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Año 22 • Nº2 • 2011 Año 22 • Nº2 • 2011 Revista Argentina de REUMATOLOGÍA Sociedad Argentina de Reumatología SOCIEDAD ARGENTINA DE REUMATOLOGÍA Revista Argentina de REUMATOLOGÍA Fundada por el Dr. Armando Maccagno SOCIEDAD ARGENTINA DE REUMATOLOGÍA COMISIÓN DIRECTIVA 2011-2013 Presidente Dr. Bernardo A. Pons-Estel Vicepresidente Dr. Gustavo Citera Presidente anterior inmediato Dr. Horacio O. Venarotti Secretario Dr. Enrique R. Soriano Tesorero Dr. Oscar L. Rillo Vocales titulares Dra. Alejandra Babini Dra. Mercedes A. García Dra. Mónica P. Sacnun Dr. Marcos G. Rosemffet Dr. Gustavo C. Casado Dr. Augusto M. Riopedre Directores José Maldonado Cocco Julio Hofman Comité de Revisión Daniela Battaglia Rafael Chaparro del Moral Susana Metta Virginia Ortíz Mariano Rivero Dario Scublinsky Comité de Honor Roberto Arana Carlos Battagliotti María L. Sormani de Fonseca Carlos Onetti Simón Palatnik Ana A. Porrini Luis Seijo Alberto Strusberg Vocales suplentes Dra. Gladys M. Seleme Dra. Emma Civit Dr. Eduardo J. Scheines Dr. José Luis Moreno (ad referéndum nuevo estatuto) Dr. Javier E. Rosa (ad referéndum nuevo estatuto) Comité Científico Nacional Alfredo Arturi Alberto Berman Luis J. Catoggio Gustavo Citera Diana Dubinsky Ernesto Gutfraind Juan Carlos Marcos Silvia Martins Osvaldo D. Messina Sergio Paira Adriana Pérez Dávila Oscar Rillo Horacio Venarotti Diana Zoruba Comité Científico Internacional Graciela S. Alarcón Mary Carmen Amigo Roberto Arinoviche Juan Canoso Ricardo Cervera Luis R. Espinoza Emilio Martín Mola Yehuda Shoenfeld María E. Suárez Almazor Revisores de cuentas Dr. Roberto Báez Dr. Cristóbal D. Heredia Foto de tapa: "Escuela de Atenas" Rafael Sanzio 1510-1511 SAR22(2)_Interior 3.indd 1 Publicación trimestral © MV Comunicación & Marketing® 2011 Reservado todos los derechos. Ninguna parte de esta publicación puede ser reproducida en ninguna forma o medio alguno, electrónico o mecánico, incluyendo las fotocopias, grabaciones u otro sistema de información sin la autorización por escrito del titular del copyright La Revista Argentina de Reumatología se distribuye exclusivamente entre los profesionales de la medicina. La Revista Argentina de Reumatología es una publicación de la Sociedad Argentina de Reumatología (SAR). Av. Callao 384, piso 2, dpto. 6, (C1022AAQ) Buenos Aires. ISSN 0327-4411 Editada por MV Comunicación & Marketing® Director: Máximo Oberländer Alvarez Condarco 2550- Beccar (1643) Pcia. de Buenos Aires Tel./Fax: (54-11) 4719-6399 E-mail: info@mvcomunicacion.com www.mvcomunicacion.com 6/23/11 4:25 PM [ sumario ] 06 Editorial Acerca de la validación de escalas y cuestionarios Claudio González, Darío Scublinsky 10 Artículo original Desalineación articular en pacientes con artritis reumatoidea y su correlación con el daño radiológico F.A. Sommerfleck, E.E. Schneeberger, M. Salcedo, G. Rodriguez Gil, M.G. Rosemffet, J.A. Maldonado Cocco, G. Citera 21 Artículo original Validación de una versión argentina del Health Assessment Questionnaire-II (HAQ-II) C.A. Waimann, G. Citera, F.M. Dal Pra, M.F. Marengo, E.E. Schneeberger, M. Sanchez, Susana Gagliardi, J.A. Maldonado Cocco, A. Garone, R.E. Chaparro del Moral, O.L. Rillo, M. Salcedo, J.E. Rosa, F. Ceballos, E. Soriano, L. Catoggio 31 Artículo original Validación del cuestionario RAPID3 en una cohorte de pacientes con artritis reumatoidea temprana y establecida, y su correlación con otros índices de actividad Hernán Maldonado Ficco, Rodolfo S. Pérez Alamino, Emilce E. Schneeberger, José A. Maldonado Cocco, Gustavo Citera 42 Artículo original Validación y adaptación cultural de una versión argentina del cuestionario para calidad de vida PsAQoL en pacientes con artritis psoriática Tomás Cazenave, José A. Maldonado Cocco, Gustavo Citera SAR22(2)_Interior 3.indd 2 6/23/11 4:25 PM [ contents ] 06 Editorial Talking about validation of scales and questionnaires Claudio González, Darío Scublinsky 10 Article Joint malalignment in patients with rheumatoid arthritis and its correlation with joint damage F.A. Sommerfleck, E.E. Schneeberger, M. Salcedo, G. Rodriguez Gil, M.G. Rosemffet, J.A. Maldonado Cocco, G. Citera 21 Article Validation of an Argentine version of the Health Assessment Questionnaire-II (HAQ-II) C.A. Waimann, G. Citera, F.M. Dal Pra, M.F. Marengo, E.E. Schneeberger, M. Sanchez, Susana Gagliardi, J.A. Maldonado Cocco, A. Garone, R.E. Chaparro del Moral, O.L. Rillo, M. Salcedo, J.E. Rosa, F. Ceballos, E. Soriano, L. Catoggio of RAPID3 questionnaire in a cohort of patients with 31 Validation early and established rheumatoid arthritis and its correlation Article with other activity indices Hernán Maldonado Ficco, Rodolfo S. Pérez Alamino, Emilce E. Schneeberger, José A. Maldonado Cocco, Gustavo Citera 42 Article Validation and cultural adaptation of an Argentine version of the Psoriatic Arthritis Qualiy of Life (PsAQoL) Questionnaire Tomás Cazenave, José A. Maldonado Cocco, Gustavo Citera SAR22(2)_Interior 3.indd 3 6/23/11 4:25 PM [ editorial ] Acerca de la validación de escalas y cuestionarios Claudio González1 y Darío Scublinsky2 Bioestadística y Metodología de la Investigación,Universidad Católica Argentina. Epidemiología, FEFyM. Farmacología, UBA. 1 2 En el terreno de la investigación clínica y aun de la práctica médica actual, es cada día más común el empleo de cuestionarios y escalas de evaluación cuya aplicación merece una serie de consideraciones que conviene tener presente. En principio, todo cuestionario es una herramienta metodológica y, en consecuencia, caben para su administración juiciosa los mismos principios que rigen a la aplicación de otros instrumentos tales como una balanza, un tensiómetro, un resonador magnético. No caben dudas acerca de que los cuestionarios propiamente dichos, o los cuestionarios con escalas, constituyen hoy la técnica de obtención de datos más empleada en la investigación clínica. Se trata de herramientas efectivas, poco costosas, que permiten la evaluación a un gran número de participantes con una relativa facilidad y permiten el análisis y el entendimiento del comportamiento de variables que resultaría dificultoso a través de otras vías. Nos permite obtener descripciones apropiadas, datos categóricos y, cuando se llevan a cabo de manera apropiada, universalizarlos. Tanto las entrevistas como los cuestionarios basan su información en la validez de la información verbal de percepciones, sentimientos, actitudes o conductas que transmite el encuestado, información que, en muchos casos, es difícil de contrastar y traducir a un sistema de medida, a una puntuación. Es esta característica lo que hace tan complejo establecer los criterios de calidad de este tipo de instrumentos. El proceso de construcción y validación de un cuestionario/escala de medida es relativamente complejo y requiere el conocimiento teórico claro del aspecto que queremos medir, así como poseer conocimientos estadísticos y metodológicos adecuados. Lo que se pretende es garantizar que al cuestionario que se diseñe se le puedan aplicar los mismos criterios de validez y fiabilidad que exigimos a otros instrumentos tan precisos como una balanza. Por tanto, como todo instrumento de medida, debe reunir las siguientes características: 1. Ser adecuado para el problema de salud que se pretende medir (teóricamente justificable -validez de contenido) e intuitivamente razonable. 2. Ser válido, en el sentido de ser capaz de medir aquellas características que pretenden medir y no otras. 3. Ser fiable, preciso, es decir, con un mínimo de error en la medida. 4. Ser sensible, que sea capaz de medir cambios tanto en los diferentes individuos como en la respuesta de un mismo individuo a través del tiempo. 5. Delimitar claramente sus componentes (dimensiones), de manera que cada uno contribuya al total de la escala de forma independiente (validez de constructo). 6. Estar basado en datos generados por los propios pacientes. 7. Ser aceptable por pacientes, usuarios, profesionales e investigadores (viable). Finalmente, la validez del constructo implicará el grado en que el instrumento de medida refleja las teorías relevantes del fenómeno que mide. Dado que lo que se está diseñando es una escala de medición que permita tener una puntuación de un aspecto de la salud, y poder comparar la de diferentes individuos o la del mismo individuo en diferentes momentos, se debe asegurar que el instrumento de medida sea fiable y válido. Para ello recordemos que la fiabilidad es el grado en que un instrumento mide con precisión, sin error. Indica la condición del instrumento de ser capaz de ofrecer en su uso repetido resultados veraces y constantes en condiciones similares de medición. La fiabilidad de un instrumento de medida se valora a través de la consistencia, la estabilidad temporal, la concordancia interobservadores y la repetibilidad. La validez es el grado en que un instrumento mide Correspondencia E-mail:dscublin@yahoo.com.ar 6 SAR22(2)_Interior 3.indd 6 C. González et al • Rev Arg Reumatol. 2011;22 (2): 06-08 6/23/11 4:27 PM aquello que realmente pretende medir o sirve para el propósito para el que ha sido construido. La adaptación o traducción de escalas es una práctica muy útil en investigación, pero no por ello es simple. Resulta de extrema utilidad cuando un instrumento aplicado en otras partes del mundo ha demostrado ser efectivo. El proceso de traducción y adaptación de una escala requiere algo más que la traducción de la lengua origen a la lengua de destino: es necesario asegurar que las puntuaciones obtenidas con el test traducido sean equivalentes a las obtenidas con el test original. Para alcanzar esa equivalencia, hay que considerar cuatro aspectos del proceso: 1) el contexto cultural donde se va a realizar la adaptación, 2) aspectos técnicos del propio desarrollo y adaptación del test, 3) administración del test, y 4) interpretación de las puntuaciones. En definitiva, es necesario asegurar que el instrumento de medida presenta las mismas propiedades métricas en las dos culturas (origen y destino), y que, por lo tanto, la interpretación de las puntuaciones sea la misma, es decir, que exista una equivalencia métrica. Hoy en día, la utilidad de estas escalas/cuestionarios no se discute, y su aporte al entendimiento de enfermedades tan complejas como las reumáticas resulta de máxima relevancia. Sin embargo, una adecuada comprensión de sus límites y alcances, así como una clara apreciación de la importancia de su correcta elaboración y aplicación son centrales para su correcta interpretación tanto en el contexto de la investigación como en el de la práctica clínica. 3. Badía X, Carné X. La evaluación de la calidad de vida en el contexto del ensayo clínico. Med Clin 1998; 110: 550-556. 4. Bulloch B, Tenenbein M. Validation of 2 pain scales for use in the pediatric emergency department. Pediatrics. 2002 Sep;110(3):e33. 5. Escriba V, Mas R, Cárdenas M, Pérez S. Validity of a job stressors measurement scale in nursing staff: the nursing stress scale. Gaceta Sanitaria 1999; 13(3): 191-200. 6. Dawson B, Trapp R. Bioestadística médica. MM 2005: 255272. 7. Martínez-Martín P, Carroza-García E, Frades-Payo B, Rodríguez-Blázquez C, Forjaz MJ, de Pedro-Cuesta J; Grupo ELEP. Psychometric attributes of the Scales for Outcomes in Parkinson’s Disease-Psychosocial (SCOPA-PS). Rev Neurol. 2009 Jul 1-15;49(1):1-7. 8. Praena Crespo M, Lora Espinosa A, Aquino Llinares N, Sánchez Sánchez AM, Jiménez Cortés A. The Spanish version of the Newcastle Asthma Knowledge Questionnaire for parents of children with asthma (NAKQ). Transcultural adaptation and reliability análisis. An Pediatr (Barc). 2009 Mar;70(3):209-17. 9. Schneider A, Szecsenyi J, Barie S, Joest K, Rosemann T. Val- Bibliografía 1. Alonso J, Prieto L, Antó JM. The Spanish version of the idation and cultural adaptation of a German version of the Physicians’ Reactions to Uncertainty scales. BMC Health Serv Res. 2007 Jun 11;7:81. Nottingham Health Profile: a review of adaptation and instrument characteristics. Qual Life Res 1994; 3(6): 385-393. 2. Alonso J, Prieto L, Antó JM. La versión española del SF-36: un instrumento para la medida de los resultados clínicos. Med Clin 1995; 1.104: 771-776. 8 SAR22(2)_Interior 3.indd 8 C. González et al • Rev Arg Reumatol. 2011;22 (2): 06-08 6/23/11 4:27 PM [ artículo original ] Desalineación articular en pacientes con artritis reumatoidea y su correlación con el daño radiológico F.A. Sommerfleck, E.E. Schneeberger, M. Salcedo, G. Rodriguez Gil, M.G. Rosemffet, J.A. Maldonado Cocco, G. Citera Sección Reumatología, Instituto de Rehabilitación Psicofísica, Buenos Aires. Resumen Summary En la Artritis Reumatoidea (AR), la inflamación persistente lleva a daño estructural del hueso y del cartílago articular con la consecuente deformidad. Hasta el momento se han desarrollado pocos instrumentos para medir la desalineación y ellos no han sido suficientemente testeados. Objetivo: Evaluar la utilidad del instrumento de evaluación Joint Alignment and Motion Scale (JAMS) como método clínico para determinar desalineación en pacientes con AR y su correlación con el daño radiológico medido por el score de Larsen. Determinar los posibles factores clínicos y/o funcionales asociados a desalineación en estos pacientes. Métodos: Se incluyeron pacientes consecutivos del Instituto de Rehabilitación Psicofísica con diagnóstico de AR (ACR ‘87) con un tiempo de seguimiento no menor a cuatro años. Se evaluó la fuerza de puño por dinamómetro JAMAR y se realizó un test de rango de movimiento y deformidad articular (JAMS) en ambas manos. Radiografías de manos frente al inicio y al final del seguimiento fueron leídas por el índice radiológico de Larsen y un índice radiológico de desalineación. Los pacientes completaron un cuestionario sobre el ítem de destreza derivado de Arthrithis Impact Measurement Scales (AIMS). Resultados: Se incluyeron 101 pacientes, el 86,1% de sexo femenino con una edad mediana de 53 años (RIC 45-62). La mediana de tiempo de evolución de la artritis fue de 9,3 años (RIC 7-13). De los 101 pacientes incluidos se observó desalineación en 19, los cuales presentaban mayor número de articulaciones inflamadas al inicio de la enfermedad y en el momento de la evaluación, mayor tiempo de evolución de la AR y mayor ERS versus los pacientes sin desalineación. Al comparar las características radiológicas y funcionales entre pacientes con y sin desalineación se observó que los pacientes con desalineación presentaban significativamente mayor JAMS, mayor índice de Larsen, mayor desalineación radiológica, menor JAMAR y menor destreza medida por AIMS. En el análisis de regresión logística, las dos variables que surgieron como predictoras de desalineación resultaron ser el número de articulaciones inflamadas al inicio de la enfermedad, OR=1,19 (IC 95% 1,07-1,33, p=0,001) y el tiempo de evolución de la enfermedad, OR=1,01 (IC 95% 1,00-1,03, p=0,007). Conclusiones: El JAMS es un índice simple, reproducible y con buena correlación con el daño anatómico. Las principales variables asociadas con desalineación en nuestros pacientes con AR fueron mayor tiempo de evolución de la enfermedad y mayor número de articulaciones inflamadas al inicio de la misma. Rheumatoid Arthritis (RA) is a persistent inflammatory disease which leads to structural damage to the cartilage and bone resulting in joint deformity. There are very few instruments to measure malalignment in RA patient and they are not properly validated. Objective: To evaluate the performance of the Joint Alignment and Motion Scale (JAMS) in RA patients, its correlation with joint damage and to determine possible predictors of malalignment in those patients. Methods: Consecutive, ambulatory RA patients were included. Grip strength was measure using JAMAR dynamometer. Hands malalignment was determined by JAMS. Hands X Rays at the beginning of the disease and after follow up were performed and read using Larsen Score. The Arthritis Impact Measurement Scale (AIMS) was used to evaluate dexterity. Results: We included 101 patients, 86.1% female, with a median age of 53 years (IQR 45-62), and median disease duration 9.3 years (IQR 7-13). Malalignment was observed in 19 patients. Those patients had more swollen joints, more disease duration, and greater ESR levels compared with patients without malalignment. They also showed greater radiological damage, less grip strength, and less dexterity. In the regression analysis, more swollen joints in the beginning of the disease and more disease duration appeared as the strongests predictors of malalignment. Conclusion: JAMS is a simple test to determine malalignment and showed good correlation with radiological damage. High disease activity at the beginning and longer disease duration were variables most commonly associated with malalignment. Correspondencia Gustavo Citera, Instituto de Rehabilitación Psicofísica. E-mail: gustavocitera@gmail.com 10 SAR22(2)_Interior 3.indd 10 F.A. Sommerfleck et al • Rev Arg Reumatol. 2011;22 (2): 10-19 6/23/11 4:27 PM Introducción La AR es una enfermedad inflamatoria crónica que cur- tró ser un método rápido, económico, capaz de evaluar la sa con inflamación simétrica de pequeñas y grandes movilidad articular y correlacionar con la severidad de la articulaciones y compromiso sistémico. La inflamación enfermedad11. persistente lleva a la destrucción ósea y del cartílago Por esto, nos propusimos evaluar la utilidad del JAMS articular. La deformación articular surge de la desor- como método clínico para determinar desalineación en ganización articular y de las estructuras de apoyo. Los pacientes con AR y correlacionar el grado de desalinea- tendones pierden función no sólo por el estiramiento se- ción medido por JAMS con el daño radiológico medido cundario al derrame articular, sino también por su propia por el índice radiológico de Larsen. También analizamos inflamación . El daño articular y de estructuras vecinas los posibles factores clínicos y/o funcionales asociados a sumadas a la desorganización de las articulaciones ocasio- desalineación en estos pacientes con AR. 1,2 na una gran limitación funcional . 3,4 El pinzamiento, el daño erosivo y la desalineación son las lesiones más frecuentemente observadas en pacientes con AR. Los dos primeros son objetivados en la mayoría de los índices de daño radiológico (Larsen, Sharp, van der Heijde) 5,6,7; en cambio la desalineación no es considerada en los índices radiológicos ni tampoco existe un índice clínico aceptado que permita cuantificar la magnitud y el Material y métodos Se incluyeron pacientes en forma consecutiva con diagnóstico de AR según criterios ACR '87 12 con un tiempo de seguimiento no menor a cuatro años, con el fin de evaluar el momento de aparición de las deformidades. Todos aquellos con antecedentes de cirugía de manos, enfer- impacto de la deformidad de las manos en la capacidad medad neurológica que comprometiera a los miembros funcional de los pacientes. El goniómetro es utilizado superiores y pacientes con otras enfermedades del tejido para determinar los ángulos articulares, pero consume conectivo fueron excluidos. tiempo y la mayoría de los reumatólogos no están fami- Se consignaron datos sociodemográficos (sexo, edad, actividad laboral, nivel de fuerza requerida, jornada labo- liarizados con su uso. Las escalas de movilidad articular y deformidad de- ral y años de trabajo), datos relacionados a la enfermedad sarrolladas hasta el momento son el Joint Alignment and de base (edad al diagnóstico, tiempo de evolución, mani- Motion Scale (JAMS) , la Escuela Paulista de Medicina - festaciones extraarticulares), presencia de enfermedades Range of Motion (EPM-ROM) y el Dijkstra compositive comórbidas. Se registró el número de articulaciones 8 9 score10, este último utilizado en artritis idiopática juvenil. Todas han encontrado una buena correlación tanto con los índices radiológicos como con el daño articular. El JAMS fue desarrollado en 1987 por Spiegel y col. 8 y se evalúa mediante la estimación visual de la deformidad. Este índice asigna un puntaje de 0 a 4 de acuerdo al porcentaje de desalineación y disminución del rango de movimiento en cada articulación, siendo 0 normal y 4 inflamadas y dolorosas, HAQ-A (Health Assessment Questionnaire versión argentina13) y eritrosedimentación (ERS) en el inicio de la enfermedad y en la última consulta. Se chequeó además la positividad para el factor reumatoideo (FR). También se consideró el tratamiento recibido como esteroides y drogas modificadoras de la AR (DMAR). luxación completa. Para nuestro conocimiento, este ins- A todos los pacientes se les evaluó la fuerza de puño trumento fue testeado solo en una pequeña cohorte de por dinamómetro JAMAR y se realizó un test de rango pacientes con AR de largo tiempo de evolución y demos- de movimiento y deformidad articular (JAMS) en ambas 12 SAR22(2)_Interior 3.indd 12 F.A. Sommerfleck et al • Rev Arg Reumatol. 2011;22 (2): 10-19 6/23/11 4:27 PM manos por dos médicos reumatólogos que previamente Terapia Ocupacional dentro de los primeros 6 meses de mostraron buena correlación en la evaluación del mismo la primera consulta. (CCI 0,92, IC 95% 0,75-0,98, p=0,001). Para el análisis estadístico de acuerdo al valor de La escala JAMS evalúa 44 articulaciones (hombros, JAMS, los pacientes fueron clasificados en alineados y codos, muñecas, metacarpofalángicas, interfalángicas desalineados con un nivel de corte de 2. Las variables ca- proximales y distales, caderas, rodillas, tobillo, subastra- tegóricas se compararon por el test de Chi 2 o test exacto galina, metatarsofalángicas). Asigna un puntaje de 0 a 4 de Fisher, determinando OR (IC 95%) en el análisis uni- de acuerdo al porcentaje de desalineación y disminución variado. Las variables continuas fueron expresadas como del rango de movimiento (RM) en cada articulación, mediana y rango intercuartilo (RIC) y comparadas por siendo 0 cuando el RM es normal y la articulación está test paramétrico T de Student con prueba de homoge- alineada; 1 = 0-5% de disminución del RM o ligera neidad de varianzas de Levene. La correlación entre el desalineación; 2 = 6%-25% de disminución del RM y JAMS y otras variables se realizó mediante el test de moderada desalineación; 3 = 26%-75% de disminución Spearman. del RM o subluxación de la articulación; y 4 = 76%-100% Aquellas variables con un valor de p menor a 0,1 en de disminución del RM, luxación completa o artroplastia el análisis univariado fueron introducidas en un modelo de dicha articulación. El score total del JAMS deriva del de regresión logística múltiple de interacción, utilizan- promedio de todas las articulaciones. do el dato dicotómico de desalineación como variable Se obtuvieron radiografías de manos frente al ini- dependiente. Un valor de p menor a 0,05 se consideró cio y al final del seguimiento, las cuales fueron leídas significativo. El análisis de los datos se realizó utilizando por el índice de Larsen. También se efectuó la lectu- el programa SPSS versión 15. ra de las radiografías mediante un índice radiológico de desalineación; el mismo evalúa la alineación de las metacarpofalángicas, las interfalángicas proximales, carpometarcarpiana, intracarpiana, radiocarpiana y la radiocubital distal. Otorga un valor de 0 para la alineación y de 1 para la desalineación del carpo, y para las articulaciones metacarpofalángicas y próximas interfalángicas 0 normal, 2 subluxación y 4 luxación14. El score deriva del promedio de todas las articulaciones. Todas las radiografías fueron evaluadas por un observador independiente con buena correlación intraobservador (Coeficiente de Correlación Intraclase CCI >0,80), quien desconocía las características de los pacientes evaluados. Los pacientes completaron un cuestionario correspondiente al ítem de destreza de la escala AIMS15 (Arthrithis Impact Measurement Scales) que fue medido mediante escala visual analógica (EVA). Se consideró Características Manifestaciones extraarticulares Factor reumatoideo (+) Desórdenes endocrinológicos Hipotiroidismo Hipertiroidismo Diabetes Tratamiento Terapia ocupacional Esteroides Drogas de acción mediata (DMAR) Combinación de 2 DMAR Combinación de 3 DMAR Categorías laborales Vendedores No calificados Operarios Oficinistas Desocupados ARn(%) 83 (82,2) 91 (90,1) 14 (13,9) 2 (1,98) 3 (2,97) 70 (69,3) 98 (97) 101 (100) 52 (51,5) 4 (3,96) 33 (34,4) 27 (28,1) 13 (13,5) 11 (11,5) 17 (16,8) Tabla 1. Características clínicas en 101 pacientes con AR. también la concurrencia de los pacientes al servicio de F.A. Sommerfleck et al • Rev Arg Reumatol. 2011;22 (2): 10-19 SAR22(2)_Interior 3.indd 13 13 6/23/11 4:27 PM Características Pacientes (n=101) Alineados n=82 Desalineados n=19 Sexo femenino n (%) 70 (85,4) 17 (89,4) NS Edad (años) m (RIC) 52 (45-62) 55 (42-64) NS Nódulos n (%) 22 (26,8) 9 (47,3) NS Factor reumatoideo (+) n (%) 73 (89) 18 (94,7) NS Tiempo de evolución de AR (años) m (RIC) 9 (7-12,2) 12 (9,1-17) 0,007 Articulaciones inflamadas al inicio de AR m (RIC) 8,5 (3-13) 14 (10-20) 0,001 Articulaciones inflamadas en la última evaluación m (RIC) 2 (0-4) 5 (1-13) 0,02 ERS (mm/h) m (RIC) 33 (20-50,5) 51 (27,5-63,7) 0,053 HAQ-A m (RIC) 0,38 (0,12-1) 0,75 (0,25-1,62) NS Dosis acumulada de esteroides (g) m (RIC) 8,67 (3,8-15,4) 9,92 (5,7-19) NS Tratamiento combinado n (%) 47 (57,3) 9 (47,3) NS Evolución de AR al inicio de los esteroides (meses) m (RIC) 12 (1-24) 13 (3-48) NS Evolución de AR al inicio de la DMAR (meses) m (RIC) 16 (8-35) 24 (12-36) NS p Tabla 2. Comparación de datos sociodemográficos, clínicos y terapéuticos entre pacientes con AR alineados y desalineados. 14 SAR22(2)_Interior 3.indd 14 F.A. Sommerfleck et al • Rev Arg Reumatol. 2011;22 (2): 10-19 6/23/11 4:27 PM Variables Pacientesn=101 Alineados m(RIC) Desalineados m(RIC) p JAMS 1,2 (0,7 – 1,5) 2,54 (2,3 – 2,8) 0,0001 Índice radiológico de Larsen 1,03 (0,9 – 1,2) 1,6 (1,1 – 1,8) 0,0001 Desalineación radiológica 0,58 (0,3 – 0,8) 1,41 (1 – 1,7) 0,0001 JAMAR derecho (fuerza de puño) 16,3 (12,6 – 21,3) 11,6 (4,6 – 16,3) 0,006 AIMS (destreza) 10,9 (1,9 – 29,9) 24,8 (13 – 44,2) 0,002 M: mediana, RIC: rango intercuartilo. Tabla 3. Comparación de características radiológicas y funcionales entre pacientes con AR con y sin desalineación. Resultado Se incluyeron 101 pacientes, 87 (86,1%) eran de sexo fe- enfermedad y en la última evaluación en pacientes ali- menino y la mediana de edad fue de 53 años (RIC 45-62). neados y desalineados. La edad mediana al diagnóstico de la AR fue de 44 años Cuando comparamos las características radiológicas (RIC 32-52) y la mediana de tiempo de evolución de la y funcionales entre pacientes sin y con desalineación se artritis fue de 9,3 años (RIC 7-13). observó que los pacientes con desalineación presentaban Las características clínicas de los pacientes incluidos significativamente mayor escala de JAMS, peor índice se describen en la Tabla 1, cabe destacar que 91 (91%) eran radiológico de Larsen, mayor desalineación radiológi- seropositivos para FR y 14 (13,9%) tenían antecedentes de ca, menor fuerza de puňo y menor destreza por AIMS hipotiroidismo. (Tabla 3). De los 101 pacientes incluidos, se observó desalinea- El índice de JAMS presentó buena correlación con el ción en 19 (18,8%), mientras que 82 (81,2%) no mostraron índice radiológico de Larsen (r: 0,67), así como también desalineación, tomando como valor de corte el JAMS >2. con otros parámetros de evaluación de la enfermedad Al comparar las características sociodemográficas y (Tabla 4). relacionadas a la enfermedad entre los pacientes con y sin En el análisis de regresión logística, las dos varia- desalineación, encontramos que los pacientes con desali- bles que surgieron como predictoras de desalineación neación presentaron mayores parámetros de actividad de fueron el mayor número de articulaciones inflamadas la enfermedad (mayor número de articulaciones inflama- al inicio de la enfermedad OR=1,19 (IC 95% 1,07-1,33, das al inicio de la enfermedad, en la última evaluación p=0,001) y el mayor tiempo de evolución de la enferme- y mayor ERS) (Tabla 2). En la Figura 1 se representa la dad, OR=1,01 (IC 95% 1,00-1,03, p=0,007) con un 86% diferencia de articulaciones inflamadas al inicio de la de capacidad de clasificación del modelo (Tabla 5). F.A. Sommerfleck et al • Rev Arg Reumatol. 2011;22 (2): 10-19 SAR22(2)_Interior 3.indd 15 15 6/23/11 4:27 PM Discusión Variables JAMS r(Spearman) Índice de Larsen 0,67* Índice de desalineación 0,60* Tiempo de evolución de la AR 0,39** JAMAR 0,38** neación articular con consecuente limitación funcional, HAQ-A 0,33** la cual puede afectar la calidad de vida. Sin embargo, no Articulaciones inflamadas al inicio de la AR 0,25** existe un índice clínico aceptado que permita cuantificar AIMS 0,25** la magnitud del impacto de la deformidad de las manos Años de trabajo 0,06 en la capacidad funcional de los pacientes. La artritis reumatoidea es una enfermedad inflamatoria crónica y progresiva que lleva a la destrucción ósea y del cartílago articular, produciendo deformación y desali- *: p=0,0001, **: p=0,01. Las escalas de movilidad articular y deformidad desarrolladas hasta el momento son el Joint Alignment and Tabla 4. Correlación entre JAMS y diferentes parámetros de evaluación de la AR. Motion Scale (JAMS)8 , la Escuela Paulista de Medicina - Range of Motion (EPM-ROM)9 y el Dijkstra compositive score10. La EPM-ROM fue desarrollada en 1990 y se basa en la evaluación del rango de movimiento de grandes y pequeñas articulaciones. El índice para cada movimiento varía de 0 (movimiento absoluto) a 3 (severa limitación), se evalúan 10 articulaciones teniendo un puntaje máximo de 30. Este índice presentó buena correlación inter e intraobservador, pero baja correlación con la actividad de la enfermedad. Figura 1. Comparación de articulaciones inflamadas en pacientes con AR alineados y desalineados al inicio de la enfermedad y en la última evaluación. 16 SAR22(2)_Interior 3.indd 16 F.A. Sommerfleck et al • Rev Arg Reumatol. 2011;22 (2): 10-19 6/23/11 4:27 PM IC95%paraEXP(B) B Error Standard Sig OR Inferior Superior Tiempo de evolución a la AR ,016 ,006 ,007 1,016 1,004 1,029 N° articulaciones inflamadas al inicio ,182 ,056 ,001 1,199 1,075 1,338 N° articulaciones inflamadas actuales ,065 ,048 ,177 1,067 ,971 1,172 ERS ,024 ,012 ,057 1,024 ,999 1,049 Constante -7,232 1,582 ,000 ,001 Variable dependiente = presencia de desalineación según índice de JAMS > 2. Tabla 5. Principales variables predictoras de desalineación en pacientes con AR. Modelo de regresión logística múltiple. El índice de Dijkstra evalúa la presencia de infla- midad con HLA-DRB1 en pacientes con AR. mación, osteopenia, pinzamiento, quistes, erosiones y Según nuestra experiencia, el JAMS es un método desalineación en pacientes con Artritis Juvenil Idiopá- simple, rápido para realizar y con buena correlación in- tica. tra e interobservador aparte de correlacionar bien con Nosotros preferimos utilizar el JAMS en nuestro es- otras variables. tudio, ya que es un método simple con buena correlación En nuestro estudio, hemos observado que un 18,8% con el daño anatómico. Es uno de los más utilizados y de nuestros pacientes presentaban desalineación; este permite evaluar en forma rápida y sencilla la desalinea- porcentaje es menor al encontrado en el estudio de Par- ción. ker JW y col11. Esto puede deberse a que en este estudio El JAMS fue testeado en una sola oportunidad por se utilizó una pequeña cohorte de pacientes con AR de Parker y col. Este último estudio incluyó 30 pacien- largo tiempo de evolución (x:18 años) comparado a nues- tes y tuvo buena correlación intra e interobservadores tro grupo (x:12 años). (reumatólogos, terapistas ocupacionales y kinesiólo- Nuestros pacientes con desalineación presentaron gos) y también con la clase funcional de Steinbrocker y mayores parámetros de actividad de la enfermedad refle- la severidad de la enfermedad. En este estudio, un 66% jado en un mayor número de articulaciones inflamadas presentaron desalineación (JAMS >2). al inicio de la enfermedad y en el momento de la evalua- Cranney y col. desarrollaron otro índice de de- ción, mayor ERS y además estos pacientes tenían mayor formidad. En este estudio, como en otro realizado tiempo de evolución. La desalineación articular tuvo un posteriormente por Jin-Young Min y col. se pudo impacto negativo en la capacidad funcional de nuestros observar la relación de la limitación articular y la defor- pacientes, que si bien no se vio reflejada en el HAQ, sí 16 17 F.A. Sommerfleck et al • Rev Arg Reumatol. 2011;22 (2): 10-19 SAR22(2)_Interior 3.indd 17 17 6/23/11 4:27 PM se asoció con menor fuerza de puňo y menor destreza. 5. van der Heijde D. Radiographic imaging: the gold stan- Es probable que el HAQ como evaluación global de la dard for assessment of disease progression in rheumatoid capacidad funcional no tenga la sensibilidad suficiente arthritis. Rheumatology 2000;39(1):9-16. para captar este deterioro, sin embargo la utilización de cuestionarios más específicos como el AIMS sí puede determinarlo. De acuerdo a nuestro estudio, el JAMS es un índice simple, reproducible y con buena correlación con el 6. Swinkels HL, Laan RF, van’t Hof MA, van der Heijde DM de Vries N, van Riel PL. Modified Sharp Method: Factors Influencing Reproducibility and Variability. Semin Arthritis Rheum 2001;31(3):176-90. daño anatómico. Las principales variables predictoras de desalineación fueron el número de articulaciones 7. Arvi Larsen. A Radiological Method for Grading the Se- inflamadas al inicio de la enfermedad y el tiempo de evo- verity of Rheumatoid Arthritis. Scand J Rheumatol 1975; lución de la misma. Se requieren más estudios a fin de 4(4):225-33. explorar esta herramienta y tener un conocimiento más profundo de la misma y que permita evaluar el impacto 8. Spiegel TM, Spiegel JS, Paulus HE. The joint alignment de la desalineación articular en las actividades diarias de and motion scale: a simple measure of joint deformi- los pacientes con AR. ty in patients with rheumatoid arthritis. J Rheumatol 1987;14:887-92. Bibliografía 1. Duthie JJR, Brown PE, Truelove LH, Baragar FD, Lawrie AJ. Course and prognosis in rheumatoid arthritis. Ann Rheum Dis 1964;23:193-202. 2. Sherrer YS, Bloch DA, Mitchell DM, Young DY, Fries JF. The development of disability in rheumatoid arthritis. Arthritis Rheum 1986;29:494-500. 3. Pincus T, Callahan LF, Sale WG, Brooks AC, Payne LE, Vaughn WK. Severe functional declines, work disability, and increased mortality in seventy-five rheumatoid arthritis patients studied over nine years. Arthritis Rheum 1984;27:864-72. 4. Smith RJ, Kaplan EB. Rheumatoid deformities at the metacarpophalangeal joints of the fingers. J Bone Joint Surg Am 1967;49(1):31-47. 18 SAR22(2)_Interior 3.indd 18 9. Ferraz MB, Oliveira LM, Araujo PM, Atra E, Walter SD. EPM-ROM Scale: an evaluative instrument to be used in rheumatoid arthritis trials. Clin Exp Rheumatol 1990;8(5):491-4. 10. Van Rossum MAJ, Boers M, Dijkmans BC. Development of a Standardized Method of Assessment of Radiographs and Radiographic Change in Juvenile Idiopathic Arthritis. Arthritis Rheum 2005;52(9):2865-72. 11. Parker JW, Harrell PB, Alarcón GS. The value of the joint alignment and motion scale in rheumatoid arthritis. J Rheumatol 1988;15(8):1212-5. 12. Arnett FC, Edworthy SM, Bloch DA, et al. The American Rheumatism Association 1987 revised criteria for the classification of rheumatoid arthritis. Arthritis Rheum 1988;31:315-23. F.A. Sommerfleck et al • Rev Arg Reumatol. 2011;22 (2): 10-19 6/23/11 4:27 PM 13. Citera G, Arriola MS, Maldonado Cocco JA, Rosem- 16. Ann Cranney, Rose Goldstein, Ba’ Pham. A measure ffet MG, Sanchez MM, Goñi MA, et al. Validation and of limited joint motion and deformity correlates with Crosscultural Adaptation of an Argentine Spanish Ver- HLA-DRB1 and DQB1 alleles in patients with rheuma- sion of the Health Assessment Questionnaire Disability toid arthritis. Ann Rheum Dis 1999;58:703-8. Index. J Clin Rheumatol 2004;10:110-5. 17. Min JY, Min KB, Sung J, Cho SI. Linkage and association 14. Pincus T, Fuchs HA, Callahan LF, Nance EP Jr, Kaye JJ. Early radiographic joint space narrowing and erosion studies of joint morbidity from rheumatoid arthritis. J Rheumatol 2010; 37(2):291-5. and later malalignment in rheumatoid arthritis: a longitudinal analysis. J Rheumatol 1998 ;25(4):636-40. 15. Meenan RF, Gertman PM, Mason JH. Measuring Health Status in Arthritis. The Arthritis Impact Measurement Scales Arthritis Rheum 1980;23(2):146-52. F.A. Sommerfleck et al • Rev Arg Reumatol. 2011;22 (2): 10-19 SAR22(2)_Interior 3.indd 19 19 6/23/11 4:27 PM [ artículo original ] Validación de una versión argentina del Health Assessment Questionnaire-II (HAQ-II) C.A. Waimann, 1G. Citera, 1F.M. Dal Pra, 1M.F. Marengo, 1E.E. Schneeberger, 1M. Sanchez, 1Susana Gagliardi, 1 J.A. Maldonado Cocco, 2A. Garone, 2R.E. Chaparro del Moral, 2O.L. Rillo, 3M. Salcedo, 4J.E. Rosa, 4F. Ceballos, 4 E. Soriano, 4L. Catoggio 1 1 Instituto de Rehabilitación Psicofísica. Fundación Reumatológica Argentina. 2Hospital Tornú. 3San Nicolás. 4Hospital Italiano. Buenos Aires. Resumen Summary La versión argentina de Health Assessment Questionnaire (HAQ-A) es un instrumento útil para documentar el estado clínico, la evolución y el pronóstico funcional de nuestros pacientes con Artritis Reumatoidea (AR). Sin embargo, presenta algunas limitaciones. Esto dio lugar a una versión más simple: el HAQ-II, el cual consta de 10 preguntas. Nuestro objetivo fue determinar la reproducibilidad y validez de una versión argentina del HAQ-II en pacientes con AR. Materialymétodos: Se incluyeron pacientes consecutivos con diagnóstico de AR (ACR ‘87) de 4 centros reumatológicos de Argentina. La versión original del HAQ-II fue traducida por 3 reumatólogos argentinos y retraducida al inglés por un individuo bilingüe no relacionado. La reproducibilidad del cuestionario fue evaluada en el 30% de los pacientes con un segundo cuestionario completado dentro de los 3 a 7 días de la primera visita. La validez constructiva fue evaluada comparando el HAQ-II con parámetros clásicos de actividad de la enfermedad, capacidad funcional y compromiso radiológico (medido por el método de Sharp van der Heijde). Se evaluó también el tiempo y dificultad para realizarlo, así como la confiabilidad y correlación con HAQ-A. Resultados: 97 pacientes fueron incluidos, de los cuales el 82% eran mujeres, 95% seropositivas para factor reumatoideo, 87% erosivas y 22% nodulares. La reproducibilidad del HAQ-II fue buena (r=0,94). En la correlación intraítem se halló una única redundancia (entre la pregunta 8 y 9 (r=0,92)), por este motivo la pregunta 8 fue reemplazada manteniendo excelente correlación con la versión original (r=0,99). El HAQ-II tuvo buena correlación con EVA (escala visual análoga) para dolor, EVA para actividad y articulaciones dolorosas; regular correlación con recuento de articulaciones inflamadas, menor nivel educativo y eritrosedimentación (ERS). No se observó correlación con daño radiológico. El alfa de Cronbach fue de 0,92. Esta nueva versión presentó una excelente correlación con HAQ-A (r=0,94), con un menor número de preguntas faltantes (HAQ-II=3 vs. HAQ-A=12) y una mediana de tiempo en la realización de 54 segundos (vs. 4 min en el HAQ-A). En la regresión lineal la principal variable asociada al HAQ-II fue el EVA de dolor (coef. β=0,536, p=0,001), seguida del daño radiológico (coef. β=0,192, p=0,029). Conclusión: El HAQ-II validado al español en Argentina resultó ser confiable, válido y reproducible en pacientes con AR, mostrando una exce- The Argentine version of the Health Assessment Questionnaire (HAQ-A) is a helpful instrument to record clinical status, evolution and functional prognosis of our patients with Rheumatoid Arthritis (RA). However, the fact that it presents certain limitations gave rise to a simpler version: the HAQ-II, which consists of 10 questions. Our aim was to determine the reproducibility and validity of an Argentine version of the HAQ-II in patients with RA. Material and Methods: The study included consecutive patients with RA (ACR ’87) from 4 rheumatologic sites of Argentina. The original version of the HAQ-II was translated by 3 Argentine rheumatologists, and retranslated into English by a bilingual person unaware of the study. Reproducibility of the questionnaire was evaluated in 30% of patients, who completed a second questionnaire within 3 to 7 days of the first one. Constructive validity was evaluated comparing the HAQ-II with classic parameters of disease activity, functional capacity and radiologic involvement (measured according to the Sharp van der Heijde method). Time and difficulty to complete the questionnaire were also evaluated, as well as reliability and correlation with the HAQ-A. Results: The study included 97 patients, 82% were women; 95% seropositive for rheumatoid factor, 87% had erosions and 22% subcutaneous nodules. Reproducibility of the HAQ-II was good (r=0.94). Regarding intra-item correlation, there was only one redundancy (between questions 8 and 9 (r=0.92)), hence, question 8 was replaced maintaining an excellent correlation with the original version (r=0.99). The HAQ-II had a good correlation with VAS (visual analogue scale) for pain, VAS for activity and tender joints; a regular correlation with swollen joint count, a lower educational level and eritrosedimentation rate. There was no correlation with radiological damage. Cronbach’s alpha was of 0.92. This new version presented an excellent correlation with the HAQ-A (r=0.94), with a lower number of missing questions (HAQ-II=3 vs. HAQ-A=12) and a median of time duration regarding completion of the questionnaire of 54 seconds (vs. 4 minutes in HAQ-A). Regarding lineal regression, the principal variable associated to the HAQ-II was VAS for pain (coeff. β=0.536, p=0.001), followed by radiological damage (coeff. Correspondencia Gustavo Citera, Sección Reumatología, IREP. E-mail: gustavocitera@gmail.com C.A. Waimann et al • Rev Arg Reumatol. 2011;22 (2): 21-29 SAR22(2)_Interior 3.indd 21 21 6/23/11 4:27 PM lente correlación con el HAQ-A. Su principal ventaja radica en la rapidez en su realización y un cálculo simple, facilitando así su implementación en la práctica diaria. El dolor fue la variable que más influyó en las variaciones del HAQ-II. Palabrasclave: HAQ, artritis reumatoidea, capacidad funcional. β=0.192, p=0.029). Conclusion: The HAQ-II validated in Spanish in Argentina proved to be reliable, valid and reproducible in patients with RA, showing an excellent correlation with the HAQ-A. Its principal advantage relies in the promptness of its completion and a simple calculation, hence, facilitating its employment in everyday practice. Pain was the variable that influenced the most in the HAQ-II variations. Keywords: HAQ, rheumatoid arthritis, functional capacity. Introducción La capacidad funcional es uno de los puntos finales de desenlace propuestos por el OMERACT (Outcome Measures in Rheumatoid Arthritis Clinical Trials), para la evaluación de los pacientes con Artritis Reumatoidea (AR)1. Los métodos de medición más utilizados son los cuestionarios autoadministrados, dentro de los cuales la versión acortada del Health Assessment Questionnaire (HAQ), el Health Assessment Questionnaire-Disability Index (HAQ-DI)3, es el más utilizado. Este ha sido traducido y adaptado culturalmente en más de 60 lenguas3, su versión Argentina fue validada en el año 2004 y denominada HAQ-A4. El mismo ha demostrado ser un instrumento útil, simple y sensible, que nos permite documentar el estado clínico, la evolución y el pronóstico funcional de nuestros pacientes5,6 , siendo incorporado en las Guías Argentinas como una de las medidas fundamentales para la evaluación de los pacientes con AR7. Aun así, el HAQ-A presenta ciertas limitaciones (Tabla 1)8,9, por lo cual diversos autores han sugerido modelos alternativos del mismo10-15. Dentro de éstos, se encuentra el HAQ-II, desarrollado por Wolfe en el año 200414. Este consta de 10 preguntas, 5 de las cuales pertenecen al HAQ-DI y otras 5 nuevas que discriminan mejor movilidad y fuerza de miembros inferiores. Consta de 4 respuestas posibles con puntuación similar al HAQ-DI, con un rango de 0 a 3. Este cuestionario ha demostrado en estudios previos ser un instrumento válido, reproducible y confiable para evaluar la capacidad funcional de los pacientes con AR, siendo las principales ventajas su sencillez y rápida resolución. Fue diseñado originalmente en base a datos provenientes de una población estadounidense; fue validado en diversos países, pero no existe aún una versión en el idioma español16. Por lo tanto, el objetivo de nuestro estudio fue determinar la reproducibilidad y validez de una versión argentina del HAQ-II en pacientes con artritis reumatoidea de la población argentina. Material y métodos Se incluyeron en forma consecutiva pacientes ambulatorios con diagnóstico de artritis reumatoidea, según criterios ACR '87, de 4 diferentes centros de la Argentina, dos pertenecientes al sistema privado y dos al público, con el objeto de incluir pacientes con diferente nivel socioeconómico y cultural. Cada paciente aceptó su participación en el estudio mediante la firma de un consentimiento informado, el cual fue previamente aprobado por el comité de ética de cada institución. La versión original del HAQ-II fue traducida por 3 LimitacionesdelHAQ-A Al existir 2 a 3 subcategorías, puede ocurrir que un paciente mejore en algunas de ellas sin que modifique el puntaje total del HAQ. El índice puede aumentar artificialmente por el uso de adaptaciones. Tiene efecto suelo del orden del 10-15% y efecto techo del 0,2%. No correlaciona en forma lineal con los cambios clínicos de la enfermedad. Ciertas actividades no son realizadas por los pacientes. Requiere un cálculo relativamente complejo. Formato de 2 hojas que no permite un mapeo rápido. Tabla 1. Limitaciones del HAQ-A8,9. 22 SAR22(2)_Interior 3.indd 22 C.A. Waimann et al • Rev Arg Reumatol. 2011;22 (2): 21-29 6/23/11 4:27 PM reumatólogos argentinos, obteniendo una versión final consensuada. Esta fue retraducida al inglés por un individuo cuya lengua madre era el inglés. Esta versión retraducida fue comparada con la versión americana original, encontrándose una excelente concordancia. Esta traducción se realizó en base a la metodología internacionalmente aceptada16. La versión argentina del HAQ-II, así diseñada, fue entregada a cada paciente junto a otros 3 autocuestionarios: HAQ-A4, versión Argentina del Rheumatoid Arthritis Quality of Life (RAQoL)17 y el Medical Outcomes Study Short Form 36 Health Survey (SF-36)18 para ser completados sin asistencia. Se evaluó el tiempo y las dificultades en su realización, incluyendo las preguntas que fueron inapropiadas, difíciles de responder o no comprendidas. A su vez cada paciente completó las escalas visuales análogas (EVA) para dolor y actividad de la enfermedad, graduadas en una escala de 0 a 10 cm. El reumatólogo completó una ficha que incluyó datos clínicos, sociodemográficos y laborales del paciente. También realizó el recuento articular de 28 articulaciones dolorosas e inflamadas y las EVA de actividad por parte del médico. Se extrajo muestra de sangre a todos los pacientes para la determinación de la velocidad de eritrosedimentación globular (ERS) por el método de Westergreen. Se utilizó el Disease Activity Score de 28 articulaciones (DAS-28) para el cálculo de la actividad de la enfermedad, aplicando la siguiente fórmula: (0,56 * √ 28-articulaciones dolorosas + 0,28 * √ 28-articulaciones inflamadas + 0,7 * log (ESR) + 0,014 * EVA de actividad del paciente)19. Para evaluar el daño radiológico se analizaron radiografías de manos y pies en posición frente por el método de Sharp modificado por van der Heijde20. Esto estuvo a cargo de un único observador que desconocía las características clínicas de los pacientes y que mostró una buena reproducibilidad intraobservador (coeficiente de correlación intraclase CCI=0,81). El autocuestionario fue sometido a los filtros de OMERACT para determinar la validez, capacidad de discriminación, y aplicabilidad1. Para dicho fin se determinó la reproducibilidad del cuestionario en un grupo de 30 pacientes que completaron el HAQ-II nuevamente dentro de los 3 a 7 días, corroborando previamente que el paciente se encontrara en similares condiciones clínicas y terapéuticas. La confiabilidad, consistencia interna y presencia de redundancias se estableció mediante la prueba de Cronbach. La validez constructiva fue analizada median- C.A. Waimann et al • Rev Arg Reumatol. 2011;22 (2): 21-29 SAR22(2)_Interior 3.indd 23 te la comparación con parámetros de actividad (DAS28), capacidad funcional (HAQ-A), calidad de vida (RAQoL y SF-36) y daño radiológico. En el análisis estadístico, las correlaciones se evaluaron por el coeficiente de Spearman. Las variables continuas se analizaron por T-test y las categóricas por Chi cuadrado. Las variables que mostraron asociación con el HAQ-II en el análisis univariado, se incluyeron en un modelo de regresión lineal múltiple utilizando como variable dependiente al HAQ-II. La reproducibilidad del cuestionario entre el día 1 y el día 7 se evaluó por el coeficiente de correlación intraclase. Para el análisis de datos se utilizó el software SPSS, versión 15. Un valor de p <0,05 fue considerado significativo. Resultados Se incluyeron 97 pacientes con diagnóstico de AR. Las características clínicas y sociodemográficas se detallan en la Tabla 2. Características Mujeres n (%) Meses evolución m (RIQ) Edad (años) m (RIQ) AR(n=97) 80 (82) 120 (72-204) 56 (44-62) Años efectivos de educación m (RIQ) 10 (7-12) Desocupados n (%) 38 (39,2) Factor reumatoideo positivo n (%) 92 (95) Nódulos n (%) 22 (22) Erosiones n (%) 85 (87) SVDH m (RIQ) 111 (59-153) DAS28 m (RIQ) 2,16 (1,12-3,26) HAQ-A m (RIQ) 0,50 (0,20-1,20) HAQ-II m (RIQ) 0,60 (0-1,25) SF-36 mental m (RIQ) 53 (31,3-66,8) SF-36 físico m (RIQ) 52 (29,2-66,1) RAQoL m (RIQ) 10 (3-15) Tabla 2. Características clínicas y sociodemográficas de los pacientes. Score de Sharp van Der Heijde Modificado (SVDH). 23 6/23/11 4:27 PM La reproducibilidad del cuestionario entre el día 1 y los días 3 a 7 fue de 0,93. La correlación intraítem mostró una única redundancia entre la pregunta 8 y la 9 (r=0,93). La prueba alfa de Cronbach fue de 0,92. El efecto suelo fue del 20%, el cual fue menor al HAQ-A (25%). El efecto techo fue del 0% para ambos cuestionarios. El HAQ-II presentó buena correlación con la EVA de dolor (r=0,61) y el DAS28 (r=0,55) (Tabla 3). A su vez la versión argentina del HAQ-II permitió diferenciar aquellos pacientes que se encontraban o no en remisión por DAS28 (Figura 1). También hubo una excelente correlación con el HAQ-DI (r=0,92) y el RAQoL (r=0,78), no ocurriendo lo mismo con el SF-36 mental y físico. No se encontró correlación con el daño radiológico ni con el tiempo de evolución de la enfermedad. Tampoco existieron diferencias en cuanto a sexo y status laboral, pero sí hubo una correlación negativa con los ingresos del grupo familiar del paciente. En la regresión lineal múltiple, la principal variable asociada al valor del HAQ-II fue el EVA de dolor (coeficiente estandarizado β=0,563), seguido del daño radiológico (Coeficiente estandarizado β=-,192) (Tabla 4). Características HAQ-II(Spearman) Meses evolución 0,03 (p=NS) Edad (años) 0,05 (p=NS) Educación (años) Ingresos SVDH -0,25 (p=0,01) -0,38(p=0,001) 0,091 (p=NS) DAS28 0,55(p=0,0001) EVAdolor 0,61(p=0,0001) ERS -0,240 (p=0,05) HAQ-A 0,92(p=0,001) SF-36 mental 0,171 (p=NS) SF-36 físico 0,167 (p=NS) RAQoL 0,78(p=0,001) Los valores en negritas indican las correlaciones con mayor significancia estadística Tabla 3. Correlación de HAQ-II con parámetros de actividad, capacidad funcional y calidad de vida. Score de Sharp van Der Heijde Modificado (SVDH). 24 SAR22(2)_Interior 3.indd 24 Figura 1. Capacidad del HAQ-II para discriminar entre remisión por DAS28 y actividad de enfermedad. Disease Activity Score (DAS). La mediana de tiempo para completar el HAQ-II fue de sólo 54 segundos (RIQ=40-70), lo cual fue considerablemente inferior al evidenciado por el HAQ-A (en su validación Argentina: 3-5 minutos)4. A su vez, el HAQ-II tuvo menor número de preguntas no contestadas que el HAQ-A (3 versus 12, respectivamente. P=NS). Debido al hallazgo de redundancia entre la pregunta 8 (¿puede usted levantar objetos pesados?) y la pregunta 9 (¿puede usted mover objetos pesados?), la número 8 fue reemplazada por otra perteneciente al HAQ-DI: ¿Puede usted cortar la carne? El cuestionario así modificado fue reevaluado en un nuevo grupo de pacientes con AR, no observándose variación significativa de los resultados. La correlación entre las 2 versiones del HAQ-II fue del 0,99, pero sin redundancia alguna en la nueva versión, la cual se muestra en el Apéndice 1. Discusión Los autocuestionarios han sido el método clásico para evaluar la capacidad funcional. Estos han permitido identificar y predecir el impacto de la AR sobre la discapacidad laboral 21,22, el deterioro funcional 23,24, el incremento en los costos25 y la mortalidad prematura 26-28. Por todos estos motivos, han demostrado incluso ser superiores a otras medidas tradicionalmente utilizadas como el recuento articular, la radiología y las pruebas de laboratorio29. Sus C.A. Waimann et al • Rev Arg Reumatol. 2011;22 (2): 21-29 6/23/11 4:27 PM Regresiónlinealmúltiple(variablesasociadasaHAQ-II) Coeficientesnoestandarizados Coeficientesestandarizados T Modelo B Errortip. Beta Sig. EVAdolor ,012 ,003 ,536 3,377 ,001 EVA actividad ,004 ,004 ,191 1,136 ,260 Articulaciones dolorosas -0,13 ,021 -,073 -,607 ,546 Articulaciones inflamadas ,007 ,023 ,033 ,294 ,770 ERS 7,365E-05 ,003 ,003 ,027 ,979 Sexo -,020 ,148 -,012 -,138 ,891 Dañoradiológico ,002 -,001 -,192 2,228 ,029 Tabla 4. Regresión lineal múltiple utilizando como variable dependiente el Health Assessment Questionnaire II (HAQ-II). Escala visual análoga (EVA); Eritrosedimentación (ERS). DiferentesversionesdelHAQutilizadasparaevaluarcapacidadfuncionalenAR Versión Diseño Desventaja FullHAQ Incluye 5 dimensiones que son discapacidad, disconfort, eventos adversos, costos y mortalidad. 23 páginas Extenso y de difícil cálculo HAQ-DI 20 preguntas de AVD. 2 carillas. Puede o no incluir 44 adaptaciones. Rango 0-3 Mencionadas en este texto (ver Tabla 1) HAQ20 Incluye las 20 preguntas del HAQ-DI, sin adaptaciones. Se puede calcular mediante el promedio de las 20 preguntas (rango 0-3) o la suma total (rango 0-24) Similares a HAQ-DI. No validado MHAQ 8 preguntas de AVD. 1 sola carilla. Rango 0-3 Alto efecto suelo. Baja sensibilidad al cambio RA-HAQ Consta de 8 preguntas (5 similares al MHAQ y 3 nuevas). Rango 0-3 Similares desventajas que MHAQ CLIN-HAQ 20 preguntas de AVD + escalas de dolor, ansiedad y depresión. 2 páginas. Extenso. Sólo se usó en investigación clínica PROMISHAQ Incluye las 20 preguntas de HAQ-DI pero con 5 respuestas posibles y sólo evalúa 24 adaptaciones. Agrega 3 escalas de evaluación de actividades de vida diaria, dolor y estado general. Rango 0-100 Hasta el momento sólo utilizado en investigación clínica MD-HAQ 10 preguntas de AVD + escala de dolor, EVA global, fatiga, Extenso. ansiedad, depresión, status social, terapéutica y comorbilidades. Poco utilizado en la práctica 1 página clínica diaria HAQ-II 10 preguntas de AVD. 1 sola carilla La mayoría de las preguntas evalúan miembros inferiores Tabla 5. Diferentes versiones del Health Assessment Questionnaire (HAQ) utilizadas para evaluar capacidad funcional en AR 10-15. Actividades de vida diaria (AVD); Health Assessment Questionnaire (HAQ); Disability Index (DI); Rheumatoid Arthritis (RA); Multidimensional (MD); Patient Reported Outcome Measurement Information System (PROMIS); Modified HAQ (MHAQ). 26 SAR22(2)_Interior 3.indd 26 C.A. Waimann et al • Rev Arg Reumatol. 2011;22 (2): 21-29 6/23/11 4:27 PM principales ventajas radican en el bajo costo y la posibilidad de implementarlos en cualquier grado de complejidad30. El autocuestionario por excelencia para evaluar capacidad funcional es el HAQ. La versión original del mismo fue desarrollada tres décadas atrás por James Fries y consta de 5 dimensiones que son discapacidad, disconfort, eventos adversos, costos y mortalidad, distribuidas en 23 páginas. Este resultó ser un cuestionario muy extenso y difícil de calcular, por lo cual sólo fue utilizado en investigación clínica 2. Es por esto que surgieron versiones acortadas con el fin de posibilitar su implementación en la práctica clínica diaria. Dentro de ellas se destacan el Modified HAQ (MHAQ), CLIN-HAQ, Multidimensional (MD-HAQ), Patient Reported Outcome Measurement Information System HAQ (PROMIS HAQ), HAQ-DI, Rheumatoid Arthritis-HAQ (RA-HAQ), HAQ20 y el HAQ-II10-15(Tabla 5). Este último posee ciertas ventajas sobre el HAQ-DI, ya que no presenta subcategorías, no incluye adaptaciones, tiene un menor efecto suelo y correlaciona mejor con los cambios clínicos. Pero su principal beneficio radica en la simplicidad del mismo, poseer un llenado rápido (sólo 54 segundos) y un cálculo muy simple, lo cual permitiría su fácil implementación en la práctica clínica diaria8,14. La versión argentina de este cuestionario presentó buena correlación con actividad de la enfermedad, capacidad funcional y calidad de vida de los pacientes. Sus principales determinantes fueron el dolor y el daño radiológico. En la validación de este autocuestionario se encontró un alto efecto suelo, la cual no se observó en la versión original del HAQ-II. Una posible explicación sería que para su cálculo tomamos el peor escenario posible, es decir, en todo paciente con HAQ-II de 0 se asumió que presentaba una limitación que el cuestionario no era lo suficientemente sensible para detectar. Además la población evaluada presentaba una baja actividad de la enfermedad (DAS28 m= 2,16), ya que el 60% de los pacientes se encontraba en remisión por DAS28. A pesar de ello, el efecto suelo observado fue menor al reportado para el HAQ-A (HAQ-II=20% vs. HAQ-A=25%)31. Una de las limitaciones de la versión original del HAQII es que la destreza y el compromiso funcional en manos es evaluada por una sola pregunta (”¿puede usted abrir las puertas del auto?”), correspondiendo el resto, en su mayoría, a fuerza y la movilidad de miembros inferiores32. Sin embargo, los diseñadores del cuestionario argumentan que el objetivo del mismo es evaluar discapacidad funcional global y no un sector anatómico en particular, C.A. Waimann et al • Rev Arg Reumatol. 2011;22 (2): 21-29 SAR22(2)_Interior 3.indd 27 y que con este fin se deberían utilizar cuestionarios específicamente orientados a cada región en particular14. En la versión argentina, con el fin de contrarrestar dicha limitación reemplazamos la pregunta 8, la cual era redundante con la pregunta 9, por una que evaluara destreza en manos: “¿puede usted cortar la carne?”. De esta forma se conservan las propiedades del cuestionario original. El HAQ-II, al igual que otros autocuestionarios, pertenece a los denominados “Medidas reportadas por el paciente” (PRO: Patient Reported Outcome), las cuales son utilizadas ampliamente en la práctica clínica diaria y en ensayos clínicos. Estas medidas son objeto de continuos cambios, con el fin de aumentar la precisión y sensibilidad, y reducir el tiempo de realización 33. Para dicho fin, se ha desarrollado recientemente un método computarizado de evaluación de la capacidad funcional: Computerized Adaptative Testing (CAT). Este utiliza la inteligencia artificial para seleccionar las preguntas, llevando aquellas respuestas que indican mejor funcionalidad a la evaluación de tareas más dificultosas, y aquellas que indican pobre funcionalidad a la evaluación de tareas con menor dificultad32. Para su diseño se utilizó una base de 199 preguntas seleccionadas a partir de un total de 1865 ítems a través de un extenso proceso de selección 33. Se espera que este sistema permita disminuir los efectos suelo y techo, aumentar la sensibilidad al cambio y reducir la muestra necesaria para objetivar un efecto. Este sistema aún no ha sido validado, y requiere de un sistema electrónico para su implementación, lo que elimina una de las ventajas fundamentales de los autocuestionarios, que es la posibilidad de implementarlos en cualquier grado de complejidad30. En conclusión, ésta es la primera versión argentina del HAQ-II, la cual resultó ser confiable, válida y reproducible en pacientes con AR, correlacionándose de forma excelente con el HAQ-A. Su principal ventaja radica en la rapidez de su realización y en el cálculo simple, facilitando así su implementación en la práctica diaria. Bibliografía 1. Tugwell P, Boers M: Developing consensus on preliminary core efficacy endpoints for rheumatoid arthritis clinical trials. OMERACT Committee. J Rheumatol 1993;20:555-6. 2. Fries JF, Spitz P, Kraines: Measurement of patient outcome in arthritis. Arthritis Rheum 1980;23:137-45. 27 6/23/11 4:27 PM 3. Bruce B, Fries JF: The Stanford Health Assessment Question- 14. Wolfe F, Michaud K, Pincus T: Development and Validation of naire: A Review of Its History, Issues, Progress, and Docu- the Health Assessment Questionnaire II: A Revised Version mentation. J Rheumatol 2003;30:167-78. of the Health Assessment Questionnaire. Arthritis Rheum 2004;50:3296-3305 4. Citera G, Arriola MS, Maldonado-Cocco JA, et al: Validation and Crosscultural Adaptation of an Argentine Spanish 15. Wolfe F. Which HAQ Is Best? A Comparison of the HAQ, Version of the Health Assessment Questionnaire Disability MHAQ and RA-HAQ, a Difficult 8 Item HAQ (DHAQ), Index. J Clin Rheumatol 2004;10:110-115. and a Rescored 20 Item HAQ (HAQ20): Analyses in 2491 Rheumatoid Arthritis Patients Following Leflunomide Initia- 5. Hogrefe JF, Marengo MF, Schneeberger EE, Rosemffet MG, tion. J Rheumatol 2001;28:982-9. Maldonado Cocco J.A, Citera G: Valores de corte de HAQ para predecir discapacidad laboral en pacientes con artritis Reumatoidea. Rev Arg Reumatol 2009;20(2):23-27. 16. Klooster PM, Taal E, van de Laar MA: Rasch analysis of the Dutch health assessment questionnaire disability index and the health assessment questionnaire II in patients with rheu- 6. Schneeberger EE, Citera G, Maldonado Cocco JA, Salcedo M, matoid arthritis. 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Quantitative measures and indices to assess functional disability in rheumatoid arthritis. J Rheumatol rheumatoid arthritis in clinical trials and clinical care. Rheum 1991;18:1298-306. Dis Clin North Am 2004;30:725-51. 25. Lubeck DP, Spitz PW, Fries JF, et al: A multicenter study of 30. Pincus T, Wolfe F. An infrastructure of patient questionnaires annual health service utilization and costs in rheumatoid ar- at each rheumatology visit: improving efficiency and docu- thritis. Arthritis Rheum 1986;29:488-93. menting care. J Rheumatol 2000;27:2727-30. 26. Pincus T, Callahan LF, Vaughn WK. Questionnaire, walking 31. Fries JF, Cella D, Rose M, et al: Progress in Assessing Physical time and button test measures of functional capacity as pre- Function in Arthritis: PROMIS Short Forms and Computer- dictive markers for mortality in rheumatoid arthritis. J Rheu- ized Adaptative testing. J Rheumatol 2009;36:2061-6. matol 1987;14:240-51. 32. Fries JF: New Instruments for Assessing Disability: Not Quite 27. Pincus T, Brooks RH, Callahan LF. Prediction of long-term Ready for Prime Time. Arthritis Rheum 2004;50:3064-67. mortality in patients with rheumatoid arthritis according to simple questionnaire and joint count measures. Ann Intern 33. www.nihpromis.org Med 1994;120:26-34. 28. Wolfe F, Mitchell DM, Sibley JT, et al: The mortality of rheumatoid arthritis. Arthritis Rheum 1994;37:481-94. Apéndice 1. Versión Argentina final del Health Assessment Questionnaire II (HAQ-I). HAG-II(HealthAssessmentQuestionnaireII-versiónargentina) Sin dificultad Con algo de dificultad Es usted capaz de: (0) (1) 1) Levantarse de una silla sin ayudarse con los brazos. Con mucha dificultad (2) No puedo hacerlo (3) 2) Caminar fuera de su casa sobre un terreno plano. 3) Sentarse y levantarse del inodoro. 4) Alcanzar y bajar un objeto de 2 kg desde una altura por encima de su cabeza. 5) Abrir las puertas de un auto. 6) Hacer tareas en el patio o el jardín. 7) Esperar en una cola por 15 minutos. 8) Cortar la carne. 9) Mover objetos pesados. 10) Subir 2 o más pisos por escalera. C.A. Waimann et al • Rev Arg Reumatol. 2011;22 (2): 21-29 SAR22(2)_Interior 3.indd 29 29 6/23/11 4:27 PM [ artículo original ] Validación del cuestionario RAPID3 en una cohorte de pacientes con artritis reumatoidea temprana y establecida, y su correlación con otros índices de actividad Hernán Maldonado Ficco, Rodolfo S. Pérez Alamino, Emilce E. Schneeberger, José A. Maldonado Cocco, Gustavo Citera Sección Reumatología del Instituto de Rehabilitación Psicofísica y Fundación Reumatológica Argentina “Dr. Osvaldo García Morteo”. Resumen Summary Introducción: El RAPID3 es un índice de actividad que incluye tres medidas auto-reportadas por el paciente: la función física, el dolor y la evaluación global de la enfermedad por el paciente. Objetivos: Validar el cuestionario RAPID3 en pacientes con AR temprana y establecida, evaluar su correlación con otros índices de actividad y medidas de evaluación y determinar el tiempo en completar y calcular el cuestionario. Métodos: Se incluyeron pacientes con diagnóstico de AR temprana (<2 años de evolución) y establecida. Todos los pacientes completaron HAQ-A, RAPID3 y RAQoL. Se determinó evaluación global de la enfermedad por el paciente y el médico por EVA. Se midió ERS el día de la visita. Se calculó DAS28, CDAI e IAS. Se cronometró el tiempo en completar y calcular el cuestionario. Resultados: Se evaluaron 112 pacientes. RAPID3 presentó un buena correlación con DAS28 (r=0,60), CDAI (r=0,60) e IAS (r=0,62) y una muy buena correlación con HAQ-A (r=0,83) y RAQoL (r=0,75). La mediana en completar el cuestionario fue de 139 segundos y la mediana en calcularlo fue de 11 segundos. Discusión: RAPID3 es un cuestionario válido, sencillo, fácil de completar y de rápido cálculo. Presentó una buena correlación con otros índices de actividad como así también con HAQ-A y RAQoL. Introduction: RAPID 3 is an activity index based in three self reported measures made by the patient; these are physical function, pain and global evaluation of disease. Objectives:To validate RAPID 3 questionnaire in patients with early and established rheumatoid arthritis, assess its correlation with other activity indices and other evaluation measures and finally, determine the time required to fill and calculate the questionnaire. Methods: Patients with early rheumatoid arthritis (disease duration less than 2 years) and established rheumatoid arthritis were included. All completed HAQ-A, RAPID3 and RAQoL questionnaires. Global evaluation of disease by both patient and medical doctor was made by means of visual analogue scale (VAS). Erythrosedimentation rate was determined and DAS28, CDAI and IAS calculated. Time to complete and calculate the RAPID3 questionnaire was recorded by means of digital chronometer. Results:112 patients were included. RAPID 3 had good correlation with DAS28 (r=0,60), CDAI (r=0,60) and IAS (r=0,62), whereas an excellent correlation with HAQ-A (r=0,83) and RAQoL (r=0,75). The median time to complete the questionnaire was 139 seconds while the median time to calculate it was 11 seconds. Discussion: RAPID3 is a valid, simple and easy questionnaire to fill and fast to calculate. Furthermore, it presents good correlation with other activity indices as well as with HAQ-A and RAQoL. Palabrasclave: Artritis reumatoidea, índice de actividad. Keywords:Rheumatoid arthritis, activity index. Correspondencia Gustavo Citera, Jefe Sección Reumatología, IREP. E-mail: gustavocitera@gmail.com H. Maldonado Ficco et al • Rev Arg Reumatol. 2011;22 (2): 31-39 SAR22(2)_Interior 3.indd 31 31 6/23/11 4:28 PM Introducción La Artritis Reumatoidea (AR) es una enfermedad inflama- En 2008, Pincus y cols.9 desarrollaron el RAPID3 toria sistémica de curso crónico y progresivo, que afecta (Routine Assessment of Patient Index Data 3); éste es principalmente grandes y pequeñas articulaciones. un índice que incluye 3 medidas auto-reportadas por el La observación sistemática e implementación de ins- paciente: función física, dolor y evaluación global de la en- trumentos que permitan obtener información cuantitativa, fermedad por el paciente. Es un índice sencillo, puede ser es muy importante ya que provee información más exacta completado en la sala de espera por el paciente, es rápido sobre el diagnóstico, evolución y pronóstico de nuestros (se contesta en tan sólo 5-10 minutos) y de cálculo simple. pacientes. Además, nos brinda la posibilidad de comparar El objetivo de nuestro estudio fue validar el cues- datos durante el seguimiento y tomar conductas tera- tionario RAPID3 en una cohorte de pacientes con AR péuticas con el fin de modificar la historia natural de la establecida y artritis temprana, evaluar su correlación con enfermedad. otros índices de actividad y medir el tiempo que requi- Debido a la complejidad para evaluar los distintos rieron tanto los pacientes para completar como el médico aspectos de la enfermedad, hasta el momento no existe para calcular este cuestionario y comparar estos tiempos ninguna medida individual que represente el “patrón de con otras medidas de evaluación utilizadas habitualmente. oro” para evaluar y monitorear a los pacientes con AR. Las evaluaciones cuantitativas para determinar la actividad de la AR han avanzado en las últimas tres décadas1. Con el fin de medir la actividad de la enfermedad se han desarrollado diferentes índices compuestos, como el DAS2,3 (Disease Activity Score), SDAI4 (Simplified Disease Activity Index) y el CDAI4 (Clinical Disease Activity Index), algunos de los cuales se utilizan en la práctica clínica habitual. A pesar de la importancia de estas medidas de evaluación, en la práctica clínica menos del 15% de los reumatólogos recolecta esta información cuantitativa5. Bellamy evaluó el uso de medidas cuantitativas para varias enfermedades reumáticas en 600 reumatólogos provenientes de Australia6 y Canadá7, y si bien la mayoría de los reumatólogos realizaba alguna medida de evaluación en el seguimiento de sus pacientes se observó una falta de estandarización de las mismas. En una investigación realizada por el grupo de estudio de Artritis Reumatoidea de la SAR (Sociedad Argentina de Reumatología) en el año 2004 se observó que sólo el 6,4% de los reumatólogos utilizan esta información en su práctica8. El bajo porcentaje de uso de estas medidas en la práctica ambulatoria, probablemente, se deba a su complejidad y dificultad tanto para la recolección de datos como para el cálculo y el consumo de tiempo que demandan. H. Maldonado Ficco et al • Rev Arg Reumatol. 2011;22 (2): 31-39 SAR22(2)_Interior 3.indd 33 Materiales y métodos Se incluyeron en forma consecutiva pacientes mayores de 18 años de edad con diagnóstico de Artritis Reumatoidea (AR) temprana (<2 años de evolución) y establecida (según criterios ACR '87) que concurrieron a consultorios externos de Reumatología del Instituto de Rehabilitación Psicofísica (IREP). Cada paciente aceptó su participación en el estudio mediante la firma de un consentimiento informado. Se consignaron datos socio-demográficos (edad, sexo, estado civil, ocupación, años de escolaridad), datos relacionados con la enfermedad (edad al comienzo de los síntomas, tiempo de evolución de la enfermedad, presencia de comorbilidades, etc.). Todos los pacientes completaron en la sala de espera los cuestionarios RAPID3, HAQ-A (Health Assessment Questionnaire, versión Argentina) y RAQoL (Rheumatoid Arthritis Quality of Life). La evaluación global de la enfermedad tanto por el paciente como por el médico se determinó mediante escala visual análoga (EVA). Luego se realizó examen físico que incluyó recuento articular de 28 articulaciones dolorosas y tumefactas. Se determinó eritrosedimentación (ERS) en el día de la visita por método de Westergren. 33 6/23/11 4:28 PM Se realizó además el cálculo de DAS28, CDAI e IAS10. de 40 años (RIC 30-50 años), m edad al diagnóstico de 41,5 Se clasificó a los pacientes según actividad de la enferme- años (RIC 31-50 años), m tiempo de evolución de la en- dad en 4 grupos: alta, moderada, baja actividad y remisión, fermedad de 36 meses (RIC 24-168 meses), m escolaridad con puntos de corte para DAS2811 de: >5,1: alta, >3,2 y <5,1: de 9,5 años (RIC 7-12 años). El 56,3% (n=63) pertene- moderada, <3,2: baja y <2,6: remisión; para CDAI12: >22: cían al grupo de AR establecida y el 43,8% (n=49) al de alta, >10,1 y <22: moderada, >2,9 y <10: baja, <2,9: remisión; IAS10: >25: alta, >10 y <25: moderada, >5,5 y <10: baja y <5,5: remisión y RAPID313,14,15 : >12: alta, >6,01 y <12: moderada, >3,01 y <6: baja y <3: remisión. Se determinó mediante cronómetro el tiempo para completar el formulario RAPID3 por parte del paciente y el tiempo para el cálculo de cada uno de los índices por el médico. AR temprana. El 91% de los pacientes tenía FR (+), 14% presentaban nódulos reumatoideos y 57% presentaban erosiones en las radiografías. La media de HAQ-A fue de 0,84 (±0,7), de RAQoL 11,8 (±8,17) y de DAS28 fue de 3,4 (±1,39). El cuestionario RAPID3 en español se detalla en el Apéndice 1. No se observó redundancia interítems (r<0,80) Para el análisis estadístico, las variables continuas se ex- en todos los casos, la fiabilidad del cuestionario mediante presaron como medianas (m) con su correspondiente rango alfa de Cronbach fue de 0,90 y la reproducibilidad de 0,96 intercuartilo (RIC) o como medias con su desvío standard (p <0,001). La mediana de tiempo en completar los cues- (DS) las variables categóricas se compararon mediante tionarios por parte de los pacientes fue de 149 segundos test de Chi2 y las continuas por test de Student y ANO- (RIC 105-175) para RAQoL, 139 segundos (RIC 71-151) VA utilizando pruebas post-hoc (Tukey y Bonferroni). para RAPID3 y 110 segundos (RIC 82-156) para HAQ- Se realizó test de Spearman para la correlación intraítems A. El tiempo para calcular los cuestionarios por parte del del RAPID3 y la correlación con los otros índices. La fia- médico fue de 18 segundos (RIC 16-20) para HAQ-A, 11 bilidad se determinó por prueba alfa de Cronbach. A un segundos (RIC 10-11) para RAPID3 y 9 segundos (RIC grupo de 10 pacientes se los recitó a los 5 días para com- 9-12) para RAQoL. pletar nuevamente el cuestionario con el fin de evaluar la Se observó una muy buena correlación del cuestionario reproducibilidad mediante el Coeficiente de Correlación RAPID3 con HAQ-A (r=0,83) y con RAQoL (r=0,75). Al Interclase (CCI) (días 1 y 5). La influencia de cada uno correlacionar el cuestionario RAPID3 con otros índices de de los componentes del RAPID3 sobre el cuestionario se actividad, observamos una buena correlación con DAS28, evaluó por regresión lineal múltiple. Finalmente se analizó CDAI y con IAS (Figura 1). No existió correlación algu- la influencia de la clase funcional, calidad de vida, activi- na con la edad, escolaridad ni tampoco con el tiempo de dad de la enfermedad y variables demográficas sobre el evolución de la enfermedad. Observamos que a medida cuestionario RAPID3 utilizando otro modelo de regre- que aumentaba la actividad de la enfermedad por DAS28 sión lineal múltiple usando como variable dependiente el aumentaba en forma uniforme el puntaje del RAPID3 en puntaje total del RAPID3. El análisis estadístico se realizó forma significativa (Figura 2). utilizando el software SPSS versión 15. Un valor de p <0,05 se consideró significativo en todos los casos. Cuando analizamos la influencia de cada uno de los componentes del RAPID3 sobre el cuestionario total, observamos que la capacidad funcional influyó en un 25,3% Resultados Se incluyeron 112 pacientes. El 84,8% (n=95) correspondieron al sexo femenino, con una mediana de edad de 51 años (RIC 41-60 años), m edad de inicio de los síntomas 34 SAR22(2)_Interior 3.indd 34 (p <0,001) del resultado total de cuestionario, EVA de dolor en un 43% (p <0,001) y la evaluación global del paciente influye en un 41,5% (p <0,001) (Tabla 1). Finalmente observamos qué influencia tenían los tres principales componentes de evaluación del paciente con AR (capacidad H. Maldonado Ficco et al • Rev Arg Reumatol. 2011;22 (2): 31-39 6/23/11 4:28 PM Coeficientes Coeficientes noestandarizados estandarizados ComponentesRAPID3 B 1 CAPACIDAD FUNCIONAL EVA DE DOLOR EVA GLOBAL PTE Errortíp. Beta ,889 ,033 1,020 ,035 1,005 ,036 ,253 ,430 ,415 Coeficientes Coeficientes noestandarizados estandarizados Sig. ComponentesRAPID3 B Errortíp. Beta Sig. ,000 ,000 ,000 1 HAQ A RAQoL DAS28 Edad Sexo Escolaridad ,727 ,065 ,292 ,028 ,959 ,086 ,000 ,001 ,000 ,357 ,753 ,840 Variable dependiente: RAPID3 Tabla 1. Regresión lineal múltiple incluyendo los componentes del RAPID3. 4,680 ,217 1,148 -,025 ,302 ,017 ,492 ,263 ,238 -,049 ,016 ,011 Variable dependiente: RAPID3 Tabla 2. Regresión lineal múltiple con los diferentes parámetros de la evaluación de la enfermedad. Figura 1. Correlación del RAPID3 con otros índices de actividad de la enfermedad. Figura 2. Asociación entre actividad de la enfermedad por DAS28 y puntaje RAPID3. ABC: Area bajo la curva, IC: Intervalo de confianza Figura 3. Discapacidad laboral por RAPID3. H. Maldonado Ficco et al • Rev Arg Reumatol. 2011;22 (2): 31-39 SAR22(2)_Interior 3.indd 35 35 6/23/11 4:28 PM funcional, calidad de vida y actividad de la enfermedad) mos una buena correlación con índices de actividad como y observamos que el HAQ-A se asoció con un 49,2% (p DAS28 (r=0,60), CDAI (r=0,60) e IAS (r=0,62). Nuestros <0,001), RAQoL con 26,3% (p <0,001) y el DAS28 con un resultados confirman 23,8% (p <0,001). Edad, sexo y escolaridad no se asociaron que el RAPID3 tiene una buena correlación con DAS28 con el resultado del cuestionario (Tabla 2). y CDAI en estudios clínicos con diferentes terapias Al detectar que el cuestionario RAPID3 se correla- estudios previos que muestran biológicas como Abatacept 9, Adalimumab22 , Metotrexa- cionaba muy bien con la capacidad funcional evaluada to23,24, Leflunomida por HAQ-A y basándonos en un estudio previo en el estudio, tanto la edad como el sexo, tiempo de evolución cual se determinó un valor de corte de HAQ-A de 0,87 de la enfermedad como el nivel socio-económico no in- para predecir discapacidad laboral en pacientes con AR , fluyen en el resultado del cuestionario. Esto es de suma detectamos que un valor de corte de RAPID3 de 10,85 importancia ya que gran parte de la población puede puntos predice discapacidad laboral en pacientes con AR, completarlo, sin que el resultado se vea influenciado por con una sensibilidad del 88% y una especificidad de 87% y las características socio-demográficas de los pacientes. 16 un ABC=0,96 (IC 95% 0,92-0,99) (Figura 3). 23,24 y Certolizumab25. En nuestro En este trabajo, el tiempo en calcular el cuestionario por parte del médico fue de 11 segundos. Yazici y Discusión Los resultados de nuestro trabajo confirman que el cuestionario RAPID3 es válido, simple, sencillo de completar, de rápido cálculo y capaz de evaluar tres componentes fundamentales de la clinimetría en AR, como son la capacidad funcional, la calidad de vida y la actividad de la enfermedad. Es el único índice que en forma simultánea incluye la actividad de la enfermedad y la evaluación de la capacidad funcional, siendo esta última consideración importante porque el status funcional demostró ser el mejor predictor de mortalidad en AR17, comparado con la presencia de comorbilidades, la positividad del factor reumatoideo, el compromiso extraarticular, la ERS, el nivel socio-económico, el recuento articular, y los índices radiológicos18,19. También, se observó que la evaluación global de la enfermedad por el paciente se explica mejor por el dolor y la función física que por el recuento colaboradores26 obtuvieron resultados similares con una mediana de 9,6 segundos (RIC 9,1-12,1 segundos). Este estudio es el primero en demostrar que RAPID3 tiene la capacidad de discriminar entre pacientes con discapacidad laboral (ABC=0,96 IC 95% 0,92-0,99) de aquellos que no la presentan, permitiéndole de este modo al reumatólogo obtener datos fundamentales y precisos sobre la capacidad laboral del paciente. El cuestionario RAPID3 es un buen instrumento adicional para evaluar pacientes con AR en la práctica diaria, ya que en un solo cuestionario obtenemos información sobre actividad de la enfermedad, capacidad funcional, calidad de vida y discapacidad laboral en pacientes con AR, ahorrándole al reumatólogo un tiempo considerable en la consulta diaria. Bibliografía articular y los datos del laboratorio20 , por lo cual el RA- 1. Tugwell P, Boers M, Broocks PM, Simon L, Strand CV. In- PID3 proporcionaría una representación más exacta de troduction OMERACT 5: International Concensus Con- las preocupaciones del paciente que el DAS2821. ference on Outcome Measures in Rheumatology. J Rheu- Nuestro trabajo demostró que existe una muy buena correlación del cuestionario RAPID3 con la capacidad funcional evaluada a través de HAQ-A (r=0,83) y con la calidad de vida por RAQoL (r=0,75). También obtuvi36 SAR22(2)_Interior 3.indd 36 matol 2001;28:395-7. 2. van der Heijde DMFM, van´t Hof MA, van Riel PLCM, et al. Judging disease activity in clinical practice in rheuma- H. Maldonado Ficco et al • Rev Arg Reumatol. 2011;22 (2): 31-39 6/23/11 4:28 PM Apéndice 1. Cuestionario RAPID3 H. Maldonado Ficco et al • Rev Arg Reumatol. 2011;22 (2): 31-39 SAR22(2)_Interior 3.indd 37 37 6/23/11 4:28 PM toid arthritis: first step in the development of disease activity score. Ann Rheum Dis 1990;49:916-20. 11. Fransen J, van Riel PLCM. DAS remission cut points. Clin Exp Rheumatol 2006;24:S29S32. 3. van der Heijde DMFM, van´t Hof M, van Riel PLCM, van 12. Aletaha D, Smolen JS. Remission of rheumatoid arthritis: de Putte LBA. 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Rheum Dis in press. 2009. Ref Type: Abstract. 22. Pincus T, Amara I, Segurado O, Koch G. An index based on only patient reported outcome (PRO) measures, routine 26. Yazici Y, Bergman M, Pincus T. Time to score quantita- assessment of patient index data (RAPID3), distinguishes tive rheumatoid arthritis measures: 28-joint count, disease adalimumab from control at levels similar to disease ac- activity score, health assessment questionnaire (HAQ), tivity score (DAS28) and clinical disease activity index multidimensional HAQ (MDHAQ), and routine assess- (CDAI). Ann Rheum Dis 2007;66:184. Abstract. ment of patient index data (RAPID) scores. J Rheumatol 2008;35:603-9. 23. Pincus T, Strand V, Koch G, et al. An index of the three core data set patient questionnaire measures distinguishes efficacy of active treatment from placebo as effectively as the American College of Rheumatology 20% response criteria (ACR20) or the Disease Activity Score (DAS) in a rheumatoid arthritis clinical trial. Arthritis Rheum 2003;48:625-30. H. Maldonado Ficco et al • Rev Arg Reumatol. 2011;22 (2): 31-39 SAR22(2)_Interior 3.indd 39 39 6/23/11 4:28 PM [ artículo original ] Validación y adaptación cultural de una versión argentina del cuestionario para calidad de vida PsAQoL en pacientes con artritis psoriática Tomás Cazenave, José A. Maldonado Cocco, Gustavo Citera Sección Reumatología, Instituto de Rehabilitación Psicofísica, Buenos Aires. Resumen Summary Objetivos:El objetivo de nuestro estudio fue desarrollar una versión argentina del cuestionario PsAQoL adaptada del inglés, con el fin de validar su uso en los pacientes con APs de nuestro país. Resultados:Se evaluaron 31 pacientes con diagnóstico de APs, 64% mujeres, con una mediana de edad de 52 años (RIC 39-60), y una mediana de tiempo de evolución de la artritis de 9 años (RIC 4-17). La reproducibilidad del PsAQoL fue excelente, con un CCI de 0,99 (IC 95% 0,98-0,99). No se hallaron preguntas redundantes en la Correlación Interítem. La confiabilidad según alfa de Cronbach fue de 0,75. La mediana de tiempo de respuesta fue de 195 segundos (RIC 153-222) y más del 70% de los pacientes entendió el 100% de las preguntas. El PsAQoL mostró una buena correlación con HAQ (r=0,85), DAS28 (r=0,7), EVA de dolor (r=0,66), EVA de actividad por paciente (r=0,61), EVA de fatiga (r=0,74) y Escala de Salud de EuroQoL (r=-0,83). No se observó correlación con las medidas de compromiso cutáneo (PASI, EVA de piel). En el modelo de regresión lineal, la principal variable asociada a calidad de vida fue el HAQ (coef. β=0,74, p=0,0001) seguida por EVA de dolor (coef. β=0,19) y EVA de piel (coef. β=0,10). Conclusiones:Nuestra versión argentina del PsAQoL demostró aceptabilidad, confiabilidad y reproducibilidad en nuestros pacientes con APs. Estos resultados validan esta versión adaptada al castellano, facilitando su implementación en futuros estudios. Palabrasclave:PsAQoL, calidad de vida, artritis psoriática. Objectives:The aim of our study was to develop an Argentine version of PsAQoL adapted from the English language with the purpose of validating its use in Argentine PsA patients. Results:A total of 31 PsA patients were evaluated; 64% were female, with median age of 52 years (IQR 39-60) and a median time of arthritis duration of 9 years (IQR 4-17). Reproducibility of PsAQoL was excellent, with an ICC of 0.99 (CI 95% 0.98-0.99). There were no redundant questions in the Inter-item Correlation. Reliability according to Cronbach was of 0.75. The median of response time was 195 seconds (IQR 153-222) and more than 70% of patients understood 100% of the questions. PsAQoL showed a good correlation with HAQ (r=0.85), DAS28 (r=0.7), VAS for pain (r=0.66), VAS for activity per patient (r=0.61), VAS for fatigue (r=0.74) and EuroQoL Health Scale (r=0.83). We did not observe any correlation with skin involvement measures (PASI, VAS for skin). In the linear regression model, the principal variable associated to quality of life was HAQ (coeff. β=0.74, p=0.0001) followed by VAS for pain (coeff. β=0.19) and VAS for skin (coeff. β=0.10). Conclusions:These results validate this local Spanish version, making easier its implementation in future studies that may require the evaluation of PsA patients’ quality of life. Keywords: PsAQoL, quality of life, psoriatic arthritis. Correspondencia Gustavo Citera Instituto de Rehabilitación Psicofísica, Echeverría 955, Ciudad Autónoma de Buenos Aires, Argentina. E-mail: gustavocitera@gmail.com 42 SAR22(2)_Interior 3.indd 42 T. Cazenave et al • Rev Arg Reumatol. 2011;22 (2): 42-50 6/23/11 4:28 PM Introducción La Artritis Psoriática (APs) es una forma de artropatía inflamatoria asociada a la psoriasis, seronegativa para factor reumatoideo, que suele comprometer tanto articulaciones periféricas como axiales y zonas de entesis, pudiendo afectar a casi un 1% de la población1. La APs puede presentarse como oligoartritis asimétrica, poliartritis simétrica similar a la artritis reumatoidea, o con predominio del compromiso espinal, en forma de espondilitis2. Previamente considerada una enfermedad benigna, es de conocimiento actual su carácter progresivo y discapacitante, en especial con la forma poliarticular3,4,5. La heterogeneidad y la variabilidad clínica entre los pacientes con APs han hecho dificultosa la elección de medidas de resultado que sean útiles para medir el verdadero impacto de la enfermedad. Hasta ahora, diversos índices e instrumentos como el HAQ, AIMS, SF-36 y DLQI, han sido utilizados en ensayos clínicos con este fin, pero los resultados no han sido del todo satisfactorios6,7,8,9. La evaluación de la calidad de vida en ensayos clínicos ha tomado importancia en los últimos años. Según las recomendaciones de OMERACT 8 de 200610 se debe incluir la medición de la calidad de vida relacionada con la salud o HRQoL (Health Related Quality of Life) en los estudios randomizados y de cohortes. En la APs y la psoriasis (Ps) varios instrumentos genéricos han sido probados para medir la HRQoL11. El cuestionario PsAQoL (Psoriatic Arthritis Quality of Life) es el primero desarrollado específicamente para evaluar la calidad de vida en pacientes con APs y ha sido extensamente validado en esa población12. El objetivo de nuestro estudio fue desarrollar una versión argentina del PsAQoL adaptada del inglés con el fin de validar su uso en los pacientes con APs de nuestro país. por cada respuesta afirmativa, obteniendo así un rango de 0 a 20, donde 20 representa la peor calidad de vida posible (Figura 1). Figura 1. Modelo definitivo de la versión argentina del PsAQoL. Material y método Cuestionario: En primer lugar, las 20 preguntas originales en inglés fueron traducidas al castellano por 3 reumatólogos argentinos consensuando una versión definitiva. Esta fue retraducida al inglés por un colaborador bilingüe ajeno al estudio. La retraducción fue luego comparada con la versión original demostrando una excelente concordancia. Las preguntas se responden en afirmativo o negativo, y el cálculo final del cuestionario se logra sumando 1 punto 44 SAR22(2)_Interior 3.indd 44 T. Cazenave et al • Rev Arg Reumatol. 2011;22 (2): 42-50 6/23/11 4:28 PM Pacientes: Se administró el cuestionario a 31 pacientes consecutivos de la consulta ambulatoria del Instituto de Rehabilitación Psicofísica (IREP) con diagnóstico de APs según criterios CASPAR13. Se recolectaron datos demográficos y clínicos de capacidad funcional y actividad de la enfermedad incluyendo: recuento de 66/68 articulaciones dolorosas e inflamadas, eritrosedimentación, escala visual análoga (EVA) de dolor, fatiga, EVA de actividad de la enfermedad por médico y paciente, DAS28 y EVA de compromiso cutáneo y PASI. Para medir capacidad funcional y calidad de vida se utilizó HAQ-A y EuroQoL5-D respectivamente. Se entrevistó a un subgrupo de 17 pacientes para valorar la comprensión y aceptabilidad de las preguntas. La reproducibilidad (re-test) del cuestionario se determinó realizando una segunda entrevista dentro de los 3-7 días. Análisis estadístico: Se utilizó análisis de Coeficiente de Correlación Intraclase (CCI) para evaluar la Reproducibilidad, test alfa de Cronbach para determinar la Confiabilidad, y Correlación Interítem para la búsqueda de redundancias. Para las correlaciones con medidas de actividad de enfermedad y capacidad funcional se usó el test de Spearman y un modelo de regresión lineal con el PsAQoL como variable dependiente para analizar las variables asociadas a calidad de vida. Las variables continuas fueron expresadas como medianas con su correspondiente rango intercuartilo (RIC). Un valor de p menor a 0,05 fue considerado significativo. Los datos fueron analizados utilizando el software SPSS versión 15. Característicasclínicasydemográficas de31pacientesconAPs Sexo femenino n (%) Edad (años) m (RIC) Tiempo de evolución (años) m (RIC) Escolaridad (años) m (RIC) Discapacidad (HAQ) x (DS) Actividad (DAS28) x (DS) PASI total m (RIC) PsAQoL total m (RIC) 20 (64) 52 (39-60) 9 (4-17) 9 (6-12) 1,03 (+/-0,78) 3,51 (+/-1,21) 2 (0-4,6) 10 (5-14) Tabla 1. Características clínicas y demográficas de 31 pacientes con APs. 46 SAR22(2)_Interior 3.indd 46 Compresión (%) Preguntas Figura 2. Nivel de comprensión de las 20 preguntas del PsAQoL. Resultados Se evaluaron 31 pacientes con diagnóstico de APs, 64% mujeres, con una mediana de edad de 52 años (RIC 39-60), y una mediana de tiempo de evolución de 9 años (RIC 4-17) (Tabla 1). La Reproducibilidad del PsAQoL fue excelente, con un CCI de 0,99 (IC 95% 0,98-0,99) y la Confiabilidad según alfa de Cronbach fue de 0,75 (Tabla 2). No se hallaron preguntas redundantes en la Correlación Interítem (CI >0,80). La mediana de tiempo de respuesta fue de 195 segundos (RIC 153-222) y en cuanto a la comprensión, más del 70% de los pacientes entendió el 100% de las preguntas. En el análisis con test de Spearman, el PsAQoL mostró una buena correlación con HAQ (r=0,85), DAS28 (r=0,7), EVA de dolor (r=0,66), EVA de actividad por paciente (r=0,61), EVA de fatiga (r=0,74) y Escala de Salud de EuroQoL (r=-0,83). No se observó correlación con las medidas de compromiso cutáneo (PASI, EVA de piel). En el modelo de regresión lineal, la principal variable asociada a calidad de vida fue el HAQ (coef. β=0,74, p=0,0001) seguida por EVA de dolor (coef. β=0,19) y EVA de piel (coef. β=0,10). No se halló asociación del PsAQoL con la edad, sexo, o el tiempo de evolución de la enfermedad. Reproducibilidad(CCI)yConfiabilidad(αCronbach) Coeficiente de Correlación Intraclase (IC95%) 0,99 (0,98-0,99) Test α-Cronbach 0,75 Tabla 2. Reproducibilidad y confiabilidad del PsAQoL. T. Cazenave et al • Rev Arg Reumatol. 2011;22 (2): 42-50 6/23/11 4:28 PM APs produce en la mayoría de los pacientes daño articular CorrelacionesdelPsAQoL(TestSpearman) (r) crónico e irreversible, pérdida de capacidad funcional fí- 0,85 0,7 0,66 0,74 0,61 -0,83 0,13 0,35 0,06 -0,18 sica y un importante impacto en los aspectos emocional Variable HAQ DAS28 EVA dolor EVA fatiga EVA actividad Escala EuroQol PASI EVA piel Edad Evolución y social15,16,17. Es de esperar, y así ha sido demostrado, que este impacto se traduzca en un significativo deterioro de la calidad de vida18. Incluso, existen estudios comparativos sobre calidad de vida entre pacientes con APs, AR y Espondilitis Anquilosante (EA), que reportan que la reducción de la calidad de vida y capacidad funcional puede ser similar entre estas artropatías inflamatorias19,20,21,22. Tabla 3. Correlaciones por test de Spearman. En la reunión de OMERACT 8 llevada a cabo en el año 2006 dentro del módulo sobre APs, se establecieron recomendaciones acerca de los outcomes y medidas de im- ModelodeRegresiónLineal *(PsAQoL como variable dependiente) HAQ EVA dolor EVA piel (coef.β) 0,74 0,19 0,10 portancia para tener en cuenta en los estudios clínicos. Se P 0,001 NS NS Tabla 4. Modelo de regresión lineal. definieron seis dominios imprescindibles: evaluación de la actividad de la artritis periférica, de la piel, del dolor, la evaluación global de la enfermedad por el paciente, la capacidad funcional y la calidad de vida 23. Distintas herramientas genéricas se han utilizado con el fin de medir el impacto de la enfermedad y el deterioro en la calidad de vida, como el SF-36, AIMS, AIMS2, DLQI o EuroQuoL- Discusión El concepto de calidad de vida y su evaluación en estudios clínicos parece haber cobrado un particular interés en la última década. La determinación de la calidad de vida relacionada con la salud (o Health Related Quality of Life), de acuerdo a la definición de los autores Shumaker y Naughton14, se logra teniendo en cuenta 6 aspectos o dimensiones del individuo: el funcionamiento social, el físico, el cognitivo, la movilidad, el cuidado personal y el bienestar emocional. La APs, al igual que la Artritis Reumatoidea (AR) en su momento, fue interpretada en otra época como una enfermedad benigna, autolimitada y de fácil tratamiento. Gracias a publicaciones más actuales basadas en los reportes de cohortes de seguimiento longitudinal, se sabe que la 48 SAR22(2)_Interior 3.indd 48 5D6,7,8,9. El cuestionario PsAQoL fue desarrollado en el año 2004 por el grupo inglés de McKenna y col. como un instrumento específico para ser usado en APs. Fue diseñado a partir de una población de pacientes con APs y ya ha demostrado validez, aceptabilidad, consistencia interna y reproducibilidad en pacientes de habla inglesa12. Los resultados obtenidos de nuestro estudio muestran que esta versión, al igual que la del estudio original, se desempeña satisfactoriamente. Observamos una excelente reproducibilidad en el re-test (CCI de 0,99) y una buena confiabilidad (alfa de Cronbach de 0,75). Los 20 ítems del cuestionario fueron analizados sin encontrar preguntas redundantes (Correlación Interítem >0,80). Las preguntas fueron bien aceptadas, con una buena comprensión y tiempo de respuesta (3,2 minutos). Por lo tanto, el cuestionario T. Cazenave et al • Rev Arg Reumatol. 2011;22 (2): 42-50 6/23/11 4:28 PM es sencillo y rápido de completar para los pacientes, a lo que se agrega lo simple de su cálculo final para el médico, resultando en una ventaja importante al compararlo con otros cuestionarios más engorrosos. Por otro lado, decidimos analizar las posibles correlaciones entre la calidad de vida medida por el PsAQoL y otras medidas del impacto de la enfermedad utilizando test de Spearman. Allí observamos una excelente correlación del PsAQoL con la capacidad funcional, con el dolor, fatiga, y la actividad de la enfermedad. De manera interesante, no se observó co- Conclusiones La versión argentina del PsAQoL demostró aceptabilidad, confiabilidad y reproducibilidad en nuestros pacientes con APs. Se observó una excelente correlación con la capacidad funcional y medidas de actividad de la enfermedad. Estos resultados validan esta versión adaptada al castellano, facilitando su implementación en estudios futuros que requieran evaluar la calidad de vida de pacientes con APs. Bibliografía rrelación con las medidas de compromiso cutáneo (PASI, EVA de piel), pero esto podría deberse a la poca actividad de la piel en nuestra muestra de pacientes. Queda claro que la variable que mejor correlaciona con calidad de vida parece ser la capacidad funcional y esto se ve reflejado luego en el análisis de regresión lineal, donde fue la única variable significativamente asociada, explicando un 74% de la variabilidad del cuestionario (coef. β=0,74). Esta fuerte asociación resulta comprensible al tener en cuenta la enorme influencia que tienen las limitaciones físicas en la vida diaria, y la importancia que los pacientes parecen darle a la pérdida de capacidad funcional podría explicar esta marcada superposición entre HAQ y PsAQoL. Si bien se trata de una muestra pequeña, éste es el primer estudio que se propone validar el uso del cuestionario PsAQoL en pacientes de nuestro país, y de acuerdo a lo publicado hasta la fecha, ésta sería su primera versión en español. Para el futuro harán falta estudios prospectivos que respalden estos resultados y analicen además la sensibilidad al cambio y respuesta al tratamiento de este cuestionario. 1. Gladman DD, Espinoza LR. International symposium on psoriatic arthritis. J Rheumatol 1992;19:290-1. 2. Veal D, Rogers S, Fitzgerald O. Classification of clinical subsets in psoriatic arthritis. Br J Rheumatol 1994;33:133-8. 3. Gladman DD. Psoriatic arthritis. 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Artículos originales: presentación de una experiencia científica original, personal o grupal, que contribuya al progreso de la Especialidad. El texto tendrá una extensión máxima de 20 páginas. Los distintos ítems figurarán en el siguiente orden: resumen en castellano e inglés de hasta 200 palabras, palabras clave (3 a 10), introducción, material y métodos, resultados, discusión, conclusiones y bibliografía. Se admitirán hasta 6 figuras y 6 tablas. Actualizaciones: puesta al día sobre determinados temas de interés, expuestos en forma sintética. No deberá exceder las 10 páginas, pudiendo incluir 2 tablas y 2 figuras. Se deberán agregar “Lecturas recomendadas” en número no mayor a 10 citas. Casos clínicos: descripción de un caso de rara observación que suponga un aporte importante al conocimiento del tema. Su extensión máxima será de 10 páginas. Constará de resumen en castellano y en inglés, descripción y discusión del caso y bibliografía (no más de 15 citas). Se admitirán hasta 4 figuras y 4 tablas. Diagnóstico por imágenes: presentación de un caso problema en base al diagnóstico por imágenes, con datos clínicos imprescindibles y secuencia de estudios realizados para llegar al diagnóstico definitivo. Se aceptarán hasta 6 figuras. Cartas de lectores: comentarios acerca de los artículos publicados previamente. No deberán superar las 4 páginas, pudiendo incluir una sola tabla o figura y hasta 6 citas bibliográficas. Material ilustrativo • Tablas: debe presentarse un sola tabla por página. Se enviará en formato electrónico en archivo Excel o tabla inserta en Word en archivo aparte del texto. Cada tabla debe ir numerada con números arábigos y encabezada por el enunciado o título. Las tablas deberán ir citadas en el texto por orden consecutivo. Todas las siglas y abreviaturas se acompañaran siempre de una nota explicativa al pie de la tabla. Asimismo, se identificarán de forma precisa las medidas estadísticas empleadas. Cuando se haya efectuado un estudio estadístico se indicará al pie de tabla el nivel de significación, si no se hubiera incluido en el texto de la tabla. El orden de los signos de llamada será el siguiente: *si hay una única llamada; letras minúsculas en orden alfabético (a, b, c...) si hay dos o más llamadas. Para su envío deberán estar realizadas en Microsoft Word o Excel no aceptándose tablas escaneadas. • Gráficos (figuras): podrán ser elaborados con computadora únicamente en programa vectorial (Corel Draw, Freehand, Adobe Illustrator) o en programa de planilla de cálculos (Excel). El tamaño será de 9 x 12 cm o 12 x 18 cm. Se enviarán como archivos externos al archivo principal de textos; deberán estar nombrados con el número de figura, enviando un archivo por gráfico. Si se envían escaneados, modalidad poco conveniente, se deberán seguir las pautas indicadas para fotografías. Si se incluyen dibujos especiales a mano alzada en papel, deberán estar dibujados en tinta negra sobre papel blanco que garantice un buen contraste. • Fotografías: se seleccionarán procurando que sean de buena calidad. Ten- drán igual sistema de numeración que los gráficos. Es muy importante que las copias fotográficas papel sean de calidad inmejorable para poder obtener así buenas reproducciones; se presentarán de modo que los cuerpos opacos (huesos, sustancias de contraste) aparezcan en blanco. Las fotografías irán numeradas al dorso, con números arábigos, siguiendo la secuencia que tienen en el texto, mediante una etiqueta adhesiva, indicando además el nombre del primer autor, con una flecha que señalará la parte superior. Debe procurarse no escribir en el dorso, ya que se producen surcos en la fotografía. Si las fotos se envían en formato digital, éstas deberán encontrarse por lo menos a 250 dpi al tamaño solicitado anteriormente y guardadas en los formatos tiff, eps o Adobe Photoshop. No utilizar formatos bmp, pict, jpeg, pdf o swf, tampoco fotos o gráficos tomados de páginas web o cds interactivos. No se aceptarán fotos ni gráficos incluidos dentro de Power Point o Word debiendo ser enviados como archivos externos. El archivo deberá estar nombrado con el número de foto (en números arábigos) seguido del nombre del primer autor, enviando un archivo por foto. • Pies de figuras: deberán ir en el archivo aparte, numeradas según su secuencia correspondiente y a doble espacio. En ellas se explicará el contenido de la ilustración, así como el significado de los signos, flechas, números y abreviaturas que pueda haber. En las reproducciones histológicas se especificará el aumento y el método de tinción. • Citas bibliográficas: se redactarán según normas del International Committee of Medical Journal Editor. Las mismas pueden consultarse en: http://www.nlm.nih.gov.bsd/uniform_requirements.htlm El Comité de Redacción se reserva el derecho de rechazar aquellos artículos que juzgue inapropiados, así como de proponer o realizar modificaciones cuando lo considere necesario. 56 SAR22(2)_Interior 3.indd 56 6/23/11 4:29 PM