacas que la monoterapia con valproato durante un seguimiento de 2 años21 (Fig. 1.6). En algunos países europeos el valproato está disponible desde hace muchos años en forma de dipropilacetamida o valpromida, un profármaco que se ha usado generalmente a dosis infraterapéuticas como alternativa «menor» al litio y que, en consecuencia, ha sufrido cierto desprestigio, lo que contrasta con la buena acogida del valproato en América. Las principales limitaciones del valproato son parecidas a las de la carbamacepina: no resulta eficaz en todos los casos (aunque podría ser de primera elección precisamente en los que no responden bien al litio, como los pacientes con episodios mixtos y ciclación rápida), no tiene una gran potencia antimaníaca (los antipsicóticos resultan más rápidos y potentes,22 a pesar de la posibilidad de utilizar la «carga oral» de valproato, muy popular en Estados Unidos, que consiste en administrar dosis altas, de unos 20 mg/kg/día desde el primer día), posee efectos secundarios indeseables (Tabla 1.3), puede incrementar los niveles de otros fármacos (como carbamacepina o lamotrigina, con mayor riesgo de exantema), es el más teratógeno de los eutimizantes (con un riesgo del 5 % de espina bífida) y requiere monitorización. No Novedades en el Tratamiento del Trastorno Bipolar. Vieta. ©2014. Editorial Médica Panamericana. Capítulo 1. Limitaciones de los tratamientos tradicionales del trastorno bipolar Tabla 1.3. Efectos secundarios más frecuentes del valproato y la dipropilacetamida (valpromida) •Dosis-dependientes • Aumento del apetito • Aumento de peso • Aumento de transaminasas • Caída del cabello •Diarrea •Dispepsia •Leucopenia •Náuseas •Sedación •Temblor •Trombocitopenia •Idiosincrásicos •Agranulocitosis • Hepatitis aguda •Pancreatitis • Poliquistosis ovárica obstante, a pesar de todas estas limitaciones continúa siendo un fármaco importante e infravalorado en algunos países de Europa. LIMITACIONES DE LOS NEUROLÉPTICOS CONVENCIONALES Los antipsicóticos típicos siguen siendo fármacos útiles en el tratamiento del trastorno bipolar, pero sus efectos secundarios, especialmente los extrapiramidales y la discinesia tardía, han ido relegando su uso para los pacientes que no responden a los antipsicóticos atípicos. Además, a diferencia de estos últimos, que poseen un espectro de 7 acción más amplio, los neurolépticos clásicos sólo resultan eficaces en el tratamiento de la manía aguda y como complemento de otros tratamientos en las fases depresivas con síntomas psicóticos. No se ha demostrado su eficacia profiláctica. La única ventaja posible sobre los nuevos antipsicóticos radica en que algunos (por ejemplo, el haloperidol) podrían ejercer una acción antimaníaca más rápida y potente, como sugieren algunos ensayos clínicos recientes23 y la experiencia clínica; dicha mayor rapidez no es necesariamente positiva, ya que se ha demostrado que comporta un mayor riesgo de viraje hacia la depresión, como muestra la figura 1.7.24 También es cierto que algunos neurolépticos clásicos se asocian a un menor aumento de peso que algunos de los nuevos antipsicóticos. Finalmente, cabe destacar, entre muchas otras, una limitación más de los neurolépticos clásicos: sus efectos secundarios en la esfera cognitiva y/o su incapacidad para revertir gran parte de las disfunciones cognitivas asociadas a la enfermedad.25 Hay estudios que indican que tanto la risperidona26 como la olanzapina27 y la quetiapina28 resultan mejores que el haloperidol respecto el funcionamiento neuropsicológico. Por otra parte, la necesidad frecuente de asociar anticolinérgicos a los neurolépticos convencionales para tratar o prevenir sus efectos extrapiramidales también cuenta con inconvenientes en la esfera cognitiva. En el capítulo 2 se repasan los da- Figura 1.7. Mayor incidencia de viraje hacia la depresión tras el tratamiento de la manía con haloperidol, comparado con olanzapina (Tohen et al., 2003). Probabilidad de no sufrir un viraje depresivo 100% 80% 60% P = .044 40% Olanzapina n=128 Haloperidol n=128 20% 0% 0 10 20 30 40 50 60 70 80 90 100 Tiempo hasta el viraje depresivo (días) Novedades en el Tratamiento del Trastorno Bipolar. Vieta. ©2014. Editorial Médica Panamericana. 8 Novedades en el tratamiento del trastorno bipolar tos disponibles sobre la eficacia y seguridad de los antipsicóticos atípicos y las claves de su progresiva implantación en detrimento de los convencionales. LIMITACIONES DE LOS ANTIDEPRESIVOS TRICÍCLICOS La eficacia y seguridad de los antidepresivos en el trastorno bipolar es objeto de un debate todavía no resuelto sobre todo debido a una evidencia científica limitada e inconsistente.29 En lo que sí hay acuerdo es en usarlos asociados a estabilizadores y en evitar el empleo de tricíclicos. Con estos últimos ocurre algo parecido a los neurolépticos: posiblemente los antiguos resulten más potentes, pero causan muchos más efectos secundarios y su mayor potencia comporta mayor riesgo de virajes hacia la manía o la hipomanía.30 Recientemente, la Task Force de la Sociedad Internacional de los Trastornos Bipolares (ISBD) revisó la evidencia cientifica sobre los beneficios y riesgos del tratamiento con antidepresivos y formuló recomendaciones clínicas sobre el uso de antidepresivos en el trastorno bipolar según un proceso de consenso.31 Estas cuestiones se comentan con mayor detalle en el capítulo 4. LIMITACIONES DE LA TERAPIA ELECTROCONVULSIVA La terapia electroconvulsiva (TEC) constituye posiblemente el tratamiento más eficaz para las fases agudas, tanto depresivas como maníacas.32 Al ser un tratamiento que no produce beneficios económicos a terceros y que socialmente genera ciertas resistencias y prejuicios, cuenta con pocos defensores y está infrautilizado. Su eficacia como tratamiento de mantenimiento no ha sido bien estudiada. Entre sus limitaciones se encuentran: lo complejo de su administración, los riesgos de la anestesia y sus efectos indeseables sobre la memoria.33 CONCLUSIONES ¿Se necesitan nuevos tratamientos para el trastorno bipolar? Sí. ¿Existen las condiciones para abandonar definitivamente los tratamientos clásicos? No. Aunque tienen limitaciones en cuanto a eficacia y tolerabilidad, siguen siendo útiles a muchos pacientes, si bien raramente en monoterapia. A lo largo de este libro se abordan las posibilidades de los nuevos fármacos, los nuevos enfoques psicoeducativos y las nuevas técnicas biofísicas (como la estimulación magnética transcraneal) en el tratamiento a corto y largo plazo del trastorno bipolar. Se hace desde una perspectiva independiente, con el conocimiento que ha aportado a los autores haber participado en el desarrollo de prácticamente todas las moléculas y técnicas que se mencionan, pero también desde la experiencia acumulada con un número importante de pacientes que siguen beneficiándose de los tratamientos clásicos. Los autores son conscientes de que esta obra quedará obsoleta en tres o cuatro años, como ocurrió con la primera y la segunda edición. La investigación en curso situará en su justo lugar las novedades terapéuticas; su impresión es que algunas se asentarán como nuevos «clásicos», mientras que otras pasarán al olvido como esperanzas incumplidas. El propósito de los autores con este libro estriba en proporcionar el conocimiento suficiente para que el clínico conozca la situación actual de las novedades terapéuticas en el trastorno bipolar y en dotar a los pacientes que no hayan conseguido una remisión completa de su enfermedad de la posibilidad de recibir, por parte de un psiquiatra bien informado, tratamientos que sostienen fundadas esperanzas de mejorar su calidad de vida y el pronóstico de su enfermedad. REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS 1. Leucht S, Cipriani A, Spineli L, et al. Comparative efficacy and tolerability of 15 antipsychotic drugs in schizophrenia: a multiple-treatments meta-analysis. Lancet 2013; Novedades en el Tratamiento del Trastorno Bipolar. Vieta. ©2014. Editorial Médica Panamericana. Capítulo 1. Limitaciones de los tratamientos tradicionales del trastorno bipolar 382(9896): 951-62. doi: 10.1016/S01406736(13)60733-3. Erratum in: Lancet 2013; 382(9896): 940. 2.Cade JF. 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